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República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación Superior


Universidad Nacional Experimental de los Llanos Centrales (UNERG)
Área de Ingeniería en Sistemas
Electiva I (Conducta Humana)
Sección 2

Profesora: Bachiller:
Luz Franco David López C.I:24.420.782

San Juan de los Morros Octubre 2022


Resulta muy fácil confundir los conceptos de emoción y sentimiento, pero para el
estudio de la conducta humana es necesario aclarar que una emoción es la respuesta
fisiológica que da origen a cierto comportamiento, mientras que un sentimiento solo es el
reflejo en el estado de ánimo de una persona a raíz de una emoción, por lo que el sentimiento
es algo secundario en una emoción.

Las emociones causan reacciones en un amplio espectro del individuo, por lo que sus
impactos se pueden distribuir en tres componentes. Componente conductual, este
componente comprende todas las acciones que lleva a cabo un ser vivo ante una situación
determinada que desencadena una emoción, como en el caso del miedo la pauta de conducta
será la huida. Componente neurovegetativo que comprende todos los cambios en el sistema
autónomo que permiten que tenga lugar una conducta determinada, siguiendo el ejemplo del
miedo se producirá una activación de la rama simpática del sistema nervioso para ganar
tensión muscular, una mayor actividad cardiaca y una desactivación de la rama
parasimpática. Componente hormonal que comprende la secreción de hormonas que
contribuye a fortalecer los cambios neurovegetativos, con el miedo se segregará adrenalina
y noradrenalina, que facilitaran que la sangre llegue a los músculos al hacer que esta se
bombee más rápido.

Uno de los estados emocionales más común y peligroso en las últimas décadas es el
estrés. El estrés es un factor defensivo de nuestro organismo y normalmente funciona para
salvarnos la vida. Pero este mismo estrés se vuelve peligroso cuando vivimos en un
permanente estado de emergencia o peligro y en un grado desmedido puede ser la causa
principal de numerosas enfermedades y dolencias.

Un estado continuo de estrés, estimula al Hipotálamo y el sistema límbico de la


porción inferior del cerebro para enviar impulsos hacia la glándula hipófisis. La hipófisis
produce una hormona llamada somatotrofina, que en exceso en el torrente sanguíneo, induce
a las glándulas suprarrenales a producir excesiva cantidad de otra hormona llamada
desoxicorticosterona y otras llamadas corticoides proinflamatorios.
La desoxicorticosterona y los corticoides proinflamatorios, forman parte integral de
los sistemas defensivos del organismo, ellos producen: aumento de la presión arterial,
aceleración de los latidos cardíacos y vasoconstricción en los órganos internos. Esto ocasiona
un proceso de inflamación que tiene por objeto, atrapar a los gérmenes patógenos de modo
que puedan ser destruidos. Pero cuando esta producción de hormonas no es causada por un
daño físico, sino por pensamientos negativos y especialmente cuando ocurre a lo largo de un
extenso período de tiempo, el efecto es destructivo hasta el grado de ocasionar una verdadera
enfermedad física.

Como se puede apreciar los estados emocionales representan un importante factor en


la conducta humana volviéndose así un punto importante a cuidar tanto como la salud física.
Esto nos lleva al desarrollo de la objetividad, puesto que las emociones representan un pilar
fundamental de la percepción de la realidad. Cuando un individuo no es objetivo, se centra
en las emociones y no en los problemas. Observa las situaciones desde un punto de vista
temperamental y visceral, pero no el trasfondo o contexto.

Ser objetivo supone una proeza considerable, porque exige ver los problemas y las
situaciones con un enfoque que equilibre adecuadamente emociones y razonamiento. Esto
por supuesto es complicado cuando las conclusiones se basan más en los sentimientos y las
emociones que los generan. Por ello el habito de la objetividad es tan importante, porque
permite dar su justo valor a los acontecimientos y obrar de una forma coherente y racional.

El habito de la objetividad permite tomar decisiones más eficientes, mejorar


relaciones humanas, tiene un impacto positivo en la interacción con otras personas. La
objetividad permite a cualquiera ser más justo con quienes se interactúe fomentando
relaciones sanas y duraderas, además de ayudar a mantener un mejor control sobre las
emociones y por ende a disfrutar de un mejor estado de salud.

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