TECNICAS PARA LA PRESCRIPCION HOMEOPATICA

Introducción al arte de interrogar

El objetivo de interrogar al paciente es saber con lujo de detalle todo lo que se refiere a sus
emociones, su personalidad, sus padecimientos físicos, asi como los mentales, también sus
modalidades con el fin de encontrar el remedio único similar a lo que la persona esta presentando en
ese momento.

El interrogatorio

La base de toda interrogación, se trata de presentar un cuestionario completo, si no el más corto

posible, para obtener el máximo de resultados y en tiempo limitado. Este es el cuestionario del
médico práctico, que dispone aproximadamente de 30 min para el interrogatorio de un enfermo.
Existe uno muy completo: el de Kent; pero consta de 32 páginas y es especialmente útil para
escudriñar ciertas partes del interrogatorio.

En las enfermedades crónicas las preguntas deben basarse en las reglas de la semiología
homeopática concernientes al valor de los síntomas, tratando siempre de considerar el enfermo en
su conjunto; de ver al paciente en su totalidad y no solamente el tal o tal localización; con la
enfermedad, su patología o su diagnostico, si no al enfermo vivo, doliente, que siente y piensa.

Los síntomas mentales, evidentemente, con la condición de que sean verdaderamente

representativos del sujeto, y que sean caracteristicos. Si tenemos generalidades, como un poco de
irritabilidad, o de depresión, esto no nos interesa. Es necesario que haya modalidades o que el
síntoma es característico, bastara con abrir el repertorio: su encontramos una rubrica que contiene
500 remedios esto no interesa. Se necesita una rubrica de 3 a diez líneas mas o menos, y que
contenga, en lo posible, remedios en los 3 grados.

Los síntomas generales, son los relacionados del organismo a todas las influencias exteriores, el
calor el frio, las condiciones meteoropaticas; el movimiento… etc. Todo lo que pone al individuo en
contacto con el mundo exterior. Estos síntomas son esenciales, ya que tienen en cuenta a todo el
individuo y no únicamente a una de sus partes.

Los deseos y las aversiones alimenticias. Un enfermo que tiene grandes deseos de sal, que sala antes
de probar, o que no puede pasar un día sin comer azúcar o chocolate, o que tiene una aversión
tremenda por el queso o los repollos. Todo esto nos interesa enormemente, con la condición de que
estos deseos o aversiones sean muy marcados.

Los síntomas sexuales, sobre todo en la mujer, en lo referente a las reglas; también los síntomas
sexuales psíquicos, y subjetivos que, para nosotros son siempre muy importantes porque cuando
mas subjetivos son los síntomas más nos interesan, contrario a la medicina clásica.

El sueño y los sueños. Estos últimos síntomas son importantes porque forman parte del
inconsciente. No sabemos lo que pasa durante nuestros sueños. Según la filosofía se han formulado
numerosas teorías, pero solo sabemos una cosa: que algo sucede durante nuestros sueños, puesto
que durante este feliz periodo, ya no tenemos consciencia de nuestro estado físico.

Síntomas mentales

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Hay que encontrar los síntomas mentales y darle mayor importancia a estos porque son más
característicos de nuestro paciente y por esta razón hay que buscar en la mente la causa de los
problemas físicos. Debemos tomar muy en cuenta cómo anda en su mentalidad.

A través de nuestras preguntas podemos reconocer que terreno miasmático y en qué lugar está el
problema de nuestro paciente, los problemas cuando se mantienen en el físico durante algún tiempo
considerable se somatizan en la esfera mental y viceversa.

Parágrafo 210.- no existe ninguna enfermedad llamada somática en la que no pueda descubrirse
modificaciones constantes del estado psíquico del enfermo. “en la terapéutica de cualquier caso de
enfermedad, la moral del enfermo debe señalarse como uno de los elementos más importantes en la
totalidad de los síntomas. Si falta no se posee un cuadro fiel de la enfermedad para poder combatirla
homeopáticamente con éxito”.

Parágrafo 211.- “tan es así, que el estado moral del enfermo se convierte a menudo, en la selección
del remedio homeopático, es el elemento más determinante, porque constituye una de las
manifestaciones más características y más esenciales de las que, entre todas, menos deben escapar
del médico habituado a hacer observaciones exactas”.

Los síntomas que pueden obtenerse por la boca del paciente, aunque subjetivos, pueden ser también
corroborados en algunos casos por la observación de los familiares y del médico. Dentro de esta
primera categoría de síntomas mentales obtenidos del enfermo considero conveniente establecer
una separación, siempre de orden práctico, entre los que surgen espontáneamente o como
consecuencia del interrogatorio.

Los síntomas mentales correlativos

Es el grupo de síntomas que expresan la perturbación de una esfera psíquica determinada, estos
síntomas están relacionados entre sí en su semejanza pero diferenciados por matices o por grados de
intensidad. Existen matices que asemejan y diferencian un síntoma de otro pero es necesario tener
un cuidado muy particular en la investigación de las manifestaciones mórbidas teniendo exactitud y
precisión del estado mental y moral de cada caso en particular.

El homeópata debe tener nociones claras del significado de cada vocablo que emplea; Y necesita
saber y captar estas manifestaciones psíquicas en el enfermo. El resto de la curación deberá ser
sobre la acción del remedio similar, este remedio deberá presentar en su patogenesia la mayor
similaridad posible.

Como formular las preguntas:

Hay que hacer preguntas amplias para que el paciente se explaye desde el principio de la consulta y
así poder escuchar más ampliamente su relato, encontrar la forma para que hable de las cosas que
más le molestan con sus propias ideas y solamente apoyando o incentivando al paciente para que
sigua relatando tal vez con una pregunta cómo, “y que mas” o “que mas síntomas”, “algo mas” y
cuando el paciente termine entonces podemos abordarlo con preguntas referentes a los síntomas
más importantes o característicos que pudimos reconocer o notar en su relato y con ellas modalizar

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los síntomas que no estén modalizados siempre efectuando las preguntas de una manera amplia para
que nuestro paciente tenga que hablar más de cómo siente ella tales o cuales cosas.

Síntomas generales:

Los Síntomas generales son de suma importancia dentro del interrogatorio para poder llegar a una
buena toma del caso, y posteriormente llegar a una prescripción homeopática. Los síntomas
generales son los que expresan a todo el organismo, son, en realidad, en una gran mayoría de casos,
la suma de una misma característica repetida en más de un síntoma particular o localizado en
distintas partes del cuerpo y son obtenidos directamente del interrogatorio o dichos
espontáneamente por el propio paciente o bien son inducidos, volvemos a repetirlo, de la
circunstancia de aparecer fragmentaria y reiteradamente del mismo modo, en diversas zonas del
organismo, considerando dentro de ellos a los síntomas generales clásicos.

Aquí tenemos que considerar todas las reacciones a las condiciones meteoropáticas. Estos síntomas
sólo tienen valor si son netamente marcados y si uno está seguro de la respuesta. Es necesario que
nuestras preguntas jamás puedan permitir responder "Si" o "No".

En los síntomas generales tenemos en seguida las agravaciones horarias. El reloj medicamentoso es
algo muy preciso para nosotros. "¿Cuál es la hora del día o de las 24 horas en que Ud. Se siente
menos bien?" Ciertos responderán: al despertar, antes del mediodía o de las 4. Preguntaremos
siempre en que se agrava el enfermo en ese momento del día. La agravación horaria es siempre algo
muy preciso.

Hay dolores o malestares que se producen siempre a las 1O, otros a las 14, sin que pueda darse una
explicación a esta reacción. En homeopatía tenemos la suerte de tener medicamentos que han
provocado síntomas precisamente a esas horas. Así tenemos la llave que responde a la cerradura.

Hay también la reacción al calor y al frío. Se puede dividir los enfermos en cuatro categorías: Los
que se agrava siempre por el calor, los que se agravan siempre por el frío, los que se agravan por las
temperaturas extremas, los que son indiferentes al frío o al calor, que soportan igualmente bien al
uno como al otro.

Hay síntomas que caracterizan a un individuo, así como algunos rasgos caricaturales caracterizan a
un rostro. El homeópata debe tener un espíritu de fineza y de observación muy desarrollados y a él
le toca saber reconocer en un caso dado, lo que es raro, lo que es característico, esencial, lo que es
extraño, poco frecuente, curioso, no habitual: y si puede encontrar estos síntomas característicos,
entonces es el rey de la situación.

Están también todos los síntomas que se relacionan con las condiciones meteoropáticas: los
enfermos que se agravan por los cambios de tiempo, de temperatura, las tormentas, el viento, las
estaciones, la nieve, la humedad.

Están también, las reacciones a las condiciones de clima: el mar, la montaña. Hay que saber si esto
modifica verdaderamente sus síntomas o si se trata simplemente de un placer para ellos.

También están las preguntas sobre el agua: hay enfermos que se lavan con agua fría, otros con agua
caliente, a algunos les gustan los baños, a otros le agravan... etc. Esta también la pregunta del

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movimiento, de la influencia de la marcha, de la posición etc. Ciertos enfermos no soportan las

ropas ajustadas: Hay que saber si es simplemente en el cuello, o en el pecho, o en el vientre...
"¿Qué usa Ud.?; ¿cinturón, tiradores... por qué...?

También está la pregunta de los traumatismos. Ciertos enfermos están mal desde un traumatismo
que puede ser antiguo. Para otros las menores heridas supuran, o sangran, etc. ¿Cómo son las
cicatrices? Rojas, gruesas, pruriginosas, dolorosas...

Familia de síntomas generales correlativos:

Los síntomas generales correlativos son aquellas que de alguna manera tienen relación con los
síntomas generales cómo, sensaciones, modalidades, consecuencias de agresiones patógenas y
características generales y constitucionales.

Los deseos y aversiones alimenticios tienen un papel muy importante en el interrogatorio del
paciente nos dará pautas claras del medicamento homeopático a elegir, debiendo elegir observar en
el momento de la pregunta, en cuanto a los deseos y aversiones las expresiones de su rostro como
son las comisuras de los labios, el brillo de sus ojos y todo esto nos dirá si existe un deseo o fuerte
atracción o la negativa, o si le causan nauseas, si le caen mal a su cuerpo.

Nos referimos a síntomas generales, que así se consideran, del apetito y la sed y deseos y aversiones
alimenticias. Estos son síntomas que deben llamar la atención y generalmente son dichos de forma
espontánea por el paciente.

Síntomas particulares o locales

Síntoma particular o local, el que, se manifiesta en un lugar dado del organismo, con sus respectivas
modalizaciones que afectan cada parte de la economía corporal: dolores particulares, sensaciones
peculiares, localizaciones especiales, mejorías y agravaciones referidas a cada parte.

Estos pueden tener síntomas raros, también como síntomas concomitantes que están mezclados con
síntomas mentales y generales; también síntomas alternantes que pueden ser síntomas alternando
con síntomas físicos, también síntomas comunes que casi no tienen valor por ser muy simple su
expresión, también los signos físicos que pueden ser sacados de la observación directa del
homeópata.

Toma y revisión del caso

La presentación del caso deberá incluir toda la descripción. No podemos confiamos en nuestra
memoria al tomar el caso.

La descripción debe ser conservada en forma indeleble, en una forma en la cual podamos revisarla
sin el peligro de dejar fuera cualquier síntoma importante; debemos de poder regresar a cualquier
síntoma individual o grupo de síntomas en cualquier tiempo.

Por lo tanto el primer requisito al tomar el caso es que el homeópata debe tener sus formas para
historia clínica. Para notar el caso conforme lo vaya tomando.

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El homeópata depende tanto de este registro que no puede darse el lujo de no tomar el tiempo para
recabar el caso adecuadamente.

Al hacer la primera prescripción éste registro es muy importante en las prescripciones subsecuentes
y al revisar el caso: de tal manera que podamos saber la secuencia de los síntomas y el orden de
desaparición de los mismos.

Después de terminar con el historial clínico le pedimos al paciente que diga en sus propias palabras
como fue que se enfermo y exactamente cómo se siente, pidiéndole que lo haga despacio para poder
ANOTAR todo lo que nos relata. No debemos interrumpir, pues esto lo hará perder el hilo de sus
pensamientos. Con forme se anotan los síntomas dejar espacio entre ellos de tal manera que pueda
ser llenado con respuestas posteriores o preguntas que pudieran ser necesarias. Si el paciente llega a
un punto en el cual parezca titubear simplemente pregunte ¿Qué más? El médico debe continuar
escuchando con atención hasta que el paciente (aparentemente) haya agotado su historia. En seguida
pedir a los allegados que lo acompañan que corroboren o agreguen lo que crean necesario.

Como abordar un caso cronico

Es Kent quien nos ha enseñado a buscar en los casos crónicos, sobre todo cinco categorías que
constituyen los síntomas más esenciales de todo individuo, a saber: los síntomas mentales, que son
los más importantes; los síntomas generales; los deseos y aversiones, LOS SINTOMAS DEL
SUEÑO, los síntomas sexuales.

Empezar un interrogatorio por los síntomas mentales, es en general, "malograr el caso". Todos
somos sensibles y eminentemente susceptibles: no toquemos esta susceptibilidad o por lo menos
acariciémosla suavemente de otra manera.

Seleccion y jeraquizacion de sintomas.

Para Hahnemann en los Parágrafos 151 a 154 menciona los síntomas que se deben de considerar
para poder llevar a tratar la enfermedad y así restablecer al Paciente su estado de salud.

(151) El Homeópata Que conoce el arte de interrogar descubrirá síntomas Ocultos Que Sumados
con los síntomas más marcados y molestos la totalidad de estos le dará la imagen completa de la
enfermedad

(152) Menciona Que cuanto más Intensa es la enfermedad Aguda más numerosa y llamativos serán
los Síntomas y también es más fácil encontrar un remedio estos síntomas salientes que se puede
encontrar una réplica en la Materia Medica .Entre las numerosas patogénesias se puede encontrar
una que englobe un cierto número de síntomas.

(153) Siempre tiene que haber una Comparación entre los síntomas de la enfermedad natural y la
Patogenia arrojada por la Experimentación se debe atener a los síntomas Objetivos (los que pueden
percibirse A través de los Sentidos) y los Subjetivos (Los Que no se pueden percibir a través de los
sentidos. Dolor, Pena, Miedos) Los más Llamativos, Raros y peculiares. Estos son los que
corresponden al grupo de Síntomas experimentados. En cambio los Síntomas Comunes y vagos
como los malestares, el cansancio, la cefalea, la falta de apetito, un mal dormir, merecen poca

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atención sea a causa de su carácter banal e impreciso por que se le encuentra en casi todas las
enfermedades y casi todos los medicamentos.

(154) Menciona que cuanto más Contra-imagen compuesta por el grupo de síntomas preferentes
Agrupe síntomas semejantes, característicos, llamativos, Singulares, raros y peculiares de la
enfermedad natural más perfecto será el parecido o similitud reciproca.

Hahnemann hace inca pie en estos parágrafos sobre cómo seleccionar los síntomas más importantes
pero en toda su obra menciona más características tanto de la enfermedad y síntomas. Como
ejemplo Del parágrafo 172 al 184 menciona las reglas a seguirse para el tratamiento de
enfermedades con muy pocos síntomas.

Hahnemann precisa que los síntomas semejantes, raros, Peculiares SIEMPRE ESTARAN
RELACIONADOS CON UN SOLO MEDICAMENTO formando parte de la Defensa al
Unimismo, Hahnemann menciona que aunque dos o más remedios se Parezcan en síntomas siempre
habrá un síntoma que las difiera, Hahnemann también refiere que los síntomas como dolor de
Cabeza, malestares Serán Excluidos dado que muchos de estos están en la mayoría de los remedios.
Siempre y cuando haya un síntoma de este tipo que sea causado o esté relacionado con un síntoma
raro o peculiar.

Hace Referencia hacia el parágrafo 153 del Órganon. Para poder determinar el remedio de un
paciente no es necesario tomar en consideración los síntomas del sujeto en su universalidad. Si no
solamente ciertos de entre ellos con los cuales debe buscarse la similitud medicamentosas la suma
de síntomas privilegiados se llama “totalidad de los síntomas esenciales” Esa totalidad de síntomas
comprende un numero más restringidos de signos que la universalidad de los síntomas de los que
solo es una parte.

Entre más experimentado sea el homeópata más exigente es en cuanto a los síntomas a retener y
menos síntomas se tienen en cuenta para base de su prescripción. Esto refiere que entre más
experimentado sea el homeópata tendrá más claro que es lo que se debe curar, sabrá diferenciar
entre los síntomas verdaderos y los comunes.

¿Qué síntomas tienen más Valor? Como lo menciona sir John Weir menciona en su fórmula "Un
mínimum de síntomas de valor máximo" bueno para Hahnemann es decidir si se debe o no figurar
en la totalidad es elegirlo o no para la prescripción, Los Síntomas más raros que tengan un Mayor
Valor ,se hace referencia a ordenar los síntomas como:

Síntomas mentales (Como Es, Hace, Piensa el Paciente "Me siento, Me Molesta, No tolero")
Síntomas generales (Como se manifiesta su Enfermedad, Como el Enfermo hace su enfermedad
"Como se Comporta la Enfermedad, con qué frecuencia, como la modela.") Deseos y Aversiones.
(Que Le Gusta, Que no le Gusta, Que le Gusta pero no lo Tolera "me Gusta la Leche pero me hace
daño") Síntomas del sueño. (Que Sueña estando Dormido, Como Duerme, Postura, Actitud
"Aprieta la Quijada, Rechina Dientes") Síntomas Sexuales (Como se manifiesta su esfera Sexual,
Modalidades de La menstruación en la mujer etc." su menstruación es Regular o irregular, profusa,
color, olor.")

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El Valor de los síntomas menciona que no todos los síntomas tienen el mismo valor y esta se evalúa
en tres factores. La naturaleza del síntoma. (¿De dónde viene?, ¿Que lo origino?) La rareza del
síntoma (¿Es común el síntoma o no lo tienen todas las patogenesias?), La antigüedad del síntoma
(¿El síntoma es persistente?).

La naturaleza de los síntomas menciona que como buen investigador el Homeópata deberá Indagar
qué fue lo que desencadeno el conjunto de síntomas presentes. Indisposiciones, Alteraciones,
Vejaciones, Excesos, Carencias, Vivir en zonas inadecuadas para la salud si es por herencia o por
contagio es parte de la fisionomía o raza. Etc.

Rareza de los Síntomas. Este es un Punto muy Importante dado que puede ser diferencia entre dar
un remedio u otro como un diamante su rareza determina su valía. Que esta fuera de Lugar, que no
debería de Aparecer mas sin embargo aparece, que es lo que debería Aparecer pero no aparece por
ejemplo Fiebre Sin Sed. Entre más raro sea el síntoma más valor puede dársele.

En Base a la Cronología (no solo que tan antiguo sea el síntoma si no también como este ha
Evolucionado) un síntoma puede presentarse en un cuadro pero más adelante se puede presentar
diferente puede ser atenuado por otro más reciente o más fuerte, una persona puede hacer su
enfermedad de diferente manera a otra aunque tengan igual tiempo encontrar la característica
primitiva de la enfermedad. La fiebre es persistente cuanto tiempo tiene la Toz. Desde cuando tiene
esta manifestación.

La Semiología homeopática exige que todo síntoma común o patognomónico sea modalizado se
halla como trasfondo en cada enfermedad No es suficiente saber que una persona sufre de dolor de
cabeza si no que hay que conocer las circunstancias y condiciones, horario periodicidad Factores
que agravan o mejoran, sensaciones, etc. Esto mismo La misma actitud hay que tener en lo que se
refiere a los síntomas generales, debilidad, calor vital, sueño, escalofrió, fiebre, apetito, sed, pero lo
más importante es en la esfera psíquica, lo que permite extraer los síntomas más auténticos, más
originales los mas inéditos de cada ser. La terapéutica homeopática se Basa en síntomas
individuales característicos y no en los síntomas Patológicos. Es lo que se llama "totalidad
característica" o "síndrome mínimo de valor máximo" (el menor conjunto síntomas más
característicos que tengan un mayor valor).

Los síntomas Patológicos comunes y patognomónicos conducen al diagnostico clínico pero a los
Fines de la prescripción homeopática sirven los síntomas característicos:

Los Síntomas Psíquicos emocionales (QUE PIENSA Y SIENTE), Los Afectivos. (COMO SE
DESENVUELVE), Luego los Volitivos (VOLUNTAD),Generales,Locales
Este es el orden jerárquico habitual pero algunas veces un síntoma local o general muy notable, raro
o insólito puede ocupar el primer lugar en la fila tomando en cuenta que los síntomas de máxima
jerarquía son siempre los que se recogen de la historia biopatográfica del enfermo.

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