ATENEO PONTIFICIO REGINA APOSTOLORUM

Facultad de Filosofía
MATERIA: Filosofía del hombre
PROFESOR: Ramón Lucas Lucas. L.C.
ALUMNO: H. Narciso Ismael Ponce Nerio. MATRICULA: 00015636
M.C.M.
RESUMEN 2: L´evoluzione biologica
TEXTO: Giuseppe de Rosa, Evoluzione dei viventi e fede cristiana, Creazione ed evoluzione. La
Civilitá Cattolica 2006 (IV), pp. 127-137; quaderno 3752.

El texto expone en el primer título, “La creación”, que esta no entra en la categoría de la acción de Dios
(Dios creando no obra) sino en la categoría de la relación puesto que la establece una relación de
dependencia de la creatura de Dios Creador. También expone el significado de la creación de la nada
(creatio ex nihilo) y dice: “Dios no pasa del no ser creador al ser creador. Él, en efecto, es eternamente
inmutable: Las creaturas dependen de él, pero el no depende de las creaturas. Son solo las creaturas que
comienzan a existir sin que haya un ser sobre el cual Dios haya obrado para dar el ser a las creaturas.
En el tema “Creación y evolución” se dice que “Dios ha creado el mundo como libremente sin ser
condicionado absolutamente por nada, por ello el mundo existe como el lo ha querido y se mueve según las
leyes que el libremente le ha dado”. Y más adelante dice: “Dios es causa no solo de la existencia, sino que es
también causa de las causas”. Se profundiza el tema y queda introducido el de la evolución con esta
pregunta: ¿Pero, como ha querido Dios que se muevan u obren? Se responde: “Dada la plena libertad de
Dios, se puede pensar que Él haya querido un mundo en evolución, en el cual, bajo la acción de las causas
naturales, estuviera el pasaje del “menos” al “más”, de la materia no viviente a la vida; primero unicelular y
después a formas de vida más complejas y diversificadas, hasta llegar al hombre”. Se expone aquí mismo el
hecho de que existe la oposición entre “creación” fisista, según el cual, Dios ha creado todas especies como
son hoy y la evolución atea, según la cual todo el mundo viviente se ha evolucionado casualmente, sin
ningún fin a conseguir.
El tercer tema “El fin del proceso evolutivo es el hombre” dice que “el espíritu trasciende la materia,
porque es capaz de pensarla, de valorarla, de modificarla; es capaz de hacerla cumplir con la cultura, el arte,
la ciencia y la técnica aquello que ella, dejada a sí mismo, no sería capaz de comprender. Concluye: En
realidad la “hominización” por el cual del ominide se ha pasado al hombre, ha sido precedida por formas
prehumanas que por ciertas formas de psiquismo y por ciertas mutaciones físicos, como el aumento de la
capacidad cárnica, preparan y disponen el cuerpo a la infusión del alma espiritual