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Por ello fue necesario construir en base muchos años de historia, por medio de la
doctrina y la jurisprudencia, una TEORÍA DEL DELITO, cuyo objeto es establecer reglas
generales que permitan “(…) imputar cualquier hecho punible a determinadas personas a las
que se atribuye responsabilidad en su comisión. De lo que se trata, en consecuencia, es de
presentar aquellas exigencias que en todos los casos deben cumplirse para que una
determinada acción sea punible(…)”.
ncepto de Delito
Es una acción típica, antijuridica y culpable. Este concepto toma en cuenta primero a la
conducta (que sea típica y antijurídica) y luego a su autor (que sea reprochable su proceder).
Delito y hecho punible son sinónimos.
De esta manera, para que una acción humana pueda considerarse delito, debe trasponer
todos los niveles de la estructura delictual, a saber: tipicidad, antijuridicidad, culpabilidad y
punibilidad.
Definiremos, en los apartados que siguen, cada uno de esos niveles en forma acotada, ya
que ellos serán analizados extensamente más adelante.
ACCIÓN: Hecho humano voluntario que produce una alteración en el mundo exterior.
Culpabilidad
Sin embargo, ese injusto penal, por sí solo, no justifica la aplicación de un correctivo
penal. Debe continuar el análisis de los niveles de la estructura del delito con el llamado
reproche personal, esto es, la responsabilidad del autor.
De conformidad con lo señalado hasta aquí, solo configura delito la acción humana que
contenga los elementos descriptos en una figura penal, que el Derecho en su universalidad,
no encuentre justificada, que haya sido cometida culpablemente, y cuya necesidad de
sanción aparezca ineludiblemente justificable por razones de política criminal.
Ejemplos:
Cuando no existe voluntad del autor de realizar el hecho, no hay acción o conducta.
Por ser un derecho penal de acción, y no de autor, es decir, que los sujetos son penados
por lo que hacen y no por lo que son, aquella es lo primero que se analiza, y si falta no
habrá delito ( no hay delito sin acción).
Los Tipos Y La Conducta
Los tipos dolosos prohíben conductas cuya finalidad es causar el fin típico.
Los tipos culposos prohíben conductas cuya selección para llegar a un fin típico, es
defectuosa, causando un resultado típico.
Los tipos activos describen la conducta prohibida.
Los tipos omisivos describen la conducta debida (es decir que toda otra conducta que
no sea esa, estará prohibida).
Teoría causalista:
Teoría finalista:
Ellos consideran que el autor del movimiento corporal voluntario, lo realiza con un fin,
siempre dirige ese movimiento para obtener una determinada finalidad.
Vemos que para el finalismo, la voluntad de realizar el movimiento corporal (que produce
el resultado) tiene un contenido es la finalidad que tuvo su autor al realizar dicho movimiento.
Si la finalidad coincide con el resultado causado por el movimiento, habrá conducta o
acción.
Por supuesto que ese comportamiento debe ser considerado como pre jurídico, ya que no
puede concebirse que él sea el producto de lo que describen los tipos penales.
El derecho penal no ―crea la conducta, sino que observa la realidad, examina el carácter
disvalioso de algunas conductas y las admite como punibles, naciendo así los tipos penales.
Como síntesis de ello, podemos definir a la acción como ―un comportamiento exterior
evitable, implicando esa evitabilidad el contenido finalista de la conducta.
No hay conducta cuando el autor no pudo comprender la criminalidad del acto, o cuando
no pudo dirigir sus acciones (es decir, que actuó involuntariamente), porque obró (art. 34
CP):
Si no es total y absoluta se considera que hay consciencia y por lo tanto, hay conducta,
aunque pueda llegar a existir causas de inculpabilidad.
Fuerza física e irresistible: Fuerza que ha de provenir del exterior y hacer efecto en el
autor, de manera tal que este no ha tenido opción de rechazo. Más precisamente, son los
casos en los que el cuerpo humano no es dirigido psíquicamente por el propio hombre,
conforme a los contenidos de su voluntad, sino que el cuerpo se comporta como un mero
objeto material, sujeto a las leyes naturales, por efecto de fuerzas materiales superiores a su
propia eventualidad.
Ejemplos:
Pedro empuja a Juan y este rompe una mesa.
Movimientos corporales reflejos: Son actos que no están bajo el control de la voluntad
del sujeto, incontrolable, consecuencias de reacciones biológicas del mismo, con ausencia
de participación cerebral. Al no ser ordenado el acto por el cerebro, no hay un mínimo de
voluntad y por lo tanto no hay conducta.
Ejemplos:
El epiléptico que con sus convulsiones causa destrozos, el individuo que se
desmaya y al caer rompe un objeto.