¿EL ESTADO COLOMBIANO GARANTIZA LOS DERECHOS DE NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES?

No el estado colombiano no garantiza los derechos de niños niñas y adolescentes, aunque se diga
en las leyes y en la constitución, ya que, como puede observar en el vídeo de -Galvis L. (2009). Nos
demuestra que hay innumerables factores que impiden o dificultan el buen desarrollo de los
niños, niñas y adolescentes, puesto que estos se ven abocados a vivir una serie de situaciones que
vulneran sus derechos y por ende están involucrados y expuestos, en una cruda realidad, que se
pone en evidencia en el momento que son víctimas de abuso sexual, prostitución, reclutamiento
infantil, víctimas de los campos minados, cuando tienen ir a trabajar porque deben ayudar con el
sustento para su familia y no pueden ir al colegio y en ocasiones las instituciones quedan muy
retiradas y se les dificulta llegar a ellas.
El estado no actúa oportunamente, por eso cada día hay más insatisfacción en los ciudadanos
cuando se ve como son abusados nuestros niños, niñas y adolescentes, siendo muchas veces
cómplices al quedarse callados, y en los casos que son denunciados nos damos cuenta como
pasan varios días  sin que sean imputados los cargos, por la negligencia de nuestros autoridades,
de no buscar pruebas suficientes,  para poder imputarles cargos a los culpables de vulnerar los
derechos de los menores, y lo más preocupante cuando sabemos que se están vulnerando
frecuentemente se callan estos abusos “por no meternos en problemas”. Y entonces nos basamos
en la Constitución Política, en el Artículo 44 nos habla sobre los derechos que tienen los niños
niñas y adolescentes: “Son derechos fundamentales de los niños: la vida, la
integridad física, la salud y la seguridad social, la alimentación equilibrada, su
nombre y nacionalidad, tener una familia y no ser separados de ella, el
cuidado y amor, la educación y la cultura, la recreación y la libre... ¿EN QUE
MOMENTO SE GARANTIZA? ¿Los ayudamos cuando los vemos en calle?, ¿Que hace el ICBF? muchas
veces no actúa con diligencia y sin la celeridad necesaria. La defensoría, las comisarías de
familia, todos actúan en beneficio propio y no se preocupan por el bienestar de los niños y niñas.
Sin embargo, la realidad en cuanto a el cumplimiento de estas leyes por personas vinculadas a las
entidades (operadores) protectoras o al cuidado de los menores (Jardines infantiles, escuelas, u
otros. Supervisados por ICBF. Se observa la vulneración de los derechos. El caso más reciente es el
sucedido “el pasado 19 de junio se conoció la denuncia de un niño abusado que “ingresó al
sistema de salud, al Hospital Infantil Concejo de Medellín. Allí, como es ordenado por el Ministerio
de Salud, se activa el código Fucsia para restablecimiento de derechos de la víctima de agresión
sexual, y ese mismo día se activa toda la ruta de protección y restablecimiento de derechos”.

En la Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, 7 (2), 587-619. Nos muestra
como los infantes han sido vulnerados y expuestos al peligro, el engaño, el abuso, la explotación, y
entre otras definiciones que dejan una marca imborrable en el corazón y la mente de estos
menores, en muchas ocasiones existe un sentimiento de impotencia al no poder actuar de manera
oportuna frente al poder que tienen estas personas inescrupulosas que no les importa hacer daño
otros seres humanos, que en muchas ocasiones caen los más inocentes y más vulnerables y los
que no tienen que ver con la guerra y son desplazados de sus tierras y obligados en muchas
ocasiones a entregar a sus hijos a la guerrilla para que no sean asesinados, pero siempre terminan
siendo sus derechos vulnerados.

Si el estado garantizara los derechos de las niñas, los niños, y adolecentes no se vería a los infantes
y adolescentes en las calles pidiendo limosna junto a personas adultas, ni siendo manipulados por
vendedores de drogas, ni utilizados para robar ya que en algunas veces se hacen pasar por ser sus
padres y fingen alguna discapacidad o dicen que son desplazados, si el estado garantizara los
derechos de las niñas, niños y adolescentes no ocurrirían estos casos, expuestos en el vídeo -
Galvis, L. (2009) y en La Convención de los derechos del Niño, porque sencillamente serían más
protegidos en cualquiera de los territorios, adicional a esto se promoverían con mayor intensidad
campañas, propuestas, proyectos, que fomentaran dentro de la comunidad el buen trato y
garantizar los derechos de los, niños, niñas y adolescentes en todos los ámbitos sociales,
generando una reflexión mayor en la comunidad y así mismo en las autoridades competentes.

Es importante también mencionar que nuestro país Colombia cuenta con un número significativo
de leyes y entidades que se dedican especialmente a la protección de la niñez, además de
reconocer los Derechos de los de los infantes y Adolescentes. Son prevalentes y se rigen por el
principio de interés superior del niño, tal como como lo hemos visto y consagrado en la
Constitución Política de Colombia de (1991), la Convención de los Derechos del Niño (1989) y
también hace parte de los 194 países que de la Organización de Naciones Unidas, así mismo
Colombia adopto a través de la Ley 12 de 1991 incorporando a la normatividad interna formando
parte del bloque de constitucionalidad, y en el artículo 44 de la Carta Política la cual consagra tales
derechos y su carácter prevalente, ejecutados mediante la Ley 1098 de 2006 “Ley de Infancia y
Adolescencia”, esto se ve y agranda nuestra expectativa a un cambio significativo y que diera lugar
a que los infantes y adolescentes sean considerados como sujetos de derechos y de especial
protección.

Podemos resaltar los esfuerzos que ha realizado el Estado en esta materia, sin embargo, podemos
evidenciar que esta tarea es importante, impredecible e impostergable seguir uniendo fuerzas
para promover una educación en los infantes y adolescentes en el conocimiento de sus derechos,
así como en el mejoramiento de políticas, programas y servicios.

Se observa un panorama de violencia e impunidad de los derechos de los infantes y adolescentes

en Colombia y diferentes regiones se suma la grave violencia por parte de las autoridades que son
garantes de los derechos, aunque también la sociedad y la familia (principio de
corresponsabilidad). La negación de justicia y el cumplimiento por parte de las entidades que son
encargadas de proteger y velar por los derechos de los infantes y adolescentes y son las que han
permitido la constante agresión a la que son sometidos los infantes y adolescentes, lo que nos
lleva a pensar que las leyes están solo plasmadas en papel, día con día nuestros niños y
adolescentes son sometidos a los más altos niveles de violencia tales como: violencia física, sexual,
psicológica, abandono, desplazamiento, reclutamiento, trabajo infantil, desnutrición, vinculados a
pandillas, y al narcotráfico etc.
Podemos ver que hay entidades del estado como el bienestar familiar y policía nacional de infancia
y adolescencia que su enfoque es favorecer al desarrollo integral de las niñas, niños y
adolescentes, comprometidos en generar las condiciones necesarias para la satisfacción y el gocé
efectivo de los derechos vulnerados o inobservados, pero a veces sus recursos son escasos para
garantizar a todas las poblaciones o son robados o también compran algunos trabajadores para
que no cumplan con su función así no responder por su delito.

Sin embargo, como docente puedo observar y evidenciar que las garantías en el ejercicio son
escasas, quedando su cumplimiento tras una cortina de humo, y esto en diversos aspectos tiene
que ver con la falta de compromiso y ética por parte de personal encargado y del estado de llevar
a cabos ciertos procedimientos, otros flagelos como la corrupción política entre otros. Da pie para
que la comunidad infantil y adolescentes, no reciban y gocen efectivamente de sus derechos;
cuantos infantes y adolescentes de zonas alejadas, rurales y pueblos les toca vivir diariamente
desafíos, para poder llegar a sus escuelas, padres de familia que carecen de empleo digno para dar
bienestar a sus hijos, niños abandonados, desplazamiento forzoso, alimentación precaria, trabajo
infantil, planteles educativos oficiales deteriorados, alimentación escolar precaria Etcétera.

Podemos ver que en las noticias muestran que han muerto entre el 2020 y 2021 niños y bebes a
causa de desnutrición por las precarias condiciones del programa de Alimentación Escolar
(PAE)”es una política del Ministerio de Educación, La cual en varias veredas, pueblos y sector rular
se avisto afectada por corrupción y no contar con un control adecuado lo que provoca que se
vulneren sus derechos. Se han visto prácticas corruptas relacionadas con las contrataciones y
administración de recursos y suministros de estos alimentos ya que hay gente que los utiliza es
para alimentar a los animales y llevan a los colegios cosas en mal estado.

Es necesario que el profesional que se encuentra laborando en las áreas estatales en pro de la
niñez, sean un garante genuino y no se deje sobornar y cumpla con su función y acción
fundamental para garantizar los derechos de los infantes y adolescentes.

Como profesional en formación veo que es necesario y fundamental que las políticas públicas para
la infancia y la adolescencia, se desarrollen, y los veedores sean los garantes del cumplimento
efectivo, el cual implica la apuesta social del estado alrededor del desarrollo integral de la infancia
y la adolescencia. Expresadas en los documento, lineamientos y leyes como: constitución 1991,
Ley 1878 de 2018, 12 de 1991, el Ley 704 de 2001, Convenio 182.

Y estos deben estar estrechamente ligados al desarrollo socioeconómico, político y cultural, dónde
cada individuo y familia cuente con las oportunidades que le permitan potenciar sus capacidades y
obtener el nivel de garantía de sus derechos.
por esta razón como docente se debería replantear un modelo educativo actual que sea más
inclusivo, diferencial, donde los niños y adolescentes puedan ser el futuro de nuestro país , donde
les enseñemos a aprendan a pensar, sentir y actuar, a tener unas relaciones interpersonales
adecuadas, donde el respeto por el otro sea vital, donde aprendan a desarrollar sus diferentes
talentos y cómo comportarse en la vida, donde puedan analizar, reflexionar y tener un sentido
crítico a través de sus conocimiento y a respetar a las demás persona que se encuentran en:
condiciones de desigualdad (como por ejemplo las personas en condición de desplazamiento,
aquellas con discapacidad, las víctimas del conflicto armado, las mujeres en estado de embarazo,
los niños y niñas y las minorías étnicas y raciales, entre otras poblaciones), darles un trato
diferencial y positivo, es no solo válido sino una obligación del Estado para ayudarlas a superar los
obstáculos que impiden su participación social (ICBF LM1.P, 2017, p.25).

Como docentes debemos enseñar a nuestros niños a respetar y valorar a estas personas y a sus
compañeros ya que son igual de importantes y tienen los mismos derechos los cuales también se
les deben garantizar.

Para poder garantizar en Colombia, en las regiones, veredas, municipios y zonas rurales un
efectivo gocé de sus derechos debería el estado promover más recursos realmente donde son
necesarios y hacer que se cumplan las leyes, programas y que las entidades cumplan con sus
funciones o si no se les dé una sanción.

Tanto Estado, Sociedad y Familia unan esfuerzos para crear entornos protectores, implementar
rigurosamente las leyes, ofrecer atención oportuna e integral y sobre todo que los adultos crean y
valoren a los NNA, que dejemos de verlos solo como el futuro, que los valoremos como el
presente que son , que también pueden tomar conciencia y comprendan que también pueden
opinar, expresarse con voz propia, tener argumentos reales y aunque no puedan participar en las
elecciones ni votar deben ejercer su derechos como ciudadanos y elementos primordiales en un
estado que reclama a gritos y piden que las políticas y las instituciones sean más severas y
drásticas contra todo aquello que atente con la integridad de los infantes y adolecentes

biografia

-Alarcón -Palacio, Y. (2011). Constitucionalismo y gigantismo en los derechos de la infancia y la

adolescencia en Colombia. vniversitas, num. 122, enero-junio 2011, pp.363-393.

-Ruiz Hernández, Andrés Fernando (2011). “El sistema de responsabilidad penal adolescente, su
constitucionalidad y validez a la luz de los instrumentos internacionales sobre protección de la
niñez”. Vniversitas, num. 122, enero-junio, 2011, pp335 -

Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (2017). LMP.1 “Lineamiento Técnico del Modelo para
Atención de los Niños, Niñas y Adolescentes con derechos inobservados, amenazados o
vulnerados. Recuperado de
https://www.icbf.gov.co/sites/default/files/procesos/document_19.pdf

Recuperado de: https://www.semana.com/semana-tv/vicky-en-semana/articulo/por-denuncia-de-

abuso-de-ninos-en-medellin-director-de-programa-del-hogar-buen-comienzo-revela-que-paso/
202108/.

Galvis, L. (2009). La Convención de los derechos del Niño veinte años después. Revista
Latinoamericana de Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, 7 (2), 587-619.

-Rincón, M. (2010, 3 de Septiembre) Lúdica Macabrica.mpg [Archivo de video

Alarcón -Palacio, Y. (2011). Constitucionalismo y garantismo en los derechos de la infancia y la

adolescencia en Colombia. vniversitas, num. 122, enero-junio 2011, pp.363-393. Recuperado de:
http:www.redalyc.org/articulo.oa?id=82522606013

-Ruiz Hernández, Andrés Fernando (2011). “El sistema de responsabilidad penal adolescente, su
constitucionalidad y validez a la luz de los instrumentos internacionales sobre protección de la
niñez”. Vniversitas, num. 122, enero-junio, 2011, pp 335 - 361. Recuperado de:

-Instituto Colombiano de Antropología e Historia