Está en la página 1de 21

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD BICENTENARIA DE ARAGUA


VICERRECTORADO ACADÉMICO
ESCUELA DE PSICOLOGÍA
SAN JUAQUIN DE TURMERO – ESTADO
ARAGUA

ANÁLISIS CRÍTICO

INTELIGENCIA EMOCIONAL Y LOS PROCESOS PSICOFISIOLÓGICOS


IMPLICADOS EN LA RESPUESTA EMOCIONAL

AUTORA DIVIANA SÁNCHEZ


C.I 19.303.892
TUTORA: LENYS URBINA

San Juaquín de Turmero, febrero del año 2023.


Introducción
Hablar de la psicofisologia es hablar de una conexión de distintas
disciplinas que son parte de esta pues la psicofisiología juega un papel
importante en la comprensión de la conducta humana y, por ende,
contribuye al desarrollo de la psicología en general.

A través de la psicofisiologia conoceremos las emociones que son


procesos psicológicos que nos prestan un valioso servicio, al hacer que
nos ocupemos de lo que realmente es importante en nuestra vida. Como
si fuera un sistema de alarma, nos señalan las cosas que son peligrosas o
aversivas, y que por lo tanto debemos evitar, y las cosas que son
agradables o apetitivas, y a las que por lo tanto debemos acercarnos.
Pero las emociones pueden ser también consideradas como uno de los
procesos psicológicos más complejos y difíciles de explicar debido a esto
y para dar claridad conoceremos los procesos biológicos de las
emociones, su antropología fisiología, psicología y variabilidad para darle
sentido a su estudio.

A continuación podremos reconocer a través de este estudio la


importancia de conocer nuestra fisiología especialmente el
funcionamiento del sistema nervioso que influye en las emociones, por tal
razón lo acá expuesto te ayudara a tener claridad sobre tu respuesta
emocional sobre la vida y las consecuencias que esto genera.

Psicofisiología
El estudio de la Psicofisiología permite conocer la relación entre los
procesos psicológicos y fisiológicos, es decir, la comprensión y
explicación de la conducta humana, tanto normal como patológica, a la luz
de procesos fisiológicos que la controlan (Portellano, 2005; Carlson,
2010).

El objetivo de la psicofisiología es estudiar la conducta del ser humano y


los procesos físicos que la organizan. Para ello, esta disciplina se vale de
algunas técnicas con las que se captan señales fisiológicas.

La psicofisiología es la rama de la psicología relacionada con las bases


fisiológicas de los procesos psicológicos. Es una disciplina de
la psicobiología y el objeto de estudio es el ser humano. El objetivo de la
psicofisiología es el estudio de la conducta y de los procesos que la
organizan. Concretamente, se trata del estudio de nuestros procesos
somáticos y fisiológicos.

Desde su nacimiento en el último tercio del siglo XIX hasta nuestros días,
su objeto de estudio se ha mantenido constante. Sin embargo, el avance
tecnológico y la influencia de distintas corrientes de pensamiento han
modulado la forma de abordar el estudio del cerebro en relación con la
conducta.

En la actualidad, el cerebro se investiga empleando técnicas provenientes


de muy diversas disciplinas. Así, podemos encontrar relación entre la
psicofisiología y la psicología fisiológica, la neuropsicología, la
psicoendocrinología, la psiconeuroinmunología o el área psicobiológica de
las neurociencias.

El objetivo de la psicofisiología es estudiar la conducta del ser humano


y los procesos físicos que la organizan. Para ello, esta disciplina se
vale de algunas técnicas con las que se captan señales
fisiológicas. Todas estas señales que se captan se traducen en
señales eléctricas para ser analizadas.

La psicofisiología aborda una variedad de temáticas relacionadas con

los procesos somáticos y fisiológicos de los seres humanos. Entre

ellos destacan:

- La sensación y percepción de los seres humanos, en donde


se abordan temáticas específicas como la visión, el
equilibrio, la motricidad, la audición, el olfato, etc.
- Las estructuras físicas del sistema nervioso y sus funciones.
- Los ritmos circadianos y los mecanismos neuronales
implicados.
- Procesos cognitivos superiores, como el aprendizaje, la
memoria y el lenguaje.
- Plasticidad neuronal.
- Sistemas neuronales y estructuras del cerebro relacionadas
con las emociones.

Procesos biológicos de las Emociones

Trujillo y Rivas (2005) representan las aportaciones de Darwin Carles el


fundamento de lo que posteriormente serán las formulaciones biológicas y
las formulaciones expresivas,  establece que los movimientos corporales
y las expresiones faciales cumplen un papel de comunicación entre los
miembros de una especie, transmitiendo información acerca del estado
emocional del organismo. Las emociones, así como la expresión de las
mismas, son innatas, aunque se admite la posibilidad de que los factores
de aprendizaje puedan ejercer algún tipo de influencia sobre la expresión.
Precisamente, esta posible influencia de los factores de aprendizaje
permite que las emociones evolucionen a través del tiempo para
incrementar la probabilidad de que el sujeto y la especie se adapten a las
características cambiantes del ambiente externo.

La expresión de las emociones se encuentra modulada por tres principios:


a) Principio de los hábitos asociados con la utilidad, según el cual el modo
en que los organismos expresan las emociones ha tenido un valor
adaptativo. b) Principio de antítesis, según el cual se argumenta que la
expresión de emociones opuestas implica también tipos opuestos de
conducta. c) Principio de la acción directa del sistema nervioso excitado,
según el cual, debido a que con los otros dos principios no se pueden
categorizar todas las emociones, Darwin apunta que algunas expresiones
emocionales aparecen únicamente porque se producen cambios en la
actividad del sistema nervioso.

Se destaca los planteamientos etológicos, a saber: los movimientos de


intención y los estímulos no verbales. Los movimientos de intención se
refieren a los patrones de conducta que acompañan a la expresión
emocional; son movimientos que avisan de, o anteceden a, la aparición
de una emoción. Los estímulos no verbales se refieren a las expresiones
faciales, los gestos y gritos que acompañan a la conducta
emocional. También presentes genéricamente según la "Teoría de
James-Lange", el principal punto se sitúa en el hecho de que el feedback
aferente desde las vísceras y músculos esqueléticos produce la emoción.
Y la Teoría de la identidad de la emoción (Beck, 2000), pues supone la
existencia de una relación específica entre la experiencia de una emoción
concreta y la activación de unos cambios fisiológicos particulares. 

Durante los procesos emocionales se consideran, particularmente, activos


a los siguientes centros del Sistema Nervioso Central (SNC) (Rosenzweig
y Leiman, 2005):
– La corteza cerebral forma parte del SNC. La corteza cerebral activa,
regula e integra las reacciones relacionadas con las emociones.

– El hipotálamo forma parte del sistema límbico. Este se dedica a la


activación del sistema nervioso simpático. Este centro está relacionado
con emociones como el temor, el enojo, además de participar como
activador de la actividad sexual y la sed.

– La amígdala está relacionada con las sensaciones de ira, placer, dolor y


temor. La extirpación de la amígdala causa complejos cambios en la
conducta.

– La médula espinal. Todas las emociones están relacionadas con


determinadas respuestas fisiológicas a las emociones. Según lo anterior
es posible q las reacciones emocionales estén relacionadas con cambios
fisiológicos necesarios para que el individuo haga frente a la situación o
bien para la transmisión de mensajes o señales de respuesta a otros
individuos.

– Formación reticular, el fabricante de la realidad. La formación reticular


como un proceso de filtrado e interpretación básica de la información
percibida por el individuo.

Antropología de las Emociones

El antropólogo francés David Le Breton ha desarrollado las implicaciones


teóricas y epistemológicas de una posible antropología de las emociones
orientada hacia el campo de la medicina, la antropología del cuerpo y la
salud. De acuerdo con este autor, la antropología de las emociones debe
permitir la superación del punto de vista cartesiano, es decir, del dualismo
mentecuerpo que caracteriza al pensamiento occidental moderno:
El modelo dualista de la metafísica occidental que distingue el
cuerpo y el alma, lo orgánico y lo psicológico, y que desemboca
en esa distribución del trabajo que hace que en nuestras
sociedades el cuerpo corresponda al análisis de los médicos y el
espíritu a la sagacidad de los psicólogos o los psicoanalistas.
Pero en el imaginario social de un gran número de comunidades
humanas, como lo hemos mostrado en otra parte, el cuerpo no se
distingue necesariamente del hombre [Le Breton 1999: 101].

La antropología de las emociones debe permitir ir más allá de las


concepciones acerca de lo psico-somático, que siguen siendo en gran
medida dualistas, pues conservan la distinción entre psique y soma. Así,
por ejemplo, fenómenos como el de la llamada eficacia simbólica,
estudiado por Claude Lévi-Strauss, deberían interpretarse —sostiene Le
Breton— no ya de acuerdo con la idea de una influencia psíquica sobre
los procesos fisiológicos, sino progresando desde una visión psico-
somática, a la formulación de un modelo de fisiosemántica:

Hablar de acción psicológica sin duda reduce en algo la


estructura antropológica aquí presente, planteando como un
hecho definitivo lo que es un problema infinito: la validez de lo
psicosomático, en el sentido más estrecho del término, es decir, el
hombre como suma de una psique y un soma con efectos de
resonancia mutua. Pero precisamente este enfoque es hoy en día
criticado por depender demasiado de la herencia dualista frente
a la cual pretende plantear una alternativa. La perspectiva
planteada aquí permite justamente pasar de una psicosomática a
una fisiosemántica que abra una vía menos ambigua y bastante
más fértil [Le Breton 1999: 101].

También la etnopsiquiatría y la antropología médica se han interesado por


las emociones, los estados de ánimo y sus manifestaciones corporales.
Vale la pena mencionar el interés que revisten los estudios sobre
“síndromes culturales”; los mismos ponen de relieve la influencia decisiva
del significado cultural en la producción social de los estados de salud y
enfermedad.
La antropología de las emociones debe permitir la superación del punto
de vista cartesiano, es decir, del dualismo mente - cuerpo que caracteriza
al pensamiento. Permitir ir más allá de las concepciones acerca de lo
psico-somático, que siguen siendo en gran medida dualistas, pues
conservan la distinción entre psique y soma. Pare ello, las distintas
investigaciones sobre las emociones, han sustentados los estudios en
diferentes modelos entre los que se encuentran:

- Enfoque naturalista:

Procede de las investigaciones del comportamiento humano presentadas


por Darwin (1872) en Mesa (2015) en su obra “la expresión de las
emociones en el hombre y en los animales”. Bourdin (2016) lo explica
como una perspectiva naturalista-universalista, donde se afirma que
existe un conjunto limitado de emociones básicas o primarias,
universales, posiblemente innatas, que suelen describirse asociadas a
reacciones corporales, fisiológicas, observables. De acuerdo con este
argumento, las lenguas dan nombre a las emociones básicas empleando
formas sonoras que en cada caso son distintas, pero cuyos referentes
son, sin embargo, los mismos para cualquier cultura o grupo humano. La
explicación ofrecida por Darwin, y por los autores contemporáneos que
han seguido su enseñanza, es que las expresiones faciales de las
emociones son universales porque son transmitidas genéticamente. En la
perspectiva evolucionista de las emociones, inaugurada por Darwin, las
manifestaciones faciales corresponden a funciones cognoscitivas,
perceptivas y de comportamiento, que representan ventajas adaptativas
de nuestra especie,

 Otros autores que estudiaron las emociones básicas fueron Frijda (1988)
y Plutchik (1980). Estos consideraban que las emociones: ocurren debido
a un cambio en el ambiente, se presentan rápidamente, causan cambios
en la atención y el pensamiento, varían en intensidad, causan cambios
fisiológicos, motivan ciertos comportamientos, surgen de manera
automática, desaparecen rápidamente y, tienen una experiencia subjetiva.

- Modelo de valoración

Cada individuo evalúa, según Mesa (2015) de manera continua, los


acontecimientos a su alrededor de acuerdo a su importancia para sus
objetivos generales o su bienestar personal; las teorías de valoración
sostienen que las emociones surgen de estas evaluaciones detalladas de
eventos vividos. El enfoque de valoración es en sí un enfoque cognitivo,
pues las emociones se remontan a las evaluaciones de eventos las
valoraciones pueden producirse de manera consciente y deliberada, pero
son principalmente automáticas e inconscientes. El medio puede cambiar
rápidamente, por lo que para ser útiles las evaluaciones deben ser igual o
más rápidas que estos cambios.

Para Le Breton (2013) la emoción responde a una actividad cognitiva


ligada a una interpretación del individuo de la situación en la que está
inmerso. Según Descartes Participan también en su aparición procesos
inconscientes. Permite a veces cierto control, al menos un posible juego
con su expresión para adaptarse mejor a las circunstancias, siguen
lógicas personales y sociales, tienen su razón de ser. El individuo
interpreta las situaciones a través de su sistema de conocimiento y de
valores. La afectividad desplegada es su resultado. Aristóteles fue
probablemente el primero en subrayar el papel activo del individuo ante
las emociones que lo atraviesan.

- Enfoque construccionista psicológico

Mesa (2015) comparte desde las teorizaciones Gendron y Barret de


identifican el enfoque psicológico que la emoción partiendo de la idea de
que la mente se divide en distintas categorías mentales que reflejan
facultades modulares como las emociones (la ira, el asco, el miedo, la
felicidad, la tristeza), cogniciones (la memoria, la atención, decisiones), y
la percepción (las imágenes visuales, sonidos auditivos) en el que los
acontecimientos mentales son causados por un conjunto de operaciones
o elementos comunes más básicos.

Los enfoques construccionistas de estos autores están unidos por la


suposición de que las emociones son compuestos psíquicos que se
forman a partir de componentes psicológicos más básicos y que no son
en sí mismos específicos de la emoción. Los modelos de construcción
psicológica separan las emociones en categorías, cada categoría se
asocia con una serie de resultados medibles y las emociones son los
productos emergentes de un conjunto de componentes psicológicos. Un
componente de este modelo psicológico es que funciona al recibir algún
tipo de información del cuerpo. Este primer ingrediente ha sido descrito
como sensaciones primas afecto, o como estados de motivación
necesarios para acercarse o evitar objetos en el ambiente. Un segundo
componente es el proceso mediante el cual los estados sensoriales o
afectivos internos se hacen significativos al relacionarse o ser causados
por el entorno externo. Este análisis de significado puede ser producido
por ideas, por referencias sociales, o por atribución. 

Fisiología de la Emoción

Componentes de las Emociones

El componente fisiológico de la emoción tiene como objetivo la activación


y preparación física del organismo y comporta cambios en la actividad del
sistema nervioso y sistema endocrino de la persona, el componente
conductual-expresivo se caracteriza por la presencia de cambios
conductuales, posturales, de expresión facial y el cognitivo-experiencial se
caracteriza por la experimentación subjetiva de la emoción y por los
pensamientos.
Así, para hablar de emoción y no de otro conjunto de reacciones afectivas
hemos de encontrar:

- Respuestas neurofisiológicas y bioquímicas: Los procesos


emocionales están estrechamente vinculados a los fisiológicos. Las
bases biológicas de las emociones incluyen diversas áreas del
cerebro, el sistema nervioso autónomo y el sistema endocrino.
- Un componente conductual o expresivo que comprende tanto
conductas no verbales (lenguaje corporal: expresiones faciales,
movimientos corporales, conducta de aproximación-evitación)
como verbales (entonación de la voz, intensidad, sonidos,
etcétera). Este componente de la emoción está muy influido por
factores socioculturales y educativos que pueden modular la
expresión emocional. De esta manera, la expresión emocional
varía a lo largo del desarrollo ontogenético de la persona, siendo
los adultos los que ejercen un control emocional más grande que
los niños.
- Un componente cognitivo, relacionado con la vivencia afectiva y
con el hecho de percibir la emoción en sí y la situación en la que se
desencadena, de experimentar propiamente la emoción y con la
evaluación de dicha situación. Hace referencia a los estados
subjetivos calificados como agradables o desagradables y con el
reconocimiento consciente que se hace del estado emocional, por
ejemplo decir que “soy feliz” o “me siento culpable”.

Psicología de las Emociones.

Las Emociones son materia de estudio de la psicología, las neurociencias,


y más recientemente, la inteligencia artificial.
El significado etimológico del término emoción es: el impulso que induce
la acción.

En psicología, Emoción se define como aquel sentimiento o percepción de


los elementos y relaciones de la realidad o la imaginación. Este
sentimiento se expresa físicamente mediante alguna función fisiológica
como cambios en la respiración, sudoración o en el pulso cardíaco, e
incluye algunas reacciones de conducta como relajación, bienestar,
ansiedad, estrés, depresión, agresividad o llanto (Ramos, 2005).

Las emociones son procesos neuroquímicos y cognitivos relacionados


con la arquitectura de la mente (toma de decisiones, memoria, atención,
percepción, imaginación). Han sido perfeccionadas por el proceso de
selección natural como respuesta a las necesidades de supervivencia y
reproducción (Kail y Cavanaugh, 2006).

Dimensiones en las Emociones

Para tener una mayor compresión del comportamiento en general, y de


las emociones en particular, se debe considerar el modelo biopsicosocial
y el papel que juegan las otras dos dimensiones del organismo, la
biológica y la social, respectivamente.

La otra gran dimensión es la transpersonal, o espiritual, que también debe


ser considerada para tener una compresión integral del comportamiento
humano. Así, un estilo de pensamiento rígido e inflexible, puede generar
emociones negativas como la tendencia a la ira y el coraje (explosiones
emocionales desmesuradas),  lo cual puede estar mediado por la
reactividad cardiovascular (biológico), en un ambiente social estresante
(gritos, maltratos, descalificaciones, etc.). (Oblitas, 2006)
Por lo demás, se han propuesto varios modelos explicativos de las
emociones, entre los que destacan primero, la teoría de James y Lange,
que establece que los sentimientos emocionales suceden a la activación
corporal y que provienen de la consciencia de la activación; segundo, la
teoría de Cannon y Bard, que establece que la actividad del tálamo causa
los sentimientos emocionales y que la activación fisiológica ocurre
simultáneamente; y tercero, la teoría cognitiva de Schachter, quien afirma
que las emociones se producen cuando la activación física es interpretada
cognitivamente, a partir de la experiencia y de señales del ambiente
(Coon, 2005).

Variables implicadas en la Emoción

Una de las razones de la variedad de modelos teóricos acerca de la


emoción se debe al hecho de que cada orientación incide especialmente
sobre algunas de las variables que la componen, sobre las cuales se
establecen los diversos desarrollos conceptuales y procede al estudio de
las mismas mediante procedimientos metodológicos alternativos.
De una forma similar a la clasificación de Plutchik (1980), las principales
variables que vamos a describir se han abordado desde perpectivas: a)
evolucionistas (con Darwin como principal punto de referencia), b)
psicofisiológicas (seguidoras de la tradición de James), c) neurológicas
(cuyos desarrollos teóricos arrancan de Cannon), d) conductistas (que
enfatizan procesos de condicionamiento como Watson pusiera de
manifiesto a principios de siglo), e) teorías de la activación (con diferentes
autores, de los que Lindsley quizá sea uno de los más representativos) y
f) cognitivas (desarrolladas a partir de los experimentos de Schachter y,
en la actualidad, unas de las más representativas).

- Posiciones evolucionistas. Una de las características principales de


la emoción, como bien han puesto de manifiesto las teorías
evolucionistas, es la función adaptativa de las emociones, tanto
como facilitadoras de la respuesta apropiada ante las exigencias
ambientales, como inductoras de la expresión de la reacción
afectiva a otros individuos. Así, según la primera de estas
funciones, la cólera facilitaría el ataque, mientras que el miedo
favorecería la huída o la inmovilidad corporal defensiva, por
ejemplo. Respecto a la segunda de las funciones, la expresión de
cólera puede servir para amedrentar a otro individuo en una
situación comprometida, mientras que la expresión de miedo
podría ser útil para apaciguar una reacción intensa por parte de un
agresor. Uno de los postulados principales de esta orientación es el
de la existencia de emociones básicas, necesarias para la
supervivencia y que derivan de reacciones similares en los
animales inferiores. El resto de emociones ("emociones derivadas")
se generan por combinaciones específicas de aquéllas (Plutchik,
1984).
- Variables psicofisiológicas. La importancia de las variables
psicofisiológicas arranca de la concepción de James (1884) de que
la emoción aparece como consecuencia de la percepción de los
cambios fisiológicos producidos por un determinado evento. En el
caso de que no existan tales percepciones somáticas la
consecuencia principal sería la ausencia de cualquier reacción
afectiva. Además, las emociones similares se caracterizarían por
un patrón visceral y fisiológico similar, bien es cierto que dando pie
a cierta especificidad individual. El postulado principal de los
modelos psicofisiológicos, que se derivan de la hipótesis de James-
Lange, presupone que cada reacción emocional se podría
identificar por un patrón fisiológico diferenciado (Ax, 1953), o al
menos existirían algunos de ellos que caracterizarían a las
emociones similares entre sí. Esta pretensión se fundamenta
teóricamente en el fraccionamiento direccional (Lacey, 1967; Lacey
y Lacey, 1980), fenómeno caracterizado por el hecho de que ante
una reacción determinada unas variables autonómicas manifiestan
los efectos de activación simpática, mientras que la reacción de
otras se distingue por una respuesta parasimpática, lo que
favorece la aparición de patrones de respuesta diferenciados para
cada reacción afectiva.
- Estructuras neurológicas centrales. Es de sobras conocida la
controversia que generó la teoría de James-Lange y las críticas de
Cannon a las mismas, fundamentalmente en lo que se refiere al
papel de las vísceras en la reacción emocional, así como al hecho
de que la ausencia de sensaciones visceroceptivas no produce
ausencia de reacción emocional y a la evidencia de que las
sensaciones son mucho más lentas que la emoción evocada. Todo
ello cuestionaría el hecho de que dichas reacciones fisiológicas
fueran un antecedente de la reacción emocional. Las reacciones
fisiológicas y viscerales no definirían la cualidad de la reacción
emocional, sino en todo caso la intensidad de la misma,
preparando al organismo para una eventual respuesta que
requiriera un gasto energético de importancia. Se trataría de una
respuesta similar a todas las emociones, en la que la única
diferencia entre las mismas sería la intensidad con la que
reaccionan, pero no en un patrón de respuesta diferenciado. La
rama simpática del sistema nervioso autónomo sería la
responsable de preparar al organismo para un gasto energético
elevado, mientras que el parasimpático restablecería el equilibrio.
Es lo que se ha venido a denominar teoría emergentista de las
emociones (Cannon, 1931), que establece que lo verdaderamente
relevante en la génesis de la emoción es la actividad del sistema
nervioso central, en concreto la regulación que establece el tálamo,
tanto sobre la corteza en la génesis de la experiencia cualitativa de
la emoción, como sobre el sistema nervioso periférico, para la
movilización de energía.
- Aspectos conductuales. En la tradición conductista las emociones
se entienden como respuestas condicionadas que se generan
cuando un estímulo neutro se asocia con un EI que es capaz de
elicitar una respuesta emocional intensa. Las primeras
elaboraciones teóricas, puestas de manifiesto por Watson (Watson
y Rayner, 1920; Watson, 1925), dieron pie a otras aportaciones
como la teoría de los dos factores (Mowrer, 1947) en la que se
defiende que la adquisición y consolidación de la respuesta
emocional (en este caso fobias) se desarrolla en dos etapas, una
primera de adquisición de la RC mediante condicionamiento clásico
y una segunda de consolidación, en la que la conducta de evitación
de los EC's produce un alivio de la RC, respuesta que se mantiene
mediante reforzamiento negativo. Posteriormente, Rescorla y
Solomon (1967) desarrollan la teoría moderna de los dos procesos,
en la que se pone de manifiesto cómo puede producirse una
reacción emocional tanto en el proceso de condicionamiento
clásico, como en el operante, en función de si los Ed's, o EC's
indican presencia o ausencia de contingencias aversivas o
apetitivas. El valor de este modelo estriba en que pueden
establecerse predicciones acerca de los efectos de dicha reacción
emocional en la conducta operante, concretamente cómo la
reacción emocional puede fortalecer o debilitar la conducta
establecida previamente. Las predicciones de este modelo se han
corroborado a nivel experimental con los paradigmas de estudio de
la respuesta emocional condicionada (REC) y automodelamiento
(Rachlin, 1988). Estas investigaciones son especialmente
relevantes por cuanto se circunscriben a un área de investigación
de gran relevancia y actualidad en condicionamiento, como es la
interacción entre condicionamiento clásico y operante y los efectos
que ambos procedimientos de aprendizaje ejercen el uno sobre el
otro. En dicha interacción las reacciones emocionales juegan un
papel de extraordinaria relevancia, puesto además de manifiesto
por el hecho de que desde las formulaciones teóricas del
aprendizaje se asuma que dicha interacción no solamente se
produce a nivel externo, sino también a nivel interno (Millenson y
de Villiers, 1972). En la tradición conductista, el hecho de poder
predecir cómo puede verse afectada la operante en función de la
reacción emocional, hace que las emociones pierdan la
consideración (para dicha orientación) de causas internas, ficticias
e imaginarias de la conducta, para convertirse en un proceso digno
de estudio por sus efectos en el comportamiento (Chóliz, 1994d).
- Variables cognitivas. Según algunos autores la emoción es una
consecuencia de los procesos cognitivos. Las diferencias entre los
diferentes acercamientos teóricos estriba en el papel que le
otorgan a determinado proceso en la génesis de la reacción
emocional (Cano, 1995a, 1995b) como, por ejemplo, la evaluación
de la situación y de las estrategias de coping (Lazarus, 1991a,
1991b), expectativas y conformidad con normas sociales (Scherer,
1984, 1992), a la atribución de causalidad (Weiner, 1986), o a las
diferencias en procesamiento de la información emocionalmente
relevante (Mathews y MacLeod, 1994). En las aproximaciones
cognitivas iniciales de la emoción se defendía que la reacción ante
una situación es de tipo fisiológico, consistente en un incremento
difuso y generalizado de la activación. Posteriormente, la
interpretación cognitiva de dicha reacción fisiológica es la que
determinará la cualidad de la emoción (Marañón, 1924; Schachter
y Singer, 1962; Mandler, 1975). La magnitud de la reacción
fisiológica determinaría la intensidad de la reacción emocional,
mientras que los procesos cognitivos darían razón de la cualidad
de la misma. Posteriormente, Arnold (1960) señalaría que los
procesos cognitivos no surgen solamente después de haberse
producido una reacción fisiológica y como interpretación de la
misma, sino que se produce una evaluación primaria de la
situación ambiental antes incluso de la propia reacción fisiológica.
Se trata de una primera interpretación global del estímulo como
bueno o malo (es decir, agradable/desagradable,
beneficioso/peligroso, etc.). Más recientemente, Mandler (Mandler,
1982; MacDowell y Mandler, 1989) argumenta que, si bien las dos
variables principales implicadas en la génesis de la reacción
emocional son el arousal y la interpretación cognitiva, son estas
últimas las que determinan la emoción. El arousal solamente sería
el sustrato.
Conclusión

- De acuerdo a lo anteriormente citado podemos destacar de esta


rama de la psicología como lo es psicofisiologia la importancia de
su estudio en los procesos somáticos y fisiológicos de los
humanos. Decimos que la comprensión del comportamiento
humano se puede leer a través de esta disciplina que de acuerdo a
lo amplio de su estuduio se relaciona con otras ramas como lo
son neuropsicología, la psicoendocrinología, la psicobiológica
entre otras.
- Debido a que la psicofisiología aborda una variedad de temáticas
relacionadas con los procesos somáticos y fisiológicos de los
seres humanos podemos decir que esta disciplina aborda la raíz
de la razón por la cual el ser actúa con cierta emoción.
- Los procesos biológicos de las emociones nos llevan a reconocer
que el cuerpo habla en todo momento a través de sus movimientos
y debido a los factores fisiológicos y biológicos además conocer
todo el proceso biológico nos da respuesta a conductas y patrones
humanos para así poder ayudar a su sanidad. Es importante
destacar que aunque las emociones sean innatas sus expresiones
van a depender del uso que cada individuo le dé y por lo anterior
estudiado se debe evaluar los distintos sistemas del cuerpo
humano para determinar su relación con las emociones que cada
individuo este expresando es decir, yo creo que la información es
general porque cada individuo es único.
- Con respecto a la antropología de las emociones estoy de acuerdo
con el modelo de valoración que según Mesa (2015) “cada
individuo evalúa de manera continua, los acontecimientos a su
alrededor de acuerdo a su importancia para sus objetivos
generales o su bienestar personal”. Si sabemos que las emociones
son reacciones psicofisiológicas es decir son reacciones que
vienen del interior del ser humano entonces debido a la información
que tenga en su interior este elegirá o creara su exterior y sus
emociones no dependerán de su exterior o circunstancias sino del
significado que el mismo individuo le quiera dar.
- Para estudiar las emociones de un individuo es importante conocer
todos los componentes fisiológicos del mismo como su conducta,
posturas, expresión facial y sus experiencias y los pensamientos y
de esta manera poder conocer sus respuestas es decir sus
emociones basado en toda esta información que lleva guardada en
su interior.
- Las emociones son estudiadas por la psicologías y otras ciencias
debido a ser una característica determinante del ser humano que
influye los procesos neuroquímicos y cognitivos relacionados con la
arquitectura de la mente por tal razón cada individuo debe prestar
especial atención a conocer sus emociones para de esta manera
poder tener mayor poder sobre sus decisiones que determinan los
resultados que tenga en su vida.
- Las emociones abarcan la dimensión biológica, social y espiritual
para así tener una mayor compresión integral del comportamiento
humano y de esta manera obtener patrones o estructuras sobre lo
cual trabajar y estudiar a los individuos que se encuentren en las
mismas dimensiones.
- La variedad de modelos teóricos para el estudio de las emociones
nos deja claro que pueden existir de acuerdo a los distintos
modelos de estudio de las emociones patrones, estructura o datos
sin embargo cada individuo puede dar como resultado algo de
derrumbe o desmienta el modelo por eso los estudios pueden ser
generales pero al momento de realizarlo a un individuo los
resultados son únicos y pueden aportar nueva información que
actualice los modelos que se conocían y abran puertas a nuevos
estudios y modelo.

Bibliografía

https://institutosalamanca.com
https://www.divulgaciondinamica.es/emociones-concepto-funciones
Knapp, Mark. 1991 La comunicación no verbal. El cuerpo y el entorno.
Paidós. México-Buenos Aires-Barcelona.
Evans, Dylan. 2002 Emoción. La ciencia del sentimiento. Taurus. Madrid.
https://www.redalyc.org/
Mariano Chóliz (2005): Psicología de la emoción: el proceso emocional
www.uv.es/=choliz.

También podría gustarte