Antropo puto

Relativismo Cultural de Franz Boaz

Como mencionó mi compañero, fue Franz Boas quien postuló la teoría del particularismo histórico
a comienzos del siglo XX. De sus primeros trabajos etnográficos llegó a la conclusión de que la
diversidad cultural prevalece ante la universalidad, y que lo que realmente tienen en común las
culturas es la diferencia que existe entre todas ellas. Fue a partir de estos criterios que surge lo
que conocemos como relativismo cultural.

El relativismo cultural consiste en el análisis de las costumbres y características de las

comunidades humanas cimentándose bajo la premisa de entender las bases culturales distintas a
las nuestras para ponernos en el lugar del otro, dejando de lado en la medida de lo posible la
moral y juicios preconcebidos. Se argumenta que no existe tal cosa como una cultura superior a
otra. Que cada cultura es valorable sólo en sus propios términos, creyendo que estas prácticas son
diferentes, pero ni peores ni mejores.

La perspectiva con la que hay que entender este concepto, es desde el punto de vista meramente
metodológico, y no radical. El relativismo de Boas nunca pidió la eliminación del juicio, sólo su
suspensión para que los mismos juicios que estamos ética y moralmente obligados a seguir como
seres humanos puedan ser informados.

El término fue de las mayores aportaciones teóricas que brindó el particularismo histórico a la
antropología, puesto que denunció el etnocentrismo que la antropología venía manteniendo
desde sus orígenes, proponiendo un enfoque nuevo para entender la diversidad humana,
entendiendo la cultura como algo dinámico, que va cambiando a lo largo de la historia y que se
interconecta dando lugar a nuevos rasgos culturales.

Ejemplos de relativismo cultural:

Algunos ejemplos de costumbres que se consideran normales en una sociedad y que parecen
exóticas en otra.

1. La diferencia entre la prioridad de los habitantes occidentales en relación a la familia y

como en países asiáticos como Japón, esta se centra en el aspecto laboral/profesional. Las
prioridades son sumamente distintas y la autoexigencia alcanza niveles que para nosotros
podrían resultar bastante cuestionables. Es normal ver a jóvenes que aun no han salido de
lo que conocemos como educación media, ya trabajando y proyectando su vida
profesional mucho antes que la mayoría de nosotros a esa edad.
2. Siguiendo con lo anterior, mientras en la sociedad occidental se tiende mucho mas la
preferencia por los aspectos individuales y se promueve la búsqueda de aquello que nos
hace únicos, en esta cultura se le da mucha más importancia al grupo, el orden e incluso el
miedo de estar fuera de lugar y ser demasiado diferente al resto.