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Fitness mental

El entrenamiento cognitivo es un conjunto de técnicas y actividades que


se dirigen a estimular y mantener el funcionamiento cognitivo, o
aumentar al máximo el rendimiento cognitivo, siempre actuando sobre
aquellas capacidades y habilidades que se encuentran en un nivel todavía
normal.

El ejemplo de usuario más típico para el entrenamiento cognitivo sería


una persona mayor que tiene un cierto declive cognitivo debido al
envejecimiento normal y quiere mantenerse un buen nivel cognitivo; o un
estudiante o deportista de élite que desea tener el máximo rendimiento
cognitivo en su actividad profesional.

En muchas ocasiones estos tres conceptos (estimulación, entrenamiento


o rehabilitación) se utilizan de forma indistinta.

a) La estimulación cognitiva abarca todas las técnicas de forma


general.
b) El entrenamiento cognitivo se dirige al fortalecimiento y
potenciación de las funciones cognitivas que se mantienen
preservadas.
c) La rehabilitación cognitiva está orientada a la mejora y
recuperación de aquellas capacidades que se han visto afectadas y
que presentan un declive o un déficit en su funcionamiento.

En todos los casos se considera la neuroplasticidad cerebral como la


base biológica de las mejoras.

En el caso de que la persona no presente un deterioro cognitivo asociado


a una enfermedad, el objetivo de la estimulación cognitiva
(entrenamiento cognitivo) es lograr la estimulación, mejora
y funcionamiento óptimo de las capacidades cognitivas. En el caso de
que la persona presente deterioro cognitivo, el objetivo principal de la
estimulación cognitiva (rehabilitación cognitiva) será la recuperación
y restablecimiento de las funciones alteradas. De este modo, se procura
la ralentización del  deterioro consiguiendo una mayor autonomía
funcional durante más tiempo.

Bases científicas de la estimulación cognitiva

La estimulación cognitiva tiene una base neurobiológica que sustenta su


utilidad como herramienta para mejorar y rehabilitar las distintas
capacidades cognitivas. Para comprender estos sustratos
neurobiológicos es importante conocer algunos conceptos
relacionados. Veamos brevemente los dos más importantes, la
neuroplasticidad y la reserva cerebral.

 La plasticidad cerebral permite al cerebro, y más concretamente a


sus neuronas, realizar un proceso de regeneración tanto funcional
como anatómico mediante el establecimiento de nuevas
conexiones sinápticas. La estimulación o entrenamiento cognitivo
tiene como objetivo el aumento en el número y consolidación de
estas conexiones para obtener una mejora en el funcionamiento
cerebral en términos de rapidez y eficacia de la transmisión de
información.
 La reserva cerebral es la capacidad que tiene el cerebro para tolerar
las lesiones. Al incrementar la reserva cerebral los síntomas de
déficits cognitivos retrasan su expresión y, por tanto, podría decirse
que la reserva cognitiva se mantiene o incluso mejora.
Cada cerebro es distinto, y por ello hay que adaptar siempre, a cada caso
particular, cualquier intervención relacionada con la salud y bienestar
mental, así como las técnicas y programas de estimulación cognitiva. Tal
y como indica Pascual-Leone, los mecanismos plásticos del cerebro se
encuentran asociados a la edad y, aunque todos los cerebros aparentan
ser parecidos, su estructura básica cambia y los hace diferentes los unos
de los otros. 

¿Qué capacidades cognitivas pueden entrenarse?

 Atención: capacidad de generar, seleccionar, dirigir y mantener un


nivel de activación adecuado para procesar la información
relevante.
 Percepción: codifica y coordina las diversas sensaciones
elementales para darles un significado.
 Comprensión: capacidad de entender, analizar y reflexionar sobre la
información que recibimos.
 Memoria: registra, almacena y recuperar las distintas experiencias
ya sean ideas, imágenes, acontecimientos, etc.
 Lenguaje: sistema de signos lingüísticos que nos permiten
comunicarnos, tanto de forma oral como escrita.
 Velocidad de procesamiento: capacidad que establece la relación
entre la ejecución cognitiva y el tiempo invertido. Permite procesar
información de forma rápida y automática.
 Orientación: capacidad de ser consciente de uno mismo y del
contexto en que nos encontramos, es decir, ser conscientes a nivel
personal, tiempo y lugar.
 Razonamiento: capacidad para resolver problemas (solución de
problemas), extraer conclusiones y aprender de manera consciente
de los acontecimientos de manera que podamos establecer
relaciones causales y lógicas.
 Aprendizaje: transformaciones relativamente estables en el
comportamiento suscitadas por distintas experiencias que dan
lugar a la adquisición de nuevos conocimientos y habilidades.
 Praxias: capacidad que tenemos para realizar movimientos
voluntarios, intencionados y organizados para llevar a cabo un plan
o alcanzar un objetivo.
 Gnosias: capacidad para reconocer información previamente
aprendida a través de los sentidos.
 Control ejecutivo: actividades mentales complejas encargadas de
integrar, organizar y coordinar el resto de capacidades cognitivas.

Técnicas de estimulación más comunes

Existen variedad de técnicas de estimulación que pueden, según su


metodología de trabajo, dividirse en dos grupos complementarios:  

1) Orientadas a utilizar y trabajar las capacidades cognitivas, como


los cuadernos de ejercicios de estimulación cognitiva, los juegos de
entrenamiento cerebral o programas online, o el neurofeedback
clásico. El  foco está en la capacidad cognitiva y no en el área
cerebral específica.
2) Orientadas a mejorar el funcionamiento de las áreas
cerebrales responsables de las capacidades cognitivas, la
estimulación eléctrica funcional (neuroestimulación) o la
neurotecnología (neurofeedback moderno). El  foco está en
modificar un tipo de actividad cerebral específica y no en la
ejecución de una tarea.
Bibliografia

https://www.bitbrain.com/es/blog/que-es-estimulacion-cognitiva

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