Portada

Contenido

Introducción......................................................................................................................3

Desarrollo..........................................................................................................................4

Definición de la albacea..............................................................................................................5

Fundamentos de la albacea........................................................................................................6

Rol de la albacea.........................................................................................................................7

Obligaciones de la albacea.........................................................................................................9

Plazo...........................................................................................................................................10

Facultades de la albacea...........................................................................................................11

Jurisprudencia ecuatoriana.......................................................................................................12

Principales características.........................................................................................................12

Retribución de la albacea..........................................................................................................13

Conclusión.......................................................................................................................14

Bibliografía......................................................................................................................15
 EL ROL QUE CUMPLE LA ALBACEA DENTRO DE LA SUCESIÓN

“Admira y ensalza las extensas posesiones,

pero tú cultiva una pequeña heredad.”
-Virgilio-

Introducción

El sistema de normas que rigen una sociedad no es perenne, no son absolutas, no son

estáticas. Éstas deben estar en constante evolución relacionado con los cambios que vive la

sociedad, es decir que frente a una realidad que no está regulada el derecho debía regularlo,

aunque en la práctica no es así el legislador debe tratar de estar siempre a la par de los

fenómenos que se desarrollan y/o cambian en una sociedad. La necesidad de normas y leyes

que armonicen las situaciones derivadas de la muerte de un ser humano, respecto de su

patrimonio; influenciaron para la consecución de esta normatividad.

Una definición respecto de lo que es la sucesión, es el acto que nace en base a un título

traslativo de dominio, por tanto se produce una sucesión; es decir, el derecho pasa de un sujeto

a otro y conserva sustancialmente sus características inmutadas. Cuando se habla de

“sucesión”, generalmente se menciona la sucesión por causa de muerte; esta es la sucesión por

excelencia. Todos los individuos por su calidad de tales necesariamente deben tener un

patrimonio, esto es, un conjunto de derechos y obligaciones susceptibles de evaluación

pecuniaria, y el cual consta indispensablemente de un activo y un pasivo. En el rubro del activo

figuran todos los bienes y derechos, y en el pasivo sus obligaciones; tanto unos y otros deben

ser evaluables en dinero. (Aguilar, 2014)

La ley ecuatoriana contiene disposiciones que establecen las circunstancias y

condiciones bajo las cuales se retienen los bienes después de la muerte de una persona y la
"sucesión hereditaria abierta". El Título III del Código Civil, la norma que define la ley tiene

varias definiciones de lo que es la herencia y cómo debe ser considerada. En este cuerpo

jurídico humano, la herencia y sus obligaciones son tanto familiares como patrimoniales, y su

función principal se concentra en la protección de la unidad familiar hereditaria, y la

interpretación del ordenamiento jurídico para crear ocupaciones. La albacea es un mecanismo

que protege los derechos de los herederos y herederas, con concesiones obligatorias

irrenunciables en el momento de la manifestación de la herencia. (Calderón, 2001)

Aunque la nueva ley no ha hecho mucho para abordar la ley de sucesiones, se necesita

un análisis más detallado de los derechos de representación y de transmisión inmediata cuando

se renuncia a los derechos de herencia. El nombre de dominio y los derechos formales deben

determinarse cuando se transfieren bienes, especialmente inmuebles, a los herederos y este

acto se ha realizado de acuerdo con los procedimientos básicos o no ha seguido el posible

orden de herencia. Los herederos tienen derecho, aceptando o rechazando la sucesión del

responsable. (Clowes, 2001)

Desarrollo

En muchos casos, lograr la ejecución de un testamento, puede ser un proceso

complicado para los sucesores. Conseguir que la última voluntad del testador sea cumplida, en

ocasiones, origina problemas e incluso, confrontaciones entre sus sucesores. En este contexto,

nuestra legislación presenta una figura cuya finalidad es alcanzar una correcta administración

de la masa hereditaria: el albacea. Esta persona que sea designada como ejecutor

testamentario, tiene como finalidad lograr la ejecución de las disposiciones testamentarias de

manera apropiada. (jurídica, 1995)

Definición de la albacea

Para hablar de la figura del Albacea debemos de tener claro que estamos tratando un

asunto de herencias y sucesiones, pues esta figura jurídica se sitúa dentro del derecho

hereditario. Así entonces, el Albacea es una persona generalmente de confianza designada (de

forma particular o de forma genérica) en un testamento, y será la encargada de hacer cumplir

la última voluntad del fallecido. En defecto de esta figura, serán los herederos los encargados

de velar por el cumplimiento de las últimas voluntades del causante. En palabras de (Perez,

2010): “El albacea o ejecutor testamentario es un concepto utilizado en el derecho sucesorio

para aludir a aquella persona que ha sido designada por el causante con la finalidad de que sea

este el encargado de ejecutar y hacer respetar la voluntad plasmada en el testamento”.

O como (Molina, 2017) nos afirma que los albaceas son: “aquellas personas a las cuales

un testador designa para que puedan cumplir con todo lo encargado por este, …está encargado

de velar por el cumplimiento de las disposiciones del causante, así como de sus bienes, sean

estos muebles o inmuebles, corporales o no corporales y fungibles o no fungibles dejados en su

poder hasta que exista un inventario solemne”

Este cargo está regulado en el Código Civil, y el único requisito que establece la ley, en

cuanto a la capacidad y legitimación del Albacea, es que tenga capacidad para poder obligarse.

Dicho de otro modo, no pueden ser Albacea los menores de edad o personas con falta de

capacidad. (Navas & Cusí, 2022)

El albacea testamentario es quien se encarga de cumplir con las instrucciones que deja

una persona en su testamento. Es designada por el propio testamentario para que haga cumplir

su última voluntad.
 El nombramiento debe quedar establecido en el mismo testamento para que sea válido.

Se trata de un cargo voluntario, que debe ser aceptado por la persona en cuestión. Tampoco es

obligatorio dar retribución alguna por las funciones que cumpla, pero el testador puede

especificar que se le otorgue retribución profesional.

Esta persona tiene la responsabilidad de hacer cumplir el testamento, por lo tanto se

trata de alguien de mucha confianza para el testador. No puede transferir el cargo a sus

herederos ni delegar sus funciones al menos que esta posibilidad quede expresa en el

testamento. Sin embargo, en este caso la responsabilidad de lo que hagan será del albacea.

Un testador puede nombrar uno o varios albaceas que actuarán de forma

mancomunada o solidaria, según se indique. Es decir, todos son responsables en sus funciones

o se dividen las obligaciones entre todos.

El albacea tendrá una serie de funciones que quedarán plasmadas en el testamento.

Tendrá que velar por la seguridad de los bienes mientras no se haya hecho el inventario

solemne. Además, debe procurar que este se lleve a cabo. Como ejecutor del testamento, debe

asegurarse que todas las personas interesadas sean parte del proceso.

Fundamentos de la albacea

La base legal para la ejecución es la independencia de la voluntad, como lo garantiza

nuestra ley que reconoce el derecho a disponer de los bienes de una persona después de su

muerte. Dada la independencia del testador, su consecuencia lógica es la facultad del testador

de elegir a una persona de su confianza para llevar a cabo su última voluntad. El artículo 1315

de nuestro Código Civil establece el derecho del testador a nombrar uno o más albaceas.

Francisco Ricci, por lo tanto, cree que las razones deben buscarse dentro de las realidades y

desarrollos de la familia, pero hubo razones legales claras para las ejecuciones, como lo
determina la mayoría de los autores. Reich cree que los testadores "son libres de confiar en sus

bienes, pero no pertenece a los demás hasta que ya no es de ellos". Pero como la propiedad ya

pertenecía a los herederos, el testador no podía fiarse de ella. “Por tanto, la causa de la pena

capital más allá de la ley debe encontrarse en la práctica y en el desarrollo del núcleo familiar”.

(Conceptos Jurídicos, 2021)

Podría decirse que Ricci llama a lo que sucede en Lógica "la afirmación inicial".

Reconocemos que los principios de la Fundación se derivan de la convención, particularmente

de la antigüedad, más que de cualquier ley particular de la ley antigua, pero desde entonces es

simplemente ilógico. Las obligaciones y los derechos derivan de la ley. El derecho ecuatoriano

(y el derecho moderno) establece el principio de independencia del testador y reconoce el

derecho del testador a nombrar uno o más albaceas, asegurando así la existencia del testador.

Si aceptamos la crítica de Ricci, también debemos reconocer que las instituciones se basan en la

práctica y se rigen por la ley, por lo que no tienen base legal.

Rol de la albacea

Como hemos avanzado, la función principal del Albacea es la de hacer cumplir la última

voluntad del fallecido. Las funciones más comunes que se delegan al albacea incluyen la

interpretación del testamento, administrar, contar y partir los bienes de la herencia. También

se le asigna el pago de las deudas de la herencia y proteger los bienes que se hayan heredado a

menores o incapaces, entre otros.

Establecer la obligatoriedad de la inscripción de la excusa de aceptación, renuncia y

remoción judicial, mediante normativa del Código Civil, se fundamenta en dar un espacio de

seguridad jurídica preventiva para los futuros contratantes que se relacionen con el albacea

titular de la sucesión. Esto es relevante, ya que, de esta manera se presume de conocimiento

público el cargo que tiene un individuo como albacea y las delegaciones que este tiene

referente a su cargo explicitadas por el testador.

De esta manera, se reconoce que la función de este registro obligatorio permitiría dar el

conocimiento general del estatus jurídico de los albaceas y sus disposiciones, según lo

establecido en el testamento de cada caso. Cabe resaltar que, esta divulgación registral está

orientada a hacer cognoscible (iure et de iure) de determinados escenarios jurídicos para la

tutela de los derechos y la seguridad del tráfico jurídico en el vínculo contractual del albacea y

los contratantes. Así, el principio de publicidad (artículo 2012 del Código Civil) también se dirige

a tener una influencia preventiva y garantizadora de que los futuros contratantes puedan

reconocer los límites que tiene el albacea con respecto a bienes y su figura como mero ejecutor

testamentario del propietario del bien, el testador.

La lista de funciones particulares puede ser muy extensa y deben cumplirse en su

totalidad, siempre y cuando estén enmarcadas en la ley (Sanchez Molina, 2021). Entre sus

funciones más específicas podemos nombrar las siguientes:

 Disponer y abonar en pago los sufragios y gastos del funeral del testador.

 Abonar en metálico los legados, con acuerdo de los herederos.

 Vigilar la ejecución de aquello ordenado en el testamento y sostener, siendo justo, su

validez en juicio y fuera de él.

 Conservar y custodiar los bienes del caudal hereditario.

 Hacerse cargo del entierro y funeral de acuerdo a las costumbres o según indique el

testador.

 Confirmar la validez del testamento.

 Conservar los bienes de la herencia y velar por su seguridad.

 Vigilar que se cumpla con todo lo que establezca el testamento.

  Pagar el legado en metálico.

 Asegurarse que se haga el inventario de bienes con la presencia de herederos y demás

personas interesadas.

En cuanto a los tipos de albaceazgo, nos encontramos con dos clases. La primera, según

el llamamiento, pudiendo ser simultáneos (solidario o mancomunado) o sucesivos en el cargo

(un albacea ejecuta el testamento en sustitución del otro). Y la segunda, universales o

particulares, debiendo ejecutar globalmente el testamento o de forma específica debidamente

indicado por el testador en el testamento (Garanley, 2019)

Obligaciones de la albacea

Cuando ha sucedido el periodo de vigencia del cargo del Albacea, éste tiene que reunir

cuentas con los herederos: es decir, explicarle cómo ha gestionado y llevado a cabo sus tareas

como Albacea.

Hay una disposición particular que se regula en el art. 907 del Código Civil y que

establece que, en caso de que la tarea del Albacea sea la de da a los bienes de una herencia una

inversión o distribución que el testador hubiere dispuesto, las cuentas las deberá rendir el

Albacea frente al Juez

Dentro de las obligaciones y poderes que tiene un albacea están:

 La presentación y cumplimiento del testamento.

 Asegurar todos los bienes que se encuentran registrados en la herencia.

 La realización de inventarios con el fin de conocer todo el patrimonio.

 Pago de deudas mortuorias, hereditarias y testamentarias, esto también aplica si la

situación de albaceazgo es por una situación de problemas de salud o mentales que

presente el titular de la propiedad.

  Se debe adjudicar a cada uno de los herederos y legatarios los bienes que se lean han

sido otorgados

En la ley tenemos que:

ART. 1305.- (Obligaciones generales del Albacea). - Toca al Albacea velar sobre la

seguridad de los bienes; hacer que se guarden bajo llave y sello el dinero, muebles y papeles,

mientras no haya inventario solemne; y cuidar de que se proceda a este inventario, con citación

de los herederos y de los demás interesados en la sucesión, salvo que, siendo todos los

herederos capaces de administrar sus bienes, determinen unánimemente que no se haga

inventario solemne.

ART. 1306.- (El Albacea y la apertura de la sucesión). - Todo Albacea estará obligado a

dar noticias de la apertura de la sucesión por avisos públicos en el periódico del Cantón, si lo

hubiere, o no habiéndolo, en carteles que se fijarán en tres de los parajes más públicos de la

ciudad cabecera, y cuidará de que se cite a los acreedores por edictos que se publicarán de la

misma manera.

ART. 1307.- (Obligación de los albaceas frente a los acreedores hereditarios). - Sea que el

testador haya encomendado o no al Albacea el pago de las deudas estará este obligado a exigir

que en la partición de los bienes se señale un lote o hijuela suficiente para pagar las conocidas.

Plazo.

El albacea, si el testador no ha fijado plazo, debe cumplir su encargo en el plazo de un

año desde su aceptación, o desde que terminen los litigios que se promovieren sobre la validez

o nulidad del testamento o de alguna de sus disposiciones.

El testador podrá ampliar el plazo legal de forma expresa si no hubiese satisfecho las

labores de su cargo. Si no lo hubiese señalado, se entenderá prorrogado el plazo por un año.

 Si, transcurrida esta prórroga, no se hubiese cumplido la voluntad del testador, el

Juez, Notario o Letrado de la Administración de Justicia podrá conceder otra prórroga por el

tiempo que fuere necesario, atendidas las circunstancias del caso.

Los herederos y legatarios podrán, de común acuerdo, prorrogar el plazo del

albaceazgo por el tiempo que crean necesario; pero, si el acuerdo fuese sólo por mayoría, la

prórroga no podrá exceder de un año.

Según la ley ecuatoriana: El tiempo de albaceazgo es siempre limitado, el artículo 1325

del Código Civil Ecuatoriano estipula que “en caso de no haber fijado el testador un límite de

tiempo, el albaceazgo durará un año contado desde el día en que el albacea haya empezado a

ejercer su cargo”. El tiempo de albaceazgo es siempre limitado, el artículo 1325 del Código Civil

Ecuatoriano estipula que “en caso de no haber fijado el testador un límite de tiempo, el

albaceazgo durará un año contado desde el día en que el albacea haya empezado a ejercer su

cargo”.

Comúnmente, el periodo del nombramiento de un albacea es de año y medio, sin

embargo, existen casos como, la administración de bienes para menores de edad, donde se

puede extender este periodo de tiempo.

Pero también hay situaciones donde el albacea puede terminar su periodo de

administración y que también son contemplados por las leyes en nuestro país:

 Muerte

 No es posible cumplir con su papel

 Renuncia

 Removido por el titular de derechos

 Cometió actos perjudiciales

  No cumplir con el tiempo estipulado de resolución

Todos estos escenarios deben de ser planteados cuando se busca saber que es un

albacea para cumplir de manera eficiente el rol que se ha sido dignado. Sobre todo, cuando

existe algún juicio in testamentario, que es muy común y recurrente en nuestro país.

Facultades de la albacea

El nombrado Albacea, en palabras de (Sainz Rodríguez, 2021) puede:

 Ejercer aquellas facultades que expresamente le haya dado el testador, siempre que las

mismas no sean contrarias a las leyes.

 Disponer del dinero de la herencia para abonar los gastos de sepelio del testador.

 Satisfacer los legados que consistan en entregar una suma de dinero, siempre que se

haga con el beneplácito del heredero.

 Vigilar que se cumpla lo dispuesto en el testamento.

 Adoptar lo necesario para conservar y custodiar los bienes de la herencia.

 En caso de que no haya dinero en la herencia para abonar el sepelio y legados y los

herederos no aportasen el suyo, podrá promover la venta de los bienes muebles y si no

es suficiente o no hay, la de los inmuebles.

Jurisprudencia ecuatoriana

Nuestra jurisprudencia tiene poco que ver con la naturaleza jurídica de la ejecución de

sentencias y sólo unos pocos casos han sido resueltos. La Corte Suprema, que decide en

primera instancia, se refiere a la naturaleza jurídica del poder ejecutivo, aunque se expresan

sólo por referencia otros inconvenientes relacionados con la organización.

En el "Diario de Actas" No. 82 de la primera serie de 1903 en la página 653, se confirma

la decisión dada por el árbitro Julio B. Henriques, en la que se afirma que "La ejecución es un
mandato verdadero". La situación surgida del inventario de los bienes de Pacifico Vela e

iniciada en el juzgado de Guaranda, continuada en los juzgados de Riobamba y confirmada por

la Corte Suprema, se encuentra publicada en la "Gaceta Judicial" No. 178 de la tercera serie del

año. 1915, en la página 2659. Esta sentencia establece que "la Ejecución contiene un mandato

judicial dado por el testador al testador, mejorando ese mandato judicial mediante la

aprobación expresa o tácita del cargo por parte del albacea designado". En la sentencia 24-XI-

72, serie XII, No. 1, pp. 35-36, en el numeral 6 se expresa: “Si la tarea del testador es

administrar los bienes del testador y cumplir la voluntad del testador, testador, una especie de

síndico…” Quizás, la falta de más jurisprudencia se deba a que varios casos no llegaron a la

Corte Suprema, lo que no permite comprender mejor la opinión de los jueces ecuatorianos al

respecto.

Principales características

El cargo de albacea es un cargo voluntario. Esto implica que puede rechazarse en favor

de los herederos, siempre que se alegue justa causa ante notario o ante el Letrado. De no

alegarse justa causa, en caso de habérsele dejado testamento a dicho albacea, este sería inhábil

para suceder, salvo en caso de legítima.

No se necesita aceptación expresa para ostentar el cargo de albacea, este accede a su

cargo si no se opone en el plazo de 6 días desde que tuviese conocimiento de su

nombramiento, o desde que el causante hubiera fallecido si este ya lo conocía.

Se trata de un cargo de carácter personalísimo, esto quiere decir que, el albacea no

puede delegar sus funciones sin autorización expresa del testador. No obstante, si el testador

así lo dispusiera, podrá nombrar a uno o varios que podrán ser mancomunados o solidarios.
 Adicionalmente, hay que indicar que el albacea tiene la obligación de desempeñar su

cargo hasta el pleno cumplimiento de sus responsabilidades. Así el mismo cargo podrá

extinguirse en caso de muerte, de imposibilidad, renuncia o remoción, que será apreciada por

la autoridad judicial competente.

Retribución de la albacea

El albaceazgo es un cargo esencialmente de carácter gratuito. No obstante, en el caso de

que el testador disponga otra cosa, el albacea sin perjuicio de su derecho a cobrar lo que le

corresponda por los trabajos inherentes a su cargo, podrá ser beneficiario de una retribución en

el caso de que la herencia estuviese distribuida en legados. Sin embargo, el exceso de lo que se

pueda considerar habitual, será considerado legado, y no formará parte de la retribución de

este.

Sin embargo, el Código Civil de Cataluña, establece una retribución distinta a la que

acabamos de mencionar. Concretamente, dicha ley, lo que viene a decir es que, en el caso de

que el fallecido no estipulase previamente la retribución de la figura del albacea o este

ejercitase el cargo de forma gratuita, a los albaceas universales de la masa activa líquida

hereditaria les corresponderá el 5% del valor de esta, y a los albaceas particulares los cuales

sean contadores partidores (aquellos que el testador eligió y dejó por escrito en el testamento

o aquellos que se elijan por estar los herederos en desacuerdo con la partición), les

corresponderá el 2% del valor de dicha masa activa o de los bienes objeto de la partición.

Ahora, si se ejerce de forma profesional el cargo de albacea, la retribución de este se imputará

a dicho porcentaje.

En el caso de concurrir diversos contadores partidores o albaceas, la retribución de

estos se repartirá de forma equitativa entre los que ejerciesen el cargo.

 Asimismo, dicha ley continúa indicando que, se excepcionará de la retribución de los

albaceas, los legados o las disposiciones que se hubiesen estipulado para el albacea. Sin

perjuicio de que el fallecido hubiese dispuesto otra cosa. En la misma línea, si una persona

cercana o de confianza al fallecido, aceptase ostentar la figura de albacea y este ya hubiese

percibido lo que por heredero le correspondiese, este no será retribuido por haber ejercido la

función de albacea.

Conclusión

Este trabajo revela el valor de la herencia como un elemento importante de la ley de

sucesiones y trata principalmente con todas las partes involucradas en el proceso de herencia y,
como se señaló anteriormente, el propósito de esta disciplina es proteger al heredero que tiene
la herencia.

En el derecho de representación prima el parentesco. La representación opera en dos

circunstancias, cuando un heredero falleció antes que el causante o si repudia la herencia del
causante. No existe representación para ascendientes, ni para colaterales. El repudio de
herencia no constituye una pérdida de derechos para los sucesores legitimarios. La calidad con
la que ingresa a suceder una persona al momento del fallecimiento del difunto determina la
responsabilidad que mantendrá en el patrimonio del causante. La apertura de la sucesión no es
sinónimo de adquisición de herencia, es únicamente la primera, de las tres fases jurídicas que
requiere la transmisión hereditaria para llegar a su perfeccionamiento.

La posesión efectiva únicamente sirve como instrumento demostrativo de la calidad de

heredero, solo acredita la calidad de heredero, mas no sirve para disponer de los bienes
hereditarios.

Se puede concluir que la liberalización del derecho sucesorio en el derecho civil

ecuatoriano no ha sido suficientemente impulsada en esta materia, debido a que en la
actualidad en nuestra región existen normas jurídicas, leyes relacionadas con el tema, que no
fue aplicada o implementada por desconocimiento o de manera incompleta. ejecución por las
autoridades responsables de la ejecución. De lo anterior, se puede concluir que la correcta
administración y aplicación de la ley contribuirá a la mejora de las actividades sindicales ya que
los herederos podrán comprender mejor los registros y sentirse más cómodos con ellos. En su
calidad de heredero, y más importante aún, si el juez y la policía cumplen con todos los
requisitos, el heredero estará contento con la división de la reliquia familiar.

Los derechos de delegado tienen prioridad sobre los enlaces. La subrogación funciona
en dos situaciones: cuando un heredero muere antes que el criminal, o cuando se anula el
patrimonio del criminal. No hay representaciones de descendientes ni colaterales. Abandonar
una herencia no significa que el heredero legal pierda sus derechos. Las cualidades que una
persona ingresa al fallecer establecen la responsabilidad que retiene por los bienes del difunto.
No es lo mismo heredar que comprar una herencia. Este es solo el primero de los tres pasos
legales que debe terminar la herencia. La propiedad activa solo sirve para probar la herencia,
solo confirma la herencia y no constituye la propiedad de los bienes heredados.

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