Está en la página 1de 13

~

-agogíal conocimiento
. .
y experIencIa:
rqueológicas sobre
subalternización*
. nomadas@ucentral.edu.co PÁGS.:98-108

El articulo se propone te1


pándolas en tres matrices hist,' .
de las tensiones constitutivl
escuela se han regulado las
que éstas han entradoen",ur..,.
Palabras clave; histo .

rela~oes entre pedagogía, experiencia e conhecimento, agru-


=a racional, a experimental e a comunicativa-, que dariam canta
~h:to. Sao descritos os distintos modos históricos de como, na escala,
ft~cimento-represen~ao e experiencia-ciencia, e se sugere que estas
dita, para a qUffl~institui~ao escolar nao [oi desenhada nem se encontra

'"fitemología e pedagogía; escala e experiencia.

rk, ePistemology and pedagogy, school anZ1experience.

ORIGINAL RECIBIDO: 04-VII-2006 - ACEPTADO: 15-VIII.2006

bajo es producto del proyecto de investigación Saber pedagógicoy campos concep-


inanciado por el Instituto para la Investigación y el Desarrollo Pedagógico,

IDE't.\lcaldía Mayor de Bogotá.


* * Historildor. Doctor en Filosofía y Letras de la Université Catholique de Louvain,
Belgi Profesor e investigador en la Universidad Javeriana, Bogotá. Miembro del
Grupo ~ toria de la Práctica Pedagógica en Colombia. E-mail: saldarri@javeriana.edu.co

98 . NÓMADAS No. 25. OCTUBRE 2006. UNIVERSIDAD CENTRAL-COLOMBIA

l1li .. '.~I~IIIII¡"IIIIIIIIIII!IIIIIIIIIIIII

a i¡,1I1
foco o lo negro del universo, así como la han regulado la pedagogía, en las
Epígrafe existencia singular del hombre indigente y sociedades modernas..."?
adolorido. [...]
En la actualidad, cua14uier discurso sobre Criado en esas llamas irregulares, instrui- Esta inversión de elementos
la experiencia debe partir de la constata- do, educado, el [tercer instruido] engendra
ción de que ya no es algo realizable. Pues en él las terceras personas o esPíritus que pone en evidencia una problemá-
así comofue Privado de su biografía, al pueblan su cuerpo y su alma con sus
tica. De un lado, cada uno de los
hombre contemporáneo se le ha exproPiado formas y sus brillos, tanto como las piezas términos que sostienen la frase -pe-
su experiencia: más bien la incapacidad de y retazos componen los fuegos coloreados dagogía, conocimiento y experien-
tener y de transmitir experiencias quizás del manto de Arlequín o el fuego blanco
sea uno de los pocos datos ciertos de que
cia- es equívoco o polisémico en
que los suma.
dispone sobre sí mismo. extremo. ¿Aprender es tener expe-
EsPíritu: luz clara, púdica y contenida,
Giorgio Agamben (2004) irisando el cuerpo y el alma como los riencia? ¿Tener experiencia es co-
millones de soles de la noche constelan el nocer? ¿Todo con.ocimiento pasa
La teoría del conocimiento no ha cesado universo.
por la pedagogía? ¿Todo aprendiza-
jamás de tomar por modelo la expansión o Re-nacido, él conoce, tiene piedad.
la emisión de la luz. Esta hacía retroceder je implica una pedagogía? ¿La pe-
Al fin, puede enseñar.
las tinieblas y debía triunfar en el espacio y Michel Serres (1991) dagogía produce o simula la
en la historia. Convertidos hace poco en experiencia? ¿La pedagogía es
relativistas y modestos, loscontemporá- lo opuesto del conocimiento}
,
neos, prudentes a partir de 'entonces, se
apasionan a aplicar sobre el detalle un haz
luminoso casi puntual, fino y agudo
como un rayo láser.
Hemos abandonado la
síntesis unitaria para
'
l
¿Conocimiento
00.0.'

00
sin peda-
gogía no engendra experien-
da? Los juegos semánticos
podrían prolongarse, pe-
ro, de otro lado, estoy
re encontramos o seguro de que el movi-
perdemos deliciosamente 1 miento de regulación.
en las delicadezas de lo
de esas relaciones ha
ínfimo, olvidadizos de lo
universal a favor de las procedido usualmen-
singularidades portadoras 1 te desde los saberes
de sentido. [. . .] Definido por
" y los intelectuales
clausura y especificidad, el dedicados al estu-
ideal del conocimiento pasó,
dio de "el conoci-
pues, de las leyes generales al
debate detallado, llegando a 1'1"N\. miento". y deb "la
una fragmentación diseminada '
191.0." .' " h 1
1'"fI.'ccO' expenenCla, aCla os sa eres
e innumerable. Sorpresa: en
«le¡,O.lle),
},.o.1\ e intelectuales . ocupados"." de "peda-
algunos lugares o vecindarios, lo
co.r¡,O.ge1\o. "'
gogla: 1os pnmeros teonzan y
universal se soterraba. Mas,
asombro renovado, éste no pide ni
estos últimos "aplican".
extenderse' ni regir, exige, por el
contrario, su retorno a la localidad cercana Por ello, valdría la pena abor-
y fina, adamantina, donde se le descubrió.
Las preguntas dar las relaciones conocimiento-ex-
La [lama, minúscula, se torna inmensa y periencia-pedagogía, desde la
vuelve a ras del suelo. Irregularmente, de "La pedagogía, en nuestras so-
lo local a lo global, palpita, danza, ciedades occidentales modernas, pedagogía, lo cuaL implica, de en-
tiembla, vibra, cintila este conocimiento trada, problema tizar el estatus
ha llegado a ser un espacio estra-
como una cortina de llamas. En el centro epistemolpgico Y cultural subal-
tégico para la regulación de las re-
del sistema, el sol ilumina el conjunto; pero terno que en estas sociedades se
esta estrella enana marginal está tirada
laciones entre conocimiento y
le ha asignado a la pedagogía y a
allí, en alguna parte del universo. Estas experiencia". Concedamos algún
su sujeto portador, el maestro.
dos proposiciones, la universal y la sentido a esta frase con aire de lu-
Estas son preguntas que empiezan
singular, para_un solo sol siguen siendo gar común. Pero, ¿algo cambiaría
verdaderas a un mismo tiempo. Frente a él, a emerger con gran' fuerza políti-
-me pregunto-, si este texto <::0-
tan universal como la ciencia, la cuestión ca a partir de los movimientos
menzara diciendo: "Las relaciones
del mal y del sufrimiento, de la injusticia y sociales de maestros que reivin-
del hambre, tenebrosa, ocupa el segundo entre conocimiento y experiencia

NÓMADAS. 99
SALDARRIAGA VÉLEZ, O.: PEDAGOGÍA, CONOCIMIENTO Y EXPERIENCIA: NOTAS ARQUEOLóGICAS SOBRE UNA SUBALTERNIZACIÓN
dican su condición de intelectua~ dos series de códigos pragmáticos dividual yolas verdades universales
les, y ésta ha sido la pregunta ra~ que sólo se intersectan de modo irre~ de la ciencia y de la ética? ¿O es
dical que ha venido guiando guIar e incluso aleatorio? . que tal relación no existe, y habría
nuestras investigaciones sobre la que considerar experiencia y cien,
práctica pedagógica en Colombia Si estas preguntas son ya difíci, cia como dos dominios separados,
(Zuluaga, 1987; Zuluaga, Echeve~ les de por sí, las otras dos series 10 como se pensó desde Aristóteles
rri, Martínez y otros, 2003), al son mucho más, pues son apenas hasta Descartes: el padecer indivi,
problematizar, con herramientas visibles para refinados ojos episte~ dual es lo singular, el conocer la
de corte histórico,genealógico, el mológicos: ¿Conocer es represen, verdad es impersonal, extrahuma,
estatus de la pedagogía como sa~ tarse los objetos del mundo? O no? (Agamben, 2004: 16). O bien,
. ber sometido y del maestro, como ¿conocer es actuar sobre "la realidad" ¿forman ciencia y experiencia un
sujeto subalternizado. y "producirla como objeto"? O, por dominio unificado gracias a un su'
el contrario, ¿significa poner en jue, jeto trascendental, pero a cambio
En aras del análisis, diría que las go sistemas de sentido lingüísticos de que la ciencia "monopolice"
líneas de tensión epistemológico~ y pragmáticos, situados cultural e toda forma de experiencia legítima?
políticas a través de las cuales pue~ históricamente? O ¿hay que rebasar la noción cien,
den rastrearse históricamente los tífica de experiencia para pensarla
juegos de regulaciones mutuas en, y en cuanto a la relación expe~ como un espacio móvil que permi,
tre pedagogía, conocimiento y riencia,ciencia: ¿Cómo asegurar la ta desfundamentalizar la subjetivi~
experiencia son: las relaciones teo, conexión entre la experiencia in, dad exponiéndola al azar del
ría,práctica, las relaciones acontecimiento? (La~
conocimien to ,re pres en ta, rrosa, 2004).
cióny las relacionesexpe, .
riencia,ciencia. La tensión Apoyado en estas
que aparece como la ma, preguntas, quisiera pro'
yor y definitoria del cam, poner en este artículo
po pedagógico es, de una hipótesis sobre la
lejos, la tensión teoría, conformación histórica
práctU:a, de modo que el de las relaciones entre
maestro y los pedagogos pedagogía, conocimien--
pasan su tiempo en esta, to y experiencia, atre,
blecer si la práctica se viéndome a esquemati~
ejerce como una aplica, zarlas en tres matrices
ción -más o menos exito, histórico,genealógicasl.
sa- de la teoría, o si la
teoría opera como resul, Acudiendo a una
tado -más o menos pre, nomenclatura con~
ciso- de la práctica. O, vencional, podría de~
para ponerlo en términos nominarlas "clásica",
epistemológicos más fi~ "moderna» y "con~
nos: ¿funge la práctica temporánea", que su~
como un momento de ve~ gieren una secuencia
rificación entre dos mo, cronológica útil para
mentos teóricos? O bien, cierto. momento del.
¿funciona la teoría como análisis. Pero esa ima~
un momento de forma~ gen evolutiva conlle~
lización entre dos momen~ va la falacia de hacer
tos prácticos? O, ¿se tratan creer que las más re~
teoría y práctica como Catedral de Cartagena, Juan Trucco, 1920. BPPM. cientes han desplaza~

100 . NÓMADAS No. 25. OcruBRE 2006. UNIVERSIDAD


CENTIw. - CoLOMBIA

. """IiII iJJI"'" li~111111II 111111111

:¡ 111"
do a las más antiguas, y preferiré de maestros laicos (Restrepo, XVII- se constituyó el proyecto
los nombres de "racional", "expe- 1911), sino en los manuales de las mayor de establecer una lengua uni-
rimental" y "comunicativa", que al congregaciones religiosas docentes versal perfecta, donde el valor re-
menos. dan cuenta de tres tipos de -lasallistas, salesianos, maristas y presentativo de los signos pudiese
epistemologías que se diferencian jesuitas-. Para explicar esta singu- garantizar la verdad y claridad de las
entre sí de forma marcada, pero laridad, hemos postulado que, bajo ideas y, como su efecto, la correc-
que, por otro lado, conviven, se las divergencias ético-políticas en- ción y rectitud de las pasiones, de la
hibridan y compiten en la existen- tre radicales y conservadores, exis- voluntad y de los actos morales.
cia actual de nuestras escuelas. tía un sus trato epistemológico
común, justamente, con referencia Hasta el menos avezado en
a las nociones de conocimiento y historia de la epistemología adver-
Pedagogía, experiencia que fundaban las peda- tirá que estoy simplificando de
..
..
conocimiento gogías pestalozzianas. . modo burdo; pero debo insistir en
..
... y experiencia que se trata de presentar el esque-
en la pedagogía Ese sus trato es el que hemos ma de las tensiones constitutivas
"clásica" o racional denominado "pedagogía racional". que nos ocupan: en esta episteme,
El término era aún corriente en el la pedagogía es postulada como
Antes de avanzar, debo expo- siglo XIX, y nombraba la modali- ciencia y arte, ciencia racional o
ner una singularidad histórica: se ha dad de conocimiento procedente de axiomática de la naturaleza huma-
dicho que la pedagogía moderna la ciencia clásica de los siglos XVI na y técnica de la educación; el
ingresó a Colombia con la introduc- a XVIII, cuyo paradigma era la conocimiento es entendido como
ción de los métodos pestalozzianos matemática. Conocer, para la cien- representación de las esencias de
u objetivos, bajo los gobiernos li- cia racional, era poder clasificar cada objeto del mundo, y la expe-~
berales radicales entre 1870 y 1886. todos los objetos del mundo en una riencia, al modo matemático, es si-
A partir de este último año, mien- gran cuadrícula de semejanzas y di- nónimo de observación y raciocinio,
tras en la mayoría de los países ferencias (Foucault, 1966). Proyec- proceso por el cual el sujeto ascien-
latinoamericanos triunfaban los to sostenido, de Un lado, por una de desde las sensaciones y percep-
proyectos liberales, se instauró un singular teoría sobre las relaciones ciones hasta las abstracciones.
régimen confesional, católico y entre pensamiento y lenguaje: "la
conservador que tuvo hegemonía mente se refleja en la palabra como Un saber psicológico conocido
hasta 1930, cuando los liberales en un espejo, en las leyes de la pa- como "psicología racional", "psico-
reconquistaron el poder y reanuda- labra se hallan expresadas las leyes logía filosófica", "de las facultades",
ron la modernización pedagógica del pensamiento". Así, reconstruir "especulativa" o "teórica",.ha acom-
con la introducción de los métodos - las leyes subyacentes a todo lenguaje pañado e,sta matriz. Allí, la noción
de la "Escuela Activa". Para la permitiría encontrar, a su vez, el de conocimiento como representa-
historiografía liberal, ese período orden subyacente a los objetos del ción de lo real implica una noción
político entre 1886 y 1930, y la mundo. Y, de otro lado, con un de "inteligencia" definida como
"pedagogía católica" correspon- método de procedimientos silogís- capacidad para comprender las co-
diente, habrían sido un hiato de ticos, aritméticos y geométricos de sas en su esenciay acceder a "los
antimodernidad, al menos intelec- inducción y deducción, llegar a es- trascendentales del ser": lo Verda-
tual y cultural. tablecer unos axiomas o principios, dero, lo Bue:p.o y lo Bello. Esa ca-
desde los cuales se vuelve a "des- pacidad resid.iría en un conjunto
A despecho de ello, hemos po- cender" analíticamente hasta los de facultades -mentales o del alma,
dido constatar la total continuidad corolarios y conclusiones. De allí la según se fuese pedagogo materia-
entre los métodos pestalozzianos primacía de las :ciencias\de la lógi- lista o espiritualista-, localizadas a
ingresados en-I870 y los utilizados ca y la gramática en esta episteme partir de unas operaciones lógicas
por los pedagogos católicos hasta "clásica" o "racional": desde la épo- en escala, desde las que reciben las
1930. y no sólo en los manuales ca de Descartes y los lógicos impresiones externas hasta las que
oficiales utilizados para la formación jansenistas de Port Royal -siglo abstraen las esencias en conceptos

SALDARRIAGA VÉLEZ, O.: PEDAGOGÍA, CONOCIMIENTO Y EXPERIENCIA: NOTAS ARQUEOLÓGICAS SOBRE UNA SUBALTERNIZACIÓN NÓMADAS 101
..

y encadenan éstos en razonamien- en tanto potencia destinada al co- Así, se comp¡ende que, desde ~
tos. Las facultades son concebidas nocimiento de esencias. De ahí que, cartes, la obsesión en la ciencia ~

como ~peraciones discretas y sepa- "aunque los actos violen las reglas en la pedagogía sea evitar el emx
rables, casi como "fuerzas muscu- de la razón y la lógica, se presume causa del mal: tal será la funciÓG
lares", a las que habría que ejercitar siempre que las operaciones de la asignada al método, una serie de
constantemente por medio de la mente humana siguen siendo lógi- técnicas y artes pedagógicas qm:
voluntad: educar era entonces for- cas" (Sáenz, Saldarriaga, Ospina, buscan primero entrenar y formar
lVar hábitos intelectuales. y hábitos 1997, T. 2: 190, 197). Será enton- las facultades "antes de lanzadas a
morales con la ejercitación cons- ces el uso desordenado de las facul- la experiencia", pues, aunque va-
tante de la memoria, la observación, tades el que impida llegar a las lorizan la "experiencia directa" der
el cálculo, hasta lograr su reproduc- "ideas claras y distintas", a los prin- contacto y la observación de "los
ción me\::ánica constante y fijados cipios: he ahí la causa del error y objetos", asignan a ésta un lugar
como "disposiciones permanentes". del vicio, la forma moral del error. derivado. Así, se entiende que la
El hábito es la repetición de actos, A la inversa, una mente bien en- pedagogía clásica, sistematizada
que puede ser forzada o impuesta (en trenada en el arte de pensar y con desde Vives y en especial desde la
los animales o en las facultades sen- buenos hábitos intelectuales, podrá Didáctica Magna de Comenio
sibles), pero voluntariamente ejer- deducir bien, a partir de principios (1633), haya llegado a condensar-
cida en el hombre, llega a formar su verdaderos, las acciones correctas se en el contundente axioma: "ha-
"segunda naturaleza", asegurándole y convertir~as en hábitos virtuosos. blar bien es pensar bien, y pensar
el ej ercicio responsable bien es obrar bien"; de las
de la libertad. Este será un nociones generales co-
tema candente frente a las rrectas debían desprender-
pedagogías de matriz ex- se las acciones correctas.
perimental, las cuales, Reconocemos como "ra-
apoyadas en saberesde cionales" a todas las peda-
corte biologicista, sosten- gogías que comparten esta
drán que la libertad o la base epistémiéa, pues
autonomía comienzan proceden postulando un
precisamente donde ter- conjunto de "principios"
minan los hábitos. o "axiomas" y de allí de-
rivan, deducen, sus "apli-
Uno de los temas cen- caciones" .
trales de esta psicología -
que' era una "conciliación Tenemos acá la for-
ilusoria de incompati- ma clásica de la relación
bles", un híbrido construi- teoría-práctica. La impli-
do sobre gos tradiciones cación epistémica y pe-
antagónicas, .la aristoté- dagógica más fu.t;rte de
lico-escolástica y la heren- ella, es una desconfianza
cia cartesiana- es el de las radical en la experiencia
relaciones entre el cuerpo del sujeto empírico. Para
y el alma, sus conexiones toda la configuración clá-
o sus influencias mutuas, sica o racional, mantener
expresadas en la lucha en- la pretensión de un dis-
tre las pasiones y la razón. curso perfecto supone
.\ Este modelo lógico-gra-
-
desconfiar de las sensacio-
matical del funciona- nes y de las pasiones, es
miento mental no admite decir, de la experiencia
ninguna falla en la razón, Catedral de Santa Marta., Alfonso Mier, 1920. BPPM. individual: ella es la fuen-

102 NÓMADAS No. 25. OCTUBRE 2006. UNIVERSIDAD CENTRAL - COLOMBIA

.
te del error y de la confusión. Por epistémica racional parece haber reconocer en dondequiera que se
esta vía constatamos que, desde su desaparecido de nuestro horizonte operen procedimientos didácticos
génesis, la experiencia moderna del actual de pensamiento, de hecho, su del modo deductivo; allí donde la
individuo ha emergido atravesada modo paternal-pastoral de regular "práctica pedagógica" sea ejercida
por una paradoja: lo que se va al- las relaciones entre conocimiento y como uI).a aplicación subsidiaria de
canzando como una conquista de experiencia pedagógica se ha man- principios teóricos~ Aquí se enraiza
la libenad se revela, al mismo tiem- tenido hasta hoy como uno de los una nueva fuente de subalterniza-
po, como un peligro para la verdad. componentes fundacionales del ofi- ción del maestro -"artesano manual"
He aquí la raíz de un pensamiento cio de maestro, a pesar de haber su- frente a los "pedagogos teóricos"-:
moderno que, a la vez que se pro- frido ciertos desplazamientos y si los altos intelectuales actuales del
clama liberal, desconfía del indivi- recortes al pasar por las pedagogías cognitivismo parecen tener claro que
duo. Es allí donde cobra pleno de matriz experimental y comu- su concepción de la actividad
sentido la Ínvención de la pedago- nicacional. Incluso, creo que hay cognitiva es de estirpe kantiana -y
gía como ciencia y arte de educar, que ir más lejos, para afirmar que experimental, se constata que un
tal como fue sistematizada por los las pedagogías racionales, despren- gran número de maestros, bajo un
humanistas desde el siglo XVI y, didas de su matriz epistémica lógi- discurso constructivista, operan en
luego, por los ilustrados: dotada de co-gramatical, han mantenido su realidad todavía con el modo de
esa infalible herramienta que es el núcleo meto do lógico y se pueden hacer clásico, el de la pedagogía
método -tan eficaz que
está diseñada "a prueba de ~
--- .~
racional, y con la episte-
mología del conocimien-~
maestros"-, la conducción lO
to como representación.
. personal del mgestro lle-
vará, gradual y sistemá-
, ~

-, !
IAI

y esto no debe ser


......
ticamente, a formar en los considerado necesaria-
niños y púberes hábitos de -1' mente como una "inde-
..
observación y abstracción 1'" seable supervivencia" del
tales que los pongan en el pasado. Nunca estará de
camino de la verdad y del más insistir en que el pro-
bien. En una palabra, que blema no es la existencia
los introduzcan en la disci- o la pervivencia de la pe-
plirux de la verdad. dagogía racional" porque
ella sigue en la base de
Es de esta matriz racio- los enunciados de cual-
nal de donde procede tam- quier pedagogo moder-
bién una las características no: es difícil abandonar
que la pedagogía moderna la claridad y certeza de
aún no abandona: la idea esa "pedagogía natural"
de que "lo natural" en el que se basa en la sen-
conocer -y, por tanto, en sorialidad inmediata de
el aprender-, es ir "de lo la infancia, para la cual la
simple a lo complejo", de actividad se traduce en
lo "conocido a 10 descono- ejercitacién, manipulación
cido", de lo "panicular a lo - de objetos y movilidad fí-
general" y de lo "inmedia-
to a lo lejano".. Tan poten- -.
1 sica. Pero esos famosos pa-
sos del método racional,
te ha sido este-dispositivo ya desprendidos de su ma-
pedagógico racional, que -- triz epistémica de origen,
exige una advertencia: Catedral de Santa Marta, Edward W Marck, 1846. Acuarela! papel. 25x 17 cm.
se han convertido hoy en
aunque la configuración Biblioteca Luis Ángel Arango, BLAA. una especie de definición

SALDARRIAGA VÉLEZ, o.: PEDAGOGÍA, CONOCIMIENTO Y EXPERIENCIA: NOTAS ARQUEOLÓGICAS SOBRE UNA SUBALTERNIZACIÓN NÓMADAS. 103
..

de sentido común de "La Pedago- no es lo mejor, y que debe desplazar esquemático en mi presentación de
gía" o de "La Enseñanza" que, in- y excluir a lo que es viejo, pasado y, lo que ocurre cuando la infancia y
cluso, muchos maestros salidos de por supuesto, negativo. Pero la qui- la enseñanza son capturadas por el
facultádes de ciencias de-la educa- mera no es la pedagogía racional, dispositivo de las ciencias positivas
ción consideran aún válida y hasta sino el pensar que ella es "pedago- o experimentales del hombre, la lin-
científica: si la pedagogía racional gía tradicional" y que siéndolo, debe gÜística, la antropología, la socio-
ha perdido su fuente teórica -la gra- desaparecer de raíz. Sin embargo, la logía y la economía política; pero,
mática general y el racionalismo pedagogía racional no puede desa- en particular, por el saber hegemó-
cartesiano- pervive como un haz de parecer, pues es ahí donde el sentido nico entre todos, el de la biología,
prácticas escolares que parecen tan- común de los maestros ha preserva- con sus métodos de experimenta-
to más "naturales y evidentes", por do unas prácticas que fueron la ción, medición, selección y admi-
cuanto su teoría original se ha fuente misma de su oficio, impidien- nistración científica del trabajo,
desdibujado y silenciado, y porque do que las sucesivas oleadas de "mo- poniendo a circular nociones, como
el lenguaje que usamos para "siste- dernización pedagógica" los separen las de especie y raza, organismo y
matizar nuestras prácticas" provie~ de su tradición: ella es, paradójica- medio, selección natural y lucha
ne de otra fuente epistémica. mente, uno de los pilares de su re- por la vida, normalidad y patolo-
sistencia a la subalternización gía. Y respecto a la infancia escola-
Pero el problema no está, insis- intelectual y ética. (Saldarriaga, rizada, las nociones de interés
to, en la pedagogía racional y su débil 2003: 84-85). psicofísico, coeficiente intelectual,
desplazamiento por la pedagogía ex- instinto, aptitud y destreza, heren-
perimental: su coexistencia es parte cia, adaptación, rendimiento y
de las tensiones creativas que enri- Pedagogía, desarrollo psicofísico, destrezas pro-
quecen el campo conceptual y prác- conocimiento y fesionales y aprendizaje por la
tico del saber pedagógico; campo experiencia en la acción.
donde, al igual que en la vida, las pedagogía.
situaciones son de una complejidad "moderna" o El giro epistemológico que
mayor que la de un simple desfase experimental fundamenta esta nueva matriz
entre teoría y práctica. En el campo remite a la distinción entre expe-
pedagógico realmente existente, es- Por diversos motivos, entre riencia y experimento, que fue
tas dos matrices se separan, se mez- otros porque esta matriz pedagógi- tematizada especialmente por el fi-
clan y se repelen, se hibridan y se ca es, tal vez, la que nos es más fa- siólogo Claude Bernard en 1865,
rechazan, se solapan y se recubren, miliar, seré todavía mucho más en su famosa Introducción al estu-
conviven y se fecun- dio de la medicina ex~
dan. Lo que ha hecho perimental. ¡Frente a la
perverso todo este pro- idea clási~a de expe-
ceso, es que esta ten- riencia como dbser-
sión constitutiva se ha vación de hechos,
visto inscrita y mani- Bernard opone la
pulada -a causa de los idea, de estirpe kan-
r~formadores del siste- tiana, de que la natu-
ma educativo, hay que raleza no habla por sí
decirlo-, por la falsa misma si el investiga-
distinción entre peda- dor no la interroga, y
gogía tradicional y pe- la de que la ciencia no
dagogía m-oderna, un se hace con hechos
dispositivo- político- brutos, "naturales"
mercantil que introdu- sino con hipótesis y
ce la quimera de que comprobaciones pro-
lo más nuevo y moder- Calle de San Juan (detalle), Barranquilla, Juan Trucco, 1922. BPPM. gramadas. La experi-

104 NÓMADAS No. 25. OCTUBRE 2006. UNIVERSIDAD CENTRAL - COLOMBIA


mentación considera el error de actos, de los fenómenos, de la con- rada, que postula el 'don exquisi-
otro modo: ducta, de las funciones de la con- to' del maestro en aquellos que
ciencia, de las operaciones mentales, aspiran a tener éxito en ella"
El experimento implica [...] la de la interdependencia entre cuer- (Sáenz, Saldarriaga, Ospina, 1997
idea de una variación o de un po y mente, de las aptitudes, de los Tomo U: 38).
desorden, intencionalmente síntomas y de las enfermedades men-
producidos por el investigador tales. (Sáenz, Saldarriaga, Ospina, Señala Sáenz, que si "la peda-
en las condiciones de los fenó- 1997, Tomo, U: 190, 197). gogía experiencial pensaba al maes-
menos naturales (Bemard, 1966: tro como artista, privilegiando su
286). l...] Si estamos bien imbui- La nueva psicología sustituyó experiencia pedagógica y su intui-
dos en los principios del méto- la concepción racional de la inde- ción; la experimental tenía como
do experimental nada tenemos pendencia entre cuerpo y mente y ideal convertido en científico: en
que temer, porque, en tanto que de la separabilidad de las faculta- un administrador, medidor, psicó-
es exacta la idea, se continúa de- des, con la idea de unidad indiso- logo y médico de la infancia, o por
sarrollando, cuando es errónea, luble de lo físico y lo psíquico, y lo menos, en un complemento efi-
ahí está la experiencia para rec- del pensamiento ya no como co- caz del médico y del psicólogo"
tificada (Ibíd.:331). nocimiento de esencias sino como (Sáenz, Saldarriaga, Ospina, 1997,
acción, y acción destinada a la Tomo U: 37). A la par, las,pedag~-
Se configura así una. nueva re- adaptación del organismo al me- gías activas animaron otro esque-
lación epistemológica teoría-prác- dio: de ahí una nueva medida de ma de relación entre maestro y
tica. El método es ahora el del lo que se consideraría "inteligen- alumno, postulando que quien de-
ensayo-error, la consecuencia de cia". Correlativamente, d saber bía ocupar el centro de la escena'
esta nueva epistemología para el su- pedagógico se vio escindir entre lo era el niño, y que el maestro debía
jeto es igualmente fuerte. Si el error que se llamó "pedagogía expe- hacerse discretamente a un lado,
no es lo que debe eliminarse sino riencial" y "pedagogía experimen- como observador y "facilitador" de
la condición misma del conoci- tal". Las pedagogías que acá hemos la actividad espontánea de los
miento, la experiencia personal llamado racionales, e incluso algu- alumnos, tratando a la vez de guar-
pasa de ser sospechosa a ser inelu- nas ramas de la Escuela Activa, dar la postura neutral u objetiva del
dible. Pero ese lugar destacado la eran consideradas aún "experien- científico. Puede decirse que a la
convierte en un laboratorio de ciales", pues eran "una pedagogía posición clásica de empatía pa,sto-
experimentación científica y de la de artistas, que se elabora bajo el ral-artesanal del maestro se le in-
configuración de otro tipo de sub- signo de un impresionismo exage- corporaba un instrutnento, una
jetividad: la delimita- nueva rejilla de mira-
da por la psicología da, de distanciamien-
experimentaL La nue- to y de intervención,
va pedagogía científi- forj ada por los méto-
ca desechó no sólo la dos de las ciencias
fundamentación filo- positivas. Si a los ex-
, sófica de la pedagogía perimentalistas ello les
clásica, calificada de ha parecido una con-
"teórica", "filosófica", tradicción indeseable,
"especulativa" o "in- las escuelas nunca han
trospectiva", sino que podido ser convertidas
"creyendo indepen- del todo en laborato-
dizarse de todo rios puros y duros de
supuesto filosófico ra- psicología o de euge-
cional, se fundó en una nesia. Pero es verdad
psicología concebida que, esta "cientifiza-
como ciencia de los CaUe del Comercio, Barranquilla, Juan Trucco, 1922. BPPM. ción" de la prácticape-

SALDARRIAGA VÉLEZ, O.: PEDAGOGÍA, CONOCIMIENTO Y EXPERlENCIA: NOTAS ARQUEOLÓGICAS SOBRE UNA SUBÁLTERNIZACIÓN NÓMADAS. 105

_." ."." .,.. .' '""""""'OO' "","", """"'" oIiiiJIIImlltltll"ml"lIlllllhll",I.I,,'1I ,1 ",


r

dagógica fue un momen~o irreversi~ maestro en su práctica coti- dagogías que se fundan en las
ble del proceso. de sec{¡l~rización y diana en la escuela (Zuluaga, epistemologías provenientes de
reconversió.n del Clásico gobierno 1987: 153). l~s ciencias del lenguaje, de la co-
pastoral del maestro, al incorporar mJmicación y de la información.
a la pedagogía elementos tanto de Si, de un lado, el saber del Caracterización tentativa, pues
las psicologías clínicas o terapéuti~ maestro (el que se exige que deba aquí avanzamos a tientas tratan~
cas como de la sociología y la eco~ tener) se ha ampliado, pues las do de entender una compleja
nomía política (la administración y ciencias generales y los saberes es~ transformación en curso de la que
la planificación). pecíficos que debe manejar ya no . somos, a la vez, actores y objetos.
caben todos en un manual y en Se trata de la aparición progresi~
Si en esta matriz, experiencia una escuela normal, es porque, de va de los llamados "procesos de
es experimento y conocimiento es otro lado, las ciencias de la edu~ producción de sentido", de "cons-
acción adaptativa, la pedagogía cación han re ordenado -en reali~ trucción social de códigos cultu~
como ciencia y arte de enseñar ha. dad, dispersado- su obj eto de rales" y del "reconocimiento de la
sido sustituida por las "Ciencias saber en función del aprendizaje: subjetividad como una experien-
de la Educación", que son, dij é~ se ha pasado el foco de atención, cia situada", por pertenencia a
ramos, aplicaciones, o mejor, desde lo que debe hacer el maes~ sub culturas etarias, étnicas, de
sistematizaciones de ciertas regio~ tro, hacia cómo aprenden los su~ género, de clase social o de capi-
nes de estos saberes experimenta~ jetos, dando prelación, en la tal simbólico.
les en función de la enseñanza. polaridad enseñar~aprender, a lo
Con un precio para la pedagogía: segundo sobre lo primero por obra Abusando aún más de la es-
habría que decir, con Zuluaga, de la(s) psicología(s), así como que matización, diré que hay aquí
que ellas, las ciencias de la edu~ gracias a la sociología, el maestro un nuevo giro. en las relaciones teo-
cación, han efectuado una recom~ se transforma correlativamente en ría-práctica. Paradójicamente, al
posición en los saberes escolares, un sujeto que debe observar, me~ unificar lo "teórico" y lo "práctico"
acentuando la brecha entre teo~ dir y analizar los datos del grupo. bajo la. noción de código -códigos
ría. y práctica: . y las dos disciplinas proveen una lingüísticos y códigos pragmáticos-,
visión de conjunto, la psicología se asume que estas dos series de
Ellas han legitimado una di~ de la población o de las masas, códigos no se superponen ni ex~
visión de los problemas teó- que, para el caso de los escolares, presan directamente el uno al otro.
ricos y críticos en torno a la termina siendo algo como una Se problematizan, entonces, tanto
. escuela, así: afuera de la paidometría, una ciencia de la las epistemologías racionales coma
escuela se teoriza e con- medición de la infancia. La peda~ las experimentales, que nunca du~
ceptualiza sobre educación: gogía como ciencia general retro- daron de que la comunicación en-
filosofía de la educación, so- cede "obsoleta" ante la dis'persión tre teoría y práctica, ya fuera como
ciología de la educación, psi~ de didácticas específicas de las representación-aplicación, ya como
cología de la educación, etc. ciencias particulares. síntesis conceptual-acción adaptativa,
Adentro de la escuela, en la era transparente y directa. A con~
didáctica o en la tecnología trapelo, el problema que estas epis-
educativa, parece resumirsé la Pedagogía, temologías hacen emerger es el de
vida cotidiana de la escuela. conocimiento i saber cómo cada serie puede tra-
Ellas regulan los procedi- experiencia en la ducir a la otra: ¿Cómo s~ hace lo
mientos de enseñanza, iínico pedagogía que se. dice, cómo se dice lo que
espacio que le reconocen las' Ucontemporánea" o se hace? ¿Cuáles son los efectos de
Ciencias de la Educación a la comunicativa interferencia, distorsión, "ruido" o
Pedagogía-. Los procedimien- incomunicación que afectan o de-
tos de enseñanza son los úni- Con este rótulo genérico ca- terminan las conexiones entre los
. cos elementos o segmentQS . racterizo, de modo tentativo, a ese distintos tipos de códigos teóricos
de saber que puede usar el conjunto diverso y disperso de pe~ y prácticos?

106.NÓMADAS No. 25. OcruBRE 2006. UNIVERSIDADCENTRAL- CoLOMBIA


La relación teoría-práctica es medie entre la ciencia y las cultu- riencia: alcanzar la ciencia es alcan-
acá, por definición, por su estruc- ra~, y la relación pedagógica, el zar la cultura. Sin embargo, hoy ~n
turación epistemológica y política, "amor pedagógico", se mide ahora día, la "ciencia" y la "cultura" se han
una relación conflictiva y tensional. por la capacidad de mediación y tra- vuelto dos campos inconmensura-
La vida escolar ya no aparece trans- ducción jntercultural que el maes- bles de producción de verdad: como
parente y natural por sí misma: ya tro pueda desplegar. Si se exige que nunca ocurrió antes en las socieda-
la teoría no da cuenta de todo lo en la escuela, los individuos -como des modernas, la verdad de las cien-
que pasa en las prácticas, y éstas des- sujetos culturalmente situados- de- cias ya no coincide con, ni tiene
bordan toda intención teórica y ben ser respetados e incluidos a par- hegemonía sobre, la(s) verdad(es)
toda voluntad consciente. Si algu- tir de su "subjetividad" individual y de la(s) cultura(s}: como en tiem-
na vez albergamos la sospecha de comunitaria, por otra: parte, las prác- pos de los griegos y los medievales,
que la teoría no 10 sabía todo y de ticas de las ciencias racionales y conocimiento y experiencia se han
que la práctica no alcanzaba a con- experimentales -universalismo, 10- vuelto a separar: el sujeto trascen-
trolado todo, estos dental único y univer;
nuevos saberes nos las r _m",-"
'" sal de la experiencia
han convertido en do- "" cartesiana y kantiana
lorosa certeza: la ex- contempla, mudo e im-
periencia ya no es potente, cómo se le re-
aplicación de verdades bela y se le escapa el
sujeto múltiple, locali-
ni experimentación de
hipótesis, ahora
- . se si- ~
I

í
zado y. singular de las
1 d
tua en a tIerra e na- f culturas: niños, negros,
die que media entre! mujeres, gays, migran-
teorías y prácticas. Por tes y desplazados, suje-
eso, la problemati- tos subalternizados que
zación actual nace del empiezan a construir
deseo, no siempre cla- nuevas .epistemologías,
ramente expresado o a validar las de sus
Convento de San Francisco (detalle), Cartagena, Juan Trucco, 1920. BPPM.
por todos los actores ancestros.
del acto pedagógico,
. de hallar la (o alguna) forma de co- gocentrismo y j erarquización- no
municación entre las múltipks prác- han cambiado sustancialmente, y Contraepígrafe
ticas y las complejas teorías; pero acá 'siguen pidiéndole al maestro que
el prQblema del conocimiento ya no continúe ejerciendo las figuras se- A despecho de todo ello, como
es el de la verdad o el de la adapta- culares del "guía racional" y del lo señala el epígrafe de Serres, no
ción, sino el del sentido. "observador científico", pero, ade- se trata más de oponer 10 universal
más, que sea agente de integración como "fuerza imperial" contra 10
y las claves para abordado se de las "subculturas juveniles" -pan- singular, ni de atrincherarse en 10
buscan a partir de la multiforme d~llas, drogadicción, maternidades singular como el refugio de un re-
noción de cultura o mejor, de cul- precoces, violencia intrafamiliar, , ,- sistencia que se bastaría a sí mis-
turas, en plural y en sentido. antro- función para la cual ni la escuela ni ma. Se abre la oportunidad de
po lógico. Entonces, los símbolos, el maestro estaban en absoluto pre- pensar la pedagogía, ya no como
los valores, las identidades y las parados. Es una fractura histórica en ciencia ni como .técnica, sino comó
afectividades -como figuras de una las funciones clásicas y modernas de saber, esto es, como un tercer es-
alteridad que debe ser incluida- la escuela, pues la escuela "clásica" pacio no preformateado para los
I pasan al centro de la escena como y la "moderna", a pesar de sus dife- lenguajes de la(s) experiencia(s),
\
I condición de posibilidad de los co- rencias, comparten una misma for- universo tercero donde luz y tinie-
!I nocimientos y los aprendizajes. Se ma básica de regulación entre bla no se oponen como el conoci- ~

pretende "abrir" la escuela para que pedagogía, conocimiento y expe- miento a la ignorancia, sino que se

SALDARRIAGA VÉLEz, O.: PEDAGOGÍA, CONOCIMIENTO Y EXPERIENCIA: NOTAS ARQUEOLÓGICAS SOBRE UNA SUBALTERNIZACIÓN NÓMADAS 11 107
complementan como la ciencia y SÁENZ, Javier, Óscar Saldarriaga y Arman-
Cita do Ospina, 1997, Mirar la infancia.Pe-
la misericordia (Serres, 1991). Al dagogía,moral y modernidaden Colom-
saber pedagógico le toca recoger la bia, 1903-1946, Medellín, Colciencias/
Una versión de estas matrices, en fun- Universidad de Antioquia/UniAndes/
antorcha de la experiencia, allí don- ción de caracterizar las relaciones maes- Foro Nacional por Colombia.
de la escuela nos Ja dejó atada a la tro-alumno, ha sido publicada como:
SALDARRIAGA, Óscar, 2006, "Del amor
ciencia. La pedagogía puede hoy "Del amor pedagógico y otros demonios",
en Saldarriaga (2006). pedagógico y otros demonios", en: G.
dejar de ser subalterna de las for- Frigerioy G. Diker (Editoras),Educar:
mas de la ciencia y la tecnología, y efectosy figurasde!amor,Buenos Aires,
retomar de su tradición fundadora Ediciones del Estante.

lo que la unía al arte y a la arte- Bibliografía , 2003, De! oficio demaestro. Prác-
ticas y teoríasde la pedagogíamoderna en
sanía. Gracias a ello, existe la po- Co1ombia,Bogotá, Magisterio-Grupo de
sibilidad de que la "escuela de las AGAMBEN, Giorgio, 2004, Infancia e Histo- Historia de la Práctica Pedagógica.
ria. Destrucción ae la experiencia y origen
ciencias", al abrirse a "las culturas", SERRES, Michel, 1991, Le Tiers-instruit,
de la historia, Buenos Aires, Adriana Hi-
pueda liberarse de las tiranías teo- dalgo. París, F. Bourin.
ría-práctica, conocimiento-represen- BERNARD, Claude, 1966 [1865], Intro- ZULUAGA, OIga Lucía, 1987, Pedagogía e
tación y ciencia-experiencia. Ello duction a l'étude de la médecine expéri- Historia, Bogotá, Foro N acional por Co-
mentale, París, Belfond. lombia.
empieza por absolver la culpa-
bilización epistemológica que la FOUCAULT, M., 1966, Les mots et les choses, ZULUAGA, OIga, Alberto Echeverri, Alber-
ciencia ha acumulado sobre las es- París, Gallimard. to Martínez, Humberto Quiceno, Javier
Sáenz y Alejandro Álvarez, 2003, Peda-
q;jaldas de los maestros, dejando LARROSA, Jorge, 2004, La experiencia de la gogía y epistemología,Bogotá, Magiste-
hablar las culturas de los propios lectura. Estudios sobre'literaturay formación, rio.
'México, Fondo de Cultura Económica.
"profes", que habían sido expulsa- ZULUAGA, OIga, Alberto Echeverri, Alber-
das de la escuela con tanto o ma- RESTREPO MEJÍA, Luis y Martín Restrepo to Martínez, Humberto Quiceno,Javier
Mejía, 1911 [1905], Elementos de Peda- Sáeni, Alejandro Álvarez y Óscar
yor minucia que las de sus propios gogía. Obra adoptada como texto para las Saldarriaga, 2005, Foucault, la Educación
estudiantes. ¡Una mañana de es- escuelas normales de Colombia y recomen- y la Pedagogía. Pensar de otro modo, Bo-
tas, la pedagogía podrá incendiar dada para la enseñanza de la materia en e! gotá, Magisterio.
Ecuador, (con aprobación eclesiástica),
la escuela para que pase por ella 4" ed., Bogotá, Imprenta Moderna, 2
la experiencia! vols.

108 NÓMADAS No. 25. OcruBRE 2006. UNNE~SIDAD CENTRAL - COLOMBIA

-----.-
0 r1AD~-~
Conocimiento
"..- y experlenda de sí
~
~

-=-
~

~
. N ÓMAD~S

es el espacio de difusión y
~ ~~
NÓMA))AS -' Ño. 25 debate de los avances de las
Octubre/2006
- . I distintas líneas de investigación
Vicerrector administrativo
NelsonJ§'inecco ,iglesias - ~
en Ciencias Sociales que vienen
consolidándose en el Instituto de
Directora de IES<i50-UC y Revista;sNóma~
Estudios Sociales Contemporá-
Maríá Cristina Laveiae Tosc<y.1o ~
neos de la Universidad Central,
Subdirector IESCO-UC'
Bumberro J. Cubldes C. IESCO-UC; Violencia y
socialización; Jóvenes y culturas
'" Coordinad~ Adillinistrativo.
Víctor Manuel Moreno '" juveniles; Género y cultura;
~ Conocimientos e identidades
culturales, y Comunicación-
orial tema mon<Fgráfico ~ Educación.
Zuleta,.y Aleja.11droSán!Jtez
Comité Editorial .
Su objetivo, en primera
MaMleine AJihgue,Manuel Alberto Algnso, Ana
Ma~~aArangó, Silvia~orelli, ,SantiagO' Castro G;, instancia, busca delinear
Maftuel Rob~rro Escg,bar. Uri~l Espitia v., Rubén
Fernández. Lya Yane~ Fuentes. Stefania GalliJ1i, algunos de los principales
Carl Langebaek, Gabdel ReslI..,po F., Rocío Rueda debates alrededor de la
Ortiz, Alejandro Sánchez, José Luis.Villaveces
generación del conocimiento
Co en temas prioritarios para
Latinoamérica, así como
DOéninentacTon gráfica y dis~ño establecer vínculos entre los
Samiagb Mutis Durán ~

desarrollos específicos de estas


temáticas en la Región y las
Propietaí'Íos parata Edición en Argentina~ discusiones y propuestas
FtmdacióIl Universidad Cemral y Consejo
Latínoamericano de Ciencias~Sociales,. CLACSO
provenientes de otras partes
Dirección Nacional del Derecho de Autor: del mundo. En segunda
.. .'.' Expedien~e No. 407.927 instancia, quiere promover
Impresión¡¡~n Buenos Aires preguntas de investigación
@ráficas y"$erviciOs S.R.L~
Santa María del Buen Aire 347 Oi277) alrededor de problemas
'Buenos ~1fes. Argentina' sociales contemporáneos
'Distrib n Coño Sur ~ desde una postura crítica
no de~ Ciencfu.s Sociales, mediante la cual se asocie el
CTsejo ~¡ttinoame 'ACSO
Callao 875, 42 Piso. Dro. @ - e I saber con los sistemas
~ Tel: 54;;'11-481"42301
- valorativos de los que se
,Buenos ,t.ires. Argentina
Canje y Suscripciollf ~ desprende. Por último,
Instituto de Estudios Soci
Universidad Centra pretende fomentar vínculos
Carrera 15 No. 7: ~

I novedoso s entre el conoci-


Bogotá, D.C. d
PBX: 3266820 Ext. ~~ I miento y la sociedad.
--
E-mall: nomadas@ucentral.
~
www.ucentral.edu.co
Precio del ejemplar: Colombia $ *
Cada autor es responsable
de su propio texto.
Los artículos de esta revista
En =-" 3e requerir copia de algún artí, I podrán ser reproducidos
nomadas@ucentral.edu. únicamente con fines educatívos
Universidad I siempre y cuando se cite la
fuente correspondiente.

.C".:~.'::'.Je'",3" en el Índice Nacional de Publicaciones Científicas y Tecnológicas de Colciencias


CONTENIDO
EDITORIAL .................................................................................................................. 4

CONOCIMIENTO Y EXPERIENCIA DE SÍ
1. Filosofía y política
Biopolítica y contra-nihilismo
Peter Pál Pelbart ........................................ 8
Multiplicidad, totalidad y política
MaurizioLazzarato. ...... ... ... ... .................... 20
¿Sepuedepensar la violencia?Notas sobreBadiouy la posibilidadde lapolítica (marxista)
AlbertoToscano"""""""""""""""""""""""""""""""""""""...................................... 30
Del final del sistema-mundo capitalista hacia un nuevo sistema-histórico alternativo:
la utopística de Immanuel Wallerstein
Ramón Grosfoguel.. ... ....... 44
2. Ciencia y genealogía
La violencia en Colombia: avatares de la construcción de un objeto de estudio
Mónica Zuleta P. .............................................................. 54
1607. Una hipótesis sobre la formación de Estado en los Andes colombianos
Adolfo ChaparroAmaya ,........................................................ 70
Conocimiento indígena y poder global: leccione~de los debates africanos
Raewyn Connell ............................................................................................................... 86
Pedagogía, conocimiento y experiencia: notas arqueológicas sobre una subalternización
ÓscarSaldarriaga Vélez .............. 98
3. Ciencia y crítica
Las víctimas en la socialización
GiselaDaza Navarrete ... ,.................................... 110
Tipos de conocimiento y experiencias de la política: el sujeto político invocado por las Farc
Ingrid Bolívar .................................................................................................................... 118
El buen ciudadano: conocimiento social y saberes expenos en la convivencia urbana
JoséHleap B. .................................................................................................................... 134
Historias transnacionales: nuevas interpretaciones de los enclaves
en América Latina
Catherine LeGrand ........................................................................................................... 144
4. Arte y política
Resistiendo el presente: Félix Guattari, arte conceptual y producción social
StephenZepke ................................. 156
Estrategias de reescritura en la revista Casa de Las Américas (1989- 1999)
Nadia Lie .......................................................................................................................... 168
Capitalismo, esquizofrenia y consenso de la estética relacional
Eric Alliez ..... ... .............................. 178
La construcción del nexo de violencia y culpa en la novela
La virgende los sicarios
Hermann Herlinghaus...................................................................................................... 184

PROCESOS DE CREACIÓN
Entorno de la creación: la pintura de Diego Arango Ruiz
Clemencia Arango ............................................................................................................ 208
Eva Giberti: trayectoria institucional, científica y cívica
EvaGiberti,Vita Escardó,HernánInvemizzi,DianaMaffia, DavidMaldavsky............... 222

NUEVOS NÓMADAS
Ciencia, revolución y creencia en Camilo Torres: ¿una Colombia secular?
AlejandroSánchez Lopera ........ 241
Oligarquía capitalista, régimen de acumulación y crisispolítica en Bolivia
LorgioOrellanaAillón ......................................................................................................261

RESEÑAS
Diego Arango Ruiz: Masacre en
Proyectos en curso ..."... 276 La Gabarra (detalle), técnica mixta,
Libros ".. 284 2006

NÓMADAS. :3

También podría gustarte