Está en la página 1de 3

Teoría sociológica IV.

Preentrega trabajo evaluación final [Elías-Bourdieu]. 13/12/2020


Reible, Mauro Tomás.

Problematización fenómeno netiqueta desde la matriz teórica conceptual de P.,


Bourdieu.

En concreto, la teoría social de Pierre Bourdieu ofrece una interpretación de las relaciones de
interacción que los seres humanos mantienen entre sí. Las nociones de habitus y campo explican
cómo es posible tal interacción, cuáles son los elementos implícitos que escapan a la percepción
corriente que tenemos de nuestro entorno y las personas con las que entablamos relaciones.

Como se sabe, las netiquetas son manuales de conductas a tener presente en el momento que la
persona toma contacto con otra, es decir, formas adecuadas y esperables, según el manual, de
expresarse y relacionarse con otros. La particularidad del término “netiqueta” hace referencia al
aspecto virtual del espacio para el que se piensa dicha normatividad. Virtual en consideración de las
interacciones en el espacio de internet.
La clave bourdesiana permite problematizar las netiquetas en tanto las mismas se caracterizan por
sugerir o indicar normas de conducta en un espacio del cual se ocupan expresamente en definir como
virtual, o sea, no físico. Incluso, los manuales expresan la sugerencia de trasladar patrones de
conducta de la vida real al mundo virtual. En otras palabras, es posible aplicar una mirada sociológica
sobre el asunto pues el mismo trata concretamente de las formas de relacionarse del usuario con
otros. Es cierto que un espacio virtual de internet es un espacio no físico, es decir, no es posible
acceder y hallarse en él sin el uso indispensable de dispositivos de conectividad, pero su virtualidad no
deja de ser real, es decir, es parte constitutiva del mundo real. Es aquí cuando surgen las
incongruencias.
Aquí no se intenta salvar las diferencias entre el espacio virtual de internet y el espacio físico del
mundo terrenal, ambos reales y donde la vida social se desenvuelve. Pero considerando las nociones
de habitus y campo de Bourdieu recordemos que la primera se constituye por la incorporación de un
determinado tipo de disposiciones acordes a las tendencias del espacio/campo en el que la persona
se halla inserto. En correspondencia, la persona dispone de prácticas, “formas de…”, engendradas por
el habitus en relación al espacio específico y el orden que allí funciona: lo que se dice las necesidades
del campo. De esta manera, las expresiones e interacciones de la persona se ajustan al espacio y las
demás personas que allí se encuentran sin ser producto de la obediencia terminante a un cuerpo de
normas que regulan la interacción. En un mismo sentido, es importante aclarar que en muchas
ocasiones no se halla coincidencia entre disposiciones del habitus y necesidades del campo, pero
resulta dificultoso pensar que esta no-coincidencia puede ser salvada simplemente por un manual
que explicite las “maneras aceptables”. Es decir, implicaría pensar que el ser humano puede regular
su conducta simplemente por medio de lo que piensa y razona, ignorando un conjunto de
aprendizajes que su cuerpo le exige poner en práctica.
En conclusión, emitir un manual de normas que indiquen el comportamiento deseado o debido según
el espacio es, de alguna manera, suponer que la acción estará condicionada por este manual de
normas explícito y no más allá de él. En otras palabras, supone que el pensamiento consciente (de
dicho manual) regulará en todo momento la acción corporal y mental del sujeto en relación con otros.
Esto no tiene mucho asidero; el habitus del agente es anterior a toda explicitación de lo que se le pide
en un espacio tal. Se trata de una comprensión práctica sin la necesariedad de comunicación ni
decisiones contractuales entre las personas. Teniendo presente estas primeras preposiciones, cabría
preguntarse: ¿Qué implica, qué supone la existencia de manuales de netiqueta? ¿Cuál es el hecho
social que le sostiene detrás de una formulación sosa como la de “normas de convivencia a tener en
cuenta para ser educados en espacios virtuales”?

Problematización fenómeno netiqueta desde la matriz teórica conceptual de N., Elias.

La teoría sociológica de Norbert Elias explica el cambio social y el carácter procesual del mismo en
formaciones socio-históricas determinadas. Desde un enfoque macro se contempla el cambio a largo
plazo de las estructuras sociales; asimismo, desde un enfoque micro la teoría se concentra en el
cambio en las estructuras psíquicas individuales. Se debe establecer una relación de
complementariedad entre ambos enfoques, posibles de relacionar examinando el contexto de
integración funcional e interdependencia de las sociedades.
Para ser más específicos, las estructuras psíquicas de personalidad son aquellas las cuales constituyen
las emociones de los individuos: maneras de actuar, reaccionar, opinar, interactuar; maneras que
Elías asocia a la noción de Super-yo. Noción que es posible de asociar estrechamente con las
consignas de las netiquetas, es decir, la regulación del comportamiento por medio de normas
morales instituidas en un manual de consulta que debe, o se recomienda, ser considerado.
Al inicio se mencionó la relación entre estructuras sociales y estructuras psíquicas individuales, cabría
preguntarse: ¿Qué es lo que da cuenta de la transformación de la estructura de la personalidad del
individuo que lo induce al autocontrol, mecanismo de regulación de las formas y maneras de sentir,
actuar e interactuar? Para responder esta pregunta es necesario observar la socio-génesis de ese
super-yo que adopta forma de manuales de netiqueta, por ejemplo. ¿Qué es lo que reproduce ese
super-yo?

Continuando con la teoría social de Elías dicha reproducción estará estrechamente vinculada a las
relaciones interdependientes que los individuos mantienen entre sí, de otra forma no se podría
explicar el origen de tales estructuras debido a la incapacidad de constituir estructuras de
personalidad en total aislamiento, idea que el autor discute en su tratamiento de la noción homo
clausus.
Las relaciones de interdependencia conforman un orden social específico, donde cada individuo
posee una función en relación a otros individuos, una tarea para con los demás la cual no puede
simplemente ignorar de una vez y para siempre. 
Tales funciones son determinadas por el contexto funcional de estructura: su posición dentro del
tejido humano en el que ha nacido, se ha criado y donde desarrolla su vida. En este sentido cada una
de las personas posee una función en las interdependencias que ligan unos individuos con otros; estas
funciones pueden ser de tipo afectivo, laboral, etc. Por otro lado, si bien es cierto que el tejido de
funciones interdependientes tiene su peso y leyes de funcionamiento propias, sin ser creadas
deliberadamente por los individuos, también es cierto que el contexto funcional de
interdependencias no existe fuera de los individuos ya que son las relaciones entre estos
dependiendo de las funciones que presenten unos con otros los que darán característica a la
formación social en cuestión. 

Las ideas desarrolladas hasta aquí, de forma sintética, pueden ayudar a resolver las inconsistencias
que la misma teoría eilisiana pone en relieve. A raíz de esto, es posible cuestionar de la misma
manera que el planteo por medio de la teoría social bourdesiana, a saber: ¿Qué implica, qué supone
la existencia de manuales de netiqueta? ¿Cuál es el hecho social que le sostiene detrás de una
formulación sosa como la de “normas de convivencia a tener en cuenta para ser educados en
espacios virtuales”?
El trabajo posterior se desarrollará entorno a estas preguntas y las que puedan surgir más adelante
en relación a las nociones expuestas sobre ambos autores y sobre las indicaciones que la cátedra
estime pertinentes.

También podría gustarte