Jesús Manuel Rodríguez Córdova

Grupo: E127

Pedagogía e Historia de la
Educación

Fidel Lorenzo Hernández

Actividad No. 4
Ensayo: Formador de
formadores

Comalcalco, Tabasco 21 de
noviembre de 2022
La pedagogía es definida como “la ciencia que se ocupa de la educación y la enseñanza”
(RAE, 2006) Y, aunque muchas personas la asocian con los niños, lo cierto es que se centra
en cualquier etapa de la vida. Un pedagogo estudia la historia y algunos aspectos de la
sociedad para comprender cómo ha evolucionado la educación, así como los métodos y
condiciones de la enseñanza. Así mismo, estudia el comportamiento de las personas
cuando aprenden y retoma temas de filosofía, sociología y psicología, por mencionar
algunos. A partir de estudios, pruebas y teorías, un pedagogo es capaz de proponer nuevos
métodos o planes educativos, pues sabe cómo piensan, razonan y aprenden las personas
en diferentes contextos.

¿Cómo debe influir la pedagogía en la práctica educativa?

La función social de la enseñanza debe estar direccionada a cumplir con la finalidad

educativa cimentada en unos principios formativos que marca la pedagogía, a lo largo del
proceso de enseñanza-aprendizaje, este proceso debe llevar a los estudiantes a descubrir
sus potencialidades para alcanzar sus objetivos propedéuticos. Para desarrollar estas
capacidades en los estudiantes hay que tener en cuenta que estas se agrupan en diferentes
clasificaciones como son las cognitivas o intelectuales, las motrices, de equilibrio y
autonomía personal (afectivas), de relación interpersonal, de intersección y actuación
social.

La nueva configuración sociocultural e histórica enmarcada en una sociedad globalizada

donde emergen diferentes culturas que van ganando espacios socializadores diferentes a
los tradicionales como son la familia y la escuela, se han ido convirtiendo en espacios
hegemónicos debido a los fenómenos tecnológicos que producen una serie de
transformaciones, donde se construyen nuevos códigos culturales, simbologías a partir del
lenguaje digital. Se centran en la realidad de esa transformación sociocultural que se vive,
convirtiéndose en el escenario socializador virtual donde se dan prácticas educativas
paralelas a la educación familiar y escolar pero determinadas por los medios masivos de
comunicación. Cuando la pedagogía y todas sus vertientes influyen en la práctica educativa
se pueden resolver los panoramas versátiles del mundo real y cotidiano, como el expuesto
anteriormente logrando aprovechar todas las herramientas mediante estrategias que lleven
al estudiante de su ser individualista, a lograr construir de manera consciente su aprendizaje
de manera reflexiva y crítica para estimular la intención de transformar mediante situaciones
de la vida cotidiana el medio que lo rodea.
¿Cómo debe vincular el formador los conocimientos teóricos a su labor
de enseñanza?

En la actualidad, se hace necesario considerar que la escuela no sólo debe formar en

capacidades intelectuales sino también formar integralmente a los jóvenes en su autonomía
y equilibrio personal, que responda a una intersección social basados en contenidos,
intenciones educativas, habilidades técnicas y conceptos (Zabala, 2008). Es precisamente
en este punto en donde vinculamos la formación pedagógica que posee el formador para
echar mano de su capacidad para transformar el saber que posee (científico) al saber
posible de ser enseñado, en el cual el docente realiza una despersonalización de su
conocimiento de tal forma de que los educandos se apropien de él.

¿Cuáles deberán ser las competencias que un formador debe

tener para su labor educativa?
Desde mi experiencia se deben contar con conocimientos, habilidades y destrezas que
faciliten el ya de por sí complejo proceso de enseñanza aprendizaje, por citar algunas:

Dominio cognitivo, psicomotor y afectivo para implementar el proceso de enseñanza de su

asignatura. Todo profesor debe tener experiencia en el sector sobre el que impartirá la clase
para poder compartir con los alumnos su conocimiento.

Pasión por enseñar, un buen profesor debe ser capaz de guiar a estas personas y ayudarles
a entender y a aplicar estos aprendizajes.

Ser organizado, los formadores deben ser capaces de compartir sus conocimientos a sus
alumnos, por lo que la planificación y estructuración de ideas es muy importante para
facilitar la transferencia del conocimiento. Por eso es importante tener una planeación
didáctica bien estructurada, evitando la improvisación y reflexionando a partir de los
resultados que obtiene.

Capacidad de autoaprendizaje, el profesor debe ser consciente que el mundo y su sector

está en constante evolución y siempre habrá nuevos temas por aprender. Debe tener la
mente abierta para ser capaz de incorporarlo en su carrera profesional y en su itinerario
formativo, sobre todo tener la capacidad de aprender de manera bidireccional como lo
menciona la educación liberadora de Freire.
Destreza comunicativa, debe saber comunicarse verbalmente, pero también no
verbalmente. Debe saber cómo iniciar la comunicación con los alumnos, saber exponer y
ser capaz de mantener su atención. En el caso de las formaciones presenciales, debe
entender a los alumnos a través de la escucha activa y saber dirigir las actividades según
sus necesidades. La comunicación no verbal también es muy importante para transmitir
seguridad y apoyar las explicaciones.

Habilidades interpersonales, el formador debe tener la habilidad no solo saber compartir el

conocimiento, también debe saber llegar a sus alumnos a través de emociones positivas:
motivar, inspirar y fomentar la participación. Porque una clase que no está motivada, es una
clase que no aprende.

Compromiso con la docencia, la formación no debería ser un trabajo más. La docencia,

como la educación, está inspirada en una ética de la responsabilidad, por eso un buen
profesor debe pensar en cuáles son las consecuencias de sus actos. Esto implica aceptar
ciertas obligaciones como escuchar activamente sin juicios ni prejuicios, orientar y guiar a
los alumnos en el aprendizaje, incorporar todos los recursos posibles para mejorar la
actividad, aceptar críticas constructivas, que faciliten la autorreflexión de su intervención
educativa

¿Cómo se puede lograr una educación de calidad con una adecuada

preparación del docente?
Analizando en todo momento el contexto en el que se llevara a cabo la acción de enseñar,
para que de esta forma el modelo a implementar sea pertinente, estableciendo planes y
programas de estudio como lo mencione contextualizados al entorno y realidades
operativas. Pienso que el docente se debe preparar, actualizar e innovarse de manera
constante, pero de igual forma, el sistema educativo para el cual evidentemente se trabaja,
debe ser desarrollado por los docentes y para la sociedad emergente.
Fuentes de información.

REAL ACADEMIA ESPAÑOLA: Diccionario de la lengua española, 23.ª ed., [versión

23.5 en línea]. <https://dle.rae.es> [21 de noviembre de 2022].

Agudelo at al, 2011, La importancia de las prácticas pedagógicas en el proceso de

enseñanza y aprendizaje, recuperado de:
https://repositorio.ucp.edu.co/bitstream/10785/6990/1/CDMPDH69_1.pdf