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Presentación del módulo

https://player.vimeo.com/video/702099328

Logro básico del módulo

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Competencias relacionadas con el módulo

Metodología y desarrollo didáctico

Los análisis, las reflexiones, las comprensiones y los aprendizajes de este módulo
cuestionan el castigo físico, tratos crueles, humillantes o degradantes como
prácticas de crianza y proponen herramientas para lograr que la forma de
acompañar el proceso de desarrollo de niñas, niños y adolescentes sea desde el
amor y el respeto. Para esto las y los invitamos a:

1. Leer la cartilla.
2. Ver los videos dispuestos para la reflexión.
3. Participar en los foros y talleres correspondientes.
4. Participar en el encuentro virtual grupal (encuentro sincrónico), donde se
revisarán y discutirán los temas vistos en el módulo.

¡Recomendación!
Con el fin de alcanzar mejores resultados, te recomendamos leer atentamente el
material propuesto y navegarlo en su totalidad. Ten en cuenta que para favorecer
la comprensión de los contenidos puedes emplear estrategias como:

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• Tomar apuntes.
• Revisar y/o repasar los temas cuantas veces lo requieras.
• Realizar esquemas, mapas conceptuales, diagramas, tablas, cuadros
comparativos, entre otros.
• Utilizar cualquier otra técnica de estudio que te permita obtener tus
logros.
• Por último, busca un lugar cómodo y tranquilo, sin ruido ni distractores que
puedan afectar tu concentración y disponte a recibir este conocimiento
con la mejor actitud.

Glosario de terminos
Las y los invitamos a explorar algunos de los conceptos que a lo largo de este
módulo profundizaremos:

• Desarrollo cognitivo: es el proceso por el cual una niña, niño o un


adolescente va adquiriendo conocimientos sobre lo que le rodea,
desarrollando así capacidades como memorizar, razonar, resolver
problemas, generar planes, clasificar, relacionar, posiblemente imaginar,
fantasear, entre otras.

• Desarrollo emocional: es el proceso que tienen las niñas, niños y


adolescentes para identificar, expresar y manejar sus emociones, así como
para responder apropiadamente a las formas en que los demás las
manifiestan. El desarrollo emocional está directamente relacionado con los
afectos y sentimientos, estos se muestran en habilidades o capacidades
emocionales como la empatía, la confianza, respeto, amabilidad,
persistencia, adaptación, tolerancia a la frustración, entre muchas otras.

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• Desarrollo socioafectivo: se refiere a la capacidad de todas las personas
para crear, fortalecer y mantener relaciones significativas con otras
personas, en este caso nos referimos a la capacidad de niñas, niños y
adolescentes de construir relaciones de afecto con otras niñas u otros
niños y personas adultas con quienes conviven y con quienes interactúan
en los diferentes entornos donde se desarrollan.

• Límites: se relacionan directamente con las normas, las reglas y los


acuerdos del hogar y se fijan para proteger, cuidar, educar, prevenir riesgos
y facilitar procesos de autocuidado y autonomía en el desarrollo.

• Salud mental: es un estado de bienestar en el que la persona desarrolla


todas sus capacidades para enfrentar el estrés de la vida, de relacionarse
en armonía y resolver los conflictos y problemas de manera asertiva. La
salud mental en la infancia es determinante para vivir un proceso del
desarrollo integral.

• Tratos crueles, humillantes o degradantes: toda acción con la que se


menosprecie, humille, denigre, estigmatice, amenace, atemorice o
ridiculice a las niñas, niños o adolescentes, con el fin de ejercer autoridad,
disciplinar o corregir. (Nota: a lo largo de este módulo podrán encontrar el
desarrollo de estos conceptos y algunas preguntas que permitirán la
reflexión sobre los mismos).

Ahora sí, ¡comienza!

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Desarrollo temático

Núcleo temático 1. ¿Qué es el castigo físico, los tratos crueles,


humillantes y degradantes y cuáles son sus afectaciones en el
desarrollo integral?

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https://player.vimeo.com/video/702099580

“El castigo corporal es tan humillante para quien lo da como para el


que lo recibe, y además es ineficaz. Ni pena, ni dolor físico tiene
ningún otro efecto que el endurecimiento de uno.”
-Ellen Key

Para reflexionar sobre el castigo físico, los tratos crueles, humillantes o


degradantes; y cómo estos afectan el desarrollo integral de las niñas, niños y
adolescentes empezaremos por conocer la Ley 2089 del 2021, haciendo una
introducción en los conceptos en mención, seguido por un análisis de los principales
efectos o consecuencias en su desarrollo.

Observa La historia de Pablo – Efectos de la violencia contra la niñez.


Haz clic en: https://www.youtube.com/watch?v=-YSsit8r42w

Ley de prohibición del castigo físico, los tratos crueles, humillantes o degradantes

Como lo planteamos en la introducción de este módulo, en mayo del año 2021 se


aprobó en Colombia la Ley 2089 que prohíbe el castigo físico, los tratos crueles,
humillantes o degradantes que se ejercen contra las niñas, niños y adolescentes. El
objetivo central es transformar los imaginarios, creencias y comportamientos que
social y culturalmente han sido utilizados para naturalizar y normalizar esta
práctica en la crianza y en la educación.

• Esta ley es PEDAGÓGICA, es decir que busca formar a todas las personas
sobre los efectos que tiene el castigo en el desarrollo integral y mostrar
otras maneras para que las madres, padres o cuidadores puedan acompañar
el desarrollo de las hijas y los hijos con autoridad basada en el respeto y el
amor.

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• Establece que el gobierno nacional, los departamentos y los municipios
deben implementar una ESTRATEGIA NACIONAL PEDAGÓGICA Y DE
PREVENCIÓN que logre identificar e ilustrar “alternativas y prácticas para
educar, orientar y disciplinar sin violencia” (Congreso de la República de
Colombia, 2021, p. 2). Lo anterior implica generar procesos y estrategias con
las familias y las comunidades que contribuyan a transformar los
imaginarios y creencias que naturalizan y normalizan el castigo físico, los
tratos crueles, humillantes o degradantes.

• Se requiere de una transformación social y cultural para conseguir el


propósito de eliminar las violencias en la crianza, la cual será posible cuando
la familia, la sociedad y el Estado se comprometan con este cambio.

El castigo físico

Para el Comité de los Derechos de las Niñas y los Niños (CDN), que está
encargado de la supervisión y seguimiento al cumplimiento de la Convención de
las Naciones Unidas sobre los Derechos de niñas, niños y adolescentes, el castigo
corporal o castigo físico1 es:

1
Observación General No. 8 (Naciones Unidas, 2006) hace referencia a la protección contra los castigos
corporales y otras formas de castigo crueles o degradantes.

8
Reflexiona…

• ¿Siendo niña, niño o adolescente viviste alguna de


estas situaciones?

• ¿Qué sentiste cuándo esto sucedió?

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Es importante reflexionar acerca de que el castigo físico es una de las formas de
violencia contra las niñas, niños y adolescentes, con este los adultos ejercen su
poder contra ellas y ellos, poniéndolos en una situación de inferioridad. Esta
forma de violencia como cualquier otra, limita su desarrollo integral, por ende,
afecta su vida presente y futura.

La ley que prohíbe el castigo físico en Colombia tuvo en cuenta los conceptos
formulados por organismos internacionales, entidades y organizaciones
nacionales que promueven la garantía de los derechos de las niñas, niños y
adolescentes.

Tratos crueles, humillantes y degradantes: definición


Son aquellos actos de burla, desprecio, crueldad y humillación, que, por su
intencionalidad, características y efectos en las niñas, niños y adolescentes se
pueden catalogar como violencia psicológica.

*Recuerda lo que revisamos en el Módulo 1 respecto a la violencia psicológica

El Comité de los Derechos de las Niñas y los Niños (CDN) señala que:

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A continuación, algunos ejemplos de tratos crueles, humillantes o degradantes que
seguramente has visto o has vivido en tu familia o comunidad:

• Gritos: mencionar el nombre de la niña, el niño o el adolescente o cualquier


otra palabra fuertemente, de forma ruidosa, violenta y con alto sonido de
voz en espacio público o privado.
• Insultos: dirigirse a las niñas, niños o adolescentes de manera ofensiva, por
ejemplo, llamarle “cochino” en lugar de orientarle para limpiar el espacio,
“torpe” en vez de recordarle ser más cuidadoso, “mentirosa”, en lugar de
dialogar para llegar a la verdad o un punto de acuerdo, “sea fuerte no sea
nenita” en vez de reconocer y respetar las emociones de niños y
adolescentes.
• Amenazas de castigos: frases de advertencias para provocar miedo o
atemorizar, por ejemplo: “donde usted no saque buena nota, le pego una
pela que no se le va a olvidar nunca” o “no le compro cuadernos ni uniformes,
usted verá”, “donde usted llegue tarde lo dejo en la calle toda la noche” o “si
usted no me hace caso, se atiene a las consecuencias” o “el rejo corrige la
bobada”.

• Chantaje emocional: forma de comunicación inadecuada que tiene como


fin conseguir lo que se quiere sin tener en cuenta los deseos o necesidades
de la otra persona. Por ejemplo: dejar de hablarle a la niña, el niño o
adolescente, decirle que no se le quiere, mostrar indiferencia, ignorarle
cuando le habla a la persona adulta.
• Humillaciones: cualquier tipo de acción contra el buen nombre, el honor y
la dignidad de la niña, niño o adolescente que busca hacer juicios
despectivos o insultarles, como: “no sea bruto”, “usted no sirve para nada”,
“como que usted es la más bruta de su colegio”, “usted es el bobo del
pueblo”; o utilizando estereotipos de género como “parece una niña”, “no
llore que los hombres no lloran”, “si no hace esto, no parece un hombre”; o

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haciendo chistes o comentarios como “camine bien, no como una coja”,
“aprenda a cocinar para que encuentre un marido que la sostenga”.
• Ironía: expresión verbal que consiste en decir lo contrario de lo que se
quiere decir para ofender, por ejemplo, “usted como siempre tan
obediente”, “la niña tan inteligente como siempre”, “tan lindo el niño, genio
en matemáticas”, todo para indicar lo contrario.

Reflexiona…
¿Por qué los castigos físicos, tratos crueles humillantes o degradantes contra un
adulto son considerados actos de violencia y contra las niñas, niños y adolescentes
son considerados como una forma de orientación o crianza?

Piensa la respuesta y desde allí reflexiona cómo debería ser la crianza con las niñas,
niños y adolescentes.

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Efectos del castigo físico, los tratos crueles, humillantes o
degradantes en las niñas, niños y adolescentes y sus familias

Muchos estudios e investigaciones realizadas en el mundo entero demuestran que el


castigo físico, los tratos crueles, humillantes o degradantes tienen efectos
negativos en el desarrollo integral de las niñas, niños y adolescentes y sus familias.
Por ejemplo, según Jorge Cuartas, investigador de la Universidad de Harvard
(2019), los castigos físicos, tratos humillantes o degradantes disminuyen las
capacidades intelectuales o funciones cognitivas de la niña, niño o adolescente
como el lenguaje positivo, la construcción de ideas, la resolución de problemas
específicos, la toma decisiones, la regulación de emociones y el control de impulsos.

También se ha evidenciado que el castigo físico afecta la capacidad de atención,


concentración y memoria, así como las habilidades básicas que posibilitan el
aprendizaje de las niñas, niños o adolescentes como son la creatividad, el
pensamiento crítico, la comunicación y la colaboración.

A nivel social y emocional se ha observado que estas violencias dificultan la


interacción entre pares o con adultos, asimismo, dificultan la expresión de sus
sentimientos y emociones, y pueden generar problemas en su adaptación social.
Adicionalmente, tienen efectos negativos en la construcción de sus relaciones
familiares e interpersonales, ya que dificultan la construcción de la confianza y el
respeto.

A continuación, describiremos algunos de estos efectos o consecuencias:

Efectos en el desarrollo del cerebro y en el desarrollo cognitivo

En varios estudios científicos realizados en los cerebros de niñas, niños y


adolescentes que han sido víctimas de castigo, o de personas que vivieron este tipo
de violencia en su niñez se han observado diferencias al compararlos con las de
otros que no lo sufrieron.

Se evidencian consecuencias en varias partes del cerebro que están relacionadas


con el desarrollo cognitivo o del conocimiento, la formulación de ideas, la atención,
la regulación emocional, el control de impulsos y de la conducta social, la
adaptación al medio, la resolución de problemas, entre otros.

Podemos señalar que uno de los efectos directos en el desarrollo del cerebro tiene
que ver con el desarrollo del conocimiento o cognición:

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Desarrollo cognitivo o del conocimiento

Al explorar las historias de vida y los entornos


familiares de niñas, niños y adolescentes que
presentan dificultades de aprendizaje, bajo
rendimiento académico, dificultad para la
planeación, memorización, concentración,
resolución de problemas, atención,
razonamiento no verbal, entre otros procesos
cognitivos, se encuentra como denominador
común las violencias, el castigo físico, los tratos
crueles o humillantes.

Efectos o consecuencias en el desarrollo emocional y social

Las niñas, niños y adolescentes que han sufrido violencia, castigo físico, tratos
crueles, humillantes o degradantes presentan comportamientos y respuestas
emocionales negativos y diferentes respecto a las personas que no han estado
expuestas a estas situaciones.

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Entre los comportamientos o respuestas emocionales observadas con mayor
frecuencia están:

• Dificultades para el control de sus emociones.


• Reacciones agresivas frente a situaciones estresantes.
• Baja autoestima.
• Inseguridad.
• Aislamiento.
• Pueden en algunos casos ser más susceptibles a ser maltratados o
violentados por compañeros u otros adultos.
• En otros casos su respuesta frente a sus compañeros, profesores y
padres es agresiva y en algunos casos violenta.
• En la adultez pueden ser agresores con sus parejas y en muchos casos
usar métodos violentos de disciplina con sus hijas e hijos.

Se ha observado que las niñas, niños y adolescentes expuestos a la violencia


durante la infancia tienen mayores dificultades para generar lazos sociales de
calidad a lo largo de sus vidas, ya que han experimentado más emociones
negativas, lo que conlleva a comportamientos impulsivos u hostiles.
(Cuartas,2019)

También se ha encontrado que existe un estado permanente de alerta en la


búsqueda de peligros o amenazas de tipo afectivo, en niños y niñas cuando estos
han sido sometidos a castigos físicos, tratos crueles, humillantes o degradantes.

De igual forma, se ha documentado sobre una mayor probabilidad de que niñas,


niños y adolescentes agredidos, repitan las conductas agresivas aprendidas para
la solución de conflictos, esto, por su dificultad para la construcción de lazos de
apego seguros y respetuosos.

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Efectos o consecuencias en el entorno familiar

“Repite aquello que recuerdas con amor y evita aquello que


recuerdas con dolor.”
-Ana Rita Russo

Las niñas y niños para desarrollarse requieren de los cuidados brindados al


interior de la familia, quienes mediante el afecto y el alimento (aspectos que
abordaremos con mayor detenimiento en el Módulo 3) permiten que pasen de
estar indefensos, característica de sus primeros meses de vida, a la organización
en la parte emocional, motora, lingüística, cognitiva y social.

El afecto y acogida desde la primera infancia, una familia que sostenga al infante
amorosamente y de respuesta a sus diversas necesidades de favorecer el proceso
de maduración cognitiva y el desarrollo de la capacidad de amar, de relacionarse y
preocuparse por el otro o la otra. (En el módulo 3 se hablará sobre estos aspectos
tan importantes en el desarrollo de las niñas, niños y adolescentes).

La familia debe enseñarle a niñas, niños y adolescentes a relacionarse


adecuadamente con otras personas de su entorno, respetando las normas de
comportamiento existentes para la convivencia. Cuando los límites son
impuestos mediante el castigo físico, los tratos crueles, humillantes o
degradantes, se pueden generar graves consecuencias en el vínculo afectivo de
los diferentes miembros, de tal forma que se pueden establecer relaciones
afectivas ansiosas y ambivalentes, aspectos que ya comentamos en el punto
anterior y que se profundizarán en el módulo 3.

Un aspecto a tener en cuenta es que no solamente la niña, el niño o el adolescente


se ven afectados por este tipo de prácticas, sino que la madre, el padre o los
cuidadores experimentan emociones como la culpa, la tristeza o la incertidumbre
cuando reconocen que usan palabras ofensivas o golpes, o cuando se dan cuenta
de que están repitiendo con sus hijos e hijas lo que sufrieron en su infancia.

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Cuando los padres que soportaron castigo físico, tratos crueles, humillantes o
degradantes en su infancia logran cambiar sus métodos de crianza al reflexionar y
entender que esta no debe ser la forma de educar a sus hijas e hijos, tienen que
enfrentarse muchas veces a ser tildados como madres o padres débiles,
alcahuetas, que están malcriando a las niñas, niños o adolescentes. Por esta razón
es importante comprender que el hecho de no violentar a los niños, niñas y
adolescentes no significa en ningún caso no educarlos, por el contrario, se debe
comprender la formación como un proceso de diálogo, amor, acuerdos, normas y
límites claros.

Es importante entender, además, que el castigo físico, los tratos crueles,


humillantes o degradantes pueden producir cambios temporales y superficiales
en el comportamiento de niñas, niños y adolescentes, resultado del miedo y no del
entendimiento de una buena o mala actuación, más no transformación de estas
conductas a partir de la comprensión de los efectos de su comportamiento.

Para finalizar, es necesario que ustedes como madres, padres o cuidadores


analicen las consecuencias negativas del castigo físico, los tratos crueles,
humillantes o degradantes, lograr formas de orientar y disciplinar a sus hijas e
hijos, alejadas de cualquier violencia teniendo la seguridad de que están haciendo
lo mejor para ellas y ellos.

Transformar estas prácticas al interior de sus hogares es el primer paso para


eliminar las violencias que se viven en el país.

Conclusiones

• El castigo físico como forma cultural de corrección y educación es


ineficiente y contraproducente, pues genera daños en el desarrollo cerebral
y cambios de comportamiento relacionados con el miedo, la impotencia, la
frustración y la ira.

• El desarrollo cognitivo o del conocimiento como pudimos analizar se ve muy


afectado en diferentes áreas por el castigo físico, interfiriendo en casi todos
los procesos de aprendizaje de las niñas, niños y adolescentes.

• Las afectaciones socioemocionales en niñas, niños y adolescentes que han


recibido castigo físico, tratos crueles, humillantes o degradantes están
enmarcadas principalmente en las dificultades para socializar con las demás
personas, para entender, expresar y gestionar adecuadamente sus
sentimientos y emociones. Asimismo, en considerar normal las conductas
violentas, lo que los llevará a actuar de esa forma en su vida adulta.

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• El castigo físico, los tratos crueles, humillantes o degradantes no permiten
que las niñas, niños y adolescentes desarrollen oportunidades de mejorar y
aprender a solucionar los problemas creativamente, pues no les da
herramientas para resolverlos. Lo que si genera es una acumulación de rabia
y sentimientos de venganza hacia sus padres, madres y cuidadores.

• Las investigaciones científicas muestran que el castigo físico, los tratos


crueles, humillantes o degradantes tienen efectos en la salud mental de las
niñas, niños y adolescentes como la depresión, ansiedad, posible consumo
problemático de sustancias psicoactivas, dependencia emocional y
trastornos alimenticios, entre otros.

• El castigo físico, los tratos crueles, humillantes o degradantes enseñan a


niñas, niños y adolescentes que no pueden resolver los problemas con el
diálogo o de una manera positiva y asertiva. El resultado es creer que las
soluciones a los problemas solo pueden ser posibles mediante la fuerza.

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Las y los invitamos a participar en el foro teniendo en cuenta los siguientes
pasos:

• Saludar y presentarte con tu nombre y región del país.


• Participar respondiendo las preguntas propuestas.

Preguntas:

Hablemos de nosotros, de nuestra crianza. Las y los invitamos a responder de


manera voluntaria algunas preguntas que llevan al autoanálisis:

1. ¿En tu infancia recibiste castigos por parte de tu padre, madre o


cuidador?
2. Si la respuesta es afirmativa, ¿puedes contar cómo eran esos castigos?
3. ¿Consideras que eran distintos los castigos para los niños o adolescentes
y para las niñas y adolescentes?
4. Si no fuiste castigada o castigado, cuéntanos un poco de tu crianza.

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Ahora las y los invitamos a responder las siguientes preguntas

• Una palmada cuando sea absolutamente necesario, ¿sirve para


educar a sus hijos e hijas?
• ¿Es posible educar correctamente a hijos e hijas sin castigarlos?

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Núcleo temático 2. Creencias y realidades sobre el castigo físico, los
tratos crueles humillantes y degradantes

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https://player.vimeo.com/video/702099765

En este núcleo temático les invitamos a analizar los ejemplos y reflexiones respecto
a creencias sobre el castigo físico, tratos crueles, humillantes o degradantes como
un método adecuado para corregir y disciplinar a las niñas, niños y adolescentes.

El objetivo de este capítulo es reflexionar respecto a creencias que justifican el


castigo físico, los tratos crueles, humillantes o degradantes y buscar alternativas
para la crianza y la corrección basadas en límites (respeto, responsabilidad, asumir
las consecuencias de sus actos), el amor, el juego, el diálogo y especialmente el
reconocimiento de las niñas, niños y adolescentes como sujetos de derechos.

Creencias respecto al castigo físico, tratos crueles, humillantes y degradantes


como método efectivo para educar y corregir

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¿Qué opinas de las siguientes frases?

“La letra con sangre entra”. “Si no se los castiga no saben de


autoridad”.

“Una palmada a tiempo es más efectiva “Mi papá me dio correa y miren, nada me
para poner límites que hablar o intentar pasó”.
convencer”.

“Ellos se lo buscan, porque si no se les da “Nadie se ha muerto por un grito”.


un correazo no aprenden”.

“Si se lo buscó, que aguante. La mano “A veces una palmada es necesaria”.


dura es para que sepan quién manda”.

“Somos personas de bien gracias a las “Si uno no les paga a los hijos es porque
pelas y los castigos que nos dieron en no los quiere”.
chiquitos”.

“Si no les duele el castigo no aprenden”. “Los hijos necesitan mano dura para que
formen el carácter”.

Todas ellas son frases que hemos escuchado o nos dijeron cuando éramos pequeños.

A continuación, algunas reflexiones o argumentos que te pueden servir sobre


cómo el castigo físico, los tratos crueles, humillantes o degradantes no sirven para
educar.

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24
25
Pero entonces, ¿qué podemos hacer?

Reflexionar antes de actuar

A veces golpeamos, gritamos o insultamos a nuestras


hijas o hijos porque nos molesta que no entiendan
rápidamente, o porque no tenemos tiempo y queremos
que ellas o ellos aprendan, pero ante todo, porque
somos inmaduros a nivel emocional; y no conocemos
las señales que se manifiestan en nuestro cuerpo
cuando estamos enojados, siendo estas unas alertas
claras para que nos alejemos de la situación o como se
dice popularmente “contemos hasta diez” para
tranquilizarnos y no explotar (corazón acelerado, boca
seca, manos sudorosas, temblor en el cuerpo, etc.)

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Muchas veces como madres, padres o cuidadores
actuamos impulsivamente sin ponernos en el lugar
de las niñas, niños o adolescentes; por lo que es
importante aprender a manejar nuestro enojo para
no perder el control, respirar y calmarnos antes
que reaccionar de forma violenta. Es fundamental
que podamos actuar sin ira, y pensar con calma en
qué fue lo que pasó y cuál es la situación que
provocó el comportamiento de la niña, niño o
adolescente, y así buscar la mejor alternativa para
corregirlo o guiarlo.

Educar sin golpes implica un esfuerzo

• Mamás, papás y cuidadores, para educar sin golpes hay que utilizar una
disciplina amorosa, basada en el amor, el respeto y el diálogo, lo cual

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empieza por establecer o acordar normas y límites con las niñas, niños y
adolescentes, acordes con su proceso de desarrollo.
• Esto invita a incorporar estrategias como la conversación abierta,
asertiva y efectiva; la demostración de afecto con acciones como los
abrazos, las caricias respetuosas, las palabras de cariño, entre otras.
• Otra gran estrategia es el juego pues recordemos que este es un factor
protector por excelencia para una crianza amorosa. Al jugar se
desarrolla la confianza básica necesaria para la construcción del vínculo
afectivo; se comprende la norma, la regla, la opinión de otras y otros, la
construcción colectiva, la búsqueda de objetivos comunes, entre otros
aspectos que se convierten en ejes de la relación familiar.
• Para lograr estos espacios de juego es preciso hacer un esfuerzo como
adultos para ser facilitadores del juego, de tal forma que en familia se
pueda vivir y disfrutar ganando confianza, autoridad y respeto.

Creencias respecto al castigo físico, tratos crueles, humillantes y degradantes


como método efectivo para proteger y favorecer el desarrollo de las niñas y
niños

Una de las mayores responsabilidades como madres, padres y cuidadores frente a


las niñas, niños o adolescentes es el de protegerlos de todos los riesgos o
situaciones en los que corran peligro; pues bien, muchas personas adultas aún
consideran que una forma de hacerlo es a través del castigo físico, los tratos
crueles, humillantes o degradantes. Esto es totalmente contradictorio, sin
embargo, esto puede darse porque ellas y ellos creen que las niñas, niños y
adolescentes solo de esta forma aprenden sobre los riesgos a los que se
enfrentan; y porque tienen la creencia de que a sus madres y padres les sirvió
como un buen método para protegerlos correctamente. Esto se puede observar
en las siguientes frases:

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¿Qué piensas de las siguientes frases?
• “Te pego porque te quiero”.
• “Te pego por tu propio bien”.
• “Te pego para que comprendas que eso no lo debes hacer”.
• “Me duele más a mí que a ti”.
• “Yo no quería pegarte, pero me tocó”.
• “Es mejor que yo los castigue a que lo haga cualquier desconocido”.
• “A mi hija – hijo solo lo castigo yo”.

Las anteriores frases y otras parecidas las hemos escuchado en nuestras familias o
las hemos dicho para justificar cuando castigamos físicamente a las niñas, niños y
adolescentes. Y cuando las decimos o las escuchamos estamos convencidos que es
lo mejor para ellas y ellos.

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Por ejemplo: una madre de un niño de dos años decía que le pegaba a su hijo para
que entendiera que no debía coger las cosas de los demás cuando estaba jugando,
para evitar que otro niño o adulto lo golpeara o le gritara. Así, de esta forma, lo
protegía de otros que pudieran hacerle daño. Parece bastante paradójico, la
madre lo golpea, es decir le hace daño, para protegerlo de otros que lo pueden
llegar a golpear.

A continuación, algunos argumentos (realidades basadas en estudios y análisis


científicos) sobre cómo el castigo físico, los tratos crueles, humillantes o
degradantes no sirven para proteger a niñas, niños y adolescentes.

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31
Pero entonces, ¿qué podemos hacer?

Calmarnos y darnos tiempo para explicar las situaciones y darles tiempo a las
niñas, niños y adolescentes para comprender

• Hay que buscar formas o estrategias para que comprendan la


importancia de las normas, los hábitos y las rutinas, asimismo buscar su
cooperación desde la motivación y no desde el miedo.
• Dialogar sobre las razones del porqué no deben hacer algo, cuáles son
los riesgos y las consecuencias de sus decisiones y comportamientos.
Hay que tener en cuenta que, de acuerdo con el proceso de desarrollo de
cada niña, niño o adolescente, ella o él irá comprendiendo e identificando
los riesgos y peligros a los que se enfrenta.
• Madres, padres o cuidadores pueden enseñarles a identificar los riesgos
y peligros, protegerlos de aquellos que los pueden dañar, garantizar que
se reduzcan, y enseñarles formas de manejar aquellos que pueden ser
inevitables como el acoso escolar por parte de otras niñas, niños o
adultos; todo esto sin utilizar golpes ni tratos humillantes.

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Desarrollar habilidades y conocimientos para saber cómo corregir y disciplinar
Las personas adultas que acompañamos a las niñas, los niños y adolescentes
tenemos la responsabilidad de desarrollar habilidades socioemocionales que les
permitan entender sus comportamientos y necesidades, así mismo estar en
capacidad de corregir, establecer normas, reglas y límites sin usar el castigo. Para
ello, es importante contar con sistemas de apoyo emocional a nivel familiar y
comunitario.

Factores protectores para el adecuado ejercicio como madres y como padres

En el módulo 3, hablaremos sobre los factores protectores en el desarrollo de las


niñas y los niños. Estos son definidos como las condiciones o los entornos capaces
de favorecer el desarrollo de individuos o grupos y, en muchos casos, de reducir
los efectos de circunstancias desfavorables.

A continuación, encontrarán algunas recomendaciones importantes para la


crianza con amor, respeto y juego:

• Reconocer a las niñas, niños y adolescentes como sujetos de derechos.


• Promover el juego ya que este es un lenguaje natural y una experiencia
vital, que favorece el desarrollo de la confianza y el vínculo afectivo con
ellas y ellos.
• Identificar y sanar las heridas emocionales que ustedes pudieron sufrir
durante su infancia, ya que esto evitará la repetición en la forma e
historia al educar a sus hijos.

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• Dialogar como posibilidad de conversación y entendimiento con las hijas
e hijos y todos los miembros de la familia.
• Participar de las actividades de las niñas, los niños y los adolescentes.

Creencias culturales y tradiciones respecto al castigo físico, los tratos


crueles, humillantes o degradantes

Seguramente muchas de esas frases las hemos escuchado con frecuencia en


nuestras comunidades o familias. Son frases que se han trasmitido de generación
en generación con muy pocos cambios y que justifican la existencia y uso del
castigo físico, los tratos crueles, humillantes y degradantes y la violencia contra
niñas, niños y adolescentes.

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En muchas ocasiones como madres, padres o cuidadores se considera que las
niñas, niños y adolescentes actúan de determinada forma para llamar la atención,
o para molestarlos y no porque necesitan algo, y por lo tanto los castigamos, les
pegamos o los ignoramos para que aprendan.

Los adultos tenemos una mirada de las necesidades y problemas de la infancia y


adolescencia basada en lo que nosotros sentimos y creemos, y por lo tanto en
muchas ocasiones respondemos a sus necesidades según nuestro estado de
ánimo, y recurriendo por comodidad al método más antiguo, conocido y tolerado;
el rejo, golpe, chancleta, correa, grito, insulto, pellizco, coscorrón, entre muchas
otras formas de castigo físico.

A continuación, algunos argumentos que te pueden servir para entender las


creencias culturales frente al castigo físico, los tratos crueles, humillantes o
degradantes.

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No olvidemos que el castigo físico, los tratos crueles, humillantes y degradantes
en la crianza y educación de las niñas, niños y adolescentes son una clara
vulneración de sus derechos, como lo pudimos confirmar con la revisión que
hemos realizado.

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Para finalizar es necesario reafirmar que, si es posible la vivencia de una
crianza amorosa como lo profundizaremos en el módulo 3, que posibilite el
desarrollo y protección de niñas, niños y adolescentes a partir de acciones
sencillas, cotidianas y muy importantes como:

• Ser sensibles frente a las


necesidades y emociones de las niñas,
los niños y los adolescentes.

• Generar un vínculo fuerte con


ellos a través de los límites, el amor y el
respeto mutuo.

• Ser firmes y amables, al mismo


tiempo de educarlos.

• Pasar tiempo de calidad en familia, jugando, escuchándose y divirtiéndose.


• Elogiar los pequeños y grandes logros de niñas, niños y adolescentes.

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• Escuchar y validar sus opiniones,
aunque no las compartamos.
• Reconocer sus necesidades y su
personalidad.
• Fomentar la confianza a través del
diálogo y la comunicación.
• Brindarles un entorno protector.
• Corregir conscientemente, con
profundo respeto, con argumentos
claros y sin ira.

• Ayudarlos a identificar sus


errores sin atemorizarlos.
• Ayudarlos a comprender con
amor, las consecuencias que traen
sus comportamientos y sus
decisiones.
• Invitarlos a aprender de sus
errores y a repararlos.
• Ayudarles a desarrollar las
habilidades que les hagan falta para
tener un buen comportamiento.

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Una crianza sin castigo físico, sin tratos crueles, humillantes o degradantes puede
pensarse como algo difícil de lograr, ya que nos enfrentamos a grandes dilemas, a
nuestros fantasmas y miedos; nos confrontamos con lo que piensan y opinan en
nuestras familias y entornos respecto a la aceptación del castigo o con lo que se
espera que hagamos como madres, padres o cuidadores.

Sin embargo, las cosas las podemos lograr si nos abrimos a cambiar y a reflexionar
sobre nosotros y nuestro quehacer con las hijas y los hijos con pequeños pasos
cada día y en cada momento; las respuestas están a nuestro alcance y son las
niñas, los niños y adolescentes quienes nos las pueden dar si nos damos el tiempo
de escucharlos.

En este taller les invitamos a reflexionar sobre cómo relacionarse con sus hijas e
hijos, a entender que es importante lo que se hace para ellas y ellos, pero también
comprender que la forma en que se realiza marcará la diferencia.

Para iniciar, te invitamos a ver el video ¡No es maña!:


https://youtu.be/O28qME0gW-c

Responde las siguientes preguntas en un documento de Word, conviértelo en


PDF y súbelo en el recurso AGREGAR ENTREGA:

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1. ¿Qué piensas de la forma de actuar de los padres del niño en la parte inicial
del video? ¿Te ha pasado? ¿Has visto a personas de tu entorno familiar que
reaccionan así con sus hijas, hijos, nietas, nietos, sobrinos y /o sobrinas?

¿Qué podrías cambiar en tu entorno familiar o cómo podrías ayudar a otros


padres o familiares, para cambiar la percepción de las niñas o niños como en el
video?

Referencias bibliográficas

• Cuartas, J. (2019). Violencia contra Niños, Niñas y Adolescentes: etiología,


consecuencias y estrategias para su prevención. Informe para el Instituto
Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF). ICBF- Universidad de Harvard.

• Cuartas, J. (9 de marzo de 2020). Tres razones para nunca utilizar el castigo físico,
de acuerdo con la ciencia. ICBF. Disponible en: https://www.icbf.gov.co/mis-
manos-te-ensenan/tres-razones-para-nunca-utilizar-el-castigo-fisico-de-
acuerdo-con-la-ciencia

• Congreso de la República de Colombia. (12 de abril de 2021). Gaceta del


Congreso. Año XXX- No. 271. Cámara de Representantes. Informes de
Conciliación. Informe de conciliación del proyecto de Ley número 320 de
2020 Senado – 179 de 2019 Cámara acumulado con el proyecto de Ley
número 212 de 2019 Cámara. Disponible en:
https://www.redjurista.com/Compilaciones2018/gacetasCongreso/2021/gc_
0271_2021.pdf

• Congreso de la República de Colombia. (14 de mayo, 2021). Ley 2089. Por


medio de la cual se prohíbe el uso del castigo físico, los tratos crueles, humillantes o
degradantes y cualquier tipo de violencia como método de corrección contra niñas,
niños y adolescentes y se dictan otras disposiciones. Diario Oficial No. 51.674.

• Consejo de Europa. (junio de 2008). Abolición del Castigo Físico Infligido a Niños
y Niñas. Preguntas y respuestas. Disponible en: https://rm.coe.int/168046d0ab

• Fonoinfancia. (22 de agosto de 2012). ¡No es maña! [Video]. YouTube.


https://www.youtube.com/watch?v=O28qME0gW-c

• ICBF. (24 de marzo de 2021) Prohibición del castigo físico es un hito en la


reducción del maltrato infantil y la protección de la niñez: Directora del ICBF.

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Disponible en: https://www.icbf.gov.co/noticias/prohibicion-del-castigo-
fisico-es-un-hito-en-la-reduccion-del-maltrato-infantil-y-la

• ICBF. (15 de abril de 2020). Creencias erróneas acerca del castigo físico que
debemos erradicar en nuestros hogares. Disponible en:
https://www.icbf.gov.co/mis-manos-te-ensenan/creencias-erroneas-acerca-
del-castigo-fisico-que-debemos-erradicar-en-nuestros

• ICBF. (12 de diciembre de 2017). Estrategia Construyendo juntos entornos


protectores. Manual Operativo. Disponible en:
https://www.icbf.gov.co/sites/default/files/procesos/mo9.pp_manual_operati
vo_construyendo_juntos_entornos_protectores_v5.pdf

• Naciones Unidas. Comité de los Derechos del Niño (2006). 42º período de
sesiones
Observación General No. 8 (2006).

• Save the Children Reino Unido, Isaza, L. (2006). Sin golpes, ni gritos.
Descubriendo la crianza positiva. Manual para agentes educativos para trabajar con
padres y madres. La imprenta Editores Ltda.

• Save the Children. (2021). Erradicación del castigo físico y humillante. Disponible
en: http://pasc-lac.org/portfolio-items/castigo-fisico-y-humillante/

• Unicef Uruguay. (18 de junio de 2020). Los mitos sobre la violencia hacia niños y
niñas. Disponible en: https://www.unicef.org/uruguay/mitos-violencia-contra-
ninos-ninas

• World Vision Perú. (30 de septiembre 2017). La historia de Pablo – Efectos de la


violencia contra la niñez [Video]. YouTube.
https://www.youtube.com/watch?v=-YSsit8r42w

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Remisión a fuentes complementarias

• Fundación ANAR. Diez consejos a los padres y las madres para evitar el castigo y
físico con sus hijos/as. Disponible en:
https://www.bienestaryproteccioninfantil.es/imagenes/tablaContenidos03Su
bSec/2020_Fund_ANAR_Consejos%20para%20evitar%20el%20castigo%20fi
sico.pdf
• fcarmevidal. (14 de febrero de 2017). ¿Por qué no sirven los castigos? [Video].
YouTube.
https://www.youtube.com/watch?v=HfrWSFH9Jks
• Píldoras de Psicología. (25 de noviembre 2019.). Castigos o consecuencias: ¿en
qué se diferencian? [Video]. YouTube.
https://www.youtube.com/watch?v=SpqOfDgOWPk
• UNICEF. (2014). Informe mundial sobre violencia contra niños y niñas.

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