La dominación territorial es uno de los grandes conflictos, por no decir el mayor, que se ha evidenciado a lo

largo de la historia mundial. Este ocurre, en la mayoría de las veces, por cuestiones políticas y económicas.
Es decir, expandirse como territorio para que su ideología prevalezca y para obtener mayores recursos
económicos y seguir creciendo en prosperidad. Sin embargo, el caso de Corea resalta en este aspecto,
puesto que lo que esta cultura quería era estar unificada y ser independiente, pero no buscaban una
expansión territorial. A la vez, es una nación peninsular, lo que la mantiene más alejada del continente de lo
que están otros países y eso puede ser una dificultad para generar comunicación y conexión.

A raíz de lo mencionado, se debe destacar el proceso de colonización, puesto que Japón ya estaba
planeando esto y, además, se daba cuenta de ciertas debilidades en la nación coreana que le ayudarían a que
el proceso fuese más rápido y efectivo. Hasta este punto, considero que no hay ningún tipo de sorpresa o de
crítica que se le pueda hacer a la expansión japonesa en Corea. Por otra parte, la nación coreana estaba
teniendo serios problemas al interior de su estructura ideológica que la hacía vulnerable a cualquier
contacto con el exterior. Empero, las atrocidades cometidas por Japón fueron extremadamente duras y no se
pueden justificar con argumentos válidos para validar su accionar.

Uno de los hechos deplorables que se considera criticable, es el coartar la libertad en cualquiera de
sus formas. Si bien, ambas naciones cometieron asesinatos, es abismal la cantidad de muertos coreanos en
manos de los japoneses. No se puede afirmar que era una “guerra”, ni menos que fuese en igualdad de
condiciones, por lo que el asesinato, partiendo desde el de la reina hasta el de los manifestantes, era
completamente innecesario. La libertar no solo se vio truncada en este aspecto, sino que la libertad de leer,
escribir y educarse incluso en su propio idioma fue eliminada. Tal como se menciona en los textos, esta
parte de la historia es muy oscura, ya que no hay muchos escritos o fuentes de lo que ocurría en este
período. Una de las conclusiones de ello es la censura y la privación de la libertad de expresión por parte de
los japoneses.

Otro aspecto que es importante mencionar y reflexionar es el tema de las mujeres de consuelo o
esclavas sexuales que impuso Japón. Un tema controversial pues no hay nada oficial que detalle y afirme de
parte de los japoneses que esto ocurrió de manera clandestina. La gravedad de este asunto tan solo se
manifiesta en el hecho de que sucedió. La esclavitud ya es un aspecto criticado y a lo largo de la historia se
ha hecho mucho para eliminarlo y para destacar lo injusto de esta práctica. Por lo tanto, evidenciar el
esclavismo sexual e imponerlo a través del engaño y del temor manifiesta la falta de civilización y empatía
de una cultura. A esto hay que sumarle la ilegalidad, deshonra y daños a la moral y buenas costumbres.

En consideración con lo expuesto anteriormente, es necesario señalar que en todo proceso de

reconstrucción de la historia y de acuerdos o llamados para la paz entre naciones, la verbalización de los
actos y el asumir los hechos y atrocidades que se realizaron es extremadamente importante. La herida solo
sana al limpiarla y darle los cuidados necesarios para ello. Sin embargo, Japón decía hacer las cosas de
manera diplomática y sin la violación a los derechos humanos. Asunto completamente falso. Por otra parte,
a la fecha Japón no ha asumido ciertos hechos deplorables, lo que conlleva a una enemistad y resentimiento
continuo entre japoneses y coreanos.

En conclusión, el colonialismo japonés en Corea es un hecho histórico que demuestra las

injusticias, dolores y malas prácticas que genera una dominación territorial de una nación a otra,
independiente de los motivos que se tengan. Al analizar este período es importante volver al pasado y
pensar en por qué la época de Joseon era y sigue siendo importante para la cultura coreana. Podríamos
señalar que esa etapa o dinastía fue una de luz, de gloriosa magnificencia y fue aquella que antecedió a este
oscurantismo provocado por Japón. Y, quizá por eso, la dinastía de Joseon tiene los lineamientos de la
actual cultura nacionalista de Corea.
 María Fernanda Llanos Chamorro.

Referencias Bibliográficas

Asian Boss Español. (2019, 27 de junio ). Vida de una "mujer de consuelo": La historia de Kim Bok-Dong.
[Vídeo]. Recuperado de Youtube. https://www.youtube.com/watch?
v=jsLZvMTVyYQ&list=RDCMUClOcf_-MVr11aAb3N-QJ-jA&start_radio=1&t=0

Romero, C. A. (2009). Cap. II De Choson a Chosen: unión y fractura de la nación coreana. En José Luis
León Manríquez (Ed.), Historia Mínima de Corea. (pp. 69-116). México, D.F.: El colegio de
México, Centro de estudios de Asia y África.