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(PRÁCTICOS)
Husserl tiene sus raíces en las tradiciones intelectuales del siglo XIX, pero inaugura la
renovación del siglo XX. Encontramos en él relaciones con el positivismo y con el
neokantismo y, sin embargo, es él quien pone fin al dominio de estas dos escuelas
filosóficas en Alemania. Está profundamente convencido de la importancia de la
investigación científica para la humanidad, pero al mismo tiempo es el crítico desplantado
de la vida científica de su época. Hasta su última publicación denuncia los peligros que
amenazan a la investigación moderna al mismo tiempo que exalta la idea de una ciencia
auténtica, basada sobre una filosofía auténtica.
Por medio de una reconstrucción histórica, Husserl patentiza la ingenuidad filosófica que
se encuentra en el origen del objetivismo fisicalista.
¿Es propio de la física contener presuposiciones tácitas o bien hay una ingenuidad
positivista y pragmática común a todos los dominios de la epistëme sistematizada? ¿Es
legítimo identificar el esfuerzo teórico de la humanidad con la Wissenschaft tal como la
conocemos? ¿Tendrá la epistëme el mismo carácter de necesidad que el esfuerzo teórico
en general? Finalmente, nos veremos confrontados con el misterio mismo de esta
necesidad. Tendremos entonces que preguntarnos si no caemos en un contrasentido al
hablar de un “proyecto necesario”.
En las páginas iniciales de la Krisis, Husserl denuncia lo que llama “la reducción positivista
de la idea de ciencia” (crítica al neopositivismo). Según ellos sólo la ciencia estaría en
condiciones de construir un universo objetivo. Si los filósofos se resignaran a hacer una
crítica puramente formal de los juicios científicos descartarían todos los equívocos,
descubrirían todas las tesis carentes de sentido, pondrían fin de una vez para siempre a sus
divergencias.
¿Por qué Galileo puso en movimiento esa empresa gigantesca que se podría llamar la
“matematización de la naturaleza”? Veamos cuáles son, según Husserl, los motivos
inconscientes de Galileo.
El mundo nos es dado en la vida cotidiana bajo la forma de perspectivas, relativas todas a
nuestra subjetividad individual. El mundo aparece entonces de manera diferente a cada uno
de nosotros. Desde hace mucho tiempo nos hemos dado cuenta de nuestras divergencias.
Sin embargo, casi no nos inquietamos. Sabemos que no hay más que un mundo y que las
cosas son las mismas para todos, aunque nos aparezcan de manera diferente.
El punto de partida del primer geómetra será entonces una aproximación. Es verdad que
una escuadra no es un triángulo ideal, en el sentido de la geometría euclidiana. Pero nos
hace pensar en él. Quizás perfeccionándola podríamos convertirla en una imagen cada vez
más fiel del triángulo. Desde ese momento la cuestión de la exactitud se convierte en un
problema técnico. Las figuras ideales serán para él “seres de razón” adquiridos de una vez
para siempre, de los que en adelante podrá disponer libremente. Los “seres de razón” serán
hitos abstractos absolutamente idénticos a sí mismos y absolutamente distintos de todos los
otros. Desde el momento en que el hombre sepa servirse sistemáticamente de ellos la
geodesía se convertirá en geometría.
¿En qué consiste la idea propia de Galileo? Su idea fundamental es que, aplicando los
métodos matemático-geométricos podremos descartar el sujeto en la consideración de la
naturaleza; o sea que al contar y al medir, superamos la relatividad de la percepción
subjetiva.
Todo cambio de los contenidos cualitativos es causado, de una u otra manera, por un
cambio de las formas. Gracias a Galileo, el mundo percibido recibió un índice matemático.
Ello ocurrió en razón de haber encontrado Galileo una forma apriórica para la causalidad
universal, “idealizó la causalidad”, por así decir. Tomamos por la verdadera naturaleza, por
la realidad objetiva, lo que es una construcción científica muy osada. He aquí los efectos del
positivismo cientificista.
En principio, todos los “hechos” responden a las mismas exigencias fundamentales del
espíritu humano:
Un hecho se refiere siempre a algo que es netamente discernible. Es inútil insistir acerca de
que no siempre el discernimiento se debe a una observación. Lo que importa es que el
hecho puede ser aislado, de cualquier manera que sea, de la situación concreta o del
contexto abstracto del que forma parte.
Hay, sin embargo, otra categoría con la que se puede vincular, de manera general, el
concepto de hecho; es la categoría de “método”, de “idea metódica” o de “idea
experimental”. “Los hechos son la única realidad que pueda dar la fórmula a la idea
experimental...” verifica Claude Bernard, y Augusto Comte exclama: “Si contemplando los
fenómenos no los vinculáramos inmediatamente con ciertos principios, no solamente nos
sería imposible combinar esas observaciones aisladas... sino que... muy a menudo los
hechos permanecerían inadvertidos bajo nuestros ojos”. Parece, pues, que para ver es
preciso ya saber lo que se va a ver. O sea que con un poco de mala voluntad se podría
decir que en ciencia el método es lo que sirve para verificar hechos y que inversamente el
hecho es aquello que se establece conforme a los principios de un método. Esto es
simplista.
Con todo, es verdad que no se podría describir un “hecho” sin apelar a la categoría de
“método”. El método es, por así decirlo, un camino que estamos en vías de construir para
alcanzar una meta lejana. El hecho es entonces comparable a un lugar que, al presenta, ha
sido alcanzado por los obreros constructores. Hechos son todos los lugares situados a la
vera del camino metódico. Pero al mismo tiempo, los hechos son jalones que sirven para
orientar a los constructores. Y es por esto que todo hecho facilita el descubrimiento de un
nuevo hecho. Una vez que la dirección metódica ha sido sólidamente establecida, el trabajo
de los obreros constructores se transforma en una rutina.
No es correcto decir que el método ha sido inventado para fabricar hechos. Por el contrario,
es absolutamente cierto que un hecho es lo que ha sido establecido según las reglas de una
idea metódica.
Parece entonces que todo hecho corresponde a una regla convencional. No decimos que
esta convención sea arbitraria. Por el contrario, es una tentativa seria y a veces ingeniosa
para hacer coincidir la realidad con una idea directora.
Los positivistas se equivocan cuando presentan a los sabios como filósofos modelos. Lo
que es normal en ciencia, sería una estrechez o una ceguera en filosofía. Husserl tenía
razón cuando decía que lo que el positivismo propone equivaldría a la “decapitación de la
filosofía”.
Se podría incluso sostener que el hecho científico presupone el hecho del mundo vivido. Sin
abstracción no hay abstracción teórica, sin lenguaje no hay lenguaje erudito, sin el método
primordial de designación no hay clasificación científica. Surge de esto que la construcción
del hecho responde a una necesidad originaria del espíritu humano. Constituye una fase
inevitable del acto por el cual el hombre constituye el mundo.
Pues, como hemos tratado de mostrarlo en otra parte, lo que en fenomenología llamamos
“mundo” tiene siempre la misma estructura elemental. Consiste en un núcleo de verdades
establecidas de hecho (o lo que se considera como tal). Pero el núcleo de tacticidad tiene
horizontes de no tacticidad. El horizonte es la realidad adivinada, vagamente anticipada,
concebida de manera global y emotiva. Tiene siempre un timbre afectivo más o menos
marcado mientras que el núcleo es la red de verificaciones consideradas como objetivas.
Entre núcleo y horizonte hay relaciones definidas que no podríamos describir en este
contexto.
Cada hecho es netamente discernible de todos los otros hechos, y a fortiori, de todo lo que
no es facticidad. El hecho es, pues, rigurosamente idéntico a sí mismo y absolutamente
único. Corresponde a la definición clásica de la unidad puesto que es indivisum in se et
divisum ab alio. Además el hecho es invariable, no cambia o no cambia más. Finalmente, no
podríamos verificar hechos sin tomar una cierta distancia. Es sólo gracias a una distancia
que podemos captar una totalidad en el marco de la cual los hechos serán determinados en
función de sus relaciones mutuas.
El filósofo no aceptará esta alternativa. Dirá que hay un nivel antológico donde necesidad y
libertad se confunden. En este nivel los términos “elección”, “proyecto”, “decisión”, etc. son
inutilizables. Pero es importante delimitar este dominio. Para mostrarlo basta volver al
problema que nos hemos planteado: la ciencia moderna, tal como la hemos descrito, ¿es un
proyecto humano como cualquier otro? Sin ninguna duda. Hacer ciencia, hacer el amor,
jugar, son proyectos que se equivalen. Pero no se dirá lo mismo respecto del esfuerzo
teórico en general. El hombre no es libre en cuanto a hacer o no hacer este esfuerzo. No es
libre para elegir la forma general de su teoría. No es libre para no buscar la verdad. O más
bien la busca libre y necesa-preciso para el hombre, de ellos surge que hay un sentido para
el hombre que no es debido a una “Sinngebung” (donación de sentido), humana. El hombre
no es, pues, la medida de la verdad; por el contrario, debe crecer para estar a la medida de
la verdad. La historia del individuo humano y la historia de la humanidad testimonian este
esfuerzo de crecimiento. El historiador nos dirá que el Ideenkleid (ropaje de ideas) de la
episteme, tal como la conocemos, no es más que una forma particular, imperfecta y
fácilmente engañadora, que el esfuerzo teórico ha revestido en el curso de la evolución
cultural europea. Pero esto no excluye que la búsqueda de la verdad sea para el hombre un
fin perseguido con una libertad entusiasta y –para hablar como Husserl- un telos necesario.
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El siglo XIX fue una gran época para los hechos. “Lo que yo quiero son hechos, lo único que
se necesita en esta vida son Hechos” (Gradgrind). Ranke apuntaba que la tarea del
historiador era solo mostrar lo que realmente aconteció.
La necesidad de fijar datos básicos no se apoya en ninguna cualidad de los hechos mismos,
sino en una decisión que formula el historiador, a priori. La forma más eficaz de influir en la
opinión consiste en seleccionar y ordenar los hechos adecuados. Los hechos sólo hablan
cuando el historiador apela a ellos: él es quien decide a qué hechos se da paso, y en qué
orden y contexto hacerlo. El historiador es necesariamente selectivo.
Como dijo Stranchey: “El primer requisito del historiador es la ignorancia, una ignorancia
que simplifica y aclara, selecciona y omite”.
Si los documentos lo dicen, será verdad. Los datos, hayan sido encontrados en documentos
o no, tienen que ser elaborados por el historiador antes de que él pueda hacer algún uso de
ellos: y el uso que hace de ellos es precisamente un proceso de elaboración.
Los documentos no nos dicen lo que ocurrió, sino tan sólo lo que Stresemann creyó que
había ocurrido, o lo que deseaba que los demás pensaran, o acaso lo que él mismo quería
creer que había ocurrido. El proceso seleccionador lo empezó Stresemann.
Becker afirmaba: “los hechos de la historia no existen para ningún historiador hasta que él
los crea”.
Los hechos de la historia nunca nos llegan en estado “puro”, ya que ni existen ni pueden
existir en una forma pura: siempre hay una refracción al pasar por la mente de quien los
recoge.
El historiador encontrará la clase de hechos que busca. Historiar significa interpretar. Carr
define la historia como un sólido núcleo interpretativo rodeado de la pulpa de los hechos
controvertidos”.
Sólo podemos captar el pasado y lograr comprenderlo a través del cristal del presente. El
historiador pertenece a su época y está vinculado a ella por las condiciones de la existencia
humana. Las mismas palabras de que se vale tienen connotaciones en curso de las que no
puede divorciarlas.
Tras la hipótesis de Ollingwood, se oculta un peligro mayor. Si el historiador ve
necesariamente el período histórico que investiga con ojos de su época, y si estudia los
problemas del pasado como clave para la comprensión de los presentes, ¿no caerá en una
concepción puramente pragmática de los hechos, manteniendo que el criterio de la
interpretación recta ha de ser su adecuación a algún propósito de ahora? Según esta
hipótesis, los hechos de la historia no son nada, y la interpretación lo es todo. Nietzsche
dijo: “La falsedad de una opinión no encierra para nosotros objeción alguna contra ella...El
problema radica en saber hasta dónde contribuye a prolongar la vida, a preservarla, a
amparar o aun a crear la especie”.
El deber de respeto a los hechos que recae sobre el historiador no termina en la obligación
de verificar su exactitud. Tiene que intentar que no falte en su cuadro ninguno de los datos
conocidos o susceptibles de serio que sean relevantes en un sentido u otro para el tema
que le ocupa o para la interpretación propuesta.
El historiador empieza por una selección provisional de los hechos y por una interpretación
provisional a la luz de la cual se ha llevado a cabo dicha selección. Conforme va trabajando,
tanto la interpretación como la selección y ordenación de los datos va sufriendo cambios
sutiles y parcialmente inconscientes, consecuencia de la acción recíproca entre ambas.
Esta misma acción recíproca entraña reciprocidad entre el pasado y el presente, porque el
historiador es parte del presente, en tanto que sus hechos pertenecen al pasado. El
historiador y los hechos de la historia se son mutuamente necesarios. La historia es un
proceso continuo de interacción entre el historiador y sus hechos, un diálogo sin fin entre el
presente y el futuro.
En la obra de Marc Bloch Aries resalta dos aspectos que llaman su atención: Los caracteres
originales de la historia rural en Francia, referido Su método permitía aprehender las
estructuras sociales desde el interior tocando lo esencial: el lugar geométrico del hombre y
su trabajo cotidiano. El otro aspecto a destacar es que Bloch no abordaba un solo periodo
de la historia sino que reemplaza una especialización horizontal por una vertical a través del
tiempo. A esto se debe que el estudio del feudalismo se vea renovado por Bloch.
Antes de Marc Bloch los medievalistas tenían el hábito de encarar el feudalismo como una
"organización", en cambio él, retoma el problema de una manera diferente. Ante todo, no
existe un feudalismo sino una mentalidad feudal. Establece que no hay un feudalismo,
general en todo Occidente, sino muchos estados de una sociedad, bastante afines entre sí
como para que se los reúna bajo el rótulo de feudal, pero difieren bastante también para
que no se los confunda. Bloch distingue tiempos y lugares, y los compara. No niega la
realidad de una sociedad feudal pero no la busca en un promedio de las diferencias. Por el
contrario la encuentra en la comparación de las diferencias mismas. La unidad se encuentra
en el seno mismo de la diversidad.
Lucien Febvre atraviesa la sociedad entera pero con un punto enigmático: los procesos de
hechicería. Distingue en la gesta del pasado aquello que le parece subrayar una diferencia
entre la sensibilidad del hombre otrora y la del hombre de hoy. Intenta un ensayo de
reconstrucción histórica, sin desarrollar la Historia como si fuera una cinta continua de
acontecimientos, sino refiriéndola al problema inicial, al asombro de comparar el ayer y el
hoy, que dio origen a la investigación y sigue orientándola.
Lo que aquí nos interesa es la dirección que debe tomar el historiador en su búsqueda:
establece las diferencias, luego reconstituye una estructura que pronto deja de estar
integrada por negaciones y aparece como una totalidad original. Al llegar al límite, el
historiador percibe su pasado como conciencia cercana a la del contemporáneo de ese
pasado. La historia actual desconfía de los hechos aislados y los historiadores, tal como
hicieron Bloch y Febvre, deben psicoanalizar los documentos para reconocer la mentalidad
particular de esas épocas, es decir, una mentalidad inadvertida por los contemporáneos y
asombrosa para nosotros. No existe otra historia que la comparativa. La Historia es la
comparación de dos estructuras que se trascienden recíprocamente.
Teórico 1 (desgrabado)
Si tenemos que historizar el punto de partida tenemos que decir que es complejo y que
presenta varios puntos de vista a la vez, con lo cual ustedes ya tendrían que prever
necesitamos de lo contemporáneo para construir el programa.
Hay autores que señalan que la historia se estudia para comprender el presente a contraluz
del pasado. Historiar, en este caso, se utiliza para desentrañar como otros se ha resuelto
este mismo problema en el pasado. Entonces para historiar en psicología, debemos partir
de los problemas a historiar, de lo significativo. Es crucial recortar desde el problema, desde
la pregunta que nos hagamos. En este sentido, es fundamental el nombre que tiene el
programa de la asignatura (“Pasiones y Emociones”) porque en su título se aloja la pregunta
a investigar, el problema a merodear, a acechar, a acercar.
En la parte clásica del programa, el cuerpo está por fuera de la psicología. En un segundo
momento que nosotros llamamos transición, en el siglo XIX, en donde transcurre la
revolución biológica, el cuerpo comienza a tener un lugar. En este segundo momento, la
psicología que hasta ahora es un segmento de la filosofía y de la física, logra constituirse
como ciencia experimental. Es en un tercer momento en donde podemos ubicar a los
desenlaces en lo contemporáneo. Ellos son: Freud para el tema del inconsciente,
Merleau-Ponty con la conciencia; Skinner que trabaja sobre la conducta en lo
contemporáneo.
Lo que vamos a privilegiar son las interrelaciones y los diálogos que se producen entre los
autores modernos y los contemporáneos.
Siglo XVII: la física y la mecánica son las ciencias paradigmáticas. La psicología comienza
a ser demandada como fundamento epistemológico de la ciencia. Con la aparición de los
primeros descubrimientos de la modernidad empieza la exigencia de un sujeto gnoseológico
capaz de sostener los enunciados de la ciencia (pasaje realizado por Descartes).
El Método: es un camino hacia una meta. Los hechos aparecen a la vera del camino
metódico; al elegir un camino estoy dejando de elegir otros. Según las características que
tenga la meta, los productores elegirán un método u otro. El método es de alguna manera
instrumentado desde la meta. El método es un camino que está denunciando qué tipo de
hecho va a estallar desde ese juego. Entonces no hay un sólo método, sino que hay varios.
Va a compactar, condensar, toda una manera de pensar la realidad, toda una lógica de
búsqueda. Condensa toda una mentalidad que se pone en acto a partir de su
implementación. El método es una mentalidad puesta en acto. En lo que al método se
refiere, la convencionalidad va a ser relativa porque si es absoluta, arroja como resultado
errores que pueden ser fatales. Si decimos que es relativa, le ponemos un freno a la
convencionalidad.
Grandeza del Hecho: si no hay un encuentro con lo real tampoco hay producción en
ciencia. Strasser sitúa del lado de lo real a la Grandeza del Hecho en ciencia. Del lado de la
Grandeza ubicamos ese esfuerzo titánico que significa tratar de aprehender algo de lo real.
Miseria del Hecho: lo que el método introduce en la construcción del hecho que es su
costado de ser construido, elaborado, convenido. Strasser sitúa del lado de la
convencionalidad a la Miseria del Hecho. Del lado de la convencionalidad -, si el juego de lo
convencional es excesivo, va a situar la miseria y esto se ve cuando el productor quiere
acomodar las cosas a lo que ya tiene pensado. Algo de esto se produce siempre, pero si
esto es excesivo, ahí radica la Miseria del Hecho.
Los datos sueltos: no tienen ningún sentido, no se puede trabajar con datos aislados. Hay
que ubicarlos en una serie temporal. El dato solo sirve si queda integrado en una secuencia
temporal. La relación entre pasado y presente es un diálogo interactivo, donde el dato suelto
tiene que quedar integrado a esta continuidad, a esta serie, para entender de qué se trata.
La escena: es un paisaje, una estructura, una Gestalt. En esa escena hay condiciones
internas que nos conducen al concepto de "mentalidad" (concepto bien francés). Fíjense
que, con este término, al igual que Carr con el concepto de proceso, se corre del sistema
causalista en historia. Es como un microclima que tiene una lógica diferente de
pensamiento, esa estructura es tan obvia, tan compartida, tan espontánea que no es
advertida por los que la integran.
El historiador: tiene que ser alguien capaz de sorpresa porque en la misma sorpresa va a
estar alojada la diferencia, ese captar lo extraño entre las dos escenas. Captura eso tan
obvio, tan propio de la escena que el que está inmerso en ella no puede advertir, esos
hábitos colectivos, esas mentalidades espontáneas.
Los datos sueltos: no tienen ningún sentido sino son integrados en relación a la escena
que los contiene y que de esa manera se los hace entendibles.
Similitudes: ambas prescinden de la mera explicación causal y ninguna de las dos toma a
los datos como sueltos, aislados. Detectan ambos el mismo problema, pero lo resuelven de
manera diferente.
Diferencias: estas dos escuelas antagónicas proponen 2 salidas distintas, una procesual y
la otra apunta a la escena o paisaje. Por otro lado, con respecto a los datos sueltos, Carr
sostiene que deben ser integrados en una serie, mientras que Aries sostiene que el dato
debe estar inmerso en la lógica de la escena.
Articulos importantes:
artículo 2, 3 y 4 también
artículo 2 :
ningún sujeto obra contra nuestra alma, más inmediatamente que el cuerpo y se debe
considerar que en lo que el alma es una pasión, en el cuerpo es una acción
artículo 3:
articulo 4:
articulo 7 :
todos los movimientos de los musculos y todos los sentidos dependen de los nervios , que
son tubos que estan en el cerebro y contienen una especie de aire llamado espiritus
animales
articulo 10:
las partes mas viva sy sutiles de la sangre entran continuamente en gran cantidad en las
cavidades del cerebro, estas artes sutiles de la sangre componen los espiritus animales ,
para ello no necesitan recibir algun cambio extra en el cerebro, sino que en el quedan
separada las partes menos sutiles de la sangre , lo que se llama espiritus no son sino
cuerpos que no tienen otra propiedad que la de ser cuerpos pequeños que se mueven
rapidamente
articulo 17:
ya reconocidas entonces las funciones del cuerpo , no quedan mas que atribuirle al alma los
pensamintos que son de dos generos: las acciones del alma y las pasiones. las acciones
son todas las voluntades ya que experimentamos que vienen directamente de nuestra alma
y sus pasiones son percepciones o conocimientos que estan en nosotros , ya que muchas
veces el alma la que las hace tal y como son y la recibe de las cosas que son presentadas
por ellas
articulo 22:
hay algunas percepciones van al ama por medio de los nervios y la diferencia entre ellas es
que una es sobre los objetos exteriores y otras referidas a nuestra alma
articulo 23:
articulo 24:
las percepciones referidas al cuerpo , las cuales algunas de sus partes son el hambre , la
sed y otros apetitos naturales , a las que se le añade el dolor , el calor y otras afecciones …
una de estas acciones sobreviene a la otra , parece que la primera esta ya en nosotros y
que la que sobreviene todavia no esta , sino en el objeto que la causa
articulo 25:
las percepciones referidas solo al alma son las que cuyos efectos se sienten como en el
alma misma, de las cuales no se suele conocer ninguna causa primera a la que se puedan
atribuir , como los sentimientos de alegria, colera , etc.
articulo 27:
las pasiones del alma se definirian como percepciones , las emociones del alma , que se
refieren a ella y que son causadas, sostenidas y fortificadas por algun movimiento de los
espiritus
articulo 28:
se las puede llamar percepciones cuando se emplea esta palabra para designar todos los
pensamientos que no son acciones del alma o voluntades, pero no cuando la usamos solo
para designar conocimientos evidentes , se las puede llamar tambien sentimientos porque
son recibidas en el alma de la misma forma que lo objetos de los sentidos exteriores , y el
ama no las conoce de otro modo , tambien s epueden llamar emociones del alma no solo
por todos los cambios que hay en ella , sino que particularmente porque de todas las
clasesde pensamientos que pueda tener el alma , ninguna la agita y conmueve tan fuerte
como estas pasiones
articulo 29:
son causadas , sostenidas y reforzadas por algun movimiento de los espiritus , a fin de
poder distinguirlas de nuestras volunades , que se las puede llamar emociones del alma ,
referidas a esta ultima pero que son causadas por ella misma , a fin de explicar su ultima y
mas proxima causa
articulo 31:
aunque el alma este unida al cuerpo, hay en alguna parte de este ultimo en la cual ejerce
sus funciones mas particularmente que en todas las demas , esta parte puede ser el
cerebro o el corazon , el cerebro ya que con el se relacionan los organos de los sentidos y
el corazon porque en el es como que se sienten las pasiones
la parte del cuerpo en el que se ejercen las funciones del alma , no todo el cerebro ni el
corazon , sino una glandula pequeña , situada en el centro de su sustancia y suspendida
sobre el conducto por el cual los espiritus de sus cavidades se comunican con los de sus
cavidades anteriores con los de la posterior, que los pequeño movimientos en esta tienen un
gran poder para cambiar el curso de estos espiritus y los cambios producidos por el curso
de los espiritus lo tienen par variar los movimientos de esta glandula
Art. 45.
Cual es el poder del alma respecto a sus pasiones. Nuestras pasiones no pueden tampoco
ser excitadas directamente ni suprimidas por la acción de nuestra voluntad, pero pueden
serlo indirectamente mediante la representación de las cosas que tienen costumbre de ser
unidas a las pasiones que queremos tener, y que son contrarias a las que queremos
rechazar. De manera que, para excitar en sí mismo el atrevimiento y desterrar el miedo, no
basta tener voluntad de ello, sino que hay que dedicarse a examinar las razones, los objetos
o los ejemplos que persuaden de que el peligro no es grande; de que hay siempre más
seguridad en la defensa que en la huida; de que se tendrá la gloria y la alegría de haber
vencido, mientras que no se puede esperar más que pesar y vergüenza de haber huido, y
cosas semejantes.
Art. 46.
Cuál es la razón que impide que el alma pueda disponer enteramente de sus pasiones.
Existe una razón particular por la que el alma no puede rápidamente cambiar o detener sus
pasiones, razón que me ha permitido escribir antes, en la definición de las pasiones, que
son no solamente causadas, sino también sostenidas y fortalecidas por algún movimiento
particular de los espíritus Esta razón es que casi todas las pasiones van acompañadas de
alguna emoción que se produce en el corazón, y por consiguiente, también en toda la
sangre y los espíritus de suerte que, hasta que ha cesado esta emoción, permanecen
presentes en nuestro pensamiento del mismo modo que persisten en él los objetos
sensibles mientras actúan sobre los órganos de nuestros sentidos. Y así como el alma, al
atender intensamente a alguna cosa, puede dejar de oír un pequeño ruido o de sentir un
pequeño dolor, más no puede dejar igualmente de oír el trueno o de sentir el fuego que
quema la mano, de la misma manera puede fácilmente superar las pequeñas pasiones,
pero no puede dominar las más violentas y más fuertes mientras no se calma la emoción de
la sangre y de los espíritus. Lo más que puede hacer la voluntad mientras esta emoción
esté en vigor, es no consentir en sus efectos y contener varios de los movimientos a que el
cuerpo está dispuesto. Por ejemplo, si la cólera hace levantar la mano para pegar, la
voluntad puede generalmente contenerla; si el miedo incita a las gentes a huir, la voluntad
puede detenerlas, y así en otros casos.
Art. 51.
Cuáles son las primeras causas de las pasiones. De lo dicho hasta aquí, se deduce que la
última y más próxima causa de las pasiones del alma no es otra que la agitación con que
los espíritus mueven la pequeña glándula que hay en medio del cerebro. Pero no basta esto
para poder distinguirlas unas de otras; hay que buscar sus fuentes, y examinar sus primeras
causas; ahora bien, aunque puedan a veces ser producidas por la acción del alma, que se
determina a concebir tales o cuales objetos, y también solamente por el temperamento de
los cuerpos o por las impresiones que se encuentran fortuitamente en el cerebro, como
ocurre cuando nos sentimos tristes o alegres sin saber por qué, no obstante, por lo que
queda dicho, parece que todas pueden también ser suscitadas por los objetos que mueven
los sentidos, y que estos objetos son sus causas más corrientes y principales; de donde
resulta que, para encontrarlas todas, basta considerar todos los efectos de los objetos.
Art. 52.
Cómo se comportan y cómo pueden ser enumeradas. Observo, además, que los objetos
que mueven los sentidos no excitan en nosotros diversas pasiones en razón de todas las
diversidades que hay en ellos, sino sólo en razón de las diversas maneras como pueden
dañarnos o beneficiarnos, o bien en general ser importantes; y que el comportamiento de
todas las pasiones consiste únicamente en que disponen el alma a querer las cosas que la
naturaleza nos prescribe como útiles, y a persistir en esta voluntad, y esta misma agitación
de los espíritus que las causa dispone el cuerpo a los movimientos que sirven para la
ejecución de estas cosas; por eso, para enumerarlas, basta con examinar por orden de
cuántas diferentes maneras que nos importan pueden nuestros sentidos ser movidos por
sus objetos; y haré aquí la enumeración de todas las principales pasiones según el orden en
que pueden así ser descubiertas.
Art. 69.
Hay sólo seis pasiones primarias. Mas el número de las simples y primarias no es muy
grande. Pues, examinando todas las que he enumerado, es fácil observar que sólo hay seis
que lo sean, a saber: la admiración, el amor, el odio, el deseo, la alegría y la tristeza; y que
todas las demás son compuestas de algunas de estas seis, o son especies de las mismas.
Por eso, para evitar que el gran número embarace a los lectores, trataré aquí
separadamente de las seis primarias, y después indicaré de qué manera se originanen
estas todas las demás.
Art. 70.
Art. 79.
Definiciones del amor y del odio. El amor es una emoción del alma causada por el
movimiento de los espíritus que la incita a unirse de voluntad a los objetos que parecen
serle convenientes. Y el odio es una emoción causada por los espíritus que incita al alma a
querer separarse de los objetos que se le presentan como nocivos. Digo que estas
emociones son causadas por los espíritus para distinguir el amor y el odio, que son
pasiones y dependen del cuerpo, tanto de los juicios que mueven también al alma a unirse
de voluntad con las cosas que estima buenas y a separarse de las que estima malas, como
de las emociones que estos provocan por sí solos en el alma.
Art. 91.
Definición de la alegría. La alegría es una emoción agradable del alma, en la que consiste
el goce que esta siente del bien que las impresiones del cerebro le representan como suyo.
Digo que en esta emoción consiste el goce del bien; pues, en efecto, el alma no recibe
ningún otro fruto de todos los bienes que posee; y mientras no siente ninguna alegra de
poseerlos, puede decirse que no goza de ellos más que si no los poseyera. Añado que de
este bien que las impresiones del cerebro le representan como suyo, a fin de no confundir
este gozo, que es una pasión, con el gozo puramente intelectual, que se produce en el alma
por la única emoción agradable producida en ella misma, en la cual consiste el goce que el
alma siente del bien que su entendimiento le presenta como suyo. Verdad es que, mientras
el alma está unida al cuerpo, este gozo intelectual no puede casi nunca dejar de ir
acompañado del que es una pasión; pues tan pronto como nuestro entendimiento advierte
que poseemos algún bien, aunque este bien pueda ser tan diferente de todo lo que
pertenece al cuerpo que no sea en absoluto imaginable, no deja la imaginación de producir
inmediatamente alguna impresión en el cerebro, de la cual resulta el movimiento de los
espíritus que suscita la pasión de la alegría.
Art. 92.
Art. 211.
Un remedio general contra las pasiones. Y ahora que las conocemos todas, tenemos mucho
menos motivo que antes para temerlas; pues vemos que todas son buenas en su naturaleza
y que lo único que tenemos que evitar es su mal uso o sus excesos, contra los cuales
podrían bastar los remedios que he explicado si todo el mundo se cuidara bien de
practicarlos. Pero, como entre esos remedios he puesto la premeditación y la industria para
corregir nuestros defectos naturales ejercitándonos en separar en nosotros los movimientos
de la sangre y de los espíritus de los pensamientos a que suelen ir unidos, he de confesar
que hay pocas personas bastante preparadas de esta suerte contra toda clase de
situaciones y que estos movimientos suscitados en la sangre por los objetos de las
pasiones se producen tan inmediata y súbitamente como consecuencia de las impresiones
que recibe el cerebro y de la disposición de los órganos, aunque el alma no contribuya en
nada a ello, que no hay cordura humana capaz de oponerles resistencia cuando no se está
bastante preparado. Así, por ejemplo, hay muchos que no pueden abstenerse de reír
cuando les hacen cosquillas, aunque ello no les produzca ningún placer; pues, despertada
en su fantasía la impresión del gozo y de la sorpresa que anteriormente les hizo reír por el
mismo motivo, el pulmón se les infla sin que ellos quieran por la sangre que el corazón le
envía. Así también, los que son por naturaleza muy inclinados a las emociones de la alegría
y de la piedad, o del miedo, o de la ira, no pueden menos de desfallecer, o de llorar, o de
temblar, o de que se les revuelva la sangre como si tuvieran fiebre, cuando el objeto de
alguna de estas pasiones les mueve la fantasía. Mas algo puede hacerse siempre en tal
ocasión, y creo que puedo ponerlo aquí como el remedio más general y más fácil de
practicar contra todos los excesos de las pasiones: cuando sentimos la sangre de tal modo
agitada, debemos estar sobre aviso y recordar que todo lo que se presenta a la imaginación
tiende a engañar al alma y a hacerle considerar las razones que sirven para persuadir al
objeto de su pasión mucho más fuertes de lo que pasión son, y mucho más débiles las que
tienden a disuadirla. Y cuando la persuade únicamente de las cosas cuya ejecución soporta
algún aplazamiento, hay que abstenerse de pronunciar de momento ningún juicio, y
distraerse en otros pensamientos hasta que el tiempo Y el sosiego hayan calmado por
completo la agitación de la sangre. Y por último, cuando incita a actos sobre los cuales es
preciso decidir inmediatamente, la voluntad debe aplicarse principalmente a examinar y a
seguir las razones que sean contrarias a las que la pasión presenta, aunque aquellas
parezcan menos fuertes: como cuando inopinadamente atacados por algún enemigo, la
ocasión no permite que empleemos ningún tiempo en deliberar. Mas una cosa me lleva a
creer que los que están acostumbrados a reflexionar en sus actos pueden hacerlo siempre,
y es que, cuando se sientan sobrecogidos por el miedo, procuran desviar su pensamiento
del peligro considerando las razones por las cuales hay mucha más seguridad y más honor
en la resistencia que en la huida; y al "contrario", cuando sientan que el deseo de venganza
y la ira los incita a correr inconsideradamente hacia quienes los atacaban, se acordaran de
pensar que es impudencia perderse cuando se puede, sin deshonor, salvarse, y que, si la
partida es muy desigual, vale más una retirada honrosa o tomar cuartel que exponerse
brutalmente a una muerte segura.
Art. 212. De las pasiones depende todo el mal y todo el bien de esta vida. Por lo demás, el
alma puede tener sus placeres aparte; mas los que le son comunes con el cuerpo dependen
enteramente de las pasiones: de suerte que los hombres a los que más pueden afectar son
capaces de sacarle a esta vida los más dulces jugos. Verdad es que también pueden
encontrar en ella la máxima amargura cuando no saben emplearlas bien y la fortuna les es
contraria; mas en este punto es donde tiene su principal utilidad la cordura, pues enseña a
dominar de tal modo las pasiones y a manejarlas con tal destreza, que los males que
causan son muy soportables, y que incluso de todos ellos puede sacarse gozo.
Se pretende llegar a la noción de pasión, pero primero hay que pasar por algunos otros
puntos: fundación gnoseológica, pasiones e intelectualismo.
La fundación gnoseológica hace referencia a una generación de pensadores constituida por
físicos dentro de la cual está Descartes.
Cuando se habla de fundación gnoseológica quiere decir que la ciencia va a tener un nuevo
diálogo y este va a necesitar a la naturaleza y al sujeto. Un sujeto capaz de sostener
enunciados de la ciencia.
MÉTODO: es la manera en que el entendimiento puede entrenarse para que cualquiera que
entrene pueda hacer lo que el otro hizo y llegar a un mismo resultado. Si todos se entrenan
están capacitados para hacer ciencia.
Esto es una maniobra nueva de Descartes, que en filosofía se llama sustancialización del
cogito.
El darle al pensar y el darle a las cosas una sustancia sirve para darle existencia a un
dualismo. Para que haya dualismo tienen que haber dos términos y estos términos tienen
que tener las mismas características sustanciales: Res cogitans y res extensa. Estos dos
órdenes son diferentes y se oponen. Son dos órdenes del ser.
Descartes propone el método del análisis. La inteligencia o el pensar son analíticos. Al todo
hay que dividirlo en partes. Es necesario proceder del todo a las partes. A medida que se
avanza en el análisis, emergen los productos del análisis, de la descomposición del análisis.
Lo que se opone a la verdad es complejo, oscuro y confuso.
Se piensa analíticamente con conceptos; con los conceptos más abstractos posibles y con
las ideas.
Para descartes conciencia, cogito y pensar son lo mismo. Las ideas son innatas o en todo
caso las pone dios.
“encuentro con lo real”. Lo real se encuentra en res extensa, para producir ciencia tengo
que ir a la caza de lo real. Cuando atrapo algo del orden de lo real, vuelvo con una
representación La diferencia entre la idea y la representación de lo real, es que la
representación es un producto psíquico; una copia fiel de lo real. Una cosa es la idea como
punto de partida y otra cosa es la representación.
Una vez planteado el dualismo, tenemos de un lado el cuerpo y del otro la razón. Todo
aquello del mundo y del cuerpo que incida en la mente es una pasión.
Para Descartes lo que es acción del cuerpo y del mundo se inscribe como pasión en el
alma. La acción en el cuerpo y en el mundo pasa al otro lado como acción en el alma.
Las pasiones pertenecen al alma, pero se originan en el cuerpo.
Dice que el cuerpo se encuentra del lado de la res extensa y dice que el cuerpo es la sede
del calor y del movimiento. Dice que en el cuerpo hay nervios, por el cuerpo circula la
sangre. Descartes piensa que la sangre puede ser negra si contiene bilis, amarilla si está
cerca del hígado. Va a trabajar las pasiones desde la mecánica corporal.
Los médicos del entendimiento, que se llaman lógicos, satisfacen muy bien las exigencias
generales desde que han hecho el importante descubrimiento que la cabeza humana es en
realidad un tambor que solo suena porque está vacío. Por consiguiente, no veo nada mejor
para mí que imitar el método de los médicos que creen haber sido de gran utilidad a su
paciente cuando le han dado nombre a su enfermedad, y esbozaré una pequeña
onomástica de las dolencias de la cabeza, desde la parálisis de la misma en la idiocia hasta
sus conversiones en la locura furiosa. No obstante, para identificar estas repulsivas
enfermedades en su genealogía progresiva, me parece necesario aplicar primero los grados
menores de las mismas desde la imbecilidad hasta la locura, porque estás cualidades son
corrientes en la vida social y, sin embargo, conducen a las primeras.
El juicio práctico sobre las cosas, como el que necesita el campesino, el artesano o el
marinero, es muy distinto del que se hace sobre los resortes que rigen el trato entre los
hombres. Esto último no es tanto entendimiento como picardía, y la carencia amable está
facultad tan alabada se llama ingenuidad.
Los impulsos de la naturaleza humana cuando son muy fuertes se llaman pasiones, son las
fuerzas motrices de la voluntad. Si una pasión es especialmente potente la capacidad de
entendimiento puede bien poco contra ella; pues el hombre fascinado ve muy bien las
razones que se oponen a su inclinación favorita, solo que se siente impotente para
conferirles es una energía activa. Cuando está inclinación es en sí buena, cuando, por lo
demás, la persona es razonable, pero la propensión predominante le impide sus malas
consecuencias, entonces este estado de la razón encadenada en la insensatez. Un
insensato puede tener mucho entendimiento incluso en el juicio sobre las acciones en que
se muestra insensato; ha de poseer incluso bastante entendimiento y un buen corazón para
que esté justificada está suave designación de sus excesos. La pasión amorosa o una gran
ambición han convertido desde siempre a mucha gente razonable en insensatos. Al
insensato se lo opone el hombre cuerdo, y quién carece de insensatez es un sabio. A este
sabio se le puede buscar en la luna, quizás porque allí está sin pasiones y se posee
ilimitadamente la razón. El apático está asegurado contra la insensatez por su imbecilidad.
Sin embargo, a los ojos de la mayoría tiene el aire de un sabio.
Pero el loco, por su parte, se ha vuelto tan imbécil que solo se cree en posesión de algo
cuando se despoja él mismo de lo codiciado.
Sostengo que toda locura está ciertamente injertada en dos pasiones: el orgullo y la
avaricia.
Ambas inclinaciones son injustas y son por ello odiadas. Ambas son absurdas por
naturaleza, y su fin se destruye a sí mismo. El orgulloso manifiesta una pretensión no
disimulada a la preeminencia ante los demás a través de un marcado menosprecio de ellos.
El avaro necesita muchas cosas y le es imposible privarse del menor de sus bienes, con ello
se priva, en realidad, de todos ellos en la medida en que por mezquindad los pone bajo
candado. La ceguera del orgullo produce a veces locos bobos y a veces presuntuosos,
según que haya tomado posesión de la cabeza vacía bien una pueril inconstancia o bien
una rígida estupidez.
Desde siempre, la vara codicia ha dado ocasión a muchas historias ridículas, las cuales
sería más sorprendente que pudieran ser inventadas que realmente acontecidas. El
insensato no es sabio, el loco no es listo.
Paso de las dolencias en la cabeza que son despreciadas y escarnecidas a las que se
consideran por lo común con compasión, desde aquellas que no suprimen la sociedad civil
libre, hasta aquellas de las que se ocupan los servicios sanitarios oficiales y con respecto a
las cuales toman disposiciones. Divido estas dolencias en dos: las de debilidad y las de
inversión. Las primeras están comprendidas bajo la denominación general de estupidez; las
segundas bajo la denominación general de trastornos del ánimo. El estúpido muestra una
gran debilidad de la memoria, de la razón y por lo común también respecto a las
sensaciones.
Este mal es, en su mayor parte, incurable puesto que sí ya es difícil eliminar los salvajes
desórdenes del cerebro trastornado, ha de ser casi imposible insuflar una nueva vida a sus
órganos muertos.
Las dolencias de la cabeza trastornada se dejan agrupar en tanto géneros principales como
capacidades del ánimo se ven afectadas por ella. Pretendo poder ordenarlas en conjunto
bajo las tres divisiones siguientes: en primer lugar, la inversión de las nociones de la
experiencia, en la alucinación; en segundo lugar, el desorden al que es conducida la
facultad de juzgar primariamente sobre esta experiencia, en el delirio; en tercer lugar, la
razón invertida por lo que se refiere a los juicios más universales, en la manía. Todas estas
manifestaciones restantes del cerebro enfermo pueden considerarse, bien como grados
distintos de los casos mencionados, bien como asociaciones desgraciadas de estos males
entre ellos, o bien, como el injerto de esos mismos casos en poderosas pasiones y pueden
ser entonces subordinados a las clases citadas.
No hay ningún motivo para creer que en el estado de vigilia nuestro espíritu sigue otras
leyes que cuando duerme. Más bien hay que suponer que en el primer caso solo las vívidas
impresiones sensoriales oscurecen las imágenes, más frágiles, de las quimeras y las hacen
irreconocibles, mientras que estás poseen todas sus fuerzas mientras dormimos, cuando a
todas las impresiones externas le es cerrada la entrada al alma. Por ello no es extraño que
los sueños, mientras duran, se tengan por verdaderas experiencias de cosas reales. Puesto
que entonces constituyen las representaciones más intensas en el alma, son en este estado
precisamente lo que las sensaciones en la vigilia. Ahora bien, suponiendo que, cualquiera
que fuera la causa, ciertas quimeras hubieran afectado de alguna forma uno u otro órgano
del cerebro, de modo que la impresión sobre el mismo hubiera llegado a ser tan profunda y
a la vez tan correcta como solo puede producir una impresión sensible, entonces este
espejismo, incluso en la vigilia y con buena y sana razón, habría de ser tenido por una
experiencia real.
Puesto que sería en vano oponer a una sensación, o aquella representación que la iguala
en fuerza, un fundamento racional, ya que los sentidos proporcionan una convicción mucho
mayor de las cosas reales que una conclusión racional. Al menos quién se ve cautivado por
esta quimera no puede ser llevado nunca por medio de un razonamiento sutil a dudar de la
realidad de su pretendida sensación. Esta cualidad del trastornado (obstinarse en haber
visto con la mayor atención quién sabe qué formas fantasmales y caras grotescas; y tener la
suficiente sutileza para poner en relación su experiencia imaginaria con algún sutil juicio
racional), según la cual, sin prestar un grado especialmente notable de una grave
enfermedad, está acostumbrado en estado de vigilia a representarse como claramente
percibidas determinadas cosas de las cuales, sin embargo, no hay nada presente se
denomina alucinación. El alucinado es un hombre que sueña despierto. Si la ilusión habitual
de sus sentidos es solo en parte una quimera, siendo en su mayor parte una sensación real,
quién está expuesto al más alto grado a está inversión es un fantaseador.
Nunca es tan común la constitución fantaseadora del ánimo como en la hipocondría. Las
quimeras generadas por esta enfermedad no engañan propiamente a los sentidos externos,
sino que generan solo al hipocondríaco una ilusión partiendo una sensación de su propio
estado, o bien del cuerpo o bien del alma, ilusión que es en su mayor parte un completo
disparate. El hipocondríaco tiene un mal que probablemente recorre de forma variable el
tejido nervioso de todas las partes del cuerpo. Sobre todo, extiende un vapor melancólico en
torno al asiento del alma, de modo que el paciente siente en sí mismo la ilusión de casi
todas las enfermedades de las que oye hablar. Tiene su estado un gran parecido con el del
alucinado, solo que no hay peligro. El mal está enraizado profundamente y se suprime en la
medida en que afecta al ánimo, bien por sí mismo o bien por medio de algún medicamento.
Hay un tipo de fantasmagoría que se atribuye a alguien únicamente porque el grado de
sentimiento mediante el cual es conmovido por ciertos objetos se juzga excesivo en
comparación con la moderación propia de una cabeza sana. Sobre esta base es
melancólico, es un fantaseador con respecto al mal de la vida. El amor tiene muchísimos
encantos fantásticos.
Sin el entusiasmo jamás se ha conseguido nada grande en el mundo. Muy distinto es el
caso del fanático, el exaltado; este es propiamente un alucinado que pretende tener una
inspiración inmediata y con gran familiaridad con los poderes del cielo. La exaltación
conduce al entusiasta a lo más extremo.
Cuando se le escucha, se podría pensar que todos en la ciudad se ocupan de él. En una
palabra, no ve sino una conjura general contra él. El melancólico que, respecto a sus tristes
y enfermizas sospechas, es un delirante, es un apesadumbrado. Sin embargo, hay también
todo tipo de delirio divertido, y la pasión amorosa se regocija o atormenta con algunas
interpretaciones extravagantes que se asemejan al delirio. Un orgulloso es en cierta medida
un delirante que, de la conducta de los otros, que le miran atónitos con gesto burlón,
concluye que le admiran. El segundo grado de la cabeza trastornada con respecto a la
facultad superior del conocimiento propiamente de la desorganización de la razón, en
cuanto que ésta se extravía de un modo disparatado en supuestos juicios sutiles sobre
conceptos generales y puede ser denominado manía. El más alto grado de este trastorno
revolotea por el cerebro ardiente todo tipo de ideas pretenciosas y sofisticadas. Si en ello el
desgraciado también prescinde de los juicios de la esperanza se denomina demente. El
estado de la cabeza trastornada que la hace insensible a las sensaciones externas es el
desvarío; este en cuanto dominan en él la cólera se le denomina frenesí. La desesperación
es un (estado) disparatado transitorio, un hombre sin esperanza. La impetuosa demencia de
un trastornado se denomina en general delirio furioso. El que se ve afectado en cuanto que
desvaría es un furioso.
El ser humano en estado de naturaleza puede estar sometido sólo a pocas insensateces y
difícilmente a alguna locura. Sus necesidades le mantienen en todo momento próximo a la
experiencia y le dan a su sano entendimiento un quehacer tan ligero que él apenas se da
cuenta de que necesita entendimiento para sus actividades. ¿Dónde habría de encontrar
materia para la locura cuando, despreocupado del juicio de los otros, no puede ser
vanidoso, ni infatuado? En cuanto que no tiene ninguna noción del valor de bienes que no
ha disfrutado, se ve asegurado contra el absurdo de la avara codicia, y como en su cabeza
nunca penetra el ingenio, está igualmente bien defendido de toda demencia. Del mismo
modo, en ese estado de simpleza sólo raras veces puede tener lugar el trastorno del ánimo.
El entendimiento, en tanto que suficiente para las necesidades y para las satisfacciones
simples de la vida, es un entendimiento sano; pero en tanto que es requerido para la
opulencia artificial, tanto en el placer como en las ciencias, es un entendimiento refinado.
Así el entendimiento sano el ciudadano ya sería un entendimiento muy refinado para el
hombre natural, y las nociones que, en determinados estamentos sociales presuponen un
entendimiento refinado, no son adecuadas a aquellos otros que, al menos por sus ideas,
están más próximos a la simplicidad de la naturaleza, y por lo común convierten en locos a
los que se pasan a éstos [estamentos sociales menos refinados]. El abad Terrasson
distingue en algún lugar, respecto a los que tienen trastornado el ánimo, aquellos que
concluyen correctamente a partir de ideas falsas, de los que, a partir de representaciones
correctas concluyen de una manera equivocada. Esta división coincide bien con los
principios expuestos aquí. En los de la primera especie, los fantaseadores o alucinados, no
es afectado propiamente el entendimiento, sino sólo la facultad que despierta en el alma los
conceptos de los que después hace uso la facultad de juzgar, con el fin de compararlos. A
estos enfermos muy bien puede oponerseles juicios racionales, si no para eliminar su mal,
al menos para atenuarlo. En los de la segunda especie, los delirantes o maníacos, sin
embargo, es el entendimiento mismo el afectado, y así no solo resulta descabellado razonar
con ellos, sino que también altamente perjudicial, ya que con ello no se le proporciona a sus
cabezas trastocadas sino nuevo material para maquinar disparates. La contradicción no los
mejora, sino que los acalora, y es absolutamente necesario en el trato con ellos adoptar una
actitud serena y benévola, exactamente como si uno no se diera cuenta de que a su
entendimiento le falta algo.
No pude convencerme de ninguna manera que el trastorno del ánimo, como se cree
comúnmente, surge del orgullo, del amor, de meditaciones demasiado intensas, y de quién
sabe qué abuso de las facultades del alma. Este juicio, que hace del enfermo, sobre las
bases de su desgracia, un objeto de sarcásticos reproches, es muy despiadado, y se origina
en un error común según el cual se suelen confundir la causa y el efecto. Si se atiende
mínimamente los ejemplos, se da uno cuenta de que en primer lugar padece el cuerpo, y
que al principio, como la semilla de la enfermedad se desarrolla inadvertida, se percibe una
inversión ambigua que no hace aún suponer un trastorno del ánimo y que se manifiesta en
extravagantes disparates amorosos o en un carácter infatuado, o en inútiles cavilaciones
profundas. Con el tiempo la enfermedad irrumpe y da motivos para situar su fundamento en
el estado del ánimo inmediatamente anterior. Sin embargo, debería decir más bien que un
hombre se ha vuelto orgulloso porque ya estaba trastornado en alguna medida, que decir
que se ha trastornado por lo orgulloso que era. Estos tristes males cuando por lo menos no
son hereditarios, aún permiten la esperanza de una feliz recuperación, y aquel cuya
asistencia es preciso buscar ante todo es el médico.
Descartes: Indica que para saber de las pasiones hay que saber cómo funciona el
cuerpo(en su interior-->Fisiología Mecanicista) y el alma. El cuerpo es la sede del
movimiento y el calor.
Da dos definiciones sobre las pasiones. La primera es que todo lo que es pasión del alma
se provoca por una acción que es ejercida por el cuerpo o la naturaleza. Lo que es acción
del cuerpo es pasión en el alma, la pasión es un concepto que tiene que ver con lo pasivo.
La segunda definición dice que las pasiones pertenecen al alma, pero se originan en el
cuerpo.
-el yo está conformado por el entendimiento pero también por las pasiones
Spinoza: lee a Descartes y toma de él su programa más psicológico: la pasión como
representación. Sostiene que hay una sola sustancia con la cual se realiza una primera
reacción ante el dualismo.
-Va a decir que las pasiones son Apetitos y que el deseo se diferencia por que es
consciente de si.
- Mientras que Descartes hablaba de cinco pasiones( amor, odio, tristeza, alegría y deseo),
Spinoza la reduce en una, el deseo.
- Según él las pasiones conducen al prejuicio, a la ignorancia y a la dependencia de los
otros, en cambio la sabiduría es la manera de salir de esa trampa. Va a derivar una ética del
deseo, donde sus apreciaciones hacen las cosas buenas o malas, según la posibilidad de
obrar.
-Según Spinoza hay un Dios impersonal, hecho de ley natural y una ética derivada al deseo,
totalmente subjetiva,apreciativa y relativa.
-El objeto es el que provoca placer
Empirismo: se orienta en lo real, en la experiencia.
Hume:
-Va a trabajar en lo fáctico, trabajando en el mapa que Descartes construye. Se piensa
analiticamente, ya está hecho el paisaje,lo real, la naturaleza.
-Concepto de tabula rasa. El humano no se puede sostener de Dios ni valerse de su
herencia.
-Va a desarrollar las pasiones dentro del tema de la impresión
-Considera primario al objeto y a la impresión.
-Hume sostiene que lo primero es la impresión, el encuentro con el objeto, el placer y el
dolor.
-Cuando la impresión se asocia a las ideas, se habla de la pasión.
-Las pasiones son secundarias.
-emoción significa mover,motivo móvil, lo que se mueve
-El yo es experiencia, el yo es psicológico
- Va a remarcar el concepto de lo social y lo consensual que supone el concepto de
asociación.
-La asociación es un producto de la gente que se reúne para hacer algo, se reúne en forma
contingente.
-A la idea de sustancia y a la idea de causa las redujo al principio de asociación contingente
y repetida.
-De la sensación se va a derivar el sentimiento
{En esta epoca esta surgiendo la categoría de individuo a nivel gnoseológico en cuestion
introspectiva, el sujeto toma conciencia plena de que piensa y analiza}
La idea de Hume es sobre cómo el ser humano conoce el mundo. Y este lo hace a través
de la experiencia, tomándola como base del conocimiento y siendo abordada a través de los
sentidos. Según el autor, la mente representa una tábula rasa en la que se van imprimiendo
las distintas impresiones a través de las experiencias abordadas. Por otro lado, Hume,
resulta importante mencionar que él entiende la pasión como una fuerte idea que a su vez
es efecto de la asociación entre las ideas y las impresiones. En este sentido, las ideas son
consideradas por el autor como la representación que quedó en la mente de esas
experiencias vividas. Y en este punto, Hume ubica que aquellas experiencias que van
quedando en la mente, constituirán la base para las experiencias posteriores,
produciéndose una asociación entre unas y otras. Es decir, que partiendo de que no hay
ninguna idea innata, se ubica como punto de partida a la percepción. En este caso el cuerpo
es sensor, es decir, un cuerpo como una superficie sensible a los objetos (buenos o malos)
que provocan una sensación en los órganos que si perduran en el tiempo son denominadas
pasiones. Por lo tanto, si las pasiones son posteriores al encuentro con el objeto, son
secundarias. La experiencia deja impresiones en el sujeto como ideas (una vez que el
objeto ya no está presente), que se van asociando entre ellas. Éstas pasan a ser base de
nuevas ideas conformando los hábitos. Es por esto que las pasiones son secundarias,
porque serían producto de la asociación, es decir, consecuencia de una reflexión
previamente hecha a partir de una impresión primaria de sensación y su asociación con
otras ideas.
MÉTODO: Inductivo-Observable.
SUJETO: Conoce a partir de la experiencia. En un origen era como una tabula rasa en la
que se va inscribiendo el conocimiento por experiencia.
MENTE: Papel en blanco en el cual se van a grabar impresiones de los objetos reales.
• Ideas (relacionadas al pensar): las imágenes débiles o copias de las primeras impresiones
en el pensamiento y razonamiento. Surgen asociadas a una impresión, provenientes de los
sentidos: son precedidas de otras percepciones más vivaces y derivan de ellas.
Solo se diferencias por su grado de fuerza y vivacidad con que se presentan a nuestro
espíritu y se abren camino en nuestro pensamiento y conciencia. También pueden ser
simples (no admiten separación ni distinción) o complejas (pueden ser divididas en partes).
Llama BUENOS a los objetos que producen sensaciones agradables por ser naturalmente
conforme a alguna pasión, y MALOS a los objetos que producen sensaciones
desagradables.
Crítica de la razón práctica: tiene que ver con lo empírico, el objeto, la experiencia, el
encuentro, los fenómenos y la ciencia terrena(( Conceptos de Hume))
-La crítica a la razón práctica es el objeto
-Kant habla de ley moral: lo que cada sujeto quiere se tiene que elevar a ley universal.
-Va a llegar a lo que es las categorías necesarias, universales
-Ley moral: es un principio racional, contradice a todas las éticas relativistas subjetivistas
sostenida a todas las éticas relativistas subjetivistas sostenidas desde Spinoza hasta los
revolucionarios franceses
¿Cuáles son los tres principios de los actos expresivos en el hombre y el animal que
delimita el autor?
Antítesis
Deprimentes: agotamiento/lentitud
"Todo acto, cualquiera que sea su naturaleza, que acompaña constantemente un estado
determinado del espíritu, se hace expresivo enseguida"
¿Cuáles son las poblaciones que utiliza Darwin para deducir la herencia de los
gestos? ¿Por qué?
La herencia de la mayor parte de nuestros actos expresivos explica cómo los ciegos de
nacimiento, según los datos que tengo del Reverendo R. H. Blair, pueden ejecutarlos lo
mismo que las personas dotadas de vista. Esta herencia explica también cómo jóvenes y
viejos, en las razas más diversas, así en el hombre como en los animales, expresan los
mismos actos del espíritu por movimientos idénticos.
Podemos deducir la herencia de tales gestos y de algunos otros, viendolos ejecutar por
niños de corta edad, por ciegos de nacimiento, y por las razas humanas más diversas.
La facultad de cambiar sus ideas por medio del lenguaje entre los miembros de una misma
tribu desempeñó un papel capital en el desarrollo de la humanidad; pero los movimientos
expresivos del rostro y del cuerpo vienen singularmente en ayuda del lenguaje. Nótase esto
muy pronto cuando se habla de cualquier asunto importante con una persona cuya
fisonomía está oculta.
Darwin piensa también que cuando el hombre empieza a organizarse en grupos
socialmente, ahí empieza a aparecer el lenguaje y empieza a aparecer la represión de los
llantos en los niños.
Darwin también señala que las emociones y el lenguaje son herramientas que los individuos
utilizan para sobrevivir. Los animales avisamos de nuestras necesidades físicas y
emocionales y deseos a través del lenguaje, la comunicación no verbal, la música y muchas
otras formas de expresión.
La inmensa mayoría de los movimientos expresivos, y los más importantes, son, como
hemos dicho, innatos o hereditarios; no puede, pues, decirse que se encuentren bajo la
dependencia de la voluntad de cada individuo. Sin embargo, todos los que se derivan de
nuestro primer principio fueron primero ejecutados voluntariamente con un fin determinado,
bien por escapar de cualquier peligro, o bien por aliviar cualquier dolor o para satisfacer
cualquier deseo. Por ejemplo, no puede ponerse en duda que los animales que se
defienden con sus dientes y tienen costumbre de doblar sus orejas hacia atrás cuando
están irritados, no heredarán este gesto de sus antecesores, que se portaban asi
voluntariamente para preservar estos órganos de los golpes de sus antagonistas; en efecto,
los animales que no luchan a dentelladas no expresan su irritación de esta manera.
Posible es, no obstante, que aun los actos absolutamente involuntarios, como la erección
del pelo, hayan podido experimentar, hasta cierto grado, la misteriosa influencia de la
voluntad.
Si se observa atentamente a los niños, aun a los muy jóvenes, se verá que se dan cuenta
muy en breve de que los gritos les alivian, y de que pronto, en consecuencia, obran
voluntariamente.
Ciertos actos primero voluntarios, se tornan pronto habituales, acaban por hacerse
hereditarios, y hasta pueden entonces producirse, a pesar de la intervención de la voluntad.
Bien que revelen a menudo el estado de espíritu, semejante resultado no era, en todo caso,
en su origen, ni deseado ni previsto.
La rabia debió ser pronto expresada por gestos amenazadores o furiosos, por la coloración
de la piel y por el brillo de las pupilas, mas no por el fruncimiento de las cejas. Por que la
costumbre de fruncir las cejas parece provenir sobre todo de que los músculos de las
mismas son los primeros que se contraen en torno de los ojos cuando el niño siente dolor,
cólera o pena y está a punto de llorar. Esta misma costumbre parece también provenir, en
parte, de que el fruncimiento de las cejas sirve para proteger los ojos en los casos en que la
visión es difícil y muy atenta. Probable es que esta acción protectora no se hiciera habitual
sino hasta que el hombre tomara una actitud completamente vertical; porque los monos no
fruncen las cejas sino cuando están expuestos a una luz deslumbradora.
¿Cuáles son las utilidades de los movimientos expresivos del rostro y de la cara?
Los movimientos expresivos del rostro y del cuerpo, cualquiera que sea, por otra parte, su
origen, son en sí de una gran utilidad. Son los primeros medios de comunicación entre la
madre y el niño;
Pronto descubrimos la simpatía de los que nos rodean. gracias a su expresión; nuestros
sufrimientos han sido con ella endulzados, nuestros placeres aumentados, y así es como se
fortifican los buenos sentimientos mutuos.
Los movimientos de la expresión de vida y energía a las palabras. Revelan a veces los
pensamientos y las intenciones de una manera más real que las frases, que pueden ser
engañosas.
Voluntad y consciencia
Movimientos que resultan de los esfuerzos por prevenir otros
Descartes ubica a las pasiones en las junturas del alma con el cuerpo y llama a la
naturaleza “res extensa” por lo cual le está dando al cuerpo un tratamiento físico, mecánico,
mecanicista y analítico.
Con Darwin, veremos que el hombre va a quedar decididamente excluido del mapa divino y
disuelto en la naturaleza.
En Hume, ubicamos una nueva brújula para orientar en lo real, que es la experiencia. La
experiencia es posible porque el mapa analítico es paisaje.
Hume influye profundamente a Condillac, por ejemplo. Este autor habla de sensación y de
representación como producto del método analítico. El lenguaje, para Condillac, también es
analítico ya que pongo palabras y nombro a las cosas. Ese detalle hace que encaje la
sensación con la palabra.
La Mettrie habla del mundo de lo natural. Antes estaba Dios en el horizonte, ahora está la
naturaleza
Le llama la atención el automatismo del cuerpo, por eso empieza a decir que en la vida hay
auto-organización. Con Lavoissier se funda la química como primera ciencia.
Linneo, sueco, quien sistematiza por primera vez las especies botánicas. Esta
sistematización la produce Linneo en 1810. Esto les da la idea de que la naturaleza tiene un
orden interno. A partir de esto es que la ciencia es algo organizado y sistemático o al menos
susceptible de serlo.
¿Por qué vemos a Linneo? Porque 50 años después vamos a ver que Darwin hace lo
mismo, pero esta vez con especies animales y además, le agrega una novedad: el tiempo.
Como verán, el espíritu analítico ahora recae en la observación de la naturaleza y emprende
la ardua tarea de conquistar intelectualmente el mundo de lo natural. Ya no estamos
inmersos en un caos, sino que la naturaleza es algo coherente y definida. Antes de Linneo,
existían los herbolarios medievales
Darwin es inglés y escribe a mediados del siglo XIX en pleno siglo del romanticismo. Lo
procesual en Darwin se va a llamar evolución; desarrollo en el tiempo. Darwin se va a
atrever a ver qué sucede en el origen de las especies, en la historia de las especies
naturales. Darwin se encuentra con unos escritos de un etnógrafo llamado Malthus quien
sostiene una hipótesis audaz y escandalosa. La hipótesis es que las poblaciones crecen
geométricamente y los alimentos crecen aritméticamente. la población crece mucho más
que los alimentos.
El estudio de Malthus pone de relevancia que hay un profundo hiato, un abismo, entre
quienes están y las posibilidades que tiene para existir. No hay para todos. Además, en este
momento está sucediendo la revolución industrial inglesa, la cual se está extendiendo por
Francia.
Darwin advierte que este hiato o quebradura determinará qué especie sobrevive y que
especie se extingue.
Hay un dinamismo, un trabajo muy fuerte entre lo natural, el ambiente y la vida. Para los
anglosajones la naturaleza es un ambiente desafiante. Darwin se da cuenta entonces que el
mapa de las especies naturales no es algo eterno e inmutable, sino hay un origen y una
historia. El mapa de las especies naturales no es una foto estática, sino que ha sido
resultado de un proceso que se da en el tiempo. Darwin descubre que el mapa de lo natural
no es inerte y el juego de quien permanece y quien desaparece, depende de cómo se da el
juego con el ambiente.
Hasta ahora hemos visto como el sujeto cartesiano interroga a la naturaleza. El sujeto se
deja impactar por lo real. Ahora parece que la naturaleza comienza a tener otro papel.
Descubrimos que hay un tema que no ha entrado en juego hasta ahora: la acción; el acto.
Para sobrevivir, hay que actuar, hay que hacer algo.
No es cualquier acción, es la acción que responde. Esta acción tiene que resolver, no es
una acción tranquila, sino que es una reacción. Es atenta, agresiva y condicionante. Por
eso, este tipo de acción es imprescindible para la lucha. Para sobrevivir; para sobrevivir en
función del ambiente, del desafío, del afuera.
Este sujeto, que así estamos definiendo, se talla de afuera hacia adentro. Se talla en la
lucha contra la adversidad.
Aparece una nueva palabra en Psicología: la acción. Entonces la palabra acción va a ser la
novedad del siglo XIX.
Lo que antes era el hombre iluminado, ahora no; es un animal y va a quedar iluminado en el
hombre los aspectos más prosaicos, más elementales; lo mas primitivo del hombre.
Hasta ahora el tema fue la inteligencia. Ahora el tema va a ser el instinto, las pulsiones, las
tendencias, los reflejos, la conducta. Hábitos, tropismos, reflejos.
Y aquí va a haber dos cosas distintas: individuo y especie. Filogénesis y ontogénesis. Por
supuesto que los temas que aparecen en este marco es el tema de la sexualidad, es decir,
cómo se las ingenia la especie para hacer que el individuo quiera perpetuarse.
Entonces, la especie es una propuesta biológica. Los genes. Fíjense que en la propuesta
natural no hay dos individuos iguales.
El árbol genealógico es procesual, es decir que funciona pero con pequeños cambios,
cambios transitivos
El tema de las diferencias individuales en tanto nos habla de la doble dimensión de los
instintos del yo y los instintos de la especie es tomado por Freud. Freud leyó los libros de
Darwin. Se puede hacer un rastreo del tema dentro de la obra de Freud: pulsiones del yo, el
individuo y la especie; pulsiones de conservación y de egoísmo.
la palabra comportamiento tiene que ver con la palabra acto. El niño era equivalente al
hombre primitivo, un pequeño idiota. Antes de Darwin no había niños. Después de Darwin,
aparece la psicología Evolutiva. Watson, por ejemplo, es de los primeros autores que se
sienta con una libreta para anotar lo que los niños hacen.
La Psicología Genética estudia cómo se dan los procesos por los que se 60 llega a esa
adquisición. Darwin estudia el origen y la historia procesual. en término de las actitudes y de
diferencias individuales conducen a los primeros test de inteligencia. Alfred Binet
(1857-1911), entre otros, se dedican a hacer tests para medir las diferencias individuales y
las actitudes de la inteligencia.
Para Darwin se evoluciona de lo más simple a lo más complejo. Todo lo que se aparte de
ese camino va a ser una desviación, regresión y degeneración. A veces, la naturaleza hace
ensayos fallidos que son verdaderos experimentos, por ejemplo, un humano ciego. esos
problemas, esos experimentos espontáneos de la naturaleza hay que coleccionarlos. Este
es el germen de lo que va a ser el método patológico. La psicología patológica esta ahí en
acto.
El texto que tienen que leer para prácticos, se llama “La expresión de las emociones en los
hombres y en los animales”. Lo primero que llama la atención del texto es que se ve en
detalle la línea de continuidad que hay entre los hombres y los animales. En esa obra
estudia el comportamiento pensado a lo largo de la historia de la especie, de los animales al
hombre. Noten que la palabra pasión desaparece y aparece la palabra emoción La palabra
emoción proviene de emovere; lo que mueve. La expresión hace referencia a la forma en
que las emociones se manifiestan, se muestran. Lo que es instinto a nivel de la especie es
emoción a nivel del individuo, por eso a Darwin le interesa una dimensión de la emoción,
que es la dimensión observable: mímica y pantomima; todo lo que es expresión textual. El
perro esconde las orejas. Todavía hoy quedan estos restos filogenéticos y por eso hay
gente que puede mover las orejas. Pero no hemos perdido el tema de mostrar los colmillos
si sentimos un poco de asco. Darwin piensa también que cuando el hombre empieza a
organizarse en grupos socialmente, ahí empieza a aparecer el lenguaje y empieza a
aparecer la represión de los llantos en los niños. Hay una represión brutal del llanto que
lleva a forzar la expresión fisonómica de tristeza o de llanto. Esas son la explicaciones que
él nos deja.
el lobo, no ladra. Está domesticado. Domesticado quiere decir domus, en latín casa. El
perro vive dosmesticus, en la casa del hombre. ¿Entonces por qué el perro ladra y el lobo
no? ¿Porque aprende a ladrar? Porque escucha gritos y hablar al hombre
Abordamos “la vida como modelo” porque va a surgir un nuevo paradigma, el de la vida. El
hecho de aplicar el análisis a la vida en biología se llama anatomía. La disección en la
anatomía es análoga a lo que hacia Descartes en lo intelectual. Ahora bien, cuando
aplicamos el método de la disección, es decir, el análisis a un organismo vivo, por ejemplo a
un conejo, lo que sucede es que el conejo queda desgarrado, desarmado, en sus partes
constitutivas. Aún cuando a las partes –producto del análisis- las volvamos a ensamblar, a
recomponer, no retornamos a una unidad. En el pasaje del análisis a la síntesis
reconstructiva hemos perdido la vida, no es posible aplicar el método analítico porque algo
se pierde, algo que no es recuperable. Para Descartes, el cuerpo es una máquina movida
por una ley. Hasta ahora, en el programa se enfatizaba lo simple y la parte. El tema de la
vida va inaugurar un interés por la totalidad y la unidad. Pareciera que la característica
fundamental de lo vivo esta ahí, en la totalidad. Este todo, esta unidad, va a tener que ver
con la palabra organismo, que es muy distinta a mecanismo.
Otra relación que lo vivo pone en juego es el tema del tiempo, porque la vida supone un
nacimiento, desarrollo, crecimiento, evolución y muerte. Todo lo que sea procesual, cambio
o evolución, desarrollo son palabras que están hablando de un descongelamiento de las
categorías analíticas, lo vivo, está enfatizando el sentido de lo procesual. Para Wundt las
sensaciones tienen estructura analítica, cuantitativa y medible.
Para el Romanticismo y para el mismo Wundt, lo que representa mejor al sujeto son los
sentidos. Recuerden que Wundt apoyalos sentimientos sobre las sensaciones. La
sensibilidad, los estados generales del sentimiento, van a estar apoyados sobre la
sensación. Pero, a diferencia de las sensaciones, estos sentimientos son cualitativos.Aún
así, Wundt empieza a deslizar que hay un gradiente subjetivo del sentimiento; algo del
sujeto que no es "laboratorizable", ni reductible a las mediciones que arrojan los aparatos.
El sentimiento va a ser un concepto que va a tener que ver con la totalidad, con la cualidad
o con la unidad.
Wundt, desde otro costado de la escena romántica del S. XIX, utiliza la introspección
experimental como método para arribar a la construcción de un hecho determinado. La vida,
al igual que en Darwin, cobra valor e interés por la totalidad y la unidad. El cuerpo de esta
escena es un cuerpo biológico, vivo, no fraccionable; es un sistema en funcionamiento.
Plantea que las formaciones psíquicas, se constituyen como procesos que varían de un
momento a otro, dado que se relacionan con la experiencia inmediata y se dividen en:
representaciones, (intensivas, de espacio y de tiempo), compuestas preponderantemente
por las sensaciones, son medibles, cuantificables y susceptibles de ser observadas en el
laboratorio, dado que producen cambios corporales; y los movimientos del alma, formados
principalmente por los sentimientos (que irán siempre acompañados de su representación o
sensación concomitante), las emociones y los procesos volitivos. Las emociones son
aquellas series de sentimientos, que siguen un curso determinado en el tiempo, tienen un
efecto psíquico sobre el sujeto y una acción más intensa. Define a los movimientos
expresivos como los efectos que tiene la emoción sobre el cuerpo, en tanto carácter
sintomático y si bien estos movimientos surgen de forma completamente involuntaria, por la
voluntad pueden variar y hacer más intensa la emoción. Como resultado de esto surge el
acto o proceso volitivo, que justamente pone fin imprevisto a la emoción.
Todo acto de voluntad se apoya en las emociones, es movido por los sentimientos a seguir,
no va en contra de ellos. Estas emociones tienen sobre el sujeto una acción y una duración
más intensa, las cuales siguen un curso representativo en el cuerpo, en las sensaciones.
Puede provocar que descienda y se vuelva más serena, o iniciarse una nueva emoción
acompañada de los cambios representativos. También puede culminar con un proceso
volitivo, que son los movimientos expresivos de las emociones, es decir, efectos que tiene la
emoción sobre el cuerpo, en tanto carácter sintomático. Estos movimientos surgen de una
manera totalmente involuntaria, pero pueden cambiar con la voluntad. Los procesos
volitivos tienen que ver con el desenlace de la emoción, cambiando el contenido
representativo y emocional.
Entonces en el desarrollo de todos los movimientos del alma, las sensaciones y las
representaciones son factores determinantes, así como los sentimientos forman parte
esencial de las representaciones de tiempo.
Entre todos los movimientos del alma tienen un puesto de precedencia las combinaciones
intensas de sentimientos (sentimientos compuestos), porque en ellos las propiedades
características son producto de un estado momentáneo, y están incluidas dentro de las
variedades psíquicas intensivas
Los sentimientos compuestos son estados intensivos de carácter unitario, en los que se
puede percibir al mismo tiempo partes sentimentales más simples.
El sentimiento total conexo con las sensaciones táctiles externas e internas se le conoce
como sentimiento general ya que se le considera como el sentimiento total en el que se
expresa el estado complejo de nuestro malestar o bienestar físico, así el olfato y el gusto
también deben asignarse a este sentimiento general.
Para Wundt, el sentimiento se presenta como un estado poco duradero, como un estado
momentáneo del alma, son considerados procesos desarrollados con lentitud. Por el
contrario, las emociones, denominadas como un conjunto de sentimientos y caracterizadas
por ser un curso representativo y sentimental, es decir, son una sucesión de sentimientos
que se desenvuelven en el tiempo. Éstos en conexión, y frente a procesos anteriores y
siguientes, actúan como un todo unido, dando lugar a una acción en el sujeto más intensa
que un sentimiento especial.
Es así que, las emociones tratan de nuevos efectos producidos por la composición especial
de ciertos contenidos sentimentales, son por tanto más intensas que los sentimientos, pero
a su vez, no hay establecido un límite preciso entre sentimiento y emoción.
Las emociones tienen un correlato psíquico (sentimiento inicial) y uno físico (descripciones
fisiológicas de la emoción).
Cada sentimiento más intensivo pasa a ser emoción, y solo es posible separarse de ésta
mediante una abstracción más o menos voluntaria, pero sucede que en algunos ligados al
curso de tiempo no es posible tal abstracción, como es el caso de los sentimientos rítmicos,
distinguidos por presentarse en menor intensidad a la complejidad del efecto producido en
el sujeto debido a las emociones, sin embargo, los sentimientos rítmicos llegan a ser
emociones, es por eso que tanto la música con en la poesía son de gran ayuda para
expresar las emociones y transmitir en quienes escuchan.
La emoción tiene el carácter de ser un todo único diferenciado del sentimiento compuesto
por dos particularidades: se presenta sucesivamente determinada en el tiempo, con efecto
más intenso y sucesivo en la conexión de los procesos psíquicos. La primera particularidad
da razón a que la emoción, frente á cada sentimiento, es un proceso de grado más elevado,
ya que siempre incluye en sí misma un conjunto de sentimientos; la segunda se encuentra
íntimamente vinculada a la primera, fundamentada por el aumento de efecto siempre lleva
consigo la suma de sentimientos.
En el curso de la emoción, el aumento de sus efectos remiten al contenido psíquico de sus
elementos componentes, así como también es acompañada por fenómenos físicos, donde
aparece un aumento sobre efectos en el corazón, vasos sanguíneos y respiración por una
sucesión de estímulos sentimentales sucesivos, asimismo los órganos externos de
movimiento participan en la influencia emotiva, entran en acción, interactuando movimientos
musculares en la boca (movimientos mímicos), luego de los brazos y todo el cuerpo
(movimientos pantomínicos). Estos son los llamados movimientos expresivos de las
emociones debido a su valor sintomático, y aparecen de forma involuntaria como efectos de
naturaleza refleja de excitaciones emotivas, o en forma de acciones impulsivas que brotan
de partes sentimentales de la emoción.
La expresión del sabor dulce refiere a las emociones de placer, la de ácido o amargo a la de
desplacer, mientras que modificaciones como la excitación y la depresión, la tensión y el
alivio, se expresan por la tensión de los músculos de la boca.
Estas tres formas expresivas representan los elementos psíquicos de la emoción y son sus
propiedades fundamentales, la primera á la intensidad, la segunda á la cualidad de los
sentimientos y la tercera al contenido representativo. Asimismo, todas pueden reunirse y ser
representadas por un solo movimiento expresivo, siendo la tercera forma, la más
importante, en razón de sus relaciones genéticas con el lenguaje.
Wund dice que van a haber tres formas de movimientos del alma:
2.LAS EMOCIONES. Son una serie de sentimientos que tiene sobre el sujeto una acción
más intensa. La emoción tiene cierta regularidad en su curso. En un primer momento
tenemos un sentimiento inicial, ese sentimiento inicial va a ser más o menos intenso, va a
depender de la cualidad y dirección de los sentimientos. Este sentimiento en principio puede
venir de un estímulo externo (Situación emotiva externa) o de un proceso psíquico
procedente de condiciones asociativas,como una situación emotiva interna. Este
sentimiento sigue un curso representativo, para Wundt representativo es que este curso es
sobre el cuerpo, acompañado de sentimientos que les corresponden a estas sensaciones.
Las representaciones y las sensaciones van a sufrir modificaciones, entonces va a haber un
cambio en los movimientos del alma, es decir en la emoción. Estos cambios pueden
generar que se inicie una nueva emoción, que se disminuya la intensidad de esta o puede
culminar en un acto como proceso volitivo.
3.PROCESOS VOLITIVOS.
ACTOS VOLITIVOS: Wundt los va a llamar movimientos expresivos en las emociones y los
va a definir como los efectos que tiene la emoción sobre el cuerpo en tanto carácter
sintomático. Van a ser síntoma de eso que sucede en el cuerpo. Estos movimientos
expresivos surgen de forma totalmente involuntaria, pero por la voluntad pueden variar.
Los movimientos expresivos son síntomas de la emoción porque por un lado son
involuntarios y por otro lado cuanto más ricos, es decir más intensos sea los contenidos
representativos y sentimentales, más intensa va a ser la emoción y la suma de la emoción y
los movimientos expresivos, van a dar lugar a los procesos volitivos.
PROCESOS VOLITIVOS: Es uno de los movimientos del alma y tiene que ver con el
desenlace de la emoción. El desarrollo de los procesos volitivos de las emociones, se halla
preparado por la emociones en que surgen movimientos exteriores pantonímicos, estos
apresuran el desenlace de las emociones. Esto ocurre únicamente en aquellas emociones
donde el curso de los sentimientos compuestos, produce por sí mismo sentimientos y
representaciones adaptados para remover el precedente excitante emocional.
Wundt dice que el proceso volitivo se distingue de la emoción, únicamente porque a ella se
le suma una acción externa, que despierta sentimientos, los cuales dan fin a la emoción
misma.
Ribot trae de nuevo a las pasiones en la escena, y dice que esto es importante por la
aproximación existente entre las pasiones y las enfermedades.
Afirma que el término pasión cayó en desuso, habla de “olvido universal” de importación
inglesa (es decir que responsabiliza a Darwin por este desuso).
“La emoción dice, obra como el agua que rompe el dique, la pasión como un torrente que
ahonda cada vez más su lecho. La emoción es como un arrebato que se prepara, la pasión
como una enfermedad que resulta de una constitución viciosa o de un veneno absorvido,
etc.”
En este sentido, la emoción es algo disruptivo, algo que rompe, que es brusco, repentino y
fuerte. En cambio, la pasión es más estable, es algo que se va gestando.
- Tienen que ver con los estados de ánimo ligeros en los cuales estamos, que muchas
veces no se expresan de manera notoria.
2) EMOCIÓN:
- Tiene como carácter empezar por un choque, por una ruptura de equilibrio.
- Tiene que ver con el organismo, con lo fisiológico; son procesos reflejos que
suceden por fuera de la voluntad (aunque a veces pueden hacer conscientes, pero
no siempre estamos anoticiados de aquello que sucede en nuestro organismo).
- Ribot dice que la emoción se define por dos caracteres principales: la intensidad y la
brevedad.
3) PASIÓN:
EMOCIÓN PASIÓN
Estado primario y en bruto De formación secundaria (adquirida) y más
compleja
● Ribot habla acerca del nacimiento de las pasiones, mencionando 2 causas: las
causas externas y las causas internas.
Causas internas
Causas externas
- Dice Ribot que son las menos importantes y las más conocidas. Tienen que ver con
las condiciones del medio exterior y circunstancias fortuitas (las vivencias)
Dentro de la imitación ubica a la costumbre y a la moda. La costumbre tiene que ver con
algo más estable, con lo cultural; mientras que, las pasiones que tienen que ver con la
moda, refieren a algo más efímero, momentáneo.
Ribot dice que la sugestión es una forma de imitación, pero que difiere de ella. En la
imitación, la iniciativa de la repetición viene del imitador; en la sugestión, la iniciativa
procede sobre todo de la causa exterior que obra sobre el sugestionado. En la sugestión
hay una fuerza más coercitiva, hay una presión más fuerte del exterior.
La sugestión es la fuente de donde nacen las pasiones colectivas (religión, política, etc).
1) Idea fija
Ribot la diferencia de la idea obsesiva, ya que a la idea obsesiva está ubicado del lado de lo
patológico.
Es decir, que Ribot está planteando que estos 4 elementos son aquellos que sostienen,
colaboran para que esa idea fija se mantenga y colaboran en el principio de unidad
propio de la pasión; colaboran en que el apasionado se ponga al servicio de esta idea
fija.
A su vez, toda pasión también involucra una labor de disociación que implica una
disgregación, una detención, o aislamiento de un estado de conciencia entre todos los
demás.
Ribot plantea que para que la pasión construya su ideal, lo modifique, y lo renueve, es
necesaria la “memoria afectiva”. La memoria afectiva implica la afectividad de los estados
de consciencia. En los recuerdos afectivos que se reavivan, no tienen en la conciencia una
existencia independiente y aislada; sino que siempre están unidos a algún estado intelectual
del que vienen acompañados anteriormente.
“Toda pasión es, por tanto, la especialización de una tendencia atractiva o repulsiva que se
concreta en una idea y, por este hecho, alcanza plena conciencia de sí misma. El individuo
se encuentra así dividido en dos partes: su pasión y lo demás”.
2) Duración
Es indeterminable: una vida entera, años, algunos meses. Pero, a diferencia de la emoción
(que es pasajera e inestable), la pasión es duradera y estable, aún la más corta, es muy
larga.
3) Intensidad
Ribot diferencia las pasiones dinámicas de las pasiones estáticas. En las dinámicas entra
en juego lo motor: hay movimiento, impulso. El gasto de energía es evidente en las
pasiones dinámicas, de aire fogoso y desenfrenado, en el deseo se afirma sin cesar en
forma de actos y no se sacia.
En cambio, las pasiones estáticas tienen que ver con la inhibición, con lo estático, con el
pensamiento, con lo intelectual.
DUMAS fue un médico psiquiatra francés de principios del siglo XX, que estudió la
calamidad que produjo la Primera Guerra Mundial. Utiliza el método patológico de
investigación. Aplica el método analítico de la observación a lo clínico.
Las emociones seguido de los choques emocionales: hay emociones que pueden
seguir presentes, tales emociones son estados complejos, compuestos psicológicamente
por tendencias, excitadas disminuidas aumentadas, etc. Acompañadas por modificaciones
orgánicas y con un estado de conciencia que puede ser según los casos penosos,
agradables o mixtos. Entonces cada emoción constituye un conjunto orgánico y psíquico
que tiene cierta individualidad fisiológica, es lo que se sintió en el cuerpo antes que
sucediera el evento.
La mayor parte de las emociones pueden representar, según individuos y momentos,
manifestaciones activas o pasivas dentro de los mismos dominios orgánicos o mentales, y
para entender su mecanismo es necesario considerarlas en este doble aspecto: La emoción
es secundaria. Primero ocurre el choque, luego la representación y luego la emoción.
Andre Lalande considera que las emociones deben ser estáticas, es decir, se debe excluir
de ello todo lo que es tendencia hacia un fin, acción o dirección de acción.
Ribot plantea que para distinguir la alegría de la tristeza llama a las emociones particulares.
Lo que se llama forma activa de una emoción es la forma bajo la cual se traduce mediante
reacciones de excitación, entre las cuales la más importante es la excitación del simpático,
cuyos signos son: aceleración cardiaca, hipertensión, etc.
Llamamos forma pasiva de la emoción, aquellas que están caracterizadas por reacciones
de depresión como la hipotonicidad.
Naturaleza de la emoción
Teoría de Lange
Para observar las emociones cada uno se contenta con recurrir a sus propios recuerdos,
por ello se debe renunciar a un conocimiento preciso de las emociones y buscar los signos
objetivos de la tristeza y de la alegría.
A partir de allí elabora un cuadro esquemático para intentar definir la emoción, pero clasifico
los fenómenos en dos grupos: fenómenos de inervación muscular y fenómenos
vasomotores.
Lange plantea que las variaciones vasculares sean la causa de las variaciones
neuromusculares, por ejemplo, la menor variación en la circulación modifica las funciones
del cerebro y de la medula.
B) Una emoción
Lange señala que debe modificarse el orden de los últimos dos términos y lo razona de la
siguiente manera:
B) Esta abatida
C) Esta triste.
A partir de allí señala que existe en la emoción un hecho inicial (una idea, una imagen, una
percepción y aun una sensación), estos estados repercuten diversamente sobre los centros
vasomotores y la emoción es siempre la conciencia de las variaciones orgánicas que la
acción de esos centros determina en las diferentes partes del cuerpo. La tristeza aparece
como la conciencia de los fenómenos vasculares que se cumplen en el cuerpo y de todas
sus consecuencias.
Se podría resumir las teorías de Lange en dos, la primera sería que la emoción psíquica no
es mas que la conciencia de las variaciones cerebrales, neuromusculares, orgánicas; la
segunda, que estas diversas variaciones están todas bajo la dependencia de la circulación.
Sin embargo, ambas teorías constituyen reducciones simplistas que no resisten a la
experimentación.
Teoría de James
Al igual que Lange, James considera que las causas de las emociones son fisiológicas.
Sostiene que los cambios corporales siguen inmediatamente a la percepción del hecho
excitante y que el sentimiento que tenemos de esos cambios, a medida que se producen, es
la emoción.
Señala que el sentido común indica que la secuencia es por ejemplo: perdemos dinero,
estamos afligidos y lloramos. Plantea que el orden de sucesión es inexacto, que un estado
mental no es traído de inmediato por otro, las manifestaciones corporales se interponen
primero entre ellos. Lo mas lógico desde su punto de vista es decir estamos afligidos porque
lloramos. Disociada de su expresión corporal, la emoción se le aparece como inconcebible.
Por ejemplo que es el miedo sin las modificaciones cardíacas. James se concentró en
teorías toscas, como la rabia, la cólera, el miedo que están acompañadas de fenómenos
orgánicos netamente marcados. Pero hay emociones delicadas como por ejemplo escuchar
una melodía. La teoría de James resulta superadora a la Lange en el sentido que presenta
las condiciones de la emoción no solo como fisiológicas, sino como periféricas. La
sensibilidad moral obedece a la misma ley que la sensibilidad física, y el cerebro es
presentado como un órgano de simple recepción, desprovisto por sí mismo de sensibilidad.
A pesar de las diferencias, es muy evidente que Lange y James han defendido la
misma tesis-
La teoría intelectualista
Para los fisiólogos los estados afectivos son primitivos, autónomos, irreductibles con
relación a la inteligencia, capaces de existir fuera de ella y sin ella, para los intelectualistas
son secundarios, dependientes, reductibles con relación a las representaciones, e
incapaces de existir fuera de ella y sin ellas.
Nahlowsky no considera al sentimiento como algo real, sino como una manera de ser,
agradable o penosa, que resulta de la coexistencia en el espíritu de ideas que concuerdan o
no entre sí.
Para Lange y James la expresión es todo, para Nahlowsky, la expresión solo puede ser lo
accesorio, lo que no quiere decir que sea desatendible, ni que no la tome en cuenta; por el
contrario, ve en ellas la oportunidad de anotar la diferencia profunda de ambos fenómenos y
la repercusión recíproca que, sin embargo, se opera en ellos.
Los partidarios de las tesis fisiológicas (Lange y James) parten de reacciones orgánicas
bien marcadas y precisas: gestos, secreciones, movimientos, modificaciones viscerales, etc.
De actitudes, para presentarnos a la emoción como la conciencia de esas reacciones. Estas
teorías proponen, que el niño está feliz porque salta, bate las manos y golpea el pie,
suprimid la expresión y suprimiréis la alegría.
Hasta acá estaría el resumen, a partir de las hojas 535 en adelante se detalla un
experimento realizado en perros a los que seccionaban para analizar si mantenían o no
sentimientos. Debido a la crueldad del experimento en sí y por creer que se detallan
aspectos muy vinculados con la medicina consideré que no valía la pena resumirlo.
Igualmente si quieren pueden leerlo.
Darwin, aborda la condición humana desde una perspectiva estrechamente relacionada con
los animales, por tanto, la consciencia, lo psíquico y la representación se ubican como
adquisiciones tardías de la especie humana, la consciencia, es una adquisición tardía.
Para este autor, primero es el acto y después lo psíquico. El proceso evolutivo tiene un
transcurso normal y esperable, todo lo que se desvíe de ello es visto como regresión,
degenerativo y se considera patológico. De aquí deriva el diseño de lo que se considera
normal y patológico. El instrumento fundamental es la observación minuciosa de la
naturaleza. Estudiando los casos excepcionales y regresiones, se pueden sacar
apreciaciones para iluminar desde lo patológico el decurso normal de la evolución. Este
estilo también se encuentra en Ribot y Freud.
Wundt apoya los sentimientos en las sensaciones. Para él y para el romanticismo, lo que
representa mejor al sujeto son los sentidos. Pero a diferencia de las sensaciones, estos
sentimientos son cualitativos. Por otro lado se comienza a teorizar que existe un gradiente
subjetivo del sentimiento, no reductible a medición ni “laboratorizable”. El sentimiento tendrá
que ver con la totalidad, la cualidad y la unidad.
Para el romanticismo del siglo XIX, la identidad subjetiva del sujeto se sostendrá en una
identidad sentimental, la conciencia será afectiva, definida por un tinte pasional, semimetal.
Aparece la palabra sentimiento y sensibilidad. Para el romanticismo, el que ama está vivo,
el que no siente, está muerto.
Wundt inaugura la tradición de ser médico y filósofo, al contrario de Ribot, que sólo es
filosofo pero aconseja a los que se dedican a la psicología a ser médicos y filósofos. La
escuela francesa se caracterizará por la convergencia de médicos filósofos, excepto Ribot,
su fundador. En este autor se encuentra el método patológico y las pasiones, en Dumas,
el choque emocional.
Ribot dirá que los estados afectivos del sujeto son lo que uno regularmente siente y tienen
una intensidad moderada, aunque el lenguaje no sirve para atraparlos. En este sentido para
la escuela francesa los sentimientos, en muchas ocasiones, no se pueden pasar a palabras.
La pasión, será para él, el predominio de una idea instalada (no usará la palabra
representación). El origen de la pasión es interno y aborda la idea de inconsciente pero un
inconsciente instintivo derivado de Darwin. Ribot dirá que el ser humano es un conjunto de
tendencias formas del ambiente y la imitación, esto forma notas distintivas a cada sujeto. En
la pasión, una de las tendencias se instala en el sujeto como un estado de desarmonía y
exageración. Ribot trabaja la psicopatología pasional.
¿Cómo se sostiene lo pasional? Doble mecanismo. La asociación, mueve todo lo que las
favorece y las confirma, y la disociación aísla el complejo afectivo y sentimental y todo lo
que no las confirma. Ribot dirá que hay abstracciones sentimentales: de la persona amada
solo se advierte lo que confirma el enamoramiento.
Dumas.
También existe el choque mediano, este es de mayor intensidad y aquí ubica las emociones
fuertes. Describe la existencia de un sistema nervioso autónomo, y otro simpático, es en
este donde se produce la gran emoción. También habla sobre el sistema nervioso talámico,
ya que era un descubrimiento de la época y le contesta a James, diciendo que no hay
relación directa entre el sistema nervioso y el cuerpo, existen otros sistemas de por medio
como el talámico. Y que en los choques se registran distintas reacciones cardiacas,
musculares y glandulares medibles.
Por último, los franceses dirán que en tanto los instintos tomados de Darwin, el hombre
tiende a un objeto. Pero en el caso del hombre ese objeto falta, las tendencias se
desarreglan y pueden tomar representaciones en lugar del objeto. Por eso estos autores
prefieren usar la palabra tendencia o deseo para describir este proceso. Podemos ver que si
bien se tiene una base fisiológica, los autores franceses no abandonan la idea de
consciencia.
Para hablar de Watson, hay que hablar un poco de James. Para James las ideas no tienen
un valor absoluto, es decir, por sí mismas, sino que valen en tanto se las pueda aplicar y
realizar. En tanto estas ideas se realizan, el sujeto se vuelve concreto.
En la unión soviética está Iván Pávlov (1849 – 1936) Pávlov toma la idea de reflejo de
Darwin. Los perros de Pávlov, los monos de Köehler; todos se encuentran estudiando
psicología animal. En esta época se produce el gran corte con la conciencia; en psicología
hay un rechazo al introspeccionismo experimental, es por eso por lo que se vuelve a la
inteligencia práctica, la inteligencia del artesano, a la inteligencia que supone resolver
problemas. Con respecto a los animales no es necesario preguntarles cómo te sentís
(introspeccionismo experimental) sino que alcanza con deducir, alcanza con observar. El
observador observa lo que el animal hace y cómo resuelve la situación.
Para Watson, cada respuesta es causada por un estímulo y a cada estímulo le corresponde
una respuesta con lo cual se verifica que la concatenación entre el estímulo y la respuesta
es absoluta. No hay causas interiores ya que solo puede haber estímulos interiores. En esta
escena no se necesita apelar a los reflejos y a los estímulos, ya que se basa en la vía
sensitiva y llega a la vía motora. Es automático, es instantáneo.
¿Cómo aborda Watson el tema de las emociones? Watson va a las nurserys (salas de
neonatología) con su libreta a anotar los movimientos realizados por los bebés en un
sentido ontogenético, inaugurando así una psicología evolutiva. Con estas observaciones va
destruyendo la noción de instinto de Darwin (y de James) ya que, lo que en realidad logra
observar son algunos reflejos “innatos”. El movimiento corporal y el movimiento que uno
hereda es el funcionamiento del cuerpo. Observa que rápidamente, ni bien surgen estos
reflejos, entran a tener relación con el medio ambiente social del bebé. Entonces está
concentrándose en la noción de aprendizaje. Hay una base refleja, pero rápidamente en
contacto con el ambiente, eso se complejiza y se transforma.
Para Watson solamente hay tres emociones básicas, referidas por supuesto al cuerpo. Una
es el miedo, cuyo estímulo es la pérdida de la base de sustentación. Otra es el amor,
ligado al tacto, las caricias. La otra emoción es causada por la obstrucción del movimiento:
la ira. Las tres emociones tienen que ver con el cuerpo.
Para Skinner, el animal (en el caso de Pávlov sería el perro) tiene un nivel de respuesta que
es precario y respondiente pero el sujeto humano no es
Skinner empieza a hablar de conductas complejas que van a tener que ver con el ambiente,
es decir, que están en función del ambiente. Otra cosa que va a hacer Skinner es romper
con la idea de respuesta y con la idea de estímulo, porque no hay un estímulo que provoque
correlativamente una única respuesta. Lo que Skinner observa es que la operante está en
función del ambiente. Para él hay variables independientes (el ambiente), las relaciones, y
las variables dependientes (las posibles respuestas), no hay una sola respuesta, sino que
puede haber varias y la emoción es una clase de respuesta posible, algo que predispone a
actuar. En todo caso puede haber operaciones emocionales, pero jamás la emoción va a
ser causa de comportamiento. Las emociones jamás serán causa, pueden predisponer,
preparar, ayudar, pero jamás provocar.
Para resumir entonces, para Watson la emoción es movimiento corporal. Para los franceses
es una relación córtico-talámica. Siempre va a ser psicológica. Es el sistema nervioso
autónomo el que hace de intermediario. En James se desprende la emoción de lo periférico
del cuerpo y en Watson la emoción se liga a un movimiento corporal.
Dilthey define al sujeto en relación a su contexto, no lo analiza como un sujeto aislado, sino
que lo hace en su contexto social brindándole importancia a la historia del sujeto.
Vivencia: aparece siendo un concepto muy interno, en tanto refiere al costado subjetivo de
la experiencia. No aparece únicamente el pensamiento y una representación, sucede todo
al mismo tiempo: el recuerdo, el dolor, la noticia, el sentir, todo es una especie de bloque, a
eso lo llama conexión; esta noción deriva de la palabra totalidad. La palabra vivencia va a
articular todo esto a la vez (representación, sensación e idea), tiene el poder de retratar lo
presente, de hilvanar la identidad del sujeto porque conecta con el recuerdo, conecta con el
fin y la intencionalidad. El concepto de vivencia se relaciona íntimamente con el de
percepción.
Temporalidad y significación: Esto se debe a que toda vivencia cobra significado en función
a la totalidad de la vida del sujeto, por eso es que conecta todo a la vez (pasado, presente).
La vivencia articula la representación, la idea, y la sensación.
2) Las ciencias del espíritu: Éstas capturan la realidad histórica y la social-humana (cultura,
arte). Con las ciencias del espíritu Dilthey propone que la psicología es la ciencia del
espíritu central. Con estas ciencias el autor intenta encontrar el verdadero ser del espíritu,
esto último no se encuentra en el pensamiento, como sostenía Descartes, sino en la vida,
ya que para Dilthey “primero se vive y luego se piensa”.
Dilthey dice que el significado es la unidad de conexión. En este sentido, la vida misma va a
estar siendo equiparada a la palabra significado. En la conciencia se van a trabajar
relaciones de sentido: la significación, la producción de valor. Para Dilthey el concepto de
vivencia va a estar relacionado a la historia, a las ciencias del espíritu, a la sociología, al
arte, a la cultura, todo lo que tenga que ver con significación. La palabra comprensión en un
primer sentido quiere decir comprender, abarcar. Dilthey sostiene que las ciencias de la
naturaleza son explicativas, explican las concatenaciones causa-efecto, pero las ciencias
del espíritu se manejan de otra manera, entre ellas la psicología, bajo el método de la
comprensión.
Es Filósofo - Fenomenológico
Plantea que la Ciencia (como ciencia dura, de la naturaleza) nos aleja de las cosas tal como
se nos presentan (con la significación que estas tienen para nosotros). El objeto de la
ciencia es impersonal.
Ponty se inclina hacia una nueva psicología que contemple las cosas que significan para
nosotros.
Ponty, contrario al dualismo cartesiano (que separa la conciencia del cuerpo) plantea que el
espíritu (conciencia) que percibe es un espíritu encarnado (en el cuerpo). El espíritu percibe,
pero necesita de un cuerpo.
Si percibimos desde el cuerpo, entonces no tenemos todos los puntos de vista, sino que
contamos con una perspectiva (perspectivismo). La percepción es el trasfondo sobre el que
se destacan todos los actos y que todos los actos presuponen. Es un camino abierto, ya
que nunca está completa ni abarca a todos los puntos de vista.
El espacio y tiempo lo percibimos subjetivamente, por más que sean objetivos (el tiempo de
la ciencia) el sujeto significa ambas dimensiones desde una posición existencial.
Para Ponty el verdadero cogito no define la existencia del sujeto por el pensamiento que
éste tiene de existir, sino que reconoce mi pensamiento como un hecho inajenable y elimina
toda especie de idealismo descubriéndome como SER del mundo.
El mundo no es lo que yo pienso, sino lo que yo vivo. Estoy abierto al mundo, pero no lo
poseo
Cuando Ponty habla de intencionalidad se refiere a una conciencia que se dirige al mundo,
aunque no lo abarca por completo ni lo posee. Las cosas en el mundo no son neutras,
porque yo voy a relacionarme con él, a vivenciarlo, con una intencionalidad. Eso es lo que
hace que el mundo (Mi mundo, el mundo fenomenológico) sea lo que es.
Una primera percepción sin un fondo es inconcebible. Toda percepción supone cierto
pasado del sujeto que percibe.
No percibimos con todo nuestro ser, sino con una parte del yo especializado. Nos sale de
manera automática. Percibimos con el espíritu encarnado en el cuerpo y anclados en un
espacio/mundo. El hecho de cada uno tenga una perspectiva (de acuerdo a como se
posiciona en este espacio/ mundo, hace que cada perspectiva sea un punto de vista
original.
El cuerpo no es un objeto, es lo que hace que haya objetos. Los objetos del mundo se
ubican en el espacio, los podamos ver o no. Pueden estar o desaparecer, en cambio el
cuerpo tiene un carácter de permanencia, siempre está ahí para mí. Es el testigo de mi
intencionalidad.
Además de la distancia física o geométrica que hay entre el sujeto y las cosas, hay una
distancia vivida que lo vinculan con las cosas que cuentan y existen para él. La experiencia
del espacio (mundo) está entrelazada con todos los demás modos de experiencia y todos
los demás datos psíquicos.
Teórico desgrabado 10 DILTHEY | PONTY
Como tema principal del teórico, se presenta; el que sucede con la construcción de la
conciencia en lo contemporáneo. En esta parte del programa aparecen 2 nuevas
construcciones que vienen a decir o a nombrar las insuficiencias de la conciencia; conducta
e inconsciente.
A diferencia de la primera parte, aquí entra en juego lo simbólico, la palabra. Las pasiones
que son secundarias necesitan de la representación y de la asociación. Pero, la emoción no
es secundaria, tiene que ver con lo real del cuerpo y del afuera.
La asociación para el conductismo es una concatenación fáctica y para el Freud pasa a ser
la asociación libre; esta es libre de procesos secundarios, de lógica, de tiempo. Freud cuida
la asociación del lado de la palabra y deja de lado la percepción. La asociación libre no tiene
que ver con la asociación mecánica del empirismo.
Lo que se trabaja en esta clase es uno de los desenlaces contemporáneos que tiene que
ver con la conciencia, la conciencia recibe un rediseño contemporáneo. Para esto, es
importante el concepto de vida del Romanticismo Alemán. El “estar vivo”, va a ser un
concepto de psicología que vamos a trabajar en tanto vivencia.
En esta parte del programa se sitúa la subjetividad, para el Romanticismo alemán, sería lo
que es propio del sujeto. Lo que Darwin llamaría lo individual. De la palabra vida rescatamos
la totalidad que va a estar equiparado con lo psíquico y la palabra vivencia refiere al interior,
lo propio del sujeto y el primer enfoque totalizante.
La vivencia aparece siendo un concepto muy interno propio a lo que refiere el cotado
subjetivo de la experiencia. Lo importante es que la palabra vida va a empezar a tomar
cuerpo cada vez más fuerte en psicología hasta convertirse en sus caracteres en sinónimo
mismo de lo psíquico.
La palabra vivencia va a ser trabajada por Dilthey, filósofo romántico entre fines del siglo
XIX y principios del XX. Dilthey habla de comprensión. Estos productos subjetivos son
totalmente afectivos; productos de la subjetividad ya que son conexiones.
Dilthey dice que el significado es la unidad de conexión. En este sentido, la vida misma va a
estar siendo equiparada a la palabra significado. En la conciencia se van a trabajar
relaciones de sentido: la significación, la producción de valor. Para Dilthey el concepto de
vivencia va a estar relacionado a la historia, a las ciencias del espíritu, a la sociología,
al arte, a la cultura, todo lo que tenga que ver con significación. La palabra
comprensión en un primer sentido quiere decir comprender, abarcar. Dilthey sostiene que
las ciencias de la naturaleza son explicativas, explican las concatenaciones causa-efecto,
pero las ciencias del espíritu se manejan de otra manera, entre ellas la psicología, bajo el
método de la comprensión.
Hay un segundo momento que tiene que ver con la expresión de la vivencia; la
hermenéutica, que es lo interpretable. Para Dilthey la expresión va a tener que ver con la
palabra, con el arte, con la manera de expresar, de poner en palabras. El concepto de
vivencia se relaciona íntimamente con el de percepción.
La palabra vida, definida por Dilthey se refiere al mundo humano. Aparece también
relacionada con la palabra interacción, lo social, del compartir. En textos de Dilthey, la
vivencia se convierte en un acto intencional. La palabra vivencia es un todo teleológico,
tiene un fin y es contrario a Darwin, desde esta lectura se le atribuye al naturalismo
explicaciones causalistas, todo lo que sea psicología vital es teleológico, tiene una
intencionalidad. Esta es la psicología que aparece en la Argentina hasta los años 50.
La vivencia también es trabajada por Husserl, por Heidegger, y lo que surge es que la
comprensión queda del lado de la vivencia, y la expresión y la significación, del de la
hermenéutica. La vivencia entonces se constituye en un dato, es experiencia inmediata,
captura intuitiva y total. Aquí existe una puja entre sí la psicología pertenece a las ciencias
de la naturaleza o del espíritu. Desde Dilthey es ciencia del espíritu. Actualmente, desde
posiciones americanas la psicología es una ciencia natural, para la Europa continental la
psicología es una ciencia del espíritu o humana. En Argentina, Risieri Frondizi, Rector de la
UBA en el 58, cuando, también hablaba de la vivencia coincidiendo con Dilthey.
Mientras el empirismo percibe los elementos y luego la asociación, La Gestalt dice que se
percibe directamente la totalidad y en un segundo momento se ve de lo que está
compuesto. La experiencia inmediata es una totalidad organizada.
Para el asociacionismo aquí hay cuatro estímulos en los dos casos, entonces ambos
dibujos serían iguales.
Estas pruebas se toman para ver cómo el sujeto desprende lo perceptivo de lo intelectual,
pero a la Gestalt no le interesa la parte intelectual de la percepción. La Gestalt va a buscar
las leyes de la percepción y estas son de orden cualitativo.
La Gestalt trabaja el concepto del campo, este proviene de la física ya que el campo es el
que decide el destino de elementos como las limaduras de hierro entre polos magnéticos. Si
transpolamos a la psicología, vemos que el campo influye, porque existen relaciones de
identificación con la escena.
Es necesario ir sacando a la palabra “vivencia” del interior y que el campo deje de ser físico
y se convierta en psíquico. Kurt Lewin habla de campo vital psicológico y dice que en el
campo hay valencias, valores, positivos, negativos, caminos, barreras. . Para la Gestalt el
aprendizaje es por insight, por reestructura de los campos. Tal como en Koehler en sus
experimentos con monos.
Maurice Merleau-Ponty, filósofo francés en los 50 dice que el mundo es vivido antes que
conocido. Ponty no utiliza la representación ni la asociación; sí en cambio, utiliza la palabra
estructura simbólica. Toma el concepto de campo de la Gestalt confiriéndole al sujeto la
responsabilidad de la significación; es él y su significación quien decide como es el mundo.
Contrario a Descartes propone que la conciencia está referida al mundo. Transforma el
concepto de campo en mundo vivido, es decir, un mundo para un sujeto.
La categoría que toma Ponty es la de significación; una no intelectual sino del mundo vivido
para un sujeto. La percepción es el tema que permite a Ponty articular conciencia y mundo
porque el cuerpo oficia de articulador y modelo. Dice que la percepción es perspectivista;
está ubicada en una situación y desde una posición. Es el cuerpo el que fija el punto de
vista y por eso es el modelo de la unidad y de percepción.
Para Ponty todas las categorías se estructuran simbólicamente desde el punto de vista de la
significación porque esta hace que el sujeto cuente con lo que está y no está. Si se ve algo,
esto se sostiene de lo que se deja de ver. Mirar es elegir y dejar de ver/elegir otra cosa. Lo
virtual es aquello que queda por fuera de la mirada pero que la posibilita al mismo tiempo.
Para Merleau, la percepción no es ver sino mirar con intencionalidad y el comportamiento es
una estructura simbólica. Lo ubica en diálogo entre el sujeto y su mundo. El diálogo supone
un encuentro o por lo tanto no es a priori ni a posteriori. En los animales hay
comportamientos biológicamente dados, en el humano Merleau reemplaza el concepto de
campo, orientándolo hacia el de situación que remite más a lo social.
Placer de ver (se dirige a la propia persona. Placer de observar su propio objeto sexual y se
desplaza al verlo en otra persona. Meta Activa. Y el interés se desplaza para que otros lo
observen) y placer de exhibirse (meta pasiva).
Pulsion: Son representacion de una necesidad humana, como comer, ser sociable, etc. Son
las que motivan a los humanos. Es distinto al instinto porq es hereditario. Las pulsiones se
basan en la experiencia y cambia entre cada individuo. Estan orientados a la consecucion
de un placer, ya que el aparato psiquico busca el placer y evitar el displacer. Las pulsiones
sexuales se satisfacen en una zona erogena. Los 4 elementos son el
objeto, el fin/meta, la fuente (somatica), el empuje (fuerza apremiante).
Pulsion de vida: energia motivacional por vivir. eproduccion,puls libidinosa o sexual, busca
la sintesis, la reproducion, union gametas..
Pulsion de muerte: el org simple, en primera instancia no habria querido cambiar si las
condiciones del mundo exterior hubieran estado estaticas. y esos “cambios evolutivos” se
dieron sin que el organismo lo hubiera querido.. esos organismos por medio de los
estimulos exteriores, primero morian. Minimo el ciclo vital. Morian en tiempo corto
“ la meta final de toda vida es la muerte”.
lo que busca la pulsion de muete, es la repeticion de ese estado anterior al que los seres
vivos renunciaron sin quererlo por estimulos exteriores y que le permitieron un poco
prolongar su vida pero no cambiar la meta. Tiene que ver con ese estado anterior. La
pulsion de muerte tiende a repetir ese estado anterior inanimado, inorganico, mortifero, que
se tuvo que renuncar por un tiempo, pero en definitiva es la meta.
tiende a conductas autodestructivas, pretende que nos muramos lo antes posible, y busca
esas conductas que nos destruyen para provocarnos la muerte.
2. Chiste.
Freud dice que las formaciones del inconciente son las distintas formas en las que lo
reprimido retorna a la conciencia y dentro de estas podemos distinguir los lapsus, olvidos,
chistes, sueños y síntomas (las primeras cuatro son cotidianas y la ultima es
patológica).
La técnica de este chiste consiste en una condensación lingüística con formación sustitutiva.
Una fuerza comprensora actúa sobre la frase que expresa el pensamiento cabal del chiste
sofocando la segunda parte de la misma. Una de las palabras se resiste a la sofocación y
logra introducirse a presión en la primera parte de la frase fusionándose con el elemento
más semejante de ella. Esta da como resultado una palabra mixta (familiarmente +
millonario= familionariamente) que subroga a la frase reprimida y es la responsable del
carácter chistoso.
OTRAS TÉCNICAS
- Doble sentido- chiste del baño: el chiste contiene una palabra susceptible de la
interpretación múltiple.
- Desplazamiento-chiste del salmón con ahumado: el chiste contiene un desvío de la
ilación de pensamiento desplazando el acento psiquico a un tema diverso.
Freud Lee a Darwin y revisa el concepto de instinto para trasmutarlo en pulsión. Trabajará
una temática romántica mediante los recursos propios del positivismo moderno. Riguroso
(observador analítico la igual que Darwin) con su propio objeto de estudio. En los fallidos,
por ejemplo, clasifica y encuentra un sentido unificador. Su formación académica en la
universidad alemana lo porta de una noción unitaria del saber y la ciencia.
Dentro de su formación médica incurre en la dirección de las enfermedades nerviosas (en
boga en esa época: neurastenias, psicastenias, neurosis actuales y la histeria. Charcot
inaugura con el tratamiento hipnótico la idea de que hay pensamientos que no son
recordados dentro de la conciencia y que pueden ser recuperados. Darwin había
apuntalado a la idea de que la conciencia es un adquisición tardía, implantando dudas
acerca de dónde están los instintos, o dónde están los actos antes de que emerja lo
psíquico. Los franceses se empezarán a referir a un inconsciente fisiológico dónde se alojan
los procesos que quedan por fuera de la conciencia. Janet sugiere la existencia de una
debilidad congénita que también posibilita la hipnosis en las histéricas.
Al regresar a Viena junto con Breuer analizan a Anna O, la primera paciente. A medida que
Anna empieza a hablar, sus síntomas somáticos empiezan a retroceder. Anna permite
encontrar la eficacia en la palabra, permite registrar que lo que se dice afecta al cuerpo. Una
palabra, una representación, tiene efectos en el cuerpo, por eso el método usado es la
talking cure. En el momento en que Anna deja de asociar y empieza a hablarle a Breuer, él
huye y Freud continuaría con la escucha. Freud da lugar a la noción de transferencia, y
asegura que la contra-transferencia erótica perturba la producción del material. A raíz del
desarrollo del método, Freud plantea que el síntoma podría ser una palabra que estaría
cifrando algo que no puede ser dicho de otra manera. La palabra, al ser pronunciada, actúa
sobre el síntoma des-cifrando un pensamiento que no se puede recordar. En Freud la
palabra representación aparecerá singificando pensamientos, deseo. Entenderá que los
seres humanos gastan mucha energía en mantener en el olvido "eso" reprimido, y que a
este mismo asunto referirán los deseos brutales y la pulsiones propias. El deseo prohibido
estructural estará representado en las relaciones parentales endogamicas. El síntoma
psicoanalitico es una frase cifrada en el cuerpo, descubriendo así la prestación del cuerpo
como servicio simbolizador. El sintoma está cifrando la escena, dice lo que no dice la
escena, dice lo que no dice el deseo. Freud encontrará la etiología de la neurosis entonces
en la sexualidad.
En "psicopatologia de la vida cotidiana" Freud trabajará los lapsus, los actos fallidos, los
actos sintomáticos.
Descubre a su vez que la escena del trauma está en la base de la neurosis pero en tanto
una fantasía, una escena de deseos. El motor entonces es el deseo, no su realización,
porque sino deja de ser un deseo.
En "Lo siniestro" Freud dirá que el deseo se realiza a un costo: la perdida de la estructura
psíquica, la muerte o la locura. Freud dará cuenta de que existe una realidad psíquica,
fantasía, que acontecida o no, el deseo es estructurante para el sujeto y tiene vigencia
como realidad psíquica.
Pasado el edipo y devenida la latencia la cultura se abre camino para disciplinar, sublimar y
educar.
La sexualidad humana será un proceso psicológico que se construye. Esta misma está
teñida por un desarrollo estructural que barre contra la simple teorizacion sobre el instinto.
Sobre la pulsion puntualiza que no hay un objeto dedicado a ella, por lo cual no existe una
manera de satisfacerla. La sexualidad humana será diferente de la genialidad y del acto
sexual.