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EL ESCUADRÓN 731

Colegio: Ramón Darío Gutiérrez

Tema: El escuadrón 731

Materia: Historia

Docente: Julio Cesar Leigue Alvarez

Estudiante: Franklin Villca Ortega

Fecha: 1/12/2021
INDICE

Contenido
1. Introducción ................................................................................................................... 1

2. Objetivos ........................................................................................................................ 2

2.1. Objetivo General ..................................................................................................... 2

2.2 Objetivos Específicos ............................................................................................... 2

3. Justificación ................................................................................................................... 2

4. Desarrollo ...................................................................................................................... 2

4.1. Antecedentes .......................................................................................................... 3

4.2 Durante la segunda guerra mundial.......................................................................... 3

4.3 Tras la rendición del Imperio de Japón. .................................................................... 6

5. Conclusión ..................................................................................................................... 6

6. Anexos........................................................................................................................... 7
1. Introducción
Esta investigación tiene como objetivo principal informar a los estudiantes del 5to A el lado
oscuro de los avances de la ciencia y la medicina.

El ejército imperial japonés tenía un has bajo la manga y era este temible escuadrón,
Comandados por el doctor Shiro Ishii, el escuadrón 731 era conformado por científicos
japoneses que llevaron a cabo experimentos con seres humanos y usaron armas
biológicas a gran escala durante la ocupación de China y la segunda guerra mundial.

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2. Objetivos
2.1. Objetivo General
-Informar a los estudiantes del 5to A sobre los atroces experimentos en humanos que tuvo
que realizar la ciencia y la medicina para su avance basándonos en los antecedentes,
durante la segunda guerra mundial y tras la rendición del Imperio de Japón.

2.2 Objetivos Específicos


-Recopilar información sobre el tema, mediante investigaciones de los hechos ocurridos.

-Exponer la información recopilada mediante una reunión virtual.

3. Justificación
El presente trabajo tiene el propósito de informar a los estudiantes del 5to A acerca de los
atroces experimentos que realizó el escuadrón 731.

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4. Desarrollo

4.1. Antecedentes

Desde principios del siglo XX, China había sido objetivo prioritario del expansionismo
nipón. Tras la victoria obtenida sobre el imperio zarista en la guerra ruso-japonesa de
1904-05, el Trono del Crisantemo había extendido su influencia sobre el gigante chino.

Los orígenes de esta unidad hay que situarlos en el contexto de la expansión del Japón
imperial en el continente asiático durante los años 30 y que no concluyó hasta el fin de la
Segunda Guerra Mundial, en 1945. En septiembre de 1931, los japoneses invadieron la
región de Manchuria, en el norte de China, e instauraron un Estado títere comandado por
el antiguo emperador chino Pu Yi.

Los historiadores calculan que más de diez millones de chinos fueron movilizados por el
Ejército imperial japonés para hacer trabajos forzados en unas condiciones infrahumanas,
por no hablar de los distintos episodios de matanzas y violaciones indiscriminadas contra
civiles una vez estalló la segunda guerra sinojaponesa, en 1937, y la guerra mundial, dos
años después.

En este contexto, en torno a 1932, nació un grupo de investigación antiepidémica en la


región, un laboratorio que en teoría debía prevenir de posibles expansiones de
enfermedades, pero que no era otra cosa que un centro para estudiar las posibilidades de
una futura guerra biológica. Al frente se situó Shiro Ishii, un médico del ejército que
promovió entre los altos mandos la idoneidad de esta modalidad de guerra que, por así
decirlo, estaba de moda en el mundo científico-militar de todo el mundo.

4.2 Durante la segunda guerra mundial

El Escuadrón 731 estaba compuesto por ocho divisiones:

División 1: efectuaba investigaciones sobre peste bubónica, cólera, carbunco y


tuberculosis, empleando seres humanos. Para tal fin, se construyó una prisión con
capacidad para trescientos o cuatrocientos prisioneros.

División 2: se ocupaba de probar las armas biológicas, centrándose en el diseño y


manufactura de aparatos para esparcir agentes patógenos y parásitos.

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División 3: se ocupaba de producir proyectiles cargados con agentes patógenos. Estaba
acantonada en Harbin.

División 4: producía diversos materiales para los experimentos.

División 5: entrenaba a los nuevos integrantes del personal.

División 6: unidad de pertrechos.

División 7: unidad médica.

División 8: unidad administrativa.

El Escuadrón 731 operó activamente entre 1932 y 1945, años en los que realizó todo tipo
de experimentos con seres humanos, incluidos hombres, mujeres, embarazadas,
ancianos, niños e incluso recién nacidos. Las víctimas fueron llamados Maruta, que
significa tronco en japonés, y que también da nombre a todo el proyecto. El término no
solo era una especie de eufemismo macabro, sino que, según los relatos de los médicos
que allí trabajaron, funcionaba como una forma de deshumanización que facilitaba llevar a
cabo los experimentos.

Lo que ocurrió en aquel complejo da auténticos escalofríos. Haciéndoles creer que se


trataba de una vacuna, a los prisioneros se les inyectó todo tipo de enfermedades para
investigar sus efectos: la peste, el cólera, el tifus, la tuberculosis, la disentería o la viruela.
Además, se les infestó con pulgas transmisoras de la peste para investigar las
posibilidades de una guerra bacteriológica. También se obligó a prisioneros masculinos y
femeninos a mantener relaciones para estudiar los efectos de enfermedades de
transmisión sexuales tales como la sífilis o la gonorrea.

En 1936, el doctor Ishii se trasladó al distrito de Pingfang, a unos 20 km de Harbin, para


crear un gran complejo de investigación, con 6 km cuadrados y más de 150 edificios,
construido por 15.000 esclavos civiles chinos, de los que un tercio fallecieron debido a las
duras condiciones de trabajo.

Este fue el epicentro de la tristemente célebre Unidad 731, también conocida en algunos
momentos como Unidad Togo o Boeki Bu y técnicamente como "Escuadrón de
Prevención Epidémica y Purificación del Agua".

En su momento de mayor actividad trabajaban allí 3.000 empleados, de los que el 10%
eran médicos.

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El Escuadrón 731, dirigido por Ishii, realizó en Pingfan numerosos experimentos con
prisioneros, infringiéndoles grandes sufrimientos. Se estima que entre 3.000 y 6.000
personas, incluyendo niños, murieron víctimas de los mismos, además de otros muchos
que fallecerían por las epidemias causadas.

En los centros de experimentación se utilizaron prisioneros de guerra y detenidos políticos


acusados de ser espías o miembros de la resistencia, fundamentalmente de origen chino,
pero también soviéticos, mongoles y coreanos, además de enfermos mentales y
discapacitados.

Ishii y sus colegas investigaron fundamentalmente sobre enfermedades infecciosas,


inoculando a sujetos sanos los gérmenes del cólera, tifus, difteria, botulismo, ántrax,
muermo, brucelosis, disentería, sífilis, peste, etc., para analizar el desarrollo de las
enfermedades y probar la efectividad de ciertas vacunas.

Las víctimas eran forzadas a comer alimentos infectados o a beber líquidos


contaminados, o bien se les obligaba a portar objetos o ropas contaminadas.

También se utilizaron cobayas humanos para probar la eficacia de las armas


convencionales y de agentes químicos y biológicos como armas de guerra: se usaron
blancos humanos para probar la efectividad de granadas, lanzallamas o bombas
explosivas, se les obligaba a beber iperita o se les exponía a ácido cianhídrico y gas
mostaza.

También se realizaron experimentos de carácter fisiológico, muy similares a los


efectuados por los médicos nazis, como la valoración del tiempo de asfixia tras colocar
cabeza abajo a los prisioneros y de embolia después de la inyección intravascular de aire.

Se probaron los efectos de la inyección de orina de caballo y de agua de mar, la privación


de alimentos, agua o sueño, la congelación, las radiaciones masivas con rayos X, etc.
Algunos prisioneros fueron incluso colocados dentro de máquinas centrífugas para
determinar el tiempo de supervivencia.

Los experimentos de hipotermia eran una de las especialidades de Ishii. En ellos, se


exponía a los prisioneros a temperaturas extremas durante los meses más fríos del año

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en distintas condiciones (con ropa mojada, con dieta normal, con dieta hipocalórica, etc.) y
luego se estudiaban diferentes formas de reanimación.

La Unidad 731 realizó experimentos congelando extremidades de prisioneros y


calentándolas luego con agua, observando la temperatura a la cual se desprendían la piel
y los músculos.

Existe constancia gráfica de la práctica de vivisecciones y autopsias en prisioneros


moribundos, algunas realizadas por el propio Ishii, con el objetivo de obtener las muestras
lo más frescas posible.

También se realizaron otras prácticas quirúrgicas: apendicectomías y traqueotomías,


extracción de balas previamente disparadas a los prisioneros, amputaciones de miembros
y, finalmente, asesinato de los sobrevivientes.

Estas prácticas quirúrgicas estaban integradas, supuestamente, en el programa de


formación de cirujanos del Ejército, para enseñarles cómo manejar a los soldados heridos
en el frente.

4.3 Tras la rendición del Imperio de Japón.


Con el final de la Segunda Guerra Mundial, luego de los bombardeos norteamericanos
sobre Hiroshima y Nagasaki, los japoneses se rindieron. El Escuadrón 731 se disolvió.
Algunos se entregaron ante las autoridades estadounidenses, conscientes que serían
ejecutados por sus crímenes.

Pero no ocurrió nada, salvo que los norteamericanos pidieron a los más destacados
médicos de la Unidad para ofrecerles inmunidad a cambio de los resultados de sus
experimentos.

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5. Conclusión

En conclusión, el ejército imperial japonés o en específico el escuadrón 731 se ensucio


las manos para el avance de la medicina y la ciencia, ya que gracias a todos esos
experimentos que realizó sabemos en la actualidad la resistencia de un ser humano,
cuanto tiempo aguanta las enfermedades el ser humano, cuanto tiempo resiste el cuerpo
humano sin órganos y en cuanto tiempo mata las enfermedades a los humanos.

El lado malo de todos estos experimentos que realizó el escuadrón fue que lo usaron para
atacar, para beneficio propio y que tuvieron que matar a miles de personas en específico
chinos, mongoles y rusos.

Sin embargo, el otro lado de la moneda nos muestra que todos los atroces experimentos
que realizó el ejército imperial japonés tuvieron sus frutos para el futuro que hoy en día es
de mucha importancia.

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6. Anexos

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