La libertad de elegir vivir o morir: La eutanasia en el caso de Ana Estrada

Stephany Balvina Córdova Huamali

Derecho, Universidad Nacional Mayor de San Marcos

Sección 4, Ética, Ciudadanía y Diversidad Cultural

Omar Valeriano Yalle Quincho

20 de agosto del 2022

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¿Qué es ser libre?

Una palabra que tiene tantas interpretaciones, que considero que que a mi consideración no podría
delimitar su definición, sin embargo, a través de los tiempos hemos tratado de definirlo. Actualmente
muchos lo entienden como la libertad a la capacidad de tomar nuestras propias decisiones y
desarrollar nuestra vida cotidiana de acuerdo con nuestra voluntad y preferencias.

“La libertad se trata menos de hacer la voluntad de uno que de estar sujeto a la de los demás; todavía
consiste en no someter la voluntad de otros a la nuestra " Rousseau

¿Pero qué pasa cuando queremos ejercer nuestro pleno derecho de ser libres de elegir si queremos
darle fin a nuestra vida? Si nuestra libertad depende de nosotros entonces podemos decidir hasta
cuando queremos vivir. Pero en nuestro país no es así.

“Lo último que me queda por hacer es contarles de mi historia y mi lucha y así encontrar apoyo no
solo de los que me conocen sino también de cualquiera que crea en el derecho a la libertad”.
Estrada (2019)

Es difícil e incómodo hablar de la muerte; sin embargo, en este presente ensayo vengo a contarles la
historia de Ana Estrada, y como pasamos de percibir la libertad de decidir sobre nuestro proceso de
muerte como un crimen, a entenderlo como un derecho a la libertad.

Ana Estrada fue diagnosticada a sus 12 años de polimiositis, enfermedad incurable que causa
degeneración muscular; enfermedad que tan solo 2 años después, dejo paralizado sus músculos
obligándola estar en una silla de ruedas. A pesar de estas dificultades logró graduarse de la Pontificia
Universidad Católica del Perú en la carrera de Psicología.

A pesar de diversos tratamientos que llevó, en el periodo 2015- 2016, perdió toda movilidad de brazos
y piernas, sus músculos respiratorios comenzaron a fallarle provocando cansancio y falta de aire, lo
que conllevo a que fuera internada en UCI por neumonía, en donde le realizaron una traqueostomía y
una gastrostomía (El Comercio, 2021).

“Yo había muerto ese 18 de julio de 2015 y regresó un pedazo de piel con huesos de 35 kilos, con la
cabeza rapada. Era casi un cadáver”. (Estrada, 2019)

Después de ese episodio tan traumante que no solo la afecto físicamente sino psicológicamente,
decidió nunca más volver a ir a un hospital y quedarse en su casa, refugiándose en diversos libros y
poemas.
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“Yo amaba la vida, igual que ahora, pero lo que cambió fue lo ocurrido en el 2015, que me arrebató
todo lo que había construido”. (Estrada, 2021)

Ana conectada a un respirador mecánico durante gran parte de su día, Eso la llevó a preguntarse si
debía tener el derecho de decidir, cuándo, dónde y cómo morir. Libremente. Dignamente.

Ana Estrada (2019)

Que mientras no tenga el poder de mi libertad seguiré viviendo presa en un cuerpo que se está
deteriorando cada minuto y que me atará a mi cama conectada las 24 horas al respirador  y
empezarán las úlceras en la piel que no son otra cosa que heridas que se expanden y
profundizan hasta que se logra ver el hueso. Esas heridas supurarán pus y olerán a podrido y
el tejido se va a necrosar. Pero eso será solo el comienzo de sendas infecciones y más medios
invasivos y amputaciones y no moriré. Ese infierno será eterno y, repito, mi mente estará
completamente lúcida para vivir cada dolor en una cama de hospital sola y queriendo morir.

Después de 3 años desde aquella vez en que estuvo internada por neumonía, Ana se fue recuperando y
junto a ello ganando fuerzas para volverse a amar. Todo este tiempo le ayudo a tener muchas más
fuerzas y valentía para defender su derecho a elegir y decidir sobre su vida y cuerpo.

Tras diversas investigaciones de Ana para lograr someterse a una muerte asistida, se dio cuenta de
una realidad desalentadora, en el Perú esta prohibida el homicidio piadoso o eutanasia activa. “El
Estado peruano está constitucionalmente obligado a castigar siempre la eutanasia activa.” (De la
Fuente, 2021).

“La muerte digna en el Perú es ilegal, vivo en un Estado que me quita la libertad, y una vida sin
libertad no es vida porque mi cuerpo le pertenece a este Estado.” (Estrada, 2021)

Es así como Ana decidió hacer un blog sobre su vida, llevando su historia y esperando ser escuchada
y apoyada, para así llegar a las entidades superiores. La muerte digna en el Perú es ilegal, vivo en un
Estado que me quita la libertad, y una vida sin libertad no es vida porque mi cuerpo le pertenece a este
Estado. […] Pues bien, me cansé y decido que lo último que me queda por hacer es contarles de mi
historia y mi lucha y así encontrar apoyo no solo de los que me conocen sino también de cualquiera
que crea en el derecho a la libertad. (Estrada, 2020).
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Bibliografía

 Sánchez Barragán, R. D. J., & Vassallo Cruz, K. L. (2021). Caso de Ana

Estrada Reflexiones biojurídicas en torno a la eutanasia y el llamado derecho
a morir. Apuntes De Bioética, 4(1), 166-192.
https://doi.org/10.35383/apuntes.v4i1.639
 De la Fuente, R. (2021). La eutanasia: ¿existe un derecho a morir? El caso
de Ana Estrada. Gaceta Constitucional, (157), 36-49.
 Gutiérrez Martínez, C (2021). La eutanasia y su despenalización en el Perú:
un análisis del caso Ana Estrada.
 Zaldívar, H. L., Chávez, M., & Headrington, A. E. (2021, marzo 17). Ana
Estrada: dignidad para vivir y morir. IUS 360. https://ius360.com/ana-estrada-
dignidad-para-vivir-y-morir-olenka-vasquez/
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NOTAS:
1. El trabajo deberá tener como mínimo 5 carillas completas.
2. Se entregará en un archivo Word (no pdf ni ningún otro).
3. Formato de texto: Arial 11, interlineado sencillo (sin sangrías – se utiliza el formato
por defecto de Word).
4. 5. Utilicen formato APA para el citado y bibliografía.