Discapacidad auditiva

Definición
Trastornos o disminuciones en el funcionamiento auditivo así como dificultad para percibir el sonido,
especialmente la intensidad y el tono del mismo.

La discapacidad auditiva es algo más que la simple pérdida de audición (deficiencia auditiva), ya que en este último caso
la persona puede continuar una vida normal, mientras que la persona con discapacidad auditiva requiere ayuda para
comunicarse con los demás y su capacidad de aprendizaje lingüístico se ve afectada seriamente.

Las personas con esta discapacidad se distinguen entre:

● Hipoacúsicas: poseen una deficiencia parcial, es decir, que cuentan con un resto auditivo el cual puede
mejorar con el uso de audífonos. PÉRDIDA PARCIAL.
● Sordas: poseen una deficiencia total o profunda.
● Sordera: pérdida auditiva profunda que impide la percepción del lenguaje oral y de los sonidos del entorno, por lo
que las personas afectadas de sordera necesitan utilizar prótesis auditivas tales como los audífonos o implantes
cocleares para mejorar su capacidad auditiva.
● Cofosis o anacusia: pérdida total de audición.
Datos según la OMS (Organización Mundial de la Salud)
● El 50% de la pérdida de audición es prevenible. Un gran
número de personas afectadas por pérdida de la audición
puede mejorarla con medicamentos, cirugía y el uso de
audífonos y otros dispositivos.
● 466 millones de personas en todo el mundo padecen
pérdida de audición discapacitante.
● Se calcula que, en 2050, más de 900 millones de personas
—es decir, una de cada 10— sufrirá una pérdida de
audición discapacitante.
 Causas
La pérdida de audición puede deberse a:

1. Causas genéticas.
2. Complicaciones en el parto.
3. Algunas enfermedades infecciosas.
4. Infecciones crónicas del oído.
5. Empleo de determinados fármacos.
6. Exposición al ruido excesivo.
7. Envejecimiento.
 Consecuencias
1. Funcionales
2. Sociales y emocionales
3. Económicas
 Consecuencias funcionales
● Limitación de la capacidad de la persona para comunicarse
con los demás.
● En los niños con pérdida de audición desatendida, el desarrollo
del habla se suele retrasar.
● Efectos muy perjudiciales en el rendimiento escolar de los
niños.
 Consecuencias sociales y emocionales
Los problemas de comunicación pueden tener efectos importantes
en la vida cotidiana y generar sensación de soledad, aislamiento y
frustración, sobre todo en las personas mayores que padecen
pérdida de audición.
 Consecuencias económicas
● La OMS calcula que los casos desatendidos de pérdida de audición
representan un coste mundial anual de 750 000 millones de USD.
Sin incluir los costos de los dispositivos de ayuda a la audición.
● En los países en desarrollo, los niños con pérdida de audición y
sordera rara vez son escolarizados.
● Entre los adultos con pérdida de audición la tasa de desempleo es
mucho más alta. Una gran proporción de los que tienen empleo
ocupan puestos de categoría inferior en relación con la fuerza de
trabajo en general.
 Prevención
La mitad de los casos de pérdida de audición pueden prevenirse a
través de medidas de salud pública.

El 60% de los casos de pérdida de audición en niños se deben a

causas prevenibles.

Algunas estrategias de prevención sencillas de la pérdida de

audición incluyen:
● Vacunar a los niños contra las enfermedades de la infancia, en particular el
sarampión, la meningitis, la rubéola y la parotiditis;
● Prevenir las infecciones en mujeres embarazadas.
● Fortalecer los programas relativos a la salud materna e infantil, incluida la
promoción de los partos sin riesgos;
● Seguir unas prácticas correctas de atención otológica;
● Reducir la exposición a ruidos fuertes
● Evitar el uso de algunos medicamentos que puedan ser nocivos para la
audición
● Evaluación, diagnóstico y tratamiento precoz
● Informar a los jóvenes y al resto de la población sobre la pérdida de audición
y su etiología, prevención y detección.
 Detección y tratamiento

● Resulta FUNDAMENTAL la implementación de programas de detección

auditiva neonatal.
● La situación de las personas que padecen pérdida de audición mejora
gracias a la detección temprana, a la utilización de audífonos, implantes
cocleares y otros dispositivos de ayuda, así como con el empleo de
subtítulos, el aprendizaje del lenguaje de signos y otras medidas de apoyo
educativo y social.
● La logoterapia (terapia fonoaudiológica), la reeducación auditiva y otros
servicios conexos también pueden ser beneficiosos.
● Fomentar la creación de organizaciones de personas con pérdida de audición
y grupos de apoyo para padres y familiares y reforzar la legislación de
derechos humanos también pueden ser medidas favorables para una mayor
inclusión de las personas con pérdida de audición.