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aula
Ubicación en el aula
Es conveniente que el niño/a con TDAH se siente cerca del docente, para evitar
distracciones al dialogar con sus compañeros.
No sentarlo cerca de puertas, ventanas o paredes que tengan muchos estímulos.
A la hora de trabajar en grupos, es recomendable sentarle con compañeros que
tengan buena conducta (pueden o no tener buen rendimiento escolar).
Se sugiere que los niños trabajen en grupos pequeños (de 2 o 3 niños).
Mantener un contacto físico y visual para llamar su atención si así lo requiere.
Utilizar la colaboración de una maestra integradora o supervisora.
Fragmentar las tareas. Dividir la tarea en pequeñas partes o bloques para focalizar
su atención.
Utilizar listas o tarjetas para organizar las actividades. Esto resulta de mucha ayuda
puesto que los niños con TDAH retienen todo tipo de información que llegue como
estímulo. Las tarjetas o listas les ayudan a organizar su día.
Utilizar un reloj de tiempo. Puede ser digital, con manecillas, etc. La finalidad del
reloj de tiempo ayuda a establecer una correcta percepción del mismo.
Un niño con TDAH puede precisar de tiempo adicional para la realización de las
actividades. Es conveniente tener esto en consideración.
Hallar aquella actividad que le resulte de mayor interés o agrado al niño y enfocar
en aprendizaje adaptando el mismo de modo que éste resulte atractivo para él.
Cuando el niño quiera irse del aula, acudir a la maestra integradora, acompañante
externo o persona que esté asistiendo al niño en el aula y permitirle salir de la
misma dado que, de lo contrario, los niños varones con TDAH se alteran aún más y
a las niñas se deprimen.
Utilizar el tiempo de clase como el de mayor punto de rendimiento, es decir, que el
mayor punto de rendimiento debe ser en el aula y no en el hogar. En este caso se
sugiere realizar actividades que comiencen el día lunes y abordarlas toda la semana.
A menudo un niño con TDAH precisa un cambio de actividad. En este caso se debe
permitir el cambio de actividad dándole una tarea que le permita distraerse.
Asegúrese que el niño tenga cierto desgaste físico por día.
Revisar periódicamente el trabajo que el niño está realizando en clase. Para esto se
puede solicitar la ayuda de la maestra integradora o acompañante del niño.
La tarea en el hogar
No es recomendable enfocarse en mucha tarea, puesto que es en la escuela que se
debe llevar adelante las actividades de mayor desgaste intelectual para el niño. Si se
quiere dejar alguna actividad de tarea que no supere los 30 minutos por día.
Evaluación