ARISTOTELES – METAFISICA

LIBRO PRIMERO (A)

CAPITULO PRIMERO: El conocimiento de las causas y la sabiduría

Este capitulo forma parte de una constitución introductoria de la sabiduría aristotélica.

La argumentación del capitulo llega a dos tipos de consideraciones. Primero la gradación del
conocimiento ( del menor a mayor). El cual se inicia por sensaciones, las cuales son a las cuales
los seres humanos carentes de sabiduría les dan más importancia (ya que las sensaciones no
son sabiduría), la segunda es la experiencia, la cual dice que forma el arte y que, a pesar de
que las personas sean mas valoradas por poseer la teoría que la experiencia esta es importante
porque es la experiencia la que da lugar al arte. Por último, el último conocimiento es el arte y
la ciencia, el cual se divide gradualmente en tres tupos: ciencias prácticas basadas en satisfacer
las necesidades, orientadas al placer y a la calidad de vida y ciencias teoréticas o teoretéticas.
La otra consieración es en la cual Aristóteles se basa en la definición de sophía, en la cuales
hombre de experiencia es considerado más sabio que el que tiene sensaciones, y a su vez, los
que poseen arte y ciencia son más sabios que los de experiencia.

CAPITULO SEGUNDO: Características de la sabiduría

Tras la definición de sabiduría del capitulo anterior, en este, Aristóteles toma como punto de
partida las opiniones acerca del sabio, las cuales, reduciéndolas a simples definiciones, son
cinco: es aquel que es más universal (sin tener conocimiento completo de cada cosa), alcanza
las cosas más difíciles de comprender, es más exacto respecto de las causas, se escoge por sí
mismo, y le están subordinados los demás saberes y conocimientos.

Aristóteles en este capítulo, aparte de decir que la ciencia más divina sería aquello que trata
sobre la divinidad. Deja claro que el trabajo de estos sabios es buscar las causas primeras de
todo, lo cual desarrollará más adelante.

CAPITULO TERCERO: Las cuatro causas y la filosofía anterior

Aristóteles comienza este capítulo definiendo cuales son las cuatro causas teóricas: la esencia,
la materia , de donde proviene el movimiento y, la última, lo opuesto, aquello para lo cual.

A partir de aquí comienza a definir la filosofía de anteriores pensadores para así pode llegar a
una conclusión (ya que le parece que cuanto más anterior sea la idea más buena es)

Los primeros pensadores opinaban que la primera causa era material y que su entidad siempre
permanecía aunque ésta cmabiase. Com o Tales que decía que era el agua; Los preogenitores
Oceano y Tetis, que juraban por el agua; Por otra parte, Anaxímenes y Diógenes opinaban que
el aire era anterior al agua y; Hipaso el metapontino y Heráclito que lo era el fuego; Así, llegó
Empédocles que completó esto con la tierra diciendo que eran los cuatro elementos los que
componían la causa (y que estos, permanecen siempre y no se generan, a no ser por
aglomeración y escasez). Mas adelante, Anaxágoras el Clazomenio afirma que los principios
son infinitos, es decir, todos los cuerpos homeoméricos, como el agua y el fuego, se generan y
destruyen únicamente por reunión y separación, pero que en ningún otro sentido se generan o
se destruyen (no como decía Empédocles)

A partir de aquí, los filósofos se dieron cuanta que era erróneo su forma de buscar la primera
causa, ya que lo estaban atribuyendo simplemente a la materia, y no tenían en cuenta el por
qué sucedía esto y cual era su causa (pág 86-15), es decir tenían que buscar aquello de dónde
procede el inicio de movimiento.

CAPITULO CUARTO: Las causas en la filosofía preplatónica: Empédocles, Anaxágoras y el

Atomismo

En este capítulo se sigue con el tratamiento histórico d las dos causas que se trataban
anteriormente. Aristóteles señala las deficiencias de los filósofos señalados en el título (de los
cuales los atomistas nombra a Leucipo y Demócrito). Los atomistas no fueron más alla de la
causa material, diciendo que sus dos causas “materiales” son “lo que es” y “lo que no es”,
refiriéndose al lleno y sólido y al vacío, respectivamente.

Empédocles y Anaxágoras consiguieron introducir la causa originadora de movimiento, en la

cual para Empédocles la Amistad y el Odio, pero esto resultaba confuso ya que es la amistad la
que en algunos casos separaba y el odio el que unía, por lo cual esta causa era inconsistente; la
materia para Empédocles eran agua, fuego, tierra y aire. Para Anaxágoras utilizó al
Entendimiento como causa originadora, pero este hace un uso insuficiente de éste.

CAPITULO QUINTO: Las causas en la filosofía preplatónica: Pitagóricos y Eleatas

Arist´teles pasa a ocuparse e los pPitagóricos y Eleatas.

De los pitagóricos resalta lo siguiente: Que los elementos de los números son los elementos
constitutivos de todas las cosas; que estos elementos son los Par y lo Impar, o Limite e
Ilimitado; que los elementos perteneces al ámbito de la causa material; y que fueron los
primeros en preguntarse por el que-es, es decir, por la esencia o entidad de las cosas (aunque
lo hicieran con simpleza).

De los Eleatas sólo cabe destacar a Parménides, dado que introdujo la Cosmogénesis en la
segunda parte de su poema, proponiendo a l eecto una doctrina dualista de los principios
(caliente y frío).

CAPITULO SEXTO: Los principios y las causas en Platón

Este capítulo está dedicado enteramente a Platón, de cuya doctrina se basa en cinco pu tos:
1)bajo la influencia del heraclitismo de Crátilo, Platón llegó a la conclusión de que las
deiniciones Socráticas no pertenecían a las cosas sensibles, por ello introdujo las Formas; 2) Las
cosas sensibles participan de las Ideas; 3)Platón también introdujo las Realidades
Matemáticas, intermedias entre las formas y las cosas sensibles; 4)Los principios de las Ideas
son principios de todas las cosas, distinguiéndose un principio material, la Díada
indeterminada de la Grande y lo Pqueño y un principio formal: el Uno para las ideas y las Ideas
para las cosas sensibles; 5)el pricipio formal es causa del bien y el principio material es causa
del mal.

CAPITULO SEPTIMO: Las causas de la filosofía anterior: Resumen

Este capítulo se basa en un resumen de la búsqueda del concepto de causa de las filosofías ya
citadas, así como una demostración de que el concepto aristotélico de las cuatro causas es
correcto y que ese es el camino que hay que seguir para llegar a encontrar la verdadera causa.

CAPITULO OCTAVO: Crítica de los filósofos preplatónicos

Concluida ya la parte expositiva, ahora comienza la crítica. En este capítulo Aristóteles critica a
los monistas jonios, a Empédocles, Anaxágoras y a los pitagóricos.

De los monistas jonios dice que el proponer que el todo es uno y una cierta naturaleza única
comprendida como materia no puede ser, ya que no se atienen al principio de movimiento, no
hablan en ningún momento de la esencia y sólo tratan sobre los cuerpos sensibles, en ningún
mometo hablan sobre lo incorpóreo.

De Empédocles, el cual propone más de una materia como causa (cuatro cuerpos), Aristóteles
dice que este tiene las mismas dificultades: al decir que los elementos se generan unos a partir
de otros está diciendo que ningún cuerpo permanece, por lo cual esto no puede tomarse como
válidpo; aparte sus conceptos son incoherentes, y, por último el cambio o movimiento del que
habla exige un sutrato para los contrarios.

Sobre Anaxágoras tenemos que es absurda la afirmación de que todo estuviera mezclado al
principio, ya que tendrían que haber existido realidades carentes de mazcla y porque no
cualquier cosa puede mezclarse con con otra cosa al azar.

Por último, los Pitagóricos no explican en ningún momento de dónde se origina el principio de
movimiento y, con esto, no pueden explicar como se da la generación y corrupción junto con el
comportamiento de los cuerpos que se mueven en el firmamneto; no dicen nada acerca de las
cosas sensibles; y, es absurdo identificar los números que son causas de las cosas con los
números que son los elementos constitutivos de las cosas y que, por tanto, se identifican con
ellas.

CAPITULO NOVENO: Crítica de la doctrina platónica

Volver a leer

CAPITULO DECIMO: Conclusión

Aquí, Aristóteles no aporta más que lo aprtado anteriormente a partir del capítulo siete.
LIBRO DUODECIMO (Λ)
CAPITULO PRIMERO: Los tres tipos de entidad

En este capítulo, Aristóteles lo presenta como un estudio acerca de la entidad. La primera

parte del estudio da mediante cuatro argumentos la primacía de la entidad, como que si el
conjunto de las cosas es un todo, la entidad debe de ser lo primero, así igal si es una serie; así
también como que ninguna de las cosas puede darse separada.

La segunda parte del capítulo hace la distinción de los tres tipos de entidades: la eterna, la cual
debemos llegar a conocer el conjunto de sus elementos; la corruptible, com por ejemplo
plantas, animales…, esta entidad nadie la rechaza; y, por último, la inmóvil, la cual ha habido
filósofos anteriores que tienen distintos pensamientos respecto a esta.

Por último aristoteles dice que la entidad edstá sujeta a ambios a partir de opuesto (tienen que
ser contrarios que posean un sustrato) o de términos intermedios.

CAPITULO SEGUNDO: Materia, privación y forma como principios del cambio

En este capítulo, de una manera separada se sigue con el estudio de la entidad

sensible,sometida a cambios. Este introduce la materia como tercer término de cambio.

Entonces prosigue diciendo que si hay cuatro tipos de cambio (esencia, cualidad, cantidad y
lugar), los cambios se realizarán hacia los estados correspondientes según los ejemplos que
nos da: el génesis y la destrucción afectan a un esto,la alteración afecta a la cualidad, el
crecimiento y disminución afecta a la cantidad y, el desplazamiento al lugar.

Después, introduce el concepto que hay de dos maneras del ser (potencia-acto), el ual hace
que todo se cree a partir de algo que se encuentre en potencia y que todo lo que cambia tiene
materia, incluso las cosas eternas no generables (movimiento local). Así finalizando con que
hay tres causas y tres principios, de los cuales dos son provenientes de la contrariedad
(definición y forma y, privación) y el tercero la Materia.

CAPITULO TERCERO: La generación y la forma

Este capítulo incluye algunas observaciones acerca de la entidad sensible y su generación. Los
puntos mas importantes son los siguientes: Que la forma no se genera, sino que toda entidad
se genera de algo del mismo nombre y esencia por arte, naturaleza, azar o espontaneidad.
Dentro de que hay tres tipos de entidades, de las cuales son la materia (un esto en apariencia),
la naturaleza ( un esto y cierto estado al cual se dirige la generación) y la individualidad
(compuesta de aquellas, como Sócrates o Calias).

El otro punto de este capítulo trata sobre que la existencia de Formas separadas, a efectos
platónicos , es innecesaria a efectos de la generación.

CAPITULO CUARTO: Los elementos y las causas de las realidades sensibles

Aristóteles plantea en este capítulo, el problema de si los elementos y los principios son los
mismos para todas las cosas sensibles. Su respuesta es matizada: a)tomados universalmente
son los mismos (en general, los elementos son la materia, la forma y la privación)y su función
se realiza de un modo análogo en los distintos tipos de realidad. B)Tomados en su
particularidad son distintos para cada tipo de realidad, en cada categoría.

CAPITULO QUINTO: En qué sentidos las causas de todas las cosas son las mismas, y en qué
sentido son distintas.

En este capítulo se continua argumentando y ampliando la tesis propuesta en el anterior: Los

principios y las causas de todas las cosas son los mismos en cierto sentido, pero que en cierto
sentido son diversos. A la unidad de analogía del capitulo anterior se le añaden dos nuevas
perspectivas: la primera es que puesto que la existencia de las demás realidades depende de la
entidad, las causas de las entidades son causas de todo lo existente; y la otra es que tomando
los conceptos universalmente de potencia y acto, estos poseen una unidad de analogía.

Por otro lado el capítulo finaliza con una recapitulación de lo expuesto en el capítulo anterior y
este: “son los mismos para cada cosa e la medida en que se dicen en muchos sentidos, pero si
se distinguen los varios sentidos no son los mismos”; “analógicamente, son los mismos, ya que
son la materia, la forma, la privación y lo que produce el movimiento; de otro modo,…son
causas de todas las cosas ,… sin embargo, son distintas las primeras causas:” (ambos extractos
se encuentran en el 1071a)

CAPITULO SEXTO: Hay una entidad en acto inmóvil que causa eternamente el movimiento

Con este capítulo se pasa al estudio de la entidad primera, inmaterial e inmóvil. En primer
lugar, Aristóteles demuestra que ha de haber una causa eterna de movimiento, puesto que
este es eterno. Más adelante demuestra que para que esto sea posible, esta causa ha de ser
una entidad inmaterial y que se encuentre en acto, no en potencia. nPor úñtimo, tras reafirmar
la tesis de que el acto es anterior a la potencia, Aristóteles afirma la regularidad eterna de los
movimientos del Universo, mostrando de que modo han de explicarse, tanto los movimientos
regulares de los cuerpos celestes como los procesos alternantes de la generación y la
corrupción.

CAPITULO SEPTIMO: El acto de la entidad prmera, o Dios, consiste en eterna actividad

intelectual.

En este capítulo Aristóteles comienza formando el modo en el que se mueve la entidad

primera, modo de causa final, como el bien necesario y querido. A continuación, muestra la
inmutabilidad y necesidad de esta entidad, prosiguiendo con la exposición del tipo de acto o
actividad en que su ser consiste: vivir perfecto y placentero, actividad intelectual y de eterna
intelección. Por último, tras rechazar la creencia pitagórica, de que lo más perfecto no pueda
darse desde el principio, el capítulo concluye insistiéndose en la inmaterialidad e impasibilidad
de la entidad primera.

CAPITULO OCTAVO: Cuántos son los movimientos de los cuerpos celestes y cuántas las
entidades que lo producen.
Este capítulo comienza argumentando que ha de haber tantas entidades inmateriales como
esferas en que se mueven los planetas. Más adelante, discute el número de las esferas con las
propuestas por Eudoxo y Calipo fijando el número de 55(o 47 si eliminamos las de la luna yel
sol). Por último, tras argumentar a favor de la unicidad del universo, concluye con una
referencia a las creencias teológicas primitivas.

CAPITULO NOVENO: El acto de la entidad primera es autointelección

TTras el inciso del capítulo anterior, Aristóteles retorna al estudio de la entidad primera,
subrayando que su actividad consiste en un trabajo de autoconocimiento. En el que trata si el
entendimiento podría ser esta entidad.

CAPITULO DECIMO: El bien en el universo. Críticas a otras teorías relativas a los principios