Está en la página 1de 2

EL PASO DEL MITO AL LOGOS (WILHEM NESTLÉ)

ENLACES

http://filex.es/historia/hftema1/2_el_paso_del_mito_al_logos_el_nacimiento_de_la_filosofa.
html

http://html.rincondelvago.com/paso-del-mito-al-logos.html

http://www.homohominisacrares.net/suplementos/presocraticos/del-mito-al-logos.php

ANÁLISIS CRÍTICO:

La mayor parte, si no la totalidad, de los libros de texto, así como los estándares básicos
correspondientes al temario de Filosofía de bachillerato, dan como algo evidente esta tesis de
Nestlé, un filólogo alemán fallecido en los años 60 del siglo XX, según la cual en la magna
Grecia (siglo VI-V AC) y gracias a los “físicos presocráticos” se dio una evolución del
pensamiento desde una mentalidad mítica o pre-lógica (Levy Bruhl) o pre-racional, propia del
pensamiento mágico infantil y de las sociedades tribales, hacia el pensamiento racional
científico y filosófico. Esta tesis prendió en la España de los 70 y 80, la España de la transición
desde el régimen de Franco a la democracia coronada de la actualidad y se extendió en una
coyuntura favorable en donde la ideología del progreso social, de la evolución intelectual de
los hombres justificaba el cambio de régimen como un proceso histórico de evolución,
modernización y mejora.

Según estos libros de texto, este paso se da en la evolución cultural (“humanización”) del ser
humano, no en la biológica (“hominización”) y es un paso fundamental al que se considera
como la génesis u origen del razonamiento científico y filosófico, racional, frente al delirio
mitológico previo, propio más bien de unos humanos que aun no habían superado la, en
palabras del sociólogo francés Augusto Comte, fase teológica. Sin que esto quiera decir que los
mitos habrían quedado definitivamente superados, sino, antes bien, que estos mitos
irracionales habrían cedido el paso a otros modos de explicación veraces, científicos, lógicos,
capaces de enfrentarse a estos mitos e ir robándole presencia social y política. De este modo la
creencia en mitos se mantendría sólo en capas analfabetas de la población.

Ahora bien, creemos que este “paso del mito al logos” es una metáfora simplista de un
proceso mucho más complejo:

1) Los mitos no son irracionales. Un mito es, siempre, una reordenación analógica (por
semejanza) de un campo extraño y no manipulable, por otro cercano y manipulable. La
racionalidad del mito no es científica, pero puede ser práctica. Incluso pueden existir
mitos científicos.
2) La supuesta racionalidad lógica de las especulaciones presocráticas podrían resultar,
en muchos casos, tan irracionales o tan mitológicas como las leyendas que les
precedían.
3) La irracionalidad no es previa a la racionalidad. Más bien sucede al revés. Los
conceptos negativos son siempre posteriores a los positivos. La irracionalidad no se
corresponde a un estado primitivo o a una inexistente mentalidad pre-lógica (Todo
pensamiento es lógico, si no lo es, no es ni siquiera un pensamiento) sino que es el
resultado de un proceso de confluencia de dos esquemas o cursos de racionalidad
paralelos (es decir, que nunca puede converger). La racionalidad del martillear (una
racionalidad técnica) es incompatible con la racionalidad de un tornillo, es decir: no
pueden confluir; no se puede colocar un tornillo a martillazos. En este sentido, la
irracionalidad del “decaedro regular” no proviene de ninguna contradicción lógica sino
en la imposible confluencia de cualesquiera polígonos para formar dicho poliedro,
según la regla de Euler. El decaedro regular es im-com-posible. “Nieve frita” es
irracional por los mismos motivos, que no son lógicos, sino empíricos, prácticos,
experimentales y físicos.
4) La fórmula “Paso del mito al logos” esconde una ideología –ella misma mítica- en la
que se quiere dar a entender que existe un progreso humano desde la irracionalidad a
la racionalidad, pero esto es falso. Los mitos han de clasificarse en tres especies: mitos
luminosos orientados a arrojar luz sobre cuestiones oscuras y controvertidas. Mitos
tenebrosos que envuelven, encubren u ocultan la realidad, generalmente por intereses
económicos o político-prácticos. Y mitos neutros que participan por igual de las dos
especies anteriores. Desde esta perspectiva diremos que dado que las ciencias y la
filosofía no proceden del desarrollo lógico de la mente, o del cerebro, sino de las
técnicas, que roturan y conceptualizan los diferentes campos, el paso del mito al logos,
en tanto pretende ser una explicación del origen de la ciencia y de la filosofía, es un
mito oscurantista tanto o más que los supuestos mitos a los que combate. Podríamos
decir que está más sucia la escoba que lo que barre.

También podría gustarte