Habilidades terapeuticas basicas para una terapia exitosa

¿Es suficiente la alianza terapéutica para garantizar una terapia exitosa?

Nombres: Maximiliano
Sandoval

Sebastian Castillo Moreno

Anais Gonzalez

Profesor: Ricardo Bascuñan.

 ¿Es suficiente la alianza terapéutica para garantizar una terapia exitosa?

Después de medio siglo de investigación se ha demostrado que la alianza terapéutica

(AT) es el predictor más robusto del éxito del tratamiento. Los casos con mayores
resultados muestran una mayor evidencia de procesos interpersonales positivos, esto de la
mano con una mayor habilidad psicoterapéutica, han incidido en el quehacer clínico, el
buen manejo de los procesos negativos y en la reparación de las rupturas que se producen
en la creación de la alianza han sido fundamental para lograr una visión relacional la cual
mediante la co-construcción han hecho presente la necesidad no solo de parte del
consultante sino también del psicoterapeuta de comprender el desarrollo personal como
un proceso evolutivo, integral, progresivo y continuo capaz de vincularse con el
desarrollo como persona lo que impulsa el desarrollo como terapeuta. Sin embargo, ¿es
suficiente la alianza terapéutica para garantizar una terapia exitosa?. El código de ética
del colegio de psicólogos de Chile es un conjunto de normas de conducta profesional
respaldadas por principios que constituyen su marco teórico - ético. Enfatizando la ética
como valor central dentro del ejercicio profesional, sus objetivos son: dilucidar y resolver
dudas y conflictos de tipo ético profesional, facilitar la resolución de dilemas éticos,
analizar y clarificar opciones de acción, configurar, evaluar y juzgar las eventuales
infracciones a las propias normas, proteger a los psicólogos frente a acusaciones o
acciones que afecten su ejercicio profesional como también recalcar el respeto por la
dignidad de las personas y pueblos, el cuidado competente del bienestar de otros, la
integridad; lo cual incluye el no dañar, ser correcto, moralmente bueno y las
responsabilidades profesionales y científicas frente a la sociedad. Así nuestro quehacer
queda centrado en las personas, cuidando y entregando un servicio que pueda garantizar
la confidencialidad como el buen ejercicio dentro de la vida de las personas, lo que
permite un mayor éxito dentro del espacio terapéutico comprendiendo que la alianza
terapéutica (AT) por sí misma no es suficiente para lograr los mejores resultados si es que
nuestro quehacer no está anclado dentro de los marcos teóricos-éticos que garantizarán el
respeto, la escucha y el buen ejercicio profesional. De esta forma conforme a lo dispuesto
en el artículo 19 N°4 de la Constitución Política de la República de Chile y a las normas
pertinentes de la ley N° 19.628 sobre protección de la vida privada y sus modificaciones
posteriores, el tratamiento de los datos personales se rige por reglas que aseguran la
confidencialidad de los datos personales pudiendo el usuario en cualquier momento
ejercer los derechos otorgados por la ley nombrada, como solicitar información sobre los
datos relativos a su persona, su procedencia y destinatario, solicitar que modifiquen sus
datos personales cuando ellos no sean correctos o no estén actualizados, solicitar copia
del registro alterado esto vinculado a la ley N° 20.584 la cual regula los derechos y
deberes de las personas en relación con acciones vinculadas a su atención de salud. Así
las disposiciones de la Ley 20.584 se aplicarán a cualquier tipo de prestador de acciones
de salud, sea pública o privada. Asimismo, y en lo que corresponda, se aplicarán a los
demás profesionales que deban atender público o se vinculen con el otorgamiento de las
atenciones de salud. Entendiendo por prestador de salud a toda persona natural o jurídica,
pública o privada, cuya actividad sea el otorgamiento de atenciones de salud. Los
prestadores son de dos categorías; institucionales e individuales. Prestadores
institucionales son aquellos que organizan en establecimientos asistenciales medios
personales, materiales e inmateriales destinados al otorgamiento de prestaciones de salud,
dotados de una individualidad determinada y ordenados bajo una dirección, cualquiera
sea su naturaleza y nivel de complejidad. Corresponde a sus órganos la misión de velar
porque en los establecimientos indicados se respeten los contenidos de esta ley.
Prestadores individuales son las personas naturales que, de manera independiente,
dependiente de un prestador institucional o por medio de un convenio con éste, otorgan
directamente prestaciones de salud a las personas o colaboran directa o indirectamente en
la ejecución de éstas. Se consideran prestadores individuales los profesionales de la salud
a que se refiere el Libro Quinto del Código Sanitario. Otro artículo importante a nombrar
de las leyes 19.628 de Protección a la Vida Privada, es el N°12, el cual se centra en las
acciones que puede tomar el individuo al cual el banco o la institución le está
almacenando los datos, que los elimine de su sistema si considera que carecen de
funcionamiento legal o que simplemente hayan caducado.

Volviendo a la pregunta anterior, la cual no tenemos como propósito responder, sino

exponer algunas de nuestras ideas. ¿Es suficiente la alianza terapéutica para garantizar
una terapia exitosa?. Roberto Opazo, en su libro: El hombre y el conocimiento del
hombre apunta "si nuestras opciones de conocer son relativas, nuestro conocimiento de
nosotros mismos también lo será", esto quiere decir, en términos de psicoterapia, que
existe una limitación en las pautas que tiene, narra o nos confía el consultante,
estrechando así, nuestras formas de explorar la vida de las personas. Por otra parte,
alianza terapéutica es el pie inicial y puede llegar a ser una piedra angular en ambas
direcciones, para una inmejorable relación terapeuta-consultante o todo lo contrario; el
problema que erradica de esta, es la incontable cantidad de factores que pueden converger
desde el consultante, el terapeuta, el ambiente o el contexto, y puede resultar algo ingenuo
pensar en que sólo desde la actitud positiva, respetuosa y comprensiva emergerá una
buena alianza, así mismo, no se demerita lo siempre irremplazable de lograr generarla.
Continuando con Opazo, este escribe "el sistema psicológico humano ha evolucionado en
una dirección de complejidad creciente y de inobservabilidad creciente" con esto
referimos, a la necesidad del terapeuta y de la propia psicología de evolucionar y con ella,
la creación de nuevos sistemas, más o menos complejos, pero sí más adaptables a lo que
requiere tal magnitud, en consecuencia a esto, el rol del terapeuta no solo es nutrirse de
habilidades sociales, conocimiento de la corriente y actitudes éticas, sino también, habitar
en un constante proceso que evidencie la mejoría como profesional, ergo, un abanico de
formas exploratorias fundamentales para nuestro rol.