Está en la página 1de 7

La importancia de la red logística radica en el hecho de que es indispensable para

que el producto llegue al consumidor. Por lo general, se tiende a poner el foco de


importancia en la producción o fabricación de un bien, ya que es la parte más visual
y tangible del proceso de satisfacción de demanda del consumidor.

Sin embargo, sin una red de distribución logística que permita que el bien o producto
en cuestión llegue al cliente, dicho bien o producto no tiene sentido. Hay que tener
en cuenta que, un producto sin comprador o consumidor carece de valor en sí
mismo.

Por ello, para asegurar su valor y propósito, es indispensable abarcar todas las fases
de compra, desde la manufactura a todas las fases posteriores que garantizan la
distribución del producto.

Aquí es donde radica la importancia estratégica de la red logística, ya que garantiza


la distribución exitosa del producto desde el centro de producción hasta el
consumidor, asegurando la satisfacción de su necesidad y el valor del producto en
sí mismo.

Factores que determinan la red logística

Los factores que determinan la red de distribución logística dependen en gran


medida del tipo de producto o bien que se va a distribuir.

No será lo mismo distribuir alimentos (es decir, un producto perecedero y que puede
requerir ser conservado a determinadas temperaturas) que hacerlo con un producto
como pueden ser artículos de moda o, incluso, tecnología.
De esta forma, la red logística deberá adecuarse a las necesidades concretas de cada
producto y de cada cliente.

No obstante, algunos de los elementos comunes que vamos a encontrar en toda


infraestructura de distribución asociada a una red logística son los siguientes:

• Labores de almacén: El almacén es el espacio físico donde se conservan los


productos desde el momento en el que se manufacturan hasta el momento en el
que el cliente demanda su adquisición.
• Labores de inventario: Se trata de la actividad relativa a la gestión y control de
los productos, lo que permite su acceso de forma rápida y efectiva, lo que permite
a su vez dar respuesta inmediata a la demanda de compra por parte del cliente.
• Labores de empaquetado: Hace referencia a la preparación del producto una vez
que se ha confirmado la compra. Antes de su transporte para hacerlo llegar al
cliente, es necesario protegerlo de forma adecuada, lo que garantiza un
transporte seguro y una distribución efectiva desde que sale del almacén hasta
que llega a manos del consumidor.
• Transporte y distribución: Se trata de uno de los elementos más visibles de toda
red logística. Se refiere al conjunto de acciones que permiten que el producto se
desplace físicamente desde el almacén hasta el consumidor final. Aquí
intervienen elementos como el medio de transporte, la planificación de rutas, la
entrega en última milla, etc.

La importancia de las nuevas tecnologías

Como se puede ver, la complejidad de una red logística depende en gran medida
del tipo de producto con el que se trabaje, así como del número de consumidores a
los que se tenga que prestar servicio.

En este sentido, un elemento indispensable que garantiza la efectividad de la


distribución eficiente de mercancías es el uso de las nuevas tecnologías, que
permiten gestionar el transporte y las entregas de forma mucho más eficiente,
sostenible y económica.

En este sentido, uno de los mejores ejemplos lo encontramos en herramientas como


PlannerPro by Beetrack, que permite planificar y gestionar las rutas de reparto. De
esta forma, se optimizan los recursos disponibles asociados al proceso de
distribución y, al mismo tiempo, se garantiza ofrecer un servicio de calidad a los
clientes.
Ñ

Al diseñar una red de distribución comercial se persiguen varios objetivos, que varían
dependiendo del enfoque del negocio, puede tratarse de lograr ahorros en los
costos o de aspectos relacionados con la responsabilidad corporativa. Por esta razón,
la forma en la que está planeada puede ser diferente de una empresa a otra, aun
tratándose de actores en el mismo sector productivo.

Adicionalmente, una red de distribución es uno de los principales activos que la


empresa debe evaluar y estudiar constantemente ya que su diseño incide en la
eficiencia operativa, el nivel de servicio y las entregas a tiempo. En este sentido
muchas empresas basan su modelo de negocio en el diseño de esta red logística
buscando configurar de manera óptima todos sus recursos físicos, que pueden
incluir un centro de distribución, una flota de transporte, almacenes, cruces de
andén, plantas de producción, coordinación con proveedores, etc.

Tipos de redes de distribución

Existen varios tipos de redes de distribución en función de las necesidades de la


empresa y los requerimientos logísticos:

• Directamente de la planta manufacturera al cliente


• De un proveedor de insumos a la fábrica
• Por medio de proveedores logísticos
• Haciendo uso de almacenes
• Escalonada

Una empresa puede escoger usar uno o varios tipos al mismo tiempo dependiendo
de sus necesidades y presupuesto, considerando en todo momento que los
elementos involucrados en el diseño o rediseño de una red tienen una relación
importante entre sí. Inventarios, transporte, infraestructura e información deben
alcanzar un equilibrio en costos para resultar en una estrategia óptima de
distribución.

Por este motivo, el diseño eficiente de la red de distribución cobra mayor


importancia ya que además de optimizar recursos y ahorrar costos, traza la etapa de
la cadena de suministro que tiene contacto directo con el consumidor final, por lo
que debe procurar brindar un servicio de calidad, factor que muchas veces determina
la competitividad del proveedor logístico.

Beneficios de una red orientada al mercado

Rediseñar o diseñar desde cero una red de distribución debe traer como beneficios:
optimizar los costos de la logística total de la empresa, mejorar el servicio a clientes
intermediarios y finales, aumentar la flexibilidad y la capacidad de respuesta, entre
muchos más. En resumen, acorde con la experiencia de Accenture México los
beneficios de una red de distribución orientada al mercado incluyen:

• Minimizar la inversión al reducir entre 10% y 30% los activos.


• Reducir entre 10% y 30% la inversión en el proceso logístico.
• Elevar el porcentaje de disponibilidad de producto y alcanzar la excelencia en el
servicio al cliente, lo cual conlleva un aumento de entre 2% y 5% en los ingresos.
• Lograr una optimización en el manejo de inventarios con una reducción de los
mismos de entre 10% y 20% sin perder flexibilidad y capacidad de respuesta.

Objetivos en el diseño de redes

De ahí la importancia de dedicar tiempo y esfuerzo a la creación o rediseño de la red


de distribución con base en estas consideraciones:

• Asegurar que los productos estén siempre disponibles en el inventario cuando lo


solicite el cliente.
• Reducir al mínimo el tiempo transcurrido entre el pedido y la entrega.
• Gestionar el envío de productos diferentes solicitados por un mismo cliente.
• Brindar al cliente la posibilidad de dar seguimiento a su pedido en tiempo real.
• Ofrecer al cliente una gran experiencia de compra desde la elaboración del
pedido hasta la entrega en tiempo y forma, pasando por el pago y el seguimiento.
• Abrir canales que permitan al cliente devolver productos con facilidad.
Ñ

Para lograr estos objetivos, el diseño o rediseño de la red de distribución debe


seguir este proceso:

1. Conocer cuál es la estrategia del negocio, incluyendo predicciones de


crecimiento anual, número de categorías de productos, nuevas adquisiciones,
etc., de la empresa para conocer sus necesidades de distribución presentes y
futuras.
2. Definir claramente cuál es el nivel de servicio al cliente al que se aspira y cómo
se piensa lograr, especificando; por ejemplo, la frecuencia de atención, formato
de las entregas, entre otros. Los indicadores de servicio al cliente relacionados
con el cumplimiento de la promesa, aportarán hallazgos valiosos para el diseño
de la red de distribución.
3. Atender los objetivos estratégicos del negocio y la promesa de servicio al
cliente requiere de evaluar los recursos financieros y físicos con que se cuenta,
haciendo simulaciones de diferentes escenarios de distribución para encontrar
el equilibrio entre costos y satisfacción del cliente.
4. Establecer el alcance de la red considerando procesos, rutas y necesidad de un
centro de distribución intermedio, todo con base en el número y ubicación de
clientes, la variedad de artículos y el volumen de ventas. En su definición debe
considerarse la combinación de aspectos de la red que facilitan la estrategia de
satisfacción del cliente y que minimizan los costos en su totalidad, no solo en
una de sus partes.
5. Identificar limitaciones de presupuesto o de instalaciones para evaluar la
conveniencia de subcontratar la logística y distribución a un proveedor
especializado.
6. Analizar lo que hace la competencia para detectar debilidades y oportunidades
de mejora. Igualmente, un estudio de entorno permitirá detectar oportunidades
y amenazas que ayuden a optimizar la estrategia de distribución, entre ellos se
encuentran las normativas aplicables y las características del producto a
distribuir y sus condiciones de transporte.
7. Seleccionar herramientas tecnológicas de diseño de redes de distribución que
permitan el análisis y simulación del diseño de una red óptima, innovadora y
flexible ante las necesidades cambiantes del mercado y de la empresa para una
rápida toma de decisiones. En el mercado existen diferentes plataformas
especializadas para diseñar una red de este tipo y proveedores de servicios
logísticos que dentro de su oferta realizan el diseño de redes con el apoyo de
recursos tecnológicos de T.I. líderes a nivel mundial.

La clave para que tu red de distribución te ofrezca una ventaja competitiva es


orientarla al cliente.

Su satisfacción debe ser el objetivo principal buscando un equilibrio entre la


eficiencia de la cadena de suministro y la optimización de los recursos.

También podría gustarte