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5 Teoria del Delito y Delito

Concepto y Funciones de la Teoría del Delito y Delito


Como ya se ha visto anteriormente, ni el Código Penal Argentino, ni las leyes ofrecen una
definición de delito, debido a que el codificador se limitó a utilizar una fórmula que contiene
una CONDUCTA TÍPICA y SU CONSECUENCIA.

Por ello fue necesario construir en base muchos años de historia, por medio de la
doctrina y la jurisprudencia, una TEORÍA DEL DELITO, cuyo objeto es establecer reglas
generales que permitan “(…) imputar cualquier hecho punible a determinadas personas a las
que se atribuye responsabilidad en su comisión. De lo que se trata, en consecuencia, es de
presentar aquellas exigencias que en todos los casos deben cumplirse para que una
determinada acción sea punible(…)”.

ncepto de Delito
Es una acción típica, antijuridica y culpable. Este concepto toma en cuenta primero a la
conducta (que sea típica y antijurídica) y luego a su autor (que sea reprochable su proceder).
Delito y hecho punible son sinónimos.

Acción, Tipicidad, Antijuridicidad y Culpabilidad:

De esta manera, para que una acción humana pueda considerarse delito, debe trasponer
todos los niveles de la estructura delictual, a saber: tipicidad, antijuridicidad, culpabilidad y
punibilidad.

Definiremos, en los apartados que siguen, cada uno de esos niveles en forma acotada, ya
que ellos serán analizados extensamente más adelante.

ACCIÓN: Hecho humano voluntario que produce una alteración en el mundo exterior.

TIPICIDAD: Se describen los elementos que un hecho o comportamiento deben


realizar para considerarse prohibido y, consecuentemente, típicamente adecuado, esto es,
el Código Penal (y las leyes penales especiales) contiene prescripciones referidas a normas
de compor tamientos, prohibiciones y mandatos que ponen límites a la libertad de los
individuos. Esas prohibiciones y mandatos se describen en el Código Penal de manera
indirecta, mediante la especificación de la acción que los transgrede. Ejemplo: Juan realiza
una conducta que presenta las características del tipo de hurto, es decir se apoderó
ilegítimamente de la billetera de B.
ANTIJURIDICIDAD: Se analiza los presupuestos de la exclusión de lo ilícito, esto es,
las llamadas causas de justificación. Si bien a primera vista podría resultar difícil de concebir
que al examinar la antijuridicidad tratemos el tema de su eliminación, debe tenerse
conciencia de que ya en la tipicidad, donde se abarcan todas las circunstancias
fundamentadoras de lo ilícito, se trata la antijuridicidad, es decir, aquellos elementos que
caracterizan un comportamiento como contrario a una norma penalmente protegida
(antijurídica), mientras no exista un permiso especial (causas de justificación), y este será el
campo específico de la antijuridicidad. Cuando en el análisis de los niveles de la estructura
delictual se ha verificado la existencia de un comportamiento adecuado típicamente y la
existencia de causas que lo justifiquen, entonces podemos decir que existe un injusto penal.

Culpabilidad

Sin embargo, ese injusto penal, por sí solo, no justifica la aplicación de un correctivo
penal. Debe continuar el análisis de los niveles de la estructura del delito con el llamado
reproche personal, esto es, la responsabilidad del autor.

Este nivel, donde se decide sobre la existencia de otros presupuestos o elementos, se


conoce como culpabilidad. En la culpabilidad se explora la posibilidad del autor de conocer la
exigencia del deber y de comportarse de acuerdo con ella. Los requisitos que pertenecen a
la culpabilidad son tres: el autor debe haber sido capaz, en el momento del hecho, de
comprender la antijuridicidad de su comportamiento y de regirlos por las normas jurídicas.

De conformidad con lo señalado hasta aquí, solo configura delito la acción humana que
contenga los elementos descriptos en una figura penal, que el Derecho en su universalidad,
no encuentre justificada, que haya sido cometida culpablemente, y cuya necesidad de
sanción aparezca ineludiblemente justificable por razones de política criminal.

Delito Doloso de Accion o Comision

Introducción: Como contrapartida, tal cual lo expresáramos anteriormente iniciaremos


el tratamiento del tema de la primera, y tal vez, más importante, de las figuras básicas del
hecho punible; el delito doloso de acción, siguiendo la gradación pertinente, según los
niveles de la estructura del delito.
No obstante lo expuesto debe hacerse previamente una puntualización .Los hechos
pueden ser causados por la naturaleza o por el hombre, estos últimos pueden ser voluntarios
o involuntarios, según quiera su autor cometerlos o no.
Cuando este hecho humano es voluntario y produce una alteración en el mundo exterior,
se dice que es una conducta o acción (luego veremos el concepto diferente de causalistas y
finalistas)

Ejemplos:

Acción de hurtar ― el que se apoderare ilegítimamente de una


cosa….ajena; Acción de omitir prestar auxilio a ciertas personas.

Cuando no existe voluntad del autor de realizar el hecho, no hay acción o conducta.

Por ser un derecho penal de acción, y no de autor, es decir, que los sujetos son penados
por lo que hacen y no por lo que son, aquella es lo primero que se analiza, y si falta no
habrá delito ( no hay delito sin acción).
Los Tipos Y La Conducta

Los tipos dolosos prohíben conductas cuya finalidad es causar el fin típico.
Los tipos culposos prohíben conductas cuya selección para llegar a un fin típico, es
defectuosa, causando un resultado típico.
Los tipos activos describen la conducta prohibida.
Los tipos omisivos describen la conducta debida (es decir que toda otra conducta que
no sea esa, estará prohibida).

Teoría causalista:

Para los causalistas la acción o conducta es el movimiento corporal que depende de la


voluntad, es decir que no es reflejo y que produce un cambio en el mundo exterior
(resultado).

De esta forma, si la persona realizó, ese movimiento voluntariamente causando un


resultado, no importa la finalidad que tuvo al hacerlo, con causar el resultado
voluntariamente alcanza para que exista acción o conducta.

Teoría finalista:

Para los finalistas la acción o conducta es el ejercicio de una actividad final.

Ellos consideran que el autor del movimiento corporal voluntario, lo realiza con un fin,
siempre dirige ese movimiento para obtener una determinada finalidad.

Vemos que para el finalismo, la voluntad de realizar el movimiento corporal (que produce
el resultado) tiene un contenido es la finalidad que tuvo su autor al realizar dicho movimiento.
Si la finalidad coincide con el resultado causado por el movimiento, habrá conducta o
acción.

Por supuesto que ese comportamiento debe ser considerado como pre jurídico, ya que no
puede concebirse que él sea el producto de lo que describen los tipos penales.

El derecho penal no ―crea la conducta, sino que observa la realidad, examina el carácter
disvalioso de algunas conductas y las admite como punibles, naciendo así los tipos penales.

Como síntesis de ello, podemos definir a la acción como ―un comportamiento exterior
evitable, implicando esa evitabilidad el contenido finalista de la conducta.

Como contraposición a la acción aparece, legislativa y doctrinariamente, la ausencia de


acción, agrupándose las causales de la siguiente forma:

Casos de Falta de Conducta o Accion por Ausencia de la


Voluntad:

No hay conducta cuando el autor no pudo comprender la criminalidad del acto, o cuando
no pudo dirigir sus acciones (es decir, que actuó involuntariamente), porque obró (art. 34
CP):

1. En estado de inconsciencia absoluta (inc.1).


2. Bajo una fuerza física irresistible (inc2)
3. Por un acto reflejo.

Estado de inconsciencia: Es una especial situación de la razón, la cual se ve


temporalmente afectada por una causa de origen patológico o fisiológico que provoca una
perturbación en el discernimiento (sueño fisiológico, hipnosis, estados de coma, etc.).

Si no es total y absoluta se considera que hay consciencia y por lo tanto, hay conducta,
aunque pueda llegar a existir causas de inculpabilidad.

Fuerza física e irresistible: Fuerza que ha de provenir del exterior y hacer efecto en el
autor, de manera tal que este no ha tenido opción de rechazo. Más precisamente, son los
casos en los que el cuerpo humano no es dirigido psíquicamente por el propio hombre,
conforme a los contenidos de su voluntad, sino que el cuerpo se comporta como un mero
objeto material, sujeto a las leyes naturales, por efecto de fuerzas materiales superiores a su
propia eventualidad.

Ejemplos:
Pedro empuja a Juan y este rompe una mesa.

Un viento huracanado empuja a B y este rompe una vidriera; etc.

Movimientos corporales reflejos: Son actos que no están bajo el control de la voluntad
del sujeto, incontrolable, consecuencias de reacciones biológicas del mismo, con ausencia
de participación cerebral. Al no ser ordenado el acto por el cerebro, no hay un mínimo de
voluntad y por lo tanto no hay conducta.

Ejemplos:
El epiléptico que con sus convulsiones causa destrozos, el individuo que se
desmaya y al caer rompe un objeto.

Tanto en el acto reflejo, como en el estado de inconsciencia absoluta, como en la fuerza


física irresistible, el autor no realizo movimientos corporales voluntarios.

Finalizado este análisis según lo explicado anteriormente, seguiremos a continuación con


el tratamiento de los niveles de la estructura del hecho punible.

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