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adolescentes chilenos.
AGRADECIMIENTOS:
Este artículo es fruto del aporte de la Agencia Internacional de Investigación y Desarrollo
Resumen
El objetivo de esta investigación fue aportar evidencias de validez de constructo de una escala Comentado [EG1]: Yo pondría mejor “aportar evidencias
de validez de constructo”
para el tamizaje de Experiencias Adversas en adolescentes chilenos (EEA), derivada
población chilena (Lucio, Alarcón, Pérez-Luco, Salvo y Wenger, 2013). Se analizó una muestra
total de 2.681 adolescentes, extraídos de una base de datos de dos proyectos de investigación
muestras. A través de análisis racional se deriva una escala de 25 reactivos sobre experiencias
Análisis Factoriales Confirmatorios AFC, para llevar a cabo una validación cruzada de la escala
en dos submuestras (n2=901 y n3= 913). Se confirma una estructura unidimensional, con Comentado [EG2]: Yo añadiría: para llevar a cabo una
validación cruzada de la escala
3
adecuados índices de bondad de ajuste. Además, se estudia la fiabilidad por consistencia interna
(alfa de Cronbach = 0.90 y Coeficiente Omega = 0.91). Se concluye que la EEA, demuestra
adolescente chilena.
Adolescencia.
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Introducción
maltrato y el trauma infantil generan a largo plazo (Larkin, Felitti, y Anda, 2013; Lew y Xian,
2019). En la década de los noventa Felitti et al. (1998) conceptualizan las Experiencias Adversas
en la Infancia (ACE, por sus siglas en inglés), como relación de larga data entre experiencias de
salud pública, demostrando las consecuencias de los eventos traumáticos reiterados en la vida
la salud. De esta manera, el efecto de las ACE afecta el desarrollo evolutivo en aspectos como el
grado de lenguaje adquirido, atención y bienestar psicológico en general (Jiménez, Wade, Lin,
fisiológica del estrés (Kelly-Irving, Mabile, Grosclaude, Lang, y Delpierre, 2012; Shonkoff,
diabetes y otros problemas crónicos de salud; los cuales además se establecen como las
principales causas de muerte en EE.UU (Brown et al., 2009; Vega-Arce y Nuñez-Ulloa, 2017).
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dos tercios habría sufrido al menos una antes de los 18 años y más de un 10% presenta cinco o
vivenciar sintomatología depresiva y/o ansiosa, incluso de forma mixta con mayor presencia de
pensamientos de ideación suicida en la edad adulta; por lo que la exposición temprana al estrés
crónico puede crear una reactividad al estrés desadaptativo que perjudica la salud mental (Lee,
de riesgo para la salud, como: abuso de sustancias, inactividad física y comportamientos sexuales
isquemias cardiacas, cáncer, embolia, diabetes, entre otras (Anda et al., 2002; Hilgen, 2019).
Otros estudios asocian a las ACE vinculadas con violencia comunitaria, conflicto familiar
Es interesante resaltar que, un estudio con población penitenciaria adulta dio cuenta que
91,7% de los participantes habían experimentado ACE, siendo el abuso físico y emocional las
victimizaciones con tasas más elevadas. Además, habría una mayor prevalencia de violencia
Personalidad, y estrecha relación entre experimentar violencia física con el Trastorno por
Consumo de Sustancias. Según los tipos de delitos, existiría mayor prevalencia de transgresiones
contra las personas y la propiedad en víctimas de abuso sexual, mayor presencia de delitos contra
Cesoni, 2019).
Por otro lado, los adolescentes que presentan múltiples ACE tienen mayor probabilidad
intentos de suicidio (Baglivio, Wolff, Piquero y Epps, 2015; Lee et al., 2020), trastornos que a
menudos son comórbidos entre sí (Essau, 2003, 2008). En particular, el trastorno ansioso tiene
exposición a ACE (Baglivio, Epps, Swartz, Huq y Hardt, 2014), por lo que cobra relevancia el
Los factores de riesgos de la conducta transgresora pueden actuar como necesidades que
Una teoría utilizada para explicar cierta relación entre la exposición al trauma y la
(Frick y White, 2008; Pardini y Fite, 2010). También la presencia de características de baja
heterodestructivos y conductas delictivas son posibles secuelas del trauma (Pereira, y Martis,
2013).
situaciones, y puede servir como un intento de suprimir las reacciones de miedo intensas,
pudiendo además adormecer o desactivar las emociones para preservarlas, lo que puede llevar al
Por otro lado, un estudio de Baglivio et al. (2015) informan acerca de la alta prevalencia
de ACE en adolescentes que persisten en el delito, versus quienes presentan este comportamiento
de forma transitoria. Además, cada ACE que experimentó un niño, aumentaría en un 35% el
riesgo ser un delincuente violento y crónico en el tiempo, por cada uno de los eventos adversos
experimentados; en este sentido las ACE muestran alto impacto en el riesgo de delincuencia de
tipo persistente.
impacto potencial del trauma y las experiencias estresantes en la salud mental y física, como
del maltrato y la traumatización, (Fox, Pérez, Cass,, Baglivio y Epps, 2015) que presentan los
Debido a la alta prevalencia del fenómeno, se presenta un dilema respecto al abordaje del
educación desde la intervención temprana, llamado Head Start Trauma Smart, diseñado para
trabajar en los distintos sistemas en los que se desarrollan los niños, con el fin de disminuir el
estrés crónico del trauma, desarrollo social y cognitivo adecuado y crear un abordaje enfocado en
el trauma para los grupos familiares por medio de formación a profesionales y familias para una
Existen iniciativas incipientes en las que se incluye una mirada desde la concientización
son las intervenciones con abusadores sexuales en los que se incluye una comprensión de cómo
las experiencias adversas y el trauma han afectado el bienestar de los sujetos influyendo en sus
Medición de ACE
estas (Vega-Arce y Nuñez-Ulloa, 2017). Pese a esto, dado el incremento en el interés de esta
temática, han surgido nuevos instrumentos de forma progresiva que buscan evaluar la presencia
de ACE en base a instrumentos de autoinforme y a través del reporte de los a cuidadores. Estos
han sido construidos en gran parte para su uso en salud pública, investigación, planificación de
programas y políticas públicas, así como para espacios de trabajo clínicos y de entrega de
servicios (Bethell et al., 2017). Dentro de estos se encuentra el Original ACEs Instrument, con 7
preguntas (Felitti et al., 1998) sin estudio de propiedades psicométricas dado que inicialmente
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2019). Así como, el Expanded Original ACEs Instrument de 28 preguntas (Dube, Williamson,
Thompson, Felitti y Anda, 2004), habiendo sido evaluada su fiabilidad por medio del coeficiente
Kappa con un ponderado de 0,64 y un alfa de 0.71 (Murphy et al., 2014). El ACE-International
convergente con el Childhood Trauma Questionnaire con correlaciones que fluctúan entre 0.49-
0.72 (Kazeem, 2015). Y ACE Abuse Short-Form (ACE-ASF) de 8 ítems con adecuados índices
de ajuste en AFE y AFC, con una consistencia interna de a: 0.71 para la escala total (Meinck,
Sin embargo, surgen nuevas escalas en las que se amplían las dimensiones consideradas,
de los tópicos abordados en la mayoría de los instrumentos se encuentran: abuso físico, sexual y
violencia en contexto barrial, bullying, discriminación y muerte parental. Con respuestas de tipo
dicotómicas que aluden presencia o ausencia de vivencia, y en algunos casos con uso de escalas
(B- RFSS) la cual posee 11 preguntas (Ford et al., 2014) y el National Survey of Children’s
Topitzes, 2017).
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es uno de los que se ha informado evidencia de validez, reportando a partir de análisis factorial
confirmatorio, una estructura factorial de un único factor, con un RMSEA= 0.01 y CFI= 0.99.
Chilenos. Por lo tanto, se pregunta: ¿Cuáles son las propiedades psicométricas de validez y
adolescentes chilenos?
análisis factorial AFE y AFC de una nueva escala de tamizaje de ACES en adolescentes
chilenos.
Los objetivos específicos fueron: (a) Determinar mediante criterio racional y teórico los
ítems de la escala para medir experiencias adversas en adolescentes chilenos, EEA; (b) Explorar
(d) Describir la distribución de experiencias adversas medidas por la escala, según sexo y tipo
Método
Participantes
fueron hombres y el 39,7% mujeres, con una edad promedio de 16,39 años. Los participantes son Comentado [EG3]: ESO SOBRA, si un 60,3% son hombres y
no hay patos en la muestra, el 39,7% son mujeres (jajaj)
adolescentes escolarizados (n: 1912) y adolescentes que han sido sancionados por la ley de
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responsabilidad penal adolescente en Chile (n:768). Los adolescente provienen de 4 regiones del
centro sur de Chile, que abarca el 24 % de la población del país (Biobío; la Araucania, Los Ríos
y Los lagos ) . La muestra de adolescentes estudiantes consta de 1.912 sujetos, obtenida mediante
un muestreo proporcional y estratificado por conglomerados; que considera como estrato el nivel
particular subvencionado = medio (30,8%); y público o municipal = bajo (43,3%). Esta muestra
estudiadas, con un 3% de error muestral estimado según método de Scheaffer, Mendenhall y Ott
(1987).
de 769 sujetos, esta muestra fue obtenida por muestreo por conveniencia en los programas de
un 93% de hombres (716) y 6,8% de mujeres (53) con una edad promedio de 17,42 años. La
muestra completa se extrae de las bases de datos de dos proyectos de investigación: FONDECYT
7080207 y FONDEF D08i:1405, que permiten analizar los datos evaluados con la versión
adaptada del Cuestionario de sucesos de vida estresantes CSVE (Lucio y Durán, 2000), a
internacional (Lucio y Alarcón, 2009). La base de datos contempla la evaluación de una batería
más amplia de instrumentos de evaluación adolescente registradas del Modelo de evaluación del
Diseño
Instrumento
en México por Lucio y Durán (2000) con el fin de detectar sucesos de vida estresantes que han
afectado la vida del joven, particularmente si han ocurrido en el último año de vida. El
instrumento original posee 129 ítems que cubren una amplia gama de áreas estresantes en la
historia de vida del adolescente, cuenta con adecuada confiabilidad global Kuder-Richardson
(KR20 = 0,89). Además, de una confiabilidad de 0,76 para los reactivos positivos, y de 0.88 para
los negativos (Lucio y Durán, 2000). Por su parte: Ávila, Heredia, Lucio y Martínez (2006)
reporta estabilidad test y el retest; encontrando estabilidad temporal global de 0,75 y por áreas a
frecuencia los 83 ítems más reportados por adolescentes chilenos. Ante cada suceso descrito, el
participante responde las siguientes preguntas a) ¿Viviste este suceso? (0 = No, 1 = Sí), y b)
¿Viviste este suceso durante los últimos 12 Meses? (0 = No, 1 = Sí). La versión adaptada en
Chile es más breve (83 ítems) y se le adiciona una escala likert que pregunta ¿Qué importancia
tuvo para ti? (desde 0 = ninguna, hasta 4 = muy alta). Los resultados con adolescentes chilenos
dan cuenta de alta concentración de sucesos de vida estresantes no normativos y negativos para
adolescentes judicializados por infracciones a la ley (Lucio et al., 2013), autorizada en proyecto
Procedimiento
Región del Bío-Bío y la ciudad de cabecera de las otras tres regiones. En todas las ciudades se
regiones, pero por su “carácter clínico” asociado a la sanción, la evaluación se realizó de modo
individual por los profesionales de los programas y en el lugar de sanción, abarcando múltiples
Resguardos éticos
consentimiento para el estudio. Las aplicaciones de instrumentos son realizadas por estudiantes
de la carrera de psicología y en jornadas intensivas en que se evalúa cuatro cursos (uno por nivel)
en cada establecimiento; para ello se diseña un protocolo que se aplica en sala de clases y en
asentimiento informado y los directores de los programas autorizan el uso de datos con fines de
los que se extraen la base de datos son FONDECYT 7080207 y FONDEF D08i:1405, los que
realización.
(1998), se analizan los ítems por el equipo de investigación y se incluyen reactivos que
Tabla 1
del instrumento se estima mediante el cálculo del coeficiente alfa de Cronbach y el coeficiente
omega de McDonald.
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aleatorias sobre las que se llevaron a cabo un análisis factorial exploratorio AFE y dos análisis
validación cruzada; mediante los programas estadísticos Factor (v10.9.01) y Mplus (v8).
rotación de Promin. Sobre las dos submuestras restantes (n2 y n3) se aplicaron análisis factoriales
se tienen en cuenta y se señalan los índices de modificación con la finalidad de definir el modelo
con la mayor exactitud posible. En la tercera submuestra se aplica el modelo ya definido en n2.
El ajuste de los datos al modelo se probó a partir del índice de ajuste comparativo (CFI) y error
Resultados
Las experiencias adversas reportadas a través de los 25 ítems en la muestra total de 2.681
adolescentes, permite observar que los datos se distribuyen de manera asimétrica (p= 0,000), ver
Figura 1, con una media de 12,49 (DS=11,43), mediana de 10,00; el valor mínimo obtenido es de
0 y el máximo de 105.
Figura 1
Tabla 2
Evidencias de Validez
ACE aplicando un Análisis Factorial Exploratorio (AFE) sobre la primera submuestra (n1=867).
Los datos confirmaron la adecuación muestral para la aplicación del análisis factorial
partir de los resultados, la prueba tiene una estructura fundamentalmente unidimensional, el cual
explica el 32,21% de la varianza total (índice de bondad del ajuste global, GFI=.92; raíz
Tabla 3
Sobre las dos submuestras restantes se aplicaron dos Análisis Factoriales Confirmatorios
Tabla 4
En el primer AFC se toma en cuenta los índices de modificación para el ajuste al modelo,
que se muestra en la Figura 2, que se especifica en el segundo AFC, el que indica la covarianza
entre las variables latentes. Cabe destacar que los índices de ajuste mejoran levemente y se
Figura 2
muestra total de 2.681 adolescentes, es posible indicar que presenta adecuados niveles de
Omega de 0.910.
adolescentes infractores obtienen puntuaciones más elevadas (media 19,41 y desviación estándar
14,96) que el grupo de adolescentes estudiantes (media 9,7 y desviación estándar 8,14). Junto
Además, se puede observar que los hombres obtienen puntuaciones más elevadas (media
= 13,37 y desviación estándar = 12,45) que el grupo de mujeres (media= 11,15 y desviación
estándar =12,45) y la comparación entre estos dos grupos arroja que existen diferencias
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Tabla 5
Tabla 6
Hombres Mujeres
n= 1617 n=1064
Media 13,37 11,15
Mediana 10 10
Desviación típica 12,45 12,45
Discusión
El objetivo de este estudio fue analizar evidencias de validez de constructo mediante AFE
escalas usadas para evaluar ACE a nivel internacional (Bethell et al., 2017).
Asimismo, se encuentra evidencia que apoya una estructura unidimensional del test. Lo
consiguiente dificultad en su agrupación, lo que ha sido tratado por otros autores que proponen
un abordaje de las ACE como constructo unidimensional y de riesgo acumulativo (Bethell, et al.
establecer grupos de riesgo para ser derivados a intervenciones preventivas. Los resultados dan
cuenta de que el cuestionario de tamizaje se presenta como un instrumento válido y fiable para
medir el constructo, lo que se muestra como un relevante aporte para su uso dado que, a
vivencia de ACE, sino que además la importancia otorgada por el individuo ante dichas
experiencias. Cabe destacar que su extensión, facilita su aplicación. Otro aspecto relevante del
EEA es la inclusión de tópicos como vivencia de discriminación o muerte parental, temáticas las
al., 2017). De acuerdo a los análisis realizados, se observa la diferencia de puntuaciones totales
asociadas al sexo y grupo (escolar e infractor). Los datos revelan que la población de
adolescentes infractores de ley presenta puntuaciones más elevadas en torno a este tipo de
Respecto al modelo factorial confirmado AFC propuesto, se puede especificar que existe
covarianza entre algunas de las variables latentes que permitieron especificar el modelo, las que
quiebre familiar relacionado con las figuras parentales, es decir, el abandono del hogar de uno de
como disfunción familiar (World Health Organization, 2017), relacionado específicamente con la
separación o divorcio de los padres, pudiendo ser percibido como abandono físico y/o
Mezzacappa, 2017).
podría ampliarse por medio de estudios que evalúen las propiedades de la presente escala a
través de su validez discriminante y convergente. Por otro lado, es necesario continuar con la
presente escala, a las vivencias de las nuevas generaciones de niños, niñas y adolescentes (cómo
Es posible concluir, que la escala EEA parece un buen instrumento para evaluar el riesgo
tras experiencias ACE en población adolescente, por este motivo se propone como una
el sistema de justicia, para planificar y diseñar propuestas de intervención que aborden el trauma
adolescencia, y así generar acciones preventivas basadas en el trauma infantil (Fox et al., 2015).
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