Las Primeras Publicaciones Hispanomaericanas del Derecho a la Información
J. Gunnar Zapata Zurita* El derecho a la información, el derecho que garantiza a la población universal a no ser engañada, por medios de información, ha sido definido en 1948, en la Declaración Universal de los Derechos Humanos; en 1963, el Decreto Conciliar Inter Mirífica, aprobado en el seno del Concilio Vaticano II le otorgaba el nombre. Al presente una diversidad de publicaciones presentan como tema central a este derecho, producto de las exageraciones en los programas informativos presentados en medios de comunicación y las tendencias del sensacionalismo y el amarillismo; sin embargo, todo movimiento tienen un inicio y el mismo es Hispanoamérica comenzó a inicios de los años setenta. En 1971 fue presentada la publicación denominada “La información hoy y el derecho a la información”, bajo autoría de Joseph Folliet (+), abad, sociólogo y filósofo francés, de extensa producción intelectual en los años 50 y 60. Esta publicación fue editada en Santander España por la Editora Sal Terrea. Esta publicación ahonda el estudio referido a la comunicación de las ideas vinculada al ejercicio de los derechos humanos, las facultades de información y los aspectos sociales que desembocan en ellos, desembocando en referencias a las libertades de información. En el mismo año, se tiene la referencia de la publicación de Manuel Fernández Areal denominada “El Derecho a la Información”. Fernández Areal, fue profesor emérito de la Universidad de Vigo, con una rauda actividad periodística y un profesional entregado al estudio del derecho y la comunicación social en España; es responsable de una amplia producción bibliográfica. Su primera publicación referida a este derecho ha sido editada en Madrid por la Editorial Juventud. Considerado como el pionero en instituir al derecho de la información como una cátedra universitaria en España, José María Desantes Guanter (+) presenta en 1974, su publicación “La Información como Derecho”, editada en Madrid por Nacional Editores. Desantes Guanter fue catedrático emérito de la Universidad Complutense de Madrid y doctor en dicha Universidad y profesor en la Universidad de Navarra. Asimismo, compartió su experiencia y conocimientos dictando cátedras eventuales en las Universidades de Piura, Católica de Chile, La Sabana de Colombia, Austral de Argentina entre otras. Esta publicación enuncia las bases teóricas, planteadas por el autor, para el reconocimiento del derecho a la información respecto al resto de los derechos, incluido el derecho a la libertad de pensamiento, opinión y expresión. Remedios Sánchez Ferriz, catedrática de la Universidad de Valencia, prestigiosa profesional en el derecho constitucionalista en España, presentó en 1974 “El derecho a la información” bajo edición de Valencia Cultural. En esta publicación Sánchez Ferriz enuncia la definición de este derecho, remontando su construcción desde sus orígenes. En 1977, José Desantes Guanter, señalado anteriormente y escritor de 28 publicaciones referidas al derecho en sí, presenta “Fundamentos del Derecho de la Información”, publicado por la Confederación Cajas de Ahorro en España. En este libro, Desantes Guanter profundiza en el establecimiento del Derecho de la Información, como disciplina de estudio del derecho. Eduardo Novoa, investigador mexicano, presentó en 1979 su libro “Derecho a la Vida Privada y Libertad de Información”, publicado por Siglo XXI Editores. En éste, se hace una referencia de la libertad de acceder y emitir información. Esta publicación fue la primera en un ámbito latinoamericano. Estos autores han asumido el riesgo en Hispanoamérica, generando nuevos derroteros, por los cuales siguen diversos investigadores sociales, como el autor de este artículo. El derecho a la * Investigador Social miembro de la Asociación Boliviana de Investigadores de la Comunicación (ABOIC) y la Asociación Latinoamericana de Investigadores en Comunicación (ALAIC).
Gunnar Zapata Zurita Cel. 70344214 Email: gzapata@supernet.com.bo
información arroja un estudio de un número considerable de publicaciones, incluso para los neófitos, en el ámbito nacional y local. La preocupación por garantizar una información creíble y sin distorsión alguna, una información no contaminada por presiones del mercado o de la censura, se ha plasmado en procesos continuos de reflexión e investigación. No nos extrañe que, mientras se practiquen tendencias de difusión como el sensacionalismo, entre otras, habrá por lo menos un investigador que nos traiga a la memoria las definiciones del derecho a la información. No se trata de acallar voces, al contrario es menester multiplicar la difusión de las mismas pero con responsabilidad, considerando a la sociedad boliviana que recibe la información, como beneficiario primario del derecho a la información.
Relatoria Oficial Foro Internacional "Libertad de Expresión y Acceso A La Información: Pilares de La Democracia y de La Sociedad Del Conocimiento" Unesco