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2 Samuel 7:13
Introducción.
Hace mucho tiempo que Hengstenberg dijo: "el edificio de la casa del
SEÑOR va tomado de la mano con la eternidad del reino." Por lo tanto,
"como el reino aguanta para siempre, así la casa construida para el lugar
de vivienda del señor debe también aguantar para siempre... "(Keil y
Delitzsch).
Jehová vino a morar con su gente en persona. Alguien que le conocía bien
escribió: "Y aquel Verbo fue hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos
su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de
verdad." (Juan 1:14). Un poco después, el escribió: "A Dios nadie le vio
jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a
conocer". (v. 18). El Señor hizo su casa en la tierra en la encarnación de
Jesucristo.
El Apóstol Pedro habla del templo de Dios el cual está siendo edificado en
1 Pedro 2:4-5.
Acercándoos a él, piedra viva, desechada ciertamente por los
hombres, mas para Dios escogida y preciosa, vosotros
también, como piedras vivas, sed edificados como casa
espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios
espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo.
Todos los creyentes, judíos y gentiles, se vuelven parte del glorioso templo
de su cuerpo. "¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de
Dios mora en vosotros? Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le
destruirá a él; porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es." (1
Corintios 3:16-17). Esta es la única verdad para aquellos que han puesto
su fe en Jesucristo como su salvador personal. Cada creyente es parte de
ese cuerpo, el cuerpo de Cristo.
El Apóstol Pablo nos recuerda que somos el templo de Dios. "¿O ignoráis
que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros,
el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque habéis sido
comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en
vuestro espíritu, los cuales son de Dios." (1 Corintios 6:19-20).
Después el escribió: "¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los
ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo:
Habitaré y andaré entre ellos, Y seré su Dios, Y ellos serán mi pueblo". (2
Corintios 6:16).