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1.3.

Dimensión ética del ejercicio docente

Conceptos:

Ética. Disciplina filosófica que estudia el bien y el mal y sus relaciones con la moral y el
comportamiento humano.

Docente. Persona que se dedica a la enseñanza.

Entre las funciones básicas de la formación humanística se encuentra la función de formación


ética. La misma contribuye a la elaboración y asimilación de las normas y patrones de conducta
que regulan la convivencia y las relaciones de los sujetos en la sociedad, inculcando un sistema
de principios humano-universales e histórico-concretos en el comportamiento social de la
persona.

La ética profesional docente se basa y supone no solo poseer un título o graduación sino una
preparación, actitud y dominio de al menos los siguientes campos:

 Dominio de los problemas y cuestiones más acuciantes a enfrentar y resolver de la


realidad educativa.

 Dominio de las diversas teorías que permiten explicar y comprender la realidad y


proyectar escenarios perspectivos.

 Dominio de la pedagogía como ciencia.

 Dominio del ethos específico de la profesión.

La ética profesional docente se manifiesta, expresa y proyecta en diversos planos o


direcciones, tales como con la sociedad, la escuela, los alumnos, los colegas de trabajo y con la
propia persona.

En expresión de los docentes, la muestra general coloca entre los cinco valores más
importantes para el ejercicio de la docencia los siguientes: integridad, profesionalismo,
respeto, competente en la materia y solidaridad

La naturaleza ética del profesional de la docencia se vincula estrechamente con fenómenos


tales como la vocación que se posea para su ejercicio, la preparación real que se tenga para su
desenvolvimiento, la disposición y comprensión de que la misma constituye un servicio social a
realizar, así como el reconocimiento y la posesión de valores propios del individuo que ejerce
esta labor.

Junto a todo lo anteriormente señalado se hace necesario destacar que la ética profesional del
docente existe y se manifiesta en diversas dimensiones, tales como en el propio proceso de
enseñanza-aprendizaje, en la investigación educativa, en la gestión educativa y en el vínculo
con la comunidad.

La docencia en sí no requiere solamente responsabilidad y compromiso; ser docente exige


asumir el papel de trascender y evolucionar en sus acciones, saberes y el entendimiento del
papel que representa.

Referencias

Valdiviezo R. (2010). La dimensión ética en la formación docente fundada en una pedagogía de


preocupación por los "otros". Revista Integra Educativa, 3(3), 139-163. , disponible en:
http://www.scielo.org.bo/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1997-
40432010000300010&lng=es&tlng=es.

Ramos Serpa, Gerardo, & López Falcón, Adriana. (2019). Formación ética del profesional y ética
profesional del docente. Estudios pedagógicos (Valdivia), 45(3), 185-199.
https://dx.doi.org/10.4067/S0718-07052019000300185

UNAM (2015) El ser docente y la ética: Disponible enhttps://uapa.cuaieed.unam.mx/

2.2.3. Redes sociales: el aula sin muros


Fue Marshall McLuhan quien comenzó a teorizar en los años 60 y 70 sobre la “aldea global”
como resultado de la interconexión humana por medios electrónicos; también pronosticó “El
aula sin muros” (1968); luego a mediados de los 90 llegó internet y todo comenzó a cambiar
aceleradamente, pero la pandemia de COVID-19 nos empujó de manera forzada a educar en
entornos alternativos y/o virtuales

Se entiende por Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) todas las tecnologías


digitales, especialmente computadoras e Internet.

En el desarrollo creciente de las TIC, es ineludible mencionar que bajo la órbita de la


denominada Web 2.0 la red digital deja de ser una simple vidriera de contenidos multimedia
para convertirse en una plataforma abierta, basada en la participación de los usuarios.

Siguiendo a Elena Barberà (2004), es evidente que las tecnologías de la comunicación y de la


información hacen posible el acceso a la virtualidad, generando nuevos escenarios educativos
con nuevos modos de relación, espacios de interactividad y comunicación por ende, no sólo de
forma instrumental o tecnológica, sino personal, ínter-subjetiva, relacional y cognitiva y nuevas
posibilidades de construir el conocimiento.

Esto ineludiblemente irrumpe en las prácticas docentes, interpelando las que se basan en
modelos educativos tradicionales a partir de una “aprendizaje extendido”. El “aprendizaje
extendido”, es una alternativa pedagógica que implica mucho más que enseñar y aprender a
través de medios electrónicos; implica construir conocimiento por medio de entornos
ampliado de aprendizaje.

Aparece así una nueva categoría que pretende diferenciarse de la categoría aula. El aula, es el
entorno presencial en el que se produce el proceso de enseñanza y aprendizaje.

El entorno virtual posibilita otras formas de habitar el aula, principalmente si se comprenden


las posibilidades de modificar la categoría del docente como “emisor privilegiado” dando lugar
a otras voces y otras intervenciones protagónicas en el proceso de construcción del
conocimiento, proceso que delimita la finalidad y el sentido de las escuelas.

Las aulas sin muros son concebidas como un sistema de organización donde intervienen
métodos y medios digitales, a través de los cuales el estudiante interactúa para lograr el
aprendizaje. En el aula digital, al igual que en la clase presencial, se producen procesos tanto
de enseñanza aprendizaje como de interacción social, por tanto requiere de una organización,
que esté sustentada en lo pedagógico, donde la selección de todos los recursos, actividades o
bloques, parten de la relación con la capacidad a desarrollar, el contenido y el método a
emplear, considerando también las características del estudiante.
A raíz de la pandemia de COVID-19, nos ha tocado desarrollar reuniones, conferencias o clases
virtuales por Zoom, Teams, Google Meet u otras plataformas; siempre que estoy en una sesión
de trabajo virtual reflexiono sobre esta oportunidad de conexión que nos permite estar en una
pantalla a un grupo de personas de modo sincrónico, aunque estemos distanciados por cientos
o miles de kilómetros. Puede o no haber bilateralidad, diálogo, empatía, aprendizaje. Parece
real, pero es virtual, es un aula sin muros

Referencias

Snafilipo D (2014). El aula sin muros, posibilidades y desafíos para la enseñanza media.
Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires. Diaponible en.
https://repositoriosdigitales.mincyt.gob.ar/

Picardo O (2021). El aula sin muros. Revista Disruptiva. Disponible en


https://www.disruptiva.media/el-aula-sin-muros/

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