El sujeto y la Ley -DEGANO

Se plantean dos concepciones de sujeto, por un lado, Sujeto en tanto sujeto de la tópica social, sujeto de la lectural
del campo de las relaciones de intercambio social, y por otro lado, Sujeto en tanto sujeto de deseo, en relación a la
lectura de la subjetividad histórico singular.

1. Sujeto –Ley: ambos términos están referenciando al otro, sosteniendo su significación en relación a la
significación del otro. Hablar de sujeto implica hablar de sujeción y esto lleva a reconocer las referencias de
la misma, las modalidades, articulaciones, mecanismos característicos, la legalidad que determina ese modo
de sujeción. Referirse a la ley independientemente de implicar a los sujetos que esa legalidad legaliza impide
comprender sus efectos, la dinámica de la estructura y la necesidad de su existencia. Ambos términos se
comprenden en su funcionalidad.

2. El ordenamiento jurídico: En el orden social, la ley esta representada por un conjunto de disposiciones con
algun ordenamiento en su inferioridad. Este conjunto de disposiciones conforma el ordenamiento jurídico,
constituyendo un espacio de legalidad escrita. Existe también un espacio de legalidad no escrita (los usos
cotidianos, modos de intercambio subjetivo privados, etc). Lo legal opera como un referente permanente en
la dinámica y conducta social. El efecto de la intervención de lo legal es la determinación de lugares y
posiciones y, consecuentemente la instauración de una tópica social entendida en términos de
estamentacion y organización por determinación de relaciones. Esta organización esta en general al servicio
de la preservación de estos supuestos básicos: en lo social: en la vida, la propiedad, la familia, la integridad
física, etc, los que constituyen un conjunto axiológico de ultima referencia de toda posible significación. En el
nivel de las representaciones sociales, como efecto, opera una cierta fantasmatica al respecto de la función
del sistema legal que esta dicha en tanto la afirmación de la funcion explicita del sistema. Esta configuración
al modo fantasmatico representa como dispersión social la falta de legalidad articulado al modo escrito.

3. El ordenamiento social: La operación de lo legal produce un gran efecto: la legalización, estabilización del
estado del sistema organizativo, es decir, el mantenimiento de un cierto ordenamiento no solo de los sujetos
sino del sistema de jerarquías existentes. Implica la función esencial de control de todo el sistema a efectos
de evitar su desvirtuacion y de este modo asegurar el perpetuamiento. En los términos de Beneficio general
o Bien común se circunscribe una serie de prácticas a veces punitivas o lesionantes para la estructura
subjetiva, que tiene por objeto determinar o trazar limites del espacio de legalidad. Una de las funciones de
lo que denominamos ley o lo legal es establecer que es, justamente lo legal y que no lo es mediante un
sistema de producción de significaciones y establecer una escala de valoraciones, donde como consecuencia,
esta comprendida la determinación de lo que se puede caracterizar como lo normado y lo no normado, es
decir, lo ajustado a la norma o no, y también en extensión lo normal y lo anormal.

4. Sujeto de la Norma-normatividad: Ultima consecuencia de la operación de la Ley, los efectos de estas

operaciones se van produciendo encadenados en cadenas de efectuación. Los efectos que estas
determinaciones primeras producen en otros niveles como el de determinación de la condición o dimension
subjetiva. La anormalidad, esta vinculada en su determinación como un sistema normativo que regula en
intención el intercambio intersubjetivo y que por sus efectos en extensión produce discriminación
intersubjetiva. La efectivizacion de practicas coercitivas sostenidas y sosteniendo el sistema legal, aseguran
el control del sujeto social de acuerdo a situaci0nes esperables y en preservación de la legalidad vigente. Las
practicas psiquiátricas clásicas parecieran jugar un papel que por coincidencias operativas coadyuvaran a la
efecicacia en el eje de certificación o configuración de paramentros de normalidad.

5. Legalidad –Ilegalidad: Se entiende que la legalidad es lo característico referente a la ley, a lo legal. Tambien
es entendible que existiendo un circuito de legalidad, también exista un circuito de elementos no ajustados a
ese modo y por tanto no legales, ya que en existencia de lo legal, lo permitido, es necesario en oposición y
por su producción la existencia de lo no permitido. Si existe un campo de legalidad,, entendido como un
recorte dentro de un inmenso universo de elementos, es evidente que fuera de ese recorte o circuito exista
un resto, otro conjunto de elementos referido a lo ilegal, lo delictivo en términos del sistema punitivo. El
perfil que va a indiciar la operación de la ley, adjudicándole asi un territorio o legalidad de pertenencia que
va a excluir a ese resto sancionándolo.
Resulta así que el efecto de la Ley es determinar un territorio de prohibiciones. Desde el discurso legal, este ultimo
es el termino de lo ilegal, lo alegal, lo sin ley, por lo tanto aquello que no existe en tanto valor y pasible por ello de
una marginación del circuito legal por inexistencia en su territorio. En la operación fundante del sistema legal, la Ley
marca su territorio y el de la ilegalidad. Para el primero otorga la permisividad y el beneficio de la Ley y para el
segundo de la sanción por la prohibición. En la medida que lo penaliza por el mismo efecto de la operación, lo
constituye le da una categoris, con lo que resulta que la sanción sanciona punitivamente y sanciona
constitutivamente. Al tratarse de un territorio, es entendible que contenga una estructura interna, una legalidad
propia que propone por lo tanto también una interrogación implícita en la afirmación legal.

6. El sujeto de la ilegalidad: El recorte de lo ilegal, constituye un espacio que su bin fuera del circuito de la ley,
pero no por ello no sea poseedor de una legalidad. Es necesidad que posea una circulación ajustada a una
legalidad regulatoria y que de sentido al acto ilegal en general. Si no se entienden las cosas en estos
términos, el acto ilegal aparece como el sin sentido. La legalidad de lo ilegal. El acto de relegar al transgresor
de la Ley constituye un acto de relegar una relegalizacion, es decir, legalizarlo en otro legalidad. En definitiva,
producir un sujeto de la Ilegalidad.

La internación de un sujeto en instituciones de la ilegalidad, es constituyente de pertenencia de los sujetos que

transitan por las mismas.

7. Legalidad y constitución: La funcion constituyente esta escrita en la escritura de la Constitucion como

soporte fundante de todo el sistema jurídico escrito. La constitución de la constitución por lo tanto es la
operación constitutiva pura en tanto constituye el espacio de constitución-constituyente del circuito de la
legalidad. Toda legalidad constituye una pre-vision de una periodicidad esperable del estasdo de equilibrio
de un sistema de ordenación. Hablamos del sujeto en aislamiento mediante la internación. Se da un doble
efecto: por un lado la sanción en tanto constitución del sujeto como Sujeto de la internación, sujeto de la
anormalidad, y por otro, la confirmación del circuito psicopatológico en que queda inscripto sancionado, ya
que su conducta prevista va a ser leida y registrada en mas de ese referente que toma el lugar de elemento
significador o proveedor de sentido en tanto es la condición de lectura de la dimensión subjetiva desde el
discurso psiquiátrico clásico y las instituciones que lo sostienden. Toda manifestación del sujeto va a quedar
registrada en funcion de la legalidad psicopatológica que lo constituye como sujeto de ese referente.

Lo que la ley regula es un modo de relación entre sujetos y asegura un modo subjetivo por la funcion constituyente
que ejercita. La legalidad produce y reproduce un modo de funcionalidad del sistema que legaliza y de los sujetos de
la misma determinadndo por efecto un modo, un modelo de subjetividad esperable.

8. Legalidad y poder: Se constituye algo y ese algo constituye a la vez la ley. La ley aparece mas bien como
representando ella misma otra cosa, que es un modo de intercambio determinado. Al referirnos a modos de
intercambio lo estamos haciendo a determinados modos o formas organizativas de la producción y
eproduccion de estructuras subjetivas, que en lo social se traduce en los modos cotidianos de resolución de
necesidades como trabajo, educación, transmisión cultural, recuperación de la salud, el bienestar mismo. El
verdadero sentido de la legalidad aparece en la preservación, reproducción, funcionalidad y constitución
subjetiva en modos de intercambio que en ultima instancia van a respetar un principio de distribución de
beneficios determinado de ese funcionamiento. Estos beneficios en principio van a ser negados a los sujetos
sancionados como de la legalidad. Todos aquellos elementos que hagan peligrar el equilibrio del sistema de
distribución del poder van a caer dentro del terreno de la ilegalidad. Si el sistema legal tiene como funcion
esencial la preservación de un sistema de jerarquías de distribución y usufructo del Poder, garantizando para
ello un modo determinado y conveniente de intercambio social y subjetivo mediante un equilibrio y
organización a ese respecto y asegurados por la funcion constituyente y sancionante que legaliza
permitiendo y prohibiendo. cabe la interrogación por la posición del Sujeto respecto de la misma.

9. Sujeto –Alienacion –Ley: La relación en que queda el sujeto respecto del circuito de lo legal va a estar
determinada por la posición del mismo respecto de su condición de acceso a los lugares de Poder. Ese lugar
va a sancionar al sujeto constituyéndolo en sujeto del poder, no sujeto poder. La relación de sanción es
constitutiva y de exigencia estructural en el campo del sujeto y su inexistencia detonante de un espacio de
carencia del deseo. El poder es una funcion ajena al Sujeto, o condición de ajenidad radical y representa el
 lugar del Otro como alteridad, del que queda el Sujeto en relación de diferenciación –sancion. La ley por lo
tanto provee el entramado en que el sujeto se trama en su posición esencial del sujeto del deseo. La
humanidad supone el atravesamiento de la condición subjetiva por una legalidad de distribución del poder y
un renunciamiento al goce (del poder). Estos sujetos constituidos de ese modo no constituyen por si la
legalidad, no la sancionan, solo la sostienen ajustándose a los modos de intercambio por ella determinados
siendo ese lugar y modo de sanción.

El sujetamiento que la ley produce es diametral respecto del sujeto y su libertad, ella debe caer para que el sujeto
sea sancionado como tal. El sujeto debe salir de su lugar natural para sujetarse a otro donde reside la ley.

La alienación lo será por lo tanto de la posibilidad de gozar del Poder, es decir, de la condición de unicidad
indiferenciada de acoplamiento gozoso en una inclusión que borra la diferencia con el Otro que queda asi subsumido
también en Uno.

La sanción del sujeto por la Ley será por lo tanto de sujetamiento a sistemas extraños al mismo en tanto ajeno a la
distribución del poder. La Ley asi resulta la ley de distribución del Poder, y el sujeto para serlo debe guardar una
relación de alienación con ella en condición de su libertad. Y es en su condición, sancionado y en relación de
alienación estructural que será a la vez confirmante de lo legal.