0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
4 vistas2 páginas
Las monarquías que existían en Europa Occidental a finales de la Edad Media y comienzos de la Edad Moderna eran autoritarias, como las de Francia, Austria, España, Inglaterra y Escocia. Estas monarquías se caracterizaban por ser absolutistas, otorgando todo el poder a los reyes sin una entidad que pudiera detenerlos. La religión cristiana también apoyaba este sistema al afirmar que los reyes tenían un derecho divino para gobernar.
Las monarquías que existían en Europa Occidental a finales de la Edad Media y comienzos de la Edad Moderna eran autoritarias, como las de Francia, Austria, España, Inglaterra y Escocia. Estas monarquías se caracterizaban por ser absolutistas, otorgando todo el poder a los reyes sin una entidad que pudiera detenerlos. La religión cristiana también apoyaba este sistema al afirmar que los reyes tenían un derecho divino para gobernar.
Las monarquías que existían en Europa Occidental a finales de la Edad Media y comienzos de la Edad Moderna eran autoritarias, como las de Francia, Austria, España, Inglaterra y Escocia. Estas monarquías se caracterizaban por ser absolutistas, otorgando todo el poder a los reyes sin una entidad que pudiera detenerlos. La religión cristiana también apoyaba este sistema al afirmar que los reyes tenían un derecho divino para gobernar.
- Para los inicios del siglo XVII, las monarquías que había en Europa
eran de tipo absolutista. Las monarquías del antiguo régimen se caracterizaban por su absolutismo, teniendo los reyes todo el poder. En otras palabras, los monarcas podían intervenir en los asuntos del estado a su antojo, sin que existiese una entidad suficientemente efectiva para detenerlos. La religión y el absolutismo Algo que sirvió para justificar a las monarquías absolutistas en Europa fue la fe cristiana, ya que la iglesia apoyaba los reyes al afirmar que existía un derecho divino. Esta noción de derecho divino se refería a que los reyes eran elegidos por dios, y cualquier desobediencia al rey era vista, por lo tanto, como una traición al mismo dios. En conclusión, en el siglo XVII Europa todavía no había vivido las revoluciones burguesas, estando en auge el sistema del antiguo régimen. Ello significaba que las monarquías eran basadas en el absolutismo, teniendo a los reyes de Francia como uno de sus máximos exponentes.
En Europa occidental, las monarquías reinantes, durante el siglo XVII,
eran la Monarquía Española o Hispana, que poseía la supremacía sobre las demás monarquías europeas. Además, existía la monarquía portuguesa, la monarquía francesa, la monarquía británica, la monarquía sueca y la monarquía prusiana. Las monarquías holandesa e italiana fueron derivaciones posteriores de la española sobre los territorios dominados por esta en esa época; además, la monarquía prusiana estaba enfrentada a la monarquía austriaca. “Las monarquías de Europa Occidental entre finales de la Edad Media y comienzos de la Edad Moderna pueden calificarse de monarquías autoritarias, como la de Luis XI en Francia, Maximiliano I en Austria, los Reyes Católicos en España, Enrique VIII en Inglaterra o María I en Escocia.”
2.- El mercantilismo sugiere que el gobierno dirigente de una nación
debería buscar la consecución de esos objetivos mediante una política proteccionista sobre su economía, favoreciendo la exportación y desfavoreciendo la importación, sobre todo mediante la imposición de aranceles. Tuvo como característica principal el papel preponderante del Estado sobre la economía. Las ideas mercantilistas sostenían que la importancia de un Estado se medía por su poder económico, por lo que la acumulación de las riquezas nacionales fue el principal objetivo de esta doctrina. La finalidad del mercantilismo, era la acumulación de las riquezas nacionales, la protección industrial local de las producciones extranjeras, el fomento del trabajo de la tierra y la producción de manufacturas.
3.- Las principales causas que explican este estancamiento demográfico
son la paralización del crecimiento de la producción agraria debido a diversos factores. Estos fueron un cambio climático, la aparición de malas cosechas, los movimientos migratorios hacia América, la difusión de epidemias y las guerras. Migración al nuevo continente. Bajas ocasionadas por las guerras. Expulsión de los moriscos. Conjunto de pestes y epidemias
4.- Por tanto, se considera que el punto de partida de la Edad Moderna
es el final del Imperio Bizantino (caída de Constantinopla en 1453), mientras que el final de esta amplia etapa histórica será el estallido de la Revolución francesa en 1789.