Les presento un ejemplo de una secuencia didáctica1:

Contenidos

- Exploración sonora de objetos y/o instrumentos musicales de metal

- Escucha de canciones y músicas instrumentales que presentan sonoridades
metálicas.
- “Acompañar y tocar” objetos explorados junto a canciones y músicas instrumentales.

Fundamentación

La música ocupa un lugar importante en nuestras vidas. Todas las personas tienen derecho
a desarrollar su musicalidad, y una persona musical es aquella que ha tenido experiencias
de disfrute escuchando, cantando, tocando instrumentos o bailando músicas.
En esta secuencia proponemos un recorrido por experiencias de exploración de objetos
cotidianos e instrumentos musicales, para luego escuchar canciones y músicas
instrumentales en las que se presentan sonoridades similares a las exploradas y “tocar o
acompañar” con los objetos e instrumentos explorados junto a éstas.
Los niños conocen el mundo a través de la exploración, entonces será importante
ofrecerles objetos e instrumentos musicales que produzcan variadas sonoridades y que les
permita desplegar diferentes acciones sobre los mismos. Los objetos seleccionados
deberán ser adecuados al desarrollo motriz de los niños y la posibilidad de sostenerlos.
Tendrán que reunir condiciones de seguridad e higiene, es decir que no sean peligrosos:
con puntas, bordes filosos o que fácilmente se puedan desarmar permitiendo que tomen
contacto con pequeños objetos con el peligro de llevárselos a la boca.
Será importante que el docente comparta acciones, imitando las del niño y proponiendo
otras, así como dejar para que explore solo, imitándose a sí mismo dando lugar a un
ensimismamiento fértil en posibilidades y descubrimientos.
Cuando proponemos "acompañar canciones y músicas" no esperamos en estas edades
que logren sincronización con algún aspecto del ritmo de las músicas, es decir, poder por
ejemplo “seguir el ritmo o tocar al compás de la música”, sin embargo, el “tocar” junto a la

1 Inda, M. L. (2020) adaptación de la secuencia didáctica presentada en

“Experiencias musicales entre la educación no presencial y el hogar” en la Revista
Travesías Didácticas. Dirigida pro Laura Pitluk.
música y compartir con un adulto que realiza estos acompañamientos, es una manera de
socializarlos en una práctica musical de nuestra cultura.

1) Exploramos objetos metálicos embolsados, organizados en un

manojo o dentro de un recipiente y sus sonidos

El docente ofrecerá para que exploren cascabeles. Éstos pueden presentarse en

diferentes formatos para ser manipulados según las posibilidades motrices de cada niño:
pulseras con cascabeles sujetas con velcro para las muñecas y tobillos; dentro de
bolsitas de tul bien cerradas (pueden ser cosidas); dentro de cajas o pelotas forradas con
goma espuma y tela; cascabeleras de mango pequeñas; rodillos de madera con
cascabeles dentro; dentro botellas de plástico pequeñas. El docente les dirá que ha
traído cascabeles para hacer sonidos, los invitará a probar. Se sugiere en un primer
momento que se de espacio a la libre exploración, el docente debería observar sus
respuestas, y luego imitar sus hallazgos, poner en palabras las acciones de ellos,
proponer otros modos de acción y compartir la exploración. En el caso de los más
pequeños, podría hacerles escuchar los cascabeles a un lado y otro de sus cabezas,
despertando en la curiosidad, para luego colocarles una pulsera con cascabeles y ellos
mismos intenten hacerlos sonar. Esta misma actividad sería recomendable que se
pudiese reiterar en varias oportunidades.

Objetos o instrumentos de metal que se pueden sacudir

Bolsas de tul o recipientes medianos rellenos con objetos de metal cascabeles, argollas,
etc. (muy bien cocidas y cerradas para que el niño no pueda extraer los objetos).

1
2) Acompañamos canciones con los objetos metálicos embolsados, organizados
en un manojo dentro de un recipiente

En esta oportunidad el docente les canta una canción acompañándose con cascabeles,
por ejemplo: “Grillito”, “Un cocherito”, “En coche va una niña” entre otras. La canta
algunas veces. Luego les ofrece los cascabeles y comienza a cantar nuevamente con el
acompañamiento. Observará qué hacen y les dirá que la acompañen tocando. Los niños
continúan con la exploración, y seguramente la música que ofrece el docente incentive a
tocar, pero el sentido de “acompañamiento instrumental” se lo estará dando el adulto. En
otras oportunidades se pueden cantar otras canciones.

Algunas canciones para cantar y acompañar con los objetos explorados

Tengo un grillito (de Silvia Furnó)

Un cocherito (tradicional española)

Cinco ratoncitos (Ester Scheneider)

2
3) Acompañamos músicas con los objetos metálicos embolsados, organizados en
un manojo o dentro de un recipiente

Esta actividad será similar a la anterior, pero esta vez se les ofrecerá a los niños para
escuchar una música en la que aparece claramente el sonido de cascabeles, por
ejemplo: alguno de los movimientos de “Un viaje en trineo” de Leopold Mozart.
Les dirá que ha traído una música para que escuchen que se llama “Un viaje en trineo”.
Observará las respuestas, si reaccionan de alguna manera en particular ante la aparición
de los cascabeles. Luego volverán a escuchar la música y el docente acompañará con
los cascabeles en los momentos que estos aparecen. Más tarde les dará a ellos también
los cascabeles para que se sumen a tocar junto a la música. En otras oportunidades se
puede realizar con otras músicas, por ejemplo: “Bicycle” de Queen o “El reloj sincopado”
de Leroy Anderson.

Algunas músicas para acompañar con los objetos explorados

Un viaje en trineo (Leopold Mozart)

Bacycle Race(Queen)

El reloj sincopado (Leroy Anderson)

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Las mismas actividades de la secuencia de actividades presentada se pueden
realizar con otros objetos y/o instrumentos musicales siguiendo el siguiente
recorrido: