UNIVERSIDAD CATOLICA DE

HONDURAS
CAMPUS SAGRADO CORAZON DE
JESUS

Tarea #1: Ensayo

ALBACEATO

I Parcial

María Fernanda Morales Ruiz

0801 – 2005 – 14098

Abogado. Renato Lacayo

Derecho Civil III

Fecha de entrega

05/06/2023 – 14/06/2023
 ALBACEATO/ ALBACEA

ENSAYO

“El término albacea es utilizado jurídicamente para nombrar a una persona que es
elegida por otra persona para que, a su muerte, esta sea la encargada de la
supervisión y cumplimiento del testamento.

Pero no únicamente el albacea tiene que surgir cuando una persona está al borde la
muerte, sino también, el papel jurídico del albacea puede obtenerse cuando una
persona que está imposibilitada, ya sea mental o físicamente, para cumplir o disponer
de sus bienes de la manera en la que se desea.” (Loft, 2022)

La persona conocida como “albacea” es aquella persona designada por el testador

para que resguarde su testamento y las disposiciones de este, básicamente es la
persona encargada de que la última voluntad del testador se cumpla, es aquel
encargado de hacer cumplir con dicho testamento.

Por ende, el albaceato consiste en la persona designada por el testador para que
asegure la correcta ejecución y cumplimiento de su testamento, este es un puesto
completamente voluntario, el testador debe dejar constancia en su testamento de
quien será su albacea y el albacea debe voluntariamente aceptar dicho cargo y este
no puede ser transferido a nadie ni delegar sus funciones, ni siquiera a sus herederos
(a menos que esta posibilidad este escrita en el testamento), ya que el albacea
usualmente es una persona de suma confianza para el testador y para que albaceato
funcione, como mencione antes, debe ser de expresa mención en dicho testamento.

El testador puede designar a varias personas como sus albaceas, las cuales actuarán
de forma mancomunada o solidaria, según se indique. Es decir, todos son
responsables en sus funciones o se dividen las obligaciones entre todos.

El albacea tendrá una serie de funciones que quedarán plasmadas en el testamento.

Tendrá que velar por la seguridad de los bienes mientras no se haya hecho el
inventario solemne. Además, debe procurar que este se lleve a cabo. Como ejecutor
del testamento, debe asegurarse que todas las personas interesadas sean parte del
proceso.

Los albaceas tendrán todas las facultades que expresamente el testador le haya
conferido a través del testamento, siempre y cuando no vayan en contra de la ley ya
que como sabemos, nadie está por encima de la ley.

Históricamente como la mayoría del derecho, el albaceato surge en el derecho

romano, sin embargo, toma relevancia en sociedad gracias al derecho canónico ya
que algunas familias adineradas dejaban sus bienes o patrimonio en general, al
servicio de la iglesia católica y de los desposeídos, convirtiendo a los obispos de cada
localidad en ‘administradores’ y ‘contadores repartidores’ de los recursos legados, así
es como inicia la figura de albaceato.

Igual que muchas palabras que empiezan por al- (alcalde, alcaide, alférez, alferza,
alguacil, almirante) la palabra albacea viene del árabe hispano. En este caso es ‫لوصية‬
(al-Wasiyya = el testamento). Se refiere a la persona autorizada por la ley para
ejecutar un testamento.

En caso de ausencia de testamento y de orden judicial, se denomina albacea legítimo

a aquel a quien compete por derecho cumplir la voluntad del testador. Finalmente, se
llama albacea universal a quien tiene poder irrestricto para cumplir íntegramente todas
las disposiciones de un testamento. También el albacea es considerado el ayudante
inmediato que en un futuro estará preparado para ocupar el cargo de la persona a la
que está referida dicha ocupación.

Quienes han sido declarados albaceas tienen la libertad de rechazar este

nombramiento, sin dar mayores explicaciones, ya que como mencionaba
anteriormente este es un cargo completamente voluntario, por ende el posible albacea
lo puede tanto aceptar como rechazar. De igual forma, si deciden renunciar después
haber aceptado la misión, pueden hacerlo. Aunque en la mayoría de las legislaciones
sí se estipula que deben justificar adecuadamente esta decisión, esto dependerá de
las regulaciones de esta figura en la ley de cada país.

El testador no está obligado a pagar por los servicios que cumpla un albacea.

Tampoco los herederos. Aunque por lo general, dentro del testamento se suele
asignar un importe correspondiente a honorarios profesionales para quienes ejercen
esta figura.

Las razones para nombrar un albacea pueden variar acorde a la persona testadora,
pero la principal ventaja o razón es la seguridad que aporta al testador para cumplir su
voluntad, ya que al nombrar un albacea está garantizando la correcta ejecución y
cumplimiento de su última voluntad (expresada a través del testamento).

El albacea se encargará de cumplir con lo que determina el testamento y resguardar

los bienes muebles e inmuebles (además del metálico si lo hubiese).  Y además se
encargará de vigilar el legado del fallecido mientras duren sus funciones, por ende
otras de sus ventajas es la protección de su patrimonio a heredar, nuevamente
asociamos esta figura a la mayor seguridad para el testador.

Este nombramiento suele hacerse cuando se trata de herencias grandes o cuando se

prevé que puede haber conflictos tras el fallecimiento entre los herederos. Aquí el
albacea actuará como un respaldo para que se cumplan las decisiones del fallecido. 

Al igual que en el resto de los detalles sobre el nombramiento del albacea, será el
testador quien indique por cuánto tiempo ejercerá estas funciones. En caso de que no
lo especifique entonces se recurre a las leyes para definir este aspecto, y esto
efectivamente dependerá de la ley especifica de cada país, en el caso de Honduras ni
siquiera se acepta la figura de albaceato, por ende no sabemos cómo se regularía, sin
embargo podemos tomar ejemplo de la ley de otros países.

El plazo para cumplir las funciones de albacea en la mayoría de países será de un año

cuando no se haya especificado otro periodo en el testamento. El tiempo cuenta a
partir del momento en el cual la persona haya aceptado el cargo.
Pasado este tiempo, si aún no se han cumplido con todas las disposiciones, puede ser
prorrogado. La extensión también puede quedar plasmada en el documento, por
disposición del testador. O, en caso que no sea así, la prórroga será por un año más.

Luego, si es necesario se puede volver a prorrogar por los herederos y el juez por el
tiempo que crean necesario. En el supuesto de que la decisión de extender el periodo
la tome la mayoría de los herederos y no la totalidad, entonces será de un año.

Un albacea puede ser cualquier persona; sin embargo, por motivos de confianza del
testador como mencionaba anteriormente, es una persona de confianza o que sea
completamente imparcial a la situación, en estos casos puede ser un abogado, un juez
que a su vez nombra a un tercero. 

Es decir, un albacea puede ser nombrado por un testador, herederos, legatarios o por
un juez. Este último es en caso de que no exista un testamento o bien, el titular de los
derechos no pueda administrar sus bienes, pero tampoco pueda nombrar a una
persona que lo represente. 

Cabe destacar que el ser un albacea no es significado de ser dueño de los bienes
materiales o económicos, simplemente es un administrador y presta sus servicios de
manera gratuita, a menos que haya un acuerdo de una remuneración por sus servicios
y esté establecido por la ley. 

Tipos de albacea

El tipo de albaceazgo que se designa dependerá de los objetivos que el testador

necesita, así también, de aquellas facultades que el albacea puede o no cumplir. Esto
es de vital importancia al momento de saber que es un albacea. 

 Universal

Aquel que tiene el cargo de ejecutar y administrar todo lo testamentado. Por ende,
tiene acceso a las funciones que su nombramiento requiera. 

 Particular

Tiene la facultad de ejecutar y administrar los objetivos determinados por su

empleador, es decir, solamente puede intervenir en las situaciones que le competen o
para las cuales fue nombrado. 

 Unipersonal 

Cuando hablamos de que es un albacea, es importante decir que solamente una

persona es la encargada de ver y de ejecutar lo solicitado por el titular de los
derechos. 

 Pluripersonal

Varios albaceas asumen el papel, esto comúnmente ocurre cuando el titular de los
derechos tiene muchas propiedades, pagos y situaciones legales a su nombre, que
por el tiempo necesita cubrir lo más pronto posible. 

 Legal
Este es designado por un juez de conciliación en caso de que no exista un documento
testamentario o bien, una persona no tenga las facultades de nombrar algún
representante.

Funciones de un albacea

Su principal función es velar por una adecuada ejecución en el testamento. 

Si el testador no hubiera especificado las facultades del albacea, la ley (dependiendo

del país) determina las siguientes:

 Disponer y pagar los sufragios y el funeral del testador de acuerdo a lo

dispuesto por el testador en el testamento; y en su defecto, según la costumbre
del pueblo. 

 Satisfacer los legados que consistan en metálico, con el beneplácito del

heredero.

 Vigilar que todo lo que especifique en el testamento se ejecute y sostener su

validez en juicio o fuera de él, siendo siempre justo. 

Dentro de las obligaciones y poderes que tiene un albacea están:

 La presentación y cumplimiento del testamento

 Asegurar todos los bienes que se encuentran registrados en la herencia

 La realización de inventarios con el fin de conocer todo el patrimonio

 Pago de deudas mortuorias, hereditarias y testamentarias, esto también aplica

si la situación de albaceazgo es por una situación de problemas de salud o
mentales que presente el titular de la propiedad

 Se debe adjudicar a cada uno de los herederos y legatarios los bienes que se
lean han sido otorgados

¿LO ACEPTA Y REGULA NUESTRA LEY?

Ahora bien, hablando específicamente de Honduras, según nuestro código civil en el

artículo 1216, no se acepta el albaceato, por ende nuestra ley no lo acepta y como
consecuencia tampoco lo regula, esto debido a que en nuestra ley los ejecutores de
las disposiciones del testador serán los propios herederos o los representantes
legales, es por esto que se prohíbe en nuestro país el nombramiento de albaceas.

“Artículo 1216. Los herederos o sus representantes legales son los ejecutores de las
disposiciones del testador. Se prohíbe el nombramiento de albaceas.”

-Código Civil de Honduras (1906)