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PAUTAS PSICO-EDUCATIVAS PARA EL MANEJO DEL TDAH EN NIÑOS/AS.

1.- Dónde y cómo sentarlo en clase.

Es importante atender en el aula dónde existen menos distracciones para que así
el niño/a con TDAH, tengan menos probabilidades al despiste. Por lo general, suelen ser
primera y segunda fila, cerca del profesor y lejos de la puerta o ventana.

Es conveniente mantener con él/ella el contacto visual, y si están colocados por


parejas, sentarles con otros niños/as más tranquilos y relajados que puedan beneficiarles
en su comportamiento.

2.- Establecer rutinas y organización (tiempo y espacio).

· Usar agendas, para intentar no usar la memoria, y para comunicarse con los
padres sobre deberes, trabajos, exámenes, entre otros.
· Definir claramente las reglas de clase y de la casa. Estas deben ser pocas, claras,
sencillas (concretas), deben repetirse frecuentemente, y debemos asegurarnos
que el niño las ha entendido bien. Se puede escribir en cartulinas y tenerlas
presente con dibujos para llamar la atención.
· Mantener rutinas constantes durante el curso. Enseñar y modelar estas rutinas
(dar ejemplo). Enseñar cómo esperar turno, cómo distribuir, recoger y compartir
el material.
· Avisar cuando empieza y cuando acaba cada tarea. Esto ayudará al niño/a a
centrarse en las transiciones, cuando se cambia de actividad (por ejemplo, al
pasar del recreo a clase o en casa de los ejercicios de lengua a matemáticas).
· Avisar siempre con antelación suficiente y recordar los cambios en la rutina o el
horario (excursiones, actividades nuevas...), asegurándonos que el niño lo ha
entendido bien.
· No interrumpir la clase y/o la actividad que desarrolla con temas que no tienen
que ver con ese momento (dar los avisos al final de clase o una vez que termina
la actividad). Si se dan al principio, es posible que se distraiga con pensamientos
relacionados con lo último atendido).
· En casa, tener su espacio de estudios con los utensilios necesarios para su
desarrollo adecuado, de manera que evitarnos posibles despistes y conductas de
dilatación del estudio (por ejemplo, buscando lápices, folios, cuadernos…).

3.- Cómo dar instrucciones de manera más efectiva.

· Establecer contacto visual y acercarse al niño/a. Las instrucciones deben ser


claras, sencillas, cortas y muy concretas (Por ejemplo: Bien: “guarda el
cuaderno en la cartera”. Mal: “a ver si eres más ordenado”; Bien: “no te levantes
de la silla mientras comemos”. Mal: “no seas malo”).
· Dividir las instrucciones o tareas largas y complejas en pasos intermedios más
sencillos (por ejemplo, en el momento de la ducha: 1º coger la ropa limpia
necesaria para luego, 2º nos quitamos la ropa, 3º la echamos en el cesto de la
ropa sucia, 4º nos metemos en la ducha, 5º nos jabonamos y enjuamos…)
· Comprobar que el niño ha entendido la instrucción, haciéndole repetir lo que ha
entendido de lo dicho por el profesor y/o padres en función del caso. Darle la
oportunidad de preguntar si no lo ha entendido.

4.- Cómo mejorar la concentración.

· Hacer pausas o descansos cortos periódicos durante la ejecución de los deberes


escolares, los niños con TDAH pierden pronto la motivación y se cansan antes.
· Hacer pequeños resúmenes de lo explicado, para avanzar paso a paso.
· Utilizar métodos de enseñanza novedosos, para sorprender y motivar
· al niño cada día (ordenadores, dibujos, videos, prácticas). Esto motivará también
al resto de la clase. Aprender debe ser interesante y divertido.
· Evitar que la mayoría de la enseñanza sea por vía verbal. La audición y el
movimiento también forma parte del proceso de aprendizaje.
· Elogiar inmediatamente después de que el niño/a haya hecho algo bien. Elogiar
con frecuencia, para estimularle y motivarle a que siga centrado.
· Subrayar las palabras claves o ideas principales de una tarea o instrucción (por
ejemplo, de un problema de matemáticas o texto de lengua).
· Usar cronómetro para que el niño/a se de cuenta del tiempo que tarda en hacer
cada actividad. Los niños/as con TDAH pueden perder la noción del tiempo
fácilmente.
· Dar “toques de atención” frecuentes durante una tarea larga: acercarse al asiento
del niño y comprobar que está trabajando. Los niños con TDAH tienen un
rendimiento muy variable (a lo largo del curso, a lo largo del día, e incluso a lo
largo de una clase).
· Combinar instrucciones verbales con señales visuales o auditivas (esto se puede
hacer también en los exámenes).

5.- Cómo mejorar el rendimiento.

• Enseñarle y ayudarle a organizarse, usando una agenda, lista de tareas, etc


• Dar más tiempo para finalizar tareas (ejercicios, exámenes). Los niños/as con
TDAH suelen ser más lentos.
• Aumentar la supervisión en actividades menos estructuradas como trabajos en
grupo, tiempo de estudio individual... Los niños/as con TDAH empeoran su
“comportamiento” en actividades poco estructuradas.
• Identificar situaciones específicas de mayor dificultad (lectura, hacer
resúmenes...), para elaborar un plan de actuación.
• Si el niño tiene fracaso o retraso escolar, ofrecer refuerzo mientras sea necesario
en las asignaturas en las que presente mayor dificultad.
• Algunos niños/as se benefician de repetir curso, esto es mejor a la larga que
pasar curso sin haber aprendido bien los contenidos mínimos de ese nivel.
• Estimulación Cognitiva: a través de actividades que potencian las funciones
ejecutivas deterioradas en el TDAH. Comprende la atención, percepción,
memoria, organización espacial, habilidades numéricas, comprensión verbal y
praxias.

6.- Estrategias para mejorar el comportamiento en casa.

• Ignorar interrupciones menores o mal comportamiento leve. Posteriormente, de


forma individual, se le puede corregir.
· Elogiar frecuentemente y usar refuerzos positivos (como premios o gestos de
apoyo) inmediatamente después de un comportamiento deseado o positivo.
· Tener previsto un plan individual de manejo de los síntomas, con premios si se
cumple y consecuencias negativas si no se cumple.
· Los castigos deben ser cortos, explicados con calma, y previamente pactados.
Deben aplicarse inmediatamente después del mal comportamiento.
· Evitar sarcasmo, enfados o gritos.
· Identificar problemas o situaciones específicas que puedan ser un problema.
· Estar especialmente atento en actividades menos estructuradas, donde el niño/a
con TDAH tiene más riesgo de tener dificultades.
· Enseñar al niño/a a darse cuenta de sus síntomas.

Lda. Ángela Mª López Hernández.


Col. AN 08963

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