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Si bien cada recién nacido es un individuo con características propias y únicas, siempre que un
médico o profesional de la salud se enfrenta a un nuevo paciente resulta útil clasificarlo esto es,
ubicarlo en un grupo de acuerdo con sus características más salientes, ya se trate de
antecedentes, hallazgos clínicos o ambos.
Siempre existieron intentos de diversos tipos para clasificar al recién nacido con el criterio de
identificar tempranamente grupos de distintos riesgos potencial. De este concepto se deducen
términos que son hoy de uso frecuente como alto y bajo riesgo.
Lo primero que se usó para clasificar al recién nacido fué peso del nacimiento prescindiendo de
todo otro dato. Es por todo conocido la gran división en recién nacidos con peso de 2.500 grs. o
más y aquellos con menos de esta cifra. También se sabe la gran deficiencia que existe entre estos
dos grupos en morbilidad y mortalidad, tanto en el periodo neonatal como en etapas más
alejadas. Tanto influyo este criterio de clasificación que recién nacido con menos de 2.500 grs se
hizo sinónimo de recién nacido prematuro en contraposición a los mayores que eran de pesos
normales, también se pudo observar que recién nacido prematuro que pesaba más de 2.500 grs.
habían otros que a pesar de tener un madurez compatibles con un embarazo a término tenían un
peso por debajo de este límite por lo tanto, definir con más exactitud la inmadurez de un neonato
era tan importante como saber su peso. Surgió de esta manera la necesidad de combinar el peso
de nacimiento y la edad gestacional en una misma clasificación. Ya que esto explica este hecho de
que el peso de nacimiento es un dato fácil de tomar que solo requiere una balanza y un
observador y es bastante objetivo, ya que tiene escaso margen de error.
Según lo recomendado por OMS en 1961, consideró tres grupos de recién nacido de acuerdo a
que el peso normal fuera menor de 1500 grs., entre 1500- 2500 grs. y mayor de 2.500 grs; con esto
se consiguió definir cinco grupos de niños.
A pesar de sus méritos esta clasificación adolecía de algunos defectos, ya que no precisaba bien la
relación entre peso normal y edad gestacional, como tampoco la ubicación de los pretérminos o
de los prematuros con peso alto. En ese mismo año Battaglia y Lubchenco de la Universidad de
Colorado; publicaron su clasificación de los recién nacidos según su peso y edad gestacional; para
ello confeccionaron una tabla de crecimiento intrauterino, con los pesos de nacimientos
correspondientes a cada edad gestacional desde la 24 a 42 semanas de embarazo.
Esto es complemento con la división de los neonatos según la duración del embarazo de tres
grupos:
La división entre los prematuros y de término se hizo a las 38 semanas y no a las 37 semanas
siguiendo la recomendación de 1967 de la Academia Americana de Pediatría.
Las semanas de gestación se deben calcular a partir del primer día de la última menstruación
sumando el total de días hasta el del parto y dividiendo por siete. El resultado se expresa en
semanas enteras desechando las fracciones días. Así un embarazo de 37 semanas y 4 días se
computa como 37 semanas.
Combinando ambos criterios en un gráfico queda delineada la clasificación conocida como curva
de crecimiento Lubechenco o de Denver.
Se ve claramente nueve zonas que corresponden a otros tantos grupos de neonatos a saber:
➢ bajo peso
➢ peso adecuado
➢ alto peso
➢ bajo peso
➢ peso adecuado
➢ alto peso
➢ bajo peso
➢ peso adecuado
➢ alto peso
Esta división permite ubicar rápidamente a cualquier neonato con dos parámetros y tener una
idea de los riesgos probables y las situaciones a prevenir.
Los prematuros están sujetos, sobre todo a problemas inherentes a su madurez. Estos son más
graves cuanto menor es la edad gestacional.
Los recién nacidos de termino sin antecedentes que hagan presumir patologías de cualquier
manera están expuestos a los riesgos de trabajo de parto entre 10%- 20% de las madres que llegan
a su parto sin antecedentes de riesgos tendrán un recién nacido con alguna alteración. Algunos de
estos trastornos dependerán de algunas patologías no detectada durante la gestación (exposición
a agentes teratógenos o virales). Pero la mayoría de ellos serán consecuencias de distocias
acaecidas durante el trabajo de parto.
Los recién nacidos pos términos están expuestos a un mayor incidencia de sufrimiento fetal,
hipoxia intraparto, parto operatorio, depresión al nacer y síndrome de aspiración meconial.
Los recién nacidos de bajo peso para su edad gestacional comúnmente llamados desnutridos
fetales (aun cuando no todos son desnutridos verdaderamente) se asocian a malformaciones
congénitas, infecciones intrauterinas y enfermedad hipertensiva del embarazo, tiene mayor riesgo
de padecer asfixia, policitemia e hipoglicemia.
Parece importante recalcar que esta clasificación tiene utilidad prospectiva, para prever y no para
diagnosticar, esta clasificación sirvió como modelo de otras que se hicieron necesarias para
adaptar los resultados a las condiciones de cada región.
Existen diferentes métodos para determinar la edad gestacional en los recién nacidos, entre este
se puede mencionar el Método de Capurro que también se le conoce como Dubowitz.
En los recién nacidos sin agravio encefálico, se consideran parámetros físicos y neurológicos.
A
EXAMEN
PUNTAJES
Textura de la piel 0 5 10 15 20
Forma de la oreja 0 8 16 24
FISICO
Glándula mamaria 0 5 10 15
Pliegues plantares 0 5 10 15 20
Maniobra de la 0 6 12 18
NEUROLOGICO bufanda
Sostén cefálico 0 4 8 12
TEXTURA DE LA PIEL
FORMA DE LA OREJA
GLANDULA MAMARIA
0 No palpable
5 Palpable menor de 5mm
10 Entre 5 y 10 mm
15 Mayor de 10 mm
PLIEGUES PLANTARES
0 Sin pliegues
5 Marcas mal definidas sobre la parte anterior de la planta de los pies
10 Marcas bien definidas sobre la mitad anterior y surcos en el tercio anterior
15 Surcos en la mitad anterior de la planta de los pies
20 Surcos en más de la mitad anterior de la Planta de los pies
MANIOBRA DE LA BUFANDA
Este método tiene la ventaja sobre el método original de Dubowitz de tener menor cantidad de
parámetros. Además puede ser utilizado para recién nacidos deprimidos. Estas características
hacen que pueda recomendarse de rutina en el examen neonatal.
Por bajo peso al nacer se entiende todo recién que pesa entre 500 y 2499 grs. el bajo peso al
nacer es considerado por la OMS como indicador fiel para evaluar la capacidad reproductora y las
posibilidades de desarrollo de una población.
El bajo peso al nacer tiene dos etiologías diferentes, debe clasificarse en una de ellas. Pueden ser:
➢ Desnutridos intrauterino. es un neonato a término con edad gestacional mayor de 37
semanas (259 días después de la concepción) que por diversas causas, bien sea
enfermedad materna, defecto en el intercambio a nivel de la placenta o un factor
intrínseco al producto de gestación no crece en el útero como debe hacerlo y tiene un
peso inferior a los 2.500 grs. también hay prematuros con desnutrición intrauterina.
➢ Prematuro es un recién nacido cuyo crecimiento prenatal fue norma, pero cuyo parto se
adelantara y ocurrió antes de las 37 semanas de gestación.
Cuando se habla de bajo peso al nacer, se agrupan los prematuros como desnutridos intrauterinos
bajo esta denominación. Los niños de bajo peso se han dividido en dos grupos, por razones de
pronóstico y manejo.
➢ muy bajo peso (menos de 1.500 grs.)
➢ bajo peso (entre 1.500- 2499 grs.)
Los de muy bajo peso tienen problemas de difícil adaptación con mayor morbimortalidad
neonatal. El pronóstico a largo plazo es también muy reservado, en especial cuando el peso está
por debajo de los 1.000 grs.
El peso normal al nacimiento es un diagnostico fácil de verificar por medio de una balanza. Para
hacerlo deben seguirse las siguientes normas:
➢ usar una balanza exacta y sensible, que de variaciones en gramos.
➢ pesar en forma rápida sin interferir con la capacidad de adaptación a la vida extrauterina
que tienen los recién nacidos con peso bajo o muy altos.
Para evaluar la edad gestacional en el Recién nacido, también se utiliza el método de Capurro, el
cual consiste en la detección de signos de madurez en el examen físico y neurológico.
A cada uno de ellos se le da un valor, la edad gestacional se reporta en días, al confrontar la edad
gestacional que resulte en el Capurro con las curvas de peso y crecimiento intrauterino,
clasificando si hay prematurez, desnutrición intrauterina o combinación de las dos.
Hay dos Reglas generales básicas en la atención del Recién nacido de bajo peso:
El manejo del Recién nacido de bajo peso, una vez que el nacimiento ha ocurrido en su etapa
inicial es igual en los desnutridos intrauterinos y en los prematuros. Para su manejo, se divide a
los recién nacidos con peso menor de 2.500 grs. en dos categorías:
➢ Superficie corporal
➢ Tamaño corporal
➢ Aislamiento corporal
➢ Producción de calor
➢ Eliminación de calor
➢ Hipoxia aguda
➢ Fármacos administrados
➢ Trastornos metabólicos
➢ Trastornos hemodinámicos (principalmente con peso al nacer menor a 2.000 grs.)
Se debe observar que la curva termina sea pareja y no presente variaciones; estas por lo general
significan calentamiento o enfriamiento del medio ambiente y encierran un grave riesgo para el
Recién nacido.
➢ La temperatura debe ser axilar y no rectal puesto que la mucosa rectal se erosiona con
mucha facilidad.
➢ No exponer al Recién nacido a enfriamientos innecesarios
➢ Mantener todo el equipo preparado antes de realizar el procedimiento para evitar
cambios bruscos en la temperatura e innecesarios en el recién nacido.
➢ Durante la toma de temperatura el Recién nacido debe permanecer cubierto.
➢ Si el recién nacido se encuentra en la incubadora, leerla la temperatura antes de abrirla y
registrarla.
➢ Anotar si varía la temperatura de la incubadora y tomar medidas para regularla si fuera
necesario.
➢ Envolver al recién nacido con un panal y una frazada cubriéndole la cabeza (ya que la
mayor pérdida de calor se produce por este sitio) y agregar frazadas si está en la cuna
o en los brazos de la madre.
➢ Elevar la temperatura del ambiente (lámparas acondicionadores entre otros)
➢ Colocar la incubadora si los pasos anteriores no dan resultado o la temperatura del
recién nacido es menor de 35° C.
Si la incubadora no tiene colocado el cervocontrol, que nos permitirá una lectura constante, se
controlara cada media hora hasta que se normalice.
Siempre que no se tomen las medidas necesarias se estará propiciando a producir una hipotermia
por iatrogenia (cornadas 1961, pág. 169).
Entre más sano sea un prematuro, más rápido controlara su temperatura. En la mayoría el control
ocurre con un peso entre 1.600 y 1.800 grs. se ven algunos recién nacidos en especial desnutridos
intrauterinos, que controlan temperatura en cercanía de los 1.400 grs.
Una vez que hay respiración, circulación y Apgar normal periodo durante el cual se recomienda la
observación, si es posible en la incubadora.
Mientras ocurre el control se puede mantener la temperatura del recién nacido en tres formas,
➢ Con el uso de una lámpara radiante a 50 cms. del RN, con 60 vatios de intensidad lumínica.
el RN debe estar bien vestido y con gorro mientras se aplica la fuente de calor.
La mejor temperatura ambiental es aquella en que el bajo peso tiene una temperatura axilar entre
36.5 ° C y 37.5 ° C.
Como todo equipo en contacto con neonatos, la incubadora debe desinfectarse antes y después
de su uso.
Pasada 24 horas, si el peso del neonato es mayor de 1.500 grs y esta asintomático, se observa la
tolerancia a la temperatura ambiente con el fin de ir retirando la fuente de calor, se vigila el
enfriamiento contralando la temperatura axilar, que siempre debe estar entre 36° C- 37.5 ° C el
control se efectuara cada media hora, por dos horas, luego cada cuatro horas, durante el primer
día. Si no hay hipotermia, se descontinua el uso de fuentes de calor. a veces se usa en forma
intermitente, para disminuir la cantidad de calorías que necesite el neonato para crecer (Rey,
1986, Pág. 193-194)
HIPOGLUCEMIA
Según sintomatología
➢ Todo recién nacido con menos de 40 mg/dl y que tenga sintomatología compatible con
hipoglucemia debe ser corregido con la administración de glucosa por vía endovenosa.
➢ La hipoglucemia es el trastorno metabólico más común que ocurre en lactantes AEG, GEG
Y PEG nacidos antes del término. La fisiopatología de hipoglucemia varía en cada
clasificación.
LOS LACTANTES CON PESO ADECUADO PARA LA EDAD (AEG). Nacidos antes del término y
tiempo suficiente durante la vida intrauterina para almacenar glucógeno y grasa. Por tanto, su
reserva de este último es muy baja y tienen menor capacidad para efectuar glucogénesis. Esta
situación se agrava más aun como resultado del aumento del empleo de grasa por los tejidos
(en especial cerebro y corazón) durante la tensión y la enfermedad (enfriamiento, asfixia,
sepsis y SIR).
LOS LACTANTES CON PESO GRANDE PARA LA EDAD (GEG). Nacidos antes del término, por
otra parte suelen ser lactantes de madres diabéticas (en las que la madre a presentado
diabetes gestacional) estos lactantes manifiestan incremento de la reserva de glucógeno y
grasa. Sin embargo los niveles de insulina circulante y la capacidad de reacción a ella son
mayores que en otros neonatos. Al interrumpirse las cargas elevadas de glucosa dentro del
útero al nacer, el neonato experimenta hipoglicemia rápida e intensa.
LOS LACTANTES CON PESO PEQUEÑO PARA LA EDAD (PEG). Han consumido sus reservas de
glucógeno y grasa a causa de malnutrición intrauterina y tiene una reacción enzimática
hepática embotada para efectuar la glucogénesis.
La hipoglicemia en un lactante nacido antes del término se define como la glucosa sanguínea
menor de 30 mg/dl de sangre total (menor de 35 mg en plasma o suero) durante los tres
primeros días de la vida e inferior a 40 mg/dl después de los tres primeros días. Se puede
definir también como un resultado de la prueba destrostix menor de 45 mg/dl cuando se
corrobora este con el valor de la glucemia de laboratorio.
➢ Letargo, irritabilidad
➢ Succión pobre
➢ Vómitos
➢ Palidez
➢ Hipotonía, posible pérdida del reflejo de deglución.
➢ Temblores, sacudida, actividad convulsiva.
➢ Apnea, respiraciones irregulares, insuficiencia respiratoria.
Las intervenciones se basan en la identificación de los lactantes bajo riesgo, la observación de los
síntomas y la investigación de problemas asintomáticos. Se valoran los resultados de las pruebas
de destrostix y lipstix urinaria y el volumen de orina (más de 1 a 3 ml/Kg/hr.) para identificar
(diuresis osmótica y la glucosuria).
Es importante ofrecer al lactante un ingestión calórica suficiente uno de los criterios preventivos
es la alimentación oportuna con formula o leche materna. Si se inicia la administración oportuna
de alimentos o de glucosa por vía intravenosa para satisfacer las necesidades recomendadas de
líquido y calorías. Será probable que la glucosa sanguínea se conserve por arriba del nivel
hipoglucémico (OLDS, 1993, pág. 930-933).
HIPOCALCEMIA
El calcio se trasporta durante la vida intrauterina a través de la placenta todo el tiempo que dura el
embarazo y en cantidades crecientes durante el tercer trimestre. Esto predispone al lactante que
nace a término a tener una concentración menor de calcio sérico durante el periodo neonatal.
Están en peligro a desarrollar hipocalcemia los lactantes tanto AEG como PEG antes del término.
Este riesgo se incrementa en presencia de asfixia perinatal, traumatismo, hipotonía y empleo de
bicarbonato para tratar la acidosis. La hipocalcemia es común en el neonato enfermo a causa de
retraso de la alimentación por vía oral, que da resultado absorción intestinal menor de calcio. La
hipocalcemia es también un acompañante en la administración de tratamiento endovenoso con
líquidos bajo en calcio o libres de él. Se define como hipocalcemia neonatal “temprana” la que, se
observa durante los primeros dos o tres días de vida, o como hipocalcemia “tardía” se manifiesta
6- 10 días después del nacimiento. La hipocalcemia tardía se relaciona con la administración de
fórmulas lácteas que tiene concentraciones relativamente elevadas de fosforo respecto al calcio.
Las concentraciones elevadas de fosforo deprimen la glándula paratiroides, lo que da por
resultado un descenso de las concentraciones sérica del calcio.
SINTOMAS: Son inespecíficos, y se observan simultáneamente con otros trastornos. Los signos y
síntomas que se pueden observar son:
Deben vigilarse las concentraciones séricas de calcio en los grupos de neonatos de alto riesgo. Las
concentraciones séricas normales del calcio varían entre 8.0- 10.5 mg/dl. El termino hipocalcemia
se refiere a concentraciones séricas menores de 7 mg/dl.
El gluconato de calcio debe administrarse con mucha lentitud durante un periodo de por lo menos
10 minutos. Debe vigilarse la frecuencia cardiaca y si presenta bradicardia o alguna arritmia
cardiaca, se interrumpirá de inmediato la administración.
Deberá vigilarse el sitio de veno-punción en busca de signos de infiltración, puesto que el calcio es
muy lesivo para los tejidos, si hay extravasación es este sitio habrá probabilidad de necrosis y
escafelo tisular (OLDS; 1993 Pág. 933-931).
➢ Hipoxia fetal durante la vida intrauterina unos cuantos días o unos cuantos minutos antes
del nacimiento, a juzgar por incremento súbito de la actividad fetal, seguida por
disminución de la actividad, frecuencia cardiaca fetal más lenta o latido cardiaco irregular
y coloración meconial del líquido amniótico.
➢ Presencia de sufrimiento al nacer, como palidez, cianosis, apnea, frecuencia cardiaca lenta
y puntuaciones Apgar bajas (menor de 6) al minuto y a los cinco minutos.
La evolución clínica del neonato se caracteriza por gases sanguíneos que indican grados variables
de acidosis respiratoria y metabólica combinadas, hipoxia y problemas respiratorios (que suelen
ceder en 48 horas y aunque pueden persistir durante 6- 7 días).
La presencia de meconio en los pulmones produce una acción de tipo válvula esférica (permite
que el aire entre, pero no que exhale), de modo que ocurre sobre distensión alveolar; es común la
ruptura con neumomediastino o neumotórax. El meconio inicia también una neumonitis química
en el pulmón con atrapamiento de oxígeno y dióxido de carbono e hiperhinchamiento pulmonar
(OLDS, 1993, Pág. 907).
El síndrome de insuficiencia respiratoria (SIR) conocido también como Membrana Hialina (MH) es
una enfermedad compleja que afecta primordialmente a lactantes nacidos antes del término y que
es causa de muerte neonatal.
No han podido identificarse factores que precipiten los cambios fisiológicos del SIR pero son dos
los factores principales relacionados con el desarrollo de este síndrome.
Prematurez. Todos los lactantes nacidos antes del término ya sean AEG, PEG o GEG se encuentran
en peligro del SIR. Se relacionan con SIR los factores maternos y fetales que se dan como resultado
del trabajo de parto y parto antes del término. Las complicaciones del embarazo, la cesárea (las
indicaciones de esta más que el tipo de nacimiento) y ciertas tendencias familiares.
FISIOLOGIA SIR
Al nacer, el neonato sintetiza agente tensioactivo en mayor cantidad para ajustarse a la existencia
en que respira aire. El desarrollo del SIR en el lactante nacido antes del término índice de
incapacidad para sintetizar lecitina al ritmo requerido para conservar la estabilidad alveolar. La
inestabilidad alveolar durante la inspiración, con atelectasia creciente, produce hipoxia y acidosis
lo que inhibe el sistema de producción del agente tensioactivo y por tanto produce
vasoconstricción pulmonar, de esta forma el defecto fisiopatológico central inestabilidad
pulmonar causada por esta anomalía en el sistema tensioactivo precipita las alteraciones
bioquímicas (disminución de la PO2) hipercapnia (aumento PO2) y academia (disminución del PH),
lo que incrementa aún más la vasoconstricción y el riesgo deficiente de los pulmones.
La hipoxia produce alteraciones que la agravan en un círculo vicioso y que reducen el riego
sanguíneo pulmonar (OLDS, pág. 899-901).
SEPSIS NEONATAL
Los neonatos hasta un mes de edad son particularmente propensos a una infección, conocida
como sepsis neonatal, causada por microorganismo que no produce enfermedad importante en
niños mayores. La frecuencia de infección grave es de 0.5%- 2% neonatos vivos.
Es desde luego la enfermera encargada de los cuidados diarios del neonato la que descubre más a
menudo los síntomas y no el médico, que establece contacto esporádico con el lactante. El estado
de este puede deteriorarse con rapidez durante las primeras 12 a 24 horas después del nacimiento
si sufre una infección por estreptococo B hemolítico, con signos y síntomas más sutiles. Los
síntomas que se observan con mayor frecuencia son:
Todo recién nacido de bajo peso que ingrese al servicio de neonatos recibirá una adecuada
atención del personal auxiliar de enfermería, previniendo y manejando correctamente patologías
inherentes con el fin de disminuir morbimortalidad neonatal y días de estancia hospitalaria previa
intervención educativa.