Historia de la Filosofía Antigua

Profesor Jesus Carrasquilla

Natalia Sánchez Quintero
Pontificia Universidad Javeriana

La fascinación por el caos

El concepto de realidad ha sido un tema recurrente en la conciencia de las personas

durante varios siglos. Siendo de gran complejidad el buscar, definir la formación, así
como el orden del universo y la posición que ocupamos en él. Un posible acercamiento a
solucionar dichas incógnitas es recurrir a la filosofía que, al ser una disciplina que se
centra en el problema de la realidad, entre los conceptos esenciales que los filósofos
consideran relacionados con esta línea de cuestionamientos se encuentran pyr, theos y
logos.

El pensamiento filosófico nace en las colonias jonia durante el siglo VI anterior a la era
cristiana, a través de pensadores que distinguieron por primera vez entre el estudio de los
mitos y de la naturaleza, a través de la búsqueda de una sustancia permanente y una ley
del devenir. Este primer pensamiento filosófico aparece dividido en diversas escuelas, en
este caso nos enfocaremos en Heráclito quien a su vez es considerado el padre de la
dialéctica.

Siguiendo las diversas teorías e ideas que se han conservado como fragmentos en varias
fuentes1, su teoría más popular sobre él está relacionada con la idea del mundo y su
realidad. Heráclito propuso que toda la realidad está compuesta por el conflicto entre los
elementos del universo, y que este conflicto es la fuerza esencial que une todo. El efesiano
también propuso que los diversos conceptos de la filosofía, como pyr, theos y logos, se
interrelacionan para dar una explicación del mundo.

El objetivo de este escrito es explorar las diversas teorías e ideas que Heráclito ha
establecido sobre el caos y el devenir entre conceptos opuestos. Además de estos, también
discutiremos los múltiples aspectos de su filosofía que están relacionados con la relación
entre los principios y los elementos.

1 Incluidos los comentarios de Sexto Empírico, San Clemente, Diógenes Laercio, Hipólito, Jámblico,
Plotino, Plutarco, Porfirio, Estobeo, Teofrasto, Sócrates, Platón y Aristóteles
Esto muestra cómo Heráclito aborda los conceptos de logos,theos y pyr a partir de su propia
percepción. Luego se mencionara el concepto de los opuestos, que es una teoría que
afirma que la realidad está formada por las fuerzas que están ligadas al conflicto y que la
dotan de movimiento. Finalmente, se realiza una revisión de diversos fenómenos que
pueden verse influidos por los elementos opuestos -Caos,Orden-.

Después de leer sus diversas citas, está claro que Heráclito se basó en gran medida en
conceptos del theos, pyr y logos. Siendo algunas de las ideas recurrentes en sus discursos.
El concepto de logos está relacionado con un principio metafísico que establece que la
evolución del universo se rige por una ley de la naturaleza. Al considerar a los elementos
como elementos universales, Heráclito nos brinda una oportunidad única para discutir
las diversas cuestiones que surgen de la base de la realidad. Esto se debe a que su filosofía
se enfoca en abordar los temas que son más relevantes para el estudio del universo.

Sus ideas se enfocan en una dirección específica cuando se trata de theos, ya que otorga
una importancia significativa al estatus ontológico del concepto. El significado de este
concepto será crucial para ayudarnos a comprender el pensamiento del autor. La
perspectiva teológica que maneja con respecto a la conexión del universo con los
elementos tiene sentido, y los conceptos de theos y los opuestos pueden usarse para
explicar los diversos fenómenos que pueden afectarlo. La palabra griega theos nos
proporciona pistas importantes sobre lo que podría ser ideas que incluyen la
transmutación de las cosas y el flujo de ideas, lo que conducirá a la unificación de su
pensamiento.

Otro concepto griego que se usa comúnmente en el estudio del universo es el pyr, que es
una representación del fuego. Puede ser considerado como un principio constitutivo de
todo, y también eterniza su esencia. El pyr a menudo se vincula con el mundo material por
medio de su relación con el fuego, que tiene una carga tanto física como simbólica.

A través del uso de la teoría de los opuestos, podremos aprender cómo estos conceptos
pueden materializarse de manera consecuente y lógica. El papel de la percepción en la
definición de la realidad se hace más evidente a medida que continúa el debate sobre si la
realidad está ligada o no al testimonio de un determinado sujeto.
Comenzamos definiendo la realidad como nuestra, que es defectuosa en la percepción
debido a que es nuestra. El problema es que se nos presenta una realidad en la que no
poseemos los medios para abstraernos. Los griegos estaban asombrados por la forma en
que las cosas se transformaban del ser al no ser. También se asombraron de cómo las
transformaciones en el universo se podían presenciar en varias formas. A su vez estaban
asombrados por cómo las cosas se transforman de un estado a otro. Creían que eran
continuas y que sucedían en un proceso de destrucción y nacimiento.

Puede parecernos extraño, pero el concepto de caos, orden, luz y oscuridad está en el
centro de nuestro mundo. El conflicto es la razón por la cual todo está unido. El concepto
de vida gira en torno al choque entre el caos y el orden, que se explica como una paradoja
cósmica. Se trata de perseguir y generar orden mientras se muerde la cola. La catástrofe o
guerra se considera un proceso que ocurre cuando los sistemas se desequilibran. Se cree
que restablecer el orden es un paso necesario para ayudar a los seres vivos a encontrar
nuevas formas de sobrevivir en un mundo perturbado.

Los conceptos de caos y orden se utilizan a menudo para referirse a los diversos elementos
del universo. También se refieren a las formas en que se pueden ubicar según la función
prevista. Esto se debe a que ambos describen el mismo fenómeno, pero presentan facetas
diferentes.Se cree que ambos conceptos tienen su origen en la creación del universo.
Dado que tienen un alcance universal, necesitan estar equilibrados para ejercer un
movimiento dinámico.2

Dado que el orden es un concepto, no puede atribuirse a un criterio o conjunto de

principios específicos. No funciona de la forma en que lo haría una determinada entidad.
En cambio, está representado por los elementos de la realidad que se colocan en una
posición para servir a las necesidades del sistema. Esto se debe a que los elementos del
sistema están diseñados para mantener su esencia y función de manera consistente con
su diseño original.

Ningún sistema o unidad puede alcanzar la perfección absoluta ya que una serie de
eventos pueden dejarlo con un margen de error que puede conducir a resultados
impredecibles. Por eso caos es el nombre que se le da a la presentación de tales escenarios.

2 Juntad lo que es completo con lo incompleto, lo que concuerda con lo discordante, lo que armoniza y lo
que disuena: de todas las cosas una y de una todas las cosas. (Arist. de mundo 5, 396 b 7)
Aquel concepto se presenta como la alteración que se produce en la colocación de
determinados componentes de la realidad. Esto puede conducir a configuraciones lógicas
y funcionales comprometidas del sistema.

El concepto de caos se considera como la contrapartida del orden, que es capaz de

equilibrar sus funciones. Se ha sugerido que el caos es un llamado a la destrucción del
orden, y esto debe evitarse a toda costa. Sin embargo, en primer lugar, no es posible
eliminar el caos del universo. Ambos conceptos están relacionados con los orígenes de la
realidad, y el caos tiene una función vital dentro de la dinámica del universo.

La presencia del caos es constante en los sistemas, y puede ser desencadenado por las
acciones de ciertos elementos o componentes. Esto puede conducir a la alteración del
funcionamiento del sistema y al surgimiento de nuevas causalidades que pueden afectar
su integridad.3 También se puede crear un sistema a raíz de la exclusión o asimilación de
un componente que actúa caóticamente. Este tipo de evento puede conducir al
surgimiento de un nuevo sistema diseñado para operar en sus propios términos. En la
naturaleza, la evolución se basa en el principio de orden, por lo que puede funcionar de
manera beneficiosa tanto para el sistema como para sus componentes. Pero, si un
elemento pasa por un proceso que está diseñado para mejorar su eficiencia, también
puede dar lugar a la aparición de nuevos escenarios que pueden afectar la supervivencia
del sistema.

El concepto de caos puede ayudar a crear nuevas configuraciones dentro de los sistemas y
elementos al permitirles llevar a cabo procesos más sofisticados. Esto se debe a que puede
aumentar la eficiencia de las unidades y el rendimiento de los sistemas. En su teoría,
Heráclito habla de los diversos procesos que intervienen en la transmutación de los
elementos. Estos procesos pueden ayudar al universo a seguir moviéndose al permitirle
ajustar su composición.

Se ha sugerido que el caos es un llamado a la destrucción que debe evitarse a toda costa.
Sin embargo, en primer lugar, no es posible eliminarlo del universo de la misma manera
que no podemos eliminar otras fuerzas, como el orden por ejemplo. Tanto el caos como el
orden están relacionados con los orígenes de la realidad, y ambos tienen una función vital

3 Para Heraclito lo opuesto o enemigo es útil, y de las cosas diferentes nace la más bella armonía. Todo se
produce según discordia (Idem. Eth. Nic. O 2, 1155)
dentro de la dinámica del universo. A nivel de la naturaleza, la evolución se basa en un
conjunto de principios que pueden ser considerados como criterio del orden, mientras
que el caos es un componente del mismo. Es un sistema complejo que puede verse
afectado por diversos factores, como la acción de pequeños elementos 4. Si un elemento
logra mejorar un proceso, puede generar nuevos escenarios que lo ayuden a adaptarse al
entorno y sobrevivir.

Este concepto muestra cómo el caos puede ayudar a los sistemas y elementos a
desarrollar nuevas estrategias y configuraciones. También puede conducir a la aparición
de procesos más sofisticados que pueden mejorar la eficiencia de las unidades. La
presencia de adversidades puede servir como un componente natural y necesario de la
evolución.

En el pensamiento de Heráclito, las transformaciones de los elementos pueden ayudar a

que los diversos componentes del universo se mueven y fluyen libremente. 5 Aunque se
cree ampliamente que el ser humano es el dueño del orden, en realidad es posible ver que
el concepto de caos y orden ya existía antes de la creación de los humanos. Se puede
observar que ambos conceptos tienen una amplia presencia en el universo.

Aunque las personas tienen el logos, esta línea de pensamiento no implica que pueda
pretender ser soberano sobre los conceptos que crean la red fundamental del universo.
Según Heráclito, la existencia del orden y el caos es una fuerza de importancia universal
que sólo puede ser considerada como un componente de la realidad. También son los
encargados de ordenar todos los elementos del cosmos.

El concepto de logos es que los elementos que están presentes en todas las cosas están
destinados a suceder de una forma u otra. El hecho de que el ser humano también esté
sujeto a estos sucesos, no les impide llevar a cabo su desarrollo vital. Al final del día,
todavía nos es posible llevar a cabo nuestras tareas diarias sin interrupción, sin embargo,
limita nuestra comprensión del universo y la realidad.

Pese a que todos tienen el impulso de adquirir y utilizar logos, no todos pueden desarrollar
las capacidades necesarias para reconocer y apreciar su significado. Es por esto que sólo

4 Lo que lucha puede acordarse consigo mismo, una armonía con movimientos de sentidos opuestos, como
la del arco y la lira (Hippol. IX 9)
5 La armonía invisible vale más que la visible (Idem.Idem)
llegan a formarse los individuos que tienen las habilidades y la visión necesarias para
apreciarlos e interpretarlos adecuadamente. Esto se debe a que su apariencia a menudo
está influenciada por eventos sutiles pero significativos que suceden en nuestras vidas.
Además de poder crear una conexión con los elementos, requiere un cierto nivel de
compromiso para mantener su relevancia.

La apariencia juega un papel importante en la forma en que las personas perciben el

mundo que les rodea. Esto se debe a que puede verse influenciado por los eventos que
suceden en nuestra vida diaria. Mediante el uso de nuestros sentidos, podemos obtener
una comprensión más profunda del mundo que nos rodea. 6 Aquel capaz de aumentar su
conocimiento al percibir el mundo que lo rodea de una manera más holística no depende
de una perspectiva ajena o de una abstracción apática, puede lograr esto a través de una
relación sinérgica con la realidad.

El concepto de naturaleza en este pasaje sirve como referencia que muestra cómo
funciona el universo. Aunque tenemos un conocimiento limitado sobre nuestro propio
planeta, esta referencia sirve como una simulación de los sistemas que existen en él.
Eventualmente, los conceptos que se propongan se refinan para proporcionar una
descripción más precisa del universo.

Creemos que nuestra primera percepción de la realidad se basa en el sentido de la

sensación, que es nuestra capacidad de percibir y sentir las cosas. Sin embargo, también
debemos entender que nuestros sentidos pueden proporcionarnos una percepción
específica, que puede guiarnos a un punto determinado en la realidad. Este concepto es
importante porque, en cuanto a la realidad, se necesita un elemento más allá de la
percepción, que sería la razón, proporcionarnos una comprensión más profunda de
nuestro entorno.

A través de los ejercicios intelectuales que podemos realizar, finalmente podemos

alcanzar una verdadera comprensión de lo que es la realidad. Esto se debe a que la suma
de ideas puede brindarnos conclusiones y conocimientos más confiables que los que
pueden brindar nuestros sentidos. Los problemas de la realidad también siguen vigentes

6 Si no se espera, no se encontrará lo Inesperado, que es difícil de encontrar e inaccesible (Clem. Strom. II

17)
y fomentan debates apasionados de ahí que al final nada está completamente dicho sobre
ella.

Bibliografía

- Aguilera Quiroz, S. (2019). Consideraciones sobre el tiempo en Heráclito de Éfeso

- Aguilera Quiroz, S. (2014). Dios, Lógos Y Fuego en Heráclito
- Álvarez Salas, Omar (2008). Alma, cosmos e intelecto en el pensamiento
presocrático: de Tales a Heráclito

- Carpio, Adolfo (1995) Principios de Filosofía