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trastornos del desarrollo

Avances en la identificación etiológica del retraso mental


Gabriel González, Víctor Raggio, María Boidi, Alejandra Tapié, Leda Roche

Resumen. A pesar de los avances en el campo de la genética, la neuroimagen y las enfermedades metabólicas, la mitad Cátedra de Neuropediatría;
Centro Hospitalario Pereira
de los niños con retraso mental permanecen sin diagnóstico etiológico. Se estima una base genética en un 40% de los ca- Rossell (G. González). Sección
sos, teratógenos ambientales y prematuridad en un 20%, enfermedades metabólicas en un 1-5% y causas multifactoriales Clínica; Departamento de Genética
en un 3-12%. Los antecedentes familiares, la historia clínica detallada que precisa la dismorfología y el examen neurológi- (V. Raggio, M. Boidi, A. Tapié,
L. Roche). Facultad de Medicina.
co permitirán establecer o sospechar un diagnóstico en dos tercios de los casos y, en los restantes, las pruebas de barrido Universidad de la República.
podrán confirmar una etiología. El orden de los estudios guiará la clínica: cariotipo si se sospecha de cromosomopatía, Montevideo, Uruguay.

neuroimagen si existe una alteración del examen neurológico y estudios genéticos específicos o neurometabólicos para Correspondencia:
confirmar la presunción clínica. El rendimiento diagnóstico estimado de las diferentes técnicas es: cariotipo, 9%; X frágil, Dr. Gabriel González Rabelino.
Servicio de Neuropediatría.
5%; anomalías subteloméricas, 4%; enfermedades neurometabólicas, 1%, y nuevas técnicas de microarrays, 19%. Debi- Centro Hospitalario Pereira Rossell.
do al mayor rendimiento y coste-beneficio, actualmente se recomienda, como primera línea para los retrasos mentales Bv. Artigas, 1550. CP 11600.
Montevideo, Uruguay.
inexplicables, los estudios de microarrays. Si bien los resultados de estas pruebas son complejos y requieren confirmación
e interpretación cuidadosa de un especialista en genética médica, los avances en su desarrollo tecnológico, resolución y E-mail:
disminución de los costes determinan que se transforme en una herramienta fundamental en la identificación etiológica viciogon@hotmail.com

de estos niños. Declaración de intereses:


Los autores manifiestan la
Palabras clave. Genética molecular. Etiología. Neurodesarrollo. Retraso mental. inexistencia de conflictos de interés
en relación con este artículo.

Aceptado tras revisión externa:


04.06.13.
Introducción Frecuencia
Cómo citar este artículo:
La discapacidad intelectual o cognitiva o retraso men- La prevalencia de retraso mental oscila, en general, González G, Raggio V, Boidi M,
Tapié A, Roche L. Avances en la
tal se define como una limitación significativa del en un 1-3% de la población y las formas graves se identificación etiológica del retraso
funcionamiento intelectual y en el comportamiento estiman en un 0,5%. Las diferencias descritas en di- mental. Rev Neurol 2013; 57 (Supl 1):
S75-83.
adaptativo, que se inicia antes de los 18 años [1]. ferentes trabajos parecen reflejar diferencias en las
Está definición implica que la discapacidad se ma- definiciones y mediciones del cociente intelectual, © 2013 Revista de Neurología
nifieste en el curso del desarrollo, que afecta a áreas así como también en el perfil socioambiental de la
cognitivas y adaptativas, y que sea significativamen- población, lo que puede modificar estas cifras, a ex-
te inferior al promedio. Por esta razón, para definir- pensas de formas leves [2-4]. El retraso mental mo-
lo y determinar su gravedad se utilizan pruebas de derado a grave tiene una prevalencia constante en
inteligencia estandarizadas y validadas en la pobla- los diferentes estudios, mientras que las formas le-
ción. La clasificación internacional de enfermeda- ves varían notoriamente y están muy influidas por
des en su décima versión (CIE-10) lo clasifica como factores ambientales [5,6].
leve cuando el cociente intelectual se sitúa entre 50
y 69; moderado, entre 35 y 49; grave, entre 20 y 34, y
profundo, por debajo de 20. Etiología
Si bien la alteración del neurodesarrollo se de-
tecta antes de los 5 años, la dificultad para realizar Identificar la etiología del retraso mental no es sen-
pruebas psicométricas tempranas determina que, cillo y los porcentajes donde se puede establecer una
previo a esta edad, el diagnóstico de retraso mental causa varían notablemente en las diferentes publi-
puede no ser preciso y estos niños se clasifican con caciones, entre un 10-81%, en función de las defini-
el diagnóstico de retraso madurativo o retraso ge- ciones, la metodología diagnóstica, la población
neralizado del desarrollo (RGD) [2]. Determina pro- analizada y la disponibilidad de estudios de última
blemas familiares, sociales, escolares y de salud pú- generación [2,7,8]. Los resultados evidencian que
blica y genera importantes costes a los sistemas de los factores genéticos, ambientales y multifactoria-
salud y educativo [3,4]. les son las causas de identificación más común y se

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G. González, et al

estima una causa genética en un 40% de los casos, se cuestiona hasta dónde profundizar los estudios
teratógenos ambientales en un 5-13%, complicacio- complementarios, analizando su coste-beneficio y el
nes de la prematuridad en un 2-10%, causas meta- valor que determina para el niño y su familia, dado
bólicas en un 1-5% y multifactoriales en un 3-12% que, en lo esencial, no modifica el tratamiento.
[6]. A pesar de los avances en el área de la neuro-
imagen, estudios metabólicos, citogenética y estu- Esquemas de evaluación etiológica
dios moleculares, persisten aproximadamente un
30% de casos de retrasos mentales graves y un 70% No existe un consenso uniforme en el algoritmo de
de retrasos mentales leves sin un diagnóstico etio- estudios, el mismo debe adaptarse a las circunstan-
lógico definitivo [6]. cias específicas del caso [14,15]. La etiología genéti-
Los factores genéticos son la principal causa ca del retraso mental es enormemente heterogénea
identificable de retraso mental en, aproximadamen- con cientos de genes y regiones genómicas involu-
te, la mitad de los casos de retraso mental grave y cradas [16,17]. Cuando exista una hipótesis diag-
en un 15% de los leves a moderados, aunque predo- nóstica, se realizarán técnicas dirigidas a confirmar
minan las causas cromosómicas en un promedio la presunción clínica, y en los casos de retraso men-
del 16,1% y otros defectos en genes específicos [9]. tal no sindrómico se deben realizar técnicas de ba-
Los factores ambientales biológicos como teratóge- rrido de menor a mayor complejidad y coste para
nos, infecciones o tóxicos pueden ser incriminados identificar una etiología.
como la causa del retraso mental o contribuir a la
misma sumados a factores poligénicos y socioam- Técnicas dirigidas
bientales desfavorables. Los mecanismos epigenéti- La clínica guiará el orden y los estudios a realizar en
cos contribuyen y afectan al neurodesarrollo con función de la hipótesis diagnóstica:
procesos que modifican la expresión de los genes – Si se sospecha una cromosomopatía numérica,
sin alterar la información genética [10]. se realizará un cariotipo.
Se estima que un 13% de los casos de retraso men- – Si hay alteraciones adicionales del examen neu-
tal puede asociarse a la exposición a neurotoxinas rológico, se indicará una neuroimagen.
ambientales [6]. En Uruguay, hemos encontrado, en – Si hay sospecha de enfermedad metabólica, se so-
estudios biológicos en meconio, un 40% de niños meterá a los estudios neurometabólicos dirigidos.
expuestos al alcohol [11]. Si bien se conoce el efecto
adverso sobre el neurodesarrollo de una alta y con- Cuando se dispone de un diagnóstico clínico tenta-
tinua exposición al alcohol, que determina el sín- tivo (retraso mental sindrómico), las exploraciones
drome alcohólico fetal, el espectro de alteraciones moleculares se dirigen a mutaciones, genes o regio-
del neurodesarrollo vinculado a dicha exposición es nes genómicas específicas. Por ejemplo: búsqueda
10 veces más frecuente y difícil de reconocer en la del gen FMR1 o MECP2 en el síndrome X frágil o
clínica, con una prevalencia estimada del 1-2% que de Rett; FISH de microdeleciones en la región cro-
puede aumentar hasta el 4-8% en poblaciones de mosómica 7q11.23 en el síndrome de Williams y de
alto riesgo [12]. alteraciones de la metilación de la región genómica
El papel de otros factores ambientales no bioló- 15q11.2 en los síndromes de Angelman y de Prader-
gicos, como la situación de alta vulnerabilidad so- Willi.
cial, un bajo nivel educativo, la malnutrición, una
depresión materna, el consumo de drogas en el em- Técnicas de barrido
barazo o la falta de estimulación adecuada en la pri- Cuando no es posible lograr una orientación clínica
mera infancia son factores que contribuyen y se respecto a qué genes estudiar (retraso mental ines-
asocian a la predisposición genética y explican el pecífico o no sindrómico), se debe recurrir a técni-
mayor porcentaje de discapacidad intelectual leve cas que busquen alteraciones genéticas en amplias
en los países del tercer mundo [13]. regiones del genoma:
– Los estudios iniciales incluyen hormonas tiroi-
Importancia del diagnóstico etiológico deas incluida la T3, creatincinasa, enzimas hepá-
ticas, colesterol, ácido úrico, lactato, amonio, ami-
La confirmación etiológica tiene un valor indudable noácidos y glucosaminoglicanos en la orina.
y permite informar a la familia sobre el pronóstico, – Frente a un retraso mental inespecífico, si bien la
riesgo de recurrencia, estrategias preventivas, suge- American College of Medical Genetics reco-
rencia de terapias más adecuadas y abordaje del mienda iniciar con los test de microarrays; existe
caso con mayor precisión. En ocasiones, el médico discusión en países que no cuentan con este re-

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Trastornos del desarrollo

curso y algunas guías mantienen la recomenda- gas en la gestación es muy bajo, en nuestro país fue
ción de iniciar con cariotipo y estudios de síndro- inferior al 30% en relación con los metabolitos de-
me X frágil. tectados en meconio para alcohol y cocaína [19].

En los casos de retraso mental leve o marginal, con Examen de las dismorfias
factores ambientales asociados, se debe intentar
identificar predisposición hereditaria (poligénica y Además de la historia familiar, los principales indi-
difícil de estudiar) y noxas ambientales que puedan cadores de la presencia de una enfermedad genéti-
haber actuado en períodos críticos del desarrollo, ca son el examen morfológico y el neurológico. Los
tanto en la etapa embrionaria y fetal como en la niños con retraso mental o RGD tienen en compa-
neonatal inmediata. Existe un amplio consenso de ración con controles sanos un alto porcentaje de
la importancia de la historia clínica, antecedentes anomalías morfológicas menores. Las anomalías
familiares y la habilidad diagnóstica del genetista menores aisladas se observan en aproximadamente
clínico para confirmar una etiología, que se estable- el 4% de la población, y deben considerarse signos
ce en un tercio de los casos por el interrogatorio y de riesgo cuando son varias y según el contexto clí-
examen físico, en otro tercio por estudios comple- nico [20,21]: si se dan acompañadas de otras altera-
mentarios basados en una hipótesis diagnóstica y ciones estructurales o funcionales, con alteraciones
en el tercio restante por pruebas de barrido sin sos- del desarrollo o del crecimiento, pueden ser una
pecha diagnóstica [6]. manifestación de una enfermedad genética; por el
contrario, si se dan de manera aislada y están pre-
sentes en otros familiares sanos, se trataría de va-
Herramientas para identificar la etiología de riantes normales.
la discapacidad intelectual o retraso mental
Examen neurológico
En una revisión de la bibliografía se informa de que
el rendimiento diagnóstico es: examen dismorfoló- El examen neurológico resulta esencial en la eva-
gico, 39-81%; examen neurológico, 42%; neuroima- luación de niños con retraso mental y se encuen-
gen, 30%; X frágil, 5,4%; estudios citogenéticos con- tran alteraciones en el 42,9% de los casos. Estas anor-
vencionales, 9,5%; estudio de anomalías subtelomé- malidades ayudan a determinar la indicación de es-
ricas, 4,4%; arrays CGH, 19%, y enfermedades neu- tudios adicionales de neuroimagen o neurofisioló-
rometabólicas, 1% [6,18]. gicos [2].

Historia familiar Resonancia magnética craneal

La genealogía familiar de al menos tres generacio- La resonancia magnética craneal puede aportar in-
nes, con particular atención a los casos de retraso formación que pueda orientar a una etiología parti-
mental, retrasos en el desarrollo, patología psiquiá- cular en aproximadamente el 30% de los niños con
trica, malformaciones congénitas, abortos, morti- retraso mental [2,3]. No es adecuado definir una
natos y muerte infantil, es un arma fundamental que etiología como malformativa del sistema nervioso
puede brindar una orientación diagnóstica o un central exclusivamente por constatar una agenesia
modo de herencia, conocimiento que puede ser una del cuerpo calloso, polimicrogiria, malformación de
ayuda diagnóstica y fundamental para el asesora- Dandy-Walker u otra anomalía estructural, dado
miento genético. Además, permite evaluar la pre- que estas alteraciones pueden estar presentes en
sencia de patologías con expresividad variable (o anomalías cromosómicas, genéticas, teratogénicas
penetrancia incompleta) en varios individuos gené- o neurometabólicas. Cuando el retraso mental no
ticamente relacionados. es grave y no asocia alteraciones del examen neuro-
lógico no constituye una práctica obligatoria y su
Anamnesis rendimiento es bajo [2,22]. El American College of
Medical Genetics recomienda realizar dicho estu-
El interrogatorio permite detectar causas teratogé- dio ante la presencia de macrocefalia y microcefa-
nicas como alcohol, otras drogas, medicamentos lia, convulsiones, regresión del desarrollo o signos
como anticonvulsionantes, misoprostol, agentes fí- anormales del examen neurológico. La espectros-
sicos, infecciones y enfermedades maternas. La sen- copia es útil para detectar algunas enfermedades me-
sibilidad de la autodeclaración del consumo de dro- tabólicas como el déficit de creatina cerebral [3].

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Estudios citogenéticos genoma humano, así como a rearreglos que pueden


causar retraso mental y defectos congénitos [28-31].
Tradicionalmente, ha sido la técnica por excelencia Los rearreglos subteloméricos se detectan en el 0,5-
para iniciar el estudio etiológico del retraso mental: 35% de los casos con retraso mental o RGD de cau-
el cariotipo permite ver todo el genoma del paciente sa no aclarada, dependiendo de los métodos de de-
(excepto el genoma mitocondrial), con un nivel de tección y los criterios de selección de pacientes [32-
resolución muy bajo. Lo habitual es realizar un ca- 34]. La mayor sensibilidad de la técnica es cuando
riotipo de alta resolución (≥ 650 bandas) de rutina se presentan tres o más de los siguientes criterios:
en todo niño con retraso del desarrollo o retraso – Historia familiar de retraso mental.
mental, incluso en ausencia de rasgos dismórficos o – Fallo en el crecimiento prenatal.
rasgos clínicos sugestivos de un síndrome. Esto ha – Pobre crecimiento o sobrecrecimiento posnatal.
cambiado en los últimos años por el desarrollo de – Dos o más dismorfias faciales.
los microarrays y según algunas guías se reserva para – Una o más dismorfias no faciales o anomalías con-
casos de sospecha de un síndrome cromosómico es- génitas.
pecífico, antecedentes familiares de reordenamiento
cromosómico o abortos espontáneos múltiples. Se Esta técnica permite realizar varios experimentos
encuentran anomalías en el 9-36% de los casos [2]. en una misma reacción y de forma económica, se
La eficacia diagnóstica es del 3-5%, si se excluye el pueden diseñar kits que apuntan a detectar altera-
síndrome de Down y otros clínicamente reconoci- ciones en varias regiones genómicas previamente
bles, y aumenta en los casos de retraso mental grave vinculadas a un retraso mental [35].
con alteraciones morfológicas o del crecimiento [4].
Si bien constituye una técnica ampliamente utiliza- FISH subtelomérico
da, para detectar anomalías cromosómicas numéri- Consiste en el uso de sondas para dichas regiones y
cas y estructurales, consume tiempo y su bajo nivel en la actualidad se usa para confirmar hallazgos del
de resolución es un inconveniente importante por- MLPA o diagnóstico de síndromes de microdele-
que no detecta anomalías menores a 5-10 Mb [23]. ción específicos, debido a la ventaja económica de
esta última técnica.
Reordenamientos submicroscópicos
subteloméricos y de otras regiones genómicas CGH y microarrays de genotipado de SNP
Recientemente se ha determinado que desequili-
Para identificar desequilibrios cromosómicos me- brios en otras regiones genómicas –las denomina-
nores de 5 Mb, combinando varios métodos citoge- das copy number variations (CNV), tanto hereda-
néticos y de biología molecular se han desarrollado das como de novo– pueden causar retraso mental
el FISH (fluorescent in situ hybridization), el PCR [36-38]. Para detectar estas variaciones, es necesa-
cuantitativo y la MLPA (multiplex ligation-depen- rio recurrir a técnicas que analizan todo el genoma
dent probe amplification), que pueden detectar des- en búsqueda de las mismas: CGH o chips (micro­
equilibrios menores a 1 Mb, pero que están limita- arrays) de polimorfismos de un solo nucleótido
dos por el bajo número de regiones que pueden (SNP), que permiten evaluar CNV y múltiples mu-
analizarse en una única reacción, y la hibridación taciones puntuales [39-41]. Se estima que con estos
genómica comparativa (CGH), actualmente realiza- estudios se pueden diagnosticar etiológicamente
da en microarrays, que permite una detección de cerca de un 20% de los casos de retraso mental [42].
desequilibrios a lo largo de todo el genoma con un El American College of Medical Genetics and Ge-
alto nivel de resolución. nomics actualizó sus guías hace unos años para re-
comendar los estudios basados en microarrays como
MLPA test de primera línea en la evaluación posnatal de
Es un método de PCR múltiple que se puede aplicar pacientes con RGD/retraso mental, trastorno del
para analizar varias regiones genómicas (en busca espectro autista o anomalías congénitas múltiples
de desequilibrios cromosómicos). En casos de re- [39,43-45]. Así, ésta es la técnica con más alto ren-
traso mental se utilizan particularmente los estu- dimiento diagnóstico en niños con RGD o retraso
dios que analizan mediante MLPA las regiones sub- mental inexplicable. Sin embargo, los resultados de
teloméricas de todos los cromosomas [24]. Las re- estas pruebas son a menudo complejos y requieren
giones subteloméricas son regiones dinámicas y ri- una cuidadosa confirmación e interpretación.
cas en genes [25-27]. Las variaciones subteloméri- Existen dos tipos de micoarrays disponibles: array
cas contribuyen a los polimorfismos normales en el CGH, que fue el primer método desarrollado y si-

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Trastornos del desarrollo

gue siendo el más utilizado, y arrays SNP, que basa- 1-2% [46]. Por lo tanto, estas técnicas tienen un alto
dos en la detección de SNP, permiten también la grado de sensibilidad pero menor especificidad por
detección de variantes del número de copias. Los los falsos positivos debidos a las variantes polimór-
arrays CGH consisten en dispositivos en los que las ficas. El rendimiento diagnóstico de los arrays CGH
sondas se insertan como cromosomas artificiales va aumentando en forma paralela a la evolución de
bacterianos (BAC) u oligonucleótidos. Durante el nuevos diseños tecnológicos y las bases de datos
método, los dos ADN genómicos, el de prueba del de referencia.
paciente y un control de referencia, se marcan con
dos fluorocromos diferentes y se hibridan a la ma- Secuenciación masiva
triz, luego los sistemas de captura de imagen digital
cuantifican las intensidades relativas de fluorescen- Mutaciones puntuales de efecto mayor se asocian a
cia de los ADN genómicos marcados que se hibri- un retraso mental no sindrómico. En la mayoría de
dan con cada sonda a través de cada cromosoma casos, en particular cuando son de novo, su detec-
para detectar desequilibrios genómicos, tanto dele- ción es virtualmente imposible si no se recurre a
ciones como duplicaciones. El método no detecta técnicas de secuenciación masiva de todo el exoma
el mosaicismo genético menor del 30% ni reordena- e incluso de todo el genoma [47-50]. Estas técnicas
mientos equilibrados como traslocaciones recípro- se han empezado a usar en el diagnóstico clínico de
cas balanceadas [46]. Recientemente, se han desa- algunas enfermedades genéticas y para la detección
rrollado matrices de oligonucleótidos con sondas de genes asociados a retraso mental [51-53]. La ta-
cortas, con mayor nivel de resolución y capacidad bla resume las técnicas de análisis genético utiliza-
diagnóstica pero con mayor tasa de falsos positivos das en el contexto clínico para el diagnóstico confir-
[18]. Los chips de polimorfismos de nucleótido úni- matorio/etiológico en enfermedades genéticas.
co (arrays SNP) son variantes de los arrays de oli-
gonucleótidos y también utilizan matrices que con- Diagnósticos genéticos moleculares específicos
tienen un elevado número de sondas para estudiar
a lo largo de todo el genoma o regiones específicas. Síndrome X frágil
Con los arrays SNP, se determina el genotipo del Es la causa genética más común de retraso mental,
paciente para varios SNP según la intensidad de la con una prevalencia del 0-28,6% [14]. En la pobla-
señal fluorescente de cada sonda. Dado que los ción uruguaya con retraso mental inespecífico se ha
arrays SNP brindan información del genotipo ade- encontrado una frecuencia del síndrome X frágil
más de la intensidad de señal, se pueden usar para del 5-6% [54]. Para aumentar el rendimiento diag-
detectar mutaciones puntuales, CNV, para identifi- nóstico de la prueba se recomienda practicarla en
car trechos de homocigosidad que pueden corres- retraso mental inexplicable tanto en varones como
ponder a consanguinidad o disomía uniparental [46]. mujeres, con historia familiar positiva compatible
Para determinar la patogenicidad de un CNV con herencia ligada al cromosoma X, con un fenoti-
hay que considerar varios criterios: frecuencia en la po físico y conductual compatible. Existen dos tipos
población general, coincidencia con un síndrome de técnicas moleculares para detectar la amplifi­
genético conocido, informe de pacientes con feno- cación CGG del gen FMR1: basadas en la reacción
tipo similar, si es heredado de un padre normal o es en cadena de la polimerasa o por la técnica de
de novo, detección en parientes sanos, tamaño de la Southern-blot, que es más sensible, pues detecta to-
CNV y el número y función de genes contenidos en dos los mosaicos.
la misma [46]. Por ejemplo, si la alteración se en-
cuentra en un número de individuos de la pobla- Retraso mental o discapacidad
ción general se considera benigno (polimorfismo), intelectual ligado al cromosoma X
el paso siguiente es el análisis de los padres para Aproximadamente el 10% de los casos de retraso
distinguir si es de novo o heredado de un padre fe- mental sindrómico y no sindrómico están ligados al
notípicamente normal; en ese caso, si bien es pro- cromosoma X, con más de 90 genes identificados
bable que sea benigno, existen casos en los que [55,56]. Dentro de los genes, se destaca el ARX, cu-
puede ser causa de la discapacidad. Si bien cuanto yas mutaciones se asocian a un retraso mental ais-
mayor sea el desequilibrio y más genes involucre es lado o asociado a otros trastornos neurológicos.
más probable que sea causal esto no siempre es ver-
dad. Estas situaciones no son raras y se estima que Otros
variantes de más de 500 kb están presentes en el Se debe considerar realizar estudios de síndrome de
5-10% de la población y superiores a 1 Mb en el Angelman y MECP2 en presentaciones atípicas de

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Tabla. Técnicas de análisis genético utilizadas en el contexto clínico para el diagnóstico confirmatorio/etiológico en enfermedades genéticas.

Resolución Cobertura Detecta

Citogenética Baja Todo el genoma Anomalías cromosómicas

CGH Media/alta Todo el genoma Desbalances cromosómicos

MLPA/FISH Alta Regiones de 1-2 Mb (cada experimento) Microalteraciones, traslocaciones

Mutaciones puntuales, SNP,


Genética molecular a Alta (potencialmente 1 pb) Variable (de 1 pb a todo el genoma)
mutaciones dinámicas, CNV

Epigenética b Alta/media Regiones genómicas < 1 Mb Alteraciones epigenéticas

Genes individuales o familias


Sobre proteínas c Alta Varias alteraciones
de genes (codificantes de proteínas)

Sobre metabolitos Alta/media Vías metabólicas específicas (enzimas) Errores innatos del metabolismo

a Secuenciación, RFLP, Southern-blot, chips de genotipado, secuenciación del exoma o del genoma completo. b Estudio de metilación. c Dosificación, varian-

tes estructurales, actividad enzimática, funcionales. CGH: comparative genomic hybridization (hibridación genómica comparativa); CNV: copy number varia-
tions; FISH: fluorescent in situ hybridization (hibridación in situ con fluorescencia); MLPA: multiplex ligation-dependent probe amplification (amplificación de
sondas múltiples dependiente de ligación).

síndromes clínicos reconocidos. Se estima que en- Se debe considerar la fenilcetonuria en países don-
tre un 1,5% de niñas y menos del 0,5% de varones de no se practica el cribado neonatal. Los errores
afectados de RGD o retraso mental se encuentran congénitos del metabolismo más frecuentes que pue-
mutaciones del gen MECP2. Se solicitarán estudios den determinar un retraso mental inespecífico son
moleculares para la investigación de enfermedad los trastornos del ciclo de la urea, homocisteinuria,
monogénica cuando exista sospecha firme de un déficit del transportador de creatina, aciduria 4-hi-
síndrome de herencia dominante, recesiva, ligada a X droxibutírica, enfermedad de Sanfilippo, déficit de
o mitocondrial y una orientación clínica de qué ge- adenilsuccinatoliasa, trastornos de la glucosilación
nes estudiar. de las proteínas y, más raramente, el déficit de trans-
porte cerebral de glucosa y el metabolismo del co-
Estudios neurometabólicos bre [57].
Trabajos recientes han mostrado un rendimien-
Los cribados metabólicos de rutina tienen un ren- to diagnóstico de hasta el 1,4% para trastornos de la
dimiento diagnóstico menor del 1% en los países glucosilación de las proteínas y hasta el 2,8% para el
donde se abordan los estudios de cribado neonatal trastorno de síntesis y transporte de creatina cere-
[4]. El rendimiento diagnóstico es del 0,2-8,4%; los bral [55]. Si bien el rendimiento es menor que las
resultados más altos se encuentran cuando las prue- pruebas genéticas, el beneficio e impacto sobre el
bas son selectivas y dirigidas ante la sospecha de un niño y la familia de diagnosticar un error congénito
trastorno basado en la historia y el examen físico del metabolismo resulta superior ante un trata-
[2,3,18]. Hay consenso en practicar estos estudios miento potencial. Esto sugeriría asociar a los estu-
en la evaluación inicial cuando existen elementos dios básicos la determinación de creatina/creatini-
clínicos, bioquímicos básicos o de neuroimagen orien- na en orina e isoelectroenfoque de transferrina.
tadores.
Las enfermedades neurometabólicas pueden pre- Otros
sentarse como encefalopatías estáticas (defectos del
transportador de creatina cerebral, aciduria 4-hi- En ocasiones, lo que se apunta a diagnosticar no son
droxibutírica) y pueden sospecharse en casos de las mutaciones sino sus consecuencias, ya sea a es-
afectación familiar, consanguinidad, descompensa- cala molecular (cuantificación del ARN, estudios de
ciones episódicas, regresión del desarrollo, hallaz- estructura, función o dosificación de proteínas), histo-
gos físicos o alteraciones de neuroimagen. patológico, en estudios funcionales, enzimáticos y

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Trastornos del desarrollo

sobre metabolitos. En muchos casos, es más senci- genetic evaluation of the child with mental retardation
llo, barato y rápido estudiar una alteración proteica or developmental delays. Pediatrics 2006; 117: 2304-16.
3. Shevell M. Global developmental delay and mental
que analizar directamente el gen que codifica esta retardation or intellectual disability: conceptualization,
proteína, por lo que la elección del test o tests que evaluation and etiology. Pediatr Clin N Am 2008; 55: 1071-84.
se van a emplear debe hacerse en cada caso y en 4. Shevell M, Ashwal S, Donley D, Flint J, Gongold M, Hirtz D,
et al. Practice parameter: evaluation of the child with global
función de los objetivos y beneficios esperados de developmental delay. Neurology 2003; 60: 367-80.
estudiar el genoma en ese paciente o esa familia. 5. Gilberg C, Sodestrom H. Learning disability. Lancet 2003;
362: 811-21.
6. Cigudosa-García J, Lapunzina-Badía P. Consenso para la
Rentabilidad del array CGH implementación de los arrays [CGH y SNP-arrays] en la
frente al cariotipo convencional genética clínica. URL: http://www.institutoroche.es/web/
pdf/2012/consenso_arrays.pdf. [20.04.2013].
Algunos trabajos han intentado estimar la rentabi- 7. Torrado M. Evaluación etiológica del retardo mental de
lidad de la prueba en relación con las pruebas tradi- origen genético. Algoritmo diagnóstico y nuevas técnicas
cionales [58,59]. Un estudio canadiense encuentra moleculares. Arch Argent Pediatr 2009; 107: 246-55.
8. Busa T, Chabrol B, Perret O, Longy M, Philip N. Novel PTEN
un 27,5% de diagnóstico positivo del array CGH so- germline mutation in a family with mild phenotype: difficulties
bre un 19% del cariotipo; el coste del estudio fue de in genetic counseling. Gene 2013; 512: 194-7.
700 USD del array CGH frente a 490 USD del ca- 9. Xu J, Chen Z. Advances in molecular cytogenetic for the
evaluation of mental retardation. Am J Med Genet 2003;
riotipo y el coste por diagnóstico considerando prue- 117C: 15-24.
bas sucesivas fue de 2.500 USD para el array CGH 10. Gropman AL, Batshaw ML. Epigenetics, copy number
frente a 2.300 USD del cariotipo [59]. Estos trabajos variation, and other molecular mechanisms underlying
neurodevelopmental disabilities: new insights and diagnostic
concluyen que, analizando todas estas variables, es approaches. J Dev Behav Pediatr 2010; 31: 582-91.
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Trastornos del desarrollo

Advances in the identification of the aetiology of mental retardation

Summary. Despite the advances made in the field of genetics, neuroimaging and metabolic diseases, half the children with
mental retardation remain without an aetiological diagnosis. A genetic base is estimated to be present in 40% of cases,
environmental teratogens and prematurity in 20%, metabolic diseases in 1-5% and multifactor causes in 3-12%. The family
history, the detailed medical records required by dysmorphology and the neurological examination will make it possible
to establish or suspect a diagnosis in two thirds of the cases and, in the others, scanning tests will be able to confirm an
aetiology. The order of the studies will be guided by the clinical picture: karyotype if a chromosome pathology is suspected,
neuroimaging if there is some abnormality in the neurological examination and specific genetic or neurometabolic studies
to confirm the clinical presumption. The estimated diagnostic performance of the different techniques is: karyotype, 9%;
fragile X, 5%; subtelomeric abnormalities, 4%; neurometabolic diseases, 1%, and new microarray techniques, 19%. As a
result of the higher performance and cost-benefit ratio, today the recommended procedure, as the first line of treatment
for unexplainable cases of mental retardation, is the study of microarrays. Although the outcomes of these tests are
complex and require confirmation and careful interpretation by a specialist in medical genetics, the advances in their
technological development and resolution, together with lower costs make this technique a fundamental tool in the
identification of the aetiology in these children.
Key words. Aetiology. Mental retardation. Molecular genetics. Neurodevelopment.

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