Está en la página 1de 4

UNIVERSIDAD DE SAN CARLOS DE GUATEMALA

FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y SOCIALES


DERECHO INTERNACIONAL PRIVADO. Código 250
DECIMO SEMESTRE Secciones C y D
Año 2020
Documento de Apoyo a la Docencia
Elaborado por Msc. Homero Nelson López Pérez, con fines docentes.

DERECHO INTERNACIONAL PRIVADO


PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA
El planteamiento del problema del Derecho Internacional Privado, puede realizarse desde diversos
puntos de vista, en esta oportunidad, lo realizaremos desde los tres puntos de vista siguientes:

1. jurídico,
2. sociológico y
3. económico

Desde el punto de vista Jurídico

Toda norma jurídica en vigor se aplica en un espacio y en un tiempo determinado, a ello le llamamos
vigencia de la ley. Por lo tanto puede afirmarse que la ley tiene vigencia espacial, es decir se aplica
en un espacio determinado; y un ámbito de vigencia temporal, esto significa que se aplica en un
lapso de tiempo determinado. Obliga por cierto tiempo, y en determinada porción espacial.

Los problemas relacionados con la aplicación de leyes que tienen diferente ámbito temporal de
vigencia se le denomina conflicto de leyes en el tiempo, estos conflictos suelen resolverse mediante
la manifestación soberana del Estado, que mediante norma ordinaria decide la solución al problema
que plantea este conflicto, ejemplo de ello lo tenemos en la Ley del Organismo Judicial, CAPITULO
III (Aplicación de las leyes en el Tiempo) en su Artículo 36 (Ámbito temporal de validez de la ley).
“Los conflictos que resultaron de la aplicación de leyes dictadas en diferentes épocas se decidirán
con arreglo a las disposiciones siguientes…” quien a través del ejercicio de su soberanía legislativa,
da solución al referido conflicto de leyes en el tiempo.

Pero, en el denominado conflicto de leyes en el espacio, que es el que se suscita en el Derecho


Internacional Privado no existe el supremo Estado que decide; toda vez que en el ámbito
internacional, todas las legislaciones emanan de un ente soberano; y no puede existir una soberanía
correspondiente a un Estado, que prevalezca sobre la soberanía correspondiente a otro Estado.

En principio, las leyes vigentes en un Estado se crean para ser aplicadas en un espacio determinado,
es decir, el territorio de dicho Estado. Lo que en Derecho público se llama territorio, no es otra cosa
que el ámbito normal de vigencia espacial del orden jurídico de un Estado. Se dice normal, porque
en ciertos casos se admite la posibilidad de que la ley obligatoria en el territorio de un Estado se
aplique en el territorio de otro Estado (“norma jurídica de exportación”), o que una ley extranjera
tenga aplicación en el territorio nacional (“norma jurídica de importación”).
Por lo tanto, los llamados conflictos de leyes en el espacio se reducen siempre a establecer el
carácter territorial o extraterritorial de determinado precepto jurídico.

La existencia de dichos problemas, es consecuencia necesaria de la pluralidad de legislaciones y,


como la actividad de las personas no se desenvuelve siempre, desde el punto de vista del derecho,
en el ámbito espacial de vigencia del Estado a que pertenecen, sino que puede desarrollarse en
territorio extranjero, o en relación con personas de diferente nacionalidad, o con bienes ubicados
en otro Estado, a menudo surgen las cuestiones concernientes a la autoridad extraterritorial o
puramente territorial de las diversas normas.

Por lo que, ésta ciencia, a criterio de algunos autores, debe tratar tres cuestiones fundamentales, a
saber:

a. problema de la nacionalidad
b. problema de la condición jurídica de los extranjeros
c. conflicto de leyes en el espacio.

Desde el punto de vista Sociológico

Guatemala es un Estado soberano e independiente, pero no es el único Estado en el mundo, ya que


al igual que nuestro país, existen otros países, algunos de ellos más avanzados en su tecnología,
educación y niveles de vida, y algunos otros, en menor grado. Esto hace también cierto, el hecho de
que en el mundo existen personas jurídicas individuales y personas jurídicas colectivas, nacionales
o extranjeras, con esa misma clasificación.

A raíz del avance jurídico y tecnológico a que se ha llegado, las relaciones entre las personas jurídicas
de diferente nacionalidad es algo que se da a diario y abundantemente, lo que hace necesario que
estas relaciones sean reguladas, y que exista un grado de seguridad y certeza jurídicas que haga
posible la convivencia y las relaciones entre ellas. Esta función reguladora la cumple el Derecho
Internacional Privado, quien sin intervenir directamente en la esencia misma de la relación jurídica,
la circunscribe de eficacia y certeza en su modo o forma, ejecución y consecuencias.

La persona humana, a diferencia de los demás seres vivos de la creación, posee dos elementos el
material, que constituye su manifestación corporal, ocupando un tiempo y un espacio determinado;
y el elemento racional, que lo hace consciente de su existir, de su trascendencia tridimensional en
el tiempo (con un pasado, un presente y un futuro) y en el espacio; es un ser consciente de su
existencia tempo-espacial.

Y como individuo racional, conscientemente posee independencia y libertad frente al medio que le
circunda, amén de tener conciencia de su ser; y por ello puede modelar libremente su vida y
objetivar todos sus procesos psíquicos, reprimiendo o alimentando sus impulsos, sus pasiones, y
construir así su propia existencia según los dictados de su razón, sus intereses y sus posibilidades
objetivas.
Pero también es un ser social que no puede vivir ni desarrollarse aisladamente, necesita de otras
personas para poder hacerlo; por lo que, desde un principio es imperativo que se relacione con sus
semejantes, organizándose de tal forma que se asegure su existencia y su crecimiento individual.
En síntesis, la persona necesita de los demás para el logro de su desarrollo integral, espiritual y físico,
es decir “vivir en sociedad”. Inicia su vida compartiendo con un grupo social específico y reducido
(la familia) donde adquiere el conocimiento de los primeros valores, y se identifica con ellos;
posteriormente amplía su entorno social al barrio, a la escuela, al municipio, al departamento, y al
país, compartiendo y reforzando una serie de intereses y valores comunes que refuerzan la
convivencia del grupo, y que hacen nacer en él el principio de pertenencia; naciendo el concepto de
“lo local”, “lo nacional” frente a ”lo extraño” “lo extranjero” .

De esta serie de valores comunes, de identidades comunes, de intereses comunes, se manifiesta el


sistema jurídico de cada sociedad, como un producto cultural, emanado de una soberanía
específica. Por ello, es que en la actualidad en el mundo existen tantos sistemas jurídicos como
sociedades particulares; en otras palabras “pluralidad de legislaciones”, que es una realidad
irrefutable. Pero ante ello, también existe otra realidad, que la sociedad tiene en último término,
un valor instrumental, porque su destino es servir a la persona humana, la cual en cambio, en última
instancia y como posibilidad, no está destinada fatalmente a una sociedad específica como su fin
último, sino a su desarrollo integral.

Desde el punto de vista Económico

Ningún país del mundo puede vivir aisladamente de los demás, y que en su territorio pueda negar
o evitar la aplicación de la norma jurídica extranjera, cuando esta proceda, o que no quisiera en
ningún caso la aplicación en el extranjero de sus disposiciones legales; porque todo país requiere
del concurso de los otros para poder existir y perfeccionarse; en este orden de ideas, todo país
requiere del Comercio Internacional, por muy diversas y valederas razones.

En tal sentido, algunas cosas resultan materialmente imposible producirlas, más que en lugares muy
propicios para ello, que cuentan con las condiciones de clima, suelo, agua, medio ambiente,
etcétera, ideales para ello, incluso personas, infraestructura y posición geográfica. Pero existen
muchas otras cosas que, aun cuando podrían producirse sin dificultad en el país, se importan, sin
embargo, desde otros países, porque resulta más barato importarlas que producirlas. En general, el
comercio exterior sirve como mecanismo de división internacional del trabajo, como división
internacional de la producción, así como de división internacional de la distribución de bienes y
servicios (como ejemplo de esto último: Amazon y Ali Baba), permitiendo la especialización en la
producción y el intercambio. En este sentido, el comercio exterior compensa las limitaciones que,
de otro modo, impondría su ausencia.

Los factores, elementos o fenómenos (-sociológicos-) que constituyen la razón de ser o causa de la
existencia del Derecho Internacional Privado son:
1. un elemento de hecho que es el comercio internacional, tomada esta expresión en el
sentido de relaciones jurídicas de carácter económico privado, entre personas
pertenecientes a Estados o territorios diferentes, y
2. un elemento de derecho, que es la coexistencia, o sea la existencia simultánea de
legislaciones diferentes, a través del cual se perfecciona y sustenta la actividad económica,
y adquiere su seguridad y certeza.

También podría gustarte