Está en la página 1de 128

Humanización del Hombre

por Miguel Serrano

Los hombres de nuestros días, nuestros semejantes, constantemente exclaman:


"Esto no es verdad, esto no es cierto", o dicen, "esto es verdad".
..... Para que el hombre pueda asegurar este sencillo gesto, tiene que producirse
en su espíritu un acto de comparación.
..... El concepto verdad y el concepto mentira están negando con su existencia
solamente la "relatividad de la verdad". Puesto que para el hombre pueda
afirmar algo superior o inferior a un segundo ser necesita comparar con un
patrón ideal, absoluto en su existir, definitivo.
..... Si el hombre afirma que "esto es falso" es porque existe la verdad y sólo en
función de una comparación con ella puede afirmarlo. Objetar que esta verdad
es relativa en el tiempo no modifica en nada el problema, puesto que no por eso
deja de ser verdad. El mismo concepto "relativo" existe por función de
comparación con una noción de "absoluto".
..... Es así como la verdad es la verdad y el problema de su relatividad en el
tiempo, un absurdo.
..... Existe una noción de perfección, de bondad y de totalidad con la visión de la
cual trabajamos y juzgamos en este mundo. Es también lo que durante tanto
tiempo se ha llamado verdad.
..... Ella se aplica en este mundo, ella nos sirve para medir.
..... No modifica para nada la cuestión que Nietzche diga que bueno es lo que
aumenta la potencia y la voluntad de potencia, solamente, o que la pauta para
medir y ordenar valores desee colocarse en fisiología, regulándose por
sensaciones placenteras o de displacer, puesto que para afirmar, en el espíritu, el
dolor como nocivo, se hace necesaria una primaria comprensión de los valores.
Además, querer resolver o anular un problema racional como es éste por vías
antiespirituales o antiespirituracionales, como son las sensoriales, es
sencillamente un gran error, un absurdo.
..... El hombre tiene una noción de lo perfecto, de lo "que está bien", que en el
conocimiento equivale a un a priori, que es en definitiva lo que hace posible eso
que nosotros llamamos el "conocimiento" mismo.
..... Ya Platón, tratando de reunír el racionalismo socrático con los misterios
religiosos, más exactamente, con la doctrina pitagórica de la reencarnación del
alma, arribó en su pensamiento a un sistema de ideas generales existiendo
infinitamente en un alma individual.
..... Platón también lo supo, digamos mejor, casi lo supo; puesto que,
presentándosele el problema siguiente, equivocó toda la visión, tanto en
explicación como en doctrina.
..... El problema que se le presentó a Platón es el mismo que se nos presenta a
nosotros en seguida, como a todo hombre que, experimentando el sonido
obscuro "de lo que fué", trate de dar una explicación.
..... Existe una noción de ideal que el hombre aprehende, noción que está fuera
de nosotros y que es perfecta. Residiendo fuera de nosotros y siendo perfecta
tiene que residir en un mundo externo, lejano y perfecto.
..... Esta es la conclusión, tanto en Platón como en los filósofos actuales adeptos
a la Teoría de los Valores, que ubican un mundo ideal de valores, existiendo
allende el hombre mismo.
..... Para Platón, por ejemplo, fué el mundo reluciente de las ideas, por lo
general, en donde el alma residió en un tiempo y a donde retorna. Mundo lejano
en ambos casos, mucho más allá de esta tierra imperfecta, que se condena
decidida o veladamente.
..... Este, solamente este es el gran error.
..... ¿Por qué pensar que esa noción-verdad nos viene desde afuera? Y si nos
viene desde adentro de nosotros mismos ¿por qué creer que se debe a un
"recuerdo" de una existencia ultraterrena, que se agita cotra el existir terrestre
para maldecirlo, para negarlo?
..... Este sentimeinto de perfección, que es lo que hoy se denomina verdad, es un
recuerdo en nosotros de nuestra pasada perfección; pero en la vida, aquí, en esta
tierra. Un recuerdo que suena de tiempo en tiempo, obscuro y constante, de un
esplendor y una salud absoluta, que fué en el hombre y en la vida sobre la tierra,
que el hombre perdió, por un suceso nada religioso o místico, descendiendo de
inmediato entonces al individuo de hoy, que ansía reconquistarse.
..... Este recuerdo de la vida y del hombre sobre la tierra es lo que en nuestro
tiempo puede llamarse verdad, que es la vida.
..... La misma palabra verdad tiene sentido hoy solamente; en la vida no existe,
pueto que es. La verdad, como la vida, con mayúscula, existe para el hombre,
mientras no es en su vida. "Antes" y "después" se es.
..... La palabra verdad puede reemplazarse así por la palabra vida. Mas en este
escrito la seguiremos anotando por costumbre.

*******

..... En el mundo de nuestra historia sólo se dan aspectos de la verdad. La verdad


se "revela", han dicho los filósofos, cambiado de aspecto, de perfil, de lenguaje,
de apariencia. Trasladado esto a un plano superior en vitaldad expresiva, se dice
que cada época o tiempo expresa una distinta y única instancia de la vida.
..... Así en "nuestra historia" (en nuestro mundo, han dicho los "filósofos") no se
da la verdad enteramente expresada, toda, absoluta, de una vez. De esta visión
parte ese "intríngulis", ese galimatías del "relativismo".
..... No se da la verdad entera, porque no se da la vida entera. No hay vida,
cuando el hombre está un tanto enfermo.
..... Hemos partido de la premisa de la enfermedad del mundo de nuestra
historia, substituyendo por este concepto más real y más optimista el antiguo de
"imperfección terrestre", puesto que enfermedad presupone el instante anterior
de la salud, un momento en que se contrajo y una posibilidad de convalecencia y
de salud.
..... Es por esto que hoy no hay verdad ni salud en un sentido absoluto,
existiendo solamente un hombre menos enfermo que otro o más verdadero que
un segundo. Más o menos enfermo, o sano, si se quiere, solamente.
..... Y sabemos que un hombre es más o es menos sano por una comparación con
el valor ideal de la verdad, es decir, por una comparación con el recuerdo del
hombre que fué y que se nos da en el sentir obscuro y en el ansia de reconquista
de la totalidad que significa.
..... Por esto el camino de la ética es el camino hacia la reconquista de la vida,
por deseo de ser cada vez más sano, menos enfermo, cada vez más verdadero.

*******

..... Al afirmar estas cosas no hacemos nada más que reafirmar el pensamiento
racional del hombre, que va cayendo en desprestigio debido al "pensamiento"
dialéctico. Y al atacar la dialéctica, para retornar al pensar racional, no hacemos
más que afirmar con la actitud lo establecido de que el hombre debe intentar
caminar desde un mayor error a uno menor. En este caso, desde ese gran error
en el que estamos a punto de hundirnos como en un pozo negro y desconocido:
la dialéctica.
..... El pensamiento racional no es, ciertamente, la actividad verdaderamente
sana del espíritu, por que quizá no es el "pensar" su actividad funcional; pero sí
es infinitamente más cercano a la verdad que la actitud dialéctica, porque en la
verdadera vida las cosas suceden de una manera mucho más parecida, de seguro,
al movimiento en categorías racionales que al evolucionar dialéctico. Las
categorías definitivas, los contrarios, se encuentran en la vida, porque se
encuentran por siempre en el espíritu, con la sola diferencia de que en la vida
verdadera el espíritu no les piensa.
..... Ahora bien, para iniciar una definición de lo racional y lo dialéctico, siendo
ésta una cuestión casi de conocimiento, tenemos que rehabilitar la vieja fórmula
de Protágoras, de que el hombre es la medida de todas las cosas, porque, en
buenas cuentas, es el hombre el que las mide y el que las averigua. Así, es
solamente del hombre desde donde hay que partir y desde su tiempo de vida,
que es el que se mueve, desde su tiempo humano.
..... Desde aquí solamente podemos hablar de las cosas del mundo, de la
dialéctica, hoy, y constatar su enfermedad y su anormalidad, por el hecho mismo
de querer que el hombre averigüe las cosas de este mundo y, aun, que se
averigüe a sí mismo, desde más allá de él y de su tiempo vital.
..... La cuestión se reduce a dos términos: tiempo humano y tiempo inhumano.
El tiempo humano es el tiempo del hombre; mas como hoy el hombre no es
absolutamente hombre, es justo que el tiempo inhumano se haya metido en
nuestra vida.
..... Así la dialéctica al edificarse sobre la apreciación única del tiempo
inhumano es como si lo hiciera sobre la enfermedad sola, predicando la
anulación total del hombre.
..... Es porque las cosas hoy se construyen sobre el ansia de salud o sobre la
derrota.
..... Cuando el hombre era de verdad o cuando no existía eso que hoy se llama a
veces eternidad, tiempo cósmico, había solamente "su tiempo", el tiempo de "su
vida". Al enfermarse, al sufrir la derrota, se introduce el tiempo inhumano o
cósmico, en que el movimiento se realiza de modo totalmente opuesto al
nuestro, cabe decir, dialéctico, por un sistema inhumano de triadas, si se quiere,
o de superación de antítesis qe se fusionan, en que todo es y no es. No así en el
"movimiento humano", o en el tiempo de la vida, que se realiza por aparición de
contrarios o categorías opuestas.
..... El pensamiento racional -como nos lo ha dado en llamar- se edifica sobre la
apreciación de este movimiento en el tiempo humano, el pensamiento dialéctico
respetará sólo el movimiento del tiempo inhumano.
..... Para saber, entonces, cual de estos dos pensamientos es más sano o más
verdadero que el otro (que es lo que en último instancia podemos averigüar de
las cosas del mundo actual) tenemos que aplicar el metro o la pauta de un valor
absoluto, de la verdad absoluta, de la verdad, es decir, del sentimiento de la vida
que fué, o del obscuro sentimiento que tenemos de cómo fué la vida.
..... Comparar.
..... Sabemos que la vida es vida del hombre, es decir, de su tiempo y su
presente.
..... Hemos visto que el pensamiento racional en categorías inconfundibles,
infusionables, se hace respetando el tiempo de la vida humana y su suceso.
..... Por el contrario, la dialéctica fusiona los opuestos, las antítesis, hace que
todo sea y no sea, que "devenga", que pase como en el cosmos más allá del
hombre, es decir, quiere pensar desde afuera del hombre, quiere anular
definitivamente al hombre.
..... Podemos comprobar esto en los pensadores representativos de esta tendencia
exógena.
..... Bergson, sin ser dialéctico, en el sentido de los marxistas de hoy, es el gran
apreciador de lo inhumano, a través de eso que él denomina intuición y que no
es nada más que la derrota o la enfermedad existente en el hombre de hoy, o sea,
este mismo tiempo inhumano que hay que expulsar de nuestra vida. Bergson
pensaba que para poder lograr la perfección en la comunicación de lo inhumano,
se hace necesario dejar de ser "homo locuax", es decir, de ser hombre. Estaba el
filósofo dentro de un gran caos, porque él mismo, después de todo, era, por
algún lado, un hombre. Dándose cuenta de este caos magnífico se derrumba de
pronto. Y ¿qué otra cosa pueda hacer sino convertirse al catolicismo cristiano
como un buen judío fracasado?
..... Ahora aquí, entre nosotros, tenemos al profesor Nicolai, que recibiendo en
su sensibilidad, por osmosis, el impulso americano hacia la salud, niega la
dialéctica. Pero ¿no se encuentra también el profesor dentro de una confusión,
cuando supera al hombre, al prolongarlo darwinistamente en un nuevo ser que
advendrá con los dos hemisferios del cerebro funcionando? ¿Cree acaso él,
ingenuamente, que así aprehenderá una verdad más verdadera? Se confunde el
doctor Nicolai, porque para negar la dialéctica, aritméticamente se entiende,
solamente se realiza afirmando al hombre. Y viceversa, al negar al hombre se es
dialéctico. Todo nuevo ser distinto al actual, que no sea el hombre que existió
antes sobre la tierra, no es un hombre, es un superhombre, un semidiós o una
máquina con piezas de acero en vez de órganos vivos y calientes.
..... La ciencia transformista actual anula también al ser humano, cayendo en el
mareo terrible del cosmos infinito e indeterminable, no sabiendo ya si el mundo
es un átomo o el átomo es todo un mundo.
..... En la concepción dialéctica aplicándose a la ciencia transformista el hombre
desciende constantemente de otras cosas, lo orgánico de lo inorgánico y todo es
una misma substancia que se modifica a sí misma. Es un panteísmo, un
pansubstancialismo. Ya en un tiempo el mismo sistema de Hegel ha sido
denominado panloguismo.
..... En el panteísmo, lo sabemos bien, el hombre se muere. Por eso se afirma un
dualismo definitivo, un homocentrismo.
..... Podemos confirmar, con toda seguridad, que por ahora es absolutamente
necesario un retorno al pensar racional, una negación apasionada y aritmética de
la dialéctica, que es, pues, la grande apología de la enfermedad y la anulación
del hombre, que se edifica no sobre el ansia de salud existente en la criatura,
sino sobre la enfermedad y la derrota que hoy cobija.
..... La dialéctica es la anulación quizás total del hombre, su intento de
deshumanización definitiva, su muerte. Debemos, por todos los medios,
detenernos en su umbral, debemos retornar con bastante esfuerzo a la salud
definitiva de la vida, caminando para ello, como ya hemos explicado, el camino
inverso: de menor en menor enfermedad, o en grados mayores de salud.
..... Retornar a la verdad.

*******

..... Hoy existe mentira y verdad en la vida, es decir, existe enfermedad; la vida
es un poco no vida, porque el hombre es un tanto inhumano. Retornar al hombre
significa humanizarse. Retornar al hombre y a la vida, o sea, a lo que en palabras
corrientes es la apreciada verdad Absoluta. Destruyendo, entonces, totalmente la
mentira.
..... Esto es la vida.
..... Y con ello desaparece también la verdad. Desaparece para siempre como la
Mentira, puesto que sólo en definición de ella existe. Desaparece la verdad,
porque ha desaparecido la mentira y la verdad sólo existe para destruir a la
mentira. La mentira desaparecerá, cuando la verdad se haya hecho carne;
entonces deja de existir, pues es. La verdad es la vida, el hombre vivirá.

*******

..... ¿Por qué no puede decirse todo esto de esta otra manera? Allá, en el origen
de los tiempos, el hombre, que era feliz, se perdió a sí mismo, en una derrota,
por ejemplo, con el mundo distinto. Y su historia es una historia de dolor.
..... El nuevo hombre que aparece en las nuevas épocas sabe que debe
recuperarse. Eso sabemos hoy aquí en América del Sur, continente determinado
por otro factor o instancia de la vida que el occidente, sabemos que hay que
recuperar al hombre, humanizándolo; al hombre, que es totalidad cuerpo y
espíritu. Recuperarnos, humanizando al individuo, atacando para ello lo
inhumano que hoy se erige grande altar en la actitud dialéctica. Reteniendo a
tiempo, por eso, el más peligroso deslizamiento histórico hacia la aniquilación
del hombre.
..... Cosas tan peligrosas sólo se pueden combatir con una actitud verdadera
hacia la vida.

en revista ATENEA
Universidad de Concepción (Chile)
Enero de 1939
Antología del Verdadero Cuento en Chile

prólogo a la edición de 1938

por Miguel Serrano

Vida es acción del hombre sobre el mundo. Vida es humanizar. En el


sentido ideal; puesto que hoy tenemos que mirar éticamente por los
valores. Por los valores positivos. De este modo debe y tiene que ser en
la realidad.

Nuestra generación, que ha nacido vieja en incomodidades, sabe esto,


sabe muchas cosas. Mas de nada le vale. ¿De
qué le puede valer, cuando está más explotada
que un zapatero? (Entendiendo que el artesano
es el que mayor independencia económica
logra en Chile). El artista de nuestra
generación -y en general- vive una vida de
perro negro, en desconsideración, en
vejaciones económicas y espirituales, en
Santiago de Chile.

Vivir la vida recta y virilmente, como es en sí,


es grandemente difícil hoy. En todos los
sectores coexiste el capitalismo, con sus
crecidos santos de trapo o de viento, fantasmas grises que viven en
lapidaria simbiosis, que arriban y se arrastran. Para triunfar se necesita
luchar; pero no luchar como hombres, sino como ranas o culebras.
Lamer. En esta lucha por la vida, habitada por todos los planos de la
existencia, triunfa el que posee mayores argucias inmorales, no morales,
mayores gestos femeninos para el hombre. El arribismo recorre, en
delirio geométrico, los distintos planos por iguales. Las llamadas
izquierdas, o fuerzas de redención, de revolución, sólo aspiran a poseer
buenos asientos blandos dentro de los parlamentos democráticos, a
codearse con los blancos apellidos de la reacción.

Han nacido tarados por un complejo de clase y de comodidad. (Complejo


que no posee el pueblo, que es sano, sino sus dirigentes, sus intelectuales,
que pertenecen por lo general a la clase media). Cuando no se es
Hombre, se es CLASE. Entonces se es inferior. El Hombre está por sobre
las atrabiliarias y nominales ubicaciones de las clases: ES. La clase es el
derecho y la actitud que adquiere por herencia, por impulso muerto, el ser
que se arrastra. Y aquí sí existe la SUERTE, existen ventajas,
superioridades. Una teoría que haga de la lucha de clases el centro y el
fuerte, es necesariamente una teoría inferior, una teoría esclava, puesto
que sostiene la presencia absoluta de un hombre inferior, enfermo,
esclavo, no liberado aún, derrotado, dentro de la ubicación de clases.

Dentro del mundo de las clases aun existen superioridades y diferencias,


existen odios y envidias invencibles, insuperables en su radio propio.
Actualmente en el mundo no se VIVE, solamente se vive en clases. De
ahí esos absurdos del paneconomismo, de la dialéctica, del marxismo, del
fascismo, del aprismo, etc. Desde el momento que se vive así uno tiene
que aceptar su propia suerte inferior o superior. El hombre-clase-media
tiene que aceptar su propia oportunidad que lo lleva a hurgar en las
falanges conservadoras para codearse con jovencitos, o bien, a verter
venenos estereotipados en subversivos discursos comunistas. Porque es
un hecho que los partidos de oposición del mundo están compuestos, en
lo corriente, por hombres-clase-media, por periodistas y poetas
fracasados, por arribistas (por lo menos aquí en Chile), que aspiran hoy a
ser considerados dentro de un sistema democrático de mayorías. Al
pueblo no se le habría ocurrido jamás crear un partido; porque el
auténtico sufrimiento no tiene aspiraciones exhibicionistas y se mueve en
silencio, como todas las fuerzas oscuras y verdaderas. Hoy basta que a un
hombre le duela una muela para que, en vez de ir al dentista y ponerse en
tratamiento, piense en el acto de sanar el dolor de muelas de la
humanidad. Los partidos están así compuestos por tuertos, por eunucos,
por mancos, por jorobados, etc. Aspiran -hijos de pastores luteranos- a
encontrar una razón de existir en una masonería de ordenes superiores.
La táctica marxista por ejemplo, se ha convertido en lo que las viejas
fórmulas cortesanas: clichés donde se escamotea la propia existencia.

O el pueblo y su cielo vivo; el campesino, o bien la aristocracia de sangre


-no el grosero burgués. No ha llegado la hora del pueblo, como vocean
los oportunistas, no puede llegar, no debe, Ha llegado la hora del
Hombre. Debe llegar. Decir que el hombre realizado está salvado de las
clases, es redundar.
El deber de nuestra generación es organizar la vida conforme a la verdad,
conforme a ella misma. América del Sur, continente nuevo, se contagia
de Europa. Siendo que aquí podemos vivir distintos, realizar lo cierto. Es
necesario luchar contra el imperialismo espiritual. Tenemos el deber de
vivir conforme a la verdad, de hacerla carne algún día. Por eso luchamos
hoy contra la vida conformada en lo falso. Porque vida es acción sobre el
mundo. Y para poder actuar, aun en nosotros mismos, necesitamos aire,
necesitamos un metro cuadrado, necesitamos realidad.

La vida hoy, aquí en Santiago de Chile, está organizada en la más


verdadera mentira, que es mentira aun en su verdad. (Cómo hay que dar
de puntapiés para abrir una ventana cualquiera y para abrirla sin
humillaciones, sin arrastrarse junto a los magnates de viento!

Por un lado las editoriales, por el otro los escritores consagrados, las
Alianzas de Escritores, o los que, ya solos, se dan vueltas de carnero en
un salón.

Empecemos por las editoriales. La Editorial Zig-Zag, en manos de


comerciantes extranjeros que temen editar La Divina Comedia por los
subidos derechos de autor que cobraría Benedetto Croce, publica libros y
revistas sin ninguna importancia esencial. Pero vamos a otro caso: la
Editorial Ercilla, que ha tenido una carrera tan rápida como espectacular,
hecha a base de una ensalada de títulos, sin una línea definida y culta,
trabajando en Chile, con capitales chilenos, ha hecho una labor lo más
antichilena que se podía esperar. Se ha dedicado a editar libros de
centroamericanos, de venezolanos, de peruanos, de malos y desconocidos
escritores tropicales, que no importan para nada a nuestro público. Ha
editado a muchachos desconocidos de otros países, sin dar, como era
justo, la preferencia a los nuestros. La Editorial Ercilla tiene como
asesores literarios a algunos exiliados apristas peruanos. Ellos han
querido, con sus publicaciones imponer un criterio (en modo alguno
esencialmente americano para el chileno) sin ningún respeto, cuando lo
que deben hacer es recoger un criterio.

En alguna parte me habría expresado erróneamente sobre el aprismo:


pronto estoy a reconocerlo; pero quiero dejar constancia de cuáles son
aún mis puntos de oposición al aprismo (no a los apristas, pues, gracias
sean dadas, no confundo al hombre con ninguna teoría, lo salvo). Creo
que la teoría aprista, por el solo hecho de pretender ser teoría, no es
americana, creo que se calca sobre una visión del mundo europeo: la
visión mecanicista. Su error, que yo repudio, el haber dado preeminencia
a lo económico, a lo político, querer establecer en América sociedades
determinadas por un hombre político. El aprismo, además, ha dado
beligerancia al periodista y ha hecho de las luchas políticas el modus
preocupatione. Todo esto principalmente en un sector de la vida peruana.
Porque creo que el aprismo es esencialmente peruano, tiene raíz -no tan
profunda- en el Perú. Los mismos apristas, como hemos podido
comprobar, están trabajando constantemente sólo con una realidad de allá
-no con la más profunda tampoco. No les cabe así el derecho a hablar de
América, sino del Perú.

Nuestra generación está desamparada, no tiene donde expresarse. Pero no


habrá de arrastrarse. La lucha está planteada. Es una lucha de calidad
contra poder de cantidad. Nunca se ha visto aún en la Historia que la
calidad perezca bajo un pie. Porque calidad significa intenciones de
verdad. Sólo la verdad se impone.

Superior calidad, aunque sea en la intención. Porque, (qué quiso, qué


intentó, la generación anterior) Nunca he podido saberlo.

Nos impiden de dos maneras: oponiéndose decidida y sinceramente, o


con mimos, con agasajos, con miedos. Por otro lado están los que fingen
los nuevos gestos; pero sólo se quedan en la actitud, en el gesto, pues la
substancia equivalente les será por siempre, para siempre, desconocida;
porque ellos lo quisieron. Más peligrosa que la oposición es la succión
abanderizadora. Mantenerse en el escenario a costa de piruetas de payaso.
¡Evitemos ese paisaje! Cuando todo se reduce a otra cosa que no está en
la literatura, sino en el hombre -y que ellos no comprenden-, cuando todo
se reduce a calidad humana y a silencio, a no vivir con la mentira y el
bluff - que pueden hacer triunfar a corto plazo, pero que a la larga
destruyen y perecen-, sino con la verdad. Porque sólo la verdad se
impone.

Nuestra generación no tiene necesidad de nadie sino de ella misma. No


necesita de nadie. Por el contrario, LA NECESITAN.

Nuestro papel se reduce a aceptar la situación y a afrontarla. La lucha de


las generaciones, hoy, por desgracia, existe. Mañana tal vez no. (Antes ya
he intentado abordar este tema escribiendo por ahí en alguna revista de
vida breve).

La diferencia en el fondo (no importa que no se dé el tono en todos los


representantes de la nueva generación) es de una actitud del hombre ante
la vida. No me importa la literatura, ni la Poesía, ni tan sólo el cuento por
el cuento.
Esta antología, salvo un caso, es de la nueva generación. Y dentro de ella
misma yo establezco diferencias violentas que no creo llegado aún el
momento de verificar. Al escribir pienso en aquellos cuentistas aquí
presentes para los cuales el cuento, el arte, es sólo una expresión de
transición en sus vidas, es decir, para los artistas. Para ellos pienso; para
mí principalmente, para Barreto.

El número está unido por una calidad, por un deseo de realización, de


expresión hoy. Es necesario que se nos escuche. Bastante ya ha hablado
el Silencio, la "majadería", el alcohólico vulgar, el político radical de los
banquetes, el amargado de las siete de la tarde; todo ese desfile oscuro de
chilenos aún hundidos y aplastados.

Se han creído cuentistas los criollistas, los marinistas, los médicos, los
boxeadores, los vendedores de libros usados, los profesores de gramática,
los viajeros con capa y enfermos de exhibicionismos orientales. Tanta
gente.

En lo escrito hasta aquí, en esta primera parte, intento esbozar


brevemente y con la mayor claridad de mi alcance, la situación actual,
principalmente la de nuestra generación.
La cosa es peor aún.

No se trata de conseguir, a costa de algunas humillaciones ante las


pálidas hileras de magnates, una publicación en sus revistas, un saludo
callejero, una cita o que, por fin, nos editen. No se trata de nada parecido.
Las pequeñas reivindicaciones de carácter democrático queden buenas
para los estudiantes universitarios, seres que viven instalados, por lo
general, en el último escalón de la baba, mediocres hasta el éxtasis.

Ahora. Alguien ha dicho el aforismo siguiente: "Cuando la obra empieza


a hablar, el autor debe quedarse callado". No es en una antología de
cuentos donde se debe hablar sobre el cuento. Personalmente he escrito
algunas ideas al respecto.

Quien desee conocerlas puede remitirse a los artículos y polémica en


cuestión. Ahora no desearía hablar sobre el cuento. Hay que dejar que los
cuentos hablen. Puedo sí repetir algo de lo dicho en otra parte.

Algunos de los conceptos -que son nuevos- han producido, por el hecho
de ser nuevos, indignación o descrédito. Por ambas partes jóvenes y
viejos. Es que intentan -en esta Antología principalmente- una
AUTENTICA REIVINDICACION, en el caso presente del cuento.
No es que esté deseando hacer una adulteración atrabiliaria y caprichosa
de lo que todo el mundo entiende por cuento, del concepto cuento.
Tampoco que dé preeminencia al género sobre la creación, que tome el
rábano por las hojas. El artista se expresa de esta o de otra manera, y la
expresión, equivaliendo a una sicología singular, determina, cristaliza
con un cúmulo de leyes personales, invariables, que son lo que la
sicología singular. Especializándose en la expresión equivalente -en el
cuento- se logra la perfección, el conocimiento -que equivale a
conocimiento de sí mismo, a relación serena entre interior y exterior. Se
logra el virtuosismo, SE PUEDE EXPRESAR MUCHO MAS.

Mi único deseo es que se consiga respetar al cuento, tal como el poeta ha


respetado a la poesía, y el novelista a la novela. El cuento, como
concepto y como realidad, estaba aún en potencia, no coincidía
exactamente con la sicología de los hombres. América, en especial Chile,
lo reivindica, lo redime. La posibilidad del desarrollo ulterior existió
siempre, sólo que el cuento hasta hoy fue como una espalda jorobada,
necesitaba estirarse. Es por esto que se puede negar perfección, en una
palabra, realidad hacia el pasado. El cuento nace hoy.

El cuentista empieza su camino solo y lo agota igual. Porque ¿dónde está


el maestro, el modelo, para venerar, para amar? Los pasos resonarán
solos en su única presencia; irá apareciendo un universo de nombres
propios, de esencias únicas, de elementos suyos que le pertenecen por
dolor y para visión propia, singularísima. Esta experiencia escapa hoy al
poeta o al novelista que tiene ante sí los nombres de los artistas, los
grandes bustos, de los que alcanzaron la perfección esporádica del
género.

Se dirá: ¿y Maupassant, Bret Harte, Gorki, Baldomero Lillo? Gorki


posterior a Bret Harte, Baldomero Lillo sugestionado por ambos. Los
"cuentistas" chilenos le prenden ritos a estos nombres. ¿Quiénes son?
¿Han sido acaso cuentistas? No lo creo. Yo los considero simples
narradores, perfectos si se quiere.

Hay una diferencia absluta entre un narrador y un cuentista. Hasta ahora


se ha confundido a los narradores con los cuentistas. Principalmente a los
rusos.

¿Qué es el cuento, entonces?

En el momento actual sólo podría hacer una definición por negaciones,


afirmando que no es poesía, que no es novela, que no es narración, que
no es una carta, que no es teatro.
Está quizás entre la novela y el poema; mas no es, no debe ser ni una ni
otro.

El cuento no tiene por qué rebalsar, cargarse de elementos poéticos (bien


entendido qué es elemento poético) que lo dispersan. Tal como la música
que construye con elementos extraños a ella -de la literatura o la pintura,
por ejemplo- es imperfecta.

Esto no quieren entender varios poetas, que escriben cuentos, presentes


en esta Antologia también, entregándonos bellos monstruos, que son
COMO PIES ENFERMOS QUE SE DISPERSAN PARA AMBOS
LADOS.

Esta Antología es del CUENTO CHILENO, aunque muchos no sepan ni


quieran reconocer su nacionalidad e ingenuamente renieguen,
afrancesándose. La tierra los agitó, desde ahí vienen, a ella, sólo a ella, le
deben su grandeza o su miseria. Prueba de ello es que no se han dado en
ninguna otra parte, sino en Chile. El tono hondo o desgarrador, que se
repite como motivo fundamental y constante, es propio del crisol, del
territorio chileno.

Chile, por hoy, es el país del Arte, que significa, en lenguaje


significativo, PREPARACION PARA ALGO. El arte es transitorio.

La generación anterior fue de la Poesía. La nueva generación es la del


Cuento. Chile es un país de cuentistas. Esta Antología quiere ser una
"Antología Abierta". Desearía una página en blanco para cada página del
alfabeto, donde vendrían "a trabajar" los nombres de los próximos
cuentistas. Yo he colocado sólo a los que conozco, a los otros -que tal
vez existan- no tenía tiempo para salir a buscarlos con detenimiento.

Esta Antología no puede ni desea tener un carácter excesivamente pesado


o definitivo; es, para decir como todos, absolutamente relativa. Porque
los cuentistas vendrán apareciendo con una velocidad increíble, desde la
misma vegetación, desde nuestras selvas del sur, desde uno menos lo
piense. Aquí se puede repetir la historia que me contaba alguien: "Un dia
llegué a mi casa y me encontré, sobre la silla de mi dormitorio, a un
cuentista fumándose mis propios cigarrilllos".

Esta "Antología del Verdadero Cuento Chileno", esta "Antología del


Verdadero Cuento", pretende ser sólo un documento. Nada puede
garantizar mejor su calidad artística.

II
Tiempos hubo mejores en el mundo; aunque no los hubo, a veces. Por
allá, cuando la tierra no era redonda, acostándose horizontal o vertical,
hasta el borde mismo de los fantasmas, de los terrores. Porque entonces
el hombre soñaba con los ojos muy abiertos, veía seres alados, cayendo o
subiendo, o en muecas de humos y de castigos infinitos. Yo recuerdo la
fantástica edad, que no me pertenece sino en analogía de jardines lejanos
y noches de infancia, o de presente diametralmente opuesto, aunque no
tanto. Recuerdo la edad que precedió a Colón, que era loco de pie, el peor
alienado, el alienado cansado y numérico, levantándose con gorro y todo
el centro de un vientre de baldosas renacentistas, en que está Gutenberg y
se predica y vislumbra la máquina, con inmenso terror del centro
humano. Porque la verdadera locura se acuesta y descansa, de algún
modo, del mundo, y ve la noche vacía de estrellas, como un globo. El
mismo Colón afirmaba que el río que venía al Atlántico por el Brasil
tenía su origen en el Paraíso Terrenal, que el mundo tenía la forma de una
naranja en cuya abolladura frontal crecía una rama que estaba cogida al
árbol de los primeros padres o al Paraíso.

Increíble paradoja, ¿quién perdió la rama umbilical, que nos une al sueño
o a la mejor posibilidad misma de hacer carne el sueño que hoy recorre
peregrino, de mar a mar, de flor a casa, de ojo a ansia, fuera, lejos, del
pecho humano? ¿Quién pulverizó el mito de la naranja color carne, llena
de sol central y que es sexo del mundo, diluyéndose en la boca, hacia el
alma, alcanzando por su rama el Paraíso?

Colón mismo.

Colón como ser humano producto de una nueva época del Occidente, que
no se redimiría, con una nueva instancia humana determinando su paso y
de sus tres carabelas. Instancia que conforma una época que avanza y se
agota sin solución trascendente y mejor, en la futura guerra homicida
actual, de lo humillado. Lo ecunémico, la redondez del mundo, la
máquina.

América del Sur en el fondo no sabe de estas cosas, está construida, por
hoy, sobre otra piedra, sobre otro punto de la constelación celeste, que
depende únicamente de la confederación, conformación y hálito singular
humano.

Vuelvo a la época de Europa antes del descubrimiento del Nuevo Mundo


y de la redondez de la tierra. (Porque no sé quién ha dicho ya que Colón
no descubrió América, sino la redondez del mundo). Retorno a este
pretérito para soñar, que es fácil, por analogías en la situación chilena.
Entonces el hombre pobló la tierra, plana como una mesa con nubes, de
seres fabulosos, y su inconsciente se configuró según la creencia, lleno de
fantasmas, de dragones de fuego, de seres infernales, de visiones de
abismos geológicos, de aguas profundas y de cielos imposibles,
existiendo al borde de las cosas. Fue un mundo físicamente más pequeño,
pero infinitamente superior y más rico en posibilidades humanas al de
hoy, pequeño, geométrico, como un hueso de ciruela.

Entonces el mundo fue así en absoluto, porque el hombre creyó en


absoluto que era así.

Chile es una faja angosta, como el sueño de un enefermo de pena, que se


queda dormido mirando la fiebre de los hilos de luz por las puertas;
rodeado de montañas, como el sueño de los hombres más tristes, que se
han enamorado para siempre de la pefección humana; la mido por el
océano, como el sexo de La Mujer, lleno de estrellas. Recorrido por los
Temblores, claros presentimientos del abismo. La tragedia, los malos
augurios, los presagios se anexan al viento de los extremos.

¿Habrá un chileno que no haya apretado, con dolor, en su pecho, durante


negras noches, sueños de cataclismos geológicos, de lunas que se caen,
de cielos infinitos, de aguas creciendo como castigos determinados?

El inconsciente acumula el peso de la tierra, de la montaña, del destino


del polvo, del granito. El alma sabe que el Océano pule verdemente la
tierra, que socava, que desmorona, que la gran piedra de la Montaña
podría volcarse como escenario, que el Volcán gemiría, proyectando
hacia los cielos su caldo de abismo, chamuscando la cara y la últimas
manos de los habitantes.

El concepto de las dimensiones no existe. Sabemos que hay piezas en el


mundo. Tenemos un sentido escatológico de los acontecimientos; porque
la tierra nos ayuda. Conocemos nuestro crisol, nuestro deber a veces, el
destino del ser humano; nuestro deber para realizarlo.

Ahí el clima y la ventana del arte. El cuento. La hombría, la seguridad.

Bien. Cuando los hombres no dieron vueltas al mundo no SABIAN que


la tierra era redonda. Quizás existió un hombre que no quiso dar la vuelta
al mundo, porque vio que era más bello, más fabuloso.

En Chile aparecemos contemplando el peso de la Montaña, sintiéndolo,


viendo la Montaña inmensa, sin mirarla jamás, a veces. El chileno mira la
Cordillera y cree que al otro lado no hay nada. ¿Cómo va a existir algo?
Ahí se acaba el mundo. El chileno cree en definitiva que al otro lado no
hay nada. El chileno cree que existe sólo Chile. Porque la Montaña, de
caerse, alcanzaría hasta sobre el mar. Y el mar más allá de su horizonte
está vacío. Entonces el alma sueña y acumula fantasmas de postmundo,
de esa cuarta dimensión. Más allá deambulan y se acoplan los terrores,
que son velludos y generan cerdos y pájaros de agua. Más allá no hay
nadie. Los seres que vienen, los argentinos que afirman vivir al otro lado
de la Montaña, son unos vulgares embaucadores, o no existen, o residen
también a este lado y han estado ocultos durante algún tiempo detrás de
un árbol cualquiera o de una piedra.

Hay que tener corazón de perro para viajar, hay que tener el corazón muy
firme para aceptar el derrumbe de los sueños, de los misterios, de las
maravillas, de las VERDADES, que duermen en el fondo del alma,
reposando, y que nos ayudan en el camino de la tierra, en el destino del
retorno a lo humano.

Porque al que cruce la Montaña y vea que hay algo está perdido. ¿Quién
le devolverá sus maravillas y sus sueños, quién le pondrá de nuevo los
ojos aterrados de destino infinito? ¿Quién le devolverá la dimensión
precisa y cerrada de la vida?

Aquél que viajó renegó de sus fantasmas. Pero no siempre se perdió. La


tierra lo creó y lo vio crecer como a sus plantas, ella lo alimentó con sus
influjos, con sus vientos, con sus humos que se elevaban desde sus valles
de greda, con sus violetas desmayadas en el color de la lluvia, con sus
aromos, con su sentido, que es el mismo pefume o el viento. La tierra lo
vio crecer y lo agarró con sus raíces y sus ganchos. Es así que muchas
veces, el viajero que retorna, olvida sus viajes, o los recuerda como un
extraño sueño -bajo el poder de la tierra salvadora- que se apartó del día y
del espacio para soñarse, que no existió, como un minuto extraño de no
existencia en la existencia, como algunas horas en que su vida NO FUE,
como algo que no sabe, que no medita, que no siente…

Reconoceremos a estos viajeros porque una partícula de sus ojos se ha


extraviado y pregunta persistentemente, con estupor. Ellos piensan tal
vez en su viaje, como el ser "primitivo" pensó en sus sueños: que el alma
huía por la nariz a correr aventuras en otros paisajes, o que, por un
momento, se murió un poco.

Yo creo en absoluto que más allá de la Montaña no hay nada, que más
allá del horizonte marino hay alguien que se bebe el agua.

Cuando alguno me ha dicho: ¿por qué no viajas, por qué no vas a


Europa?, he respondido: "Porque Europa no existe y porque si existe, yo,
para mí, prefiero que siga no existiendo, porque así la vida es más bella,
o tiene mayor posibilidad de serlo, por mi esfuerzo, algun día".

Cómo dar un paso en falso, cómo destrozar, renegar, del crisol, de la


maravilla, de la completa diferencia, que nos ayuda mucho más en la
Visión, que nos capacita LUEGO para la Gran Conquista -o reconquista.
Esto que es de Chile, esto que le pertenece al chileno; que por hoy cuenta
como documento del suceder viviendo, su arte, o como ventana que
vislumbra y ansía. Esto que por hoy y sólo por hoy, en forma transitoria
como el arte, es el Cuento, absolutamente personal, grande y propio.

Miguel Serrano,
Santiago, 1938

Con Papini y con Florencia

por Miguel Serrano

Hace muchos años que leí Hombre acabado (L´Uomo finito), de Giovanni
Papini. Libro lleno de fuerza, con un deseo ferviente de traspasar los límites
impuestos al hombre por el tiempo y el contorno. Esas páginas estaban, además,
impregnadas del ambiente de la tierra de Florencia, del paisaje de la Toscana, y
revelaban el amor del autor por los caminos polvorientos, los viejos árboles y los
montes distantes.
Siempre he tenido una especial predilección por la naturaleza de mi patria.
Papini me afirmó en ella. Creí ver una semejanza entre las laderas de nuestras
montañas, entre los senderos de nuestros campos y lo descrito por él.
Mi adolescencia fue así bastante influida por ese libro. Admiré a su autor. Y si
entonces lo hubiese encontrado, tal vez se habría cumplido mi más grande deseo
de esos años.
La vida es sumamente curiosa. Suele darnos la posibilidad de realizar nuestras
aspiraciones cuando éstas ya no existen, bien porque hemos perdido toda
esperanza de cumplirlas o porque nos hemos modificado, y otras aspiraciones y
urgencias nos impulsan.

Bastantes años después, olvidado de antiguos deseos, he aquí que estoy en


Florencia.

El sol del verano cae con una luz tremenda, impidiendo a un hombre del sur del
mundo mirar mucho al cielo. Al marchar por las viejas calles, al ir hasta las
ruinas romanas y etruscas de Fiesole y contemplar a lo lejos la campiña de
Toscana, con sus montes y suaves tonos, algo surge del fondo del ser: es la
distancia de los años y el recuerdo del escritor y del poeta que aún vive aquí.
Verlo ahora sería como rendir un homenaje a esos tiempos mejores.
Buscándolo por Florencia, tengo ocasión de ver la Piazza della Signoria, donde
está el David de Miguel Angel y hay una fuente con obras de Benvenuto Cellini.
Contemplo el Palazzo Pitti. Cruzo de vuelta el Ponte Vecchio y después
asciendo por los escalones de la casa del Dante Alighieri. Por aquí - pienso-
subió Dante, despacio, y con el alma fecundada y madura por la imagen de
Beatriz.
Los anticuarios del Ponte Vecchio me han mostrado sus anillos y sus trabajos
primorosos. Uno de ellos me ha dado también la dirección de la casa de Papini.
El escritor vive en Via Guerrazzi, 10.
Pero Papini no está en Florencia. Se ha ido a pasar este verano a la costa del
Mediterráneo, a Forte dei Marmi, cerca de Via Reggio.
El tren para Via Reggio no sale hasta las cuatro de la tarde. Puedo contemplar
mientras tanto las pinturas de Fra Angélico en el museo San Marco. Y encuentro
que es maravilloso que con esta luz y este calor el hombre se transporte hasta las
profundidades de la luz mística. Porque cuando hay tanta luz afuera, debe ser
difícil encontrarla adentro... Sin embargo, en Fra Angélico aparece la voz de
Dios, envuelta en la luz definitiva y en el calor del verano de Italia.
A Forte dei Marmi llego en la tarde, ya oscuro. Y no veo ese mar antiguo, cuyo
oleaje se siente próximo. Un automóvil me lleva a la villa donde se encuentra
Papini. Y entro en un parque en sombras, descuidado.
Nadie viene a mi encuentro; me guío por una débil luz y un rumor de
conversación. De este modo caigo en medio de una reunión familiar en el jardín
de la villa.
Algunas personas se levantan; y después de un breve cambio de saludos, se van
y me dejan solo con el escritor y su esposa.
Papini es más joven que Hesse; sin embargo, se ve más desgastado, más
destruido. Es alto y con su cabello disperso. Está completamente ciego de un
ojo. Da la impresión de ser un hombre que ha ido dejando trozos de sí mismo en
su paso por la vida.
Inicio mi conversación contándole que hace muy poco que he estado con
Hermann Hesse. Me explico mal al decirle que éste me ha expresado que lo
fundamental en la vida es tratar de oír la voz de Dios. Hesse no me ha dicho tal
cosa, sino que en el fondo de toda religión se encuentra la voz de Dios. Pero no
alcanzo a rectificar, pues me responde: En esta afirmación no hay nada nuevo.

- Lo importante - me agrega- es saber si Dios tiene algún interés en hablar a los


hombres. Luego, si los hombres son capaces de oír a Dios, si es que El les habla.
Y, por último, si los hombres pueden interpretar la voz de Dios, si es que la
escuchan.

De Hermann Hesse, Papini sólo conoce su libro Sidharta. Me doy cuenta de que
en Europa los escritores se ignoran más que en Sudamérica.
Luego nos referimos a su comentado artículo sobre América del Sur. Papini se
extiende largo sobre esto. Dice que ha sido mal interpretado, que él no ha
restado posibilidades al futuro de nuestro continente y que sólo ha dicho que al
presente no tenemos ni a un Cervantes, ni a un Dostoiewski, ni a un San Juan de
la Cruz, ni a un Napoleón.
Me parece adivinar en Papini una extraña preocupación y cariño por
Sudamérica, los cuales, en un temperamento apasionado y polémico como el
suyo, se manifiestan en el ataque y en la crítica.
En la oscuridad de esa tarde, se me aproxima y me pregunta:

- ¿Hay muchos indios en Sudamérica? ¿Es usted indio...? Yo no alcanzo a verlo,


porque estoy casi ciego...

Su esposa sonríe. Y le dice que no lo parezco.


Entonces Papini comienza a hablar de Europa. Con gran fervor se expresa de su
mundo, y me dice que cree que Europa siempre seguirá siendo la cabeza del
mundo; porque se vuelven a dar las necesarias constantes de peligro e
inseguridad y de extremas tensiones que hacen que el espíritu se mantenga
vigilante. Es éste el terreno propicio para las más altas creaciones y para el
resurgir de las mejores individualidades. Europa se parece a Grecia, en un plano
más amplio; dividida en naciones, siempre ante el peligro de la invasión de los
bárbaros, debe crear y superarse para sobrevivir. La latinidad tiene un gran papel
que cumplir en esta pugna y en el equilibrio final. Italia, España, Francia y
Sudamérica (que también es latina de espíritu, según Papini) son
imprescindibles para la integración del mundo del futuro. La catolicidad es el
elemento sin el cual se produciría el caos.

Yo recuerdo que Keyserling - que a mi manera de ver es uno de los escritores


sudamericanos más auténticos, y que llegará a serlo todavía más, a medida que
el tiempo pase- ha dicho que la espiritualidad de Europa se debe a su división y
polarización entre naciones pequeñas. Y una de las razones por las cuales creía
él que en Sudamérica también podría advenir el espíritu, es porque se encuentra
dividida en naciones como Europa.
Ha pasado el tiempo. Papini detiene la charla y sube a su cuarto de trabajo, en
busca de su último libro. En su ausencia, su esposa me ofrece una taza de café y
me cuenta que el escritor ha pasado un mal año, pues ha estado muy enfermo.
La esposa de Papini es una mujer bella y cordial.

- ¡Cuánto ha trabajado Giovanni en su vida! - me dice.

Al volver, el escritor me trae de regalo su último libro, impreso en italiano: Le


pazzie del poeta (La locura del poeta). Y me lo dedica escribiendo en español:
Su amigo de una tarde.
Después ambos me acompañan hasta el automóvil que me espera. Como la
noche está oscura, Papini se apoya en mi brazo y en el bastón. Camina muy
erguido en las sombras. Tanto él como su esposa desean que me quede a comer
con ellos, y su cordialidad es emocionante. Papini me pregunta si me alcanza el
dinero para el taxi o si traigo lo suficiente para mi viaje por Italia. Ese luchador,
ese poeta, busca nuevas formas de manifestar su simpatía a este sudamericano,
amigo de una tarde.
En la noche, escuchando el golpe de las olas del Mediterráneo, siento cerca el
brazo de ese luchador que tanto admiré, y no puedo menos de reflexionar que es
maravilloso que el destino me haya permitido marchar aquí, en este viejo
mundo, del brazo de mi ya lejana adolescencia.

Papini no podrá saber nunca lo que para mí significó encontrarlo a él y a su


Florencia: Una vuelta a esos años en que éramos libres, porque todos los
caminos estaban aún frente a nosotros...

Latinos V/S Anglosajones


Las dos lecturas de H. Hesse
por Miguel Serrano

Fragmento de la charla dictada por el chileno Miguel Serrano sobre el escritor


alemán, en la aldea suiza de Montagnola, en agosto de 1972.

..... En el verano europeo de 1972, los americanos del norte inauguraron un


seminario sobre Hermann Hesse y C. G. Jung, en Montagnola, pequeña aldea
de montañas en la Suiza italiana, donde Hesse viviera la mayor parte de su vida.
Me ofrecieron la dirección del seminario, que duraría tres meses. En aviones
especiales transportaron más de doscientos estudiantes, hombres y mujeres,
profesores de las principales universidades americanas, yogas, cabalistas,
escritores, directores de teatro, de cine, televisión, etc. En un estilo muy
americano, arrendaron una vieja villa del Renacimiento italiano y bautizaron el
Seminario con el nombre de "Castalia", la ciudad de "El Juego de Abalorios".
..... No acepté la dirección del seminario y decidí dar una sola charla.

DESCONOCIDO ENTRE PARES

..... Estamos en las tierras de Hermann Hesse, donde transcurrió la más creadora
parte de su vida. ¡Cuántas cosas han pasado desde que él
llegara aquí por primera vez, hace más de cincuenta años!
¡Cuántos cambios! La atmósfera de Montagnola ya no es la
misma que él conociera, ni siquiera es la Montagnola que yo
viera hace veintiún años, cuando aquí vine por primera vez a
visitar al escritor, con un saco andino sobre los hombros y uno
de mis primeros libros en la mano. La casa roja que él
habitara sobre una colina ya no es más roja y ha sido vendida
a un hombre que ni siquiera sabe quién fue Hermann Hesse.
Cuando vine aquí, en 1951, Hesse era un desconocido para los
lectores del mundo anglosajón. En mi libro, El círculo
hermético, cuento que debí buscar por días un ejemplar de
alguna obra del escritor, en Londres y en Nueva York, para
regalarla a un amigo inglés o americano, que nada sabía de
Hesse. Lo mismo sucedía en la India y en todo Oriente. Muy
pocos, casi nadie, conocía a Hesse. En cambio, en la América
Latina, en México, en Argentina, en Brasil y en Chile, mi
país, Hermann Hesse era leído y estudiado como un maestro de caminos
secretos y esenciales. De este modo, cuando visité a Hesse por primera vez, vine
a ver aquí a un guía de la vida espiritual.
..... Los años han pasado y la situación ha variado totalmente. En la América del
Sur, en el mundo latino en general, Hermann Hesse ha sido olvidado un tanto.
La verdad es que nunca allí llegó a ser un escritor de masas, de ediciones en
masa. En los Estados Unidos todo se transforma en producción en masa, en
producto de consumo. En la América Latina, la importancia de Hesse fue la de
un escritor secreto, de selección, de búsqueda interior, nunca ha sido de
mayorías. En una minoría, Hermann Hesse se mantendrá siempre entre nosotros,
perdurará.
..... Quizás el fenómeno tenga su causa en la diferencia existente en las dos
ramas de una misma religión, como son la católica y la protestante. La atmósfera
católica del mundo latino no ha producido las tensiones y represiones del
puritanismo. De este modo, Hesse, con su dios Abraxas, dios del bien y el mal,
no significa una revelación, ni precipita una explosión en el mundo católico
latinoamericano, ni entre aquellos que, de un modo u otro, fueron tocados por
los símbolos y mitos de la filosofía alemana. En mi país y en los tiempos de mi
juventud los mitos del Romanticismo alemán, que tienen raíces legendarias en el
Rig Veda, en las filosofías Vedanta y en la dualista Samkhya del hinduismo, en
el zoroastrismo, en el maniqueísmo y en el druidismo, alcanzaron a toda una
generación latinoamericana y española, educada en la lectura de la "Revista de
Occidente", en la divulgación de Ortega y Gasset y en los libros y conferencias
del conde de Keyserling.
..... Por todo esto, aun pasando a ser Hermann Hesse un guía y un maestro del
camino de la realización interior, nunca ha dejado de ser para nosotros los
hispanos, los latinoamericanos, el escritor alemán de esencia y substancia, que
continúa en una línea de escritores excelsos, que representan la más alta
espiritualidad de la cultura germánica. Esto fue y quiso ser Hermann Hesse: un
continuador de Novalis, de Hölderlin, de Kleist, de Nietzsche, de Jean Paul.
Sabemos que Hesse trabajó durante casi toda su vida en una Antología de
románticos alemanes. Esta Antología fue terminada - nos lo dice su biógrafo
Bernhard Zeller- pero nunca editada. ¿Dónde se encuentra el manuscrito hoy?
Hesse fue la más grande autoridad del Romanticismo alemán, del que es su
último brote, junto con el "Simbolismo" de Stephen George. El Romanticismo
alemán, en la poesía y en la filosofía, se entronca naturalmente con la India.
Además se genera en el pietismo y el protestantismo. Es por esto último que
Hermann Hesse también llega a producir tan gran explosión en el alma del
mundo protestante anglosajón, cuando los valores de este mundo entran en
crisis.
..... La crisis se hace visible en Inglaterra cuando las energías de ese país - con la
pérdida del Imperio- tórnanse del exterior al interior y toda una generación
empieza a buscar en su propia alma. Con el derrumbe del Imperio se
desmoronan también los últimos valores del puritanismo. La represión
victoriana, que fuera dirigida a la formación de una casta dirigente y de una
clase gobernante colonial, con una disciplina ascética, se desintegra. Y el dios
Abraxas de Hesse (y también de Jung) se apodera de un mundo desorientado y
en caos creador. En ese caos colectivo, en ese mar, hacen irrupción los
arquetipos, encontrando nuevos ropajes los legendarios del Soma, de la
Ambrosía, del Hongo Primordial. Su nueva encarnación es la droga, el LSD, la
mescalina, la marihuana. Y todo esto contribuye a la transformación del
verdadero Hesse en Norteamérica, en algo completamente distinto, en algo que
él no es, pero que, de algún modo, también es.

EL PRODUCTO "HESSE"

..... En los Estados Unidos, la explosión del mundo puritano anglosajón y el


derrumbe de sus valores tiene, además, otra característica: la rebelión de las
juventudes contra el mecanicismo, la supertécnica, la mecanización creciente de
la vida. Las nuevas generaciones se sienten ajenas y sin responsabilidad directa
en el proceso, al mismo tiempo que trituradas, destruidas por la máquina.
Descubren también en Hesse esta rebelión contra la técnica, rebelión que en él
tiene, de nuevo, sus bases en la filosofía y poesía romántica alemana y en el
orientalismo. Pero esto es ignorado por esas juventudes que se empeñan en
querer ver en Hesse un fenómeno aislado. Mejor dicho, así se lo presentan las
editoriales, los periódicos, las revistas, la producción en masa, el producto de
consumo, la superficialidad del ambiente y el comerciante que sólo está
interesado en vender el "producto" Hesse. Y el "producto" dejará de venderse un
día, cuando la moda pase y deba ser reemplazado por otro.
..... Al señalar este peligro, este aspecto negativo en la difusión comercializada y
estandarizada de un escritor tan sutil, tan profundo, no hago más que repetir la
crítica que los sudamericanos y los europeos hacen a la civilización y
producción en masa de la América del Norte. Allí todo corre el peligro de
transformarse en algo superficial. Este peligro también fue visto y temido por
Hesse. Sabemos bien que se opuso siempre a que sus obras fueran llevadas al
cine. En mi última entrevista con su esposa, Ninón, me contó que se había
negado a que El lobo estepario fuera llevado a la televisión canadiense.
..... ¿Por qué se oponía Hesse a que sus obras fueran filmadas? Creo entenderlo.
Voy a tratar de explicarlo aquí dentro de la terminología norteamericana actual.
La literatura pertenece a la "Galaxia de Gutenberg"; el cine, a la "Galaxia
Electrónica". El cine trabaja con la luz. La luz, en esta tierra de la "materia
dura", tiene un tránsito veloz, va de paso, viene como un ladrón, se lo roba todo,
se roba las imágenes y se escapa, se va. Trabajar con la luz aquí significa no
perdurar, significa trabajar para la vida efímera, para la muerte. No hay nada del
cine que pueda perdurar. No soy enemigo del cine ni de la "Galaxia
Electrónica".
..... Por el contrario, aprecio las obras de arte del cinema como cualquier obra de
arte de verdad. Pero creo que no es posible transportar el arte de una "Galaxia" a
la otra, porque cada cual se rige por leyes propias. Ninguna obra de arte literaria
puede ser llevada al cine sin que pierda, se falsee y se destruya su espíritu y su
interna belleza. Ahí está el ejemplo reciente de La Muerte en Venecia de Tomás
Mann y de El Proceso, de Kafka. La obra de arte del cine deberá ser "totalmente
cine" y escrita directamente para el cine. Sólo las malas obras literarias vienen a
constituir buenas piezas cinematográficas, nunca las buenas. Además, una gran
obra del cine, una verdadera obra del arte, está siempre regida por el signo de la
transitoriedad, por la carrera vertiginosa de la luz. Ninguna película resiste el
tiempo terrestre (veamos de nuevo "El ciudadano Kane"). Cada obra de esta
Galaxia impresiona dentro de la transitoriedad, marca y es marcada por lo
instantáneo. No creo, además, que con la aparición de la "Galaxia Electrónica",
la "Galaxia de Gutenberg" deba desaparecer. Creo que ambas existirán
simultáneamente, paralelamente, pero a condición de que no se mezclen y que
estas paralelas tampoco se junten en el infinito.

en El Mercurio

25 de Enero de 2003
El último encuentro con Carl Jung

Dos libros acaban de aparecer en España de Carl Jung: el décimo volumen de


sus obras completas Civilización en transición y Encuentros con Jung, una
recopilación de entrevistas publicadas en inglés en 1977 y solamente ahora
traducidas a nuestro idioma por Ramón Escohotado y revisión técnica de
Enrique Galán (Editorial Trotta). Seguramente, la publicación no incluyó el
encuentro que Miguel Serrano sostuvo con el ilustre maestro y que nuestro
diario publicó poco después de su muerte.

MIGUEL SERRANO

..... Son las seis de la mañana del día 8 de junio. Abro las puertas de mi cuarto en
Nueva Delhi, que da a una pequeña terracita blanca, que ya refulge con el sol. El
calor tremendo de junio comienza temprano. Estoy semidesnudo y empezaré
mis ejercicios yogis de adoración al sol, el "Suryanamaskar". El verdor increíble
de los árboles, aun en este tiempo, el canto de infinidad de pájaros me saludan.
Un sirviente local, con turbante, se acerca con ese andar cadencioso de los
indios y me dice: "Salam, Sahib". Es su saludo respetuoso. Me extiende un
papel. Es un telegrama. Lo abro sin apuro, casi sin poner atención. Veo que
viene de Zurich y me extraña que así sea. Empiezo a leerlo y quedo perplejo. El
cable dice así: "El Dr. Jung murió ayer a mediodía, apaciblemente. Recuerdos".
Lo firman Beiley y Jaffe. La señorita norteamericana que acompañaba al Dr.
Jung, llevándole a su casa, una mujer extraordinaria, y su secretaria privada, de
nacionalidad suiza.
..... Una emoción grande me inmoviliza ahí, con los ojos húmedos, tal vez por el
sol tan intenso, o quizás no. Hace tan poco que he estado con el Dr. Jung en su
casa de Küsnacht, junto al lago de Zurich. Tal vez habré sido el último amigo
extranjero que le viera. Esta noticia me ha llegado al alma. Mis relaciones con
ese gran hombre, con ese genio extraordinario, han sido en verdad únicas. (...)
He tenido la suerte enorme de ser prologado por Jung, siendo la primera vez y la
última que él diera un prólogo para una obra puramente literaria.
..... Recibí una carta suya cuando nuestros terremotos del año pasado. Me decía:
"Aunque los hombres de ciencia modernos no lo acepten, hay una relación entre
el alma y la Naturaleza. La Madre Naturaleza se pone ahora a tono con nuestra
civilización y empieza también a destruir. Por desgracia le ha tocado a su país.
¡Cuánto he pensado en Chile últimamente!".
.....
..... El recuerdo vuela, veo su imagen, la tengo presente. Llegué hace muy poco a
su casa bajo una fina lluvia. La casa de Jung queda en las afueras de Zurich, en
Küsnacht. En el pórtico de la entrada se lee una frase en latín, que dice, más o
menos: "Piénsese o no en Dios. El está siempre presente". Adentro hay cuadros
y objetos bellos, grabados antiguos, pinturas medievales. Me recibió la señorita
Beiley, quien me invitó a pasar a una salita en donde sirvió el té.
..... Hablamos del Dr. Jung. Ella me dijo que no había estado bien los últimos
días, sintiéndose muy cansado a causa de un trabajo intenso en un ensayo de
ochenta páginas que había escrito a mano, como siempre, directamente en
inglés, para una publicación norteamericana que aparecerá próximamente con el
título de El hombre y sus mitos. La señorita Beiley está preocupada. Me cuenta
que Jung le ha dicho: "Deseo partir, pero usted me sujeta aquí". Ella no lo cree,
pues piensa que el Dr. Jung todavía siente atracción por la vida y la tierra:
"Tiene aún demasiado sentido del humor, dice, demasiado entusiasmo". (...)
Acabo de encontrarme en Montagnola, en la Suiza italiana, con Hermann Hesse
y le he preguntado sobre lo mismo. El me ha dicho que "morir es ir al
Inconsciente colectivo de Jung, para luego, desde ahí, volver a las formas, a las
formas...". Hesse también me ha dicho que "Jung es un gigante, una montaña
gigantesca de nuestro tiempo". Y me ha pedido que le lleve sus saludos, "los
saludos del Lobo Estepario", ha dicho.
..... Jung no ha estado bien, en verdad, pero no padece de enfermedad alguna.
Ese día se ha sentido mejor y se ha levantado para recibirme. La señorita Beiley
me pide que subamos, pero me recomienda que no me quede mucho tiempo para
no cansarle. Entramos a su cuarto de trabajo. Y allí está Jung, sobre su silla,
junto a la ventana que da al lago. Tiene puesta una bata japonesa que le hace
parecer un monje del budismo zen, un samurai antiguo o un mago de otros
tiempos. Le nimba una luz de atardecer y le rodean grabados de la alquimia y un
gran cuadro del dios hindú Shiva, sobre la cima del Monte Kailash. (...)
..... El sonríe con ésa, su sonrisa, llena de malicia, de sabiduría y de bondad.
Estira su mano hacia su pipa, pero no la alcanza. Le digo: "Qué bella bata
japonesa". Es una bata ceremonial. Saco de mi bolsillo una cajita de Cachemira,
que le he traído de regalo. Él la mira y me dice: "Es de turquesa". Y luego
agrega: "No he estado nunca en Cachemira, recorrí el sur de la India, Madora,
todas esas zonas tan "Interesantes"". Luego me habla de los hindúes y de los
chinos, se refiere a un libro de un maestro chino del budismo zen, cuyo nombre
no recuerdo ahora, y dice que es lo mejor que ha leído al respecto. Le doy los
saludos de Hermann Hesse y le cuento mi conversación sobre la muerte con el
escritor. Le explico que le he preguntado si hay importancia en saber si existe
algo más allá de la muerte. Jung medita un rato y afirma que la pregunta ha sido
mal hecha, que debí preguntar "si hay alguna razón para creer que exista algo
más allá de la muerte".
..... Yo le pregunto ahora al Dr. Jung: "¿Y qué cree usted, hay?". Me responde:
"Si la mente puede actuar al margen del cerebro, entonces funciona al margen
del espacio y del tiempo. Y si la mente funciona al margen del espacio y del
tiempo, es incorruptible".

- ¿Y qué cree usted, doctor, qué piensa?


"He visto hombres heridos a bala en el cerebro, durante la guerra, con todas sus
funciones cerebrales paralizadas y, sin embargo, tienen sueños y los recuerdan
después. ¿Qué es lo que sueñan? Hay niños pequeños, que aún no tienen un yo
definido, con su conciencia difusa, repartido en el cuerpo, quienes tienen sueños
personales y profundos que les marcan para toda la vida. Ahí no hay yo. ¿Qué es
eso otro que sueñan?".

- ¿Cree usted, doctor, que exista algo así como un cuerpo sutil, astral, el
"Linga-Sarira", de la filosofía hindú, que se desprenda con la muerte?
"No lo sé; pero he visto materializar objetos y a los mediums mover objetos a
distancia sin tocarlos con el cuerpo físico".

El doctor prosigue:
"Hace algún tiempo estuve muy enfermo, en estado casi de coma; todos creían
que moriría y tal vez pensaban que sufría mucho, porque en ese estado a
menudo el cuerpo hace creer que está sufriendo. Pero en verdad, yo tenía la
impresión de flotar y experimentaba una sensación maravillosa de libertad.
Después lo recordé.

..... El doctor Jung llevaba siempre en su mano izquierda un anillo con una gema
gnóstica. Egipcia. Hablamos del significado de ese anillo y él lo explicó: "Todos
estos símbolos, me dijo, están vivos en mí". Era maravillosa su memoria, y su
cultura increíble, aún a los 85 años.
..... Hablaba a veces como un poeta, como un mago, como un místico. Una vez
me dijo: "Mi mensaje no es entendido plenamente; sólo los poetas me
comprenden".

Ahora le pregunto:

- ¿Qué va a pasar con el hombre, en la supercivilización técnica que se


avecina? ¿Cree usted que alguien volverá a preocuparse, dentro de veinte
años, del espíritu de los símbolos, en plena era de los viajes interplanetarios
con los "sputnik", los Gagarin y los Shepard? ¿No llegará a aparecer el
espíritu, "démodé"?

El doctor Jung sonríe maliciosamente, y afirma:


- Tarde o temprano el hombre tendrá que volver a sí mismo, aunque desde los
astros. Todo esto que está pasando es una forma extrema de escapismo porque
es más fácil llegar a Marte que encontrarse a sí mismo. Si el hombre no se
encuentra a sí mismo, entonces corre el más grande de todos los peligros: su
aniquilación. También en los viajes al espacio exterior hay un inconsciente
intento de solucionar el más grave de todos los problemas que el hombre deberá
afrontar en el futuro: la superpoblación.

..... El doctor Jung iba a seguir hablando sobre este tema importantísimo cuando
la señorita Beiley entró a decir que la hija y el yerno del doctor Jung estaban
esperando. Mi promesa de una conversación breve no se había cumplido.
..... Pero ahora sé que no importa, pues mi entrevista iba a ser la última. Y algo
tal vez me lo indicaba de este modo, pues al llegar a la puerta me detuve y volví
la cabeza. Jung estaba ahí mirándome fijamente, con su suave sonrisa y
levantaba su mano para hacerme un gesto de despedida. El último. Su mano con
el anillo gnóstico. Me incliné respetuosamente.

"El Mercurio", 16 de julio de 1961.


HOMENAJE

La muerte de Ezra Pound

A treinta años del fallecimiento del poeta norteamericano, el escritor


chileno Miguel Serrano recuerda un emotivo acto celebrado en su memoria
en Medinaceli, España

por Miguel Serrano


Ezra Pound murió en Venecia el 2 de noviembre de 1972, menos de cinco
meses después de nuestra entrevista. Me encontraba en España, recorriendo esa
dura y antigua tierra. Había visitado Ronda, en el sur, la ciudad sobre el abismo,
donde Rilke viviera por un tiempo. Estuve leyendo sus cartas en el pequeño
museo que los españoles le han dedicado en el hotel que
habitara. Sus cartas de amor a Lou Salomé, también amada
e inspiradora de Nietzsche. Reflexionaba que los españoles
han rendido homenaje a este poeta universal, que pisara por
breve tiempo su suelo lleno de historia y de leyenda. Seguí
luego hacia el norte, a una ciudad pequeñita, cercana a
Madrid, Medinaceli, donde el Cid buscara refugio en el
destierro, ciudad de piedras y ruinas, romana y visigoda,
pesada de misterio ibérico, quizá céltico, druídico. Está
empinada sobre una colina y mira a un mar seco, árido, de
olas parduscas, amarillas, lunares, como la visión de un
planeta muerto. A veces, en el horizonte lejano, aparece un
árbol solitario, colocado allí por la belleza, por ese alguien
que se goza en ordenar el paisaje de Castilla para luego
contemplarlo desde la cumbre de Medinaceli, a través del
viejo Arco Romano, resto de una antigua fortaleza.
..... Me enteré de la muerte de Ezra Pound en Madrid, en los
periódicos. Los españoles le rendian sentido homenaje.
Eugenio Montes refería el entierro en Venecia, donde me
transportaba con la imaginación nuevamente, hasta su casita de la calle Querini,
viéndole ahora ir en su último viaje en góndola oscura, por los canales, hasta el
cementerio de la isla de Saint Michele. El periodista Eugenio Montes contaba
que en la última entrevista que tuvo con el poeta -hace muchos años,
seguramente-, éste le había preguntado: "¿Cantan aún los gallos del Cid al
amanecer en Medinaceli?". Y agregaba que Pound había visitado Medinaceli en
1906, siguiendo la ruta del Cid. Pound amaba el poema del Cid, que consideraba
superior aun a la Canción de Rolando. Había viajado a España para rehacer el
antiguo camino del "Campeador". De este modo había llegado a ese misterioso
pueblito de las alturas, que se conserva como en el medioevo.
..... De nuevo me encontraba en un cuarto de hotel, en Madrid ahora. Era de
noche y quise continuar el diálogo, interrumpido en otra noche de Venecia, con
el fantasma de mi amigo, ya desprendido en definitiva. Y el fantasma vino y se
sentó en una silla, no sé dónde, de seguro no allí en ese cuarto de hotel, y se
puso a hablar, a hablar, como no lo haría hace tanto tiempo. Estaba otra vez
joven y recitaba poemas cósmicos, decía cosas inmortales, bellas, inmensas,
como la ciudad de Venecia, como el paisaje de Castilla, como las montañas de la
Luna. Yo escuchaba y olvidaba. Porque todo eso se olvida, y no se debe
recordar.
Un monumento en Medinaceli

..... Días después volví a Medinaceli. Me enteré que allí vivía un chileno, el
profesor Fernando de Toro Garland. Conversamos. Me habló también del
artículo de Eugenio Montes y de las palabras de Pound sobre los gallos del Cid.
Se le había ocurrido la idea de sugerir a las autoridades españolas erigir un
monumento a Pound en Medinaceli, que registrara esa frase y el paso por allí del
gran poeta americano al comienzo del siglo. Le animé en su empeño. Desde ese
momento estuvimos en contacto personal o por carta. Seguí así todas las
vicisitudes de sus esfuerzos. Las autoridades españolas del pueblo y varios
amigos de Madrid colaboraron con entusiasmo.
Labradores, picapedreros con sus mulas, transportaron
una enorme piedra de los montes celtíberos, descascarada
por los milenios, a través de las nieves del crudo
invierno. Herreros del medioevo forjaron letras simples y
antiguas para ser enclavadas en la piedra, con la frase de
Pound: "¿Cantan todavía los gallos del Cid al amanecer
en Medinaceli?".
..... Se eligió la más bella plaza de la ciudad de las alturas
(Medina en árabe significa ciudad; celi es cielo), y, allí bajo un árbol añoso, se
enclavó la piedra. Será también una fuente, porque el agua correrá por su
arrugada y resquebrajada superficie. Esa piedra es como el rostro de Pound en
sus últimos años. Se eligió el día 15 de mayo de 1973, día de San Isidro y de los
festivales de la ciudad, para la inauguración del monumento. Me encargué de
que Olga Rudge, la compañera de Ezra Pound, pudiera ir. Olga tenía setenta y
ocho años y no iba a parte alguna. Pero fue a Medinaceli.
..... Vinieron ese día poetas jóvenes españoles desde Madrid, con Jaime Ferrán,
traductor de Pound. Se hallaban presentes en Medinaceli también algunos
norteamericanos y pintores que allí viven. Y todo el pueblo vestido de día de
fiesta, con sus trajes cuidados, con sus boinas, sus bastones de pastores, sus
bordones de peregrinos de las alturas, sus rostros nobles, de roca castellana, sus
hijos, sus nietos, que ya parten a las grandes urbes de la planicie, ciudades sin
poesía. Todos estaban allí para rendir homenaje a ese poeta de otras tierras, de
otros mundos, que ellos nunca conocieron, que no leyeron -porque muchos no
saben leer-, pero que conocen desde dentro, con su alma de roca, que se parece
al rostro del poeta muerto, del poeta ecuménico. Se encontraban allí los perros y
las mulas que acompañaron y trajeron la piedra, estaba el herrero, el cura, el
guardia civil, y el vino y el agua y el pan, la yerba y los pájaros de Medinaceli,
de la Vieja Castilla. También estaban los gallos del Cid y Pound. De esos dos
guerreros desaparecidos.

Los signos celestes


..... El día anterior supe que debía hablar en el homenaje; Olga Rudge quería que
yo dijera algo en ese momento. ¿Qué cosa? ¿Qué decir que pudiera parecerse al
silencio de Pound y de la Ciudad de Cielo? De amanecida me fui a caminar por
las calles de la ciudad muerta, entre ruinas. Llegué a la plazuela del monumento
y me senté bajo el árbol, junto a la roca. Llevaba conmigo un libro recién
publicado en Barcelona por la Editorial Barral: Introducción a Ezra Pound,
con traducciones y comentarios de Carmen R. De Velasco y Jaime Ferrán. Lo
abrí y leí: "La piedra bajo el olmo / tomando forma ahora / curva la piedra en su
borde / la piedra que en el aire toma forma..."
..... Era el canto XC. Me detuve perplejo. Pero... ¡aquí está la piedra y,
precisamente, éste es un olmo! Nadie lo había pensado antes, nadie lo supo. Esto
se hizo solo. Pero... ¿se hizo en verdad solo? Recordé la frase de Nietzsche: "Las
cosas vienen a nosotros deseosas de transformarse en símbolos". Y Rilke: "¿Qué
otra cosa quieres tú, mundo, sino transformarte en invisible dentro de
nosotros?".
..... O bien, los sueños se hacen visibles fuera de nosotros... Esto es lo que Jung
llamó "sincronismo", "coincidencias", "fenómenos acausables", y Nietzsche,
"azares llenos de sentido". Puro "sentido", pura "magia", puro milagro, en
verdad, todo y nada. ¿Quién dirige esto? ¿Quién lo ha ordenado? ¿Acaso el
mismo Pound? ¿O ese Ser que compone el paisaje, según el más alto sentido de
la belleza, que hace crecer allí un árbol en el horizonte de Castilla, para que
pueda ser contemplado desde la altura a través de un arco de piedra en ruinas?
Ese Ser, emocionado, "tocado" por la belleza o la profundidad de los
pensamientos, de los sueños, de los versos de un hijo del cielo y de la tierra,
quiere así manifestarse cuando él vuelve a su seno. ("La naturaleza imita el
arte"). Tal vez sea la misma tierra, la Madre Tierra, el Espíritu de la Tierra.
Cuando Jung murió, estalló una tormenta inesperada en esa época del año y un
rayo cayó sobre el árbol bajo el cual se sentaba, marcándolo para siempre.
Cuando Ezra Pound murió, las cosas, la roca, el árbol, la naturaleza, recitaron un
poema suyo, se ordenaron como uno de sus versos: "La piedra bajo el olmo...".
..... Y aún más:
..... "Ha penetrado el árbol en mis manos, / la savia por mis brazos ha ascendido
/ el árbol en mi pecho se hizo grande, / hacia abajo, / salen de mí las ramas como
brazos. / Árbol eres, / musgo eres, / eres violeta que acaricia el viento... /
Mueren los árboles y el sueño permanece".
..... En la tarde del día del homenaje, en presencia de todo el pueblo, como he
dicho, también de la heroica compañera de Pound, se descorrió la bandera de
España que cubría el monumento, el "rostro", la "piedra bajo el olmo". Y,
entonces, en el olmo cantó un mirlo. Y el pueblo comentó el suceso y lo seguirá
comentando por mucho tiempo, porque los habitantes de esas viejas ciudades en
ruinas, de los pueblos de antaño, son como los griegos de la leyenda, como los
celtas y los druidas, descubren en el canto de un pájaro, en un día de auspicios,
un echo digno de ser interpretado y que llena así sus vidas hasta la muerte.
..... ¿Qué más puede desear un gran poeta que sus poemas sean recitados por las
cosas? ¿Qué más puede desear que un mirlo cante en su homenaje? ¿Qué prueba
mayor puede darse de que un hombre es grande, de que un poeta lo es, que el
cielo, o la naturaleza, se manifiesten así para confirmarlo?
..... Aún canta un mirlo en Medinaceli. Y canta por Ezra Pound.

en Revista de Libros de El Mercurio


Sábado 2 de Noviembre de 2002.
Distintas miradas, un mismo hombre
JUNG Y EL AMOR

Es difícil lograr una idea más amplia y objetiva de la misteriosa y profunda


personalidad del doctor C. G. Jung, alguien que dijo: "Sólo los poetas me
entenderán"

Por Miguel Serrano


en El Mercurio, domingo 13 de julio de 2003.

El profesor William McQuire, de la Universidad de Princeton, en Estados


Unidos escribió hace años un extraordinario libro,
"C. G. Jung Speaking", donde coleccionó todas las
entrevistas que le fueran hechas durante su larga
vida. Entre ellas, las de Victoria Ocampo, de
Argentina, y las mías, dedicándome dos capítulos y
varias citas a lo largo de su obra. Este libro ha sido
traducido al castellano y publicado recientemente
por la Editorial Trotta de España, con el título de
Encuentros con Jung.

Deseo referirme a esta obra debido a dos


publicaciones hechas en El Mercurio, los días 10 de
mayo y 1 de junio, en la Revista de Libros, el
primero, y en la sección Actualidad Cultural; el segundo, con los titulares de
"Tras la Huella de Jung" y "Biografía Revela al Jung Espiritista y Orgiástico".
Ambos se basan en el libro El Cristo Ario, de Richard Noli, autor, además, de
Jung Cult.

Es importante hacer ver que para lograr una idea más amplia y objetiva de la
misteriosa y profunda personalidad del doctor Jung, se debería leer también
Jung, el Gnóstico, de Stephan Hoeller, y la completísima biografía de Gerhard
Wehr, C. G. Jung. Su vida, su Obra, su Influencia, en las que se me dedican
también dos capítulos, declarando "que a nadie dijo lo que a mí, recibiéndome
cuando ya no recibía a nadie, ni a sus discípulos ni a sus familiares". Además,
está Vida y Obra de C. G. Jung, de Aniela Jaffé, su secretaria, con el subtítulo
de Jung y el Nazismo, y su extraordinario epílogo, de Sir Laurens van Der Post.
Y más que todos estos libros, mi Circulo Hermético, al que continuamente se
cita en la obra de McQuire, como se ha dicho, y en Jung, el Gnóstico, de
Hoeller.

En un importante comentario de los libros de Richard Noll, escrito por el


siquiatra de Wesport, Connecticut, ex presidente de la "C. G. Jung Foundation"
de Nueva York, Dr. Jeffrey Satinover, y publicado en la revista Fist Things, con
el título "Jung Love", este autor inicia su importante estudio lamentando que
Noll no se refiera a mi obra, a pesar de que, según él, la confirmaría, en lo
referente al amor y la alquimia; es decir,el "amor alquímico". Para lo cual
reproduce el siguiente párrafo de mi libro:

"Nada es posible sin amor me dijo C. G. Jung. Nada, ni siquiera el proceso


alquímico. Porque sólo el amor predispone a arriesgarlo todo...". Al revivir
Jung los trabajos de los gnósticos y de los alquimistas,él mismo entró a
participar de sus misterios".

Y Jeffrey Satinover agrega:"Serrano confirma la apreciación de Noll de que


Jung fue un exponente del pangermanismo ocultista que precedió y alimentó el
resurgimiento del Nazismo..."

Y continúa citando:

En la filosofía alquímica existe la idea fundamental de la Soror Mystica, o sea,


la mujer que ayuda al alquimista a mezclar las sustancias en el Atanor... Al
final se cumple la Boda Mística... la misma fisión se cumple en el proceso de
Individuación entre el paciente y el analista, en el "Laboratorio" junguiano... Es
un "Amor Prohibido" que solamente puede realizarse al margen del
matrimonio. Y aunque es verdad que este amor no excluye el cuerpo físico, el
amor físico debe transformarse en un rito. Como en las prácticas tantricas de la
India, donde los magos Siddha intentan alcanzar la unión síquica. El ritual
tántrico es complicado y misterioso. Por lo general, la mujer es una prostituta
sagrada. Y así como el fin de la Alquimia es convertir el plomo en oro, el coito
mágico (Maithuna) intenta despertar el fuego mágico (Kundalini) en la base de
la columna vertebral... La mujer es una sacerdotisa del Amor Mágico, cuya
función es despertar los shakras del Héroe Tántrico. El hombre no eyacula el
semen, sino que se impregna a si mismo, pudiendo así invertir el proceso de la
creación, al mismo tiempo que le pone fin... Y el producto de este Amor
Prohibido es el Andrógino, el Hombre Total (Individuado, según Jung), con
todos sus centros ahora despiertos... Sólo Jung, el mago, ha hecho posible para
nosotros tomar parte en estos misterios, que nos llevan de vuelta a la legendaria
tierra del Hombre-Dios...

Esta relación viene al caso para desvirtuar las especulaciones de un artículo


sobre el Jung "orgiástico", que hacen aparecer a Jung predicando el desenfreno
sexual y la poligamia. El profesor Jung me habló también sobre la poligamia. Su
concepción era que "el hombre, por su naturaleza y sumisión, es polígamo, por
ser el que «entregaba» (el semen), así como la mujer era monógama, por ser la
que «recibía». Y agregaba: "Sólo por el espíritu el hombre es capaz de superar
su naturaleza y amar a una sola mujer". Para la eternidad, como Tristán. De
igual modo, "sólo por una superación espiritual, la mujer se hace polígama".
Como la Reina de Saba.

En cuanto al "Cristianismo Ario", de C. G. Jung, también él me explicó su


especial creencia. Al preguntarle quién era Cristo para él, me respondió: "Es el
Self, el Sí-Mismo", Es decir, el Hombre-Total, el Hombre- Absoluto, el Super-
Hombre, el Sonenmensh, el Hombre-Sol, o los Hombres-Solares. El Hombre-
Dios, en la cita de Jeffrey Satinover. Y esto era posible alcanzarlo "trasladando
el acento de la conciencia a un punto equidistante entre el Yo y el Inconsciente;
o sea, el Self, el Sí-Mismo, a la vez que se despierta la Serpiente Kundalini (de
los gnósticos ofitas, la que aparecía en su anillo) reactivando todos los shakras,
o «centros distintos de conciencia». Reviviendo el lado derecho del cerebro.
Alcanzando al Hombre-Total. O sea, a Cristo".

Una vez Nehru me dijo: "También nosotros podríamos llegar a ser Buda, como
lo fue el Príncipe Gauthama". Y Jung: "Podremos llegar a ser Cristo; como lo
fue Jesús...".

Este era su "Cristo Ario", su "Cristianismo Ario". (En mi último libro, El Hijo
del Viudo, he tratado este tema in extenso).

Desde aquellos lejanos días de nuestro encuentro, en la distante Kusnacht, en


Suiza, junto al lago de Zurich, nunca he dejado de seguir conversando con el
profesor C. G. Jung, en algo así como en el "Concierto de Dos Violines", de
Bach.

Él me dijo, al momento de despedirse: "Sólo los poetas me entenderán"... Sí,


querido profesor Jung, yo le comprendo y lo defenderé de los que no son
capaces de entender su gran poesía del pensamiento.
El libro C. G. Jung Speaking, del profesor William McGuire, ha sido traducido
últimamente al castellano y publicado por la editorial Trotta, con el título
Encuentros con Jung. Ahí se reproducen las
descripciones de Jung cuando viera a Hitler y a
Mussolini juntos, dirigiéndose a una gran
concentración de masas. Mientras Mussolini era un
hombre normal, "un ser humano", por así decir,
hasta simpático, Hitler no lo era, "carente de
individualidad, confundido con el alma colectiva de
su Nación, poseído por su Inconsciente Colectivo".
Y Jung agregaba: "Ni siquiera por el Inconsciente
Colectivo de un solo país, sino de toda una raza, de
la raza aria. Y es por ello que los oyentes, aun
cuando no entiendan el alemán, si son arios, serán
arrebatados, hipnotizados por sus palabras, porque
los representa a todos ellos, habla por todos. Y si lo
hace a gritos, es porque una nación entera, toda una raza, se está expresando a
través de él". Así, Hitler es la encarnación del Dios ario Wotan. Está poseído por
él, no es ya un ser humano. Y Jung llega a compararlo con Mahoma, con el
fenómeno Mahoma, y lo que él fuera y aún es para todo el mundo islámico.

No creo que el profesor Jung haya leído el libro de Kubizek, Adolf Hitler, mi
Amigo de Juventud, el más importante que se haya escrito sobre el Führer
germano, y que nos ilustra como ninguno al confirmar sus apreciaciones,
narrando una escena extraordinaria acaecida una noche de su juventud, tras
haber asistido los dos amigos a la representación en Linz, de "Rienzi", de
Richard Wagner. Fue tan grande la impresión que le produjo esta obra a Hitler
(en la que tal vez presentía su propio drama futuro), que marchó con su amigo
en total silencio por las calles nocturnas en dirección al bosque, en la montaña.
Y cuenta Kubizek que, una vez llegados allí, le tomó una mano entre las suyas y
comenzó a hablar como en trance, con una voz que no le pertenecía, admirado él
mismo al escucharse. Se refería a Alemania, a los germanos y a lo que él haría
por ese pueblo: una revolución total. Y esto lo declaraba un muchacho austríaco
de no más de dieciséis años, un completo desconocido. Revela Kubizek que
muchos años después, cuando ya Adolf Hitler era el Führer de Alemania, le
recordó esa extraordinaria escena de una lejana noche de su juventud. Y Hitler le
dijo: "Sí, jamás la he olvidado; porque ahí comenzó todo...".
Como en muchas otras cosas, también el psicoanálisis se ha apoderado de
conceptos y expresiones de Nietzsche, sin declararlo ni reconocerlo. Así pasa
con la concepción del "Inconsciente", de Freud, que a su vez adoptara Jung
ampliándola al Inconsciente Colectivo. Fue Nietzsche quien afirmó que "había
algo en él que sabía más de lo que él mismo sabía; porque él no era consciente
de saberlo".

Y Jung amplió esta vivencia al afirmar: "Yo sé cosas de usted que usted mismo
no sabe y que yo tampoco sé que las sé...".

Sin duda, Jung en los años treinta se sintió intrigado por el fenómeno del
nacionalsocialismo, con su fuerza arrolladora, amenazando extenderse
mundialmente. Y aceptó la Presidencia de la Sociedad Médica Internacional de
Psicoterapia, entrando a reemplazar al hermano de Göring. Además, se había
producido su ruptura con Freud y acuñaría su teoría de los "Dos Inconscientes
Colectivos", entregándole con ella un arma formidable al nazismo; pero que éste
jamás uso, debido a la desconfianza esencial que el hitlerismo tenía de todo lo
que proviniese del psicoanálisis y de su terminología.

No hay duda de que para Jung el final de la Guerra fue una catástrofe, temiendo
que también toda su obra pudiera ser destruida al vincularlo al hitlerismo,
aunque sólo fuera de un modo "filosófico", también por su concepción del
Arquetipo, refiriéndose a Wotan o a Vishnú, de modo que Adolf Hitler, al ser
poseído por Wotan, pasaba a ser un Avatara, así "ocupado" por una divinidad
externa, extraterrestre, como se diría hoy. Al final de sus días, Jung, y por
primera vez, declara en el prólogo a mi libro Las Visitas de la Reina de Saba
que el "Arquetipo" sería una Entidad superconsciente; es decir, un Dios, y no
una "representación de los instintos", como hasta entonces lo definieran sus
discípulos.

Temiendo por la destrucción de la obra de toda su vida, y a que lo vincularan a


Hitler o al hitlerismo, al finalizar la Guerra Jung sufrió tres ataques al corazón.
Ya antes había aconsejado a los Servicios Secretos ingleses y norteamericanos
de "alargar la guerra; porque Hitler estaba poseído por Wotan, Dios del huracán
y la tormenta (Blitzkrieg). Y una tormenta no puede durar mucho tiempo, se va
agotando, autodestruyéndose...".

De todos modos, la actitud de Jung, un suizo, fue diametralmente opuesta a la de


Heidegger, un alemán, quien se mantuvo firme, como partidario del nazismo,
hasta el final, sin pensar en lo que pudiera suceder con su obra.
Y Heidegger recordaría a Ezra Pound: "¡Mantente firme en los viejos sueños,
para que tu mundo no pierda la esperanza...!".

Las Visitas de la Reina de Saba


Miguel Serrano
ilustraciones de Julio Escámez.
Nueva Delhi : Nascimento, 1960.
75 páginas.

Prólogo de C. G. Jung

He aquí un libro extraordinario. Es como un sueño dentro de otros sueños.


Altamente poético, diría yo, y lo menos semejante a los productos espontáneos
del inconsciente a que me encuentro acostumbrado, aunque conocidas figuras
arquetípicas sean claramente discernibles. El genio poético ha transformado la
materia primordial en formas casi musicales, así como, en otro extremo,
Schopenhauer entendía la música como movimiento de las ideas arquetípicas. El
factor principal y conformador pareciera ser una fuerte tendencia estética.
Consecuentemente, el lector es cautivado en un creciente ensueño, en un espacio
que se amplía cada vez más y en una insondable profundidad del tiempo. El
elemento cognoscitivo no juega un papel importante, aunque reside en un
nebuloso fondo, todavía vivo en la riqueza de colorido de las imágenes. El
inconsciente -o lo que nosotros designamos con este nombre- se presenta al
autor en su aspecto poético, aunque yo lo perciba mayormente en su aspecto
científico o filosófico o, quién sabe si con más exactitud, en el religioso. El
inconsciente es sin duda la Pammater, la Madre de Todo (es decir, de toda la
vida psíquica), es la matriz, el fondo, el fundamento de todos los fenómenos
diferenciados que nosotros llamamos psíquicos: religión, ciencia, filosofía y
arte. Su experiencia -en cualquier forma que sea- es una aproximación a la
totalidad; justamente esa experiencia que se encuentra ausente en nuestra
civilización moderna.

Es la avenida y la via regia al Unus Mundus.

Zürich. Enero14 de 1960.


Héctor Barreto
Pasajero del sueño

Por Miguel Serrano


Revista de Libros de El Mercurio. Viernes 26 de agosto de 2005.
A los escritores de mi generación se nos ha conocido en Chile como de "la
Generación de 1938", pudiendo incluirse en ella a Eduardo Anguita, Braulio
Arenas, Enrique Gómez Correa, Teófilo Cid, Irizarri, Eduardo Molina, Julio
Molina Müller, Guillermo Atías (o Anuar Atías), Iván Romero, Rene Ahumada,
Raúl Vicherat, Robinson Gaete, Juan Tejeda,
Santiago del Campo, Gonzalo Rojas, Volodia
Teitelboim, Héctor Barreto y yo. Un pequeño
grupo (Del Campo, Guillermo Atías, Irizarri,
Ahumada, Iván Romero, Julio Molina y
Barreto) nos reuníamos en la noche a
conversar y leernos nuestros cuentos y
poemas en un café-restaurante de la calle San
Diego, el "Miss Universo", que, como tantas
otras bellas cosas, ya no existe más. Y era
Barreto quien nos mantenía atentos a sus
historias improvisadas, haciendo que la noche
pasara casi sin sentirse. ¿Cómo poder olvidar
"El pasajero del sueño", "Rito a Narciso",
"Jasón" y "La ciudad emferma" (él
pronunciaba "em-ferma", con "m", poniendo
énfasis en ello y con un gesticular único). En
verdad, Héctor, tan joven aún, vivía en la
Grecia antigua y como si él mismo fuera la
reencarnación de Alejandro Magno, a quien nos describía físicamente cual si
sólo acabara de estar en su presencia. Para nada nos interesaba en esos años la
política y vivíamos inmersos en los libros de Panait Istrati, Knut Hamsum y los
rusos, Dostoievsky, Boris Pilniak, Sevolod Ivanov; o los poetas Miloscz, Pedro
Prado, Omar Cáceres (quien se apareció en nuestras tertulias para recitar su
"Azul deshabitado"), Vicente Huidobro, Augusto D'Halmar (con su La sombra
del humo en el espejo), Salvador Reyes, Pablo de Rokha, Neruda y Joaquín
Edwards Bello, entre otros.

Fue por esto que una noche recibimos con total asombro la confesión de nuestro
"héroe griego", Héctor Barreto, de que había decidido participar en la política y
se había inscrito en la Juventud Socialista. ¿Cómo era posible —exclamamos—
que "El pasajero del sueño", que "Jasón", hubiera hecho esto? ¿En qué quedaba
ahora su búsqueda desesperada en las calles nocturnas del viejo Santiago, en la
montaña, en nuestras mágicas cumbres, de la "Ciudad de los Césares", del
"Vellocino de oro"?... Lo estoy viendo, como si fuera ayer, con su rostro moreno
y sus ojos profundos, golpeándose la frente (en un gesto muy suyo) y
respondernos: "Lo hice porque me producen dolor los niños pobres descalzos
bajo la lluvia"...
Esos eran los años de la Revolución Española, del "Winnipeg", de la gran
tensión política planetaria previa a la Segunda Guerra Mundial y, en Chile, las
juventudes políticas uniformadas también combatían en las calles. Y fue así
cómo una noche Barreto murió asesinado. A nosotros, sus hermanos, sus amigos
entrañables, nos afectó más allá del alma, en las entrañas del mismo ser. Los
soñadores, los reclusos, debimos también salir a las calles a luchar por un
cambio a fondo en la sociedad chilena. Guillermo Atías, Irizarri y Julio Molina
entraron al socialismo. Yo empecé a escribir en periódicos de izquierda. Barreto
se había hecho muy amigo de Raúl Ampuero; yo también, hasta su muerte.

El funeral de Barreto fue algo enorme, cuadras y cuadras; todos los escritores
chilenos, de cualquier generación (Huidobro, de Rokha, Neruda, nuestro amigo
Sánchez Latorre); todos los políticos (Schnake, Ricardo Latcham, Julio
Barrenechea y Marmaduque Grove, como líder de ese homenaje). Ahí conocí a
Blanca Luz Brum, quien iba a mi lado y, al ver mis ojos húmedos, me dijo:
"Ánimo, camarada", tomando mi mano y apretándola. En el cementerio, junto a
la bella tumba, hecha por el escultor Banderas, con la mascarilla del rostro de
Barreto muerto, que él mismo le sacara y que me había regalado esa mañana
(aún la conservo, habiendo viajado conmigo por todo el mundo). Y allí quedó,
entonces, su réplica (mirando al cielo, a través de los párpados cerrados, durante
todas las estaciones, bajo el sol y la lluvia) hasta ahora, cuando desconocidos la
han roto a golpes de martillo. Don Marmaduque terminó su discurso de aquél
día diciendo: "¡No pasarán...!". Sin embargo, han pasado... ¡tantas cosas!

Con jóvenes amigos vamos a reparar la tumba en el Cementerio General, de


modo que el rostro de Héctor Barreto pueda seguir contemplando más allá del
cielo, más allá de las estrellas, su Grecia inmortal, su monte Olimpo y el Templo
de Delfos, donde tal vez él fuera un hierofante, hace muchos siglos ya.
―Colonia Dignidad era una base de ovnis‖

Por Gonzalo León


Nacion Domingo, Domingo 3 de abril de 2005

Sobrino de Vicente Huidobro, amante de Indira Gandhi, convencido de que los


alemanes consiguieron la duplicación exacta de seres humanos hace décadas,
este escritor perteneciente a la generación del ‘38 (Volodia Teitelboim,
Fernando Alegría) piensa que Pinochet debió haberse pegado un tiro en Londres.
A sus 88 años, Serrano acaba de publicar Malla: la realidad es una ilusión.

-Si la ficción es una mentira, grande o chica, usted sería un escritor de ficción,
pero de ninguna manera un escritor onírico...
-Pero ¿qué son los sueños? Los sueños son una realidad. Por ejemplo, yo ahora
lo sueño a usted. Los sueños son realidades
cotidianas que se transforman en sueños y
que a su vez influencian la realidad. ¿Qué es
la realidad? Ésa es la pregunta que hago en
mi último libro. En el fondo, todo es
realidad. Muchas veces un sueño hace que
se modifiquen acontecimientos que
llamamos reales.

-¿Qué es lo peor del sistema actual?


-El dinero que debió ser y fue un medio
para facilitar el intercambio de productos, o
trueque, se ha transformado en la
mercadería principal gracias a la invención del interés. Y lo peor que pudo pasar
fue que el administrador de ese interés pueda vivir sin trabajar, o sea a costa del
que trabaja. Ese administrador es el usurero. Y esto ha existido tanto en el
capitalismo como en el comunismo.
-Pero ningún sistema es puro.
-Ha existido un solo régimen en el mundo que terminó con el interés del dinero
y que fue el nacionalsocialismo en Alemania, que decía ‗si yo te presto un
ropero, me devuelves un ropero‘.

-En Ni por mar ni por tierra, que está incluido en la Trilogía de la búsqueda del
mundo exterior, usted habla de los imbunches. Con el tiempo, ¿Pinochet podría
convertirse en uno?
-Pinochet no se va a transformar en nada... Él, como la mayoría de los
gobernantes chilenos, se chingó. Es decir, Pinochet debió pegarse un tiro cuando
se lo llevaron a Londres.

-¿Así de rudo?
-Yo se lo hice saber a él a través de un fax. Le dije que, como O‘Higgins, él
representaba a Chile y por ningún motivo podía salir humillado. Ahí tiene usted
a Contreras que dijo ‗jamás voy a pisar la cárcel‘ y ahora vea dónde está. Lo
mismo que Paul Schäfer.

-¿Le da lo mismo lo que le pase a Paul Schäfer?


-Los resultados de su huida son que en Colonia Dignidad todos están hablando
mal de él. Una cosa muy alemana, por lo demás. Cuando a los alemanes les va
mal, culpan al jefe y se transforman en traidores.

-¿Cuáles fueron entonces las verdaderas razones de la persecución a Schäfer?


-Una de las razones de la persecución internacional a la Colonia Dignidad hecha
por la CIA, el Pentágono y el Mossad tenía como objeto liquidar a esa colonia
misteriosa.

-No le entiendo.
-Usted sabe que un juez tan serio como Juan Guzmán dice que los pasillos
subterráneos de Colonia Dignidad se los cambiaban. Entonces, ¿cómo puede ser
que los pasillos se los cambiaran? Colonia Dignidad era una base de ovnis que
estaba en contacto con la base de la Antártica.

-¿Cuál es el hecho más grave que ha ocurrido en materia político literaria, en el


último tiempo?
-La vergüenza máxima es el apoyo de Mario Vargas Llosa a este señor
Tompkins. Y su actitud constituye una desilusión más que yo siento respecto al
Perú y a los peruanos. Ese odio que profesan hacia todo lo que sea chileno ha
quedado de manifiesto en la actitud de un escritor que, en su juventud, se hizo
simpatizante comunista y de Fidel Castro sólo para captar la atención de la
España franquista y cobrar miles de dólares por sus escritos. Bueno, él, García
Márquez y José Donoso.
-¿Pero qué de malo hay en Tompkins?
-Detrás del señor Tompkins está el señor Rockefeller, quien es el principal
interesado que Chile se divida en dos, a partir del paralelo 40, que es donde se
concentran las reservas de agua más grandes del mundo. Entonces esto de la
ecología y todas esas leseras son sólo un pretexto. Hace poco, a Mario
Kreutzberguer le entregaron el Piloto Pardo, barco histórico, para que hiciera
ecoturismo. Y el Presidente Lagos permanece impávido ante todo esto, porque
fue educado en la Universidad de Duke, que es propiedad de Rockefeller.

-En la Trilogía de la búsqueda del mundo exterior usted habla con asombro de la
Antártica. En algunas entrevistas ha afirmado que Hitler estaría ahí, más
específicamente en lo que usted ha llamado como ―hiperbóreos‖.
-La Antártica seguramente es la Atlántida congelada. Imagínese que debajo de la
Antártica han descubierto ríos subterráneos que van desde Santiago a Talca.
Playas debajo de las bases rusa y chilena. Y aguas cálidas. Hitler y los alemanes
estarían en esa zona hiperbórea, donde hay pasillos subterráneos de millones de
años que nadie sabe dónde llegan.

-Uno de los mitos sobre la figura de Hitler es que él perseguía a los


homosexuales porque él era gay.
-Hitler es como buda.

-¿El avatara al que se refiere en sus libros?


-Exacto. Cada cierto tiempo aparecen personajes que son poseídos por una
fuerza o un espíritu superior y actúan de manera tal que modifican toda la
historia de la humanidad. Cuando Hitler hablaba no hablaba él, sino un espíritu
superior. Entonces cuando ese personaje desaparece, surge una religión. El
nacionalsocialismo, en definitiva, es un movimiento religioso que consiste en
recrear el hombre dios.

-Por último, ¿por qué cree que no ha obtenido el Premio Nacional de Literatura?
-Todos los premios literarios del mundo, hasta el Premio Nobel, son ganados por
gente que apoya o ha apoyado el dinero como sistema. (Pausa) Ahora, el Premio
Nacional es importante para una persona como yo, básicamente por el dinero
que podría percibir.

"Con Ezra Pound‖

Miguel Serrano
El cordón dorado, 1978
Hace años, en Venecia, frente a esa estatua de piedra, que no hablaba –hubo un
tiempo en que las rocas hablaron- empecé a dejar correr palabras y palabras, y,
entre otras cosas, dije: ―En
setecientos años más el laurel
florecerá de nuevo. Sea feliz, en
setecientos años más usted volverá
a perder…‖.

Sabía que Ezra Pound era seguidor


del dios de los perdedores en este
mundo, en el período oscuro del
Hierro, llamado por los indúes
Kaliyuga. Él era también un acólito
del maltratado y desprestigiado
Lucifer, puede que, sin saberlo, del
Lucibel de los cátaros, Apolo,
Abraxas, Krishna, Siva y también Quenós, de los selnam; el portador, o
Anunciador de la luz, de la Estrella de la Mañana, la que avisa la llegada del
nuevo sol y se retira luego, a la espera de un mundo más noble, más puro, donde
se fueron los héroes y los gigantes.

Comencé a narrarle a Pound mi peregrinación a Montsegur y le hablé de la


Sierra Maladetta, por donde Bertrand de Born, trovador que él amara y
tradujera, se dejó morir por congelación, según nos cuenta Otto Rahn, en su
libro ―La Corte de Lucifer‖. Fue en ese momento cuando la roca hizo un gesto, y
una luz de alegría la envolvió. Es que Ezra Pound había escalado Montsegur.
También él era un herético y un guerrero.

Tuve una idea, algo así como si un secreto me fuera revelado: Ezra Pound se
hallaba incorporado en una tradición luciferina que venía de los orígenes. A
través de sus manos, sin que él fuera totalmente consciente del suceso, pasaba el
Cordón Dorado de esta tradición viril y guerrera. El interés de Pound, en su
juventud, por el Poema del Cid, por el Cantar de Roldán, por Parsifal, por las
canciones y la civilización de los trovadores del Languedoc, le hizo
representante en nuestro tiempo de los que combatieron por un mundo no
asentado en la usura, así como los templarios lucharon una vez por organizar las
bases de un sistema económico más espiritual y justo. De no haber sido
destruido prematuramente este intento, pudo llevar a la Tierra en la Era de Piscis
a un desarrollo muy distinto, en otra dirección, redescubriendo una técnica
espiritualizada, capaz de transfigurar la Tierra, sin destruirla en el cataclismo
que se ve venir, como efecto de una tecnología burda, mecanicista, enredada en
los engranajes satánicos de la usura y de la sociedad de consumo, del
racionalismo y del materialismo colectivista del universo de masas.
Ezra Pound apoyó en la Segunda Guerra Mundial al fascismo italiano y al
nazismo alemán, creyendo ver en ellos un sistema económico social no asentado
en la usura, también con una tecnología y ciencia diferentes, un organismo que
encuentra sus raíces metafísicas en una Tierra purificada y vital. Ahora bien, se
sabe, porque hay documentos que lo prueban, que la organización de las SS del
Hitlerismo (SS es abreviatura de la palabra alemana Schutzstaffel, originalmente
Grupo de Protección) estaba inspirado en la Orden Templaria. En sus capas
dirigentes secretas poseía un tipo de iniciación esotérica, además de varios
centros de instrucción en castillos distribuidos en distintas zonas, a la manera de
Gendarmerías templarias. Las SS pretendían construir ciudades en los confines
de Europa, en el Cáucaso, en la Rochelle, en el Mediodía de Francia, puede que
en Montsegur, al finalizar la Guerra, liberándolas de impuestos y donde el
dinero no tuviese valor y el comercio constituyera un vínculo espiritual como en
la antigüedad. Hoy se pretende desconocer el sistema social y económico nuevo,
mejor dicho viejísimo, que intentaron establecer el fascismo y el nazismo y se
llama tendenciosamente fascista a cualquier régimen autoritario o dictadura, que
no sea de tendencia marxista, que se entronice en el poder en algún punto de la
Tierra.

Por ese tipo de razones, Ezra Pound se puso al lado de Italia y Alemania en la
gran guerra y contra su propio país de nacimiento, en el que vio el símbolo de lo
opuesto, de una economía, una técnica, un sistema de vida basados en la usura,
como él mismo dijera. Ezra Pound perdió, y fue encerrado en una jaula de
hierro, en Pisa, como bestia feroz, y se le mantuvo a la intemperie, al frío y al
sol. Luego se le llevó a un sanatorio de locos en los Estados Unidos de América,
donde permaneció trece años, los mejores de la vida de un hombre. ¡Al más
grande poeta de su tiempo, que diera a conocer a Joyce, que ayudara a escribir a
Elliot, tradujera a Confucio e interpretara el I Ching! Lo mismo se hizo en
Noruega, y por idéntica razón, con Knut Hamsun. También su Guía, perdedor en
una batalla de extraterrestres, fue torturado, calumniado y, por último,
encadenado en los hielos del Polo Norte, donde un día hiciera florecer la Última
Tule. Los perdedores son siempre transformados aquí en los demonios históricos
legendarios; lo es Ravana, derrotado por Rama; lo es Luzbel.

Si Ezra Pound se equivocó, ¡bien! Ya lo dice Platón: ―Todas las grandes cosas
se edifican en el peligro‖. Y Heidegger: ―Quien pensó en gran escala, debió
errar en gran escala‖.
Miguel Serrano y los amigos perdidos

Última entrevista al célebre escritor chileno. Del ciclo ―Testigos del barrio‖
Entrevista de Armando Roa
Miércoles 9 de agosto de 2006.

[Recuperada en Cuarto de revelado, N°3, Marzo 2009)


http://www.cuartoderevelado.cl/columna.htm

―He llegado a saber que mi generación, con todas sus imposibilidades, es una
generación extraordinaria que, habiendo vislumbrado algo nuevo y terrible,
aunque nada realice, aunque fracase y desaparezca sin gloria y sin recuerdos,
ha sido una generación profética. Con nuestras aspiraciones y visiones se
guiaran a los que vengan y las realicen, y aquellos que las realicen no podrán,
en cambio, saber todo lo que nosotros hemos sabido y hemos visto.‖
Miguel Serrano

- [Armando Roa]: Don Miguel, háblenos de


la generación del 38.
- [Miguel Serrano]: La generación del 38, es
una generación bastante trágica. Dramática,
porque de sus componentes, muy pocos
pudieron realizarse y realizar su obra; ahí
está Héctor Barreto, por ejemplo, quien fue
asesinado muy joven...
Con Barreto, íbamos a un bar que estaba, justamente, en la esquina de Alameda
con Lastarria. Íbamos a tomar cerveza, y estábamos hasta que nos echaban a la
una o dos de la madrugada, hora en la cual cerraban...

Yo vivía en Lira 31. Calle en la cual sigo viviendo, todavía, aunque ya no esté
ahí. Calle en la cual nunca he dejado de vivir. La casa de Lira 31 existió hasta
que un vagabundo entró de noche, hizo fuego en el living, y se quemó. Tiempo
después, un amigo, de aquellos años, me llama y me dice: ―Miguel, tengo un
regalo para ti. Encontrémonos‖ ... Me traía de regalo la placa con el número.
Ahora, esa placa la llevo adonde voy, de hecho está puesta en la puerta de mi
actual departamento.

- ¿Qué más nos puede decir de ese poeta fantasmal que era Barreto?
- Bueno, con Barreto caminábamos por ahí, y esos rieles de la calle Lira eran los
rieles más hermosos del mundo. Siguen, y siguen esos rieles y nadie sabe a
dónde van a dar. Barreto decía que iban a dar a la Ciudad de los Césares.
Caminábamos cada uno por un riel, hasta que llegábamos a mi casa; Barreto me
miraba y me decía que él sabía donde estaba la Ciudad, y me decía, también, que
si yo quería él me llevaba. Entonces, llegábamos hasta un lugar donde él se
paraba y me decía: ―Hasta a quí no puedo seguir; hay una línea invisible. Tu no
la ves; yo sí la veo, pero si la paso no puedo salir más, y tu no vas a poder entrar
tampoco...‖. Pero lo cierto es que una noche la pasó y ya no lo volví a ver más...
Algún día la pasaré yo, y nos encontraremos.

- Hay, también, dos figuras trágicas interesantes: Jaime Rayo y Omar Cáceres...
- Sí. Jaime Rayo se suicidó. Y Omar Cáceres llegó una noche a vernos, y nos
dijo con una voz muy especial: ―Disculpen por el tiempo que me perdí,
compañeritos.‖ Luego, nos recito su poema maravilloso, ―Azul deshabitado‖:

Y ahora, recordando mi antiguo ser, los lugares que yo he habitado


y que aun ostentan mis sagrados pensamientos,
comprendo que el sentido, el ruego con que toda soledad extraña
/nos sorprende
no es más que una vivencia que de la tristeza humana queda.
O, también, la luz de aquél que rompe su seguridad
/su consecutiv´atmósfera,
para sentir cómo, al retornar, todo su ser estalla dentro un gran número.
y saber que ―aun‖ existe, que ―aun‖ alienta y empobrece sus pasos
/en la tierra
pero que está ahí absorto, igual, sin dirección, igual, sin dirección,
solitario como una montaña diciendo la palabra entonces.

Después de esa noche no lo vimos más. Desapareció, hasta que un día lo


encontraron muerto a orillas del río Mapocho, asesinado.
Recuerdo también una noche con Omar Cáceres en el bar Miss Universo, bar
que estaba en la calle San Diego. Recuerdo que salí y comencé a caminar por
Tocornal, por ahí, en medio, hay una entrada misteriosa a un pasaje, a un cité.
Recuerdo que pensé entrar por esta calle fantasmal –calle que existe todavía,
exactamente igual- un pasaje de piedras y casas antiguas. Recuerdo que fui esa
noche y de pronto se abrió una ventana y apareció una mujer preciosa que
miraba al cielo y que, con una cara extraña, me dijo: ―Llueve...‖. Entonces, yo le
dije: ―Sí, mijita, está que llueve y me voy a mojar... así que déjeme entrar...‖
(risas).

Luego, me invitó al fondo de la casa, para ver una placita que tenía una virgen
hermosa. La niña se me acercó y me dijo: ―Vea que le han quitado una piedras
muy especiales que tenía... si las encuentra, tráigamelas.‖

Hace poco fuimos con usted [dirigiéndose a Armando roa] y con Cristián
Warnken, y recuerdo que fuimos al fondo del patio y una señora me volvió a
pedir lo mismo: que intentara reponer aquellas piedras.

- A propósito de las calles de Santiago, en un pasaje de sus Memorias usted dice:


―Santiago entero fue un paraíso, pero los que vivíamos en él no lo sabíamos. El
paraíso existe desde que se perdió –antes no existía-. La montaña, pura, nevada,
levantándose gigantesca como un muro frontal, a todas horas visible, de día y
hasta de noche, como si tuviera luz propia. Sólo en Austria he visto algo
parecido. Los que en Santiago hemos nacido no podríamos ya acostumbrarnos a
ninguna otra región de Chile‖.
¿Don Miguel, qué cree usted que ha pasado con este Santiago?
- Neruda decía que Santiago era la ciudad que tenía más cielo en el mundo,
porque las casas no eran más que de dos pisos. Esas casas maravillosas de la
Avenida Brasil, de San Isidro, donde está la Catedral, o la misma Cumming: el
paisaje ha cambiado tanto. De hecho, éstas mismas calles son también muy
interesantes; por aquí, en Vistoria Subercaseux, vivieron mujeres destacadísimas
como Nilda Núñez del Prado, una estupenda mujer. Un día me la encuentro en
una exhibición de artesanías; yo estaba mirando un collar que decía ―Reina de
Saba‖. De pronto, ella tomó el collar y me dijo : ―Será suyo aunque yo lo use
esta noche; esta hecho de amatistas incas, y se lo voy a dar a usted, porque una
mujer, en sueños, me dijo: Dáselo a él.‖

Entonces, como le digo, esta zona y estas calles son muy importantes; el cerro
Santa Lucía, sin ir más lejos, es uno de los cuatro senos (―Huan mollu‖ en
mapudungun). Aquí llegó Don Pedro de Valdivia, el río Mapocho pasaba por
ambos lados rodeando este peñón. Este peñón era un contacto con el Tupahue o
Morada de Dios y con el San Cristóbal que recibe las energías del cerro El
Plomo, que es el cerro más alto de la Cordillera, que a su vez, recibe las energías
de los astros y, especialmente, de Venus. El Santa Lucía o Huelen (que significa
―dolor‖) toma éstas energías y las distribuye en este valle; esas energías
misteriosa de otro mundo es lo que vio Don Pedro de Valdivia, y por eso funda
Santiago aquí. Por eso debemos lograr que este barrio se mantenga.

- Apropósito, usted quería hacer un parque de estatuas en el cerro Santa Lucía.


- Y hay que hacerlo. Yo quería hacer estatuas, una especie de arte de la memoria
y poner ahí a Nicolás Palacios, traer a Vicente Huidobro para que descanse en la
iglesia de su abuelo, a Don Francisco de Encina, a Barros Arana, a su padre
[refiriéndose al padre de Armando Roa]. Tenemos que poner todas esas estatuas
aquí y lograr que este barrio sea un barrio peatonal.

- Saliéndonos un poco de Santiago, usted fue responsable de uno de los primeros


monumentos que se hicieron, en el mundo, a Ezra Pound, en Medinacelli.
- Y está ahí todavía... Está con aquella frase… Cuando conocí a Ezra Pound, él
vivía en la soledad de Venecia. Se había ido a vivir a un hotel. Un día se me
ocurre preguntar por él, pero una señora buena moza me dijo que él ya no
recibía a nadie. Luego, el dueño del hotel me aconsejó que fuera a ver al
mecenas de Pound. Bueno, entonces, pasé a saludarlo a un castillo que había
sido bombardeado y le pregunté si le podía entregar una carta. Él la tomó, la
leyó y me dijo: ―No, ésta carta tiene que entregarla usted mismo‖. Él fue a
hablar por teléfono, volvió y me dijo que volviera al otro día a tomar té.

Así, al otro día, lo conocí. Nos hicimos amigos, hablamos de los cátaros, pero él
hablaba muy poco, era todo silencio. Desde su ventana se veían los techos de
Venecia. Cuando bajé, me despedí de su señora, que leía todos los días el I-Chin
y que había traducido a Confucio, y ella me dijo que quería llevarlo a China para
ver si salía de su silencio mediante la acupuntura. Yo le dije que no, que no lo
llevara a China, que no permitiera que le hicieran acupuntura, porque era él
quien no quería hablar. Y de pronto, sentí unos pasos que bajaban por la
escalera. Era él. Me miró, me tomó las dos manos y me dijo: ―Así es, así es‖.

Luego me fui para volver dos semanas más tarde. Él ya estaba muy mal. Su
señora nos llevó a comer y después nos devolvimos caminando por la Plaza San
Marcos con éste poeta inmenso, tomados del brazo, y yo pensaba que la gente
quizás no tenía idea que por ahí iba pasando el más grande poeta de nuestro
tiempo.

Al otro día subí a su cuarto a despedirme. Le tomé las dos manos y le dije:
―Ánimo, en setecientos años más volveremos a perder‖. Él me apretó las manos
y me dijo: ―Mantente fiel a los viejos sueños para que el mundo no pierda la
esperanza‖.
Entonces, cuando yo le hice ese monumento en una roca de los montes
cantábricos, que los mineros trajeron, escribí con bronce esas últimas palabras.

Un mundo de dioses

- Mario Góngora hablaba de esta cultura hispánica del resentimiento, y acá leo
en su libro Ni por mar ni por tierra , con respecto al carácter del chileno: ―El
clima psicológico que envuelve a Chile es denso y trágico. Una fuerza
irresistible tira hacia el abismo e impide que ningún valor superior se destaque.
Ayudado por el ambiente, la callada hostilidad y la envidia, persiguen desde su
origen al alma superior, poniendo obstáculos y trampas a su paso. Todo aspira a
nivelarse en la miseria moral y en la derrota‖.
¿Qué piensa usted de este análisis tan descarnado?
- Probablemente sea porque estamos acercándonos al Kali Yuga , que es el final
de los tiempos. El clima está cambiando, ahora la fuerza de gravedad de la
Tierra está diminuyendo y eso significa que vamos cambiando. Pero, a pesar de
todo eso, el chileno siempre aspira a algo más. Antes, existieron los Onas, los
Selkman, la gente que habitó la Antártica y que, tal vez, todavía habiten ahí.
Ellos median más de dos metros. Los patagones, según los españoles, eran
gigantes. Esa gente venía, precisamente, de la Antártica, pero dejaron de venir
porque el rayo de luz blanca que caía sobre los hielos se perdió. Yo creo que
ellos todavía viven ahí. La mitología tiene una base real y una de misterio de
otro mundo.

- ¿Pero estos cambios afectan el clima espiritual del chileno?


- Sí, siente eso, y lo ha sentido desde siempre y vive en función de eso, y por lo
mismo, el chileno puede, como él solo en el mundo, producirse internamente. Lo
que Jung llamaba el ―Hombre Absoluto‖, o lo que Nietzsche llama el ―Súper
Hombre‖. Pero ya no hay tiempo, sin embargo hay que seguir hasta el final y
aquellos que se mantengan fieles a los viejos sueños son los únicos que podrán,
tal vez, retornar y tener una nueva oportunidad. Porque como decían los griegos,
después del Kali Yuga viene la Edad Solar.

- Hace un tiempo atrás, usted dijo en una entrevista que el hombre actual había
perdido el contacto con los dioses. Don Miguel, ¿cómo se recupera ese contacto:
orando, recordándolos o, simplemente, pidiéndoles su presencia?
- Es una pregunta muy interesante y muy difícil de responder. Yo creo que a los
dioses no se los busca. Los dioses están. No son concientes de ellos mismos,
como el ángel de la guarda no es conciente de él, sino del niño que vigila y
cuida. Los dioses son conscientes de nosotros, no de ellos mismos, pero puede
llegar un momento, en el contacto del hombre con ellos, donde éste logre
hacerlos bajar a la Tierra y venir aquí y, luego, hacer que ellos adquieran
conciencia de ellos mismos. Es como ese cristianismo mágico que se perdió;
Jesús decía: ―Yo y mi Padre somos una sola persona‖. Es decir, es el budismo,
es el fundirse, la fusión con Dios, la aspiración a fundirse con Dios. Jesús decía
eso, pero cuando lo crucificaron le dice al ladrón: ―No estés triste, porque esta
noche estaremos juntos a la diestra de mi Padre‖. Le dice eso, no ―Ya fundidos‖.
Es lo que Jung cuenta que, cuando está a punto de morir, hay una persona, un
ser reclinado y con las piernas cruzadas meditando, y él va a fundirse, pero uno
lucha para no perder su Yo . Entonces, vuelve a la vida y no muere.

Jung quiso mantener su Yo por siempre. Era fundir su Yo con el self. Llegar al
punto de ser un Hombre Absoluto, que está entre el conciente y el inconsciente.
Cuando se logra ese punto se adquiere conciencia de sí mismo y ya no se muere,
porque dicen que después de 43 horas, el cuerpo astral se desprende, el cuerpo
sutil y desaparece y viene la segunda muerte. Entonces el cuerpo físico y el alma
mueren, pero si se ha producido esa unión antes, el alma no muere, al contrario,
se lleva al cuerpo físico realizándose así la resurrección.

Entrevista aparecida en la Revista El Navegante, n°2, 2007.


Escuela de Literatura Abierta de la Universidad del Desarrollo
La fabricación del GOLEM.

Los Guerreros ya lo saben y no debieran olvidarlo nunca:


la lucha fundamental no es contra el judío, ni siquiera lo es contra Jehová. La
lucha es contra el Demiurgo, inventor de Jehová, que es el inventor del judío.
Suprema Ilusión es el Demiurgo, producto de Kaos, que se halla detrás de la
Nada.

El judío no es el punto crucial de las involuciones, que no se detendrán


con él. Ha inventado el Go/em y viene trabajando hace siglos en otra Máquina
terrible: el Mesías.

Un judío, al que se ha llamado "padre de la cibernética", Norbert


Wiener, escribió un libro titulado "God, Golem and Company" ("Dios, el Golem
y Compañía"). Insinúa que el hombre fue un robot de Dios que se volvió contra
su creador y lo aniquiló. Igual pasaría con los hombres, destruidos al final por
sus máquinas.

El sueño judío de la fabricación de un Go/em tiene ya milenios. En


Praga, en tiempos del Emperador alquimista, Rodolfo de Habsburgo, un rabino
pervierte la alquimia, utilizando el símbolo de la Resurrección del Arquetipo. El
mal se ha producido con el pensamiento racionalista y la dirección puramente
materialista que se le imprimiera a la ciencia, desde antes de Copérnico. Aún
utilizando el impulso creador del ario, el control viene a quedar en manos del
judío. Sus máquinas intentarán reemplazar los automatismos corporales,
haciéndonos creer que son puros procesos mecánicos, de "ingeniería biológica y
química", cuando en verdad han estado controlados por Dioses Atómicos, así
como la "mecánica celeste" la mantienen en función los Dioses Aiones,
esclavizados hoy por el Demiurgo.

He aquí algo diabólico, espantoso, una involución que ya parece im-


posible de poder detener. Estudiando las abejas, las hormigas, en especial la vida
-si así se pudiera llamar- de las termitas, nos espantamos pensando dónde podría
llegar el hombre, los animales-hombres, y junto con ellos los Viras prisioneros,
los Dioses involucionados. Allí se acabó toda individualidad y hasta la
inteligencia y libertad personales. Sólo hay trabajo continuo, reproducción y
muerte. Sacrificio obligado y miseria de muchos para la infelicidad de todos. Al
final, alimento del Demiurgo. Mas, ¿habrá sido siempre así en las termitas? Se
presiente también allí como una inteligencia inicial, que alguna vez fue, como
un primer impulso que planificó esa organización perfecta; tal vez de un solo
individuo, o de una elite, que luego desapareciera, perdurando nada más que el
automatismo. Es posible que las termitas, las hormigas, las abejas, en muchos
millones de años, en otros Manvantaras, hayan sido también Dioses, seres
divinos, hechos prisioneros por el Demiurgo, involucionando en lo que
actualmente son. Y sería posible que también los animales-hombres de hoy y
hasta los Viras aprisionados, los "traidores blancos", los arios colaboradores de
los judíos, sean transformados en hormigas antes de que este mismo Yuga
termine, reducidos en su tamaño físico, como ya lo imaginara el escritor judío
Kafka. Y al comenzar un nuevo Kalpa.

Entre las hormigas, entre las termitas, la inteligencia e


iniciativa individual es un crimen que se paga con la destrucción inmediata. En
las sociedades colectivistas marxistas se intentó alcanzar el mismo estadio. Un
film alemán genial, de los años treinta, "Metrópolis", trata este fatídico tema,
dándole una solución nacionalsocialista. Mas, el experimento marxista ya no es
necesario para sus creadores. Fue calcado del Kahal judío, donde los seres de
esa anti-raza son controlados desde que nacen hasta que se extinguen, dirigidos,
además, en su mecánica genética -o genética de la mecánica-. El burdo
experimento marxista de la Rusia sovietizada ha venido a perfeccionarse en el
más sutil control liberal-capitalista, con la cibernética, los computadores y los
cerebros electrónicos, lográndose en forma mucho más sofisticada el mismo fin
del marxismo, sin resistencia y sin casi ser notado. Es así que es posible que el
socialismo marxista-leninista desaparezca por completo, o bien se lo deje
únicamente para aquellas regiones subdesarrolladas del llamado "Tercer
Mundo", incluida América Central y del Sur, donde los esclavos no tendrán
escapatoria por ningún lado. El marxismo soviético ha entrado hoy en un
período de adaptación y endulzamiento a objeto de hacerlo más aceptable en
estas zonas, que ya han sido consideradas, en jerga militar, como "áreas de
abastecimiento y acarreo", productoras de materias primas y mano de obra
barata (1).

Por ser Jehová una máquina del Demiurgo y el judío una


máquina de Jehová, la cosa no se va a detener ahí. El judío está a punto de
inventar su Go/em, ponerlo en movimiento, al fin. En "Los Protocolos de los
Sabios de Sión" se nos habla del Mesías, del "Rey del Mundo" de los judíos, que
ellos preparan desde milenios. Julius Evola no cree mucho que éste sea un
proyecto judío, pensando en un agregado que tendría su origen en el sueño
templario de un Rey del Mundo, de estirpe sacra merovingia, que no
correspondería al estilo judío; habiendo sido intercalado en "Los Protocolos" por
masones, o por el "Priorato de Sión", que tuviera un común origen con los
templarios y luego se separa. "Los Protocolos" son firmados por un "Maestro del
Grado33".

Mas, no nos olvidemos que los judíos plagian. Aun cuando el


"Rey del Mundo" fuera un aporte de logias masónicas, con participación de
"traidores blancos" y de la Iglesia Católica judía, que aportará su Mesías judío,
Jesús, con el sueño de la Perúsia, de su retorno al final de los tiempos, que los
cristianos han tomado de la leyenda hindú de Kalki, los judíos se han in-
corporado también en el Mito mesiánico, con su Go/em.

Existiría, así, una pugna secreta al presente entre las logias


masónicas de "traidores blancos", las iglesias cristianas, la Iglesia Católica de
Roma y la logia puramente judía, "B'nai B'rith", más los rabinos de la Gran
Sinagoga, sobre quién y cómo sería el Mesías de Israel (que sea de Israel, no hay
discusión). Es posible que los primeros, incluyendo el Priorato de Sión, estén
por un Mesías tradicional, algún Rey degenerado inglés, español, o austriaco; o
bien, lo que es aún más siniestro, por la fabricación de un ser alquímico, con los
rasgos típicos de un judío, un humúncu/o in vitro, trabajado al presente en el
seno de las logias masónicas, con el aporte de los conocimientos secretos
existentes en las cámaras subterráneas del Vaticano y que esos judíos
disfrazados; la curia católica, robaran en dos milenios de saqueo universal.
Los judíos propiamente tales, entre los que se incluye a los
verdaderos dueños del capital internacional, los patrones de las altas finanzas y
de todo el sistema liberal-capitalista, como asimismo del comunismo marxista,
pensarían que el Mesías deberá ser el Go/em, un super Robot, un Cerebro
Electrónico, un Banco de Datos, de Empadronamiento Universal y de
transferencia de códigos informativos, de consumo, de capitales y de Poder, sin
un solo sentimiento, puramente racional, alimentado con la energía electrónica,
que es el "aliento de Satanás", del Aion Saturno, prisionero y corrompido, la
electricidad, el "electrón" que ese Go/em-Robot entrará a controlar y dirigir,
poniéndola totalmente a su servicio, como a la energía atómica y solar, para
gloria y alimento final del Demiurgo.

Sin embargo, se comprende que la pugna deba ser mayormente apa-


rente, otro fraude, ya que los "traidores blancos", las logias masónicas y las
iglesias cristianas y de todo tipo, tendrán que inclinarse ante la voluntad de los
dueños del capital y del poder real, los dueños de la "Kábala" y de la Magia
Negra, siniestra. La decisión final de los amos, los judíos, podría ya estar
tomada a favor del Mesías Electrónico, del Super-Robot Go/em.

Todas las organizaciones de tipo "mundialista", nacidas tras la pri-


mera y segunda guerras mundiales, que fueron guerras judías, están destinadas
al fin expuesto. La Sociedad de las Naciones, las Naciones Unidas, la
Conferencia de Bretton Woods, el Banco Mundial, el Fondo Monetario Inter-
nacional, los Bancos Centrales, la entera economía mundial, las transferencias
electrónicas de fondos, el gran computador existente en Luxemburgo,
destinado al control de estas operaciones planetarias, conjuntamente con los
sujetos que lo hacen posible, las crisis financieras mundiales, el reemplazo del
dinero papel y de plástico (tarjetas de crédito) por el dinero electrónico, la
capacidad de consumo señalada por signos eléctricos, por el "código de
barras", que a su vez será reemplazado por el tatuaje con láser, se dirigen a
implantar la sociedad de las hormigas, fin último demiúrgico, su "alimento"
ideal.

Sobre el dinero electrónico he tratado en mi trabajo "Nacionalsocia-


lismo, Única Solución para los Pueblos de América del Sur". La próxima crisis
mundial financiera debería estar destinada a la liquidación del dólar y, con él,
del "dinero-papel" y su reemplazo por otro símbolo judaico del poder, de
distribución del consumo, controlado y racionado por algún cerebro
electrónico, el verdadero Mesías de Judá.
Que el marxismo y el capitalismo han tendido al mismo fin, nadie
mejor que nosotros, los chilenos, podemos saberlo hoy. El gobierno marxista
de Salvador Allende expropió los campos; la dictadura militar de Pinochet, con
su liberalismo económico, su "monetarismo" y su "economía social de
mercado", los endeudó a la Banca usurera, de manera que la tierra ya no per-
tenece a sus dueños. Del mismo modo, el país se halla endeudado a la Banca
internacional, de forma tal que ya no se pertenece a sí mismo. Los resultados
son idénticos, porque detrás de ambos sistemas se halla un amo: el judío.

Ha sido éste un trabajo de milenios, desde que la astucia demiúrgica


inspirara esa arma de magia negra al judío: el interés de/ dinero (Ver el libro
"Contra la Usura"), que sólo pudo venir a ser anulada por la economía genial del
Hitlerismo, al reemplazar el patrón oro por el patrón trabajo, la fe y la voluntad
del hombre. Así se produjo el milagro. Todas las predicciones spenglerianas
sobre una decadencia irreversible de las civilizaciones, como ley orgánica-
mecanicista, tan favorables al interés del judío, ya que no tomaban en cuenta
para nada su conspiración destructora como factor fundamental de la
decadencia, fueron anuladas de una plumada por Hitler. La entropía del tiempo,
la gravedad, la inercia, fueron neutralizadas en la negentropía, nacida de la
Energía del Rayo, de la Runa Sieg, en la pureza de la sangre, en su Memoria
Odínica, y que el Fuhrer llamara el "Triunfo de la Voluntad".

Al igual que el psicoanálisis, la economía como ciencia no ha existido


jamás, siendo una invención, un arma del judío. Lo que existe solamente son la
voluntad y la fe del hombre capaz de proyectarlas. Todo lo otro es engaño. Lo
único que cuenta es el hombre y su trabajo creador. La imaginación creadora del
Vira, producto de su sangre pura, hiperbórica.

Así, Adolf Hitler logró revertir el proceso de la involución, para crear


el Superhombre. Y fue el Avatara que trajo a este mundo el Yuga de /os Héroes.
(2).

Como hemos dicho, el judío no puede llevar adelante su enorme cons-


piración sin la colaboración de los traidores no judíos, ya sea que la logre
voluntariamente o por la fuerza, por el "miedo a la miseria", como aconsejan
"Los Protocolos de los Sabios de Sión". Tampoco el Demiurgo puede hacer nada
sin los Dioses prisioneros y sin los "Angeles Neutrales". Así como los judíos
soviéticos y los judíos norteamericanos han necesitado de los sabios alemanes
hitleristas para sus inventos de postguerra, Jehová y sus judíos son incapaces de
realizar sus planes sin los "traidores blancos".

Desde siempre los rabinos, en sus sinagogas y en sus ghettos, vienen


practicando extraños rituales de magia negra, a los que incorporan conoci-
mientos robados de la Kábala aria, que transforman en Cábala judía, con el
objeto de manejar a los no judíos, obligándoles a colaborar en su planes de
dominación mundial. La fabricación del Go/em tendría esa finalidad, que hoy
amplían con sus robots y sus "ordenadores" electrónicos que van restando toda
iniciativa y capacidad individual inteligente a los humanos. Desde los años
veinte los judíos vienen trabajando con una máquina infernal, perfeccionándola
(algo de esto pudo verse también. en el film "Metrópolis", dónde se inventa un
robot, un Doppelgänger de un ser humano, además de la televisión) con la
utilización de partículas subatómicas, rayos "psicotrónicos" de ondas psíquicas,
electromagnéticas, como la luz y las microondas, destinadas a interferir o
insertarse en la actividad cerebral, cambiándola. Se podría "leer los
pensamientos" y también actuar sobre la mente-cerebro, dando una ―orden",
semejante a como el cerebro comanda a los órganos físicos, sin que nosotros
seamos conscientes de estos estímulos. Podríase ahora imaginar que esta
"máquina" dirige sus rayos en una frecuencia individual, en combinación con las
claves existentes en los códigos de rayas de las tarjetas de crédito y las claves de
las modernas cédulas de identidad, con el empadronamiento electrónico y hasta
con el código genético del individuo, o de todo un pueblo, que se pretende
manipular. Sabemos que los mormones, por ejemplo -que trabajan en
combinación con servicios de inteligencia de una gran potencia imperialista
judaica-, tienen empadronado a todo Chile, con la anuencia del Gobierno Militar
que nos controló por dieciséis años. Del mismo modo a cómo un órgano
obedece al cerebro, así el cerebro obedece a estos rayos, magnetizado,
hipnotizado por una voluntad mecánica, sin dejar huellas ni darse cuenta de lo
que sucede. La primera señal perceptible podría ser una leve sensación de mareo
y de sueño, luego la víctima dejará de notar algo más, perdiendo poco a poco su
claridad e independencia, sin ser consciente de que no es ya dueño de sus
pensamientos ni de sus actos. Los pensamientos le son extraídos, procesados y
vue/tos a co/ocar en su cerebro. El los "pensará" como propios, creyendo que
los produce; pero son pensamientos que han sido tergiversados y se hallan
dirigidos desde afuera, pensados por otro... por su Enemigo. Es de este modo
como se habrían conseguido las declaraciones de culpabilidad de Rudolf Höes,
el Comandante SS, que estuviera a cargo del Campo de Concentración de
Auschwitz. Hasta que logró "despertar" y se retractó. Lo mismo sucedió en los
grandes procesos de Stalin. Esos rayos también pueden ocasionar la enfermedad
y la muerte, sin que el crimen llegue a descubrirse. El hijo de Rudolf Hess sufre
un ataque cerebral un día antes de una conferencia de prensa, donde habría dado
a conocer los resultados de una segunda autopsia del cadáver de su padre, que
probaría su asesinato. A nivel colectivo, los efectos de esos rayos son también
letales, combinándose con los "mensajes subliminales" de la televisión, la
propaganda interesada y las drogas que facilitan el empleo de la sugestión en la
psiquis de las multitudes y que son introducidas en las bebidas y en la far-
macopea, que los judíos controlan mundialmente; hasta en los alimentos. Y era a
esto a lo que Rudolf Hess se refirió en sus extraordinarias declaraciones de la
Torre de Londres, repetidas en el Proceso de Nuremberg, sobre "hipnotismo a
distancia, facilitado por drogas". Los dirigentes y jefes de los gobiernos
mundiales, incluidos los que traicionaron en Alemania, estaban "hipnotizados",
según él.

La pérdida de la guerra en Vietnam, derrumbándose ese enorme poder


en sólo dos semanas; el caso de Watergate; la caída del Sha de Persia; la
increíblemente estúpida guerra entre Irán e Irak; la salida de Marcos, en las
Filipinas, y lo que hoy mismo está sucediendo en la Rusia Soviética y países del
Este europeo, más también la increíble pérdida del plebiscito por el General
Pinochet, en Chile, son demostraciones del trabajo de esa "Máquina" de
partículas subatómicas, de Rayos "T". Un plebiscito nunca se hace para perderlo.
Hitler los ganó todos, con un noventa y cinco por ciento de los votos a su favor.
Manejando esa "Máquina", los servicios de inteligencia de la "CIA" y del
"Mossad", desde la Embajada de los Estados Unidos en Santiago, desde una
sinagoga u otro lugar seguro y estratégico, "hipnotizaron" a Pinochet, a su
familia y a sus más cercanos colaboradores, incluido el mismo Ejército, para
convencerle de que ganaría el plebiscito, cuando era claro y visible que lo
perdería. El "superconductor" de esa energía hipnótica fue un judío instalado por
Pinochet (obligado a instalarlo, teledirigido) en el Ministerio más importante del
país, el de Planificación (ODEPLAN).

La "Máquina" se llamaría Takion, por los rayos "T", de partículas


subatómicas que proyecta y por el nombre de su descubridor, Nicolás Tesla. Es
más seguro que la idea sana y original habrá emanado de un no judío. Pero es un
arma de guerra terrible, también para ser usada en tiempos de paz aparente, de
efectos espantables, como se ha podido ver. Ella se está usando hoy de modo
permanente, para poder mantener vigente el tema del holocausto de seis
millones de judíos, que los no judíos, convenientemente trabajados e
hipnotizados, ya no discuten, dándolo por un hecho, junto con la existencia de
las "cámaras de gas", aunque se les pruebe lo contrario, como es el caso del
"Informe Leuchter", realizado por un grupo de ingenieros norteamericanos de la
más importante firma mundial de especialistas en la construcción de cámaras de
gas. Su conclusión es que nunca las hubo en Auschwitz, ni en ningún otro lugar
de Alemania. Pero los rayos "T" han logrado que se siga creyendo en su
existencia.

En mi ensayo sobre "Nietzsche y el Eterno Retorno", publicado hace ya


catorce años, me refería a esas partículas subatómicas, de cualidades fan-
tasmales, los "neutrinos", sin propiedades físicas ni carga eléctrica, ni masa; no
son atraídas por la gravedad, ni por un campo eléctrico ni magnético; pasan a
través de todo, del átomo y su núcleo. Han sido imaginadas por e/ investigador.
Pasan a través de nuestro cuerpo, como si fuéramos nosotros los que no
existimos, los imaginarios. Viajan a la velocidad de la luz y se originan, al
parecer, en la Vía Láctea, en las "gotas de leche de la Diosa Heras", allí
esparcidas, como lágrimas causadas por el Demiurgo. Cabe preguntarse:

¿Existirían también los "mindones" (de mind, mente, en inglés), partículas aún
más veloces que la luz, puro pensamiento ya, situación espiritua/ y que vendrían
a ser las partículas que la "Takion" apresa y procesa, para devolverlas luego a su
"hogar" circunstancial, la mente-cerebro de un individuo, un mero recipiente?

He aquí la corrupción de la ciencia quántica, descubierta por arios y


satanizada por los judíos.

Se ha inventado una "Máquina" diabólica. Sin las máquinas, el judío no


va a ninguna parte. Y con ellas, tampoco.
¿QUIENES FUERON LOS DRUIDAS?¿QUIENES FUERON LOS
DRUIDAS?

Así titulé un capítulo de "El Cordón Dorado, Hitlerismo Esotérico":

"¿Quié-nes fueron los Druidas?". No contesté allí la pregunta y no creo poderla

contestar aún hoy, con toda propiedad. Las mayores noticias sobre los Drui-das

las obtenemos de Julio César, en el relato que hace de sus campañas en las

Galias contra los celtas. Sus impresiones son contradictorias, pues junto con
expresarnos su admiración por los Druidas, "vestidos de túnicas blan­cas‖ , nos

cuenta también de sacrificios humanos y sangrientos, ofrendados a los Dioses.


No

hay interés en el romano, ni lo hubo jamás en los romanos, por desprestigiar o

calumniar a sus enemigos. Eran arios y, como tales, cul-tores de la verdad.

Los Druidas no eran celtas. ¿Quiénes eran? Más que sacerdotes fueron
consejeros

y directores de los gobiernos y las tribus celtas, omnipotentes, sabios y magos,

que junto a los bardos y los vates, que eran profetas y vi-dentes, guiaron la

vida plena y bella de ese pueblo de los bosques y los mon-tes. También los

celtas eran arios. Pero, ¿quiénes fueron los Druidas? El nombre mismo es un

misterio. Se le quiere hacer derivar del vocablo germano ―treu‖, leal, lealtad.

También, de la raíz aria vid, de la que resulta la palabra latina videre, ver,

"el que ve". En sánscrito, Rishi también es el que ve, que posee la visión. La

raíz vid, combinada con la partícula dru daría dru-vids, en gaélico draoi, es

decir, druida. Y la partícula su, en combinación con vids, produce saoi, o

sabio, en gaélico. De este modo el Druida vendría a ser el mismo Rishi ario de

la India védica.

Pero así y todo no nos deja satisfechos, especialmente si ponemos atención a

Julio César y a otros escritores e historiadores romanos y griegos.

Mi propia investigación de estos años, después de haber publicado "El Cordón

Dorado", me ha llevado a conclusiones que creo pueden aproxi-marse


mayormente a

la verdad. Sobre el mundo precristiano, pagano, se ha extendido un manto de

mentiras, silencio y falsificaciones premeditadas. Existe allí una antigüedad


espantable, por su misma antigüedad dorada, que desconocemos por completo
los

supervivientes de la era cristiana. Es así que en el "Misterio Druida"

deberíamos tener en cuenta dos tiempos y dos planos distintos y hasta opuestos.

Los Druidas más antiguos, los que estaban antes de que llegaran los celtas y que

no se llamaban druidas sino Godis, sacerdotes de los Godos, sabios de los


Godos,

de los Asen, o que llegaron con los celtas y fueron como los Rishis. Estos

conocían el secreto de la Edad de la Piedra, de los menhires, dólmenes y

cromleshes. Conocían el secreto de las Runas. Eran los Runwidar. Fueron luego

llamados Druidas. Y la verdad es que este término está lejos de convencerme en

la acepción que se le ha pretendido dar por los filólogos cristianos o

cristianizados; por lo menos, a todos los Druidas, los más antiguos de cuatro

mil años y los de tres mil años, más o menos. Cuando Julio César les conoció ya

se hallaban infiltrados, de seguro, por un mal endémico de la humanidad

semidivina post-hiperbórica.

Los primeros guías divinos de los celtas deberán confundirse con los Godis, los

Siddhas y en Irlanda (IR-landa, Tierra de la Runa IR, de los Muertos de

Hiperbórea) con los Asen y los Vanen, que en la mitología céltica pasan a ser

los divinos Tuatas de Dannan, o Pueblo de Dana, llega-dos de otros universos.

Eran, de seguro, hiperbóreos, de ciencia muy avan-zada, venidos tal vez del

Danubio (Danan), magos poderosos. Pasando los tiempos, decaen y son


derrotados

en una gran batalla por los milesios (Mile, "milisia"; ver mi "Resurrección del

Héroe"). Los Tuata de Dannan parten, entran en el mundo interior, en "la Tierra

Hueca", que pasará a ser el Sid irlandés (el "Purgatorio de San Patricio", de la
Irlanda cristianizada). Van a juntarse con sus antiguos congéneres de

Hiperbórea. Desde entonces habrá dos Irlandas, la terrestre, cristianizada,

catolizada hoy, y la Irlanda espiritual y secreta: Irim, la Tierra siempre Verde

(IR-im), la del Trébol de Oro de Cuatro Hojas, la del Rey Ar-thur, Ar-Thor,

Err-Thor, Senor Thor, Señor Ario (AR-yo). Aba-Alo, Aballon, Avalón, Isla de
las

Manzanas de Oro, donde el Rey Arturo será curado y resucitado por las Nornas,

las Walkirias. Y donde espera el tiempo del regreso a esta otra Irlanda, para

reconquistarla y redimirla, con el Poder del Gral, de la Piedra del Gral. Y con

la Espada Excalibur.

Queda así aclarado que antes de los Druidas estaban los míticos Tua-tas de

Dannan; es decir, los Asen, los Godi, los Siddhas (Sidi, o Sidhi). Al-guien les

ha dado luego el nombre de Druidas. Fue investigando el origen del término


Golem

que he venido a encontrar una posible luz en el mis-terio Druida, una

explicación para esa contradicción oscura que nos des-cubre Julio César.

Cayó en mis manos "La Crónica de Oera Linda", de los frisones, la que tradujera

y divulgara el Profesor Hermann Wirth, fundador del Instituto de Investigación

Especializada de las S.S., ―Ahnenerbe‖. Esta "Crónica" es el recuerdo,

transmitido de generación en generación, del hundimiento de Atland, de

Hiperbórea, y de las migraciones de los frisones en dirección de las tierras más

cálidas, hasta Grecia, al África del Norte y a la misma América. Antes han

conquistado Inglaterra, Albión, la Tierra Blanca, de los "Muertos de

Hiperbórea". Pero es en el norte de África donde encuentran a los Golen. La


semejanza con el nombre Golem es casi total. Eran sacerdotes de Sidón y los

frisones los apodan Triuweden, que quiere decir "los que no poseen la verdad‖,

"los que no dicen la verdad", "que no son la verdad" (la mentira orgánica).

Según algunos comentaristas de "La Crónica", es de este vocablo frisón del que

procedería el nombre de "Druida". Pues con los navegantes frisones, de regreso


a

las islas del norte; también van los Golen. Y lo seguirán haciendo con los

fenicios. Los Golen acos-tumbraban a robar niños y usaban a sus mujeres para

procrear con los frisones. Practicaban, además, rituales sangrientos y tomaban

alucinógenos, como los magiares. Una vez en Albión y en las Galias, se habrán

infiltrado en el grupo sacerdotal ―Gódico‖, pasando a ser esos "Druidas"

ambivalentes de Julio César, que sacrificaban seres humanos. Han estropeado el

culto puro de los verdaderos y más antiguos Druidas, que eran guerreros y
magos

blancos de Hiperbórea.

Y no sólo infiltrarán a la casta sacerdotal y de los sabios, sino, ade-más,

mestizarán al mismo pueblo celta, logrando que Albión, la "Tierra Blanca",

Engeland (Inglaterra), la "Tierra de Angeles", se transforme en Britain (B 'nai

B 'rith).

Hitler no quiso atacar a Albión, a Engeland, por ser resto de Hiper-bórea,

habitada por arios blancos. Y Rudolf Hess voló a Escocia, a entre-vistarse con

el Duque de Hamilton, de origen galés, un miembro de la

"Golden Dawn", al parecer. Ellos no sabían hasta qué punto la penetración de


los

Golen había transformado ese mundo. O quizás intentaron desespera-damente

recuperarlo. El gobierno inglés, su administración, su política, su economía, el


Establishment, se hallan controlados por ―Welshs Golinizados‖. Es decir, por los

Golen. Para poder ser rey de ―Great Britain‖ primero hay que ser Prince of

Wales, de Gales, de los Welshs.

El término ―Golen‖ derivaría de "galli" o "gauls", de los fenicios y de

"Galilea"; luego Gales, las Galias y hasta Galicia. Todas habitadas ya por los

―Druidas-Golen‖, durante las campañas de César, por Golens infiltrados entre


los

verdaderos Druidas, entre los antiguos Godis, los arios hiperbóreos, entre los

Bardos y los Vates. Los verdaderos videntes, primos hermanos de los Vates

romanos, de los que veían.

Son estos Golen, además, los que facilitan la entrada del cristianismo en esas

regiones y que propician la conversión de IR-land al catolicismo de Roma,

destruyendo su paganismo luminoso y su sabiduría hiperbórea .(1)

Y son los Reyes-Marinos frisones, sobrevivientes de la catástrofe de la

Hiperbórea polar, además de los fenicios, los que han facilitado la

infil-tración de los Golen en todo ese mundo bello y sano, pero ya náufrago y

mutilado.

Porque, ¿quiénes son los Golen? No es muy difícil responder a esta pregunta.

¿Quiénes pueden ser aquellos "que no dicen la verdad", "que no poseen la


verdad"

y que los frisones han llamado ―Triuweden‖? Son los mismos que Alfred
Rosenberg

define como expresión de la "mentira orgá-nica", los judíos, emigrados como

parásitos de los arios hiperbóreos, tras la destrucción de la civilización

post-hiperbórica del Gobi, tal como nos lo explicara el profesor Hermann Wirth,

hace ya años, en su casa de Alemania, en la vecindad de Holanda: "Los judíos


eran un grupo de Sheidims, escla-vos "intocables" en la alta civilización del

Gobi. Roban y se apropian las tradiciones de sus amos, en ese gran Éxodo de los

semidivinos, del verda-dero "Pueblo de los Dioses", de las "Doce Tribus

Germánicas", y las pla-gian. Así llegarán, tras milenios, hasta el Asia Menor,

donde, archimezclados, pasarán a ser los Golen, esos extraños sacerdotes de

Sidón, de la "Crónica de Oera-Linda". Serán conocidos después como Levitas.

Y es extraordinario poder enterarse en la historia del rabino Low, del siglo

XVII, en Praga, que éste ha inventado un muñeco mecánico , un robot, al que ha

dado el nombre de Golem, casi idéntico a Golen, que los frisones encuentran
hace

cuatro mil quinientos años en Asia Menor.

Muñecos genéticos los Golen. Un muñeco mecánico el Golem. Es el reino


de

la Magia Negra y de1

espanto.

Y será otro Rey-Marino frisón, de nombre Inka, quien zarpa desde España,
donde

también han

penetrado los Golen. Va en dirección de Occi-dente, la América actual. Lo


cuenta

la "Crónica de Oera-Linda". Inka va en busca de tierras más puras, donde él

conoce que ya se encuentran hi-perbóreos blancos. Pero ese Rey-Marino no sabe

que él también lleva con-sigo el microbio de la descomposición y de la muerte:

los Golen. Y serán éstos quienes introduzcan entre los que allí se hallan los

sacrificios humanos y las orgías de sangre que, en el transcurso de los tiempos,

harán que el Dios Blanco, Quetzalcóatl, abandone a los aztecas y, al igual que
los Tuatas de Dannan, entre en la Tierra Hueca y desaparezca en las Ciudades

Ocultas, en el Sid, en el Muspelheim, en los Oasis de la Antártica. Allí donde

ahora también se encuentra Adolf Hitler, con su Último Batallón, con su horda

Furiosa, a la espera del retomo y la reconquista.

(1) Así como para el mundo anglosajón es difícil comprender, por

desconocimiento, el problema de los "marranos", del mundo hispánico, del


mismo

modo a este lado del mundo se desconoce totalmente el problema de los


llamados

"Welshs". Son en verdad éstos los judíos, aparentemente conversos, entrados a

Irlanda, a inglaterra, con los frisones y con los fenicios, son los "judíos

frisones" y "judíos fenicios", son los "marranos" anglosajones, los Golen

infiltrados entre los celtas y los Druidas que, con la llegada de los Tudores,

toman el poder en Inglaterra. Y, por dos mil años han estado librando una guerra

de destrucción en contra de los verdaderos celtas y los germanos. El llamado

"British Establishment" es su creación y los representa (de ahí salieron to-dos

los traidores marxistas, del grupo de Cambridge). Desde que Henry VII se une a

los judíos holandeses y mediterráneos, la alianza de los Golen y el judaísmo

internacional ha sido establecida, o restablecida. El desconocimiento de estos

hechos ha sido fatal, especialmente en la última Gran Guerra. Se creyó y se cree

que Inglaterra es un bastión de la raza blanca, cuando en verdad es el centro de

la gran conspiración contra los arios. Los vemos hoy intentando nuevamente

iniciar la secreta guerra en contra de cualquier resurgimiento (hipotético) de

Alemania y de Europa. Desde la expulsión de los judíos de España, Great


Britain
es criminalmente antiespañola.

“Cuando los niños nazcan con los ojos abiertos,

se aproximará el fin del mundo”.

Hesíodo
A los que luchan hasta el final,

sin esperar nada,

sólo porque su honor

se llama lealtad.

A los que nacieron

junto al fin del mundo,

en el Kaliyuga.

Y a mi perro Thor,

que nació y murió perro,

porque su honor también

se llamaba lealtad.

Miguel Serrano

Valparaíso

12 de Enero

del Año 113


LA CATASTROFE

Hoy es el día 25 de diciembre del año 2002, de la Era Judeo-Cristiana. Los


católicos celebran el nacimiento de un Niño-Dios, al que llaman Jesús y que será
luego el ―Kristos‖. Por casi veinte siglos esto se ha venido imponiendo,
insistiendo, creyendo. Para los que nacieron y vivieron en esta creencia,
parecería imposible pensar que no fue cierto, que nada de esto sucedió, que ese
edificio-templo milenario se construyó sobre una mentira cuidadosamente
elaborada en sus comienzos y luego modificada y proyectada por el Arquetipo.

Y es precisamente ahora, después de dos mil años de haber impuesto al mundo


ario de Occidente el más terrible sentido de culpa por el asesinato de un
―Hombre-Dios‖ y, en su nombre, haber destruido viejas culturas y civilizaciones
paganas, aquí en América y en todo el Orbe, que esos mismos manipuladores,
que esclavizaron el alma de casi toda la tierra, anuncian que nada fue cierto,
porque los fundamentos de esa historia, de ese ―cuento‖, nunca existieron. Y
para ello se apoyan en las investigaciones arqueológicas y antropológicas más
recientes.

Ni Abraham, ni Moisés vivieron de verdad; ni David y Salomón fueron reyes.


Jamás hubo cautiverio en Egipto, mucho menos existió el cruce del Mar Rojo, ni
el derrumbe de las murallas de Jericó. Es decir, todo el Antiguo Testamento es
una invención, o una falsificación. No hubo doce tribus de Israel, ni nada
semejante. Ahora bien, si el Antiguo Testamento es un cuento, una historia
imaginada, el Nuevo Testamento, los Evangelios –que por fundamento tienen el
Antiguo-, también lo son. Si no existió Abraham, ni Moisés, ni las Tablas de la
Ley, ni los Diez Mandamientos, menos habrán existido José, María ni Jesús de
Nazareth. Los evangelistas fueron los autores de una ―telenovela‖, como se diría
hoy; o bien, unos hábiles ―políticos‖, conspirando para derrumbar los imperios
egipcio, persa y romano, pudiendo así imponer una minoría, una tribu como de
gitanos, sobre el resto de los ―animales de dos patas‖, valiéndose de la astucia y
la mentira.
LOS RABINOS

Nos cuenta la prensa que la Sinagoga Unificada al Judaísmo Conservador de los


Estados Unidos de América, en un documento oficial, cuestiona las
aseveraciones del Antiguo Testamento. David Lieber, de la Universidad Judía de
Los Angeles, en una publicación llamada Etz Hayim (―Arbol de la Vida‖),
basada en los últimos descubrimientos arqueológicos, filológicos y
antropológicos, cambia la versión de la Biblia, página por página, y da a conocer
cuarenta y un ensayos de rabinos y académicos sobre los pergaminos de la Tora.
Lee Levine, un profesor de la Universidad Hebrea de Jerusalén, declara que no
existen documentos egipcios que se refieran al cautiverio de los judíos y que el
Exodo nunca se llevo a efecto, ni la conquista de Canaan, ni una Jerusalén de
David y Salomón. Por su parte, Robert Wexler, Presidente de la Universidad del
Judaísmo de Los Angeles, autor de Mitología del Cercano Oriente, sostiene que
el Génesis no nace en Palestina, pudiendo tener su origen en Mesopotamia (hoy
Irak) y en la epopeya de ―Gilgamesh‖. Así, tampoco nunca existió Noé.

A todo esto también ha hecho referencia The New York Times, en un artículo de
Michael Massing, del 13 de marzo del 2002. Asimismo, un periódico de Canadá
publicó, en 1988, una crónica de Eliezer Oren, de la universidad Ben Gurión,
declarando que las excavaciones realizadas en ochenta sitios de Jerusalén
contradicen las afirmaciones de la Biblia. Y en Der Spiegel, de Alemania, en
tres páginas, aparecidas en junio de 1987, se llega a la conclusión que los libros
de Moisés son de ―ciencia ficción‖.

Podríamos continuar dando nombres de autores y de publicaciones sobre este


tema extraordinario que, sin embargo, pareciera haber pasado desapercibido
para la mayoría de la gente, aunque no así, de seguro, para una minoría de
estudiosos y una élite de gobernantes, que sustentan el poder en el mundo y que
son los que en verdad cuentan.

Tengo la esperanza de que alguien que lea estas líneas, y para quien estoy
haciendo el esfuerzo de escribirlas, comprenda la inmensa gravedad de lo
sucedido. Por cerca de dos mil años se ha mantenido al mundo viviendo,
soñando, sufriendo, gozando, matando y muriendo, construyendo sus vidas y sus
muertes sobre una mentira, sobre algo que no existió nunca, sobre una leyenda y
un mito cuidadosamente elaborados. Y ahora, de pronto, los mismos que la
inventaron y sostuvieron en el tiempo, de la noche a la mañana declaran que
todo eso no existió, que fue falso. ¿Qué los ha llevado a producir esta catástrofe,
casi simultánea y mucho peor que el derrumbe de las Torres Gemelas de Nueva
York?

Se piensa que las investigaciones científicas de los arqueólogos y antropólogos


del Medio Oriente puedan haber inducido a los rabinos a apoyarlos con sus
declaraciones para no aparecer contrariando irracionalmente las afirmaciones de
la ciencia. Sin embargo, no nos parece creíble, pues, con el enorme poder en sus
manos, bien podrían rebatir esos argumentos arqueológicos, ignorarlos y hasta
hacerlos desaparecer, como en los siglos del pasado, con otras certezas. ¡No!
¡Aquí hay algo más, mucho más terrible y tenebroso!
LA FIESTA SANGRIENTA JUDÍA DEL PURIMLA FIESTA SANGRIENTA
JUDÍA DEL PURIM

"¡Hoy los judíos celebran su Fiesta de Purim en Nürenberg...!"

(Palabras de Julius Streicher, al ser ahorcado en el Juicio de Nürenberg, en

1946.)

Gracias a la influencia de la judía Esther sobre el rey persa

Asuero, el Primer Ministro Amán, antijudío, fue ejecutado con sus diez hijos, y

se nombró en su reemplazo al pariente de Esther, Mardoqueo. "Pero la santa

Esther no quedó todavía satisfecha y consiguió que el rey enviara carta sellada

a todos los gobernadores ordenando que en cada ciudad fuesen a estar con los

judíos y les mandasen juntarse todos a una, y estuviesen apercibidos para

defender sus vidas, y matasen y exterminasen a todos sus enemigos con sus

mujeres e hijos, y todas sus casas, y que saqueasen sus despojos... Con esto,

los judíos hicieron un gran estrago en sus enemigos... Porque aún los jueces de

las pro-vincias y los gobernadores y procuradores, y todos los de alguna

dignidad que en cada lugar dirigían la administración, ensalzaban a los judíos

por temor a Mardoqueo... En la misma Susa mataron a quinientos hombres sin

contar los diez hijos de Amán... Y del mismo modo en todas las provincias en

tanto número que llegó a setenta y cinco mil el de los muertos... Y el día 13

del mes de Adar fue el primero de la matanza en todas partes, y el día 14 del
mes de Adar terminaron de matar (como en Sabra y Chatila), cuyo día
instituyeron

que fuese solemne, y que en los tiempos venideros siempre se celebrase con

banquetes y convites... Y desde entonces estos días se llamaron de Purim, o sea,

de las suertes..."

Este repulsivo Libro de Esther, que exalta y bendice el crimen, ha

sido declarado canónico por la Iglesia cristiana y católica de Roma.¿Se necesita

una prueba mayor para demostrar su cripto-judaismo? Pero fue sólo un crimen

ritual más, ofrendado a Jehová. Las dos Guerras Mundiales han sido otros.

Nürenberg, Sabra y Chatila, Katyn, los millones de campe-sinos rusos, Dresden,

etcétera. Y el asesinato de Rudolf Hess... Y la matanza de los nazistas chilenos

el 5 de septiembre de 1938... La fiesta de Purim no sólo se celebra con convites

y banquetes, sino, y sobre todo, con el derrama-miento de la sangre de los

goim...

¿Es que los arios, los no judíos, se encuentran ya tan hipnotizados, tan

verdaderamente animalizados que no leen, o que son incapaces de comprender o


de

retener lo que leen? ¿Es que no han leído la Biblia? ¿Es que no conocen el

Talmud? Allí se exalta el crimen y el odio más fanático y radical del judío por

el no judío, predicándose su esclavización, su explo-tación y su exterminio.

"Los Protocolos de los Sabios de Sión" no son más que una pobre repetición y

adaptación a nuestro tiempo de lo expuesto en la Biblia y en el Talmud, además

de otros centenares de escritos judíos contemporáneos.

El judío cuenta con la cobardía y comodidad de los no judíos, para terminar de

una vez con ellos, o para esclavizarlos para siempre.


Sí, los no judíos son ignorantes, porque no estudian, no leen, y si leen y

estudian son cómodos, porque se olvidan, y si no se olvidan, son cobardes,

porque prefieren olvidarse, o no creer.

El Talmud, en el "Baba Mezia", dice:

"Vosotros, judíos, sois llamados hombres, mientras que las naciones del mundo
no

merecen el nombre de hombres, sino de bestias.‖

Y en verdad, parece que así lo fueran.

Y el Zohar.

"Los pueblos gentiles (no judíos) constituyen el prepucio del género humano,
que

hay que cortar...‖

El Schulkhan Arukh, del rabino Josef Caro, prescribe:

"Un kohen (sacerdote judío) no debe casarse con una ramera.. ¿Qué es una
ramera?

Cualquier mujer no judía.."

"El no judío es una basura, un excremento."

Ya lo hemos dicho: Nicolás Palacios, nuestro investigador y pensa-dor afirmaba,

en su libro "Raza Chilena", que "cuando el judío habla de amor a la humanidad,

hasta las piedras se sonríen". Este gran escritor, sobre el que se ha hecho

nuevamente el silencio, debe haber conocido bien los textos judíos más
modernos,

que escriben:

"La hipocrecía está permitida cuando el judío la necesite, o cuando tenga

motivos de temor. Puede decir al no judío que le ama...‖


Pero el Papa Wojtyla declara que los judíos "son sus hermanos ma-yores".
Querría

decir que a los cristianos también, durante veinte siglos, les ha estado

permitido ser hipócritas y decir que Cristo nos ama y que ellos aman a la

humanidad...

El famoso Maimónides afirmaba:

―Dios ha ordenado practicar la usura con los no judíos y prestarles dinero

solamente cuando paguen intereses, de manera tal que nosotros jamás le demos

ayuda, creándole toda clase de dificultades, aun cuando él nos sea útil y nos

preste favores..."

Reveladora declaración para los deudores del tercer Mundo y para los préstamos

de la banca judía internacional.

La legislación Hadra, o Sanhedrín, dispone:

"Está prohibido prestar sin usura a los no judíos."

"Al que encuentre un objeto perdido por un gentil, le está prohibi-do

devolverlo; debe quedarse con él"

Al leer estos preceptos, que el judío debe cumplir y cumple bajo grandes penas y

castigos si no lo hiciere, se comprende bien la siguiente otra disposición del

"Hadra", o Sanhedrín.-

"Un no judío que estudie el 'Talmud' y un judío que le ayude deben ser

condenados a muerte."

Y el "Schulkhan Arukh", repite:

"Un goim que se ocupe de la 'Torah', debe morir."

Se entiende, entonces, que Julius Streicher, que no perteneció a las S.S., ni

tuvo participación alguna oficial durante el Gobierno Nacionalsocia-lista del


Tercer Reich y solamente editaba su revista de estudios de los textos judíos,

dando a conocer su conspiración internacional y los peligros inmen-sos que

acechan a los no judíos ciegos, fuera juzgado y condenado al suplicio en

Nürenberg. Por eso gritó, junto a la horca: ―¡Hoy es fiesta de Purim!".. Porque

él sabía...

Los mismos judíos lo dicen:

"Si los goím supieran lo que estamos tramando en contra de ellos, nos

matarían...

Lo saben, pero no hacen nada. Van al matadero judío, donde serán desangrados,

como a sus reses, con la cabeza baja, como los bueyes y las bestias que semejan

ser, en que se han convertido, para aceptar gustosos el sacrificio al

Golem-Drácula-Jehová.

Lo declara el Jalkut Simeoni ad Pentateucum:

"El que hace correr sangre de los no judíos, ofrece un sacrificio a Dios.,'

Las revoluciones y las guerras que ellos provocan, Sabra, Chatila, Nürenberg,

Rudolf Hess... Sacrificios colectivos, crímenes rituales, también degollamientos

individuales, en todo el mundo. Y en Chile.

Contra esta monstruosidad se levantó el Führer, Adolf Hitler, y vino a combatir

el Ultimo Avatara. Contra esto aún estamos combatiendo sus seguidores.

La mente aria acepta con mucha dificultad que puedan existir seres en la tierra

con instintos sadísticos capaces de efectuar sacrificios humanos rituales. Ello

porque los arios carecen de semejantes instintos. No llegarán casi nunca a

entender que el judío es diferente en su constitución misma. No es el Talmud o

la Torah los que han hecho al judío, a pesar de todo, sino el judío que ha sido
capaz de escribirlos.

Los crímenes rituales han sido probados históricamente, siendo ellos la

principal causa eficiente de las expulsiones de los judíos desde Inglaterra, por

el Rey Eduardo I, en 1290; en España, en 1492, por el asesinato del "niño de la

Guarda". Los principales crímenes rituales se realizan para la festividad de

Purim, en conmemoración de la matanza de Esther. Por lo general se sacrifica


un

goim ario, de raza pura y "su sangre se mezclará con panes y pasteles, algunos

en forma de orejas, semejantes a las de Amán", los que se comerán en la Pascua

del Passad, donde, de preferencia, se sacrifica a un niño ario y se le desangra.

Dice Arnold S. Leese, en su libro ―Jewish Ritual Murder‖, que los sacrificios

humanos judíos encuentran su origen en las prácticas mágicas de pueblos


oscuros

primitivos, armenoides y también africanos, con los que se hayan mezclados,

basados en la creencia de que todo ser viviente es un centro de energía,

variando su intensidad según sea su tamaño, valor, salud y pureza, su carácter y

su integridad moral (imaginémonos lo que para ellos sería Rudolf Hess). Al


matar

violentamente a un animal, se libera una ener-gía y, si se hace dentro de un

círculo o triángulo, se impide que se escape o volatilice. "Tratándose de un ser

humano, se preferirá la fuerza más alta y pura, un niño hombre, inocente y con

mente limpia. La sangre es el recep-táculo de las virtudes. Por ello hay que

beberla."

En tiempos históricos, son los judíos Chassidim de Polonia los más apegados a

estos rituales mágicos, que hacen pasar por "misticismo". Y no será coincidencia

que en Polonia se haya llevado a cabo la matanza orgiástica de Katyn durante la


Segunda Guerra Mundial. Eran oficiales nobles.

A diario, en los mataderos especiales, que mantienen los judíos, se sacrifican

animales, desangrándolos vivos, con un corte de oreja a oreja. Y no existe, por

supuesto, ninguna Sociedad Protectora de Animales que se preocupe de esto.

El hijo del Coronel Lindberg, famoso héroe y aviador norteamerica-no, fue

raptado el 10 de marzo de 1932 y la fiesta de Purim debía celebrarse el 22 de

marzo. Lindberg estuvo siempre convencido de que su hijo había sido raptado y

asesinado por los judíos. La policía apuntó siempre en direc-ción de una banda

judía dirigida por un tal Fleischer. Como siempre, se en-contró culpable a otro,

a un alemán de apellidó Hauptmann y se le ajustició sin evidencias mayores. La

verdad es que el padre de Lindberg habíase opues-to a la fundación del "Federal

Reserve Banking System", propuesto por poderosos intereses judíos. De este


modo,

la venganza se centró en su nieto, de sangre aria, germánica.

Ninguno de estos datos son invenciones nuestras. Nos remitimos a fuentes

inglesas más antiguas, como al libro del famoso explorador y orien-talista

inglés del siglo pasado, Sir Richard Burton, quien estudiara dedica-damente el

Talmud, revelando las verdaderas apreciaciones de los judíos sobre los gentiles.

Su libro se titula "The Jew, the Gypsy and The Islam" y fue publicado por W.H.

Wilkins y Messrs. Hutchinson, en 1898.

El libro, poco antes citado, de Arnold S. Leese, sobre los crímenes rituales

judíos, termina de este modo impresionante:

"¿Es acaso alguna forma de hipnotismo colectivo y de masa lo que hace que los

pueblos arios acepten, consciente o inconscientemente, una to-tal subordinación

mental y espiritual a la influencia judía? ¿Es esto caba-lístico?"


"No puedo responder a esta pregunta", agrega, "pero no encuentro otra

explicación para el total rechazo por parte de influyentes ingleses a todos los

que tienen el valor de denunciar y mantenerse firme en sus con-vicciones de que

los judíos son responsables de crímenes rituales de no judíos. Yo he sido

víctima de una ola de insultos y de ataques ante los cua-les no tengo más

defensa que las pruebas dadas en mi libro. Sólo puedo pedir a aquellos que se

sienten obligados a tomar partido en una campaña en contra de quienes ellos

llaman erróneamente "antisemitas", que reflexio-nen y se pregunten a sí mismos

si son mentalmente libres en verdad, o si están siendo manipulados

inconscientemente por fuerzas masónicas y publi-caciones judías..."

Ya en 1938, un escritor y luchador inglés estaba descubriendo el tra-bajo de las

fuerzas hipnóticas psicotrónicas, de los "Rayos T", que los ju-díos venían

aplicando, desde la Primera Guerra Mundial, sobre los no judíos y cuya central

conspirativa se hallaba precisamente en Great Britain, desde que los ―judíos

Welsches‖ se apoderaran de todos los centros de control de la Albión mítica y

desde que los "Druidas" infiltrados realizaran también sacrificios humanos y

trabajaran con la magia negra en el control de las mentes de los sajones, de los

arios. Instaurando el inamovible e impenetrable Establishment.

Pocos años después, también vino a descubrirlo Rudolf Hess, en su prisión de la

Torre de Londres, haciendo esa sensacional declaración sobre el uso de drogas

para aplicar el "hipnotismo a distancia".

¡Rudolf Hess, otra víctima de "Purim"!

Miguel Serrano o los Gigantes


El Mito Antártico adquiere fuerza incontenible en la literatura del poeta, escritor
y viajero Miguel Serrano, creador de textos mágicos como Ni por Mar ni por
Tierra, La.Serpiente del Paraíso, Quién Llama en los Hielos, El Círculo
Hermético, Elella-Ellael. Libro del Amor Mágico, El cordón Dorado, Nietzsche
y la Danza de Siva y Las Visitas de la Reina de Saba, con prólogo de C. G. Jung.

Dicen relación con la Antártica dos de sus más interesantes trabajos: La


Antártica y otros Mitos, Santiago, 1948 y Quién llama en los Hielos, Santiago,
1957.

El primero de ellos es la transcripción de una serie de conferencias dictadas en


Chile por el autor y ex diplomático. Su portada es reveladora: un dibujo de un
gigante bicorne y alado emergiendo de las blancas nieves y portando un tridente.
Desde el comienzo, Serrano hace gala del sincronismo que mantiene con Poe.

El tema de estas conferencias es el Mito en relación con la Antártica, y nos


damos cuenta que el encabezado del texto, tal cual dice Erwin Robertson,
señala que «la Antártica es un mito» Serrano vinculará numerosas leyendas en
relación al tema que nos interesa : los bellos relatos de los onas (antiguos
habitantes de Tierra del Fuego), la leyenda de la Virgen de los Hielos, el
continente Lemuria, el gigante de Poe y, aún, la osada idea que el gran avatar
Adolf Hitler yace en el frío Antártico. Y aunque a simple vista parezca no existir
relación alguna entre cada una de éstas; la hay, puesto que todas estas leyendas
se refieren a los misteriosos moradores de la Antártica. He aquí otro punto
donde confluye el pensamiento de estos tres autores. Serrano conoce el relato de
Poe y señala en relación al Gigante Blanco: «Es que Poe conocía la leyenda de
los sélcnam sobre los Jon que habitan la Isla Blanca.»" «¿O sabía también del
Prisionero de la Antártica, que vive en su fondo negro, y que seguramente por
esto mismo se ve blanco?»"

Para entender quiénes eran los Jon y a qué se refiere Serrano cuando habla de
Isla Blanca, se recomienda leer la página 25 de La Antártica y Otros Mitos,
donde explica que los antiguos onas (los sélcnam eran sólo una tribu ona) creían
en la existencia de los Jon: humanos de casta aristocrática dotados de facultades
sobrenaturales y poseedores de los Misterios. «Fueron los Jon, magos sélcnam
de la Tierra del Fuego, los que conservaron los secretos enseñados por Quenós y
los que aun se inmortalizan embalsamándose dentro de los hielos del sur, para
resucitar renovados en el más lejano futuro. Dicen también los sélcnarn, que es
en el Sur, allá, en esa "Isla Blanca que está en el Cielo" donde moran los
espíritus de sus antepasados, haciendo una vida libre de preocupaciones.»"
¿,Serán estos espíritus ancestrales Los Antiguos, mencionados por Lovecraft?
Será la Antártica aquella Isla Blanca de la que hablaban las viejas leyendas
onas?
Serrano, quien fue uno de los primeros chilenos en conocer la región antártico,
da cuenta de la relación entre ese lugar y la locura" Y señalamos, por nuestra
parte, que el título de la inolvidable novela de Lovecraft, En las Montañas de la
Locura no se debe a un capricho o a una ocurrencia ingeniosa para llamar la
atención de algunos lectores afiebrados. Serrano dirá que la única vía para
comprender esta realidad súrica, o mejor, para salvarse de la locura que allí
acecha, es el Sueño. Y el mundo de los sueños es un elemento clásico de la
narrativa de H. P. Lovecraft.

La inquietante posibilidad de que exista una entidad no humana en la Antártica,


se registra también en la páginas del texto del autor chileno. El sincronismo
entre estos dos escritores nos deja asombra, sobre todo porque Miguel Serrano
desconocía la obra de Lovecraft cuando escribió La Antártica y otros Mitos.
Citemos, entonces, a Serrano, quien con su arte nos recuerda a los viejos
alquimistas: «Sin embargo, en ese continente del reposo y de la muerte alguien
vive. Un prisionero se agita, teniendo por medio habitable el fuego ardiente y
eterno. » Esta idea de Serrano se plasma también en otro texto del mismo autor:
Quien llama en los Hielos. He aquí un párrafo de belleza terrible: «Yo he visto a
ese ser, a ese Ángel negro: ahí, en su recinto del Polo Sur. Es en una inmensa
cavidad oscura donde reside... Espacios enormes, sin límites, livianos y
deprimentes a la vez, que se extienden, con seguridad, por el interior psíquico de
la tierra, debajo de los hielos eternos. Y así se mueve el Zinoc... Asciende o
desciende, hasta el extremo de esa cavidad y, desde ahí, se arroja a una
velocidad vertiginosa en demanda de su otro extremo, de su final inalcanzable.
Toda la eternidad lo ha pasado en este esfuerzo. cayendo de cabeza, tratando de
alcanzar el lugar antipódico del que ha sido proscrito en el comienzo mismo de
la creación. El norte es su sueño, su anhelar profundo y su mayor sufrimiento. »
Lovecraft, por su parte, en su novela escribirá algo revelador: «Se fundaron
nuevas ciudades terrestres. las más importantes de ellas en el Antártico, ya que
aquella región. escenario de su llegada, era sagrada. A partir de entonces, el
Antártico fue como antes el centro de la civilización de los Antiguos, y todas las
ciudades construidas allí por la prole de Cthulhu fueron destruidas . » Más
adelante, el narrador de la novela de Lovecraft indicará que los mapas
encontrados en la vieja ciudad polar muestran que las ciudades de los Antiguos
en la época pliocénica se hallaban en su totalidad Por debajo del paralelo 50 de
latitud sur .21 Estas referencias de ambos autores son fundamentales, porque nos
indican la oposición simbólica entre Polo Norte (o la mítica Hiperbórea) y Polo
Sur , sede de los Antiguos. Esta oposición no responde solamente a una
diferencia de carácter geográfico, sino que, ante todo, a diferencias espirituales.
En efecto, el Polo Norte es el polo positivo -en términos cristianos, el Bien- y el
Polo Sur -desde la misma perspectiva, el Mal-. Sin embargo, estos opuestos,
conforme a los principios de la filosofía maniquea, se complementan. Ambos
polos mantienen el Orden en la Tierra, regulan el buen funcionamiento
energético de nuestro mundo. La única posible diferencia dice relación con el
tipo de energía que irradian dichos lugares, pues en verdad son centros
energéticos. Este conocimiento que se expresa a través de la literatura moderna
(Lovecraft y Serrano), que diferencia los centros volitivos terrestres, concuerda
punto por punto con el pensamiento antigiío o tradicional que enseñaron los
maestros indoeuropeos, para quienes las palabras que nombran a los distintos
lugares sagrados son: Cielo, Tierra o Mundo Medio e Infierno. El Cielo, para
ellos, es la morada de los héroes, aquellos que vivieron la vida tal como se debe,
y corresponde a Hiperbórea o nuestro Polo Norte; la Tierra es el lugar habitado o
terreno de expediciones y viajes, ellos la identificaban con Asia y Europa. El
Infierno, que era el lugar de los demonios -los Antiguos y los Shoggoths- parece
no haber sido descrito y ubicado con tanto detalle y precisión por los antiguos
sabios indoeuropeos. Este Infierno es para nosotros el Polo Sur.

En Quien llama en los Hielos, Serrano relata un sueño, en el cual un misterioso


ser le dice: «La inmortalidad se logra entre los hielos -me respondió- y se
consigue helándose. No soy nadie, ni nada puedo hacer ahora. Tu gran combate
será con el Ángel de Sombras.»" Serrano destaca sobre todo los mitos onas en
sus conferencias sobre los Mitos de la Antártica, para proporcionarnos una clave
para descifrar los escondidos arcanos: «Fue Quenós quien empezó a crear la
tierra, de arriba abajo. Pero antes, con arcilla blanca modeló a los Hohuen, seres
gigantescos y trasparentes como ángeles. Apenas creados, los Hohuen
comenzaron a luchar entre ellos. Sin embargo, no podían morir. » He aquí los
mismos rasgos arquetfpicos de los Antiguos lovecraftianos: gran tamaño,
poderosos, belicosos, no-humanos e inmortales. La mitología ona señala que los
Hohuen (nuestros Antiguos) fueron creados con hielo. Esto, en verdad, señala su
origen geográfico: la Antártica.

Para finalizar, la novela de Miguel Serrano aporta un dato que es, quizás, el hilo
que nos permite unir a los tres autores; a saber: la relación del blanco con el
continente helado. El color en este caso no sólo es expresión de los hielos, sino
de aspectos inmateriales y filosóficos. Cortázar, como ya fue escrito, siguiendo
en esto a Sidney Kaplan, verá en estos principios el fundamento del racismo de
Poe: «La oposición del negro como signo negativo y del blanco como una fuerza
que lucha con él y en último término.» Y a propósito de racismo, debemos
señalar aquí un hecho que no deja de intrigarnos: Poe y Lovecraft sustentaron
una filosofía racista, y Miguel Serrano, sustenta hoy esta misma filosofía.
Recuerde el lector que no hay casualidad, sino causalidad misteriosa.

Pero citaremos al propio Serrano respecto la vinculación entre los colores y la


Antártica: «Existe además una relación entre el color y el polo. Los pájaros
negros tienden a desaparecer de estos mares y les es muy difícil alcanzar las
latitudes extremas de la Antártica. En cambio, las aves de plumaje blanco
soportan el frío mucho mejor.»" Curioso, Lovecraft también nos habla de este
otro vínculo entre pájaros y color. En su bello poema Antarktos, leemos:

En lo hondo de mi sueño el gran pájaro susurraba extrañamente

Hablándome del cono negro de los desiertos polares., Que se alza lúgubre y
solitario sobre el casquete glaciar.

Azotado y desfigursdo por los eones de frenéticas tormentas.

Allí no palpita ninguna forma de vida terrestre: Sólo pálidas auroras y soles
mortecinos Brillan sobre ese peñón horadado, cuyo origen primitivo Intentan
adivinar a oscuras los Ancianos.

Si los hombres lo vieran, se preguntarían simplemente Que raro capricho de la


Naturaleza contemplan-. Pero el pájaro me ha hablado de partes más vastas Que
meditan ocultas bajo la espesa mortaja de hielo. ¡Dios ayude al soñador-cuyas
locas visiones le muestren Esos ojos muertos engastados en abismos de cristal!

Y ya que hemos mencionado a Lovecraft, ha llegado el momento de adentramos


en sus símbolos y sus mitos."'

Se Acabó Chile

(Miguel Serrano Fernández)

La Estrella de Israel reemplaza la Estrella de Chile

¿Sirve para algo que yo escriba lo siguiente? ¿Hay alguien realmente


interesado por lo que diga y demuestre?

Gente malvada nos gobierna, gente tonta nos habita. Ya nadie escucha, ya
nadie mira, ya nadie ve. Los mensajes subliminales han idiotizado o hipnotizado
a todo el mundo, y la gran masa se halla constituida por autómatas, que no
existen y se arrastran, para ganar dinero, servir, sobrevivir. Son "muertos que
entierran a sus muertos". Desde el búnker siniestro de una Embajada se
proyectaran partículas subatómicas que hacen pensar lo que desea, dirigiendo
los acontecimientos, los sucesos, las catástrofes políticas y anímicas del
conglomerado sonámbulo de esta tierra.
Lo que pueda decir, ya lo he dicho pero nadie lo ha escuchado, ni
entendido. Lo repetimos hoy, sabiendo que tampoco servirá para nada.

Chile está gobernado por David Rockefeller. Tompkins es Rockefeller


("Roquefeller Brothers Fund"), Lagos y todos los que le rodean son Rockefeller.
Rockefeller es judío y no hace nada que no esté dirigido por un Sanedrín
secreto, en la línea de una Cábala oculta y que representa e interpreta el Espíritu
de las Tinieblas, teniendo como último fin instalar en el astro llamado Tierra,
antes de su destrucción final, el Reino de su Mesías, en el sur de la Patagonia,
hasta la Antártica.

Hace cien años, en 1895, Theodor Herz escribió un libro: "Der


Judenstaat" ( "El Estado Judío" ), traducido y publicado en castellano, en
Jerusalén, en el año 1976. En la página 53 habla de Palestina y de Argentina
como sede del Estado Judío. Theodor Herz declaró en sus escritos, que en
cincuenta años más habría un Estado judío en el Medio Oriente; pero no sería
definitivo, pues en otros cincuenta años (o sea, cien años) se instalaría un Estado
judío en la Patagonia, tierra semi poblada y con muchas riquezas y un clima apto
para vivir. A partir del año de la publicación de esta profecía, al finalizar la
Segunda Guerra Mundial, se creó el Estado de Israel en Palestina (cincuenta
años), y cien años después, o sea, hoy, se esta preparando la fundación del
Estado (Reino) Judío en la Patagonia.

En 1897 se realiza en Berna (Suiza) el famoso Congreso Mundial Judío,


presidido por Theodor Herzi. De allí se filtran sus conclusiones, que pasan a ser
conocidas como "Los Protocolos de los Sabios de Sión", donde se explican los
medios de los que el judaísmo internacional -ya dominante en todo el mundo,
gracias al interés del dinero y a la usura - se valdrá para imponer el Reino del
Mesías, con la esclavitud del resto de los seres humanos, en un totalitarismo
teocrático. El poder del supremo les habrá sido entregado en medio del caos que
ellos mismos producen con la propagación del terrorismo, la drogadicción, la
degeneración y el crimen, en todos los niveles de una sociedad "pluralista",
"globalizada", sin raza, bastardizada, sin nacionalidades, donde las patrias han
desaparecido y una tecnología esclavizante han transformado a los hombres en
robot y a los robot en hombres. De modo que (dicen los Protocolos X, XI, XII,
XIII, XIV y XV) cuando ellos se hagan cargo del poder total y visible y, en un
solo día pongan todo en orden, del modo más brutal, los "goims" (no judios,
animales bípedos) estarán felices y les pedirán que los gobiernen, sin osar
siquiera combatirlos.

Entonces habrá llegado el tiempo del Reino del Mesías, para lo cual ya
falta muy poco, como los signos nos indican. Ahí esta el " código de barras ",
con el 666, el " Numero de la Bestia ", del Apocalipsis, "sin el que nadie podrá
vender ni comprar", el "numero del hombre", grabado en su carne.

Pero, entre todos los signos que señala la aproximación del final y que
deberían producir espanto a los poquísimos chilenos aún capaces de tener
conciencia de lo que sucede en nuestra tierra mágica, del sur polar, de los hielos
sagrados, hay dos símbolos fundamentales y en clave subliminal, destinados a
producir el efecto fatal en el inconsciente colectivo de los chilenos, que aun
nacen y crecen en esta tierra.

El primer mensaje-signo fue publicado en inglés, hace ya tiempo, el los


principales diarios de nuestro país, por el cabalista Sergio Melnick. Lo
desciframos y dimos a conocer en nuestro libro "Traición a Chile" (1995).

Pasó desapercibido; nadie le dio mayor importancia, a pesar de su enorme


gravedad. Cosas como éstas no alcanzan a penetrar la conciencia de los "goims",
por su misma trascendencia. No parecen posibles ni reales.

Por soberbia, por orgullo satánico, las publican como mensajes para ellos
mismos y como una burla para los "goims". Así le hacen saber a su propio
"pueblo elegido" que su tiempo y el del "Mesías" ya llegó. El mensaje en clave,
de Melnick, fue el siguiente (diario " El Mercurio " del domingo 2 de enero de
1994); y lo Desciframos tal como lo hiciéramos entonces, en nuestro libro ya
citado:

International Jewish Organization, B"H

is seeking Jewish individuals interested in receiving training, for a


position as jewish ourtreach, educator-activist. Successful candidates

would be given position directing and implementing teaching and

activism for the purpose of jewish outreach education for Chilean jewry.

Qualifications required:

1.-FLUENT IN ENGLISH.

2.-UNIVERSITY EDUCATED.

3.-SINGLE, MALE.

4.-AGED 22-29.

5.-INTERESTED IN JUDAISM.

Training program is for six months, and will take place in

JESURALEN-ISRAEL

**No special background in jewish studies required**

ENVIAR URGENTE CURRICULUM CON FOTOGRAFIA RECIENTE


A:

TRAINIG PROGRAM IN JESUSALEM

Atención Sr. Sergio I. Melnick

TEATINOS 258 - 2.° PISO - SANTIAGO

Su traducción al castellano sería la siguiente:

Organización Judía Internacional, B"H, busca judíos interesados en recibir


instrucción, como judío sobresaliente, de educador-activista. A los candidatos
que tengan éxito se les otorgará posición para implementar enseñanza y
activismo a la judería chilena, y en la educación de judíos destacados. Las
condiciones son: hablar perfectamente inglés, tener educación universitaria, ser
hombre y soltero, tener entre 22 y 29 años, estar interesado en el judaísmo. El
programa de entrenamiento durará seis meses y tendrá lugar... (¡aquí viene lo
extraordinario!) en JESURALEN

(Escrito así, con mayúsculas, en el aviso: JeSURalen) - ISRAEL. No se requiere


un conocimiento especial en estudios del judaísmo". Y luego:

"Enviar urgente currículum con fotografía reciente (esto esta en castellano) a


programa de entrenamiento de JESUSALEM".

(Escrito ahora de diferente manera: JESUSalem)... Y, enseguida: "Atención Sr.


Sergio I. Melnick, Teatinos 258, 2.° piso Santiago".

¿Qué claves encierran las palabras Jesuralen y Jesusalem?. La primera se


referiría al sur de Chile y Argentina (Patagonia) y la creación allí de una nueva
Jerusalén (en el SUR-alén). La segunda Jesús-alem tendría que ver con los
acuerdos de la Sinagoga y el vaticano y la sumisión definitiva del Papa a los
designios de Israel, declarando que los judíos son "sus hermanos mayores",
aceptando la entronización próxima del "Mesías" judío, haciéndola pasar a los
cristianos por el retorno de Jesús, en la Parusía: Jesusalem. ALEM es la "paz".
Será la paz final (Protocolo XXIV), porque, además, la Jerusalén, en Palestina,
habrá pasado a segundo plano ante la Jerusalén del sur (Jesuralen) en la
Patagonia, sede del "Mesías".

Además, el llamado a los hombres jóvenes de entre veintidós y


veintinueve años, tiene que ver con la organización de los judíos que regresan de
hacer el Servicio Militar en Israel y que pasan a formar parte de un cuerpo de
elite del judaísmo, dispuesto a cumplir misiones especiales, como, por ejemplo,
la guardia de seguridad del Congreso Mundial judío en Punta de Tralca, en las
dependencias del Banco Central de Chile, que estuvo a cargo exclusivo de los
israelitas.

Que nadie en Chile haya puesto atención sobre este asunto misterioso y
siniestro, hecho a la luz del día, en la prensa que todos leen y por un personaje
que fue director de una importante oficina gubernamental, durante el Gobierno
de Pinochet (ODEPLAN) y que hoy forma parte del directorio de un Banco (el
Edwards, de los judíos Ergas) y del diario "El Mercurio" (también de los Ergas)
y de varias otras sociedades, es algo que produce indignación y estupor.
Además, en los años en que Sergio Melnick formó parte del gobierno de
Pinochet, difundió la siguiente consigna: "Chile, nuestra Tierra Prometida".

Y si ahora pasamos a describir analizar el segundo mensaje, ya podemos


concluir que Chile se acabó.

Alguien, sin que nadie se diera cuenta, modificó el Escudo Nacional.


Borró su lema tradicional, "Por la Razón o la Fuerza", que les producía terror a
los políticos de hoy. Y, al parecer, también al Ejército, a la Marina y a la
Aviación, que solo piensan ya en sus sueldos, en sus promociones y en comprar
sus "juguetes", con los necesarios "regalos" para unos pocos y que han hecho
que hoy los dirigentes de la Fuerza Aérea piensen en el cierre o reducción de la
Base Antártica, "Villa las Estrellas". con el pretexto de poder comprar aviones a
los Estados Unidos de Norte América.
LA ESTRELLA DE ISRAEL REEMPLAZA A LA ESTRELLA DE
CHILE.

El reemplazo de la estrella de la Bandera de Chile, la Estrella Solitaria,


Venus, la de nuestra independencia, por la Estrella de David, la de Israel, en el
"logotipo" que ha pasado a encabezar todos los documentos oficiales y públicos
de los Ministerios y oficinas y que hasta en los muros y plazas ya es el "Sello
Gubernamental", con la leyenda: "Gobierno de Chile", es gravísimo. Es decir,
significa que Chile ya es de Israel, se haya gobernado y dirigido por los judíos.
El mensaje sería: "Aquí se instalará el Reino de nuestro pueblo elegido de Dios,
del Mesías. Desde aquí controlaremos el mundo y hasta los astros". "Los
gobernantes hacen lo que nosotros queremos. Ya nos entregaron Laguna del
Desierto, luego vendrá Campo de Hielo Sur y la Antártica. Dowglas Tompkins
nos prepara el camino de este lado y Beneton al otro. Soros vendrá pronto. Y
también Bill Gates"

Todo esto habría sido tratado en el reciente Congreso Mundial Judío ya


mencionado, que se realizó en las dependencias del Banco Central de Chile, en
Punta de Tralca, en el mes de Abril del 2000, y coincidiendo con los sacrificios
de sangre de Animales, en el norte, centro y sur del país. El símbolo que hoy
reemplaza al Escudo de Chile, pública y oficialmente, habría sido muy
hábilmente diseñado. Desde la Secretaria de Comunicación y Cultura de la
Presidencia de la República, lo habría difundido Patricia Politzer, también judía,
quien, una vez cumplida su misión, deja ese puesto clave para pasar a dirigir el
Consejo Nacional de Televisión, donde realizaría otro importante trabajo,
ampliando aun más la divulgación del "mensaje subliminal".

El símbolo es el siguiente, en el cual, La Estrella de David se descubre en


cada uno de los colores de la bandera de Chile, formada por los cubos, así:
Con qué diabólica habilidad ha sido montada esta trampa en Chile,
destinada a hacer explosión en el corazón del inconsciente colectivo del pueblo
y a destruirlo, en el año 2001 del nuevo siglo, en los tiempos finales del
Kaliyuga, del Crepúsculo de los Dioses, del Raknarok, del Apocalipsis, cuando
ya nadie entiende nada, no se preocupa de nada, ni le importa nada. Dirán: "Esto
es una casualidad, se a producido solo". Y por último: "¡Qué importa! Son
locuras, imaginación, obsesiones...". Salvo los que lo planearon, lo inventaron y
tan cuidadosamente lo diseñaron, con un fin preciso y fatal: anunciar que Chile
se acabó y que el Reino de Juda será instalado en el Sur-Alen, en Jesur-Alen con
la venida del "Mesías", Jesus-Alem. El resto se encogerá de hombros y seguirá
yendo a comprar en el "mall" más próximo, donde también encontrará el Signo
y el "codigo de barras", con el 666.

El Presidente argentino, radical y masón, Alfonsín, pretendió cambiar la


capital de su país a Viedma, en la Patagonia, cercana a la Laguna del Desierto.
Se adelantó en el tiempo. Aún Chile no regalaba esa región, regada con la sangre
de un héroe, el Teniente Merino. Pero será en esas zonas donde se instale el
Reino del Mesías, por el paralelo cuarenta, que se salvará por un tiempo de las
catástrofes geológicas. Allí hay de todo, grandes reservas de agua, "sumideros
forestales", que neutralizan el anhidrido carbónico de las industrias, minerales,
bauxita, molibdeno, plutonio, platino, árboles vernáculos y habrá ecología
virtual y clonación.

Argentina, incapaz de pagar su inmensa deuda externa, se acogerá al


"Debts for Nature Swaps" y entregará su tierra patagónica. Chile ya la ha
vendido casi en su totalidad. La misión de los "gobernantes" autómatas es
cumplir con Rockefeller y liquidar nuestra nacionalidad. El actual símbolo
gubernamental así lo indica. En esas regiones se va a crear un país
independiente, que abarque hasta la Antártica. El hijo del Príncipe Carlos, de
Gran Bretaña ("Great Britain" - Knai'Brith ), ya fue enviado, silenciosamente, a
reconocer la zona, en la posibilidad de que pudiera ser él (representante de la
Casa Real europea más mezclada con sangre judía) el futuro gobernante visible
del Mesías, que detrás y en forma casi invisible, controlará el mundo, como
explican "Los Protocolos de los Sabios de Sión" (Protocolo XXIV).

Será el Reino Judío de la Patagonia. "Nai-Judá”, la "Nueva Judea".

JESURALEN.
¡CHILE SE ACABÓ!
POSTRER LLAMADO

En esta tierra mágica, entre sus montañas y su profundo Océano, aún


existen, a pesar de todo, a pesar de todas las agresiones sicológicas, algunos
grupos de jóvenes y hombres idealistas, solidarios, que saben que "su honor se
llama lealtad" y que están dispuestos a entregar sus vidas para defender una
Patria que quizás no conocieron, pero de la que me oyeron un día hablar. A ellos
me dirijo y les digo: "¡Allí donde vean ese símbolo satánico, desenmascárenlo!".
Así ayudarán a que después de la catástrofe final, que se avecina, tras la Edad
Más Oscura, el Sol de un Nuevo Amanecer, de la Edad Dorada, pueda retornar.
Y allí nos ganaremos el derecho, con nuestro combate, a renacer. En esa
Hiperbórea del Polo Sur.

Y recordemos al Padre Lacunza:

"Sólo sabe lo que fue Chile quien lo ha perdido".


Miguel Serrano o los Gigantes

El Mito Antártico adquiere fuerza incontenible en la literatura del poeta, escritor


y viajero Miguel Serrano, creador de textos mágicos como Ni por Mar ni por
Tierra, La.Serpiente del Paraíso, Quién Llama en los Hielos, El Círculo
Hermético, Elella-Ellael. Libro del Amor Mágico, El cordón Dorado, Nietzsche
y la Danza de Siva y Las Visitas de la Reina de Saba, con prólogo de C. G. Jung.

Dicen relación con la Antártica dos de sus más interesantes trabajos: La


Antártica y otros Mitos, Santiago, 1948 y Quién llama en los Hielos, Santiago,
1957.

El primero de ellos es la transcripción de una serie de conferencias dictadas en


Chile por el autor y ex diplomático. Su portada es reveladora: un dibujo de un
gigante bicorne y alado emergiendo de las blancas nieves y portando un tridente.
Desde el comienzo, Serrano hace gala del sincronismo que mantiene con Poe.

El tema de estas conferencias es el Mito en relación con la Antártica, y nos


damos cuenta que el encabezado del texto, tal cual dice Erwin Robertson,
señala que «la Antártica es un mito» Serrano vinculará numerosas leyendas en
relación al tema que nos interesa : los bellos relatos de los onas (antiguos
habitantes de Tierra del Fuego), la leyenda de la Virgen de los Hielos, el
continente Lemuria, el gigante de Poe y, aún, la osada idea que el gran avatar
Adolf Hitler yace en el frío Antártico. Y aunque a simple vista parezca no existir
relación alguna entre cada una de éstas; la hay, puesto que todas estas leyendas
se refieren a los misteriosos moradores de la Antártica. He aquí otro punto
donde confluye el pensamiento de estos tres autores. Serrano conoce el relato de
Poe y señala en relación al Gigante Blanco: «Es que Poe conocía la leyenda de
los sélcnam sobre los Jon que habitan la Isla Blanca.»" «¿O sabía también del
Prisionero de la Antártica, que vive en su fondo negro, y que seguramente por
esto mismo se ve blanco?»"

Para entender quiénes eran los Jon y a qué se refiere Serrano cuando habla de
Isla Blanca, se recomienda leer la página 25 de La Antártica y Otros Mitos,
donde explica que los antiguos onas (los sélcnam eran sólo una tribu ona) creían
en la existencia de los Jon: humanos de casta aristocrática dotados de facultades
sobrenaturales y poseedores de los Misterios. «Fueron los Jon, magos sélcnam
de la Tierra del Fuego, los que conservaron los secretos enseñados por Quenós y
los que aun se inmortalizan embalsamándose dentro de los hielos del sur, para
resucitar renovados en el más lejano futuro. Dicen también los sélcnarn, que es
en el Sur, allá, en esa "Isla Blanca que está en el Cielo" donde moran los
espíritus de sus antepasados, haciendo una vida libre de preocupaciones.»"
¿,Serán estos espíritus ancestrales Los Antiguos, mencionados por Lovecraft?
Será la Antártica aquella Isla Blanca de la que hablaban las viejas leyendas
onas?

Serrano, quien fue uno de los primeros chilenos en conocer la región antártico,
da cuenta de la relación entre ese lugar y la locura" Y señalamos, por nuestra
parte, que el título de la inolvidable novela de Lovecraft, En las Montañas de la
Locura no se debe a un capricho o a una ocurrencia ingeniosa para llamar la
atención de algunos lectores afiebrados. Serrano dirá que la única vía para
comprender esta realidad súrica, o mejor, para salvarse de la locura que allí
acecha, es el Sueño. Y el mundo de los sueños es un elemento clásico de la
narrativa de H. P. Lovecraft.

La inquietante posibilidad de que exista una entidad no humana en la Antártica,


se registra también en la páginas del texto del autor chileno. El sincronismo
entre estos dos escritores nos deja asombra, sobre todo porque Miguel Serrano
desconocía la obra de Lovecraft cuando escribió La Antártica y otros Mitos.
Citemos, entonces, a Serrano, quien con su arte nos recuerda a los viejos
alquimistas: «Sin embargo, en ese continente del reposo y de la muerte alguien
vive. Un prisionero se agita, teniendo por medio habitable el fuego ardiente y
eterno. » Esta idea de Serrano se plasma también en otro texto del mismo autor:
Quien llama en los Hielos. He aquí un párrafo de belleza terrible: «Yo he visto a
ese ser, a ese Ángel negro: ahí, en su recinto del Polo Sur. Es en una inmensa
cavidad oscura donde reside... Espacios enormes, sin límites, livianos y
deprimentes a la vez, que se extienden, con seguridad, por el interior psíquico de
la tierra, debajo de los hielos eternos. Y así se mueve el Zinoc... Asciende o
desciende, hasta el extremo de esa cavidad y, desde ahí, se arroja a una
velocidad vertiginosa en demanda de su otro extremo, de su final inalcanzable.
Toda la eternidad lo ha pasado en este esfuerzo. cayendo de cabeza, tratando de
alcanzar el lugar antipódico del que ha sido proscrito en el comienzo mismo de
la creación. El norte es su sueño, su anhelar profundo y su mayor sufrimiento. »
Lovecraft, por su parte, en su novela escribirá algo revelador: «Se fundaron
nuevas ciudades terrestres. las más importantes de ellas en el Antártico, ya que
aquella región. escenario de su llegada, era sagrada. A partir de entonces, el
Antártico fue como antes el centro de la civilización de los Antiguos, y todas las
ciudades construidas allí por la prole de Cthulhu fueron destruidas . » Más
adelante, el narrador de la novela de Lovecraft indicará que los mapas
encontrados en la vieja ciudad polar muestran que las ciudades de los Antiguos
en la época pliocénica se hallaban en su totalidad Por debajo del paralelo 50 de
latitud sur .21 Estas referencias de ambos autores son fundamentales, porque nos
indican la oposición simbólica entre Polo Norte (o la mítica Hiperbórea) y Polo
Sur , sede de los Antiguos. Esta oposición no responde solamente a una
diferencia de carácter geográfico, sino que, ante todo, a diferencias espirituales.
En efecto, el Polo Norte es el polo positivo -en términos cristianos, el Bien- y el
Polo Sur -desde la misma perspectiva, el Mal-. Sin embargo, estos opuestos,
conforme a los principios de la filosofía maniquea, se complementan. Ambos
polos mantienen el Orden en la Tierra, regulan el buen funcionamiento
energético de nuestro mundo. La única posible diferencia dice relación con el
tipo de energía que irradian dichos lugares, pues en verdad son centros
energéticos. Este conocimiento que se expresa a través de la literatura moderna
(Lovecraft y Serrano), que diferencia los centros volitivos terrestres, concuerda
punto por punto con el pensamiento antigiío o tradicional que enseñaron los
maestros indoeuropeos, para quienes las palabras que nombran a los distintos
lugares sagrados son: Cielo, Tierra o Mundo Medio e Infierno. El Cielo, para
ellos, es la morada de los héroes, aquellos que vivieron la vida tal como se debe,
y corresponde a Hiperbórea o nuestro Polo Norte; la Tierra es el lugar habitado o
terreno de expediciones y viajes, ellos la identificaban con Asia y Europa. El
Infierno, que era el lugar de los demonios -los Antiguos y los Shoggoths- parece
no haber sido descrito y ubicado con tanto detalle y precisión por los antiguos
sabios indoeuropeos. Este Infierno es para nosotros el Polo Sur.

En Quien llama en los Hielos, Serrano relata un sueño, en el cual un misterioso


ser le dice: «La inmortalidad se logra entre los hielos -me respondió- y se
consigue helándose. No soy nadie, ni nada puedo hacer ahora. Tu gran combate
será con el Ángel de Sombras.»" Serrano destaca sobre todo los mitos onas en
sus conferencias sobre los Mitos de la Antártica, para proporcionarnos una clave
para descifrar los escondidos arcanos: «Fue Quenós quien empezó a crear la
tierra, de arriba abajo. Pero antes, con arcilla blanca modeló a los Hohuen, seres
gigantescos y trasparentes como ángeles. Apenas creados, los Hohuen
comenzaron a luchar entre ellos. Sin embargo, no podían morir. » He aquí los
mismos rasgos arquetfpicos de los Antiguos lovecraftianos: gran tamaño,
poderosos, belicosos, no-humanos e inmortales. La mitología ona señala que los
Hohuen (nuestros Antiguos) fueron creados con hielo. Esto, en verdad, señala su
origen geográfico: la Antártica.

Para finalizar, la novela de Miguel Serrano aporta un dato que es, quizás, el hilo
que nos permite unir a los tres autores; a saber: la relación del blanco con el
continente helado. El color en este caso no sólo es expresión de los hielos, sino
de aspectos inmateriales y filosóficos. Cortázar, como ya fue escrito, siguiendo
en esto a Sidney Kaplan, verá en estos principios el fundamento del racismo de
Poe: «La oposición del negro como signo negativo y del blanco como una fuerza
que lucha con él y en último término.» Y a propósito de racismo, debemos
señalar aquí un hecho que no deja de intrigarnos: Poe y Lovecraft sustentaron
una filosofía racista, y Miguel Serrano, sustenta hoy esta misma filosofía.
Recuerde el lector que no hay casualidad, sino causalidad misteriosa.
Pero citaremos al propio Serrano respecto la vinculación entre los colores y la
Antártica: «Existe además una relación entre el color y el polo. Los pájaros
negros tienden a desaparecer de estos mares y les es muy difícil alcanzar las
latitudes extremas de la Antártica. En cambio, las aves de plumaje blanco
soportan el frío mucho mejor.»" Curioso, Lovecraft también nos habla de este
otro vínculo entre pájaros y color. En su bello poema Antarktos, leemos:

En lo hondo de mi sueño el gran pájaro susurraba extrañamente

Hablándome del cono negro de los desiertos polares., Que se alza lúgubre y
solitario sobre el casquete glaciar.

Azotado y desfigursdo por los eones de frenéticas tormentas.

Allí no palpita ninguna forma de vida terrestre: Sólo pálidas auroras y soles
mortecinos Brillan sobre ese peñón horadado, cuyo origen primitivo Intentan
adivinar a oscuras los Ancianos.

Si los hombres lo vieran, se preguntarían simplemente Que raro capricho de la


Naturaleza contemplan-. Pero el pájaro me ha hablado de partes más vastas Que
meditan ocultas bajo la espesa mortaja de hielo. ¡Dios ayude al soñador-cuyas
locas visiones le muestren Esos ojos muertos engastados en abismos de cristal!

Y ya que hemos mencionado a Lovecraft, ha llegado el momento de adentramos


en sus símbolos y sus mitos."'

Es en la Albedo, u Opera Blanca de la Alquimia, que continúa a la Nigredo,

donde el Yo retorna, resucita. Mas lo hace como Rebis, como la Estrella

Venus, de doble rostro. Ha pasado ya por la Muerte Mística de la Nigredo,

voluntariamente aceptada y propiciada. Y es el Cuerpo Resurrecto del Héroe,

al tercero o noveno día, el mismo cuerpo, sólo que sutilizado, debiendo

revestirse de una materia roja, inmortal, en la Rubedo, que sigue a la

Albedo; materia "dura como el diamante", aunque invisible a los ojos de la

tierra y que en sánscrito han llamado Vajra. Es este el Cuerpo de la

Resurrección del Taoísmo y del Kristianismo Esotérico. Se ve como rojo,

sutil, pero es duro como el rubí, como esas estrellas Novas, o esos soles
que se han desplomado sobre sí mismo, en el Sí-Mismo, se han hecho enanos,

pero pesan más que todo el Universo. Esa "materia" la obtienen el Mago Kula

y el S.S., como premio en su transmutación kaiválica. Y será con ese Cuerpo

con el que el Héroe inmortalizado, el Asen, pueda salir de este Universo

demiúrgico, liberándose por siempre de su prisión, derrotándolo. Se ha

salido, además, del Eterno Retorno, hacia "algo jamás soñado ni por los más

grandes utopistas"...

En la alquimia sexual oculta se trata del oro corporal, que hay que producir, o
recrear, a través de un proceso

de transformación física, psíquica y espiritual del iniciado. Es el azufre, lo


masculino esencial, que se debe

confirmar, al contacto con el mercurio, con lo femenino esencial, para dar vida a
Rebis, el Andrógino, o Rey

Coronado (Baphomet).

En la primera parte de la obra, u Opus, se produce la disolución por causa del


principio femenino, del Aqua

disolvente. El Azufre Vulgar ('nuestro Rey') muere; o sea, el yo inferior,


puramente físico, racional. Es la

Opera Oscura, o Nigredo. Tras la crisis, al unirse el azufre al Agua Divina, se


descubre la abertura (el 'tubo

Astral'), la escondida puerta y se manifiesta el estado extático (Polar). Nace la


'Paloma de Diana', adviene la

Albedo, la Opera Blanca, la cual deberá considerarse como al aspecto positivo


de la mujer, de Mercurio, o del

régimen de la Luna. El Rey ahora resucita, despierta, en esta extático. La misma


agua que mata, de la vida. La
mujer revive en el hombre, le inspira, le 'preña'. El Rey está incincta del
Andrógino, de Rebis.

Mas, para poder continuar con el Opus, hay que poseer el 'acero de los sabios', la
Espada de la iniciación, la

Lanza de Longino, el Azufre Incombustible. Es decir, un principio inalterable,


que no se enciende, que se

conserva a través del cambio de estado y que, llegado el momento, es la semilla


de un nuevo desarrollo. El

semen preservado, no eyaculado. Esto corresponde a la tercera parte del opus


alchimicum, a la ópera roja, o

Rubedo, donde se sobrepasa la condición de apertura extática. El azufre y el


fuego están de nuevo activos, lo

masculino revive, se sobrepone a la substancia que lo disolviera, al Mercurio


femenino; impone su dominio

sobre lo femenino, lo absorbe y le traspasa su naturaleza.

Es ahora cuando la unión del Rey y la Reina, bañados desnudos, se produce. Se


llama incesto, también

Mysterium Coniuntionis. Es el Hyerosgamos. De esta unión nace Rebis, al


Andrógino Coronado. Lo da a Luz

el Rey. Sol y Luna, todopoderoso, inmortal. Es el Hijo del Hombre, el fin del
opus alchimicum, del Arte

llamado Real.

Pese a los símbolos sexuales, parece que los Maestros anteriores al Kaliyuga no
usaron el coitus físico en el

proceso del opus transformationis que termina con la producción, o


advenimiento, del Andrógino Coronado.

Para reintegrar el principio femenino, 'desnudando su Diana', no siguieron el


camino del sexo activo, llamado
también 'camino húmedo' (porque "la mujer llora y hace llorar", como se dice en
mi obra "ELELLA, Libro del

Amor Mágico"); no amaron físicamente a la mujer. También para los


alquimistas medievales la soror mística,

siempre junto al alquimista y su atanor, fue compañía espiritual simbólica, que


aportaba su energía psíquica,

su emanación femenina indispensable, durante todo el proceso de


transformación. Una Tantra de la Mano

Derecha, por así decir. El proceso del Amor cátaro, del 'amor platónico' de los
trovadores, de los Fedele

d'Amore, de Dante, de los minnesänger y de los templarios del Gral.

La inmortalidad con cuerpo físico del Siddha, su resurrección, se basa en el


siguiente Weltanschauung

(concepción del mundo): Antes de la Derrota, cuerpo y alma formaban una sola
entidad. Después, el cuerpo

se densifica (se hace físico), al extremo que es obstáculo para la inmortalidad del
alma, arrastrándola a la

imperennidad, su corrupción y muerte. El alma deberá desprenderse, pasando a


ser incompleta, la mayoría de

las veces disolviéndose por igual a poco seguir del cuerpo. El alma necesita un
cuerpo y deberá recuperarlo, o

formar uno nuevo para así intentar la redención en el camino inverso, retrógado,
de la Svástika Dextrógira,

remontando la involución, superando la Derrota. Es el Eterno Retorno, con un


número limitado de regresos, o

sea, la reencarnación en sentido hiperbóreo. La 'técnica' o 'ciencia' sería la del


opus mágico-alquímico, que usa
el Fuego Hermético, Secreto, el Fuego de la Vida, el Aurum Potabile, el Elixir
de Larga Vida, el Espíritu del

Vino Secreto, que regenera la materia, la limpia de la sombra impura y la vuelva


a su estado radiante, a la luz

prístina en el sincronismo de la transmutación de los metales y con las fórmulas


mántricas de una yoga

occidental-hiperbórea, de la Cábala Órfica, fonética, recuperadas. Por medio del


redescubrimiento y uso del

Fuego Secreto radiactivo, la materia se rejuvenece, el cuerpo vuelve a sutilizarse


y es propia vestidura del

alma. Se ha Desposado. El alma se convierte en Túnica de Neso para el cuerpo


denso, lo quema. Ahora hay

sólo un Cuerpo Glorioso, de Vraja, de Fuego Rojo (Rubedo), inmortal. El


Siddha ya no transita por la muerte,

remonta con el cuerpo al cielo, en un Carro de Fuego, como Enoc, Melquisedec


y la Serpiente Ígnea de

Quetzalcóatl, quienes no mueren. Ha resucitado al Terer Día. (Primer Día:


Nigredo; Segundo Día: Albedo;

Tercer Día: Rubedo). Es la Resurrección de la Carne, la Inmortalización. Se ha


descubierto así el secreto de la

Fisiología Universal, de la Música Vibratoria de la Naturaleza y de la


Respiración Embrionaria del taoísmo.

Pero es muy posible que no sea el cuerpo físico que se sutiliza y desaparezca,
por el contrario, sin que sea

siquiera conciente del suceso, esfumándose, desintegrándose en la Nigredo, a


causa del Agua Pura Disolvente

Universal, o del Mercurio. En cambio, puede que sea el Cuerpo Astral, que se
materializa, se hace visible,

aunque no tocable (noli me tangere), con matera inmortal, de Luz Roja, de


Vraja, pudiendo residir y pasar a
varios 'mundos paralelos', a varias tierras a la vez.

Hay tres vías de inmortalización alquímica: la Instantánea, o Fulminante; la Vía


Seca y la Vía Húmeda. A

estad os últimas nos hemos referido en nuestra obra "ELELLA, Libro del Amor
Mágico". La primera hace uso

del rayo y de los rayos cósmicos para producir una mutación instantánea,
definitiva y total del adepto, quien

se expone a la caída de un rayo, haciendo que le cruce de parte a parte, de


preferencia sobre la cumbre de una

montaña, en una tormenta, o sobre de una terraza alta. Por medio de la


concentración mental intensa en su

Soror Mística, interna (la Amada Invisible) y la repetición de un mantra, se hace


invulnerable, no es

destruido, sino que su carne se inmortaliza y regenera. Su mente sufre una


mutación instantánea. Es ya un

Divya, un Siddha inmortal, divino, un Superhombre. El Virya, el héroe se ha


mutado en Divya. El peligro es

inmenso, porque si la concentración no funciona, o si el mantra mágico carece


de la entonación precisa, la

muerte es también instantánea y la destrucción no sólo del cuerpo físico, denso.


La prueba es semejante a la

que, en un plano inferior, realizaban los SS que hacían detonar una granada
sobre el casco. Solamente la

inmovilidad, demonio físico y mental les permitía superar el trance. En esta Vía
Instantánea también se

utilizarían los rayos cósmicos y quizás los ultravioletas, abriendo una 'ventana
psíquica del ozono', por así

file:///C|/Documents%20and%20Settings/Stefano/Docume...l%20Cordón%20Do
rado.%20Hitlerismo%20Esotérico/22.htm (4 di 6)11/11/2004 7.50.45
El Cordón Dorado

decir, las 'puertas polares' de 'entrada' y 'salida' transdimensionales, los 'tubos


astrales', para producir la

mutación del adepto. En esta Primera Vía de la inmortalización, la Soror


Mística, la Amasia Uxor, como se ha

dicho, es invisible, Lilith-Ayesha, es sólo imaginaria, está adentro, interiorizada,


no ha salido. Se viaja con

ella en el pensamiento, como recomendaba Parsifal. Al final, espera la Boda


Eterna del Andrógino, del Rebis.

En este Camino, como en los otros, hay un proceso sincronístico, porque está
claro que el adepto tendrá que

purificarse, adquirir grandes poderes para poder resistir el rayo y mutarse sin ser
aniquilado. Los sacerdotesmagos

etruscos habrían conocido el Camino del Rayo, llamándose por ello


Fulguradores. El símbolo rúnico

de las SS representa esto mismo: el rayo que transmuta a los héroes en


Sonnmenschen, en hombres sol, tal vez

en astros, en Superhombres. De seguro, los iniciados SS en sus grados más altos


y secretos conocieron y

practicaron los Tres Caminos. También las llamadas Tropas de Asalto del
nazismo chileno usaron como

símbolo un rayo. Sin embargo, ni remotamente existió un esoterismo, ni una


metafísica, ni siquiera una

filosofía en este movimiento de corte puramente político y destinado, por


consiguiente, al fin que tuvo.

El Segundo Camino, o Seco, produce la mutación en pocos días, sirviéndose, al


parecer, de algún desconocido

procedimiento, también sincronístico, de la radioactividad de la materia


transmutada en el laboratorio interno
y externo del alquimista. La Soror Mística está ahora allí, coactuando, pasando
los materiales, que ella

'feminiza' al tocarlos, e inmortalizándose junto con el adepto, de algún modo,


pero sin tocarse.

El Tercer Camino, el Húmedo, es el tántrico-alquímico de la Mano Izquierda,


diremos, y puede tomar toda

una vida. La transmutación de los metales internos y externos es lenta. La Soror


Mística pasa los ingredientes,

se los entrega al adepto en su cuerpo y desde su cuerpo, en transferencia,


vibración, individualización

conjunta y progresiva, real y simbólica, mágica en todo caso, en un Amor sin


amor, con un fuego helado, en el

Laboratorio Secreto, en la Alcoba Mágica, hasta que ambos son mutados,


interpenetrados, desposados,

eternos. Es u camino difícil y arriesgado como los otros. En la psicología de las


profundidades de Jung se da

algo semejante, pudiendo recuperarse el sentido mágico-simbólico.

La elección de estos caminos no es voluntaria y tiene que ver con los


temperamentos, el astro de origen, las

encarnaciones y regresos, en el Círculo del Eterno Retorno.

NUESTRO HONOR SE LLAMA LEALTAD


Palabras de Miguel Serrano.
La lealtad a los nuestros, a los ideales, a la fe y a la esperanza, y a nuestros
amigos y camaradas que entregaron sus vidas para preservarlos y defenderlos,
haciéndolos así eternos.
Hace muy poco, en un día de tinieblas, en la fiesta de la luz de Ostara, en la
Semana Santa, dejaba este mundo mi entrañable amigo y camarada belga, León
Degrelle. Para aquellos que lo conocimos y para su propia esposa, parece algo
increíble, porque él era inmortal, y lo decía: ―¡El león no morirá jamás!". Así lo
pensaban también sus camaradas de combate de la División Valona en el frente
ruso, en la Segunda Guerra Mundial. En cien batallas, en primera fila, al frente
de sus hombres, el General de las Waffen SS, Degrelle, era inalcanzable por las
balas y los obuses; o bien, sobrevivía reponiéndose de las más graves heridas,
para nuevamente ir al combate. Por ello, el Führer le condecoró con la Cruz de
Hierro y, luego, con la Cruz del Caballero, la más alta condecoración impuesta
por Hitler, quien declaraba: "¡Si yo tuviera un hijo, desearía que fuera como
León Degrelle!".
En el exilio, en España, acaba de morir, justo en la semana de la Resurrección
del Héroe. Tras la nigredo y la albedo, resucita en la rubedo, en el Domingo de
Resurrección; Sontag, el Día del Sol y en un cuerpo de luz roja inmortal.
Hoy, junto con presentar la primera edición completa en castellano de la obra,
también inmortal, del más grande genio de todos los tiempos, Mi Lucha, del
avatar Hitler, cuya edición hemos precisamente dedicado a "su hijo" en la gloria
del combate eterno, le rendimos un homenaje a ese héroe, a ese camarada, a ese
amigo, guía y ejemplo de las juventudes nacionalistas y nacionalsocialistas del
mundo que jamás claudicara y mantuviera, con idéntica lealtad a la mía sus
ideales hasta su último día aquí en esta envenenada tierra. Y en su recuerdo,
hacemos llegar a su esposa, Jeanne, nuestro apoyo y aliento para que pueda
sobreponerse a su dolor y tenga la fuerza necesaria para continuar divulgando
los libros y la obra que Degrelle deja a su cuidado y de los camaradas que la
ayudarán.
Sobre Mi Lucha se podrían decir mil cosas, citar tantos párrafos luminosos,
vigentes cada hora, cada minuto de nuestros pobres días; sobre la inoperancia de
la democracia, sobre la corrupción de los políticos, sobre la infamia del
totalitarismo comunista y lo diabólico del capitalismo, triunfante hoy en la
sociedad de consumo desatada, en la llamada "economía social de mercado" y
en la usura legalizada con el interés del dinero. Porque —lo sabemos— fue el
Nacionalsocialismo el único sistema, en toda la historia de los hombres en la
tierra, que abolió el interés del dinero. Hitler decía: "Si yo te presto un ropero, tú
no me devuelves ropero y media, sino el ropero; pero si un Banco te presto cien
marcos, deberás devolverle ciento cincuenta y hasta doscientos, y de estos
cincuenta, o cien, vive sin trabajar el usurero". Y junto con abolir el interés, fijó
los precios, de manera que hasta el final de la guerra jamás hubo inflación en
Alemania, reemplazando el "patrón oro" por el "patrón trabajo". Así, un obrero
en el Tercer Reich debió sentirse mejor y más seguro que un rey en otro país.
Ese fue un paraíso y, por ello, porque lo era, debieron destruirlo aquellos que se
sentían en peligro de muerte al ser abolido el caldo de cultivo del tejido
cancerígeno, con la desaparición del interés del dinero y de la usura. Y para que
nadie se acuerde de que una vez hubo un paraíso sobre la tierra, toneladas de
mentiras y de infamias han intentado cubrir en vano esa cumbre del paraíso, ese
monte de Parsifal. ¡Pero no lo lograrán, porque aún estamos nosotros,
recordándolo! Y cuando también debamos partir, ¡Más y más batallones vendrán
un día a recuperarlo, y a destruir la infamia y la mentira, para al final vencer!
En este libro maravilloso, que ahora os entrego en su traducción completa, se
habla de la vida, de la guerra, del hombre y también de la muerte. Y se dice:
"Héroe es aquél que sacrifica su vida en defensa de la comunidad, de la Patria,
despojado de todo egoísmo personal". ¡Sí, porque héroe es aquél que, sin saber o
sin creer que existe alga más allá de su yo y de esta vida, está dispuesto a
entregarla para un ideal! Y hasta los dioses le envidian, porque ellos saben que
son eternos y que no pueden morir. En cambio, el héroe, sin saberlo, lo entrega
todo, hasta su propia eternidad.. . ¡Sí, camaradas, porque la sangre de los héroes
llega más cerca de los dioses que la plegaria de los santos...!
Y León Degrelle decía:
"Debemos todos nosotros estar preparados para lo más terrible. ¿La muerte,
en medio de la humillación, no es, acaso, una forma de darse más todavía? El
sacrificio no admite cálculos ni reservas. Si yo hubiera mentido, como
nuestros enemigos, ¿a dónde habría llegado? Pero, sin embargo, creo, creo
más que nunca, que sólo los idealistas podrán cambiar el mundo...".
"Al final, el Alma es lo único que le queda al Alma. . . "
¡Si, el Alma...!
Oí una vez a un escritor chileno decir:
"Sé que nada me ha sucedido sino la vida, y que nada me sucederá sino la
muerte".
Pero yo sé que algo más que la vida me ha sucedido y que también algo más que
la muerte me sucederá... Y esto también es válido para León Degrelle y para
nuestro Führer, por supuesto, en cuyo cumpleaños os entrego esta revelación.

Heil Hitler!
Heil León Degrelle!

ENSAYO: A PROPOSITO DE UNA CRÓNICA

La falsificación de Hermann Hesse

por Miguel Serrano

..... Tuve la suerte de ser amigo del gran escritor


alemán. Aun después de su muerte, y habiendo
abandonado ya la diplomacia, habité por diez años la
antigua casa Camuzzi, en Montagnola, en la Suiza
italiana. Fue ésta la primera casa de Hesse en ese
pueblito de montañas, vecino de Lugano.

..... Es absolutamente absurdo creer que Hermann


Hesse "pasó de moda", como un escritor para la
juventud de hace cuarenta años. En verdad, a Hesse lo
pusieron artificialmente "de moda" y lo usaron con
fines precisos para desorientar a las nuevas
generaciones de los años cincuenta y sesenta.
Recuerdo muy bien que "SurkhamVerlag", el editor
alemán de Hermann Hesse, tenía por obligación
vender cuarenta mil ejemplares al mes de la obra de
Hesse y, para ello, se valía de toda clase de publicidad
y presión sobre las jóvenes generaciones de la época.
Fue así como en EE.UU. se falsificó y transformó a
Hermann Hesse, haciéndole aparecer como un
"hippie", propiciador de la droga, etcétera.

..... Un día los hijos de Hermann Hesse me buscaron


en Montagnola para consultarme sobre la inminente
adaptación al cine de "El Lobo Estepario". Querían
conocer mi opinión al respecto. Acompañaba a Heiner
Hesse el productor norteamericano y guionista del
pretendido filme. Les respondí diciéndoles que yo
recordaba muy bien una conversación con Ninón
Auslander, la última esposa de Hermann Hesse, quien
me había revelado la opinión de su marido (que
también era la suya) en contra de cualquier filmación o
televisación de sus obras. Además, esto aparecía en el
testamento de Hermann Hesse, agregándose una
salvedad: sólo si sus hijos estuvieran en mala situación
económica, él aceptaría que llevaran al cine alguno de
sus libros. Pregunté a los hijos de Hermann Hesse si
éste era el caso. Me respondieron que no, pero que
ellos aceptaban la filmación a objeto de "ayudar a las
juventudes del mundo". Se despidieron y me dejaron el
manuscrito de un proyecto cinematográfico para la
novela "El Lobo Estepario". Me encarecieron que les
diera mi opinión. Debo decir que el autor del libreto
era el mismo director de la obra de James Joyce,
"Ulises", que también fue llevada al cine.

..... Leí el texto y, con verdadera sorpresa, descubrí la


invención de largos párrafos, que jamás fueron escritos
por Hermann Hesse.

..... Llamé por teléfono a Heiner Hesse y nos volvimos


a encontrar con el guionista en Montagnola. Les hice
presente mi opinión. Aceptaron que era un agregado,
hecho a conciencia. Después de esa explicación no me
quedó más que devolverles el borrador del libreto,
diciendo que yo me oponía a la filmación.
..... "El Lobo Estepario" fue llevado al cine sin mayor
éxito.

Releer a Hesse

..... Desgraciadamente, el profundo escritor y poeta


Hermann Hesse fue falsificado y vulgarizado por un
mundo de decadencia. Necesita ser releído hoy por los
mismos que antaño se estremecieran con su misterio.
"Demian", por ejemplo, fue siempre entendido por los
serios lectores de esa época como una obra simbólica,
donde, además, se refleja la leyenda masónica de Eva
y los "'Hijos de la Viuda"' (Demian, uno de ellos), y
Sinclair (nombre representativo de los grandes
maestros hereditarios de la Masonería escocesa), quien
también interpreta la concepción junguiana del "Self"',
o del Sí-Mismo, con el"ánima" ya unida al Sí-Mismo;
el Hombre-Absoluto. Eso es el personaje de Demian
(el "Self", de Sinclair). Demian también es un seguidor
del Dios gnóstico, Abraxas, que reúne en sí los
opuestos.

..... Ahora bien, "El Lobo Estepario" es un


maravilloso juego en la línea de "La Flauta Mágica",
de Mozart (músico que Hermann Hesse admiraba).
Pamino y Pamina, Papageno y Papagena, en la obra de
Hesse son Hermann (Harrier) y Hermine, el femenino
de Hermann (desgraciadamente, en la traducción al
español se ha cambiado el nombre de Hermine). Es
decir, en esta obra de nuevo se presenta el misterioso y
profundo juego metafísico de Mozart y de Jung, de
Orfeo y de Platón: del "ánima" y del "ánimus".

..... Sobre la más trascendental obra de Hesse, "El


Juego de Abalorios", declaraba el Secretario General
de las Naciones Unidas de los años sesenta,
Hammarskjöld, que si él fuera confinado en una isla
solitaria, lo único que desearía tener consigo sería esta
obra maravillosa. Y Henry Miller, autor de "Trópico
de Cáncer", me escribía diciéndome que para él
"Siddharta" era el libro más importante que había
leído, porque, en unas pocas páginas resumía todo el
Budismo Zen. Y me contaba, también, que en su
cabecera siempre tenía el libro "El Círculo
Hermético", sobre mis conversaciones con el escritor.
Desgraciadamente, no había podido conocer
personalmente a Hermann Hesse, porque, habiendo ido
a visitarlo a su casa en Montagnola, se encontró en el
portón de entrada con un letrero escrito en alemán que
decía: "Bitte keine Besüche". Miller conocía el alemán
y pudo traducirlo: "Por favor, no se admiten visitas".
Por suerte yo no sabía alemán, pude entrar, ser
recibido por Hermann Hesse y hasta el día de hoy
sentir que fui un agraciado, un bendecido por los
dioses, por haber llegado a conocerlo y a honrarme con
su amistad.

..... En recuerdo de esos grandes tiempos y de ese


misterio he deseado escribir estas líneas, haciendo ver
que Hermann Hesse es un escritor eterno, no de una
época determinada, sino para la inmortalidad.

..... ¡Sí! Hay que volver a leer sus libros. Y


resucitarlo...

en El Mercurio, Santiago de Chile, Domingo 10 de


Marzo de 2002
Usura

Con esta palabra, Ezra Pound sintetizó el mal profundo de la época más
Oscura. Su famoso Canto XLV "Usura", es también un Manifiesto en contra de
este tiempo maldito. La razón fundamental que llevó a Ezra Pound a ponerse de
parte de Hitler en la Gran Guerra es que fue el nacionalsocialismo que destruyó
la servidumbre al interés del dinero. Es decir, la Usura.

Y es ésta también la última razón de la declaración de guerra total a Hitler


y al Hitlerismo por parte de los poderes del judaísmo internacional, de los
sirvientes del Demiurgo Jehová, del Enemigo, del Señor de las Tinieblas. Hitler
les privaba de su arma siniestra, por medio de la cual se ha esclavizado al
mundo.

El análisis de nuestra situación, de la de otros países de nuestro continente


y del llamado Tercer Mundo ha sido hecho
poniendo como piedra angular el Protocolo XX de los Sabios de Sión sobre los
empréstitos contraídos en el extranjero. Se puede ver que esta deuda externa será
también eterna, alcanzando cifras inmensas, de pesadilla. Y así como el país se
endeuda en el extranjero al capital usurero internacional, con intereses siempre
en aumento, del mismo modo el particular se endeuda internamente a un igual
interés usurario con la banca interna, que, a su vez, depende por otros préstamos
del supercapitalismo exterior. Mientras tanto el organismo de control, creado por
el capital internacional judío "El Fondo Monetario Internacional", vigila y dirige
con mano férrea el suicidio de las agrupaciones nacionales. Chile ha pasado a
ser el mas obediente de los suicidas, el más aplicado de los autodestructores de
su propio pueblo y de sus trabajadores indefensos. El mas obediente cumplidor
de todas las ordenes del amo sádico. Sombrero (gorra) en mano pide y pide
prestado para poder pagar el interés del interés de sus prestamos crecientes y
acata las ordenes que látigo en mano, el prestamista le hace llegar a través de su
capataz y encomendero El Fondo Monetario Internacional.

A continuación vamos a reproducir algunos párrafos de "El Manifiesto para


el quebrantamiento de la Servidumbre del

Interés del Dinero" que fue el antídoto que el hitlerismo descubriera contra el
"Protocolo XX" de los Sabios de Sión.y que, al ser aplicado en Alemania,
destruyó esa servidumbre y estuvo a punto de aniquilar de una vez y para
siempre el virus de la Usura. Se dejó en claro que, en todo momento y lugar
puede una nación, un conglomerado humano, intentar salvarse de la catástrofe y
de la destrucción. La fórmula la dio el Nacionalsocialismo, el Hitlerismo. Y el
peligro fue tan grave para la ponzoña judaica, que se decidió urgentemente la
guerra total contra el Genio de los gentiles. Por miedo de que los pueblos, aún
hoy, vuelvan hacia Él sus ojos desesperados, ante la agonía que viven y ante el
fracaso de los sistemas que se dan como única alternativa, marxismo,
capitalismo, se ha inventado toda esa parafernalia del "holocausto del pueblo
elegido de jehová", de los crímenes nazistas, de la persecución, la tiranía, la
esclavitud, los genocidios raciales y demás argumentos con que se moviliza la
emoción de las masas, se obnubila la mente y se impide ver la realidad a los
arios idiotizados y a los animales-hombres. Todo ha sido planeado así
cuidadosamente y con siglos de antelación. Los mismos "Protocolos" lo dicen.
Creen poder valerse del Genio de los gentiles, utilizarle para cumplir sus planes
hasta sus últimas consecuencias: La imposición de su Mesías-Golem, de su
maquinaria cibernética, sobre la razón y carne de los esclavos, convertidos ya en
un amasijo de barro y excremento.

El autor de "El Manifiesto contra el Interés del Dinero" fue Gottfried Feder.
Sus principios fueron aplicados por Hitler,

una vez llegado al poder en Alemania. De importancia capital es poder conocer


que Feder era miembro permanente de La Sociedad Esotérica de Thule (la
Thulegesellschaft) de la que también lo fueran, como miembros invitados Adolf
Hitler, Rudolf Hess y Alfred Rosenberg, entre otros altos dirigentes del nazismo
De este modo, la doctrina aplicada, el antídoto contra el virus judío contra su
"esoterismo" de magia negra y de la Cábala numeral, del ―interés del dinero",
fue toda una operación de magia aria, de esoterismo hiperbóreo, nórdico y polar.

He aquí algunos extractos reveladores para Chile y los chilenos de hoy,


para los sudamericanos y todos los pueblos que gimen bajo el yugo del capital
judío internacional:

"El único remedio, el remedio radical para la curación de la humanidad


sufriente es: el quebrantamiento de la servidumbre del interés del dinero. Este
quebrantamiento significa la única posible y definitiva liberación del trabajo
productor de las potencias del dinero que dominan secretamente el orbe. El
quebrantamiento de la servidumbre del interés significa la restauración de la
libre personalidad, de la salvación del hombre de la esclavización y también de
la fascinación mágica en que su alma fue enredada por el consumismo”. (El
Manifiesto dice "mammonismo"; pero hemos adaptado el término a los tiempos
presentes de Chile y de las doctrinas judías de los "boys" de la Escuela de
Chicago y del judío Milton Friedman. En Chile inventaron los préstamos en
U.F. --Unidades de Fomento-- que obligan al deudor a vivir apenas para pagar el
interés del interés, como diría Feder). "Quien quiere combatir el capitalismo de
verdad debe quebrar la servidumbre del interés"

"Es bien sorprendente ver cómo la ideología marxista, desde Marx y


Engels, comenzando por el Manifiesto Comunista y subiendo hasta el programa
de Efurt, especialmente Kautzky (todos judíos) y también los actuales
mandatarios socialistas, se detienen como ante una voz de mando ante los
intereses del capital prestamista. La santidad del interés es el tabú; el interés es
lo más sacrosanto, también para los comunistas (que igualmente 'ayudan' a sus
socios -Comecón- cobrando enormes intereses en dinero y en sangre). Sacudir el
interés no lo ha osado nunca nadie. (Sólo los templarios prestaban sin interés.)
Mientras la propiedad, la nobleza, el honor, la seguridad de la persona y de los
bienes, los derechos de la Corona, las convicciones religiosas, el honor
castrense, la patria y la libertad están puestos más o menos fuera de la ley, el
interés es sagrado e intocable. Noli me tangere! Su peso gigantesco arrastra a la
nave estatal al abismo; es un enorme engaño, fraguado pura y exclusivamente en
beneficio de las grandes potencias del dinero".

"Los grandes poderosos del dinero están, por cierto, como última fuerza
impulsora detrás del imperialismo anglo-americano que abarca el mundo. Las
grandes potencias del dinero han financiado efectivamente la horrible matanza
de seres humanos de la Guerra Mundial. Las grandes potencias del dinero
ciertamente como propietarias de todos los grandes periódicos, han envuelto al
mundo en una red de mentiras. Han excitado con placer todas las pasiones bajas,
el ansia de lujo, el consumismo, los anhelos absurdos y las utopías... El espíritu
del consumismo sólo quiso conocer cifras de exportación, de riqueza nacional,
expansión, proyectos de la gran banca, financiación internacional, etcétera. Y ha
conducido a la ruina de la moral pública, al hundimiento de los círculos
dirigentes en el materialismo y el ansia de placer, a un achatamiento de la vida
nacional, factores todos que son culpables del terrible derrumbe.‖

"El interés, la afluencia de bienes sin esfuerzo y sin fin, la posesión de


dinero sin ninguna clase de trabajo (el judío tiene que 'dedicarse a orar a su
Dios') es lo que ha hecho crecer las grandes potencias del dinero. El interés del
dinero es el principio criminal del cual se genera la Internacional Dorada" -El
supercapitalismo-.

"Y el Derecho Romano, sobre el que se basa nuestra legislación, esta


hecho para proteger el gran capital y la usura; porque es el Derecho al servicio
de una plutocracia‖.

"El ansia de interés insaciable del gran capital prestamista es la maldición


de toda la humanidad trabajadora. El ingreso de la casa Rotschild, de los Cahn,
Löeb, Speyer, Schiff, Morgan, Vanderbilt y Astor, estimada en conjunto en por
lo menos sesenta o setenta mil millones (en aquellos años), con un rédito de un
5% de interés, significa un ingreso para estas ocho familias (judías) de 5-6 mil
millones, tanto o más que las entradas anuales del 75 % de los contribuyentes de
Prusia, en 1912, con un censo de 21.000.000, aproximadamente. Ocho
multimillonarios tienen tantos ingresos como 38 millones de alemanes”

"Mediante una intensa campaña de esclarecimiento se deberá poner en


evidencia al pueblo que el dinero no es ni debe ser otra cosa sino un bono por
trabajo efectuado; que toda economía altamente desarrollada necesita del dinero
como medio de intercambio; pero que con todo esto queda cumplida la función
del dinero, y que de ninguna manera le puede ser conferido al dinero, mediante
el interés, un poder sobrenatural de crecer por si mismo a costa del trabajo
productivo”.

"¡Desamparados balbucean los pueblos! Un ardiente ansia, un clamor por


la salvación pasa a través de las masas engañadas, con sus esperanzas frustradas.
Con risas y bailes, con cinematógrafos y desfiles, se trata de engañar al pueblo
para que olvide su lamentable destino, la traición, la terrible desilusión, la herida
interna... También en Rusia, la socialización, la estatización, ha probado ser un
fracaso. Y cuando la desesperación de todo el pueblo cunde, las bandas
mongólicas, el terror sangriento, las bayonetas solamente son capaces de
proteger a los tiranos de la venganza del pueblo engañado y explotado...‖

"También nosotros terminaremos así si continuamos dejando que el


gobierno siga en manos de los especuladores internacionales, representantes de
la burguesía expoliadora y de los miembros de una raza (antirraza) extraña a la
esencia del pueblo alemán".

Esto se aplica a Chile hoy casi en el detalle. Somos ya los esclavos de la


usura y del Contralor de la Usura, del Fondo Monetario Internacional.

Podríamos seguir reproduciendo el luminoso Manifiesto Nacional-


socialista en su totalidad; pero no es necesario. Ya hemos captado su esencia, y
ello sólo importa. ¿Cuál es la solución que la Alemania de Hitler aplicara al
final? Cambiar el valor dinero por el valor trabajo. Una solución simple, como
el huevo de Colón. Alemania no tenía dinero, pero si tenía el trabajo formidable
de su pueblo para pagar su deuda de guerra, impuesta por el Tratado de
Versalles. Y con ella pagó, con el producto de su trabajo. Nosotros no tenemos
este soberbio trabajo alemán, pero tenemos también un trabajo hábil y
esforzado. Y tenemos nuestras materias primas, elaboradas o semielaboradas.
Con ellas podríamos pagar. Pero si sólo pretendiéramos intentarlo, caería el
Gobierno que lo propusiera. A Alemania le declararon la guerra planetaria. A
Chile sólo les bastaría con que se moviera un solo dedo de la mano judía. A toda
la América del Sur la mantienen dividida para ello, con problemas de fronteras y
de reivindicaciones nacionales. Chile es el más vulnerable. La sombra
permanente de una posible guerra chileno-argentina es mantenida por medio de
judíos enquistados en la prensa de Buenos Aires, en las delegaciones para las
negociaciones de los acuerdos y por la acción de las logias masónicas. Por todos
los medios se tratará de evitar un entendimiento general latinoamericano para
enfrentar el problema de la deuda externa y de los intereses crecientes y
usurario. Se tratará de usar a ―alumnos aplicados" como agentes de desacuerdo,
instándolos a que negocien por separado, premiándolos por su fiel cumplimiento
en el pago de los intereses de los intereses de los intereses, de los préstamos
hechos y renovados para pagar sólo esos intereses.

Y Gottfried Feder afirma que la solución de todo el infernal asunto se


encuentra precisamente en la bancarrota estatal, como el único medio de
salvación de las economías nacionales. Sólo así los pueblos de hoy, de esta
coyuntura de la historia, cuando el judío se cree triunfador y dueño del mundo,
pueden llegar a liberarse de sus garras y escapar del círculo de magia negra en
que los tienen aprisionados, "hipnotizados", como a las víctimas de su Serpiente.

He aquí la solución, la única solución verdadera: dejar de pagar,


declararse en quiebra, en bancarrota nacional. ¿Y qué puede pasar? Nada.
absolutamente nada. Sólo un renacer del espíritu nacional, una liberación. Los
judíos de Norteamérica y de Rusia no van a declarar la guerra conjunta a su
universo de deudores. Aunque sí, desesperados, podrían declararse la guerra
entre ellos. Cosa que harán de todos modos, pues sus regímenes ya están
fracasados. Tampoco van a poder meter a los países a la cárcel, como en Chile
se ha hecho con los empresarios del "consumismo", que se declararon en quiebra
después de haber sacado sus capitales fuera del país. En este caso, el dinero y el
mismo oro de los acreedores habrían dejado de tener valor alguno. Sólo el
trabajo, los alimentos, las materias primas recuperarían su importancia. Y el
dinero, pero sólo como medio de intercambio. Se habría destruido el interés, el
caldo de cultivo del microbio, del virus planetario y galáctico.

¡Utopía, sueño vano! Porque el Führer ya se fue y no retornará tan pronto.


No antes de que lo lloren todos los seres y hasta los minerales y las plantas,
como a Baldur. No se encontrará el país capaz de arriesgarse, el gobernante
puro, honesto, leal, grande, como para preferir el sacrificio, el riesgo, el honor,
el combate, antes que defraudar a su pueblo y permitir que lo desangren. Preferir
la muerte antes que la ignominia de la esclavitud. Es cuestión de raza.

En todo el ámbito de nuestro mundo sudamericano, sólo un país ha tenido


estos impulsos, sin fructificar: Argentina. Debemos reconocerlo y admirarlo, aun
como destellos de un fuego fatuo. Y ello, a pesar de que Argentina se ha
prestado para realizar el trabajo del Enemigo, provocando continuamente a
Chile, casi al punto de producir la guerra tan deseada por aquellos que saben que
la complementación y la unión de estos dos países crearía un centro irresistible
de energía y magnetismo. Una posibilidad etnológica en el Cono Sur, en la
Hiperbórea sudpolar.

Y el Manifiesto 'Nacionalsocialista dice:

"La supresión del pago de intereses no es una bancarrota estatal


disimulada. El fantasma de la bancarrota estatal es, en efecto, un ogro de
cuentos infantiles inventado por las potencias prestamistas".

Ante el solo indicio auténtico de que un deudor pueda dejar de pagar los
intereses y hasta la deuda, la banca judía internacional empezará por bajar los
intereses, dará facilidades, declarará moratorias, y, por último, hasta condonará
la deuda, con tal de no tener que enfrentar el horror de el dinero deje de valer lo
que para el judío vale. Que llegue a no valer nada fuera de ser un medio de
intercambio. Aceptará todo esto con el conocimiento de "viejos luchadores" de
que la memoria del goym , de los animales-hombres y también de los arios
embrutecidos es breve. Y de este modo, dentro de muy poco volverá a prestar
con intereses (comenzando con intereses bajos o disimulados). Y así el caldo de
la Usura le permitirá seguir subsistiendo sin trabajar, explotando el trabajo de
los otros y "orando a Jehová", para preparar el advenimiento de su Rey-Mesías.

Pero antes de llegar a una situación tan extrema, el capital internacional


hará uso de todos sus expedientes conocidos y desconocidos: asesinatos y
cambios de gobiernos de los gentiles, guerras locales (Argentina y Chile, Irán e
Irak, Libano, etcétera), amenazas, informes monetarios, divisiones, enemistades.

Sólo en un punto de la tierra esto se logró: en la Alemania de Adolf Hitler,


en su Tercer Reich. Por eso Ezra Pound estuvo con él aún en contra de su país
de usureros y de judíos; por eso lo estuvo John Amery, el inglés; Wi1liam Joyce,
el irlandés; Robert Brasillach, el francés; Knut Hamsun el noruego y lo estoy
aún yo, el chileno. Porque, como dice Ezra Pound en su inmortal Canto:

"Con usura no hay hombre que tenga casa de buena piedra.

Con usura no llega al mercado la lana,

no aportan las ovejas ganancias con la usura.

La usura es una peste, la usura

embota la destreza de la hilandera.

Tu pan siempre será de harapos rancios,

seco será tu pan como papel,

sin trigo de montaña, harina fuerte.

Con usura la línea se hace tosca,

con usura no hay límites precisos

y no hay hombre que encuentre lugar para vivir.

Sin piedra está el picapedrero,

sin hilo el tejedor.

Pietro Lombardo no llegó por la usura.

Porque con la usura ningún cuadro

está hecho para perdurar,

ni para vivir con él,

sino para venderse, venderse con premura.

Pier della Francesca, ni Angelico llegaron

por la usura,

ni catedral alguna de piedra firmada: Adamo me fecit.

La usura oxidara el cincel,


enmoheciera el arte, el artesano...

Cadáveres se aprestan al banquete

por orden de la Usura."

HITLERISMO ESOTÉRICO:

1945 de la era judeocristiana; Año Cincuenta y Seis de Nuestra Era, Hitleriana;


mes de Abril, de Venus. Berlín está transformado en un infierno, se combate en
cada esquina, el Bunker del Fuhrer es bombardeado sin cesar por la aviación
rusa, por obuses de todos los calibres, las juventudes de Hitler luchan sin dar ni
pedir cuartel. Los restos de tropas S.S., los que no han muerto en el frente, en las
estepas, se baten desesperadamente, las mujeres, los ancianos: la División S.S.
"Carlo Magno", compuesta por franceses, forma un cordón en torno al Búnker;
los españoles heroicos y hasta monjes tibetanos, ligados misteriosamente a
Hitler, entregan allí sus vidas... ¡Qué batalla tan inmensa, qué combate tan
glorioso!... También quise estar allí y morir por mi Fuhrer. Mi mujer estaba de
acuerdo en que lo hiciera y deseó acompañarme. Más de cien nacionalsocialistas
chilenos se habían presentado como voluntarios en la ciudad de Valparaíso, pero
el Embajador alemán, casado con norteamericana, no los aceptó. Aún viven
camaradas que podrían confirmarlo. A mí me lo impidieron amigos alemanes
S.S. Tal vez, aun sin saberlo, lo hicieron para que pudiera un día escribir estos
libros... Pero hoy Treinta de Abril, del Año Cien de nuestra era, con los dientes
apretados, lo recuerdo todo. Esa angustia, ese dolor, ese destrozo del corazón...,
todo, todo se había acabado; los inmensos sueños de grandeza y redención
humana... Hasta que supimos la verdad: Hitler no había muerto. Desde los
hielos de la Antártica, retornaria...

Un poco antes del final, allá en el Bunker, mientras tronaba la metra-


lla, con el sordo, hondo fragor de los hielos que se desprenden de las grandes
barreras de los polos, un fiel S.S. preguntó a su Fuhrer, con voz enron-
quecida: "Mi Fuhrer, si usted desaparece, ¿por quién combatiremos...?"

Y Adolf Hitler le responde: "Por el Hombre que Vendrá"..

Camarada, bien sabes que el tiempo ha madurado, que no hay cabida ya


para la política contingente. Únicamente, lo habrá para la metapolítica.
Terminada la Segunda Guerra Mundial, tras el grandioso experimento del
Nacionalsocialismo, de la alquimia racista, de la economía sin usura, del "Frente
del Trabajo", de la "Fuerza por la Alegría", de "Suelo y Sangre", del "Espacio
Vital", nada nuevo ya queda por realizar en la superficie de esta tierra devastada.
Y ello no porque no sea posible volver a intentarlo, pues, de hecho, los guerreros
y camaradas del Círculo Externo lo están haciendo aquí, sino porque todo ya ha
sido realizado en otra parte y en otra tierra. En la Primera Tierra, en el
Anticton pitagórico, la Anti-Tierra, donde Adolf Hitler se trasladó con los más
fieles y más puros de su raza, los más leales y donde jamás podrá ser alcanzado,
salvo por los Iniciados del Hitlerismo Esotérico. Porque Adolf Hitler se salió a
otro espacio, a otra realidad.

Esto deberás creérmelo, camarada. Fue parte de la Operación Barba-


rroja, que se cumple después del año 1945 y de la aparente derrota material del
Nazismo. Como te lo revelara al comienzo de estas páginas, que ahora he vuelto
a releer, me encontré en la Antártica con la más pura presencia del Avatara, con
su Pensamiento. Desde entonces nunca más he dejado de sentir su presencia, en
forma de acontecimientos, de situaciones, que son órdenes que yo debo
obedecer. Pero El, Adolf Hitler, se halla protegido por círculos concéntricos de
barreras impenetrables ("Noli me tangere!"). Solamente Rudolf Hess,
reconstruido en su cuerpo glorioso, de Vájra inmortal, en el Walhalla, podrá
encontrarse hoy en su presencia, en un hoy de Otro Tiempo. Y aunque yo me
esfuerzo por llegar también allí, como lo harás tú, camarada, sigo, sin embargo,
en este plano, en esta Segunda Tierra, para ayudarte a continuar luchando juntos
por esos grandes ideales, que no pierden su vigencia, haciéndose por el contrario
universales, con el derrumbe y fracaso de todos los sistemas que el judío
propiciara. Yo también soy un prisionero del Mito, que hará de mi lo que Él
quiera para el cumplimiento exacto de sus construcciones arquetípicas. Ha
llegado por esto el momento de la meta-politica, de la imago-política, cuando sin
que nosotros mismos lo sepamos habremos triunfado también en lo externo, y en
el umbral de la catástrofe, en el filo del desastre universal. Y serán los idealistas
de este mundo, los jóvenes que creyeron en la revolución, los que estarán a
nuestro lado, al comprender que hemos sido los únicos que jamás claudicaron y
que supimos quién era el Enemigo, el que manejaba sus sistemas, sus doctrinas
y que las destruyó. Por ello, nuestra Lucha es en más de un plano, como lo fuera
la de los Dioses, nuestros ancestros, que llegaron aquí a combatir. Es simultánea,
solidaria, "sincronística". Porque nosotros somos esos Dioses que descendieron
al pesado y tenebroso mundo del Demiurgo, para tratar de arrebatárselo.
Seguiremos sus ejemplos, aun cuando veamos oscurecerse cada vez más el
horizonte, sin esperanzas ya. Perseveraremos hasta que "la esperanza cree, en su
propio naufragio, la cosa contemplada..." "Insistiendo en los viejos sueños,
para que nuestro mundo no pierda la esperanza..”, como nos lo ordenara
nuestro viejo amigo y camarada, el gran poeta Ezra Pound.

"Wan allem Untreu werden so bleiben wir dog Treu.” ¡Cuando todos
sean desleales, nosotros, nos mantendremos fieles! Vendrán tiempos muy
difíciles para esta torturada tierra, descendiendo en el más oscuro Kaliyuga, en
especial en Chile, esta patria mística. Tratad, por ello, ¡oh, héroes!, de difundir
los ideales de Adolf Hitler. En medio del Océano de la corrupción, del crimen y
de la esclavitud, construid islas-refugios, colonias autárquicas inexpugnables,
defendidas hasta con los dientes, hasta el último aliento, donde el Enemigo no
pueda jamás penetrar. Esto deberán realizarlo los guerreros hitleristas del
Círculo Medio. Colonias racistas, regidas por los principios del Hitlerismo
Esotérico, dentro de una organización concéntrica,. circular, hacia el centro,
implosivamente hacia el Avatara, hacia el más recóndito punto de vuestras
almas, que es EL. Y podréis tener la seguridad de que el Avatara jamás os
abandonará, porque una vez allí, en el Centro inviolable de ese Círculo, que los
Inkas llamaban Huilkanota, una vez sentados en el Centro de esa Flor
Inexistente, en ese CuartelGendarrnería, en esa Colonia regida por los principios
ideales del Hitlerismo Esotérico, El vendrá a revelaros el conocimiento de su
Otra Ciencia, portándoos hacia la Tierra Hueca, hacia Anticton, la Primera
Tierra de los Antiguos, y, luego, hacia el Walhalla de Venus, hacia la Asgard
del Sol Negro y hacia la Hiperbórea del Rayo Verde... ¡Así, seréis invencibles!

Y yo también estaré con vosotros, ¡oh, guerreros! ¡Oh, Sacerdotes-Magos


del Hitlerismo Esotérico! ¡Oh, Guerreros deWotan y del Último Avatara!...
Estaré allí, aunque ya no esté...

Camaradas, aquí nos detendremos, porque no es posible explicar todas


las cosas... Si todas las cosas se explicaran, ya no existirían...

En este año de 1989, de la era judeo-cristiana, en Piscis, Año Cien de la


Era Hitleriana, en Acuario, al cumplirse Cien Años del Nacimiento de Nuestro
Exaltado Guía, Adolf Hitler, en quien encarnara el Fuhrer Prinzip y también el
Ultimo Avatara, levantemos hacia Él nuestro brazo, y, en el saludo de la
Männerbunde, con el Vara-Mudra y con el Mantra mágico de los trovadores
Minnesänger, brindémosle finalmente nuestro homenaje de lealtad y veneración
eternas:

Heil Hitler! Sieg Heil!

Año C. A XX
del Mes de
Venus, de
Oyeihue, el
Lucero del
Alba.

También podría gustarte