Universidad Valle del Grijalva

Licenciatura en psicología

Mixto dominical

Metodología de la investigación

Cuarto cuatrimestre

Ángel Javier Ruiz Luna

Conceptualización del tema de investigación.

 La negación como defensa ante las situaciones de angustia y sus
consecuencias adaptativas escolares en estudiantes universitarios.

La sensación de angustia se encuentra presente en nuestra realidad psíquica desde el comienzo de

nuestra vida, según diversas teorías. Esta podría definirse como; la respuesta ante situaciones que
generan tensión en la estructura psíquica de un individuo, las cuales pueden ser: hambre, sueño,
enojo, tristeza, etc. Esta tensión genera conflictos interestructurales e intraestructurales, lo que
genera respuestas inconscientes y consientes primero que nada ante la misma tensión.
Conscientemente se puede percibir un incremento en el ritmo cardiaco, escozor en la piel,
insomnio, miedo, asco, entre otros.
Inconscientemente ocurren otras muchas reacciones, ya que el inconsciente se encuentra
estructurado como el lenguaje, podemos comprender su funcionamiento y más que nada las
reacciones que ocurren. Primero que nada esta tensión debe ser nombrada según las cualidades
que puede describir, a este nombre se le asigna un significado y un significante, de acuerdo a su
categorización (la cual puede ser influenciada por los afectos) se activara un impulso de una fuente
de energía interna de energía psíquica que todos tenemos, el cual se basa en los procesos
químicos-eléctricos del sistema nervioso, el cual puede ser de dos tipos según el autor; según
Freud serán de vida o muerte, Melanie Klein de amor y odio, también se dividen en activación-
desactivación, excitación-inhibición, tensión-relajación.
El aparato psíquico está compuesto por tres subestructuras fundamentales y cada una es
independiente de las demás aunque se relacionan estrechamente, puede que el mismo objeto o
situación nos genere un poco de ambos tipos de impulsos, ya que una subestructura puede
identificar al objeto o acción desencadenante de la pulsión como algo digno de amor por
garantizar un resultado placentero inmediato, como son los impulsos sexuales, mientras otra
subestructura lo considera de alto riesgo por las consecuencias sociales (recordando que la mirada
del otro refuerza el YO) considerándolo como algo malo, merecedor de odio, miedo, rechazo o
asco por mencionar solo algunas. Esto crea conflictos, por cual impulso debe ser liberado y de qué
manera, pues la realidad impone límites y el individuo debe adaptarse a ellos, por lo que no
siempre es posible satisfacer una pulsión de manera inmediata, por ejemplo: si un individuo siente
excitación genital por contacto con otro que es su pareja podrá surgir el impulso por realizar el
acto primario generador de la vida, de ser así en ambos individuos no lo realizaran en el instante
del impulso pues el temor a las reprimendas sociales les hace sentir miedo a las consecuencias que
podrían surgir, como puede ser el arresto por parte de la policía.
Es así que se debe buscar la manera adecuada de satisfacer el impulso, puede ocurrir que el
individuo no sepa la manera de satisfacerlo o que ni siquiera sea capaz de identificarlo. Este
proceso de postergamiento del desahogo pulsional es lo que genera la angustia.