Está en la página 1de 4

1. ¿Qué es el dinero?

Es un bien o un activo que los individuos de una sociedad están dispuestos a utilizar como
unidad de cuenta para la fijación de precios, cómo medio de pago para adquirir bienes o
servicios y cómo reserva de valor (guardar poder adquisitivo).
2. Características que debe poseer un bien para poder ser considerado dinero

Hasta cierto punto se podría decir que cualquier objeto nos podría servir cómo dinero, pero hay
ciertos objetos (Bienes) que son más prácticos que otros.
Ya que en cuanto a pagar o transferir valor se trata, la facilidad siempre será un gran punto a
tener resuelto.

Por eso vamos a listar las características más importantes que deberían poseer estos objetos:

 Durable: Este mismo debe ser capaz de circular en la economía en un estado


“aceptable” por una cantidad de tiempo razonable o en su defecto para siempre.

Por ejemplo: En el caso de los alimentos no podrían ser dinero, ya que estos mismos
suelen descomponerse con facilidad.

 Transportable: Los poseedores del mismo deben de poder transportarlo con la mayor
facilidad posible.

Por ejemplo: El oro no es fácilmente transportable ya que si es en muy pequeñas


cantidades podríamos perderlo y si son muy grandes cantidades por su peso.

 Divisible: El dinero debe poder subdividirse en pequeñas partes con facilidad, ya que se
necesitan diferentes cantidades de dinero según la transacción que se deba realizar.

 Reserva de valor: El dinero, debe poder ser utilizado para guardar poder adquisitivo, el
tener capacidades de compra a lo largo del tiempo es indispensable para que en
consecuencia pueda considerarse “ahorrar”.

Por ejemplo: El Bolívar Venezolano (VES) no es precisamente la moneda que más nos
funcione para reservar valor actualmente.

 Emisión debe ser controlada: Para que este mismo mantenga su valor, además de
prevenir que no cualquier persona pueda crear más de este bien (y no cree más dinero).

Por ejemplo: Los billetes convencionales tienen muchos mecanismos de seguridad para
evitar su falsificación.
3. Historia del Dinero

Dinero Mercancía

En algún punto de la historia de la humanidad, intercambiar bienes era algo meramente


intuitivo;
Alguien tiene algo valioso, otra persona tiene algo que se considera igual de valioso y ya está,
aquí es dónde conocemos a la figura del trueque.
Aunque este sistema tenía muchos problemas, como por ejemplo que: ambas partes debían estar
interesadas en los productos intercambiados. Además, debían llegar a un acuerdo en cuanto al
valor que tenían dichos objetos para que el cambio fuera equitativo.

Si avanzamos unos cuantos años nos encontramos con que nuestros antepasados tuvieron que
recorrer a otro sistema más adecuado y para el momento la solución lo fueron, metales cómo el
oro y la plata. Estos tenían la particularidad de que, al ser difíciles de conseguir, su valor no
tenía una gran variación en el tiempo. Además de que podían ser fundidos en piezas de diferente
valor, apareciendo aquí, las monedas.

Con la aparición de las monedas se hizo más fácil contabilizar y transportar el dinero.

Dinero Fiduciario

En el siglo XI comenzaron a aparecer los primeros billetes de la mano de unos primitivos


bancos centrales.
Los billetes no eran más que la promesa de la existencia de una determinada cantidad de oro en
una bóveda, la promesa de que si un día ibas al banco podrías retirar tu oro devuelta.

Por ende, si analizamos entre líneas nos damos cuenta de que lo que rige a este sistema es, la
confianza. La confianza en las instituciones, en los bancos, en que van a resguardar nuestro
dinero, en que van a proteger la economía.

Algunos billetes de la época (Siglos: XI-XX) decían expresamente que eran un certificado de
oro/plata.
Reserva Fraccionaria | Dinero Fiat

Ahora, en pleno siglo XXI, te invito a que tomes tus billetes, te dirijas al banco central de tu
país y les solicites que te den lo correspondiente en oro.
De hecho, los billetes actualmente ya no dicen en ningún lugar que son un certificado de oro,
porque no lo son.
Antes eran una promesa de que podías intercambiar esos papeles por una determinada cantidad
de oro, y a esto se le conoce cómo patrón-oro. Era lo que le daba valor a un simple pedazo de
papel.
Los billetes ya no son una promesa de oro.

Son una promesa de… ¿nada?

Sí y no. Los estados actuando en conjunto con sus bancos centrales de cierta forma nos obligan
a darle valor a algo que intrínsecamente, no lo tiene.

Por ende, podríamos decir que el dinero actual solamente vale porque la sociedad “se puso” de
acuerdo en aceptarlo como tal.

También podría gustarte