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LEGADOS

Mario Estuardo Gordillo Galindo define El legado como una forma de sucesión particular,
mediante la cual el fallecido deja un concreto bien o derecho, o un conjunto de bienes o
derechos singulares a una o varias personas. El que recibe dicho bien en concreto se llama
legatario, y únicamente sucede al fallecido en aquello que le ha sido legado y no con carácter
general. Es una figura que, por su especialidad, a veces se ha comparado con una donación
mortis causa.
¿Qué es un legado? Un legado es una institución sucesoria a través de la cual el testador
deja en su testamento un bien o derecho concreto a una persona, que se denomina legatario.
Es decir, el legatario no recibe toda la herencia o un porcentaje de la misma, sino aquella
cosa concreta que ha dispuesto el testador.
El legado es una liberalidad que hace el testador, a favor de una persona al que no se le
atribuye la cualidad de heredero, entregándole un bien específico.
Los herederos a los que el testador haya gravado con legados quedarán obligados todos en
la misma proporción en que sean herederos.
El legado habrá de hacerse obligatoriamente en testamento.
Será válido el legado hecho a un tercero de una cosa propia del heredero o de un legatario,
quienes, al aceptar la sucesión, deberán entregar la cosa legada o su justo precio, siempre y
cuando no se perjudique la legítima de los herederos forzosos. (Alfonso Brañas)
Aceptación o renuncia del legado
Puig Peña, “nadie puede ser obligado a recibir un beneficio en contra de su voluntad”, por
lo que la persona a quien se designa legataria, en tanto no acepte el legado, puede proceder
a renunciar o repudiar el mismo. La aceptación puede ser expresa (expresa se acepta el
legado expresamente) cuando se pide; y tacita, cuando se recibe la cosa.
Artículos código civil
Art. 1002 al 1025
CLASES DE LEGADOS
El Código Civil enumera las clases de legados contemplados en nuestra legislación.
Legado en especie arto. 1005.
Legado de cosa indeterminada arto. 1006.
Legado de crédito arto. 1007.
Legado remuneratorio arto. 1008.
Legado al acreedor arto 1009.
Legado de pensión arto. 1011.
Legado con accesorios arto. 1014.
Legado empeñado arto. 1017.
EL ALBACEA
Antecedentes históricos.
El término albacea proviene de las palabras árabes al waci que significan ejecutor. Según el
autor Carrizosa Pardo: “Donde tuvo mayor relevancia fue en el derecho canónico debido
al interés que prevalecía en la iglesia de velar por la materialización de las disposiciones del
causante, especialmente cuando fueren de beneficio o piadosas.”.
En el derecho consuetudinario francés, también se desarrolló ampliamente tal institución,
siendo recogida posteriormente por el código francés y asimismo por muchas legislaciones
latinas a imitación de estos.
Dos modalidades presentan el albaceazgo a través de la historia según el citado autor:
a) “En las legislaciones latinas y germanas constituye una institución secundaria sujeta o
subordinada a la voluntad del testador, que puede o no existir en la sucesión testamentaria,
sin que ello incida en la administración, liquidación y repartición de la masa hereditaria;
b) En las legislaciones anglosajonas, si es una institución esencial, pues éstas adoptan como
régimen la existencia del albacea para que éste ejecute las disposiciones del causante siendo
su función propia liquidar la herencia y sin cuya participación no podrá efectuarse.”

Definición.
Varios autores de renombre definen el albaceazgo como la Institución jurídica por cuya
virtud una o más personas, nombradas generalmente por el testador, son encargadas de
vigilar y dar cumplimiento a lo ordenado en el testamento asegurando así la efectividad de
sus disposiciones.
Para Rafael Rojina Villegas: “Son personas designadas por el testador o por los herederos
para cumplir las disposiciones testamentarias o para representar a la sucesión y ejercitar
todas las acciones correspondientes al de cujus así como cumplir sus obligaciones,
procediendo a la administración, liquidación y división de la herencia
Podemos decir entonces que el albacea es aquella persona encargada de cumplir la voluntad
del testador, también se encarga de la buena administración de los bienes ya que él será el
responsable y tendrá que rendir cuentas en su debido momento. Es aquella persona que,
por sus condiciones personales o técnicas, o por ambas circunstancias a la vez, responde a
una situación de confianza en el causante y por cuya virtud se produce una especie de
asignación personalísima, intransferible a terceros.

Regulación legal
Artículo 1041 del Código Civil: Albacea o ejecutor testamentario, es la persona a quien el
testador encarga el cumplimiento de su voluntad.
Los albaceas tendrán todas las facultades que expresamente les haya conferido el testador,
y no sean contrarias a las leyes.
Naturaleza jurídica del albaceazgo.
La naturaleza jurídica del albaceazgo ha causado una larga controversia, como suele ocurrir
siempre que una institución no encaja de modo perfecto en los moldes de las otras
instituciones típicas. Expondremos a continuación las teorías que han tenido mayor
repercusión doctrinaria y legislativa.
Características del Albacea.
Es un cargo testamentario: El autor Alfonso Brañas sostiene que: “En la mayoría de
legislaciones es facultad del testador el nombramiento del albacea, lo cual deja suponer que
si se desea que en la sucesión hereditaria exista dicha institución es necesario que se nombre
en el otorgamiento del mismo, pues no es permitido que se nombre en ningún otro
documento público y en todo caso se perdería la cualidad de cargo testamentario porque
se originaría de otro documento diferente.
Regulación legal: se encuentra plasmado el artículo 1041 del Código Civil porque tiene su
origen en una designación contenida en testamento, sin embargo, puede ser nombrado
judicialmente en los casos de renuncia, remoción o falta del que estaba nombrado en el
instrumento y cuando hubiere partición de los herederos instituidos, quienes podrán exigir
garantía al albacea nombrado o exigirla en su caso al propio juez. Artículos 1042 y 1043 del
Código Civil.
Es un cargo personalísimo: está fundamentado en la confianza que tiene el testador al que
será su representante en este caso el albacea.
Cuando se habla de personalísimo se entiende que no se puede transmitir, que es inherente
a la persona, es decir una vez aceptado el cargo el albacea no puede transmitir su
responsabilidad a otra persona.
Regulación legal: Art 1055.
Es un cargo voluntario: la aceptación del cargo de albacea es esencialmente voluntario, sin
embargo, una vez aceptado el cargo, no se puede renunciar a él sin que medie justa causa.
Si bien es cierto, el albacea es nombrado por el testador, la persona designada puede desistir
del cargo y no aceptarlo, no es obligación ejercer el cargo.
Regulación legal: ARTÍCULO 1049
Es un cargo oneroso: la legislación guatemalteca se plasma el carácter oneroso del cargo de
albacea al fijar una especie de arancel en cuanto a la retribución que percibirá por el ejercicio
del mismo tomando como base el activo por él administrado o inventariado, cosa que es
justa, aunque dicha institución provenga de un acto de confianza, ya que su ejercicio implica
tiempo de dedicación.”
Así mismo al aceptar dicho cargo contrae un sin número de obligaciones con respecto a
los herederos del causante y a su vez permite que éstos o los interesados con mayor derecho
puedan exigir a albacea la efectividad en el desempeño del cargo conforme a los
lineamientos legales trazados por el testador.
Regulación legal: ARTÍCULO 1063.
El ARTÍCULO 1062 establece que los gastos del albaceazgo se pagaran con la herencia.
Es un cargo Temporal: El ejercicio del cargo de albacea se debe desarrollar dentro del plazo
que fija el testador o subsidiariamente dentro de un año como lo establece nuestra ley, plazo
que podrá ampliarse dependiendo si las circunstancias lo hacen aconsejable a juicio de un
juez, es decir tiene un tiempo determinado para que se cumpla con el mandato.
Regulación legal: ARTÍCULO 1058.
ARTÍCULO 1059.
ARTÍCULO 1060.
Clasificación del Albacea.
Testamentario: Según Manuel Ossorio: “Son aquellos nombrados para desempeñar el cargo
en el mismo documento donde consta el testamento, lógicamente designados por el
otorgante. En casi todas las legislaciones el cargo de albacea proviene de un testamento,
quizá debido a los principios que informan a la institución como: Confianza, imparcialidad
y utilidad; y en ese sentido su fuente es más sólida pues es de suponer que el otorgante
nombraría para este cargo a alguien que conoce por sus cualidades personales o técnicas.
Regulación legal: ARTÍCULO 1041. Albacea o ejecutor testamentario, es la persona a quien
el testador encarga el cumplimiento de su voluntad
Judicial: Son aquellos designados en determinados supuestos por un juez de primera
instancia a solicitud de los herederos
Regulación legal: ARTÍCULO 1042.
ARTÍCULO 1043.
Legitimo: Es decir que al no haber nombramiento de albacea a los herederos del testador
les corresponde ejecutar las disposiciones de última voluntad del causante.
Requisitos para desempeñar el cargo de albacea
ARTÍCULO 1048.
Facultades y atribuciones del albacea.
La extensión de estos rubros es determinada por el mismo testador, pues éste puede señalar
con precisión cuales son las facultades, obligaciones y prohibiciones del albacea, siempre y
cuando no sean contrarias a la ley, pero en caso no lo hiciere, la ley sustantiva se las adjudica.
Regulación legal: El Artículo 1050 del mencionado Código señala como facultades del
cargo las siguientes
a) Disponer y pagar los funerales del testador: Según el autor Alfonso Brañas: “Esta primera
misión regularmente no la cumple el albacea por dos razones: En primer lugar por el
momento incierto en que ocurre la muerte del testador, y en segundo lugar, debido al estado
de secretividad en que se mantienen las disposiciones testamentarias de donde se origina
lógicamente el cargo de albacea lo cual no permite que éste último se entere o sea notificado
con anterioridad a ello, por lo que la mayoría de las veces son efectuados por los herederos
del causante; pero en caso éste fuere notificado en vida por el testador deberá hacerlo como
se dispone en el testamento y en su defecto según la ley, conforme las costumbres del lugar
y capacidad económica de la masa hereditaria.
Esto va muy de la mano con lo que establecen los artículos 1105, 1106 y 1615 de este
mismo código, pues los dos primeros establecen que de los bienes que deja una persona a
su fallecimiento se pagarán sus deudas y que los gastos de última enfermedad, de funerales
y lutos se deducirán de la masa hereditaria. Mientras que el tercer artículo mencionado
establece que los gastos funerarios suministrados por quien no tenía obligación, y en
relación a la posición social de la persona y a los usos del lugar, deberán ser satisfechos con
los bienes del causante, y si éstos no fueren suficientes o no hubiere dejado, responderán
las personas que en vida habrían tenido la obligación de alimentarle.

b) Hacer las gestiones necesarias para la inmediata seguridad de los bienes: Según el
citado autor: “Esta actividad sería el punto de partida de el albacea, pues al ser notificado y
haber aceptado el cargo en él recaído, deberá tomar medidas para la seguridad de los bienes
del causante” como por ejemplo: Procurar el control y administración cuando el causante
haya dejado negocios comerciales, continuar los cultivos cuando haya dejado siembras a
medias de cualquier especie, recabar los títulos acreditativos de propiedad de los bienes
dejados, etc., pudiendo enumerar como éstas una amplia gama de medidas a tomar.
c) Hacer inventario del activo y pasivo de la herencia: Esta misión deberá realizarse con
intervención de los herederos, lo cual es conveniente, en primer lugar, porque de esta
manera el albacea disminuye un poco su responsabilidad, en segundo lugar, porque pueda
ser que el albacea no esté enterado de la herencia como pudieran estar los herederos, siendo
estos últimos colaboradores muy útiles en la elaboración del citado inventario, y por último
que siendo ellos los beneficiarios, es necesario que participen en tal actividad, ya que de esa
manera, ejercerán un mejor control sobre el albacea, supuesto que análogamente
funcionaría con la participación de los interesados en los bienes a falta de herederos, como
ejemplo, los acreedores del causante.
d) Pagas las deudas y legados: Siendo estos rubros la carga y pasivo de la herencia es
lógico suponer que antes de hacer entrega de los bienes a los herederos el albacea deberá
sufragar tales gastos, los legados por ser un mandato expreso del testador y las deudas por
ser un deber u obligación del mismo de la cual tendría que responder con su patrimonio.
e) Administrar los bienes hasta que los herederos tomen posesión de ellos: Esta
función es típica del albaceazgo en virtud de que si se origina tal institución es porque
existen bienes dejados por el causante y por lo tanto es deber del albacea administrarlos
hasta hacer entrega a los beneficiarios o herederos
Es conveniente señalar que las facultades expuestas son complementadas al adherírseles
otras de carácter especial, las cuales se encuentran contenidas en los artículos 1052 y 1056
del referido Código y que son las siguientes:
a) “Venta de bienes para pago de deudas y legados: La especialidad de esta facultad consiste
en transferir el dominio de algunos bienes del causante, aunque ello opere bajo el supuesto
de que no haya dinero suficiente para hacer los pagos de las deudas y de los legados,
evitando de esta manera otras consecuencias como demandas en contra del mortual.
Otorgar poderes especiales para actos de administración: Muchas veces resulta necesario
que el albacea haga uso de esta facultad, pues cuando la masa hereditaria es voluminosa es
imposible que sólo él administre los bienes personalmente y en ese sentido la ley permite
que pueda auxiliarse de otras personas otorgándoles poderes especiales.
Obligación del albacea.
Rendición de cuentas de la gestión: el que ejercite el cargo de albacea; por imperativo legal,
ha de rendir cuentas de su gestión inmediatamente después de haberla ejercido.
Regulación Legal: Son nulas de pleno derecho las disposiciones por las que el testador
dispensa al albacea de la obligación de hacer inventario y rendir cuentas. El albacea dará a
los interesados cuenta documentada del albaceazgo, inmediatamente después de haberlo
ejercido.
Hacer la repartición de bienes: una vez esté aprobado el inventario el albacea debe hacer
inmediatamente la repartición de bienes. Artículo 1085 del Código Civil.
Prohibiciones:
En cuanto a éstas, el ordenamiento civil solo contiene una y es que no puede adquirir bienes
de la herencia en el ejercicio del cargo mientras no estén aprobadas las cuentas de
administración. Articulo 1057
Esto tiende a proteger los intereses de los herederos o de más interesados en virtud de que
dicha institución muy bien puede prestarse para la existencia de vicios.

Plazos del albaceazgo.


El plazo es generalmente determinado por el causante en el mismo acto o documento
testamentario, pues tiene la facultad de hacerlo sin estar sujeto a extremo mínimo o máximo
de tiempo. Supletoriamente cuando el testador nombrare albacea omitiendo el tiempo en
que ejercerá el cargo la persona señalada, la legislación le asigna un plazo de un año contado
a partir de su aceptación, o desde que terminan los litigios que se promovieren sobre la
validez o nulidad del testamento o de alguna de sus disposiciones, de conformidad con el
Artículo 1058 del Código Civil.
Prohibiciones que tiene el albacea.
En cuanto a éstas el ordenamiento civil solo contiene una y es que no puede adquirir bienes
de la herencia en el ejercicio del cargo mientras no estén aprobadas las cuentas de
administración. Esto tiende a proteger los intereses de los herederos o de más interesados
en virtud de que dicha institución muy bien puede prestarse para la existencia de vicios.
Regulación legal: ARTÍCULO 1057
Extinción del cargo.
Regulación legal artículo 1067 del Código Civil.
a) Por muerte: considerando el carácter personalísimo que identifica a la institución, es
lógico suponer que con la muerte del albacea se extingue el cargo de la persona que lo
ejercía al desaparecer físicamente, pues nadie de sus ascendientes, descendientes o afines
puede sucederle en su función
b) Imposibilidad: Puede darse el caso de que el albacea aun habiendo aceptado el cargo
y ejecutado algunas actividades propias de su función, le resulte imposible seguir
ejerciéndolo por diversas causas como por ejemplo: Ejercer funciones judiciales o del
Ministerio Público con posterioridad a la aceptación del cargo.
c) remoción del albacea: esta es otra de las formas anormales de extinción del cargo,
pues el Artículo 1066 del referido Código regula: “Por causa de negligencia, abuso o
malversación pueden ser removidos los albaceas, sean cueles fueren su clase, y extensión
de sus facultades, a petición de los interesados en los bienes.” La causa tendrá que ser
calificada por un juez de primera instancia civil quien debe pronunciarse sobre la
procedencia o improcedencia de la misma.
d) Renuncia: la renuncia del cargo de albacea es un derecho que tiene la persona que lo
ejerce, pero que según el Artículo 1049 del mencionado Código no puede ser
caprichosamente sino con justa causa que deberá calificar un juez de primera instancia
civil.” 61 Pero lo importante es comprender que la renuncia aceptada por el juez conlleva
automáticamente la extinción del cargo con respecto a la persona que lo renuncia la cual
no seguirá ligado salvo en caso de posibles responsabilidades civiles, pero no en funciones.

e) Por el vencimiento del término señalado por el testador, por la ley y, en su caso, por
los interesados: Indudablemente que si se fija un plazo para el ejercicio del cargo es porque
surtirá efectos prácticos y en este sentido extingue la calidad de albacea en la persona
encargada de ejecutar las disposiciones de última voluntad del causante, quedando sin
efecto a partir del vencimiento del término cualquier acto que realice aunque todavía no
haya cumplido su cometido, siendo necesario la formalización de la correspondiente
prórroga para seguir actuando en tal calidad, ya sea porque se lea haya otorgado el juez, los
herederos o legatarios indistintamente.

Herencia condicional y a termino


Se tipifica cuando las disposiciones testamentarias se otorgan bajo condición, esto es,
haciendo depender su eficacia de la realización de un acontecimiento futuro e incierto. Art.
993, primera parte. (son aquellos cuya efectividad, dependen de la realización de un
acontecimiento futuro e incierto.)
Respecto a la herencia condicional el código civil dispone lo siguiente:
Que la condición de no enajenar (transmitir la propiedad de un bien) o no gravar los bienes
(constituir hipoteca, prenda o servidumbre), solo será válida hasta la mayoría de edad y
cinco años más de los herederos o legatarios (a quienes se impuso esa condición). Art. 994
cc.
Que se tendrá por no puesta la condición de no casarse, pero será válida la que se dirija a
impedir el matrimonio con persona determinada. Art. 995c.c primer párrafo.
Que puede legarse el causahabiente (persona favorecida con el legado), el usufructo, uso o
habitación, o una pensión personal, por el tiempo que permanezca soltero. Art. 995
segundo párrafo Que el heredero o legatario fueren instituidos bajo condición suspensiva
(aquella de cuyo acaecimiento dependía la efectividad de la disposición testamentaria), se
pondrán en administración los bienes que les corresponda, hasta que la condición se realice
o haya certeza de que no podrá cumplirse. Art 996.
Ejemplo:
Supongamos que Juan, un hombre soltero sin hijos, redacta su testamento en el que dispone
que su herencia será entregada a su sobrina Ana, pero con la condición de que ella se gradúe
de la universidad antes de cumplir los 30 años de edad. En caso de que Ana no cumpla con
esta condición, la herencia pasaría a su hermano menor, Luis.
En este caso, la herencia que Juan deja a Ana está condicionada a que ella cumpla con un
requisito específico antes de una fecha límite. Si Ana cumple con la condición, ella recibirá
la herencia de su tío Juan, pero si no la cumple, la herencia pasará a su hermano Luis.

LA ACEPTACIÓN: art. 1026 c.c


la aceptación de la herencia es un acto jurídico mediante el cual el heredero manifiesta su
voluntad de aceptar los bienes y derechos que le han sido dejados por el fallecido. La
aceptación de la herencia es necesaria para que el heredero adquiera la titularidad de los
bienes heredados.
La aceptación de la herencia puede ser expresa o tácita. La aceptación expresa se da cuando
el heredero manifiesta su voluntad de aceptar la herencia de manera explícita, por ejemplo,
mediante la firma de un documento de aceptación de herencia. La aceptación tácita se da
cuando el heredero realiza algún acto que implica su intención de aceptar la herencia, por
ejemplo, cuando el heredero toma posesión de los bienes heredados o los administra.
Es importante tener en cuenta que la aceptación de la herencia es irrevocable, por lo que el
heredero debe estar seguro de su decisión antes de aceptar la herencia.
EJEMPLO:
Supongamos que José, un hombre casado con dos hijos, fallece y deja un testamento en el
que dispone que su esposa es la heredera universal de todos sus bienes. Tras la muerte de
José, su esposa, María, se encuentra con que hay varias deudas pendientes de pago que
deben ser saldadas antes de poder tomar posesión de los bienes heredados.
María decide aceptar la herencia de su esposo y para ello, acude a un Notario especializado
en derecho sucesorio para que le asesore en el proceso. El Notario le informa que la
aceptación de la herencia puede ser expresa o tácita, y que en su caso, lo más conveniente
es realizar una aceptación expresa de la herencia mediante un documento que debe ser
firmado por ella y por los demás herederos.
María acepta la herencia de manera expresa y firma el documento de aceptación de herencia
junto con sus dos hijos. De esta manera, María se convierte en la heredera universal de
todos los bienes dejados por su esposo Juan y puede tomar posesión de ellos, luego de
cumplir con el pago de las deudas pendientes.
Es importante que la aceptación de la herencia se realice correctamente y se cumplan con
los requisitos legales establecidos en el Código Civil.

LA RENUNCIA DE LA HERENCIA: Art.1031 c.c.


la renuncia de la herencia es un acto jurídico mediante el cual el heredero manifiesta su
voluntad de renunciar a los bienes y derechos que le han sido dejados por el fallecido. La
renuncia de la herencia tiene como consecuencia que el heredero renunciante pierde todo
derecho sobre los bienes y derechos heredados.
La renuncia de la herencia puede ser expresa o tácita. La renuncia expresa se da cuando el
heredero manifiesta su voluntad de renunciar a la herencia de manera explícita, por ejemplo,
mediante la firma de un documento de renuncia de herencia. La renuncia tácita se da
cuando el heredero realiza algún acto que implica su intención de renunciar a la herencia,
por ejemplo, cuando el heredero no se presenta al proceso de aceptación de herencia o
cuando no realiza ningún acto que implique su intención de aceptar la herencia.
Es importante tener en cuenta que la renuncia de la herencia es irrevocable, por lo que el
heredero debe estar seguro de su decisión antes de renunciar a la herencia.

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