¿En este entorno COVID cómo planificamos adecuadamente las
necesidades de personal profesional y técnico para cumplir con la
ejecución del proyecto en el plazo y costo estimado? A medida que el evento de la pandemia evoluciona, las empresas deben optar por salvaguardar a los empleados y mitigar la exposición financiera y operacional. Muchas empresas han reducido la producción de sus instalaciones y han suspendido sus operaciones en las zonas más afectada. Lo que es necesario que las organizaciones vayan más allá de las estrategias tradicionales, si no una estrategia que incorpore una capacidad rápida de recuperación, para proporcionar una respuesta integral y dar continuidad a sus producción y servicios más críticos. Además, las empresas deberían considerar el establecimiento de políticas y procedimientos específicos para la pandemia, la capacidad de comunicación de los empleados, el teletrabajo y las licencias personales/familiares para minimizar las disrupciones. La primera prioridad de una organización durante una pandemia debe ser la seguridad y el bienestar de su personal. Los empleados no pueden concentrarse en las responsabilidades del trabajo cuando su bienestar y el de su familia están en peligro. Por lo tanto, la cuestión crítica que las empresas deben abordar al inicio de un evento pandémico es si sus empleados están seguros, seguido de si están disponibles para desempeñar funciones críticas. Es importante que las empresas puedan monitorear la situación, proporcionar un lugar de trabajo seguro y ofrecer a sus empleados el apoyo que necesitan. Entre los ejemplos de apoyo a los empleados pueden figurar la facilitación del acceso a recursos internos y externos (por ejemplo, Organización Mundial de la Salud, SOS Internacional, Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades), servicios (por ejemplo, atención prolongada a niños y ancianos, transporte para horarios nocturnos) y el reconocimiento a los empleados que asumen trabajos correspondientes otras áreas, la comunicación de actualizaciones oportunas para aumentar la concienciación y el establecimiento de servicios de atención estándar para los empleados, cuando sea posible, para prestar apoyo al personal enfermo o a los que cuidan a los miembros de la familia que estén enfermos. Además, las empresas deben impartir capacitación relacionada con la pandemia para mejorar la preparación de los empleados y aliviar cualquier preocupación. Una pandemia requiere que los empleados permanezcan en sus casas para limitar la exposición y prevenir o frenar la propagación de la enfermedad, lo que requiere la activación de capacidades de trabajo a distancia. A diferencia de un evento meteorológico ocasional, que puede hacer que algunos empleados trabajen a distancia, una pandemia puede provocar el cierre completo de toda la instalación en un área, obligando a un gran número de empleados a trabajar desde casa durante un período prolongado. Las empresas deben seguir comunicándose con los clientes a través de múltiples canales, reforzar que los intereses de los clientes son una prioridad y proporcionar información para aliviar sus preocupaciones. Los clientes pueden tener preguntas específicas sobre la cadena de suministros de una empresa, especialmente si los recursos están situados en zonas. Las empresas deben elevar la complejidad de los escenarios existentes utilizados para las pruebas y simulaciones a fin de evaluar la preparación para los eventos pandémicos. Además, las empresas deben ensayar la administración de la gestión de crisis y la respuesta a las mismas, incluyendo a los líderes ejecutivos y las delegaciones de autoridad al menos dos niveles por debajo de los responsables de la toma de decisiones primarias, de modo que los delegados estén bien preparados para ejecutar decisiones oportunas en caso de que los responsables de la toma de decisiones primarias no estén disponibles