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FILIAL QUIINDY

Trabajo Práctico
Tema: La Accesión

Integrantes:

Selva Torres de Cardozo

Juan E. Ocampos

Prof.: Angel Yubero

Prof. Asistente: María Melgarejo

Quiindy – 2022

INTRODUCCIÓN
La accesión es el modo de adquirir el dominio, según el cual el propietario
de una cosa hace suyo, no solamente lo que ella produce, sino también lo que
se le une o incorpora por obra de la naturaleza o por mano del hombre, o por
ambos medios a la vez, siguiendo lo accesorio a lo principal.
Se trata de una manera de adquirir el dominio de un bien. Es la unión de
dos (o más) bienes sin la voluntad de al menos uno de los dueños de dichos
bienes. Puede llevarse a cabo por obra de la naturaleza o de manera artificial.
Con la accesión, el dueño del bien se convierte en dueño de todo aquello
que el mismo produzca. Así como también, lo que se una o lo que se incorpore.
Un ejemplo de ello sería una porción de tierra que es transportada de un lugar
a otro por fuerza de la naturaleza. En este caso, la porción de tierra pasa a
formar parte del predio. Y el dueño del mismo pasa a serlo también de dicha
porción.

UNIDAD XXIII
XXIII – LA ACCESIÓN. CONCEPTOS Y NATURALEZA JURÍDICA DE
ACCESIÓN. LA ADQUISICIÓN DE LOS FRUTOS POR EL PROPIETARIO.
CASOS DE LA ACCESIÓN NATURAL. ACCESIÓN ARTIFICIAL.
ADJUNCIÓN. FERRUMINATIO, TEXTURA, PICTURA, SCRIPTURA.
CONFUSIO Y COMMIXTIO. LA ESPECIFICACIÓN.
LA ACCESIÓN. Conceptos y naturaleza jurídica de la accesión
La accesión (accesio = la acción de llegada, aumento, aditamento,
añadidura) es un modo de adquirir la propiedad de bienes muebles e inmuebles
en que se encuadran los supuestos en que dos cosas de distintos dueños se
unen artificial o naturalmente formando una nueva cosa inseparable. El
propietario de la cosa principal se hace dueño también de la accesoria, pero
debe indemnizar al dueño de ésta. Hay que distinguir la accesión definitiva o
propia de la provisional en que las dos cosas son separables sin daño. En este
caso el propietario de la cosa accesoria ejercita la actio ad exhibendum previa
a la reivindicatio.
La adquisición de los frutos por el propietario
La palabra fruto procede del latín fructus, nombre de resultado a partir del
participio del verbo frui (gozar de, disfrutar de, hacer uso de, consumir). Los
frutos son los rendimientos que produce de manera periódica una cosa, sin
alterar la sustancia de ella. Así, por ejemplo, los frutos naturales, como las
cosechas, la leche, la lana y las crías de los animales. Igualmente son frutos
civiles, es decir, los rendimientos pecuniarios que se producen por el
arrendamiento, alquileres, etc. Los frutos industriales suponen la actuación y el
trabajo del hombre, como la uva que se convierte en vino. Los frutos se dividen
en:
1. Frutos pendientes: que no se han separado aún de la cosa fructífera y
son por lo tanto accesorios de ésta;
2. Frutos separados (extantes): son los frutos extraviados de la cosa
fructífera, que están todavía en el patrimonio de quien los negoció;
3. Frutos percibidos (perceptis): frutos naturales separados, de la cosa
fructífera, recogidos y percibidos;
4. Frutos por percibir (percipiendi): frutos que pudieron percibirse, pero
que dejaron de ser percibidos;
5. Frutos existentes;
6. Frutos consumidos.
Casos de la accesión natural
La adquisición del derecho de propiedad se daba de tres maneras, por:
derecho natural, por derecho civil y por derecho de gentes.
Por derecho natural se adquiría la propiedad de las cosas por accesión
natural de los siguientes modos:
1. Alluvio (Aluvión), es un supuesto de accesión de inmueble a
inmueble: “Además, lo que por aluvión agregó el río a tu campo, se adquiere
para ti por derecho de gentes: más es aluvión el incremento latente. Y se
considera que se agrega por aluvión, lo que se añade tan paulatinamente, que
no puedas conocer cuanto se agrega en cada momento de tiempo”.
2. Avulsio (Avulsión), es el otro supuesto de accesión natural de
inmueble a inmueble: “Porque si la fuerza del río hubiere arrancado una porción
de tu predio y la hubiere arrastrado al del vecino, es claro que permanece tuya.
Pero si por más largo tiempo se hubiere adherido al fundo del vecino, y los
árboles que consigo hubiere arrastrado hubieren echado raíces en este fundo,
desde este momento se estima que han sido adquiridos para el fundo del
vecino.
3. Insula in flumine nata, isla formada en un río: “La isla que ha surgido
en el mar, lo que rara vez acontece, se hace del que la ocupa; pues se cree
que no era de nadie. Mas formada en un río, lo que sucede con frecuencia, si
ocupa la parte media del río, es común de los que poseen los predios cerca de
la orilla a una y otra parte del río, en proporción a la extensión que cada fundo
tenga junto a la orilla: pero si está más próxima a una de las partes, es tan solo
aquellos que poseen por aquel lado predios ribereños. Pero si divido el río en
algún punto, y reunido después más abajo, hubiere cortado en forma de isla el
campo de alguno, este campo permanece siendo del mismo de quien había
sido”.
4. Alveus derelictus, lecho abandonado por el río: “Más si abandonado
por completo su cauce natural hubiere comenzado a correr por otra parte, el
anterior cauce es en verdad de aquellos que poseen predios junto a su orilla,
en proporción, sin embargo, a la extensión que cada campo tenga junto a la
orilla; y el nuevo álveo comienza a ser del derecho de aquel de quien es
también el río, esto es, del público. Mas si después de algún tiempo hubiere
vuelto el río a su primitivo cauce, el nuevo cauce comienza a ser otra vez de
aquellos que poseen predios junto a su orilla”.
Por derecho civil se adquiría la propiedad de las cosas por los siguientes
modos:
Accesión artificial. Adjunción. Ferruminatio, textura, pictura,
scriptura. Confusio y commixtio. La Especificación
La Ferruminatio es la unión de dos cosas del mismo metal, supuesto de
accesión de mueble a mueble. Paulo cita a Cassio, que trato sobre el tema:
“Porque, dice, que si a una estatua suya se le hubiera unido un brazo con
soldadura, se pierde por su unión a una parte mayor, y lo que una vez se haya
hecho ajeno, aunque de allí haya sido arrancado, no puede volver al dueño
primero. No sucede lo mismo respecto a lo que se hubiese unido con plomo,
porque la soldadura con la misma materia produce confusión, pero no hace lo
mismo la soldadura con plomo. Y por esto en todos estos casos en que tiene
lugar ni la acción de exhibición, ni la real, es necesaria la acción por el
hecho…”.
El Textura (Tejido), forma de accesión de mueble a mueble. “Mas si
alguno entretejió en su vestido púrpura ajena, aunque la púrpura es más
preciosa, cede al vestido por la vía de accesión; y el que fue dueño de la
púrpura tiene contra el que se la sustrajo la acción de hurto y la condictión, y
sea este u otro el que hizo el vestido. Porque, extinguidas las cosas, aunque no
puedan ser vindicadas, pueden sin embargo ser reclamadas por condictión de
los ladrones y cualesquiera otros poseedores”.
La Tinctura (tintura) y la Scriptura (escritura) tintura y escritura sobre
materia ajena; supuesto de accesión de mueble a mueble. “Pero también lo
que se escribe en papel mío, o se pinta en tabla mía, al punto se hace mío,
aunque respeto a la pintura hayan opinado algunos lo contrario por razón del
valor de la pintura; pero es necesario que se ceda a la cosa aquello que sin ella
no puede existir”.
La Confusio o confusión, es una situación de copropiedad originada por
la mezcla de líquidos pertenecientes a distintas personas. Conmixtio mezcla o
conmixtión de cosas sólidas.
La Especificación o transformación de una cosa en otra distinta, modo
originario de adquisición. “Asimismo se acude a la razón natural en otros casos:
“por ejemplo – dice Gayo – si produces vino, aceite o harina con mis uvas, mis
aceitunas o mis espigas, se pregunta de quién es el vino, el aceite o la harina.
Así también, si haces un jarro con oro o plata de mi propiedad, o fabricas una
nave, un armario o una silla con mis tablas, o si haces un vestido con mi lana,
o una mezcla con mi vino y mi miel, o un emplasto o un colirio con mis
medicinas, se pregunta de quién es lo que haces con materiales de mi
propiedad. Unos creen que hay que entender a la materia y a la sustancia, esto
es, que el propietario de la materia se considera también propietario del objeto
fabricado, y ésta es, principalmente la opinión de Sabino y de Casio; pero otros
creen que la cosa es del que la hizo, y ésta es, principalmente la opinión de los
autores de la escuela contraria; por más que también al propietario de la
materia y de la substancia le conceden acción de hurto contra el que roba, y del
mismo modo la “condictio”, porque aunque las cosas extinguidas no pueden
reivindicarse, pueden sí reclamarse a los ladrones y otros poseedores
mediante tal “condictión”.
La Inaedificatio, edificación sobre suelo ajeno, forma de accesión de
mueble a inmueble. “Por otro lado – dice Gayo – lo que otro edifica en terreno
nuestro, aunque lo edifique por su cuenta, se hace nuestro por derecho natural,
porque la construcción cede al terreno”. Pero si, lo edificó sin dolo, corresponde
que se le indemnice, como dice Paulo: “Si antes de contestada la demanda el
poseedor hizo gastos en la cosa pedida, debe tenerse cuenta de ellos en virtud
de la excepción de dolo malo, si perseverara el actor en pedir su cosa sin haber
reintegrado los gastos”. Otro sería el caso en el que una persona edifique en su
terreno con material ajeno, como dice Gayo: “Cuando alguno hubiere edificado
en lugar suyo con materiales ajenos, se entiende que el mismo dueño lo es, del
edificio, porque todo lo que en él se edifica cede al suelo. Mas el que fue dueño
de los materiales no por eso dejó de ser dueño de ellos, sino que no puede
reivindicarlos mientras tanto, ni ejercitar respecto de ellos la acción de
exhibición por virtud de la ley de las Doce Tablas, en la cual se dispone que
nadie sea obligado a quitar la viga ajena puesta en su casa, sino a pagar por
ella el duplo. Más con la denominación de viga se significan todos los
materiales con que se hacen los edificios. Luego si por cualquier causa se
arruinó el edificio, podrá el dueño de los materiales reivindicarlos entonces, y
ejercitar la acción de exhibición”. En el caso de aquello que pertenecía a la
mujer fue adherida a un edificio del marido, y luego sobreviene el divorcio, no
se daba el pago del duplo del valor de la cosa como en el caso anterior, pero sí
se le concedía la acción reivindicatoria, para recuperar su cosa.
La Plantatio o Implantatio, plantación en fundo ajeno, forma de accesión
de mueble a inmueble. “…sucede lo propio con la planta que otro pone en
nuestro terreno, siempre que haya echado raíces”, y Siembra “lo mismo ocurre
también con el trigo que otro sembró en nuestro terreno”.

CONCLUSIÓN
La accesión es un modo originario de adquirir la propiedad en el que, al
mezclarse dos cosas, la propiedad de la cosa accesoria pasa al dueño de la
cosa principal.
Se considera un modo directo u originario de adquirir la propiedad porque
no requiere necesariamente de la intervención de personas para que pueda
existir accesión, sino de las condiciones de las cosas mismas, por lo que el
acto que da origen a la propiedad es previo al acto jurídico.
El propietario de la cosa adquirida por otro mediante accesión podía
disponer de que se separaran las cosas principales y accesoria, o que, si son
inseparables, les sea compensado.
La accesión es una figura jurídica que se mantiene en la mayoría de
ordenamientos jurídicos occidentales de herencia romana, y constituye un
reconocimiento lógico al nacimiento de cosas nuevas, o para dirimir los
conflictos de cosas que se han producido de otras.

BIBLIOGRAFÍA
Llamas G., Francisco D. (2016). Instituciones del Derecho Romano I. Tercera
Edición. Asunción – Paraguay. Editorial Marben Editora / Gráfica S.A.
BENMAR.

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