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GESTIÓN DE
CALIDAD
CHARLA DE
5 MINUTOS
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La calidad garantiza la fidelidad de los clientes.
Como personal que trabaja en una empresa que produce bienes y servicios, es difícil no haber
escuchado las palabras Sistema de Gestión de la Calidad [SGC]. Quizá las hemos escuchado en
nuestro superior inmediato o nuestro gerente para explicar cómo las actividades que hacemos
están enfocadas en el absoluto máximo de la empresa; la calidad en nuestro producto, o más
precisamente, la satisfacción del cliente.
Todos los días nacen nuevos competidores y los clientes son más exigentes y menos leales por lo
que la empresa siempre está buscando colocarse en una posición competitiva para mantenerse
rentable y, en efecto, lo hace a través del SGC para lograr satisfacer las necesidades de los clientes
y que no se vayan. Todos somos parte del SGC, y nos corresponde cumplir un rol como personal
de producción, por tal razón lo menos que debemos saber es: qué es, para qué sirve y cómo
participamos en el SGC.
Son todas las actividades coordinadas que permiten planear, controlar y mejorar los procesos
de la empresa que influyen en la calidad del producto y la satisfacción del cliente, además del
logro de los resultados deseados por la empresa. Este sistema incluye políticas de calidad,
objetivos, planificación, el control y la búsqueda de una mejora continua de la calidad.
¿Para qué nos sirve Sistema de Gestión de Calidad?
Ayuda a hacer las cosas bien y a la primera. Sirve para organizar los procesos internos, y nos
ayuda a prevenir riesgos de fabricación para asegurar la calidad de los productos. De igual
forma, ayuda a mejorar la comunicación interna y externa y a reducir la improvisación dentro
de los procesos productivos ya que no sólo permite planificarlos, sino que también establece
los mecanismos necesarios para el seguimiento, evaluación y optimización de los mismos.
Como equipo de producción nuestro trabajo es cumplir y hacer cumplir con los procedi-
mientos de fabricación para elaborar productos de la más alta calidad que satisfagan las
necesidades de nuestros clientes para que la empresa se mantenga rentable.
Entre nuestras actividades principales se encuentran las siguientes:
1. Cumplimiento con los procedimientos de fabricación.
2. Seguimiento paso a paso de los Instructivos de trabajo.
3. Llevar un correcto control de documentos.
4. Asegurar el llenado de formularios y registros.
5. Respetar los controles operacionales.
Cualquier incumplimiento pone en riesgo la calidad de nuestro producto y/o servicio.
Como nota adicional, debemos saber que cumplir con apenas los requerimientos de nuestros
clientes jamás será suficiente, tenemos que elevar el nivel de confianza y superar sus
expectativas, eso se logra con la mejora continua de nuestros procesos. En esta etapa no solo
nos convertimos en ejecutores del SGC, sino que además tenemos la oportunidad de proponer
iniciativas que puedan facilitar nuestro trabajo, reducir costos o elevar la calidad de nuestro
producto. La búsqueda de estas iniciativas también es tarea nuestra.
Cumplir con el SGC tiene innumerables beneficios. En seguida, se enlistan los más importantes:
Permite controlar
El SGC permite el control del desempeño de los procesos y de la organización en
sí misma.