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Módulo 3.

Violencias y sus implicaciones en la


vulneración de derechos

Ilustración: Pch.vector, Conjunto de personas enojadas, s.f., Freepik, disponible en <


https://www.freepik.es/vector-gratis/conjunto-personas-enojadas-que-tienen-conflictos-su-
esposa-esposo-e-hijo_6703791.htm#&position=13&from_view=user>.

Objetivo específico

• Reconocer las violencias en la comunidad escolar a través de la


identificación de sus tipos, modalidades y las relaciones asimétricas de
poder, para su prevención en los contextos escolares.
Introducción

La escuela es la institución diseñada para impartir educación a las personas en


diferentes etapas de la vida. La labor y el aporte social que la educación hace en
cualquier país es enorme e indispensable para su bienestar, por ello es
fundamental en cualquier sociedad del mundo. Sin embargo, la escuela; aquel
espacio en donde convergen diferentes personas, como lo vimos en el módulo
anterior, no está exenta de enfrentarse a diversas problemáticas relacionadas
con conflictos o con el fenómeno de la violencia al interior del centro educativo y
entre sus actores.

En este tercer módulo vamos a identificar el fenómeno de la violencia y sus


relaciones de poder. Así también, tendrás la oportunidad de conocer las diversas
expresiones que la violencia puede tener dentro de la comunidad escolar, tales
como la violencia institucional, la violencia laboral y la violencia de género entre
algunas otras.

Todo lo anterior te servirá para que puedas asociar de una manera más clara,
cómo es que las diversas expresiones de la violencia afectan y tienen un impacto
negativo en el ámbito de los derechos humanos de las personas involucradas.
Actividad diagnóstica. Violencia, ¿innata?

1. Violencia y relaciones de poder1

La violencia es una construcción socio cultural e histórica, que se deriva de la


superestructura del desequilibrio en las relaciones de poder. De conformidad con
la Organización Mundial de la Salud “la violencia es el uso intencional de la
fuerza física, amenazas contra uno mismo, otra persona, un grupo o una
comunidad que tiene como consecuencia o es muy probable que tenga como
consecuencia un traumatismo, daños psicológicos, problemas de desarrollo o la
muerte”.2

1 Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México “Nombrar-nos y habitar-nos desde la


perspectiva de género” (Documento de trabajo), Ciudad de México, CDHCM, marzo 2022, pp. 12-
129.
2 Organización Mundial de la Salud OMS, “Informe Mundial sobre violencia y salud”, Washington,

D.C.Organización Panamericana de la Salud, Oficina Regional para las Américas, 2002, p.14
disponible en <
https://www.who.int/violence_injury_prevention/violence/world_report/es/summary_es.pdf>,
página consultada el 11 de febrero del 2022.
La definición anterior, expone que existe un elemento de intencionalidad del
ejercicio del poder para dañar no sólo a una persona, sino también a una
comunidad. Sin embargo, es preciso aclarar que el elemento de
intencionalidad no es requisito indispensable para que una conducta se
pueda clasificar como violencia. Es decir, una persona puede actuar de forma
violenta sin proponérselo.

La violencia, contiene una carga de evidente albedrío, de toma de decisiones por


parte de quien o quienes la perpetran. La violencia no se podría entender como
una simple respuesta ante algo amenazante, porque no es una conducta innata,
sino aprendida; no es natural o heredada, sino social

1.1 Tipos y modalidades de la violencia

La Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia 3 realiza
una distinción de la violencia entre tipos y modalidades. Los primeros se refieren
a las afectaciones en las diferentes esferas de la persona y las modalidades se
relacionan con los espacios en donde se manifiesta la violencia.

3
Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida libre de Violencia, publicada en el Diario Oficial
de la Federación el 1 de febrero del 2007; última reforma publicada el 1 de junio del 2021,
disponible en <https://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/LGAMVLV_010621.pdf>, página
consultada el 11 de febrero del 2022.
Cómo puedes observar, la violencia es un fenómeno complejo y multifactorial
que afecta de manera importante la integridad de las personas en diversos
ámbitos. Sus diversas manifestaciones y modalidades se pueden reproducir
dentro del ámbito laboral con características muy particulares, sin embargo,
debemos de tener presente que la violencia puede desarrollarse en diversos
ámbitos y con algunas manifestaciones complejas como lo es a través de la
categoría de género, entre pares o en el ámbito institucional, que iremos
analizando un poco más adelante.

1.2 Relaciones de poder

Uno de los temas importantes de este curso es el de las relaciones de poder, pues
en gran medida a partir del abordaje y la explicación de este tipo de relaciones,
es posible comprender de manera amplia los supuestos bajo los cuales se detona
y se conforman los diversos tipos y modalidades de violencia. Efectivamente
violencia y poder son dos conceptos diferentes que no significan lo mismo, pero
que en determinados contextos pueden ser elementos complementarios en el
ámbito de las relaciones e interacciones humanas en donde se detona la violencia.
Poder

Violencia

Es verdad que en sí mismas, no todas las relaciones o interacciones humanas son


relaciones violentas o desiguales, pero es importante visibilizar la manera en que
el abuso del poder en las relaciones jerárquicas, puede afectar o limitar el goce
o disfrute de los derechos humanos de las personas.

Partimos de una premisa fundamental para el análisis de estas relaciones de


poder, y está, es la afirmación de que las relaciones de poder no se centran ni se
configuran exclusivamente en la figura del Estado y en las diversas instituciones
que lo conforman. Si bien es verdad que los poderes del Estado son claramente
señalados y comprendidos como poderes públicos formales y que son a la vez
constituidos por las diversas instituciones que lo conforman, también es verdad
que el poder y sus relaciones también intervienen en el ámbito de lo social y
escolar.

Esto implica entender que el poder no es algo que se encuentre situado de forma
exclusiva en algún punto de la división de poderes del Estado, sino que la figura
del poder también está contenida en el ámbito social de las relaciones humanas.
El hogar

Los métodos La
de enseñanza familia

Descentralizar el concepto
del poder de la figura del
Estado y situarla en las
El relaciones humanas, abre las El
noviazgo posibilidades de situar las trabajo
relaciones de poder en
diversos contextos y
escenarios diversos a la
figura estatal como:

La La
amistad escuela

El
deporte

Elaboración propia

El fenómeno del poder dentro del ámbito de la influencia social es un tema que
por demás nos interesa, pues de él depende y ha dependido de manera histórica
en gran medida, la conquista social del reconocimiento de todos aquellos
derechos humanos de los cuales hoy somos titulares.

El poder social está profundamente relacionado con las capacidades que diversos
actores en el ámbito de la vida pública y social tienen, para modificar, cambiar o
instituir nuevas estructuras y diversos objetivos que se consideran importantes
o fundamentales. El poder social lo podemos encontrar manifestado en diversos
contextos sociales, incluido por supuesto el ámbito educativo.

La descentralización del ejercicio del poder de la figura del Estado, abre la pauta
al reconocimiento de la organización social como una herramienta clave para la
exigibilidad de los derechos humanos, pues si bien es verdad que los derechos
humanos tienen un reconocimiento jurídico tanto nacional como internacional,
también es verdad que la movilización social muchas veces ha sido clave para la
exigibilidad y justiciabilidad de estos derechos ya previamente reconocidos.
Para identificar algunos ejemplos del poder social en el contexto del ámbito
educativo, podemos nombrar diversos sucesos históricos de nuestro país o
internacionales, en donde la presencia de estos actores ha sido clave en nuestra
historia.

Podemos identificar y reconocer diversas movilizaciones sociales a favor de los


derechos humanos que han sido impulsadas y abanderadas por diversas
organizaciones estudiantiles y docentes a modo de ejemplos.

Elaboración propia

El movimiento social en México y en diversas partes del mundo, está


profundamente relacionado con las luchas y reivindicaciones del cumplimiento de
los Estados con los derechos humanos previamente reconocido y, de la
legitimidad de sus demandas como una manifestación del poder social, se han
construido diversas historias de exigibilidad de los derechos humanos en el
ámbito social.
Ilustración: OpenClipart, Marcha, s.f., Pixabay, disponible en
<https://pixabay.com/es/vectors/multitud-demostraci%c3%b3n-bandera-1294991/>.

Las relaciones jerárquicas o asimétricas de poder, se presentan como una forma


concreta de mantener o extender el control, el dominio, el status o la superioridad
de una persona o un grupo con respecto a alguna otra, o de una creencia o
conjunto de creencias respecto de otras. El poder en este sentido, es un ejercicio
que está en flujo constante en las relaciones humanas en diversos contextos de
la vida social en general, lo cual, por supuesto no niega que también dentro de
la figura del Estado se desarrolle el ejercicio del poder, sino que tan solo niega
su exclusividad.

Es importante del mismo modo señalar que en el ámbito del derecho, una vez
declaradas las libertades y derechos de la ciudadanía se democratiza de manera
concreta el ejercicio del poder, sin embargo, no debemos perder de vista también
que las relaciones de poder se manifiestan simultáneamente en espacios distintos
al Estado afectando los derechos que esté reconoce. En este sentido, las
manifestaciones de abuso de poder expresadas en forma de negligencias y
omisiones, pueden ser cometidas por personas servidoras públicas del Estado,
entre ellas las autoridades educativas como lo hemos podido comprobar en
diversos casos de los arriba citados.
2. Expresiones de las violencias en la comunidad escolar

Los centros educativos son espacios de encuentro, de aprendizaje, de


convivencia, de interacción. Son espacios multidisciplinarios, plurales, lugares
donde se genera y se construye el aprendizaje. Al interior de estos, confluyen
diversos sujetos con identidades, personalidades, visiones y subjetividades
diversas. Los conflictos y las violencias que suceden al interior del ámbito escolar
no deben ser evadidas ni minimizadas, son también una problemática que debe
ser atendida de una forma pertinente y que, sin embargo, muchas veces no le
hemos dado la importancia debida a las causas y repercusiones que ella tiene. Te
preguntarás, ¿cómo se da la violencia al interior de la escuela?, ¿qué papel juegan
las y los alumnos frente a la violencia?, ¿qué papel juega el personal docente,
administrativo y directivo? ¿cómo prevenirla y enfrentarla?

Los centros escolares al igual que otros espacios sociales e institucionales


diversos, están inmersos en entornos que pueden tornarse conflictivos, en
general, cualquier espacio de la vida social puede presentarse como tal. Sin
embargo, no resulta extraño que algunas formas de violencia se presenten y se
reproduzcan en su interior en donde están involucrados diversos actores
pertenecientes a él. Tal como lo afirma Silvia Conde: 4

4
Silvia Conde, Entre el espanto y la ternura. Formar ciudadanos en contextos violentos, México,
Ediciones Cal y Arena, 2011, p. 117, disponible en <
https://www.academia.edu/19785594/Entre_el_espanto_y_la_ternura_Formar_ciudadanos_en_e
spacios_violentos>, página consultada el 11 de febrero del 2022.
la violencia escolar de la que
somos testigos muchas veces
no es un simple reflejo de lo
que ocurre allá afuera en la
sociedad, sino que la escuela
es también, a menudo, una
institución reproductora y
generadora de violencia, de ahí
que se debemos analizar las
relaciones abusivas,
excluyentes y de maltrato que
en ella suceden.

Elaboración propia

La escuela es una institución histórica y una institución social, que dentro de ella
se asientan todas las relaciones interpersonales de los miembros que conforman
la comunidad escolar. El espacio educativo en sí mismo, es un espacio plural en
donde con fluyen diversas subjetividades, ideas, experiencias, por lo que, en este
contexto, debemos tener presente que las relaciones interpersonales entre las
partes son consustanciales5 a pesar del reconocimiento de esta pluralidad y esta
diversidad. No obstante, dentro de las relaciones que se tejen al interior del
centro educativo, también se generar diversas formas de violencias, maltratos y
tratos diferenciados injustificados que afectan la concepción y el sentido de la
pertenencia a la comunidad escolar.

La violencia supone el abuso de poder de un sujeto o grupo de sujetos sobre otro,


siempre más débil o indefenso. “La violencia implica la existencia de una
asimetría entre los sujetos que se ven implicados en los hechos agresivos y surge
cuando un individuo impone su fuerza y su poder en contra de otro, de forma que

5 Que es de la misma sustancia, naturaleza y esencia que otra cosa.


lo maltrate, lo dañe o abuse de él física o psicológicamente, de manera directa o
indirectamente”6.

Para enriquecer el análisis y el abordaje de este tema la vamos a definir como7:

6 Rosario Ortega y colaboradores, La convivencia escolar: qué es y cómo abordarla, Programa


Educativo de Prevención de Maltrato entre compañeros y compañeras, junta de Andalucía,
Consejería de Educación y Ciencia, 1997, p. 32, disponible en
<http://educagenero.org/Recursos/convivencia_Rosario-Ortega>, página consultada el 29 de
octubre de 2020.
7
Felipe Ajenjo y Joan Bas, Diagnóstico de violencia escolar, Chile, Pontificia Universidad Católica
de Chile/Fundación Paz Ciudadana, 2005, disponible en <
https://biblioteca.cejamericas.org/bitstream/handle/2015/506/violenciaescolar12.pdf?sequence=
1&isAllowed=y >, página consultada 12 de noviembre de 2020; Jorge Varela, et al., Validación de
instrumento para medir violencia escolar, Perú, Fundación Paz Ciudadana, 2010, p.12, disponible
en
<https://biblioteca.cejamericas.org/bitstream/handle/2015/4059/violenciaescolar4.pdf?sequence
=1&isAllowed=y>, página consultada el 10 de noviembre de 2020 y Víctor G. Cárdenas, Violencia
en la escuela secundaria. La percepción de los alumnos sobre los problemas de conducta, en
Memorias del X Congreso Nacional de Investigación Educativa. (Área 17 Convivencia, Disciplina y
Violencia en las Escuelas), México, COMIE, 2009, p. 3, disponible en
<http://www.comie.org.mx/congreso/memoriaelectronica/v10/pdf/area_tematica_17/ponencias/
1153-F.pdf>, página consultada el 10 de noviembre de 2020.
En consecuencia, la violencia escolar es originada y desarrollada en la escuela o
en sitios aledaños que estén vinculados a ella, afectando los procesos de
enseñanza–aprendizaje y la estabilidad física y mental de las personas
involucradas.

A partir de la definición de violencia escolar, podemos identificar y describir tres


dimensiones, construidas a partir de tres tipos de vínculo: la violencia entre
pares, la violencia institucional o de la escuela y la violencia del entorno hacia la
escuela. Cada una de ellas representativas de un tipo de relación social
establecida por miembros de la escuela.8

Debemos señalar, que, para los fines de este curso, nos ocuparemos
exclusivamente de analizar las dos primeras formas de violencia, sin embargo,
también analizaremos otras manifestaciones de violencia que también se
reproducen en el ámbito escolar o académico, como lo es la violencia laboral y la
violencia de género, todo esto, para poder tener una visión más integral y más
completa del fenómeno de la violencia y sus manifestaciones en el ámbito
académico.

2.1 La violencia entre pares

El clima de violencia que se genera en la cotidianeidad de los centros escolares,


puede alcanzar un tipo específico de violencia como lo es la violencia entre pares.

8 Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual, “Guía para el tratamiento


mediático responsable de la violencia institucional”, 1era edición, 2d reimpresión, Ciudad Autónoma
de Buenos Aires, 2016, pp. 18, disponible en
https://archivo.defensadelpublico.gob.ar/sites/default/files/guia_para_el_tratamiento_mediatico_
responsable_de_la_violencia_institucional.pdf, página consultada el 11 de febrero del 2022.
2.2 La violencia institucional o de la escuela

La violencia institucional en cualquier nivel y en


cualquier ámbito de competencias, se ejerce por
acción y por omisión de las autoridades. Este
tipo de violencia ha sido muy común en diversos
ámbitos del mundo institucional, sin embargo,
no por ello, debe estar permitida ni mucho
menos debe quedar impune.

La violencia institucional es “una forma


anómala9 que tienen los representantes del
Estado cuando violan o permiten que se violente
su propia normativa institucional, cuando
Ilustración: Clker-Free-Vector-
Images, Violencia, s.f., Píxabay, utilizan sus propias facultades para exceder sus
disponible en < atribuciones y desde su propia institucionalidad
https://pixabay.com/es/vectors/al cometer, ocultar o legitimar abusos de poder.
boroto-violencia-
anarqu%c3%ada-41342/>. También hablamos de violencia institucional
cuando se ejerce algún tipo de violencia en
contra de la población a la cual debe respetar y
proteger”.10

Algunos ejemplos son:

- Los desalojos
- La confrontación
- La intimidación institucional

9
Que es irregular o anormal.
10
Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual, Guía para el
tratamiento mediático responsable de la violencia institucional, Ciudad Autónoma de
Buenos Aires, 2016, p. 4, disponible en
<https://archivo.defensadelpublico.gob.ar/sites/default/files/guia_para_el_tratamiento_
mediatico_responsable_de_la_violencia_institucional.pdf>, página consultada el 11 de
febrero del 2022.
- El uso arbitrario de la fuerza
- Las detenciones ilegales
- La coacción por sí misma
- El atentar en contra de los derechos y las libertades políticas y civiles.

Todas estas formas no abonan en nada a la cultura de legalidad ni al Estado de


derecho, sino por el contrario, contribuyen al deterioro de las instituciones de
Estado cuyo fin es adverso a lo anteriormente expuesto.

La observación y el estudio de las dinámicas y las relaciones institucionales,


permiten identificar el abuso del poder en una interacción social en la que
estuviera presente la asimetría del poder, en donde a partir de esta, puede
causarse un daño o un impacto en aquella otra persona que vive una situación
de desventaja, de subordinación y de asimetría en contraste con la otra. Las
relaciones humanas en la cotidianeidad son imprescindibles y son necesarias,
pero en determinados contextos y situaciones, un uso inadecuado del poder en
el ámbito institucional puede detonar una violación a los derechos humanos de la
población.
Cómo pudiste observar estas formas de actuar están relacionadas con el uso
arbitrario de la autoridad y con el abuso del poder, sin embargo, no debemos
perder de vista un criterio fundamental: en el contexto escolar, a la
comunidad escolar no solo podemos pensarla como las alumnas y
alumnos que son, o como el personal docente y administrativo de tal o
cual escuela, sino que en todo momento a todas estas personas debemos
entenderlas como personas sujetas de derechos, las cuales ejercen su
legítimo derecho a la educación sin perder la titularidad de todos los demás
derechos de los que son titulares.

Al interior de los espacios educativos, las autoridades educativas en su conjunto


se convierten en personas garantes de derechos por lo que asumen el deber de
respeto y protección de los mismos, lo cual conlleva que estas autoridades
educativas deberán en todo momento actuar y tomar las medidas necesarias,
para salvaguardar la dignidad e integridad de la comunidad estudiantil y de todas
las personas.

La violencia que puede ser ejercida en el contexto de la comunidad escolar, ya


sea en contra de las personas estudiantes, o en contra del personal
administrativo, de servicios y docente, y en general, en contra de cualquier

miembro de la comunidad escolar, debe de atenderse de manera preventiva y


cuando tenga sus primeras manifestaciones, pues se incurre en omisiones en
cuanto al deber de cuidado y protección de la integridad de las personas, por lo
que las diversas prácticas o conductas autoritarias pueden traducirse también en
vulneración a los derechos humanos de las personas; vulneración al trato digno,
a una vida libre de violencia, a la integridad y seguridad personal, al derecho a
la educación y al sano desarrollo, entre otros más.

Los centros escolares no deben convertirse en espacios de riesgo y lugares poco


propicios para el adecuado desarrollo de actividades académicas en el marco de
una sana convivencia.
2.3 La violencia por razones de género

Ahora bien, todas estas manifestaciones de violencia escolar, cobran un matiz


diferenciado y más específico, cuando pensamos la violencia de la que son objeto
las niñas y las mujeres.
2.4 La violencia laboral11

Se suscita entre las personas que comparten el espacio laboral, en donde el poder
es un elemento importante, pues su ejercicio puede generar condiciones de
ventaja o desventaja para las personas involucradas.

Así pues, las consecuencias de la violencia laboral pueden tener un impacto


distinto en cada persona trabajadora que lo padece, éstas varían de acuerdo a
aspectos tales como el sexo, la edad, la condición social, la personalidad, la
preparación académica, la experiencia laboral o la situación familiar.

Por regla general las consecuencias recaen en la salud física y emocional, en las
condiciones del empleo, los ingresos económicos e incluso en las relaciones y
dinámicas familiares.

11 Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México “Erradicación de las violencias en los

espacios laborales” (Documento de trabajo), CDHCM, marzo 2022, pp. 12-129.


2.4.1 Acoso y hostigamiento sexual12

Ilustración: Mohamed_hassan, Abuso, 2019, Pixabay, disponible en


<https://cdn.pixabay.com/photo/2019/09/23/17/58/harassment-4499303_960_720.png>.

Cómo pudiste observar en el recurso anterior, en la violencia laboral se encuentra


presente el acoso y hostigamiento sexual, lamentablemente ninguna persona
está excepta de sufrirlas en su centro de trabajo, de hecho, las mujeres son más
frecuentemente víctimas de asedio que los hombres, porque en nuestras
sociedades, patriarcales, el poder jerárquico del hombre va acompañado de poder
sexual, es decir, del dominio del varón.

A continuación, se enuncian la definición y la diferencia entre acoso y


hostigamiento sexual.

12Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, “Prevención del acoso y el hostigamiento sexual”
(Documento de trabajo), CDHCM, marzo 2021, pp. 67-71.
Elaboración propia a partir de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Modelo de protocolo
para prevenir, atender y erradicar la violencia laboral en los centros de trabajo, México, STPS,
marzo 2020, p.9, disponible en <https://www.gob.mx/stps/documentos/modelo-de-protocolo-
para-prevenir-atender-y-erradicar-la-violencia-laboral-en-los-centros-de-trabajo>, página
consultada el 11 de febrero de 2022

Es decir, la diferencia más significativa entre ambos delitos radica en que


mientras el acoso se da en una relación entre personas con igualdad en la
jerarquía, en el hostigamiento hay una relación desigual de poder. Es decir,
mientras el acoso sexual tiene lugar entre compañeras y compañeros de trabajo,
el hostigamiento sexual ocurre de personas superiores jerárquicas a
subordinadas.

Se ha naturalizado la violencia en un sinnúmero de formas y el


acoso/hostigamientos sexuales no son la excepción. Por ello, para identificarlos
mejor, se pueden clasificar en conductas verbales, no verbales y verbales/físicas.
Por ejemplo:
No Verbal y
Verbal
verbal físico

Chistes, comentarios o Acercamientos Abrazos y contacto físico sin


preguntas de naturaleza excesivos, miradas y consentimiento,
sexual, sobre el estilo de expresiones acorralamientos, violencia
vida, la orientación sexual, insinuantes, entre física, presión para obtener
piropos, insinuaciones otras. contactos o relaciones
sexuales, llamadas o sexuales, a cambio de
mensajes de texto a través beneficios en ámbitos
de cualquier red social, escolares, deportivos,
entre otras. laborales, etc., amenazas de
despido, violación, entre otras
conductas.

Elaboración propia a partir de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, op. cit.

Son diversas las consecuencias del acoso y el hostigamiento sexuales. El acoso


sexual afecta negativamente tanto a la persona trabajadora como al proceso, ya
que repercute sobre la satisfacción laboral, aumenta el ausentismo y disminuye
el ritmo de trabajo debido a la falta de motivación.

Mas específicamente sobre la persona afectada tiene consecuencias psicológicas


como estrés, ansiedad, rechazo al trabajo, pérdida de interés en lo antes les
parecía atractivo, depresión, estado de nerviosismo, desesperación, impotencia,
y consecuencias físicas como trastornos del sueño, dolores de cabeza, náuseas e
hipertensión, entre otros.

En conclusión, la violencia laboral se puede manifestar de diversas formas, por


lo tanto, es importante identificar acciones, actitudes y comportamientos, los
cuales nos ayudarán a prevenir, y buscar herramientas para su abordaje.

Actividad de aprendizaje. Escuela, una institución


reproductora y generadora de violencias
Conclusión del módulo

Después de todo esto que hemos visto hasta ahora, es innegable que se debe
fortalecer una cultura de promoción y garantía de los derechos humanos en el
ámbito laboral y educativo. Consolidar un clima laboral basado en el respeto
mutuo, en la comunicación asertiva y generar las condiciones óptimas para el
desarrollo individual y colectivo de todas las personas que forman parte de ella,
es necesario para enfrentar y disminuir las violencias. Es fundamental y
estratégico desterrar cualquier forma de violencia que se produzca en su interior
y que resulte contraria a sus propósitos y funciones. La violencia echa raíces en
la desigualdad de trato, en la asimetría de poderes y de relaciones, pero sobre
todo las echa en el contexto de la impunidad y la indiferencia.

Algunas de estas formas de desigualdad se encuentran profundamente


incorporadas en las mentalidades y el quehacer cotidiano, al grado de que se
consideran parte de la dinámica propia de las relaciones sociales, comunitarias y
laborales. La violencia en todas sus expresiones transgrede los derechos,
ocasionan daños y refuerzan un esquema de poder. Ante ello, es necesario
desmantelar la lógica que subyace en las relaciones inequitativas o asimétricas,
identificar las conductas que constituyen un daño a la dignidad de las personas y
desterrarlas.

Si la violencia es resultado de una decisión, la tarea imprescindible es tomar la


decisión de no ejercerla. Finalmente, es evidente la necesidad de erradicar estas
prácticas que lesionan y desvistan los propósitos académicos de todas las
instituciones de enseñanza, pues generan un ambiente laboral hostil, indigno y
atentan contra los derechos humanos. Debemos trabajar articuladamente para
favorecer una adecuada convivencia escolar para beneficio de todas las personas.
Autoevaluación. Desaprender la violencia

Cuestionario final del módulo 3


Bibliografía

Básica

Ajenjo, Felipe y Joan Bas, Diagnóstico de violencia escolar, Chile, Pontificia


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Cárdenas González Víctor Gerardo, La percepción de los alumnos sobre los


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<http://www.comie.org.mx/congreso/memoriaelectronica/v10/pdf/area
_tematica_17/ponencias/1153-F.pdf>, página consultada el 10 de
noviembre de 2020.

Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, “Nombrar-nos y habitar-


nos desde la perspectiva de género” (Documento de trabajo), Ciudad de
México, CDHCM, marzo 2021.

Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, “Erradicación de las


violencias en los espacios laborales” (Documento de trabajo), Ciudad de
México, CDCHCM, marzo 2022.

Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México “Prevención del acoso y


el hostigamiento sexual” (Documento de trabajo), Ciudad de México,
CDCHM, marzo 2021.

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CNDH, 2017, p. 18, disponible en
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violentos, México, Ediciones Cal y Arena, 2011, 217 pp., disponible en <
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Autónoma de Buenos Aires, 2016, pp. 18, disponible en
https://archivo.defensadelpublico.gob.ar/sites/default/files/guia_para_el
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