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Caso: Miguel (38)

Para cumplir con las indicaciones se trabajará el caso descrito:


Miquel, 38 años, tiene el diagnóstico inicial de Trastorno del estado de ánimo; posteriormente se
consideró que era secundario a una situación de acoso laboral; y se cumplió con un tratamiento
psicoterapéutico (12 sesiones).

El motivo inicial de queja del paciente: bajo estado de ánimo, dificultad para cumplir sus
obligaciones, fatiga, alejamiento de las actividades que antes disfrutaba, aislamiento social y
familiar.

A lo largo de la evaluación se identificaron otros problemas, como una importante crisis de pareja,
donde Miguel está replanteando su continuidad, considera que su mujer no lo valora, que ella
preferiría que él se marchara de la casa; reacciona con irritabilidad cuando le contradicen, lo que
refuerza su aislamiento y falta de interacción en el hogar y con las antiguas amistades. Presencia
de desmotivación labora (labora como empleado), recurre a pretextos para faltar ocasionalmente
al trabajo, y no es capaz de sostener sus puntos de vista cuando son cuestionados, “me abruman y
no sé qué decir”.

Conforme se avanzó en la evaluación y el tratamiento, se puso de manifiesto que el factor


disparador que originó toda la situación problemática fue un proceso de mobbing laboral desde
hace aproximadamente dos años, y que se mantenía vigente.

Las consecuencias de este acoso son: una baja autoestima, bajo estado de ánimo, irritabilidad, y
una apatía total para hacer cualquier tipo de actividad fuera del ámbito estrictamente laboral.
Esta situación al no ser identificada se cronifica, ocasionando problemas de pareja y una
importante interferencia en el resto de sus ámbitos personales.

La terapia consiste en diferentes fases:


La primera es la identificación y toma de conciencia de los factores originadores del problema.
A continuación fijamos los objetivos, donde toma una gran relevancia el ámbito profesional.
Inicialmente se buscó una revaloración de las expectativas laborales, reestructuración de las
distorsiones cognitivas, y un intento de adaptación en su lugar de trabajo; no obstante se procedió
finalmente a un cambio de área de trabajo por la imposibilidad de reconducir las conductas
viciadas y poco saludables del entorno. Paralelamente se va trabajando en la autoestima y en la
comunicación con la pareja. Estas líneas de actuación tuvieron una repercusión directa sobre una
mejora muy destacada en su estado de ánimo y en la relación de pareja.

La valoración de este tratamiento es muy positiva por parte del paciente y del terapeuta. Ya que
una vez identificado el factor encubierto que desencadenaba toda la situación problemática, se
origina un cambio drástico en el resto de problemas.
La duración total de la terapia fue de 3 meses.

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