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7 Pautas para una Crianza Respetuosa

Existen muchas historias familiares no tan lejanas ni antiguas, dónde los


niños y niñas han sido vistos cómo aquellos que sólo deben obedecer, y
cuándo no es así son merecedores de gritos, golpes y castigos. Situación que
aún hoy viven millones de pequeños.

Afortunadamente en la actualidad se ha generado un aumento en los padres


que se interesan por criar a sus hijos desde el amor y el respeto, para esto,
ellos requieren asesoramiento y estrategias a fin de afrontar los retos y
situaciones de la vida familiar y del desarrollo de los niños y las niñas.

La crianza en primer momento implica una reflexión frente a la historia de


vida del padre y la madre, dónde se pregunten cómo fue su propia crianza,
cómo fueron corregidos, amados o no amados y educados. Implica también
decidir que de ello quieren replicar en la crianza de sus hijos y qué
definitivamente no desean hacer en su rol cómo padres, labor que no es
nada fácil, conlleva una gran responsabilidad al ayudar a que los pequeños se
desarrollen de una forma adecuada.

Al decidir formar a sus hijos desde el amor, encontraran muchas teorías que
hablen de crianza y sugieran miles de herramientas para ejercer la
parentalidad. La que les presentó es aquella basada en el respeto mutuo,
dónde todos los integrantes de la familia son importantes y significativos,
dónde se entiende al niño cómo un ser pensante y se fomenta su autonomía,
dónde existen límites claros y promueven habilidades para la vida. A esto
llamo Crianza Respetuosa y a continuación brindó siete pautas a tener en
cuenta.

1. Abrazos, los niños se portan bien cuando se sienten bien y usted también.
Cuando su hijo esté haciendo una pataleta, intente darle un abrazo.

2. Crear hábitos y rutinas, ayuda al niño a tener una referencia de lo que


debe hacer, a sentirse seguro y sentirse parte de un equipo.

3. Redireccionar la conducta no deseada con respeto, con un tono de voz


firme y sin gritar, explícale por qué esa conducta no es adecuada.

4. Fomente su autonomía, preguntar en lugar de decir que hacer, invita a los


niños a desarrollar un pensamiento propio.

5. Sé un buen ejemplo, de forma espontánea los padres son vistos como


modelos, sus hijos los aman y admiran, es de esperar que los quieran imitar.
Cómo padres se debe ser consecuente y coherente con lo que se dice y hace
frente a los hijos.

6. Pregúntate el porqué de la conducta de tu hijo, en lugar de reprocharle,


prueba hacer preguntas y ser muy observador para llegar a entender su
conducta, ejemplo, si tu hijo está saltando en la cama quizá es porque
necesita quemar energía.

7. Límites claros, toda familia debe tener unas normas y unos límites acordes
a la edad del niño, estos deben ser conocidos y acordados por toda la familia,
de modo que los adultos sigan el mismo camino en la educación de los niños.
Y recuerda siempre dar las indicaciones en positivo.

Dayana Gómez – Psicóloga

@aquitoypsicologiainfantil

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