Planificación en el turismo

La planificación turística es el camino que un negocio de nuestro sector recorre

para llegar a su objetivo.

Normalmente hay varias metas pequeñas que nos permiten alcanzar la meta
principal.

Según la naturaleza de los objetivos, se pueden clasificar en económicos,

cuando hablamos de los beneficios que la empresa se propone alcanzar;
técnicos, cuando hablamos de la calidad de los servicios prestados o de los
productos ofertados; o sociales, cuando la empresa también se preocupa por el
medioambiente, condiciones laborales de los trabajadores, causas solidarias,
etc.
En cuanto a los tiempos en los que se quiere conseguir los objetivos, pueden ser
a corto plazo, cuando se habla de algo que se puede alcanzar en cuestión de
meses; medio plazo, que pueden ser 1 o 2 años; y largo plazo, cuando hablamos
de un período de varios años; aunque estos conceptos son relativos y cada
empresa puede tener diferentes nociones de corto y largo plazo. Lo importante
es que sepas que debes tener objetivos asequibles a corto plazo que te lleven a
conseguir los objetivos a largo plazo, que probablemente sean más ambiciosos.

Una vez ya sepas cuáles son tus objetivos, entonces podrás diseñar el proceso
de trabajo que te llevará a alcanzarlos.

Una vez sepas cuáles son los objetivos que te has marcado, debes hacer una
buena planificación empresarial turística para llegar a ellos.

Existen principalmente tres aspectos de tu empresa que debes planificar:

Marketing: todas aquellas acciones que vas a realizar para promocionar tu

servicio o producto, ya sea publicidad tradicional, marketing digital, estrategia
de precios, fidelización de clientes, etc.
Mejoras de tu producto o servicio: todo aquello que puedes hacer para que tus
clientes tengan una mejor experiencia, tanto en el proceso de compra como en
el disfrute de lo que han adquirido.
Economía: por supuesto, necesitas que tu servicio o producto sea rentable, y
para ello debes tener en cuenta todos los recursos que necesitas para sacarlo al
mercado (empleados, alquileres, materiales, etc.) y obtener un beneficio.

Hay que mejorar los servicios para que el cliente viva una experiencia
inolvidable

Normalmente habrá varias personas que se encarguen de cada una de estas

ramas para llevar a cabo la planificación turística, aunque si se trata de una
pequeña pyme es posible que la misma persona trabaje en varios campos. En
cualquier caso, es necesario trabajar lo más coordinadamente posible para que
todas las partes funcionen compenetradas.

Por ejemplo, de nada sirve que las acciones de marketing estén teniendo mucho
éxito si estás gastando más dinero del que deberías. En este caso, funcionaría la
parte del marketing, pero no de la economía.

Una buena manera de tener un control para que la planificación se cumpla es

establecer una serie de normas y procedimientos que digan cómo se debe hacer
cada tarea y cuáles son los plazos establecidos para cada una. Por otro lado,
cada acción que se tome en la empresa debe estar limitada por un presupuesto,
de manera que se controle el gasto que se hace.