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SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0933/2014

Sucre, 15 de mayo de 2014

SALA PRIMERA ESPECIALIZADA


Magistrada Relatora: Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños
Acción de amparo constitucional

Expediente: 05322-2013-11-AAC
Departamento: Potosí

En revisión la Resolución 2 de 7 de noviembre de 2013, cursante de fs. 23 a 26 vta., pronunciada


dentro de la acción de amparo constitucional interpuesta por Claudina Choquecallata Marca contra
Marlene Torres Lenis, Sub Registradora de Derechos Reales (DD.RR.) de Uncía del departamento de
Potosí.

I. ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA

I.1. Contenido de la demanda

Por memorial presentado el 4 de noviembre de 2013, cursante de fs. 10 a 12 vta., la


accionante expresa los siguientes argumentos de hecho y de derecho:

I.1.1. Hechos que motivan la acción

El 30 de septiembre de 2013, presentó demanda ordinaria de división y partición de bienes


hereditarios al fallecimiento de sus padres, reivindicación de bienes del acervo hereditario,
cancelación de alquileres y otros, fijando como cuantía en la suma de Bs90 000.- (noventa mil
bolivianos), conforme el art. 327 inc. 8) del Código de Procedimiento Civil (CPC), monto que
determinó para aperturar la competencia del Juez Segundo de Partido Sentencia Penal y Mixto de
Llallagua del departamento de Potosí.

Refiere que, con el objeto de cumplir el pago de la cuantía señalada, se apersonó a las oficinas de
DD.RR. de la localidad de Uncía, donde dicha cancelación fue obstaculizada con el argumento de que
“COMO DEMANDANTE NO PODEMOS FIJAR UNA CUANTÍA, Y PARA CUALQUIER PAGO DEBE
PRESENTARSE LOS COMPROBANTES DE PAGO DE IMPUESTOS, PARA QUE EN BASE AL VALOR
CATASTRAL SE PUEDA DETERMINAR LA CUANTIA” (sic).

Sostiene que, ante dicha exigencia, por memorial de 29 de octubre de 2013, se vio obligada a
solicitar que las observaciones señaladas, sean debidamente fundamentadas y basadas en una ley
que así lo determine; sin embargo, por providencia de 31 de octubre de 2013, la Sub Registradora de
DD.RR., no expresó ninguna fundamentación ni apoyo legal, para exigir la cancelación del importe
del cuatro por mil, para que sea menester presentar comprobantes de pago o exista circular alguna
que así lo establezca.
Finalmente enfatiza que, el precepto contenido en el art. 327 inc. 8) del CPC, no otorga ninguna
facultad al juez y menos a la oficina de DD.RR., establecer el quantum de la acción.

I.1.2. Derechos supuestamente vulnerados

De acuerdo con los argumentos fácticos referidos en el memorial de acción de amparo


constitucional, la accionante, considera la vulneración de lo establecido en la norma contenida por el
art. 128 de la Constitución Política del Estado (CPE), aspecto, que será dilucidado infra.

I.1.3. Petitorio

Solicita se le conceda la tutela, y se ordene a la Sub Registradora de DD.RR. de la localidad de


Uncía “el CESE DE LA OMISON ILEGAL O INDEBIDA y la inmediata atención en el pago referido, con
resarcimiento de daños ocasionados” (sic).

I.2. Audiencia y Resolución del Juez de garantías

Efectuada la audiencia pública el 7 de noviembre de 2013, según acta cursante de fs. 18 a 22


vta., en presencia de la parte accionante asistida de su abogado y la funcionaria judicial demandada,
se produjeron los siguientes actuados:

I.2.1. Ratificación y ampliación de la acción

El abogado de la accionante, ratificó el tenor íntegro de su demanda y ampliando sus


fundamentos, agregó: a) En todo el contenido de la Ley de “Derechos Reales” y el Decreto Supremo
(DS) 27957 de 24 de diciembre de 2014, no se encuentra el tributo de cuatro por mil, que la
Registradora de DD.RR de Uncía pueda acatar; y, b) El art. 180 de la CPE, refiere que la jurisdicción
ordinaria se fundamenta entre otros principios en el de gratuidad; el art. 10 de la Ley del Órgano
Judicial (LOJ), aclara de manera contundente la supresión de valores y aranceles judiciales de
acuerdo con el principio de gratuidad, eliminándose todo pago de timbres, formularios y valores
para la interposición de cualquier recurso judicial en todo tipo y clase de proceso, pago por
comprobantes de caja del “Tesoro Judicial” y cualquier otro tipo de pago que se grave a los
litigantes; sin embargo, no obstante la existencia de las citadas disposiciones legales, de buena fe y
en cumplimiento de la norma, solo para viabilizar una acción ordinaria, concurrió de manera
voluntaria a la oficina de DD.RR.; empero, lamentablemente no fue atendida como debió ser.

En uso de la réplica, refirió: 1) La circular que menciona la demandada, es para efectos de


inscripción en DD.RR. sujeto al precepto legal contenido en el DS 27957, para inscribir y otorgar un
derecho de propiedad y, su persona no pidió ese derecho de propiedad; y, 2) El hecho de que la
ahora demandada consulte a un superior, no significa que sea ley, pues debe existir una norma que
establezca la cuantía para iniciar una acción; empero, la misma no existe, siendo únicamente un
criterio personal.

I.2.2. Informe de la autoridad demandada

Marlene Torres Lenis, Sub Registradora de DD.RR de Uncía, en audiencia informó lo


siguiente: i) El Juez Segundo de Partido Sentencia Penal y Mixto de Llallagua, mediante decreto de
21 de octubre de 2013, solicitó a la accionante adjuntar el comprobante de pago de la cuantía para
luego proceder a la admisión de la acción; ii) La cajera refirió a la interesada presentar un memorial
adjuntando el último pago de impuestos a la propiedad de bienes inmuebles como debe ser, no
siendo la única persona a la cual se hace dicha solicitud; iii) Su persona llamó a Potosí a Recurso
Propios, “al Lic. Roberto quien está a cargo de esto (…) me respondió de que si o si deberían adjuntar
el pago del impuesto” (sic); en consecuencia, se rechazó verbalmente el pedido efectuado por la
accionante; iv) Así, Claudina Choquellata Marca, mediante memorial de 29 de octubre de 2013, pidió
que el referido rechazo lo efectué por escrito y con el fundamento del mismo, por lo que mediante
decreto de 31 de octubre de 2013, se ratificó lo expresado verbalmente, recomendando a la
interesada presentar la última papeleta de pago de la gestión 2012; v) Confirma su rechazo en base a
la circular 010/2009 de 20 de abril, que cita la Resolución Senatorial 015/2009 de 25 de marzo, que
refiere a los aranceles que debe cobrarse en DD.RR. y en todo los tramites en general; y, vi) La última
parte de la circular, señala que debemos cobrar el monto mayor, ya sea de la transferencia o
cualquier otro trámite, verificando el impuesto anual.

I.2.3. Resolución

La Jueza de Partido Sentencia Penal y Mixta de Uncía del departamento de Potosí,


constituida en Jueza de garantías, por Resolución 2 de 7 de noviembre de 2013, cursante de fs. 23 a
26 vta., concedió la tutela solicitada, ordenando el cese de la omisión ilegal o indebida cometida por
la Sub Registradora de DD.RR. de Uncía, disponiendo la inmediata atención en caja de dicha oficina
para efectuar el pago a realizar por parte de la accionante sobre la cuantía determinada en su
demanda de división y partición de bienes hereditarios, con la sola presentación de la copia de la
citada demanda, señalando que la misma servirá de justificativo para el referido pago; con el
argumento de que una vez solicitado a la referida autoridad el cumplimiento de deberes, a ésta le
correspondía pronunciar una resolución fundamentada en amparo a las normas legales
correspondientes y no una simple recomendación a objeto de que la interesada presente la última
boleta de pago de los bienes inmuebles en litigio para realizar el cobro de la cuantía, estableciendo
que la Resolución de 31 de octubre de 2013, no contiene ninguna consistencia legal.

II. CONCLUSIONES

Del análisis y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establecen las
siguientes conclusiones:

II.1. Por memorial presentado el 2 de octubre de 2013, Claudina Choquecallata Marca demandó
la división y partición de bienes hereditarios; exclusión del acerbo hereditario; reivindicación de
bienes Inmuebles; y, restitución de cuota parte de alquileres de inmuebles. En el Otrosí 5° del
mismo, refirió que: “Para determinar el monto demandado como cuantía para la presente acción
ordinaria, se señala en algo más de 90.000 bolivianos, solicitando se tenga presente para efectos del
pago de daños y perjuicios ocasionados” (sic) (fs. 1 a 6 vta.).

II.2. Según memorial de 21 de octubre de 2013, la ahora accionante, aclarando que mediante el
Otrosí 5° de su memorial de demanda, fue determinante en señalar la cuantía en la suma de Bs90
000.-, solicitó disponer la admisión de la demanda (fs. 7).

II.3. En la providencia de 21 de octubre de 2013, el Juez Segundo de Partido de Sentencia Penal y


Mixto de Llallagua del departamento de Potosí, decretó: “La última parte del memorial refiere que
se encontraría adjunto el comprobante de la cuantía, observado y subsanado en su momento, de la
revisión de la prueba adjunta cursante de fojas siete a fojas setenta de obrados se extraña el mismo,
adjunte el comprobante al cual se hace referencia luego se procederá a la admisión de la presente
acción” (sic) (fs. 7 vta.).

II.4. Mediante nota de 29 de octubre de 2013, dirigida a la Sub Registradora de Derechos Reales
de Uncía, (solicita cumplimiento de deberes), la ahora accionante refiriendo que dentro la demanda
de división y partición y otros, interpuesta por su persona, fijó una cuantía estimable de Bs90 000.-,
conforme dispone el art. 327 inc. 8) del CPC, sin embargo de que la ahora demandada hubiera
dispuesto verbalmente que, para cancelar dicho monto por la cuantía, debía cancelar impuestos,
acreditar el valor de cada inmueble, solicitó que: “…en forma escrita se me denegué esta posibilidad
de cancelar o alternativamente señalar con precisión, en que disposición basa su observación…” (sic)
(fs. 8).

II.5. Por providencia de 31 de octubre de 2013, la Sub Registradora de DD.RR. de Uncía,


providenciando al memorial de 29 del indicado mes y año, contestó indicando lo siguiente: “Se
apersonó a estas Oficinas de Derechos Reales Uncía, la señora Claudina Choquecallata Marca
presentando un memorial solicitando cumplimiento de deberes, la señora se presentó en sección
Caja para hacer la cancelación sobre una cuantía de 90.000 Bs. que ellos mismos se habían fijado
para la demanda de División y Partición de bienes planteado en contra de su hermana Sahara
Choquecallata Marca Quiroz.

Compulsada la documentación presentada por la interesada consistentes en un memorial


que hubiese presentado al “Juzgado de Partido Mixto y Sentencia” de Llallagua donde ratifica la
cuantía de 90.000 Bs. pero que no corrobora con el pago de impuestos de esta gestión de los
inmuebles en litigio y en el auto dictado por el juez de fecha 21 de octubre de 2013, (…) no fija
cuantía y como institución de Derechos Reales donde se debe velar la legalidad y para posteriores
auditorias el cobro de la cuantía que se realiza es en base al último pago de impuesto de 2012 que se
realiza en cada municipio esa es nuestra base para poder cobrar cuantías.

Por tanto, se recomienda a la interesada que presente las ultimas boletas de pago de los
bienes inmuebles en litigio para realizar el cobro de la cuantía” (sic) (fs. 9).

III. FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO

Corresponde ahora precisar con claridad el objeto y causa de la presente acción; en ese orden, se
tiene que el objeto de la activación de este mecanismo de defensa, es la petición de tutela
constitucional ante “la omisión ilegal o indebida” fundada en el art. 128 de la CPE; asimismo, la
causa, es decir, los actos denunciados como lesivos a los derechos de la parte accionante, en el caso
concreto, constituye la exigencia -por parte de la Sub Registradora de Derechos Reales- de
presentación de la última boleta de pago de impuestos, de los bienes inmuebles en litigio para
establecer y realizar el cobro de la cuantía estimada en la demanda presentada por su persona ante
el Juzgado Segundo de Partido de Sentencia Penal y Mixto de Llallagua.

III.1. Consideraciones necesarias previo al análisis de fondo del caso

Los argumentos de la demanda se fundan en la norma establecida en el art. 128 de la CPE,


refiriendo que la acción de amparo constitucional “…tendrá lugar contra actos u omisiones ilegales o
indebidas de los servidores públicos, o de persona individual o colectiva, que restrinjan, supriman o
amenacen restringir o suprimir los derechos reconocidos por la constitución y la Ley” (las negrillas
son nuestras); bajo este precepto, la accionante considera que la actitud de la Registradora de
DD.RR. de la localidad de Uncía -ahora demandada- al rechazar sin fundamento legal alguno, el pago
por la cuantía que estimó en su demanda, constituye un acto ilegal u omisión indebida, por ser
contraria a la norma establecida por el art. 327 inc. 8) del CPC, disposición que no otorgaría al Juez, y
menos a la Registradora de DD.RR. a establecer el quantum de la acción.

Puntualiza que, a pesar que las normas contenidas en los arts. 115.II y 180 de la CPE; y, 3 y
10 de la LOJ, que de manera concurrente determinan el acceso a la justicia gratuita, acudió a
efectuar el pago requerido.

Ahora bien, conforme lo citado precedentemente, la acción de amparo constitucional


procede contra los actos u omisiones ilegales de las autoridades y funcionarios públicos así como de
los particulares, si bien no se establece la restricción precisamente de un derecho, - sin embargo de
que la problemática planteada orienta la restricción del derecho de acceso a la justicia-, la
imprecisión de dicha formalidad, no restringe que la jurisdicción constitucional en busca de la
eficacia de los derechos fundamentales y garantías constitucionales, conozca y resuelva la
problemática objeto de tutela.

En este marco, la jurisprudencia constitucional, señaló que: “Los principios constitucionales


(…), deben encontrar resonancia en la actividad del legislador, por ello es que a tiempo de establecer
los principios procesales de la justicia constitucional, por la naturaleza militante y no neutral del
Tribunal Constitucional Plurinacional, se ha proclamado entre ellos los de Dirección del proceso,
Impulso de oficio, No formalismo y Concentración, que tiene por objeto evitar que los
procedimientos constitucionales se inviabilicen por los resabios de la cultura jurídica formalista,
ritualista y tradicional, que incluso puede lastrar la inoculación de los nuevos paradigmas que
impregnan a la justicia constitucional(…)” (las negrillas nos corresponden) (SCP 0410/2013 de 27 de
marzo).

En consecuencia y sobre la base de los aspectos antes expuestos, se analizará si en el


presente caso corresponde o no la concesión de la tutela solicitada.

III.2. Del derecho a la jurisdicción o acceso a la justicia

Una de las razones por las que el hombre acepta vivir en sociedad y otorgar a un grupo de
personas el gobierno común, es el obtener la protección de sus derechos mediante un adecuado
sistema de impartición de justicia. Esta función estatal no puede ser soslayada, y ningún Estado
moderno aceptaría renunciar a dicha obligación.

El acceso a la justicia es una garantía consagrada por textos normativos nacionales e


internacionales con jerarquía constitucional y las leyes, lo que implica que todas las personas
pueden acceder a la impartición de justicia sin limitación alguna por causa de sexo, nacionalidad,
raza, credo o posición económica.

El derecho a la jurisdicción o acceso a la justicia se encuentra consagrado en el art. 115.I de


la CPE, cuando establece: “Toda persona será protegida oportuna y efectivamente por los jueces y
tribunales en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos”, en tal sentido hace ver que el
derecho a la jurisdicción o acceso a la justicia es “el derecho protector de los demás derechos” y, por
lo mismo, es una concreción del Estado Constitucional de Derecho.

Por otro lado, con la finalidad de garantizar el acceso a la justicia, la Constitución Política del
Estado, es la que determina cuáles son los órganos que tienen la potestad de impartir justicia (art.
179.I, II y III) para la solución de cualquier diferencia, interés o derecho a fin de que los mismos sean
resueltos por una de las jurisdicciones reconocidas por la Constitución.

En ese entendido, la potestad de impartir justicia, por mandato de la Ley Fundamental, y


desde su propia concepción plural, es la facultad del Estado Plurinacional de administrar justicia
emanada del pueblo boliviano (art. 178 de la CPE) a través de los órganos competentes (jurisdicción
ordinaria, jurisdicción agroambiental y jurisdicciones especializadas: en materia administrativa,
coactiva, tributaria, fiscal, conforme a la Disposición Transitoria Décima de la Ley del Órgano Judicial)
y la jurisdicción indígena originaria campesina.

Así, la SCP 1898/2012 de 12 de octubre, refiriéndose a los elementos constitutivos del


derecho al acceso a la justicia, precisó lo siguiente: “En ese orden de ideas, siguiendo la normativa
señalada, corresponde señalar que el derecho a la jurisdicción o de acceso a la justicia -sin pretender
agotar todas las perspectivas de este derecho tan ampliamente concebido y desarrollado- contiene:
1) El acceso propiamente dicho a la jurisdicción, es decir, la posibilidad de llegar a la pluralidad de
jurisdicciones reconocidas por la Constitución, sin que existan obstáculos, elementos de exclusión,
limitación, que dificulten el ejercicio de dicho derecho tanto por el Estado como por los particulares;
2) Lograr un pronunciamiento judicial proveniente de las autoridades judiciales formales o las
autoridades naturales de las naciones y pueblos indígena originario campesinos, que solucione el
conflicto o tutele el derecho, siempre que se hubieran cumplido los requisitos establecidos en la
norma; y 3) Lograr que la Resolución emitida sea cumplida y ejecutada, debido a que si se entiende
que se acude a un proceso para que se reestablezca o proteja un derecho, un interés o un bien, en la
medida que el fallo no se ejecute, el derecho a la jurisdicción o de acceso a la justicia no estará
satisfecho (las negrillas son nuestras).

III.3. Requisitos que debe contener una demanda -ordinaria-, bajo conminatoria de no ser
admitida

En ese orden de cosas, el art. 327 del CPC, señala:

“ARTICULO 327.- (Forma de la demanda) La demanda, excepto en el proceso sumarísimo,


será deducida por escrito y contendrá:

1) La indicación del juez o tribunal ante quien se interpusiere.


2) La suma o síntesis de la acción que se dedujere.
3) El nombre, domicilio y generales del demandante o del representante legal si se tratare de
persona jurídica.
4) El nombre, domicilio y generales de ley del demandado. Si se tratase de una persona
jurídica, la indicación de quién es el representante legal.
5) La cosa demandada, designándola con toda exactitud.
6) Los hechos en que se fundare, expuestos con claridad y precisión.
7) El derecho, expuesto sucintamente.
8) La cuantía, cuando su estimación fuere posible.
9) La petición en términos claros y positivos.

Sobre el punto, Tomás Tudela Tapia, refiere: “La demanda deberá precisar el monto
reclamado, salvo cuando al actor no le fuere posible determinarlo al promoverla, por las
circunstancias del caso, o porque la estimación dependerá de elementos aún no definitivamente
fijados. Existe la obligación de determinar la cuantía sólo cuando es posible su estimación”.

Al respecto: Gonzalo Castellanos Trigo, refiriéndose a pautas para determinar la cuantía,


remitiéndose a la Normativa Procesal Civil del Perú, aludió lo siguiente:

a) Competencia por cuantía

La competencia por razón de cuantía se determina de acuerdo al valor económico del


petitorio conforme a las siguientes reglas:

1) De acuerdo a lo expresado en la demanda, sin admitir oposición al demandado, salvo


disposición en contrario.

2) Si de la demanda o sus anexos aparece que la cuantía es distinta a la indicada por el


demandante, el juez de oficio, efectuará la corrección que corresponda y de ser el caso, se inhibirá
de su conocimiento y la remitirá al juez competente.

b) Cálculo de la cuantía

“Para calcular la cuantía, se suma el valor del objeto principal de la pretensión, los frutos,
intereses y gastos, daños y perjuicios y otros conceptos devengados al tiempo de interponer la
demanda.

Si una demanda comprende varias pretensiones, la cuantía se determinará por la suma del
valor de todas. Si se trata de pretensiones subordinadas o alternativas, sólo se atenderá a la de
mayor valor.

Si son Varios los demandados, la cuantía se determinara por el valor de lo demandado.

En las prestaciones relativas a Derechos Reales sobre inmuebles, la cuantía se determinará


sobre la base del valor del inmueble a la fecha de la interposición de la demanda, tomando en
cuantía el valor catastral y/o declaración jurada de pago de impuestos municipales”.

Finalmente, con el objeto de un correcto desarrollo argumentativo, cabe referir lo señalado


por el Profesor Lino Enrique Palacios “'Toda demanda -dice el art. 4° CPN- debe interponerse ante
Juez, y siempre que de la exposición de los hechos resultare no ser de la competencia del juez ante
quien se deduce, deberá dicho juez inhibirse de oficio. Consentida o ejecutoriada la respectiva, se
procederá en la forma que dispone el art. 8°, primer parágrafo', es decir, se remitirá la causa al juez
tenido por competente”.

III.4. Análisis del caso concreto

De acuerdo al objeto y causa de tutela, identificado en el párrafo introductorio a los Fundamentos


Jurídicos de este fallo, en la especie, la parte accionante denuncia que, el 30 de septiembre de 2013,
presentó demanda ordinaria de división y partición de bienes hereditarios al fallecimiento de sus
padres, reivindicación de bienes del acervo hereditario, cancelación de alquileres y otros, fijando
como cuantía en la suma de Bs90 000.-, monto que determinó para aperturar la competencia del
Juez Segundo de Partido Sentencia Penal y Mixto de Llallagua.

En ese contexto, sostiene que, con el objeto de cumplir con la cancelación de la cuantía
señalada, se apersonó a las oficinas de DD.RR. de Uncía, siendo obstaculizado en el pago, con el
argumento de que “COMO DEMANDANTE NO PODEMOS FIJAR UNA CUANTÍA, Y PARA CUALQUIER
PAGO DEBE PRESENTARSE LOS COMPROBANTES DE PAGO DE IMPUESTOS, PARA QUE EN BASE AL
VALOR CATASTRAL SE PUEDA DETERMINAR LA CUANTIA” (sic).

Finalmente aduce que, frente a dicha exigencia, presentó a la referida oficina un memorial
solicitando que las observaciones que le fueron expresadas sean debidamente fundamentadas y
basadas en una ley que así lo determine; sin embargo, por providencia de 31 de octubre de igual
año, emitida por la Sub Registradora de DD.RR. de Uncía -ahora demandada- no se llegó a ninguna
fundamentación ni apoyo legal, para exigir la cancelación del importe del cuatro por mil, para que
sea menester presentar comprobantes de pago.
En ese contexto, siendo finalidad de la justicia constitucional, la de velar por la supremacía
de la Constitución Política del Estado, ejercer el control de constitucionalidad y precautelar el
respeto y vigencia de los derechos y garantías constitucionales, en coherencia con lo expresado en
los Fundamentos Jurídicos III.1 y 2 de este fallo, la problemática planteada se circunscribe e implica
precisamente la vulneración del derecho de acceso a la jurisdicción; en la especie, la actuación de la
Sub registradora de DD.RR. de Uncía, lesionó ciertamente dicho derecho, correspondiéndole
únicamente recepcionar el pago de la cuantía estimada por la accionante en su demanda; pues, de
los razonamientos doctrinarios glosados en el Fundamento Jurídico III.3, se entiende que será el juez
ante quien se deduce la demanda, quien de oficio, efectúe la corrección que corresponda y de ser el
caso, se inhibirá de su conocimiento y la remitirá a la autoridad judicial competente; en todo caso, la
funcionaria judicial no es la indicada para objetar una determinación de una autoridad jurisdiccional,
cual es la exigencia de presentar el comprobante de pago por la cuantía considerada en la demanda
(Conclusiones II.3.); máxime si la respuesta realizada a la accionante no constituye fundamento ni
base legal que justifique dicha determinación.

Finalmente, no constituye pertinente estimar la prueba en que funda su defensa la ahora


demandada, pues, la Circular GER.DD.RR. 010/2009, (aplicación nuevos aranceles de Derechos
Reales, refiere aspectos enteramente a prestaciones relativas a Derechos Reales sobre inmuebles,
que puedan ser aplicables a la problemática planteada.

Consecuentemente, en virtud a los fundamentos expuestos, se evidencia que la Jueza de garantías,


al conceder la acción de amparo constitucional, ha evaluado en forma correcta los datos del
proceso.

POR TANTO

El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Primera Especializada, en virtud de la autoridad


que le confiere la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia y el art. 12.7 de la Ley del
Tribunal Constitucional Plurinacional; en revisión, resuelve: CONFIRMAR la Resolución 2 de 7
noviembre de 2013, cursante de fs. 23 a 26 vta., pronunciada por la Jueza de Partido Sentencia Penal
y Mixta de Uncía del departamento de Potosí; y en consecuencia, CONCEDER la tutela solicitada, con
los mismos fundamentos esgrimidos en la Resolución de la Jueza de garantías.

Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.

Fdo. Dra. Ligia Mónica Velásquez Castaños


MAGISTRADA

Fdo. Tata Gualberto Cusi Mamani


MAGISTRADO

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