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Sánchez Martínez Ricardo Daniel 2°AM 21/02/2022

Desarrollo de conductas de autocuidado


Como su nombre lo indica el autocuidado es colocarse como centro de prioridad y reducir los
estilos/actividades de vida desfavorables entorno a lo que se desea modificar, retrasando
enfermedades o riesgos, asumiendo siempre una perspectiva de autocontrol, refuerzo y apoyo
social.
La modificación y aparición de hábitos en situaciones de riesgo reversibles son esenciales para
generar nuevas expectativas que no requieran de un esfuerzo físico-mental.

Para lograrse se necesita de reestructurar: creencias, expectativas, motivaciones, valores, percepciones y otros
elementos cognitivos.

De preferencia se actúa con un periodo a prevenir de superior a un año, antes de iniciar


tratamiento farmacológico.

Promover el cambio de conducta a través de las campañas de información implica al menos cinco
procesos diferentes. En primer lugar, es necesario que a través de la campaña se consiga captar
la atención de la audiencia. Esto, obviamente, no resulta nada fácil si tenemos en cuenta la
enorme cantidad de información que a diario transmiten los medios de comunicación. Una vez que
la persona ha recibido el mensaje, el siguiente paso es el de la comprensión. Esto significa que
para que el mensaje sea efectivo, se debe presentar en unos términos comprensibles para la
audiencia a la que se dirige.
Asumiendo que el mensaje es comprendido, el tercer paso del proceso de persuasión es la
aceptación de las propuestas que se plantean. Finalmente, para que el mensaje tenga un efecto
a largo plazo se debe conseguir su retención y la acción a través de la cual las personas se
implican en cambios hacia conductas más saludables.

Hábitos factibles para la mejoría:

Disminución del peso- (DASH) prevención e intervención.


Se han desarrollado bastantes programas para tratar el sobrepeso; sin embargo, sigue siendo un
problema frecuente la adhesión a los programas para tratar esta situación.

1.- Consumirá muchas verduras, frutas y productos lácteos sin grasa o bajos en grasa
2.- Incluirá granos enteros, legumbres, semillas, nueces y aceites vegetales
3.- Comerá pescado, aves y carnes magras
4.- Reducirá la sal, las carnes rojas, los dulces y las bebidas azucaradas
5.- Reducirá las bebidas alcohólicas

Ajustes nutricionales.
Es muy importante la reducción del consumo de sodio, el incremento del consumo de
potasio y la disminución del consumo de alcohol.

Ejercicio físico.
Son actividades de carácter aeróbico que por sí solas no producen una mejoría notoria
contra la hipertensión. Se debe hacer un ejercicio implementado a una dieta funcional.
(Caminar, trotar, correr, realizar danza aeróbica, andar en bicicleta, nadar, salir de excursión)

Consumo de cigarrillo. Suprimirlo.

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