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poseen la libertad de pactar los intereses.lucrativos y los pun itorios, si ellos son pac- estas acciones se debe t ransformar en acción d e r eajuste si este es ofrecido por el
tados de modo tal que arrojan finalmente montos exorbitantes o excesivamente dema ndado al contestar la demanda (.. .)".
elevados - toma ndo como parámetro el capital que los produce-, pueden dar En cuant o al ti po de nulidad parci a l que acarrean los intereses abusivos, esti-
lugar a la configu ración de esta situación que calificamos usura. mamos que la nu lidad debería ser relativa (Llambías, Brebbia, Pizarra) y no absolu-
La doctrina es conteste que pa ra calificar a un interés como excesivo no debe ta (Alterini - Ameal - López Cabana), ya que debe posibilitarse la co nfirmación del
atenderse únicamente a la tasa aplicada, sino que se debe apreciar el monto tota l acto mediante el reajuste de los intereses a un a tasa equitativa, ya que la cont ra-
de la operación económica, dado que una tasa puede resultar excesiva en un vención a los arts. 279 y 958 del CCCN no estaría dado por.el pacto de intereses en
momento socioeconómico determinado y leg ítima y acorde en otro tiempo; ade- sí, sino únicamente por su exorb itancia. En razón de ell o, tratándose de u n caso de
más, antes de poder calificar a un interés como usurario deben analizarse también nul idad relativa, la nulidad no podrá ser declarada de oficio por el juez sino única-
otros aspectos en torno a ellos, tales como: si se tratan de intereses simples o com- mente a pedido de parte (art. 388, CCCff).
puestos, si so n o no capitalizables, etcétera. Por su parte, la ley 24.240 de Defensa del Consum idor determ ina que se tendrán
por no escritas todas aquellas cláusulas que, a través de la fijación de intereses exce-
sivos de cualquie r tipo "desnaturalicen las obligaciones" del consumidor(cfr. art. 37,
V.2 - Sanción civil aplicable frente a la usura.
inc. a). Este último, dado el caso, deberá demanda r la nulidad de la cláusula abusiva.
Su evolución en el derecho argentino

Sin perjuicio de destacar que la usu·ra es combatida en la mayoría de los orde- V.3 - Sanción p enal frente a Ja usura
namientos jurídicos del mundo, aunque con diferentes cónsecuencias, debemos
ana lizar qué respuesta brinda la leg islación argentina frente a los casos de usura. La usura constituye un delito pena l en nuestro pa ís, a l igua l que lo q ue ocurre
El derogado Código Civil de Vélez Sarsfield, con ¡:interioridad a la refo rma intro- en otros países de l mundo como Bélgica, España e Inglaterra. Al res pecto, d ispone
ducida por la ley 17.711, aplicaba a los intereses usurarios las disposiciones de los el art. 175 bis del CP: " El que, aprovechando la necesidad, la ligereza o la inexpe-
arts. 502 y 953 del CC referidos a la ca usa fin y al objeto de los actos jurídicos, res- riencia de una persona le hiciere dar o prometer, en cualquier forma, para sí o para
pectivamente, decretando la nulidad del acto celebrado: sin embargo, era una otro, intereses u otras ventajas pecuniarias evidentemente desproporcionadas con
· nulidad parcial, ya que se permitía que los intereses se adecuaran a una tasa que se su prestación, u otorgar recaudos o garantías de carácterextorsivo, será reprimido
condijera con los límites de la moral y las buenas costumbres para que el negocio con prisión de uno a tres años y con multa de pesos tres mil a pesos treinta mil.
pudiera recobrar sµ validez. Con posterioridad a la ley 17.711 , el derogado CC apli- La misma pena será aplicable al q ue a sabiendas adquiriere, t ransfiriere o hicie-
caba a los casos de usura el vicio de lesión subjetiva consagrado en el art. 954del CC. re valer un crédito usurario.
Una calificada doctrina nacional sostenía que una vez probada la evidente despro- La pena de prisión será de tres a seis años, y la multa de pesos q uince mil a p esos
porción (element o objetivo de la lesión), ello hacía presumir el aprovechamiento ciento cincuenta mil, si el autor fuere prestamista o comisionista usurario profe-
(el emento subjetivo): quedapa pues por probar, por quien la invoca, la necesidad, sional o habitual".
ligereza o inexperie ncia (Moissetde Espanés).
Estimamos que, luego de la sanción y entrada en vigencia del Código Civil y VI - A na tocismo
Comercial en nuestro país, debe continuarse con la aplicación de este último crite- VI. 1 - Concepto
ri o, a la luz de lo dispuesto por et art. 332 que trata el vicio de lesión, en cuanto pre$-
cribe que: "Puede demandarse la nulidad o la modificación de los actos jurfdicos . También llamado "interés compuesto", es la capitalización de intereses que se
cuando una de las partes explotando la necesidad, debilidad síquica o inexperien- acumulan al ca pital, de modo tal que los que ya se han devengado se suman a l capi-
cia de la otra, obtuviera por medio de ellos una ventaja patrimonial evidentemen- tal produciendo nuevos intereses.
te desproporcionada y sin justificación. Se presume, excepto prueba en contrario, Ejemplo:
que existe tal explotación en caso de notable desproporción de las prestaciones. Si se debe aplicar a la suma de $ 100.000 una tasa de interés del 5% mensual, la suma
Los cálculos deben hacerse según valores al tiempo del actq y la desproporción que produci rá como resultado esa tasa será de $ 5.000 mensua les. Estaremos en pre-
debe subsistir en el momento de la demanda. El afectado tiene opción para sencia de anatocismo, si al segundo mes que debemos aplicar la tasa de interés pacta-
demandar la nulidad o un reajuste equita tivo del convenio, pero la primera de da, en luga r de hacerlo nuevamente sobr.e los$ 100.000 del ca pital, lo hacemos sobre
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la suma de$ 105.000 (es decir, sobre el capital más el fruto que arrojó la tasa de inte- Vl.3 - La cuestión en el Derecho argentino luego de la sanción
rés luego del primer mes),.y así sucesivamente.
de l Código Civil y Comercial

El derogado Código Civil de Vélez Sarsfield, siguiendo los mismos lineamientos El art. 770 del CCCN, dispone expresamente: " No se deben intereses de los
de las codificaciones del Derecho comparado (Francia -art. 1154-, Italia -art. in tereses, excepto que: a) una cláusul a expresa autorice la acumulación de Jos
1283- , Aleman ia -art. 248-, Suiza -art. 314 del Código de las Obligaciones-, intereses al capital con una periodicidad no inferior a seis meses; b) Ja obligación
entre otras), había determinado desde su origen la prohibición de la capitalización se demande judicialmente; en este caso, la acumulación opera desde la fecha de
de los intereses futuros que no habían sido devengados. la notificación de la demanda; c) la obligación se liquide judicialmente; en este
El fundamento de dicha prohibición residía en que ellos operaban en desmedro caso, Ja capi ta lización se produce desde que el juez manda pagar la suma resul-
de los deudores, que podían encontrarse en situaciones económicas apremiantes y tante y el deudor es moroso en hacerlo; d) otras disposiciones legales prevean la
una cláusula de capitalización de intereses podría llevarlos rápidamente a la ruina acumulación".
(Llambías).
En razón de ello, apreciamos que -como regla general-;. se sigue mante-
Otros autores, sin embargo, han defendido y continúan defendiendo su admi-
niendo la prohibición del anatocismo, aunque se establecen excepciones en la
sión, argumentando que la propia rea lidad económica es la que impo ne esa solu-
norma :
ción, ya que el sistema financiero requiere su admisión en función de lograr mayor
renJabilidad ante los prestamos de d inero (Martorell). a) Convención expresa que así lo autorice. Esta convención puede realizarse .
en forma anterior o posterior a su devengamiento, admitié ndose también ,.
Vl.2 - El Derecho argentino antes y después de la reforma la validez de las convenciones que autoricen la acumulación del interés al
introducida por la ley 23.928 capita l en forma anticipada, con la periodicidad que las partes f ijen, aunque
esta no debe ser inferior a los se is meses. Desde ya que también serán váli-
Con anterioridad a la sanción de la ley 23.928; el derogado Código Civil argen-
dos ~egún nuestro entender- los conven ios de capitalización de intere-
tino propiciaba una solución que vedaba la capitalización de intereses, por reg la
ses q ue se real icen con posterioridad al vencimiento de la obligación.
general. Así lo disponía el art. 623 del CC: "No se deben intereses de los intereses,
sino por obligación posterior, convenida entre acreedor y deudor, que autorice la b) Cuando la obligación se demande j udicialmente; en este caso, la acumula-
acumulación de ellos al capital, o cuando liquidada la deuda judicialmente con los ción opera desde la fecha de la notificación de la demanda. Est a disposición
intereses, el juez mandáse pagar la suma que resultare, y el deudor fuese moroso reconoce como antecedente lo dispuesto en el art. 569 del CCom. (referido
en hacerlo". al mutuo come rcial), en cuanto establecía que los intereses vencidos pue-
Además de los casos autorizados que determinaba el artículo citado, también den producir int ereses por demanda j udicial o por convención especial. En
existían disposiciones legales específicas que permitían la capitalización anticipa~ el Código Civil y Comercial se admite el anatocismo desde la fecha de notifi-
da, así como también lo hacía el derogado Código de Comercio en determinadas cación de la demanda, aunque nada se establece (y por ende parecie.r.a no
situaciones, tales como: en el mutuo comercial cuando haya convención especia l y requerirse) respecto a si esos intereses deben adeudarse por un per(odo
a partir de la demanda judicial (art. 569), en la cuenta co rriente comercial en perí- determinado. No obsta nte, debemos aclarar que la liquidación de t ales
odos mínimos de capitalización trimestral (art. 788), en la cuenta corriente banca- intereses capitalizados, habrá de hacerse una vez efectuada la condena y al
ria donde los intereses se capitalizan trimestralmente (art. 795), entre otras. momento del pago o ejecución de ella.
Luego de·1a sanción de la ley 23.928 se reformó el art. 623 del ce, el que esta- c) Cuando la obligación se liquide j udicialmente; en este caso, la capitaliza-
blecía que no se debían intereses de los intereses, sino por convención expresa que ción se produce desde que eljuez manda pagar la suma resultante ye/ deu-
autorice su acumulación al capital, con la periodicidad que acuerden las partes; o dores moroso en hacerlo. Se mantiene esta causal de admisión de anatocis-
cuando liquidada la deuda judicialmente con los intereses, el juez mandase pagar mo. Ella se da cuando el acreedor presenta en el proceso judicial una liqui-
la suma que resultare y el deudor fuese moroso en hacerlo. Agregaba que serían dación que incluye los intereses devengados, y es aprobada por el juez.
válidos los acuerdos de capitalización de intereses que se basaran en la evolución Cuando ello ocurre y el deudor es intimado de pago, si no lo efectúa incurre
periódica de la tasa de interés de plaza. Se establecían, claro está, las excepciones en mora y por lo tanto, adeudará t ambién los intereses sobre el monto de la
a dicho principio general que emanaba de la norma. liquidación impaga.
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d'¡ Cuando otras disposiciones legales prevean la.acumufación. Es importante § 19. Obligaciones de hacer y no hacer
destacar q ue el Código Civil y Comercial posee casos especiales para esta
a) Nociones previas
cuestión, como lo efectúa en el art. 1398 referido a la cuenta corrient e ban-
caria, y al art. 1433 que alude a la cuenta corriente. Seg ún la natura leza de la prestación, las obligaciones puede n ser de.dar, de ha-
cer y de no hacer.
Vl. 4 - Sanción en caso de anat ocismo El art. 773 del CCCN dispone que "/a obligación de hacer es aquella cuyo ob-
jeto consiste en la prest ación de un servicio o en la realización de un hecho, en
Las directivas emanadas del art. 770 del CCCNco nstituyen un principio de orden el tiempo, Jugar y modo acordados".
público, razón por la cual cuando se pacte la capitalizació n de intereses en contra- La prestación de servicio puede co nsisti r, segú n establece el art. 774 del CCCN
vención a aquellas, dichas convenciones serán nulas de nulidad absoluta.
, en: a) la realización de una actividad mensurable pero independ iente del resul-
Sin embargo, estimamos (al igua l que lo hace Llambías) que se trata de una nul i.- tado: en ella, se considera que e l deudor cumple cuando realiza la a ctividad pro-
dad parcial de la obl igación accesoria de pagar los intereses capital izados, que deja
metida de forma dilige nte (v. gr., contrato de locación de seTVicios -abog ad o
intacta la validez de la obligación principal.
que asume el patrocinio jurídico de un cliente en un pleito-); b) procurar al a cre-
edor un cierto resultado concreto, independienteme nte de su eficacia; c) procurar
VII - Extinción de los intereses al acreedor un resultado eficaz prometido (v. gr.. cláusulas llave en mano).
La deuda de intereses puede extinguirse de dos formas distintas: El art. 776 del CCCN expresa la cuestión de la incorporación de terceros, al dis-
......
~~ L •
po ner que: " La prestación puede ser ejecutada por persona distinta del deudo"r, a
a) Por cualquiera de las vías previstas por el ordenam iento jurídico (arts. 865 y 7:.,"'· no ser que de Ja convención, de Ja naturaleza de Ja obligación o de las circunstan-
ss., CCCN), que analizaremos en el Capítulo V. ~
,.;: 11.•'• cias resulte que éste fue elegido por sus cualidades para realizarla personalmen-
b) Cuando se t rata d e intereses_futuros, aún no devengados, por extinguirse
,.;....t:;_
_.., te. Esta elección se presume en Jos contratos que suponen una confianza especial".
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por cua lq uier vía la obligación principal (capital) respecto de la cua l son ·~~
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... Tambié n se refiere el Código Civil y Comercial a la ejecución forzada de las
accesorios. ., obl igaciones de hacer, aunq ue -llamativamente- no contiene ninguna norma
":;,_.¡:- que prohíba expresamente la viole ncia sobre la persona del deudor, como lo d is-
po nía el art. 623 del Código de Vélez Sarsfield.
VIII - Presunción legal en torno a los intereses
Finalmente, el Código Civil y Comercia l se refiere a la obligación de no hacer
El art. 899 del CCCN, d ispone: "Presunciones relativas al pago. Se p resume, e n el art. 778 de l CCCN, disponien do que: "Es aquella que tiene por objeto una
excepto prueba en contrario que:(...) c) si se extiende recibo por el pago de Ja pres- abstención del deudor o tolerar una actividad ajena. Su incumplimiento imputa-
tación principal, sin los accesorios del crédito, y no se hace reserva, éstos quedan ble permite reclamar fa destrucción física de fo hecho, y los daños y perjuicios".
extinguidos(...)".
Es decir, la ley presume que cuando el recibo es extendido por el acreed or d e ta l b) Obligaciones de hacer
modo, los intereses han sido también extinguidos.
Esta disposición legal guarda armonía con lo d ispuesto por el art. 903 de l CCCN 1 - Concepto
en materia de imputación de pago, que determina: "Pago a cuenta de capital e En la ob ligación de hacer el pla n de prestación a cargo del deudor consist e en un
intereses. Si el pago se hace a cuenta de capital e i ntereses y no se precisa su orden, hecho positivó, que se traduce en una actividad a desarrollar por este tendiente a
se imputa en primer término a intereses, a no ser que el acreedor dé recibo por satisface r el interés del acreedor. El art. .773 del CCCN la define expresamente: "La
cuenta de capital". ·
obligación de hacer es aquella cuyo objeto consiste en fa prestación de un servicio o
En razón de ello, cua ndo el acreedor extiende únicament e el recibo por el capi- en fa realización de un hecho, en el tiempo, fugar y modo acordados por fas partes".
t a l, resulta lógica la presunción legal del art. 899 de l CCCN, ya que se estima que los
intereses fueron cance lados ant eriormente por el deudor. Ejemplo:
Consideramos, por nuestra parte, que se trata de una presunció n iure etde iure "Juan" se obliga a real izar una escultura de diseño x para "Pedro" para el día 23 de
que no admite prueba e n contrario y resue lve definitivamente la cuestió n. junio de 2016. El objeto de la obligación, como vemos, consiste en la realización de la
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obra por parte de "Juan", lo que lleva a considerar a la prestación como un hecho Ejemplo:
positivo y a calificar a la obligación como "de hacer".
1. Si un médico cirujano cardiovascular se ha comprometido frente a un paciente a
Nuestro Código Civil y Comercial regula múltiples contratos que son fuente efectuar una intervención quirúrgica de su especialidad (v. gr., angioplastia), al
incesante de obligaciones de hacer: cabe mencionar, al respecto, al depósito, a al paciente no le resultará indiferente que lo opere otro médico diferente de quien se
co ntrato de obras o de servicios, al ma nd ato, al transporte, etcétera. Además, nin- ha obligado a ello. Es indudable en este caso que han sido las condiciones particulares
guna duda cabe que Ja prestación de servicios -públicos y privados-, tan fre-· · del deudor (médico cirujano reconocido, experiencia, sabidurfa, etcétera) lo que ha
llevado al paciente a contratar con él, por lo cual el interés de este último no será satis-
cuente y corrie nte en una sociedad enmarcada dentro de una economía de merca-
fecho si pretende operarlo otro profesional de la Medicina distinto.
do que tiende hacia la globalización, co nstituye un supuesto de obligación de
hacer: de allí la importancia que adquiere esta clasificación en la actualidad. 2. Idéntica situación se plantea si alguien ha encargado la realización de un cuadro a
un pintor famoso: es evidente que la calidad subjetiva del deudor de esa obligación
de hacer ha sido un elemento esencial y fundamental al momento de celebrar la obli-
2 - Especies gación. En este caso, queda claro que solamente puede realizar el cuadro. el pintor
q ue se obligó a ello, impidiéndose de tal modo que pueda ser suplido por otro.
Las prestaciones de hacer pueden ser de distintos tipos:
Respecto de estas dos especies de obligaciones de hacer, dispone expresamen-
I - Fungibles y no fungibles ,-«..
-:-:~
te el art. 776 del CCCN: "Incorporación de terceros. La prestación puede ser ejecu-
Se considera que Ja prestación es fungible cuando el interés d el acreedor se
·;;¿
..... : tada por persona distinta del deudor, a no ser que de la convención, de la natura-
encuentra centrado principalmente en la actividad prometida por el deudo r, care- leza de la obligación o de las circunstancias resulte que este fue elegido porsus cua-
ciendo de importancia quién dará cumplimiento en definitiva a dicha prestación.
·~---·
•;""' ..... lidades para realizarla personalmente. Esta elección se presume en los contratos
En razón de ello, se considera que es una prestación fung ible porque aú n siendo ~.:f.•.
......z.: que suponen una confianza especial".
cumplida la actividad por una persona diferente del deudor, se satisface el interés ;i~; Es de destacar, sin embargo, que aun cuando la prestación pueda ser de carác-
del acreedor. .:t ter fungible, las partes pueden haber pactado que la actividad prometida solo será

Ejemplo: -
~.·- , ·~
.. ,,...,
llevada a cabo por el deudor: en este caso, en razón de lo dispuesto por el art. 959
del CCCN habrá que estar a lo que efectivamente las partes han .convenido, ya que
"Pedro" se compromete frente a" Juan " a efectuar la cosecha de maíz del campo de si bien no se trata de una obligación intuitu personae, la infungibilidad de la pres-
este último. Queda claro, pues, que a" Juan" poco le interesa rá qué persona efectua- tación fue introducida por acuerdo de partes (cfr. art. 775, CCCN).
rá en definitiva dicha cosecha, ya que su interés principal se halla centrado en la acti-
vidad (cosecha del maíz) y no en la persona que efectivamente la efectúe. 11 - De servicio y de obra

La prestación de servicio puede consistir, de conformidad a lo dispuesto en el


Vemos, en el ejemplo que hemos expuesto, que el deudor ("Pedro") puede ser art. 77 4 del CCCN: " ... a) en realizar cierta actividad, con la diligencia apropiada,
sustituido por otra persona en la actividad prometida, sin que por ello se afecte el independientemente de su éxito. Las cláusulas que comprometen a los buenos ofi-
interés esperado por el acreedor ("Juan").
cios, o a aplicar los mejores esfuerzos están comprendidas en este inciso; b) procu-
En cambio, Ja prestación de hacer es no fungible, cuando solo el d e udor que se
rar al acreedor cierto resultado concreto, con independencia de su eficacia; c) en
ha obligado puede llevar a cabo la actividad prometida para satisfacer el interés procurar al acreedor el resultado eficaz prometido. La cláusula llave en mano o
del acreedor.
producto en mano está comprendida en este inciso. Si el resultado de la actividad
Es el caso de las prestaciones intuitu personae, dado que al momento de cele- del deudor consiste en una cosa, para su entrega se aplican las reglas de las obliga-
brarse la obligación se ha considerado corno elemento fundamental y relevante las ciones de dar cosas ciertas para constituir derechos reales".
cualidades personales-también artísticas o profesionales-del deudor; en razón Apreciamos aquí también la distinción entre prestaciones de medios (inc. a) yde
de ello, al acreedor no Je resu ltará irrelevante o indiferente q ué persona cumpla
resultado (incs. by c), a las que nos referiremos en el§ 24.
con Ja prestación, porque esta solo puede ser llevada a ca bo por quien se ha obli- En cambio, la prestación de obra es aquella que también recae sobre una activi-
gado a ello.
dad, pero orientada a la obtenció n de un resu ltado determinado; en tal caso, de no
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conseguirse el resultado se considera que el deudor ha incumplido la prestación Ahora bien, consideramos que cuando la norma precitada hace referencia a la
asumida (v. gr., contrato de obra -el pintor que asume el deber de hacer un cua- ejecución en tiempo acorde debe entenderse a aquel que las partes han pactado
dro, o el arquitecto que debe construir una casa; el contrato de transporte de per- expresa o tácitamente al conven ir la obligación. Si nada se hubiera convenido al res-
sonas, etcétera). pecto y no surgiera implícitamente su fijación de conformidad a la naturaleza de la
111 - Instantáneas o permanentes prestación, lo deberá fijar el juez en el modo previsto en el art. 887, inc. b) del CCCN.
En cuanto al modo de cumplimiento, también deberá estarse a lo que las partes
Las instantáneas son aquellas prestaciones que se agotan en una única activi-
han estipulado, o en su defecto, según la intención que tuvieron al contratar. En
dad desarrollada por el deudor de la obligación (v. gr., el tra nsportista que se obli- . .1

.at~¿ este ámbito tendrán mucha incidencia los usos y costumbres del lugar en que debe
ga a trasladar a una persona de un lugar a otro determinado, cumple su prestación
al finalizar el viaje). llevarse a cabo la prestación, puesto que ante la ausencia de los parámetros recién
"';. indicados para determinar el modo de cumplimiento, habrá de estarse a las reglas
Las prestaciones permanentes, también llamadas de tracto sucesivo, son aque-
del arte de aplicación para la actividad a desarrollar por el deudor en un lugar
llas que perduran en el tiempo, pudiendo ser a su vez: continuadas, cuando la acti-
determinado. No obstante ello, de arribarse a un conflicto en sede judicial, el juez
vidad del deudor se prolonga ininterrumpidamente en el tiempo (v. gr., la obliga-
siemp re se regirá por la apreciación del principio de buena fe (arts. 9º, 729 y 961,
ción de vigilancia que tiene el depositario respecto de la cosa dada en depósito); o
CCCN, entre otros), dado que la prestación de hacer debe ejecutarse del modo en
periódica, cuando a pesar de ser cumplida en un solo acto, su realización se frac-
que las partes lo entendieron o verosímil mente pudieron entenderlo, obrando con
ciona en.el tiempo (v. gr.. la obligación que asume un profesor de guitarra que debe
lealtad.
dar clases a los alumnos todos los martes de 16:00 a 19:00 hs.).
Ante el mal cumplimiento de la obligación de hacer por parte del deudor, el art.
IV - Convencionales o legales
775 del CCCN que hemos trascripto dispone en su parte final las sanciones a que
Según si las prestaciones hayan sido pactadas libremente por las partes en ejer- deberá someterse el deudor:
cicio del principio de autonomía de la voluntad (art. 959, CCCN), o bien si ellas sur- a) Se tendrá por incumplida la prestación. Queda claro, pues, que el hecho de-
gen de un imperativo legal (v. gr., la obligación del locador de garantizar el uso y ficientemente efectuado por el deudor facu lta al acreedor a tenerlo por no
goce de la propiedad arrendada al locatario).
realizado y a iniciar las accio nes correspond ientes como si fuera un incumpli-
miento absoluto. Sin embargo, debemos mencionar que no cua lquier defi-
3 - Efectos ciencia o irregula ridad producirá este efecto, sino que los defectos deben ser
Las obl igaciones de hacer son regidas, en cuanto a los efectos, por los mismos sustanciales y de im portancia; si fueran solo deficiencias sutiles, estimamos
principios establecidos para todas las obligaciones en general, razón por la cual que en pos de la seguridad jurídica del negocio celebrado, debería da rse la
pasaremos a analizarlos puntualmente. posibilidad al deudor de subsanarl as. La entidad de los defectos, claro está,
quedará determinada por el juez frente al caso en concreto.
I - Cumplimiento específico. Sanciones ante el mal b) El acreedor puede exigir la destrucción de lo mal hecho, siempre que tal exi-
cumplimiento de la obligación de hacer gencia no sea abusiva. Si bien se faculta al acreedor a que exija la destruc-
Es evidente que el efecto normal de una obligación de hacer consiste en que el ción de la obra defectuosamente realizada, estimamos que ello solo puede
deudor cumpla in natf.!ra con _la prestación asumida. proceder en casos de gravedad (v. gr., si el arq uitecto edificó otro tipo de
El art. 775 del CCCN dispone expresamente al respecto que: "El obligado a rea- casa de diferente estilo y distribución a la que originariamente se había
lizar un hecho debe cumplirlo en tiempo y modo acordes con la intención de las comprometido con el deudor, o bien, si en un campo, q uien se obligó a sem-
partes o con la índole de la obligación. Si lo hace de otra manera, la prestación se brar maíz lo hizo equivocadamente y plantó semillas de trigo). Somos partí-
tiene por incumplida, y el acreedor puede exigir la destrucción de lo mal hecho, cipes de la idea de que para poder destruir lo que fue defectuosamente rea-
siempre que tal exigencia no sea abusiva''. lizado por el deudor se debe requerir previamente· autorización judicial
Estimamos que resulta evidente que es deber primordial del deudor de una (pudiendo soslayarse tal requisito únicamente en caso de urgencia), máxi-
obligación de hacer cumplir con la prestación asumida en el tiempo y forma que me si co nsideramos que un hecho semejante contará, en la casi generalidad
fue convenido por las partes. de los casos, con la oposición del deudor a reconocer el defecto de su obra.
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En razón de e llo, nos parece apropiado lo establecido en la parte final de la Ejem plo:
norma e n cuanto-a que la exigencia del deudor no debe ser abusiva . "X" contrató a una empresa de t ransporte-a la cual le pagó por anticipado-que se
obligó a llevar a un grupo de personas al aeropuerto el día 25 de abril de 2016 a las
Ello, claro está, sin perjuicio de las otras consecuencias q ue -por aplicación de 11 :00 hs. y llegado ese momento el transporte no se presenta para trasladar a las per-
los principios generales imperantes en la materia- puedan alcanzar a l deudor, sonas. Aquí nos encontra mos ante una situación de urgencia, dado que si el trans-
como ser: apli cació n de sanciones co nminatorias (art. 804, CCCN), resolución con: porte no llega antes de las 11 :30 hs. a más tardar, las personas perderán el vuelo que
deben aborda r con desti no a España y que parte a las 14:00 hs. Esta sit uación autori-
tractual por incumplimiento (art. 1083, CCCN), o indemnización po r incump lí-
za a "X" a q ue pueda acudir a los servicios de otra empresa de transporte que cumpla
miento contractual (cfr. art. 1738, CCCN).
con tal cometido, prescindiendo de la autorización judicial prevía. Con posterioridad
a ello, y en ocasión de exigirle al deudor e l pago de lo que ha debido abonar a la nue-
11 - Ejecución forzada va empresa de transporte que llevó fínalmente a los pasajeros al aeropuerto, deberá
justificar ante el juez las razones de emergencia que lo llevaron .ª prescindir de la
Siguiendo los principios genera les imperantes en la materia, ante la falta de
autorización previa .
cumplimiento espontáneo por parte del deudor de una obligación de hacer, e l
acreedor puede acudir a la ejecución forzada, como d et e rmi na el art. 777, inc. a) IV - Responsabilidad ante el incumplimiento.
del CCCN.
La ejecución por equivalente
Este princi pio es concordante con lo dispuesto en el art. 730, inc. a).del CCCN, y ~:q:
no impide que el acreedor pueda acceder a otros mecanismos legales -como la He mos dicho que luego de haber procurado e l acreedor por todos los medios
.,.
.1..J:;_
obtener la prestación in natura si n ha berl o conseguido, procederá la indemniza-
aplicación de sanciones conminatorias - para forzar también el cumplimiento. _,
Como a l acreedor se le adeuda un hecho o actividad y no una su ma de dinero, aquel ción de los daños derivad os del incumplimiento de la obligación (cfr. art. 1738,
- CCCN). En tal caso, esta re mos ante la misma obligación que solo ha m utado su
>~~f'-:
debe reclamar e l cumplimie nto específico de la obligación y no demandar directa-
mente la inde mn ización de daños y perjuicios derivados del incumplimiento. En .-.;! ~ objeto: la actividad a desarrollar por el deudor es reemplazada por una suma de
;:~ ....
razón de ello, únicamente podrá demandarse la indemnización dineraria cuando _..,- dinero que int eg ra la indemnización.
~:;;.: Jr
se han agotado todos los medios para procurar e l cumplimiento del deudo r in
V- Imposibilidad de pago. Incumplimiento
natura y no se ha logrado.
no imputable al deudor

111 - Ejecución por o tro Puede ocurrir que la fa lta de cump limiento por parte del deudor suceda en
ra zón de alg ún hecho que no es imputable a su conducta; en tal caso, es conteste la
Tam bién ante la falta de cumplimiento espontáneo de la prestación, el acree-
doctrina mayoritaria en sostener que la obligación debe exting uirse sin responsa-
dor tiene la fa cultad de hacerla cumplir por un tercero a costa del deudor (cfr. a rt.
bilidad a lguna para e l deudor, en razón de configurarse la impos ibilidad de cum-
777, inc. b, CCCN). Dicha prerrogativa, si bien emana de l principio establecido en el
plim iento-arts. 955 y 956, CCCN-.
art. 730, inc. b) del CCCN, se encuentra prevista en forma expresa en el art. 776 del
CCCN que transcribiéramos precedentemente. Ejemplo:
Para que se pueda configurar e sta posi bi lidad de ejecutar la prestación de hacer
Un escultor se obligó a rea lizar una determinada escu ltura para una persona, pero
por otro, se requerirá: que exista mora del deudor (es decir, que el solvens haya
aquel sufre con posterioridad al nacimiento de la obligación un accidente que ha
incurrido en un retardo injustificado en el cumplimiento y que este le sea imputa- afectado su movilidad y le impide ejercer su actividad. Ello acarrea como lógica con-
ble); que la prestación de hacer sea fung ible (es decir, que no se trate de una pres- secuencia q ue el escultor no pueda cumplir con la prestaci ón asumida. En este caso se
tación de hacer intuitu personae); y que el acreedor obtenga autorización judicia l evidencia q ue el incumpl imiento se debe a un hecho que no le es imputable a l escul-
previa, excepto en una situación de urgencia, que autoriza al acreedo r a la ejecu- tor y, por ende, ello provoca la extinción de la obligación por imposibilidad de cum-
ción de la prestaci ó n por otro a costa del deudor: si ello sucede de tal modo, debe -· plimiento.
rá just ificar luego a nte e l juez el carácter de urgente que presentaba la situación y
que motivó su ejecució n po r un t ercero prescindiendo de la autorización judicia l Es im portante aclarar, consideramos, que d icha im posibil idad debe ser sobrevi-
previa . niente al na cimiento de la obliga ción.
288 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 289

4 - La obligación de escriturar no ser que deba ejercer violencia sobre la persona del deudor. En cambio, en
En una operación inmobiliaria, es frecuente que las partes celebren un boleto de las obligaciones del dar, el único límite a la ejecución forzada estará dado
compraventa que origina -además de las ·obligaciones de entregar la cosa el ven- por el hecho de que la cosa debe existir, debe poseerla el deudor y estar en
dedor y pagar el precio de la venta el comprador-una obligación de hacer de gran su patrimonio.
trascendencia en el ámbito del derecho civil: la obligación de escriturar. No debe- c) En las obligaciones de dar, la persona del deudor es irrelevar:ite pa ra el acree-
mos olvidar que en virtud de lo dispuesto por el ·art. 1017, inc. a) del CCCN, el con- dor, cuestión que no suele ocurrir en las obligaciones de hacer, sobre todo
trato de compraventa de inmuebles debe ser instrumentado en escritura p~blica. · cuando tienen por objeto prestaciones no fungibles.
En este ámbito adquiere relevancia también el art. 1018 del CCCN, que prevé el il1
supuesto que se da cuando dicho contrato no se efectúa en instrumento público y
c) Obligaciones de no hacer
solo se lo hace en instrumento privado: "Otorgamiento pendiente del instrumento.
El otorgamiento pendiente de un instrumento previsto constituye una obligación 1 ' - Concepto
de hacer si el fu turo rnntrato no requiere una forma bajo sanción de nulidad. Si la
La obligación de no hacer, según lo d ispone el art. 778 del CCCN, "es aquella que
parte condenada a otorgarlo es remisa, el juez lo hace en su representación, siem-
tiene por objeto una abstención del deudor o tolerar una actividad ajena. Su
pre que las contraprestaciones estén cumplidas, o sea asegurado su cumplimiento".
incumplimiento imputable permite reclamar la destrucción física de lo hecho, y los
Esta solución normativa reconoce como antecedente el fallo plenario de la
daños y perjuicios".
Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil de Capital Federal, caratulado "Cazes
En razón de esta definición legal, podemos concluir y ampliar en cuanto a que
de Francino, Amalia c. Rodríguez Conde, Manuel" (CNCiv., en pleno, 3/10/51, LL,
las obligaciones de no hacer tienen por objeto una conducta negativa, consistente
64-476), donde se resolvió que en el supuesto de que, en un juicio ordinario de com-
en una abstención o en un deber de tol erancia por parte del deudor. Aun cuando
praventa voluntaria de un bien proceda la condena a escriturar, el juez estará habi-
muchos autores han discutido si una abstención o un hecho negativo puede ser
litado para firmar la escritura si no lo hace el obligado.
copsiderado una prestación, estimamos que sí lo es, como podemos apreciarlo en
Dicho principio, que constituye a nuestro entender un caso de ejecución de una
el caso con el que ejemplificamos a estas obligaciones.
obligación de hacer por otro, también fue receptado por el art. 512 del CPCCN que
actualmente dispone que: "La sentencia que condenare al otorgamiento de escri- Ejemplo:
tura pública, contendrá el apercibimiento de que si el obligado no cumpliere den- Un locatario se obliga frente al locador -a través del contrato de locación que los
tro del plazo fijado, el juez la suscribirá por él y a su costa ... ". une-- a no instalar un negocio de venta de artículos de li brería en el local comercial
No obstante este criterio imperante hoy en día, no debemos omitir decir que que ha arrendado. Dicha estipulación puede se r incluida en el contrato, por ejemplo,
cuando el vendedor no es condenado a escriturar (v. gr., por no se r propietario del para que el locata rio no le cree competencia come rcial al locador, ya que este posee
inmueble en cuestión), la obl igación debe resolverse a través de la indemnización una lib rería a pocos metros del local que ha alquilado.
de los daños y perjuicios que prevé el art. 730 del CCCN.
2 - Clasificación
5 - Diferencias de las obligaciones de hacer Las obligaciones de no ha ce r pueden ser clasificadas de diferentes maneras:
con las obligaciones de dar
Son varias las diferencias existentes entre las obligaciones de hacer y la s obliga- t- De acuerdo a Ja entidad del hecho negativo
ciones de dar, pudiendo enumerar las siguientes: comprometido por el de udor

a) Existe una diferencia sustancial en torno a la naturaleza de la prestación, Las obligaciones de no hacer pueden ser:
puesto que mientras la obligación de dar consiste en la entrega de una cosa, a) Obligaciones de abstención («in non facendo»): son aquellas en las cuales la
la obligación de hacer en la realización de una actividad (hecho positivo) en prestación que asume el deudor consiste en una conducta negativa, es decir,
favor del acreedor. en la no realización de determinados actos materiales. El deudor debe abs-
b) En las obligaciones de hacer las facultades que posee el acreedor son más tenerse de realizar algo (v. gr., no construir un muro, no viajar a lugar deter-
acotadas en torno a la ejecución forzada, debido a que puede intentar la a minado, etcétera).
290 Carlos A. Cal vo ·costa Derecho de las obligaciones 291

b) Obligaciones de tolerancia (<'in patiendo>>): son aquellas en las que el deudor b) Si el deudor incumple una obligación de no hacer permanente (ya sea perió-
se obliga a soportar o tolerar que otra persona rea lice una actividad deter- dica o conti nuada), la realización de los actos que no debió realizar puede
minada (v. gr., el locatario de un inmueble asume-en razón del contrato de no dar lugar a un incumplimiento absoluto y definitivo, sino que puede oca-
locación que ha suscripto-el deber de no impedir que un vecino pueda atra- sionar únicamente un supuesto de mora (v. gr., si el deudor se había com-
vesar el inmueble que ocupa para poder acceder a la vía pública). Este tipo de prometido a suspender la rea lización de las obras de construcción de un
obligaciones fue asimilada a la servidumbre, ya que en ambas existe un inmueble determinado, y sin perjuicio de ello, las continuó efectuando has-
deber jurídico de abst ención, pero existe entre ellas una importante dife-· ta que fina lmente decidió cesar con ellas; en este caso, pues, el acreedor
rencia, debido a que mientras la servidumbre constituye un derecho real, la puede demandar por el cumplimiento tardío de la obligación los daños y
obligación in patiendo se enmarca en el ámbito de los derechos personales. perjuicios derivados del retardo en el pago).

11 - De acuerdo a su duración y proyección en e/ tiempo 11 - Ejecución forzada

Las obligaciones de no hacer se clasifican en: Pesan sobre las obligaciones de no hacer las mismas limit aciones que debían
a) Instantáneas: son aquellas en las cuales la prestación negativa se agota en soportar las de hacer: en ambas, pues, se puede ejecutar forzadame nte el cumpli-
un único instante (v. gr., una persona se compromete a no presentarse a.una miento de la obligación, salvo que para ello sea necesario ejercer violencia sobre la
audiencia de o.posición de antecedentes que se celebra un día determinado, persona del deudor. ,.,..,. .,
•:"A
por lo cual cumple con su obligación no asistiendo a ella). ~. Queda cla ro, creemos, que la ejecución forzada de una obligación de no hacer
·~t.
b) Permanentes: son las que denotan cierta perdurabilidad a lo largo del tiem- ...l~
· !~
puede ser llevada a cabo solo en una obligación de no hacer de carácter perma-
po, pudiendo clasifica rse asimismo en: continuadas (aquellas en las que la j _-' nente, ya que -como dijimos- de tratarse la prestación de un comportamiento
negativo instantáneo, su rea lización por el deudor en infracción a lo convenido,
prestación negativa se proyecta a lo largo de un tiempo determinado o -•}t
indefinidamente, sin fraccionamiento alguno -v. gr., no viajar a determi- -~ provoca el incumplimiento absoluto y definitivo de la obligación (v. gr., el deudor
~t..t
nado lugar durante el plazo de tres r:neses-); o periódicas o de tracto suce- no debía viajar a España el 12 de septiembre de 2015 y viajó; queda claro, pues que
sivo (son las que contienen una prestación negativa que debe ser cumplida ~:t. no hay lugar para una ejecución forzada).
de modo fraccionado-v. gr., tolerar que una persona pueda alojarse en el .
inmueble dado en comodato una semana cada dos meses- ). Ejemp lo:
Puede lograrse la ejecución forzada de una obligación de no hacer cuando esta sea de
carácter permanente y no afecte, pues, la pe rsona del deudor. Si en el caso del con-
3 - Efectos
trato de locación que antes mencionamos, por medio d el cual e l deudor se había com-
Al igual que las obligaciones de hacer, las de no ha cer también son reg idas, en prometido a no inst alar en el inmueble alqu ilado un local de venta de artículos de
cuanto a los efectos, por los m ismos principios establecidos para todas las obliga- librería y lo instala pese a la prohibición contractual, estaremos en presencia de la eje-
ciones en general. cución forzada de la obligación si e l acreedor-locador- consigue una orden judicial
para clausurar el local alqui lado.
/ - Cumplimiento especifico

Debe considerarse que el deudor de u na obligación de no hacer cumple cuan- Por último, es de destacar que la prohibición de ejercer violencia pesará tam-
do, espontáneamente, se abstiene de realizar un hecho o tolera una situación, en bién en los casos en que, aún tratándose de una obligación de no hacer de carácter
el tiempo y la forma en que fueran convenidos por las partes de la obligación. permanente, la ejecución fo rzada no se puede llevar a cabo sino afectando la per-
Atento a la clasificación de las obligaciones de no hacer que hemos mencionado sona del deudor.
precedentemente, debemos d istinguir (en relación al cumplimiento espontáneo y
Ejemp lo:
específico) según se trate de una ol;lligación de no hacer instantánea o permanente:
a) En las obligaciones de no hacer instantáneas, ante la realización del hecho Si una persona está obligada a cesar e n su actividad profesional en un lugar o t iempo
que se debía omitir, el deudor incurre en incumplimiento absoluto y defini- d eterminado (v. gr., no pintar cuadros en el atelier "X") y lo sigue haciendo, ninguna
duda cabe que la ejecución forzada de la obligación de no hacer consistiría en hacer
tivo de la obligación.
r .{

292 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 293

cesar esa actividad; pero, claro está, en el caso que nos ocupa e llo no podría lleva rse a IV.2 - Sin culpa del deudor
cabo sino por la fuerza pública y afectando la libertad personal del deudor, lo cua l es
ilegítimo. Si bien este supuesto no está contemplado expresamente en e l Cód igo Civil y
Comercial estimamos que, de ocur.rir el incum pli miento de la o bligación sin que le
111 - Ejecución por otro sea imputab le a la conducta del deudor, la obligación se extingue para ambas par-
tes, y el deudor debe restituir al acreedor lo que por razón de ella hubiere recibido,
Resulta indudable, según nuestro parecer, que no hay lugar para que el a cree- tal como lo dispon ía el art. 627 del CC de Vél ez Sarsfield. Ello así, ya q ue no encon-
dor pueda hacer ejecutar la prestación por otro a ca rgo del deudor en una obliga- tramos motivo para qu e se adopte una sol ución distinta a la que se institu ía e n el
ción de no hacer. Estimamos que se trata más que nada de una imposibilidad fácti- régimen jurídico derogado.
ca, ya que quien debe abstenerse de realizar algo es el propio deudor y no un ter-
cero. Algunos autores, sin embargo, estiman que existen supuestos de ejecució n
por otro en las o bligaciones de no hacer, como cuando e l deudor haya ejecutado § 20. Obligaciones de objeto plu ral o complejo
culpablemente un hecho en violación a la abstención convenida, por lo cual el
acreedor tendrá derecho a exigir que se destruya lo que se hubiese hecho, o que se a) Nociones previas. Clasi ficación
le aut orice para destruirlo a costa del d eudor, tal como lo dispon ía e l derogado art.
633 del CC de Vélez Sarsfield. Al momento de efectuar el cua dro clasificatorio d e las obligaciones, hemos des-
t acado que estas podían ser agrupadas también según la complejidad que presen- ,
Es.decir, se auto riza a l acreedor a remover o desmantelar el estado de cosas que
t ara su objeto, por lo cual pod ían ser clasificadas en ob li gaciones de objeto simple
ilícitamente ha ocasionado Ja conducta del deudor. Sin embargo, debemos a cla-
y de objeto plural o compuesto.
rar que para que ello se pueda llevar a cabo, el acreedor debe pedir autorización
judicial previa, para que la dest rucción pueda re!llizarla un tercero a costa del deu- Son obligaciones de objeto simple aquellas en las cuales la prestación es una
dor. Debe quedar claro, pues, que en ning ún caso e l a creedor est á autorizado a sola (v. gr., la entrega del automóvil pate nte PUR 234); mientras que son obligacio-
efectuar justicia por mano propia, sin esa auto rización previa: sol o podría p res- nes de objeto plural, complejo o múltiple-como también sue le denominárselas-
cindir de ella, cuando mediaren razones de urgencia valede ras-que luego debe- aquellas que co ntiene n dos o más prestaciones. Asimismo, las obligacio nes de
rá acredita r ante el juez- por las cuales se alegue que el tiempo que lleva ría el obj eto plural o complejo se clasifican en:
pedido de autorización previa pod ría desnaturalizar el derecho d el a creedo r.
Todo e llo, claro está, debe ser materia de comprobación y sometido a la dis<recio- 1. Obl igaciones de objeto conjunto: son aquellas que contienen dos o más
nal idad judicial. prestaciones, y todas ellas integ ran la pretensión del acreed or, de modo tal
Al respecto, estimamos apropiado el punto de vista de Llambías al destacar que que el deudor debe cumplir con todas las prestaciones comprometidas para
en ningún caso la destrucció n de lo realizado debe importar el sacrificio de un valor poder liberarse y dar satisfacción a l interés del accipiens (v. gr., el deudor
económicamente superior al interés del acreedor comprometrdo e n el incumpli- "X" debe entregar al acreed or "Y" u na mesa, un juego de sill as y dos sillo-
miento de la obl igación (v. g r., si la construcción de un vecino excede el límit e al que nes; q ueda claro, pues, que la obligación se considerará cumplida en tal caso
se ha bía comprometido, el acreedor no podrá pretender su demolición si con ello si "X" cumple con la entrega de t odos estos objet os). Esta clase de obliga-
se destruirían también las construcciones vecinas so bre las cuales se a poya la ilegí- ci_ones son regidas por los principios genera les aplicables a todas aquellas
tima construcción del deudor): relaciones jurídicas que consistan en obl igaciones que carecen d e un rég i-
men pro pio, puesto que la única d iferencia estriba en la cantidad de los
objetos adeudad.o s y no en la calidad de ell os.
IV - Responsabilidad ante el incumplimiento
2. Obl iga ciones de objeto disyunto: si bien son obligaciones que también
IV. 1 - Con culpa del deudor
poseen dos o más prestaciones, e l deudor logra liberarse cumpliendo con
Al igual que lo que ocurre en las ob ligaciones de hacer, si el cumplimiento de la una sola de ellas. Est as obligaciones se clasifican en obligaciones alternati-
obligación se torna im posi ble por culpa del deud or, el acreedor tiene derecho a vas y obl igaciones facultativas, las q ue analizaremos a continuación en for-
obtener la indemnización de los daños y perjuicios que deriven del incumplí~ ma detallada, ya que presentan principios d iferentes según se trate de una
miento. u otra clase de obligación.
294 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 295

b) Obligaciones alternativas La doct:ina no resulta ser pa cífica a l respecto:


1 - Coricepto a) Para algunos autores (Herná ndez Gil, Rams Albesa, Bianca, Galli), se trata de
El art. 779 de l CCCN dispone que: "La obligación alternativa tiene por objeto una obligación de objeto único -con una pluralidad de contenidos- qu e
una prestación entre varias que son independientes y distintas entre sí. El deudor resu lta indeterm inado hasta el momento de la elección: por e nde, luego de
está obligado a cumplir una sola de ellas". ser eleg ido un objeto det ermi na do, todos aquellos que no hayan sido elec-
t os q uedan a l margen de la ob ligación. Por ende, pa ra ese sect'?r de la doc-
Ejemplo: trina, luego de la elección, debe concluirse que la o bligación alternativa
Se pacta que "Juan" deberá entregarle a "Pedro" un cuadro de Benito Quinquela tenía una única prestación, lo que hace presum ir que las demás que han sido
Martín o una escultura de Fernando Bottero. En este caso, "Juan" queda li berado y descartadas nunca fueron debidas.
cumple con la obligación con la entrega de cualquiera de estos dos objetos. b) Otro sector d octrinario, entiende que si bien la ob ligación alternativa posee
un vínculo único, tie ne prestaciones múltiples, las cuale~ son todas debidas
En tal sent ido, como surge de la parte fi nal de la no rma, el obligado a lternati- bajo cond ición resolutor ia de que se cumpla cualqu ie ra de las otras: es decir,
vamente solo está a cumplir con una sola de las prestaciones, por lo cual una vez
que si bien se deben todas desde el inicio, si se cumple cua lquiera de e ll as, las
que lo realice q ue dará liberado. Estimamos, aun ante el silencio de la ley, que la otras se descartan y no deben cumplirse (Llambías, Lafa ille, Alterini • Amea l -
alternatividad también puede estar referida a las modalidades d~ la prestación y
López Cabana, Borda). Según nuestro parecer, esta misma línea de pensa-
no únicamente a su objet o.
miento resulta en parte acertada, aunq ue co"nsideramos que en la obliga-
ción alternativa hay plura lidad de objetos-prestaciones-debidos in obli-
2- ¿Unidad o pluralidad de vínculos y objetos? gatione, pero unidad de objeto in solutione (en este mismo sentido se ha n
expedido Larenz, Cristóbal Mont es, Piza rro · Valles pinos).
Au n cuando algunos a utores (Windscheid, Zacharia e) ponen en duda en esta cla-
se de o bligaciones si existen u no o más vínculos (según la cantidad d e prestaciones
q ue exist an), estimamos q ue solo puede hablarse de la exist e ncia de un único víncu- -Yi
,: 3 - Trascendencia práctica de la obligación
lo referido a varias prestaciones (Bara ssi, Diez-Picazo, Rams Albesa, Hernández Gil, '~
.•.t alternativa
J,
Lacruz Berdejo), todas las cuales son adeudadas desde el mismo momento del naci- Se estima que su función e n el tráfico es muy variada, dependiendo de a quié n
m iento de la obligació n, pero sujetas a la condición resolutoria de que sea elegida corresponda la elección ya que, entre otras cosas, garantiza el cobro -al acotarse
a lguna de las otras (Alterini - Ameal - López Caba na).
el riesgo de imposibi lidad de cumplimiento por extinción de l objeto-, posibilita el
Ello as í puesto q ue existe una so la obligación, y a que se debe una so la presta- ca mbio de objeto cuando quien debe realiza r la elección no está plenamente deci-
ción, aunque hasta el momento de la elección no se sepa cuál será, a causa de su dido respecto de él al momento de obl igarse -al estar ello originariamente co n-
indeterminación in obligatione.
venido por las partes-, etcétera. Este ámbito de libertad que deja esta clase de
En favor de la unidad de vínculo en las obligaciones a lternativas, podemos brin- obligación a quien posee el derecho de e lección no se presenta en casi ninguna
dar como arg umentos: otra clase de re lación jurídica obligatoria, por lo cual las obligaciones alternativas
son frecuentemente util izadas e n los contratos modernos (especialmente en los
a) El objeto de la obligación es una única prestación, pese a que ella no está
det erminada ab initio. co ntratos de adhesión) y en las ofertas al público.

. b) Aun cuando exista n varias p rest aciones in obligatione, únicame nte habrá
una sola de e llas in solutione. 4 - Fuentes
c) Una vez produci da la elección de la p restación, las otras prestaciones que no Si bien en la mayoría de los casos las obligaciones alt ernativas serán genera das
fueron elegidas y que estaban in obligatione desaparecen. por la voluntad de las partes (dr. art. 959, CCCN), también ellas pueden ser de ori-
gen legal, cuando es la ley la que las consag ra; existen algunos su puestos de alter-
También se ha cuestio nado en torno a las obligaciones alternativas, si ellas son natividad legal en el Código Civi l y Comercial, ta les como los conten idos, entre
d e objeto único o múltiple . otros, e n losarts. 1060y 1957.
296 Carlos A. Calvo Costa Derecho de.fas o bligaciones 297

5 - Caracteres se debe una sola prestación que puede ser sustituida por el deudor a l momen-
Queda claro que los caracteres de las obligaciones alternat ivas serán diferentes to de pagar por otra prestación que es accesoria de aquella.
según cuál sea la postura doctrinaria que se adopte respecto a la unidad o plurali- b) En las a lternativas, todas las prestaciones se encuentran en una situación de
dad de vínculos y objetos que hemos analizado. igualdqd y son independientes entre sí; sin embargo, en la obl igación facu l-
tativa-<omo veremos luego-existe interdependencia e ntre la prestación
Según nuestro criterio, son características distintivas de las obligaciones alter-
deb ida originariam ente y la que puede servir como sustituta de esta, dado
nativas las siguientes:
que aquella es considerada principal y esta última accesoria.
a) Poseen un solo vínculo.
c) En las a lternativas, la posibilidad de elección de la prestación puede recaer
b) Tienen pluralidad de objetos en la etapa in obligatione -distintos e inde- en el acreedor, en el deudor, e inclusive, en un tercero. En cambio, en las
pendientes entre sí, dado q ue las prestaciones se encuentran en un mismo facultativas, la opción de elegir la prestación principal o la accesoria resulta
pie de igualdad unas respecto de las otras-, aunque fina liza siendo uno ser únicamente una facu ltad del deudor.
solo en la instancia in solutione de la obligación.
e) Poseen unidad de causa. JI/ - Con las obligaciones de género

d) Se cumplen con una so la de las prestaciones previstas e n la etapa in obliga- Si bien ambas presentan como característica común la indeterminación relativa
tione, la que debe ser elegida por quien tiene a cargo tal facultad (af1. 780, de la prestación al inicio de la obligación, merecen destacar:se -sin emba rgo--
CCCN), pudiendo ser el acreedor, el deudor o un tercero, según el caso: notorias diferencias que expondremos seg uidamente. A pesar de que a lgunos
e) Una vez efectuada la elección, la obligación se debe concentrar en la pres- autores desconocen que existan diferencias entre ellas y las obligaciones de géne-
tación elegida, descartándose el resto de las prestaciones previstas a l inicio ro limitado (Pizarra - Vallespi nos), estimamos de importancia resaltar a lgu nos
de la obl igación. aspectos disímiles que consideramos re levantes:
a) En las obligaciones de género (cuando nos encontramos ante ob liga ciones
6 - Comparación con otras obligaciones de dar cosas inciertas no fungibles), la determinación de la prestación se
I - Con las obligaciones conjuntivas efectúa por la pertenencia a un género determinado, encontrándose e l
objeto indeterminado ab initio (lo que sí está determinado, como d ijimos,
En las obligaciones de objeto pl ural conjunto, el deudor debe cumplir la totali-
es e l género); en cambio, en las alternativas, las disti ntas prestaciones espe-
dad de las prestaciones que integran el objeto de la obligación (por ejemplo,
cíficas e independientes que integran el objeto de la obligación a su naci-
"Juan" debe entregar a "Pedro"; un cuadro, una computadora y un piano); como
miento, se encuentran perfectamente determinadas, debiendo precisarse
vemos en el ejemplo, ellas son formuladas mediante la conjunción "y", por lo cual mediante la elección posterior con cuál de ellas se va a cumplir la obligación.
deben cumplirse ínteg ramente todas las prestaciones. para que se considere cum-
pli da la obl igación. b) En las obligaciones de género sol.o puede elegirse una cosa de ca lidad media
(art. 762, CCCN); en cambio, en las alternativas, la elección es totalmente
En las obligacio nes alternativas, en cambio, si bien el deudor está obligado des-
libre no poseyend o quien tie ne esa facu ltad limitación alg una para elegir la
de un inicio al cumplimiento de varias prestaciones, exti ngue la obligación yse libe-
ra cumpl iendo una sola de ellas. prestación.
c) Las obligaciones alternativas pueden extingui rse por imposibilidad de
11 - Conlasobligacionesfa cultativas pago, si llegaran a perd erse todas las prestaciones debidas; en camb io , en
Como lo veremos posteriormente infra, las obligaciones facultativas son aquellas las obligaciones de género, como regla general, ello no resulta posible, ya
que se caracterizan por poseer un objeto que el deudor puede sustituir, en el momen- que rige e l prin cipio genus nunquam perit que determina que "el género
t o del pago, por otro objeto d ife rente que se encuentra al margen de su deuda. nunca perece" (solo podría extinguirse por imposibilidad de pago en los
supuestos que se trate de obligaciones de género limitado).
En razón de ello, existen notorias diferencias con las obligaciones alternativas:
a) En las alternativas, son dos o más prestaciones las que integran el objeto de Sin embargo, es de destacar que en las obligaciones de género limitado, de aco-
la obligación desde un in icio (in obligatione); en cambio, en las facu ltativas tarse mucho la especie dentro de l mismo, podría llegar a convertirse aquel t ipo de
298 Carlos A. Calvo Costa Derecho de fas obligaciones 299

obligación en una obligación alternativa, produciendo la confusión entre ambas No obstante esta regla, nada impide que las partes en·ejercicio de l pri ncipio de
(v. gr., si en el marco de una obligación de género "A" se compromete a entregar a autonom ía de la voluntad (art. 959, CCCN), pacten que la facul tad de e lección
"B" un cuadro que Pérez Celis haya realizado en los últimos dos años, si bien apare- recaiga sobre el acreedor (cfr. art. 782, CCCN), encontrándonos en tal caso ante una
ce formu lada esta obligación como de género, tal vez se convierta de hecho en a lter- obligación alternativa irregular.
nativa, si son únicamente dos o tres los cuadros que ha pintado dicho artista en ese Inclusive, también pueden pactar libremente las partes que la elección sea efec-
lapso). Aun cuando ello ocurra, no debemos olvidar que persiste aún una di.fere ncia tuada po r un tercero que ellas designen de común acuerdo, ha biéndose contem-
susta ncial entre ambas: en las obligaciones de género limitado, quien tenga a su car- plado ahora dicha situaci ón expresamente en el ordenamiento jurídico nacional
go la elección deberá opt ar por una cosa de ca lidad media, mientras que en las alte r- (cfr. art. 783, CCCN), tal como también lo permiten otros ordenamientos jurídicos
nativas, quien elija la prestación no está atado a ningún condicionante de este t ipo. de l Derecho comparado, como el BGB alemán que lo admite expresa mente e n los
Esta compleja situación que p uede dar 1uga r a conflictos en caso de suscitarse, fue §§317y319.
contemplada por el legislador e incluida en el Código Civil y Comercial, en donde el
art. 785 dispone: "Obligaciones de género limitado. Las disposiciones de esta Sec- Aclaramos, sin embargo, que en caso de ob ligaciones de sujetos plurales-que
ción se aplican a las obligaciones en las que el deudor debe entregar una cosa incier- analizaremos más. adelante- debemos efectuar una distinción respecto a quién
ta pero comprendida dentro de un número de cosas ciertas de la misma especie". tiene la facu ltad de elección: ·
a) Si se trata de una ob ligación simplemente mancomunada -sea esta a lter-
7 - La elección o concentración . nativa regular o irreg'ular-la e lección solo puede ser realizada cuando haya
acuerdo unánime de todos los sujetos que integran el aspecto pasivo o acti-
La elección o concentración es el acto mediante el cua l e l sujeto facultado pa ra vo de la obligación: e n caso de falta de acuerdo, lo deberá resolver el juez.
ello determina cuál de las prestaciones previstas va a ser la efectivamente debida,
descartando, con ello, a las restantes que queda~ a l margen de la obligación. b) · Si, en cambio, la obliga ció n es solidaria, cualquiera de los acreedores (soli-
Debe quedar claro, estimamos, que a partir del acto de elección la obligación daridad activa) o de los deudores (solidaridad pasiva) está n leg itimados
pierde el carácter de a lte rnativa, ya que al queda r concentrado su objeto, pierde su para real izar individualmente la elección, preva leciendo e l criterio del pri-
especialidad e ingresa en el régimen común y normal de las obligaciones. Este mero q ue la haya rea lizado.
supuesto ius electionis no reúne los atributos de un derecho subjetivo (el derecho
11 - Modo y tiempo de realizar la elección
de opción), sino que se trata de una facu ltad íns ita en la misma cualidad de acree-
dor o de deudor, que se transmite con ella a los herederos del titular; en su caso, 11.1 - Modo
puede ser transmitida por acto entre vivos junto con el crédito (Lacruz Berdejo).
Como regla general, podemos afirmar que la e lección puede realizarse expresa
o t ácita mente, aunque existen criterios doctrina rios dispares en torno al momen-
I -:- A quién corresponde
to en que se produce dicha elección. Sin perjuicio-O.e que los ana lizaremos segu i-
El art. 780 del CCCN dispone: "Excepto estipulación en contrario, la facultad de damente, nuestra postu ra es que la elección se produce mediante una declaración
elegir corresponde al deudor. La opción que corresponde a varias personas requie- de voluntad rece pticia e irrevoca ble, por parte de quien tiene a su cargo la e lección
re unanimidad. Si la parte a quien corresponde la elección no se pronuncia opor- de la prestaci ón.
tunamente, la facultad de opCÍón pasa a la otra. Si esa facultad se ha deferido a un
tercero y este no opta en el plazo fijado, corresponde al deudor designar el objeto 1 - En la obligación alternativa regular (es decir, en aquellas que la elección
de/pago". está a cargo del deudor), una corriente de opinión sostiene que la elección se con-
Este principio general que le acuerda la facultad de elección al solvens no es más figura recién con la ejecución de la prestación deb ida y no antes (Savigny, Demo-
que una aplicación lógica de l principio favor debitoris que impera en la materia y lombe, Salvat, Cazeaux), ya que e l objetivo principal de la obligación a lternativa es
que resultaba ser una de las at enua ciones del vínculo como elemento esencia l d e la de mantener vigente la posibilidad de elección entre varias prestaciones pacta-
la obligación. das in obligatione hasta el mismo momento en que e l deudor debe cumplir.
Cuando la elección debe ser efectuada por e l deudor, la o bligación alternativa Sin embargo, para otro sector doctrina rio, del cual somos partícipes, la e lec-
se d enomina regular. ción debe ser practicada a t ravés de una declaración recepticia d irig ida por e l suje-
300 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 301

to que tiene a su cargo dicha facultad electiva hacia la otra parte, a través de la fil - Mora en la elección
cual se ind ica con qué prestación deberá cumplirse finalmente la obl igación; si la
Puede ocurrir que quien tiene a su car go la elección no la efectúe; en tal caso,
facultad de elección estaba en cabeza de un tercero, deberá este notificar tanto
dispone el Código Civil y Comercial en el art. 780: "Elección. Sujetos. Efectos(.. .) Si
al acreedor como al deudor (Rams Al besa, Bianca, Barassí, Llambías, Colmo, Lafaille,
la parte a quien corresponde la elección no se pronuncia oportunamente, la facul-
Pizarra, Alterini).
tad de opción pasa a la otra. Si esa facultad se ha deferido a un tercero y este no
Son argumentos en favor de esta postura: opta en el plazo fijado, corresponde al deudor designar el objeto del pago ... ".
1. La elección es un acto voluntario y debe regirse por las reglas imperantes Estimamos que el legislador ha logrado mejorar el régimen que preveía el dero-
respecto de sus elementos internos (discernimiento, intención y libertad) gado Código Civil de Vélez Sarsfield, dado que se ha referido expresamente a esta
como externos (manifestación de voluntad). ·cuestión, lo cual no ocurría de modo tan claro en el régimen jurídico anterior. En el
Código Civil anterior, el antiguo art. 766 preveía la solución solamente para el caso
2. No debe confundirse el momento de la elección con el del cumplimiento de la
de falta de elección en una obligación alternativa irregular, en la cua l la elección
obligación, puesto que son dos instantes disímiles en la vida de la obligación.
recayera sobre el acreedor y este no la efectuara, pero no para el supuesto de una
3. No hay razón alguna para que el deudor que tiene a su cargo la elección de obligación alternativa regular (elección a cargo del deudor), en donde no se eli-
la prestación deba co nservar hasta el momento del cumplimie nto todas las giera la prestación.
prestaciones que han sido pactadas in obligatione.

IV - Efectos de la elección
No obstante nuestro pensamiento, sin distinguir entre obligaciones alternati-
vas regular e irregular, el Código Civil y Comercial pareciera admitir ambas formas El efecto principal de la elección es el de determinar y concretar la prestación
mediante la cual se va a llevar a cabo el cumplimiento de la obligación, descartan-
de elección, cuando dispone en el art. 780: " .. . La elección es irrevocable desde que
se la comunica a la otra parte o desde que el deudor ejecuta alguna de las presta- do al mismo tiempo las otras prestaciones que originariamente integraban el obje-
ciones, aunque sea parcialmente ... ". to de la obligación.
En la edición anterior de esta obra estimába.rrios que una vez efectuada la elec-
2 - En la obligación alternativa irregular-€ 1ección a cargo del acreedor- o ción de la prestación, ella ten ia efecto retroactivo, es decir, que la elección actuaría
en aquella cuya elección corresponda a un tercero, la elección se efectúa a través como si la prestación electa fuera la ún ica que se hubiera convenido al momento
de una declaración de voluntad notificada a la otra parte o a ambas, si la elección del nacimiento de la obligación, considerándose - además- como si las restantes
correspondía al tercero. En esto son pacíficas la doctrina y la jurisprudencia. Debe- prestaciones jamás hubieran existido. Eran también partícipes de este criterio,
mos destacar que este es el criterio que también adopta el art. 1136 del CC español entre otros, Llambías, Colmo y Alteri ni, mientras que objetaban este efecto retro-
("Cuando la elección hubiese sido expresamente atribuida al acreedor, la ob liga- activo, Rams Albesa, Diez-Picazo y Pizarro, argumentando estos últimos que ello no
ción cesará de ser alternativa desde el día en que aquella hubiese sido notificada al surgía de la ley ni aparecía impuesto por la naturaleza de la obligación.
deudor"). Estimamos que aquí la notificación resulta ser esencial, puesto que el El art: 780 del CCCN dispone al respecto q ue: " una vez realizada, la prestación
deudor debe saber con certeza cuál será la prestación que debe llevar a cabo. escogida se considera única desde su origen, y se aplican las reglas de las obliga-
ciones de dar, de hacer o de no ha cer, según corresponda", con lo cual se ha disi-
pado toda duda en torno a ello.
11.2 - Tiempo
Además, es de destacar que una vez notificada la elección a la contraparte, ella
En cuanto al tiempo d e rea lizar la elección, nadie discute que debe ser efectua- es irrevocable, basándonos para ello en elementales razones de seguridad juríd ica,
da en tiempo propio, es decir, en el que fue estipulado por las partes o, en su defec- ya que de otro modo no podrían garantizarse los derechos de las partes. La irrevo-
to, dentro del plazo establecido para el pago. Si el plazo estuviera tácitamente cabilidad de la elección, una vez notificada por quien la tenía a su cargo, solamen-
indeterminado pero resultare de la naturaleza y circunstancias de la obligación, te puede ser dejada sin efecto por expreso acuerdo de ambas partes.
podrá la parte que no tiene a su cargo la elección interpelar a la que goza de la facul- Finalmente, en caso de nulidad de la elección efectua da por cualquier circuns-
tad electiva para que efectúe la elección (art. 887, inc. a, CCCN ); en ca mbio, si no tancia susceptible de provocarla, renace la virtualidad de la obligación alternativa
hubiere plazo, deberá requerirse su fijación judicialmente (art. 887, inc. b, CCCN). en razón de lo dispuesto por el art. 390 del CCCN.
302 Carlos A. Calvo Costa Derecho de fas obligaciones 303

V- Obligación alternativa con prestaciones periódicas sucesiva por causas ajenas al deudor, d ispone el inc. b): " .. .si todas las prestaciones
Dispone el ar:t. 780 de l CCCN que: " ... En fas obligaciones periódicas, la elección resultan imposibles, y la imposibilidad es sucesiva, la obligación se concentra en
realizada una vez no implica renuncia a la facultad de optar en lo sucesivo ... ". esta última, excepto si la imposibilidad de alguna de ellas obedece a causas que
comprometen la responsabilidad del acreedor; en este caso, el deudor tiene dere-
Ejemplo: cho a elegir con cuál queda liberado".
Si "X" se ha comprometido durante cinco años con "Y" a entregarle anualmen_te un En cambio, para el supuesto de imposibilid ad sobrevenida de todas las presta-
caballo pura sangre de carrera o un vehículo O km, la elección que se realiza para el ciones, y la imposibilidad es simultá nea, d ispone el cit ado art. 731 del CCCN que:
primer año, no lo compromete para los cuatro años restantes. " .. . c) (...)si todas las prestaciones resulta n imposibles por causas atribuibles a la
responsab ilidad del deudor, y la imposibilidad es simultánea, se libera entregando
8 - Riesgos en la obligación alternativa el valor de cualquiera de ella; sí lo son por causas atribuibles a la responsabilidad
del acreedor, el deudor tiene derecho a dar por cumplida su obligación con una y
Puede ocurrir durante la vida de una ob ligación alternativa, que una, varias o reclamar los daños y perjuicios emergentes de la mayor onerosidad que l e ocasio-
todas las prestaciones que la int egran in obligatione se tornen de imposib le cum- ne el pago realizado, con relación al que resu ltó imposible .. . " .
plimiento, ya sea por pérdida o dest rucción o por ausencia de req u isitos necesa ri os Finalmente, el leg islador ha previsto e l supuest o en q ue se pierdan todas las
para realizar vá lidamente el pago. También debemos analizar qué sucede en caso prestaciones por causas ajenas a las partes. En torno a ello, el art. 731 dispone e n su
de que las prestaciones se deterioren con culpa o sin cu lpa del deudor. parte fina l: " ... d) si todas las prestaciones resultan imposibles por causas ajenas a
Debemos distinguir, pues, las situaciones en las cuales la imposibilidad aparece, ya -· la responsabilidad de las partes, la obligación se extingue" . La solución es lógica y
que esta puede resultar ser originaria o sobrevenida al nad miento de la obligación, guarda coherencia con lo dispuesto por el art. 955 del CCCN para el supuesto de
lo que provocará la aplicación de diferentes soluciones, tanto cuando se traten de imposibilidad de cumplimiento.
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obl igaciones alternativas regula res como de obl igaciones alternativas irregulares. . ";:\:.
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11 - Deterioro de las prestaciones debidas
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I - Imposibilidad de las prestaciones debidas .i" en las obligaciones alternat ivas regulares
en las obligaciones alternativas regulares
El Código Civil y Comercial no posee norma alguna que trate el supuesto de
Todos los supuestos de im posibilidad de las prestacioens que pudieran ocurrir
deterioro de las prestaciones. No obstante, las soluciones a esta cuestión debemos
en una obligación a lternativa, han sido contemplados po r e l legislador en el art.
ha ll arlas a la luz de los principios que imperan en el Derecho de las Obligaciones, y
781 del CCCN.
a cómo ha sido ell a t ratada hasta hoy en la doctrina y en la jurisp rudencia.
l. 1 - Imposibilidad sobre venida de una de las prestaciones de bidas
11. 1 - Deterioro de alguna de las prestaciones
Debemos d isti ng u ir según la imposibilidad sobrevenida se deba a la cond uct a sin culpa del deudor
imputab le al deudor, a l acreedo r, o a un caso fortu ito. Dispone expresame nte el ·
art. 73 1 del CCCN: " ... a) si una cl_e las prestaciones resulta imposible por causas aje- · De ocurrir e l deterioro fortuito d e alguna de las prestaciones, la mayoría de la
nas a la responsabilidad de las partes, o atribuibles a la responsabilidad del deudor, doctrina argentina sostiene que el deudo r no p uede optar por la entrega de la cosa
la obligación se concentra en la restante; si la imposibilidad proviene de causas atri- deteriorada a rgumentando en favor de ello que e l deterioro fue fortuito y no le es
buibles a la responsabilidad del acreedor, el deudor tiene derecho a optar entre imputable (en contra, en el Derecho comparado: Demolombe, Baudry-Lacantine-
dar por cumplida su obligación; o cumplir la prestación que todavía es posible y rie). En caso de admitirse la entrega de la prestación deteriorada, e r acreedor ten-

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reclamar los daños y perjuicios emergentes de la mayor onerosidad que le cause el drá d erecho a requerir una disminución proporcional del precio, pero también a
pago realizado, con relación al que resultó imposible ... ". d isolver la obligación si no acepta la cosa deteriorada.
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1.2 - Imposibilidad sobrevenida de todas las prestaciones debidas 11.2 - Deterioro de todas las prestaciones sin culpa del deudor
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También aquí se debe efectuar una d isti nción entre diferentes situaciones, Se mantiene la facultad de elección en cabeza del deudor. En t al caso, el acci-
todas ellas contempladas por e l art. 731 del CCCN. Cuando esa imposibilidad es piens podrá negarse a recib ir la cosa deteriorada y a disolver la obligación; o bien a
304 Carlos A. Calvo Costa Derecho de' las obligaciones 305

recibirla en ese estado requiriendo una disminución del precio originariamente recibir la prestación deteriorada que elija el deudor, sin poder pedir una reducción
convenido. en el precio.

11.3 - Deterioro de todas las prestaciones 11.9 - Deterioro de una prestación por culpa del deudor
por causas imputables al deudor y de la otra por culpa del acreedor

Si ello ocurre, el deudor carece de derecho a elegir entre las prestaciones dete-- El deudor puede elegir entre ambas: si elije la que se ha deteriorado por su cul-
rioradas, por lo cual será el acreedor quien, en definitiva, elija con cuál de.las pres- pa, el acreedor puede optar por recibirla pidiendo una reducción proporcional del
taciones se efectuará el cumplimiento de la obligación, si es que no desea disolver precio o solicitar la indemnización del daño que le ocasiona el cumplimiento defec-
la obligación con indemnización de daños y perjuicios. tuoso. En cambio, si el deudor elige la prestación deteriorada por culpa del acree-
dor, el pago se co nsidera correcto e íntegro y el accipiensdebe aceptarla en el esta-
11.4 - Deterioro de una prestación por culpa del deudor do que se encuentre.
En este caso, el deudor pierde la facultad de elegir y está obligado a pagar con
la prestación no deteriorada. 111 - Imposibilidad de las prestaciones debidas
en las obligaciones alternativas irregulares
11.5 - Deterioro de una prestación por culpa del deudor
Al igual que lo hace para las obligaciones alternativas regulares, tamb ién se
y de la otra por caso fortuito
encuentran legislados en nuestro ord enamiento todos los supuestos de imposibi-
Aquí también el deudor pierde la facultad de liberarse mediante la entrega de lidad de las prestaciones cuando la obligación alternativa es irregular, es decir,
otra cosa, también deteriorada. El accipiens, en tal caso, podrá optar por recibir aquella en la cual la elección recae en el acreedor. que pudieran ocurrir en una obli-
una cosa deteriorada con -reducción del precio, o rechazar el pago con indemniza- gación alternativa, han sido contemplados por el legislador en el art. 782 del CCCN.
ción de daños y perjuicios. Para el supuesto de que una de las prestaciones resulte imposible por causas aje-
nas a la responsabilidad de las partes, o atri buib les a la responsabilidad del acree-
11.6 - Deterioro de una sola prestación dor, dispone la norma en el inc. a) que "-/a obligación se concentra en la restante";
por culpa del acreedor mientras que si la imposibilidad proviene de causas atribui bles a la responsabilidad
del deudor, "el acreedor tiene derecho a optar entre reclama r la prestación que es
En este supuesto la facultad de elección del deudor se mantiene~ puesto que no
podría suprimirla la culpa del acreedor(Llambías). El deudor, en tal caso, puede ele-
posible, o el valor de la que resulta imposible".
En el caso de que todas las prestaciones resulten imposibles y dicha imposibi li-
gir entregar la prestación no deteriorada y exigir una indemnización por la que se
ha deteriorado por culpa del acreedor. dad sea sucesiva, determina el inc. b) que "la obligación se concentra en la última,
excepto que la imposibilidad de la primera obedezca a causas que comprometan la
11. 7 - Deterioro de una prestación por culpa del acreedor responsabilidad del deudor; en este caso el acreedor tiene derecho a reclamar el
y de la otra por caso fortuito valor de cualquiera de las prestaciones". _
Además, dispone la norma en el inc. c) que si t odas las prestaciones resu ltan
El deudor, en este caso, sigue manteniendo la facultad de elección, ya que el imposibles por causas atribuibles a la responsabilidad del acreedor, y la imposibili-
deterioro de las prestaciones le es ajeno: puede, pues, optar por la entrega de la dad es simultánea, "el acreedor tiene derecho a elegir con cuál de el/as queda satis-
cosa deteriorada por culpa del acreedor sin que este pueda pedir una reducción en fecho, y debe al deudor los daños y perjuicios emergentes de la mayor onerosidad
el precio, o bien elegir entregar la arruinada por caso fortuito, con una reducción que le reporte el pago realizado". En cambio, si ello ocurre por causas atri buibles a
proporcional de la contraprestación a abonar por ella. la responsabi lidad del deudor, "el acreedor tiene derecho a elegir con el valor de
cuál de ellas queda satisfecho".
11.8 - Deterioro de todas las prestaciones por culpa del acreedor Por último, en concordancia con lo dispuesto por el art. 955 del CCCN, en el inc.
El deudor mantiene la facultad de elección, ya que las prestaciones se han arrui- d) del art. 782 dispone: " ... si todas las prestaciones resultan imposibles por causas
nado por causa del accipiens, y ello no puede perjudicar al deudor. El acreedor de be ajenas a la responsabilidad de las partes, /a obligación se extingue".
306 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 307

IV - Deterioro de las prestaciones debidas IV. 7 - Deterioro de todas las prestaciones por culpa del acreedor
en las obligaciones alternativas irregulares
1 Resultan de aplicación en este caso, las mismas soluciones previstas para los
i
! Al igual que ocurre con las obligacion.es alternativas regulares, tampoco el casos de imposibilidad de todas las prestaciones por culpa del acreedor que hemos
Código Civil y Comercial contie ne disposiciones que traten los casos de deterioro analizado precedentemente, según el deterioro de las prestaciones haya ocurrido
de las prestaciones cuando la alternancia es irregular y la elección recaiga sobre el simultánea o sucesivam ente.
acreedor. En razón de ello, también debemos encontrar las soluciones efectuando
IV.8 - Deterioro de una prestación por culpa del acreedor
una interpreta ción armónica de los principiosque rigen para las o bligaciones, y de
y de la otra por culpa del deudor
las opiniones pacíficas de la doctrina nacional.
En este caso, debe presumirse que la prestación que ha sido deteriorada por cul-
IV.1 - Deterioro fortuito de alguna de las p restaciones pa del acreedor ha sido la elegida por el accipiensq ue la ha inutilizado (la doctrina
El acreedor, en ta l caso, elegirá entre cualquiera de las presta ciones debidas, determina que el deterioro que realiza cu lpablemente el acreedor importa una
inclusive la deteriorada. De opta r por esta última, podrá solicitar una reducción elección t ácita de ella).
proporcional del precio.
9 - Aumentos y mejoras
IV.2 - Deterioro fortuito de todas las prestaciones Debemos distinguir según nos encontremos frente a una obl igación alternati-·
El accipiens gozará también en este caso de libertad para elegir cua lquiera de va regular o irregular:
las prestaciones. a) En una obligación alternativa regular: si aumenta o mejora uno solo de los
objetos debidos, el deudor puede elegir por entregar el que no ha aumen-
IV.3 - Deterioro de una sola prestación por culpa del deudor
tado o mejorado, o bien optar por la entrega del que sí lo ha hecho, renun-
El acreedor, en este caso podrá, a su libre criterio: elegir la entrega de la cosa no ciando -en consecuencia- a reclamar su mayor valor; y si aumentan y
deteriorada; optar por la entrega de la cosa afectada pidiendo la disminución pro- mej oran t odos los objetos, el deudor puede elegir cua lquiera de ellos, vién-
porcional del precio; requerir el pago de una indemnización sustitutiva de la pres- dose obligado el acreedo r a abonar el mayor va lor del que sea elegido: si no
tación deteriorada; o, elegir disolver la obligación con el pago de los daños que ha se aviene a ello, la obligación q ueda disuelta.
~
sufrido a consecuencia de ello. · ·-:<- b) En una obligación alternativa irregular: si aumenta o mejora so lo uno de los
obj etos debidos, el acreedor puede elegir por el que no ha mejorado o
IV.4 - Deterioro de una prestación por culpa del deudor
aumentado, o bien por el mej o rado, viéndose obligado a pagar su mayor
y otra por caso fortuito
valor; y si aum entan o mejoran todos los objetos adeudados, el acreedor
En este supuesto, el acreedor podrá: elegir la entrega de la prestación afectada pu ede elegir cualquiera de ellos abonando su mayor valor, y en caso de
por el caso fortuito, pidiendo la dismin ución del precio); optar por la entrega de la negarse a hacerlo, la obligación se disolverá.
tosa deteriorada por cul pa del deudor, con reducción del precio más la indemniza-
ción de daños correspondiente; o requerir una i ndemnización sustitutiva del valor c) Obligaciones facultativas
de la prestación afectada por la.culpa del deudor.
1 - Concept o
IV. 5 - Deterioro de todas las prestaciones por culpa del deudor
El art. 786 del CCCN determi na que: "La obligación facultativa tiene una pres-
En este supuesto el acreedor puede optar por la pr imera y segunda vía del caso. tación principal y otra accesoria. El acreedor solo puede exigir la principal, pero el
anterior. deudor puede liberarse cumpliendo la accesoria ... ".
IV.6 - Deterioro de una sola prestación por culpa del acreedor Ejemplo:
Estimamos, aun cuando no es pacífica la doctrina al respecto, que la culpa del "X" debe entregar a "Y" la suma de S 40.000 (prestación principal). pero puede libe-
acreedor excluiría su.derecho a elegir, viéndose ob ligado a recibir del deudor la pres- ra rse de tal obligación entregando en su Jugar el automóvil Toyota Corolla dominio
tación deteriorada por su culpa, sin poder requerir disminución de precio alguna. PQM 246 (prestación accesoria).

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308 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 309

Estamos en presencia de un tipo de obligación que posee una prestación principal tintas entre si y se encuentran en un pie de igualdad), no se pod rá determinar la
y una prestación accesoria, las que se encuentran en una relación de interdependen- naturaleza de la obligación hasta el momento en que se efectúe la elección de la
cia, toda vez que hastatantosedeterminecon cuál de ellas cumplirá el deudor la obli- prestación con que se da rá cump limiento.
gación, existirá incertidumbre al respecto. Debemos resaltar que esta facultad de
elección que posee el deudor no req uiere ningún asentimiento de parte del acree- 3 - Caracteres
dor, más allá del que se haya establecido al momento de dar origen a la obligación.
La obligación facultativa se caracteriza por poseer:
En la obl igación facultativa existe unidad de objeto debido (prestación princi-
pal) pero pluralidad de objetos aptos para el pago; es decir, el deudor posee dos a) Unidad de objeto. El deudor se halla obligado únicamente al cumplimiento
programas de prestación diferentes para poder satisfacer el interés del acreedor: . de la prestación pactada in obligat ione, resultando ser esta -como reg la
el que se encuentra in obligatione o el que posee como facultad de pago. genera l- la úr.iica que puede reclamar el acreedor en caso de incumpli-
La prestación accesoria en una obligación facultativa puede consistir tam bién miento. Sin embargo, el deudor posee la facultad de cambiar esta presta-
en la entrega de una cosa, en la realización de un hecho o en una abstención. Asi- ción po r otra al momento del pago: estimamos, que esta mera circunstan-
mismo, se prevé la posibilidad de que la prestación accesoria consista en la estipu- cia, no habilita a hablar de p luralidad de objeto, sino de unidad de presta-
lación de modalidades o de otras circunstancias en to rno al modo de cumpl imien- ción debida, aun cuando el deudor cue nte a su favor con una plural idad de
to de la obligación, tal como lo dispone expresamente el art. 789 del CCCN: "Si en objetos idóneos para el pago (en este sentido: Llambías, Pizarro - Vallespi-
la obligación se autoriza la opción respecto de sus modalidades o circunstancias, se nos). En definitiva, podemos afirmar que la obligación facu ltativa posee
aplican las reglas precedentes". unidad de objeto debido y pluralidad de objetos aptos para el pago.
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Ejemplo: ,· b) Causa fuente única.
c) Unidad de vínculo.
"X" debe entregar a "Y"$ 900.000al contado el día 20 de junio de 2016, pero puede
optar por entregarlos en tres cuotas iguales y consecutivas de $ 300.000 con más un á) Existencia de interdependencia entre las prestaciones. La prestación debida
interés del 1% mensual. integra el objeto de la obligación. En cambio, la presta ción apta para el
pago a la que puede acudir el deudor para dar cumplimiento con su obl iga-
Alg unos autores han criticado la denominació n de obligación facultativa indi- ción, no integra el objeto de la obligación, aunque si es eleg ida por el sol-
cando que ambos conceptos (obligación y facultad) son contradictorios, ya que vensy cumple con ella, pone fin a la relación jurídica (por ello se trata de una
algo no puede ser obligat orio y facultativo a la vez. Es por ello que se han esmera- prestación accesor ia).
do en denominarlas de otro modo, como ser: obligaciones de pago facultativo e) Facultad del deudor para sustituir la prestación debida por otra que se
(Lafaille) u obligaciones de facultad de sustitución (Borda, Larenz). encuentra en facultad de pago.

2- Naturaleza jurídica 4 - Compa ración con otras clases de obligaciones


La obligación facultativa es una obligación de objeto único, por lo cual su natura- I - Con las obligaciones alternativas
leza se determina únicamente por la prestación principal que forma el objeto de ella.
Ello es así, puesto que en la etapa inobligatione de la re lación jurídica solo nos Nos remitimos al § 20, punto b), 6, 11 expuesto precedentemente en este capítu-
encontramos cori una única prestación (la principal). En consecuencia, aun cuando lo, ya que allí hemos dado tratamie nto expreso a esta distinción.
el deudor pueda llega r a liberarse mediante el cumplimiento de otra prestación al
11 - Conlaseña .
mom~nto del efectivo pago (prestación accesoria), la naturaleza de la obligación
estará determinada por aquella y no por esta última (es decir, si estamos en pre- Para cierto sector de nuestra doctrina, la seña es asemejada a la obligacióA
sencia de una obligación de dar, de hacer o de no hacer: la llamada prestación prin- facultativa, cuando ocu rre un arrepentimiento de quien debía rea liza r u n contra-
cipal es la que define la naturaleza de la o bligación facultativa). En esto reside una to mediante la entrega de una señal o arras (dr. art. 1059, CCCN ). Ello así toda vez
diferencia sustancial con respecto a las ob ligacion es alternativas, puesto que en que el deudor de la prestación podría liberarse perd iendo la seña, lo cua l implica-
ellas (en donde las prestaciones son obj eto de la obligación, independientes y dis- ría la facultad de sustituir una prestaci ón por otra: es decir, quien entrega la seña
310 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 311

puede arrepentirse de cumplir el contrato, perdiendo la misma; en cambio, si el ra y no se condice en absoluto con las disposiciones que contiene el Código Civil y
arrepentimiento lo realiza quien la recibe, debe restituirla doblada en su va lor. Comercial argentino para su tratamiento.
No compartimos tal semejanza, aun cuando puedan existir puntos de contacto
e ntre ambas figuras. Estimamos que la seña, en tal caso, adquiere el rol de una 11 - Modo y tiempo de efectuarla
indemnización fundada en la disolución contractual po.r arrepentimiento; en cam- Existen diferentes posturas doctrinarias respecto al modo en que debe ser rea-
bio, la prestación in facultate solutionis (en facultad de pago) es realizada para lizada la opción en una obligación facultativa.
cumpli r con la obligación, y consecuentemente, con un contrato. Un sector doctrinario mayoritario-del cual somos también partícipes- sostie-
Otra diferencia, menos sustancial, sería que en la obligación facultativa el dere- ne que la opción del deudor solo queda consumada al momento de su cumpl i-
cho de opción le compete únicamente al deudor, mientras que en la señal o arras, miento, es decir, que la opción queda cristalizada con la e ntrega de la prestación al
a cualquiera de las partes de la obligaeión. acreedor (Borda, llambías, Alterini, Busso).
Esta línea de pensamiento es acertada, a nuestro entender, puesto que la
5 - Caso de duda entre el carácter alternativo opción está referida a la facultad de sustituir una prestación porotra: de tal modo,
o facultativo de una obligación en el momento mismo del pago queda consumada cuál ha sido la elección efec-
Dispone expresamente el art. 788 del CCCN que: "En caso de duda respecto a si tuada por el solvens.
la obligación es alter.nativa o facultativa, se la tiene por alternativa". En el régimen Otros autores, en postura fran camente minoritaria, estiman que la opción se
jurídico anterior, que poseía una disposición similar, la mayoría de nuestra doctri- configura mediante una declaración de voluntad emanada del deudor, debida-
na sostenía que es una presunción que favorece al acreedor, puesto que las distin- mente comunicada al acreedor -declaración recepticia- (Lafaille, Colmo, Boffi
tas circunstancias que pueden afectar a las distintas prestaciones dejan intacto su Boggero, Pizarro - Vallesp inos).
de recho a reclamar las otras, en caso de que alguna se perdiere (Borda). Esta solu- En cuanto al tiempo de cumplimiento, dispone el art. 786 de l CCCN en su parte
ción legislativa fue criticada por otros autores (Lafaille, Colmo), dado que se aleja fina l, que:"... El deudor dispone hasta el momento del pago para ejercitarla facul-
del principio general del favordebitoris que, según ellos, debe imperar en el régi- tad de optar".
men de l Derecho de las obligaciones.
No obstante, estamos de acuerdo con la solución lega l establecida, dado que la 7 - Efectos
facultad confe rida al deudor en la obl igación facultativa es de carácter excepcio- Los efectos de las obligaciones facultativas deben ser estudiados considerando
nal, ya que en caso de no encontrarse expresamente pactada se tendrá por no esta- la interdependencia existente entre la prestación principal y la que se encuentra en
blecida: es por ello que, rigiéndonos siempre por el principio de bu ena fe contrac- facultad de pago; en razón de ello, siempre se considerará a la accesoria como
tual, la obligación debe cumplirse ta 1como fue establecida. Por ende, en caso de no dependiente de la principa l (art. 856, CCCN).
halla rse claramente estipulada la facultad del solvens, la obl igación debe rá repu- En virtud de este enunciado general, podemos extraer algunos principios en
tarse como alternativa. cuanto a los efectos aplicables a las obligaciones facultativas.
Cuando la obligación facultativa es nula por un vicio inherente a la prestación
6 - Facultad de opción principal, lo es también aunque la prestación accesoria no tenga vicio alguno.
Consiste e n el derecho que posee e l deudor para sustituir, al momento del cum- La nul idad del acto jurídico por motivo del objeto de la prestación acc~soria no
pli miento, la prestación debida in obligatione por otra apta para extinguir la obli- induce nulidad en cua nto a la prestación principal.
gación. La imposibilidad de cumplimiento de la prestación accesoria no prod uce efecto
I - A quién corresponde
alguno respecto de la principal.

La facultad de opta r por la sustitución de la prestación le compete únicamente 8 - Riesgos y responsabilidad


al deudor (art. 786, CCCN) sin necesidad de asentimiento d e l acreedor. Aun cuan-
do algunos autores extranjeros admiten la posibilidad de que dicha facultad pue- En materia de riesgos y de responsabilidad en las ob ligaciones facu ltativas,
da ser conferida al acreedo r por acue rdo de partes (Enneccerus, von Tuhr), no com- debemos distinguir según se torne de imposible cumplimiento la prestación prin-
partimos este punto de vista ya que ello implica una desnatura lización de esta figu- cipal o bien la establecida en facultad de pago.
...,...-

312 Carlos A. Calvo Costa Derecho de .las obligaciones 313

I - Prestación principal de imposible cumplimiento en el aspecto activo de la obligación, en el pasivo, o en ambos. Cuando la obligación
tiene como sujetos a u n solo acreedor y a un solo deudor, esta mos en presencia de
La solución en tal supúesto, va"ría según si ello ocurre por causas que sean imp u-
tables o no al deudor de la obl igación. · obligaciones de sujeto singular. Pero, sin embargo, cuando hay más de un sujeto en
cualqu iera o en am bos extremos de la obligación (es decir, que existe una comu ni-
1.1 - Por causas no imputab les al deudor dad de intereses en los sujetos que integran el rol del acreedor o el del deudor), esta-
mos en presencia de obligaciones de sujeto plural u obligaciones mancomunadas.
Si en la obligación facultativa la obligación principal se extingue po r una causa
1
.F que no es imputable al deudor, la obligación se extingue sin responsabilidad algu-
na de su parte, por imposibilidad de cumpl imiento (art. 955, CCCN); en tal supues-
Las obliga ciones mancomunadas pued en ser clasificadas asim ismo de la mane-
ra siguiente:
to, deviene totalmente irrelevante la existencia de una prestación acceso r ia que
1. Obligaciones disyuntas o disyuntivas: son obligaciones de suj eto plu ral en
pueda suplir a la principal, ya que (como lo establece el art. 786, CCCN) el acreedor
las cua les los suj etos están vi ncu lados por la conj unción "o", provocando
solo puede reclamar al solvens el cumplimiento de la principal. La única excepción
que se excluyan entre sí, ya se trate del deudor o del acreedor (v. gr., "A" o
a este principio, es si el deudor se hallare en mora al momento de ocurrir el casus
"C" le deben entregar a" J " $ 40.000. Cualquiera de los deudores puede ser
que torna de imposible cumplimiento la prestación principal.
elegid o, por lo cual si es electo "A", " C'' queda tota lment e excluido de la
1.2 - Por causas imputables al deudor
obligación). Las ana lizaremos seguidamente .

Si la prestación principal se tornare de imposible cumplimiento por causas impu- 2. Obligaciones conjuntas o conjuntivas: en ellas los sujetos se vinculan me~ ·-

! tables al deudor, el acreedor podrá reclamar los daños que le ocasiona la falta de d iante la conjunción "y", de modo ta l qu e tod os ellos son concurrentes los
cumplimiento de la prestación principal, pero no puede exigir el cump limiento del unos con los otros, t anto respecto de sus deudas como de sus créditos, si es
deudor con la prestación que se encuentra en posibilidad de pago. Esta es la sol u- que hablamos de conjunción pasiva o activa, res pectivamente (v. gr., " B" y
ción que surge de lo d ispuesto en el art. 787 del CCCN, la cual resulta totalmente "F" deben entregar a "X" un automóvil Toyota Corolla O km.: ambos deu-
lógica, y que supera lo que disponía -erróneamente, según nuestro parecer- el dores, por lo t anto, están obligados frente a "X"). Estas obl igaciones con-
derogado art. 648 del CC de Vélez Sarsfield, que le brindaba al acreedor la posibili- juntivas, se subclasifican a su vez en:
dad de reclamar el precio de la cosa que ha perecido o la cosa que era el objeto de la a) Obligaciones simplemente mancomunadas: que puede n ser a su vez de
prestación accesoria. En la anterior edición de esta obra nos habíamos manifestado objeto divisible o ind ivisible.
en contra de aquella solución normativa, puesto que si el acreedor solo puede recla- b) Obligacionesso/idarias: que pueden ser también divisibl.es o indivisibles
mar al deudor el cumplimiento de la prestación princi pal (que es la única que se le según el o bjeto.
adeuda), no se entiende por q ué el derogado Código Civil le asignaba la facultad de c) Obligaciones concurrentes: si bien no es una clasificación típica de obli-
exigir el cumplimiento.de la prestación q ue se encuentra en facultad de pago. gación mancomunada, el Código Civil y Comercial las ha incluido en su
articulado, y aun cuando presentan elementos similares a las obligacio-
:?4' 11 - Prestación accesoria de cumplimiento imposible
nes solidarias, también poseen prof undas diferencias con ell as. Las abor-
De tornarse de imposible cumplimie nto la prestación accesoria por motivos no dare mos posteriormente.
.~t imputables al deudor, en nada afecta ello a la prestación principal. Idéntica sol u-
ción cabeadoptarencasode que el deudor haya contribuido con su conducta a que Procederemos, pues, a explicar cada una de ellas.
ella se torne imposible

b) Obligaciones disyuntivas
§ 21. Obligaciones de sujeto múltiple
1 - Concepto
"" a) Nociones previas. Clasificación
También ll amadas obligaciones de sujeto alternativo, son aquel las establecidas

.1 Si bien las partes de una obligación siempre son dos -acreedor y deudor- a favor de un acreedor indeterminado o a cargo de un deudo r indeterminado en-
nada impide que la relación jurídica obligatoria pueda presentar más de un sujet o tre varios sujetos determinados.

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314 Carlos A. Calvo Costa Derecho de.fas obligaciones 315

Ejemplos: solidarias. Una numerosa y ca lificada corriente doctrinaria (Salvat, Borda, Colmo,
1) "Juan" o "Pedro" deberán entregar a "Marcelo" la suma de $150.000 (obligación
Lafaille, entre otros) se ha expedido en este último sentido, expresando q ue las
con deudor indeterminado a favor de un aC:reedor determinado). obligaciones disyuntivas no tienen un rég imen legal propio.
2) "Héctor" deberá entregar la suma de$ 200.000 a "José" o a "Roberto" (obligación Sin embargo, otros autores han sosten ido que las obl igaciones disyuntivas son .
con deudor determinado en favor de acreedor indeterminado). autónomas y configu ran una a lternatividad subjetiva pero no objetiva (Demolom-
be, Llambías, Busso, entre otros).
Tal como lo hemos manifestado precedentemente, en esta clase de obligacio-
nes los derechos de los sujetos no son acumulados, sino que, por el contrario, se des- 4 - Diferencia entre las obligaciones solidarias
cartan entre ellos. Ello ha llevado a que algunos autores (Pizarro- Vallespinos) pien- y las disyuntivas
sen que en esta clase de obligaciones la pluralidad de sujetos es solo aparente, ya
Existen varias y not orias dife rencias entre las obligaciones solida rias y las obli-
que son en real idad obligaciones de sujeto único indeterminado dentro de una
gaciones d isyuntivas:
pluralidad de sujetos posibles. Vemos pues, que en ellas, quienes están en el rol
activo o pasivo de la obligación no se erigen en coacreedores o codeudores -res- a) En las obligaciones solidarias, todos los sujetos que intervienen poseen un
pectivamente- puesto q ue solo uno de ellos se constituirá en acreedor o en deu- interés grupal y común a todos; ta l característica no se presenta en las obli-
dor de la obligación. gaciones disyuntivas.
b) En las obli gaciones solidarias, los deudores o acreedores son concurrentes, ya
2 - Caracteres
que coexisten sus deudas o sus créditos, respectivamente; en las obligaciones
Las obligaciones disyuntivas se caracterizan por: disyuntivas, en cambio, los deudores o acreedores se excluyen entre sí.
a) Pluralidad e indeterminación de sujetos. Inicialmente, existe una pluralidad e) En las obligaciones solidarias, el pago de la deuda efectuado por uno de los
de sujetos (activo y pasivo) que se encuentran provisoriamente indetermi- deudores, lo legitima para reclamar al resto de los codeudores el reintegro
nados, en razón de la alternativid<!d que afecta a la obligación (los sujetos de lo que ha pagado por ellos; tal característica no se presenta en las obli-
están vinculados por Ja partícula "o"). La pluralidad debe seroriginaria y no gaciones disyuntivas, dado que el pago realizado por uno de los deudores
puede ser sobrevenida; asimismo, la determinación posterior de los sujetos no lo legitima -en p rincipio- para reclamar el reembolso al resto, ya que
se produce mediante su ele.cción (e l resto que no sea elegido, queda com- al practicarse la elección, los otros codeudores iniciales han quedado al mar-
pletamente descartado y marginado de la obligación). gen de la obligación.
b) Unidad de causa. La causa de la obligación es una sola. d) En la obligación solidaria activa, todos los acreedores tienen derecho a
reclamar el crédito, dado que todos ellos resultan ser propietarios del mis-
e) Unidad de objeto. El pago efectuado por un deudor o hecho a un acreedor
mo; ello no se da en las obligaciones disyuntivas, puesto que aun cuando
(elegidos), libera extingue la obligación para todos.
existan varios acreedores iniciales, el propietar io del crédito estará indeter-
d) Existencia de una condición resolutoria. La obligación que han asumido dos minado hasta tanto no se produzca la elección del acreedor.
o más sujetos alternativamente está sometida a una condición resolutoria:
e) En la obligación de solidaridad pasiva, los deudores pueden ser demanda-
que sea elegido otro deudor para satisfacer la deuda - en caso de disyun-
dos en forma separada o conjunta, acumulativa o subsidiaria, por el acree-
ción pasiva- u otro a'creedor para recib ir el pago -si se trata de una dis-
dor; en cambio, ello no ocurre en la obligación disyuntiva pasiva, toda vez
yunción activa-(v. gr., "Juan" le debe$ 90.000 a "Carlos" o a "Rubén"; si
que si es demandado uno de ellos (lo cual denota que ha sido el deudor ele-
elige a "Rubén" para que reciba el pago, "Carlos" deja de ser acreedor con
gido}, la obligación queda extinguida automáticamente para el resto de los
retroactividad al nacimiento de la obligación).
deudores iniciales.
f) Similar situación a la anterior se produce en los casos de obligaciones de soli-
3 - Naturaleza jurídica daridad activa, puesto que cualquiera de los acreedores puede demandar al
Se ha discutido en nuestra doctrina respecto a si las obligaciones disyuntivas deudor el pago del créd ito, debido a que todos ellos son propietarios de
constituyen una categoría autónoma o si deben ser asimiladas a las o bligaciones este; pero, en la obligación disyuntiva activa, ningún acreedor puede de-
316 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones
317
• mandar en forma aislada el cobro total de la deuda, hasta tanto no sea ele-
6 - Elección del sujeto
gido como tal.
Como hemos expuesto precedentemente, en las obligaciones disyuntivas-ante
g) En las obligaciones solidarias rige tanto el principio de distribución como el
la plura lidad originaria de sujetos- debe procederse a la elección de l acreedor (si
de participación, situación que no se da en las obligaciones disyuntivas, e n
la disyunción es activa) o del deudor (en los casos de disyunción pasiva) :
donde los sujetos activos o pasivos son extraños entre sí.
1 - En los supuestos de disyunción activa, la elección del acreedor correspon-
de al deudor; este puede efectuar la elección aún en el caso de ser demandado por
5 - Régimen legal aplicable
otro acreedor, ya que no rige e l p rincipio de prevención aplicable en las obl igacio-
A diferencia del Código Civil de Vélez Sarsfield que no establecía un régimen nes solidarias. No obstante elfo, puede ha berse pactado que serán los acreedores
legal aplicable a este tipo de ob ligaciones, el Código Civil y Comercial se refiere a qu ienes determ inen a quién se efectuará el pago: en ta l caso, habrá que estarse a
ellas y determina sus alcances en e l art. 853: "Si Ja obligación debe ser cumplida por la e lección de los acreedores; pero, si tal elección no se efectúa, el deudor deberá
uno de varios sujetos, excepto estipulación en contrario, el acreedor elige cuál de intimarlos a realizarla, y en caso de silencio o negativa, estará facu ltado para con-
ellos debe realizar el pago. Mientras el acreedor no demande a uno de los sujetos, signar lo adeudado (art. 904, inc. c, CCCN'¡.
cualquiera de ellos tiene derecho de pagar. El que paga no tiene derecho de exigir
2 - En caso de disyunción pasiva, la elección de quien deberá paga r le corres-
contribución o reembolso de los otros sujetos obligados". Amplia el art. 854 dichos
ponde al acreedor. Si este no la realiza, los deudores podrán intimarlo a que la rea -
alcances, para el supuesto de disyunción activa: "Si la obligación debe ser cumpli-
lice, bajo apercibimiento de consignar lo que debe darse en pago. Si se hubiera
da a favor de uno de varios sujetos, excepto estipulación en contrario, el deudor eli-
convenido que los deudores entre sí.determinarán quién de elfos deberá efectuar
ge a cuál de éstos realiza el pago. La demanda de uno de los acreedores al deudor
el pago, si éstos no efectúan la elección, dicha facultad de e lección quedará e n
no extingue el derecho de este a pagar a cualquiera de ellos. El que recibe el pago poder del acreedor, quien podrá opta r por cua lquiera de elfos.
no está obligado a participarlo con los demás".
Con anterioridad a la sanción del Código Civil y Comercial, ante el si lencio que
c) Obligaciones simplemente mancomunadas
guardaba al respecto el derogado Código Civil, se habían suscitado varias opi n io-
nes encontradas en nuestra doctrina, con re lación a las reglas que debían aplicarse 1- Concepto
a las obligaciones disyuntivas.
Son aquelfasobligaciones de sujeto plural (ya sea de deudores o de acreedores),
1 - Algunos autores, en una postura que no compartimos en virtud de las en las cua les cada uno de los deudores está obligado al pago de su cuota-parte, y
notorias diferencias que acabamos de mencionar, sostenían que debía aplicarse a cada acreedor legitimado para reclamar la porción del crédito que le corresponde.
ell as el régimen previsto para las obligaciones solidarias {Salvat, Borda). El las están inmersas dentro del conjunto de las obligaciones mancomunadas, den-
tro de las cuales tenemos la clásica distinción entre obligaciones simplemente man-
2 - Otro sector doctrinario (Llambías,Alterini) estimaba que solo se podía apli- comunadas y las solidarias, y a la que cabe incluir, en razón de lo dispuesto por e l
car el régimen previsto para las obligaciones solidarias en todo aquello que sea Código Civi l y Comercial, a las concurrentes.
compatible con la _naturaleza de las obligaciones disyuntivas. El art. 825 del CCCN dispone a su vez que: "La obligación simplemente manco-
f!1Unada es aquella en la que el crédito o la deuda se fracciona en tantas relaciones
3 - Finalmente, otra lin~a de pensamiento en la cual nos incluimos junto.con particulares independientes entre sí como acreedores o deudores haya. Las cuotas
otros calificado's autores (Pizarro, Vallespinos), determinaba que a fas obligaciones respectivas se consideran deudas o créditos distintos los unos de los otros".
disyuntivas debía aplicarse subsidiariamente el régimen previsto para las obliga-
Ejemplo:
ciones si mplemente mancomunadas, e n donde existe pluralidad d e vínculos diso-
ciados e independientes ent re sí. "X", "Y" y "Z" deben pagara "M", "N" y "P" la suma de $30.000en virtudde una obli-
El Código Civil y Comercial ha resuelto esta cuestión en sentido coincidente a gación simplemente mancomunada. Salvo que se hubieran pactado porciones del
esta última opinión doctrinaria, al determinar en el art. 855: " Reglas aplicables. Se crédito o de la deuda diferentes, cada uno de los deudores esta rá obligado al pago de·
aplican, subsidiariamente, las reglas de las obligaciones simplemente mancomu- S 10.000 (ya que es la cuota parte de la deuda que le corresponde) y cada uno de los
nadas". acreedores quedará legitimado·para reclamar dicha cant idad (puesto que es la cuota
parte del crédito que le pertenece).
318 Carlos A. Calvo Costa Derecho de Jas obligaciones 319

2 - Caracteres t rari o (si bien esto surg ía expresamente del texto del derogad o art. 192(fdel
Las obligaciones simplemente mancomunadas presentan las siguientes carac- CC de Vélez Sarsfield, igua l conclusión debe interpretarse de la lectura
terísticas: armón ica de los arts. 378 y 1326 del CCCN, ya que no está prevista exp resa-
mente la solidaridad para los supuestos allí contemplados).
a) Pluralidad de sujetos: que puede ser originaria o derivada, según ella se dé
desde e l mismo nacimiento de la obligación o con posterioridad a él. c) Condóminos: si la deuda hubiere sido contraída por los condóminos colec-
b) Unidad de objeto. tivamente, sin expresión de cuotas y sin haberse estipulado sol idaridad,
están obligados fren te a l acreedor por partes iguales, salvo e l derecho de
c) Unidad de causa (v. gr., "X" y "Z" deben a "Y" $ 60.000 como precio de la cada uno contra los otros pa ra que se le abone lo que haya pagado de más,
compraventa de un automóvil).
respecto a la cuota que le corresponda (art. 1992, CCCN).
d) Pluralidad de vínculos, ya que existen tantos vínculos como sujetos inter-
vengan en la obligación, aunque en este tipo de obligación se da en forma
independiente y no coligada como en las solidarias. d) Obligaciones solidarias
e) Fraccionamiento del crédito yde la deuda, dado que el crédito y la deuda se
1 - Concepto y caracteres
dividen en tantas partes como acreedores o deudores haya.
f) Cada sujeto es sof? deudor o acreedor de su cuota parte. El Código Civil y Comercial las define en el art. 827: "Hay solidaridad en las obli-
gaciones cdn pluralidad de sujetos y originadas en una causa única cuando, en
g) Pueden ser divisibles o indivisi bles, distinción que ana lizaremos posterio r-
mente. razón del título constitutivo o de la ley, su cumplimiento total puede exigirse a
cualquiera de los deudores, por cualquiera de los acreedores". Por ende, en las
ob ligaciones solidarias, la totalidad del objeto puede ser reclamado por cualqu ie-
3 - Régimen del Código Civil y del nuevo Código Civil y Comercial.
ra de los acreedores o a cualquiera de los deudores.
El derogado Código Civil se refería a ellas en los arts. 690 a 698 de l CC, aunque La nota característica de este t ipo de obligación, además de presentar los carac-
solo se aludía a las de prestaciones divisibles (art. 693, CC); sin embargo, para los teres propios de las obligaciones mancomunadas (plu ralidad de sujetos, unidad de
supuestos de prestaciones indivisibles, le eran aplicables a este tipo de obligacio- objeto yde causa, y pluralidad de vínculos), es que su estructura provoca la creación
nes las disposiciones de los arts. 679 a 6.89 del derogado Código Civil. de un frente común de acreedores y deudores, en donde cada uno de esos sujetos,
El Código Civil y Comercial ha logrado subsanar dicha omisión y ha puesto fin a puede comportarse como un acreedor o un deudor singula r con respecto a la tota-
las críticas doctrinarias que se le formulaban, al establecer expresamente en el art. lidad de l objeto (Llambías).
826 que: "Los efectos de la obligación simplemente mancomunada se rigen por lo Asimismo, debemos destacar que esa pluralidad de vínculos es concentrada o
dispuesto en la Sección 6ª de este Capítulo, según que su objeto sea divisible o indi- coligada, ya que los vínculos no subsisten separados o ais lados ni son indepen-
visible". d ientes entre sí, como sf ocurre en las obligaciones simplemente ma ncomunadas.
Esta pluralidad de vínculos concentrada, pues, le otorga a la obligación solidaria
4 - Supuestos previstos en el Código Civil _y Comercial una estructura u nitaria, que permite que todo lo que acontezca con uno de esos
vínculos se propague hacia los demás (v. gr., la cancelación de la deuda que efectúe
Nuestro Código Civil y Comercial prevé en su normativa numerosos supuestos
un deudor, beneficia a l resto de los codeudores), Este fenómeno de la propagación
de obligaciones simplemente mancomunadas, por lo cual mencionaremos ún ica-
mente los más usuales y relevantes: lo estudiaremos en detalle al referirnos infra a las ob ligaciones indivisibles, a las
cua les remitimos al lector.
a) Cofiadores: si hubiese dos o más fiadores de una misma deuda, que no se Por último, debemos destaca r como caracterlstica relevante de este t ipo de obli-
haya n obligado solidariamente al pago, esta se entenderá dividida entre gación, el carácter expreso de la solidaridad, debido a que e lla debe pactarse en
ellos por partes iguales, y no podrá el acreedor exig ir a ninguno de e llos sino forma inequívoca (art. 828, CCCN), puesto que en caso de duda respecto a si una
la cuota que le corresponda (art. 1589, CCCN). obligación es solidaria o no deberá estarse por su negativa. De tal modo, queda cla-
b) Mandatarios: cuando un mandato ha sido dado a muchas personas conjun- ro que la solidarida d es de ca rácte r excepciona/, por lo cual no puede presumirse:
t ame nte, no hay sol idaridad entre ellas, a menos de una conve nción en con- no existe posibi lidad a lguna de q ue se conciba una solidaridad tácita o implícita .
320 Carlos A. Calvo Costa Derecho de fas obligaciones 321

Esta disposición del art. 828 del CCCNtiene fundamento en el principio del favor También en el Derecho romano, pero con posterioridad a Ja admisión de las
debitoris que rige en materia del Derecho de las obligaciones. obligaciones correa les, comenzó a dist inguirse entre estas y las obligaciones in sofi-
dum o de solidaridad imperfecta. Estas últimas revestían el carácter de fenómeno
2 - Consecuencias de la pluralidad de vínculos ajeno a toda idea de convención, y residían en el deber de reparar el daño que
había sido ocasionado por varios sujetos: en dicho caso, todos estaban obligados
La pluralidad de vínculos produce importantes consecuencias en las obligacio- frente a la víctima por la totalidad, ya que no se concebía la posibilidad de que Ja
nes solidarias:
responsabilidad de cada uno de ellos pudiera verse d isminuida o acotada en virtud
a) Una obligación puede ser pura y simple para un acreedor o deudor y condi- de Ja responsabilidad que le competía a los otros. Se las distinguía de las obligacio-
cional o a plazo para otro (art. 830, CCCN). En este caso, el acreedor solo nes correales en lo siguiente: en estas todos los sujetos respond ían por el todo y
podrá reclamar el pago al primero, debiendo aguardar al cumplimiento de existía propagación de los efectos; en las de solidaridad imperfecta, en cambio, si
la modalidad (plazo o condición) para poder reclamar el pago al último. bien se producía el primer efecto, no se daba el fenó meno de la propagación.
b) La nulidad del vínculo ocasionada por la incapacidad de un acreedo r o deu- Con el correr del tiempo, la d istinción entre obligaciones de solidaridad perfec-
dor no afecta la validez de la obligación con respecto a los otros integrantes ta e imperfecta fue dejada de lado. Así, por ejemplo, en el'Derecho francés se sos-
del respectivo grupo si éstos son capaces, para quienes Ja obligación sigue tuvo que era imposible hablar de una sol idaridad imperfecta; se afirmaba, en con-
siendo solida ria (art. 830, CCCN). trario, que el concepto de obligación solidaria es unívoco, que la solidaridad es una
>
sola y que no es posibt€ limitar sus efectos (Demolombe). Es decir, o hay solidaridad
e) Si alguno de los deudores ha padecido un error esencial o ha sido víctima de (perfecta, se entiende) o no la hay.
dolo principal o violencia, el acto jurídico obrado por él es anulable, pero El derogado Código Civil de Vélez Sarsfield, había establecido un único tipo de
dicha nulidad es ajena a la obligación respecto de los otros deudores que no solida ridad, que encontraba tratam iento expreso en el art. 699 y siguientes. Idén-
sufrieron vicio alguno. tico criterio ha continuado el recientemente sancionado Código Civil y Comercial
á) La renuncia parcial a la solidaridad efectuada por el acreedor en provecho de la Nación.
de uno de loscodeudores no afecta el carácter solidario de la obligación res- No obstante ello, y tal como lo veremos posteriormente, se ha admitido en la
pecto de los otros (art. 837, CCCN). doctrina la existencia de las obligaciones llamadas concurrentes, convergentes o
e) Existe también independencia de las defensas que pueden hacer valer Jos conexas (mal llamadas in solidum a nuestro entender, como lo veremos seguida-
distintos obligados. Así lo dispone el art. 831 del CCCN: "Cada uno de los mente al referirnos a ellas), que son diferentes de las solidarias y distintas de las
deudores puede oponer al acreedor las defensas comunes a todos ellos. Las obligaciones de solidaridad imperfecta de las que hablaba el Derecho romano.
defensas personales pueden oponerse exclusivamente por el deudóro acree- Estas han sido incorporadas en el Código Civil y Comercial en los arts. 850 a 852. Nos
dor a quien correspondan, y solo tienen valor frente al coacreedora quien referiremos a ellas más adelante.
se refieran. Sin embargo, pueden expandir limitadamente sus efectos hacia
losdemáscodeudores, y posibilitar una reducción del monto total de la deu- 4 - Fundam ento de la solidaridad
da que se fes reclama, hasta fa concurrencia de la parte perteneciente en la La solidaridad tiene su fundamento en la idea del interés común que ha existi-
deuda al codeudor que fas puede invocar" . do al momento de la constitución de la obligación a favor o a cargo de varias per-
sonas, lo cual ha provocado que todas ellas sean aglutinadas en pos de una mejor
3 - Antecedentes históricos satisfacción de aquel interés común. De este modo, la solidaridad contribuye a la
mejor consecución de dicho interés común, brindando a los acreedores mayor
Sus orígenes se remontan al Derecho romano. Allí existía n obligaciones manco-
munadas o parciarias -por una parte- y solidarias o correa/es -por la otra-. seguridad en torno al pago que persiguen, y a los deudores facilidad en torno a él.
Como la regla general era la mancomunación (con la lógica división de la deuda o
el crédito entre tantos deudores o acreedores hubiera), las partes podían pactar el 5 - Fuentes
carácte r correal de la obligación, por lo cual cualquier acreedor podría demandar La solidaridad puede surgir de la voluntad de las partes o de la ley misma. La
a cualquiera de los deudo res el cumpl imiento del total de Ja prestación. voluntad de las partes, dentro del ámbito de Ja autonomía de la voluntad ( art. 959,
322 Carlos A. Calvo Costa Derecho de f¡JS obligaciones
323

CCCN) es la fuente más importante y corriente de la solidaridad: esta, claro .está, Debemos aclarar, si n embargo, que la renuncia a la soiidaridad pasiva pue-
puede ser ampliada o limitada convencionalmente en cuanto a sus efectos, dado de ser absoluta o relativa.
que no reviste una cuestión de orde n público.· Será absoluta, cuando el acreedor renuncia a la solidaridad e n favor de
Por su parte, existen supuestos de obligaciones en los cuales es la propia ley la todos los deudores, provocando de tal modo una novación e n la obligación
que impone la solidaridad, a fin de proteger con e l máximo rigor posible la sit ua- p rim itiva, que q ueda convertida en una obligación simplemente manco-
ción de l acreedor (Cazeaux), posibilitándose de tal modo asegurarle el cobro de su munada. Así lo dispone el art. 836 del CCCN, en cuanto dispone: "Si el acree-
crédito. Es de destacar q ue únicamente existen supuestos de solidaridad pasiva dor, sin renunciar al crédi to, renuncia expresamente a la solidaridad en
que reconozcan su fuente en la ley. benef icio de todos los deudores solidarios, consintiendo la di visión de la
deuda, esta se transforma en simplemente mancomunada".
A modo de ejemplo, cabe mencionar, entre muchos otros: En cambio, será .relativa cuando d icha renuncia la efectúa e l acreedor en
a) Actos ilícitos. Todos los autores, consejeros o cómplices de un daño ocasio- ~~~~ favor de un deudo r o varios deudores determinados. Así Jo d ispone e l art.
·!t ~r;·. 837 de l CCCN: "Si el acreedor, sin renunciar al crédito, renuncia expresa o
nado en razón de u n delit o o cuasidelito, son solidariamente responsables
frente a la víctima por la re paración del perjuicio ocasionado (arts. 275, 278, :¡< tácitamente a la solidaridad en beneficio de uno solo de los deudores soli-
1751, CCCN, e ntre otros). da rios, la deuda continúa siendo solidaria respecto de los demás, con deduc-
,_ ción de la cuota correspondiente al deudor beneficiario".
bt Fianza (art. 1590, CCCN). Esta norma dispone que la fianza será solidaria con La renuncia que efectúa el acreedor puede ser tácita o expresa. Se conside- ·,,
el deudor principal, cuando así se hubiese estipulado, o cuando el fiador ra que ha ren u nciado tácitamente, en el caso previsto por el art. 837 del
renunciare al beneficio de excusión de los bienes del deudor,. CCCN, cuando le reclama a un deudor solamente su cuota parte. Estimamos
c) Daño al consumidor. Así lo dispone textualmente el art. 40 de la ley 24.240 que si el acreedo r acepta recibir a un deudor sol o el pago de su parte, sin
(t.o. ley 24.999), que dispone que:."Si el daño al consumidor resulta del vicio reserva alguna, lo está dispensando de la solidaridad y, por e nde, libera ndo
o riesgo de la cosa o de la prestación del servicio, responderán el productor, de su obligación.
el fabricante, el importador, el distribuidor, el proveedor, el vendedor y Toda renuncia a la solidaridad puede ser ret ractada por quien la efectúa
quien haya puesto su marca en la cosa o servicio. El transportista responde- hasta tanto est a no haya sido aceptada por el beneficia rio (arg. art. 947,
rá por los daños ocasionados a la cosa con motivo o en ocasión del servicio. CCCN), ya sea aquella total o parcial, tácita o expresa.
la responsabilidad es solidaria, sin perjuicio de las acciones de repetición La renuncia parcial a la solidaridad~ solo beneficia a aquel en favor de quien
que correspondan. Solo se liberará total o parcialmente quien demuestre se ha efectuado, para quien la obligación pasa a ser simplemente manco-
·;i¿
que fa causa del daño le ha sido ajena". -'~ munada. En cambio, para e l resto de los codeudores que no han sido bene-
~"':
l :.!l ficiarios de dicha renuncia, la obl igación permanece siendo solida ria.
6 - Prueba de la solidaridad '.Cü . Ello provoca q ue la deuda del deudor beneficiario de la renuncia quede
...
·~·. disociada de la obligación de los demás deudores, y reducida a su cuota par-
Cuando la sol idaridad es de origen voluntario, la prueba de Ja so lidarid ad reca- ·.1 ~
te (es deci r, ya no responde rá fre nte a l acreedor por lo que ocurra con los
erá sobre qu ien la a lega, so pena de que la obligación sea considerada como sim- ~~·
,~;: otros codeudores-v. gr., si algu no de ellos cae en insolvencia- ); y que para
plemente mancomunada en caso de que ello no 1.o gre acreditarse. A tal fin, son
admisibles todos los medios de prueba posibles, aunque consideramos inviables la
'~~~~
;.~:
·­ los deudores ajenos a la renuncia de la solidaridad, esta tiene como efe cto
la reducción de la deuda total en la parte del beneficiario de dicha renuncia,
posibilidad de la prueba de la solid aridad mediante presunciones, aunque a lgunos ~·
~- de igual modo que si esta ya hubiera sido pagada (art. 837, CCCN).
autores -como Llambías- la admiten. ·~;r
~l. b) Por convenio del deudor con a lguno o con todos los acreedores, en caso de
~·-
7 - Extinción de la solidaridad
solidaridad activa (ta mbién se convierte en o bligación simp lemente man-
comunada). Aclaramos que no basta la mera renuncia de uno de los acree-
Existen diferentes formas de cese de la solidaridad: dores respecto de ella, sino q ue debe efectuarse mediante un convenio que
a) En caso de renuncia que de ella efectúe el acreed or, en favor de alguno o de sea suscripto por todos los acreedores y por el deudor. Si solo lo firman algu-
todos los deudores. nos acreedores con el deudor, la obl igación perma necerá como solidaria

...
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~.7.
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~
324 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 325

respecto de aquellos que no lo han suscripto, transformándose en simple- dor, no basta ndo una notificación extrajudicial (Llambías); y que dicha demanda
mente mancomunada respecto de quienes han sido parte en el acuerdo. haya sido notificada al deudor. Este principio de pr.evención resulta ser una aplica-
ción especial del principio general que reza «prius in tempore, potior in iure» {pri-
8 - Solidaridad activa mero en el tiempo, mejor en el derecho).

1- Concepto - Modos extintivos. Los modos extintivos, como lo determina el art. 846 del
CCCN, inciden sobre la obligación o sobre la cuota de algún acreedor solidario. Ello,
Existe solidaridad activa cuando la obligación está constituida a favor de varios
de acuerdo a las siguientes reglas establecidas en la citada norma: "a) la obliga-
acreedores, en donde cada uno de ellos t iene la facultad de reclamar al deudor la
ción se extingue en el todo cuando uno de los acreedores solidarios recibe el pago
total idad de la prestación adeudada.
del crédito; b) en tanto alguno de los acreedores solidarios no hayademandado el
Ejemplo: pago al deudor, fa obligación también se extingue en el todo si uno de ellos renun -
"D" adeuda S90.000a "B", "C" y " H". Si la obliga ción está sometida a una solidaridad cia a su crédito a favor del deudor, o si se produce novación, dacfón en pago o com-
activa, cualquiera de los acreedores ("B", "C" o " H") se encuentra habilitado para exi- pensación entre uno de ellos y el deudor; c) fa confusión entre el deudor y uno de
girle a "D" el pago de los$ 90.000, extinguiéndose de tal modo la obligación, sin per- los acreedores solidariossolo extingue fa cuota del crédito que corresponde a este;
juicio de las acciones internas que puedan ejercer los acreedores que no percibieron d) fa transacción hecha por uno de los coacreedor es solidarios con el deudor no es
su parte contra quien percibió la totalid.~d del crédito. oponible a los otros acr~edores, excepto que éstos quieran aprovecharse de esta".

11 - Efectos de la solidaridad activa 11.2 - Efectos accidentales

Pueden clasificarse en necesarios (son propios del carácter solidario de la obli- Imposibilidad de cumplimiento por pérdida inculpable del objeto de la obli-
gación y no pueden ser modificados por las partes sin deg radar o alterar la estruc- gación. Si ello ocurre se extingue la obligación para la totalidad de los acreedores
tura de la obligación solidaria); y accidentales (son consecuencias subsidiarias y solidarios sin responsabilidad alguna a cargo del deudor, de conformidad con lo
pueden modificarse por la voluntad de las partes sin afectar la esencia de la obli- dispuesto en el art. 955 del CCCN.
gación). Nos referiremos puntualmente a cada uno de ellos.
- Interrupción de fa prescripción. Cualquie~ acto que interrumpa la prescrip-
11.1 - Efectos necesarios
ción a favor de uno de los acreedores o en contra de uno de los deudores, aprove-
cha o perjudica a los demás. Sin embargo, es pacifica la doctrina nacional en cuan-
Derecho al cobro de la totalidad de lo adeudado. Tal como hemos manifes- to sostiene que no se propagan los efectos cuando ha existido solament e una sus-
tado precedentemente, los acreedores están legitimados para reclamar-en for- pensión de la prescripción.
ma separada o conjunta-al deudor el pago de la totalidad de la prestación. Así lo
dispone expresamente el art. 844 del CCCN: "El acreedor, o cada acreedor, o todos - Mora de uno de los acreedores. La mora de uno de los acreedores solidarios
ellos conjuntamente, pueden reclamar al deudor la totalidad de la obligación". produce también sus efectos respecto de los otros y en favor del deudor (v. gr., la
Debemos aclarar, además, que así como cualquiera de ellos puede reclamar el negativa de un acreedor a recibir el pago que efectúa el deudor, provoca que los
pago, también posee el deudor la facultad de efectuar el pago a cualquiera de los riesgos por.la eventual pérdida de la cosa se trasladen hacia todos los acreedores,
acreedores, aunque dicho derecho se verá limitado cuando ya ha sido demandado incl usive a aquellos que no han siqo los· renuentes a recibir el pago).
por alguno de los acreedores para que le efectúe el pago: en tal caso, por aplica- - Cosa juzgada. Con referencia a la eficacia de una sentencia que pudiera ha-
ción del principio de prevención, el deudor debe abonarle al acreedor reclamante. cer cosa juzgada para un codeudor frente a los demás acreedores, dispone el art.
Es importante mencionar que hasta tanto el deudor no sea notificado por el acree- 832 del CCCN: "La sentencia dictada contra uno de los codeudores no es oponible
dor que pretende cobrar, puede efectuar el pago a cualquiera de ellos: sin embar- a los demás, pero éstos pueden invocarla cuando no se funda en circunstancias per-
go, el art. 845 del CCCN establece al respecto que: " Si uno de los acreedores solida- sonales del codeudor demandado. El deudor no puede oponer a los demás coacree-
rios ha demandado judicialmente el cobro al deudor, el pago solo puede ser hecho dores fa sentencia obtenida contra uno de ellos; pero los coacreedores pueden
por este al acreedor demandante ". Para que la prevención, pues, resulte aplicable, oponerla al deudor, sin perjuicio de fas excepciones personales que este tenga
deben darse dos requisitos: que exista demanda judicial por parte de algún acree- frente a cada uno de ellos".
326 Carlos A. Calvo Costa Derecho de fas obligaciones 327

111 - Relaciones internas de los coacreedores 9 - Solidaridad pasiva


entre sí I - Noción

Como lo hemos manifestado precedentemente, queda claro que si uno de los Existe solidaridad pasiva cuando la obligación es contraída por varios deudores,
acreedores ha percibido la totalidad del crédito, debe entregar a los otros coacree- y cada uno de ellos está constreñido a satisfacer al acreedor la totalidad de la pres-
dores la parte que les corresponde a éstos. Si no lo efectúa, quienes no hayan cobra- tación debida. Este tipo de solidaridad constituye una gran ventaja para el acree-
do podrán ejercer contra qu ien percibió la totalidad del crédito acciones judiciales do r, toda vez que la insolvencia de cualquiera de sus deudores no lo afecta, ya que
t endientes al reclamo de sus partes respectivas. puede d irigir su acción contra el resto de los obligados.
Ello resulta ser consecuencia lóg ica del principio de participación consagrado
en el art. 847 del CCCN que determina que: "Los acreedores solidarios tienen dere- Ejem plo:
cho a la participación con los siguientes alcances: a) si uno de los acreedores soli- "D", "C'' y "H" adeudan$ 300.000a "B" en razón de una obligación de pago
darios recibe la to talidad del crédito o de la reparación del daño, o más que su cuo- por un contrato de compraventa, en donde se ha pact ado la -so lidaridad de
ta, los demás tienen derecho a que les pague el valor de lo que les corresponde con- los code udores. En virtud de e llo, cua lq ui era de los tres de udores ("D", "C" o
forme a la cuota de participación d e cada uno; b)en los casos del inc. b)del a rt. 846, "H") está n obligados fre nte a " B" por e l t otal de la obl igación: ello sig nifica
los demás acreedor es solidarios tienen derecho a la participación, si hubo renuncia que el acreedo r pued e reclamarle a cualquie ra de los t res el pago de los
al crédito.o compensación legal por la cuota de cada uno en el crédito o riginal; ysi $ 300.000, sin perjuicio de las acciones internas que estará legiti mado a ejer-
hubo compensación convencional o facultativa, novación, dación en pago o tran- cer el deudo r que ha satisfecho el interés del acreedor por sí solo respecto de
sacción, por la cuota de cada uno en el crédito original, o por la que corresponde- los otros code udores que nada han pagado.
rla a cada uno conforme lo resultante de los actos extintivos, a su elección; c) el
acreedor solidario que realiza gastos razonables en interés común tiene derecho a 11 - Efectos de la solidaridad pasiva
reclamar a los demás la participación en el reembolso de su valor". Las determ ina-
ción de las cuotas de participación de los acreedores solidarios se hará, sucesiva- También pueden clas ifica rse en necesarios y accidentales.
mente, como lo det ermina el art. 841 del CCCN de conformidad a: " ... a) lo pacta- //. 1 - Efectos necesarios
do; b) la fuente y la finalidad de la obligación o, en su caso, la causa de la respon-
sabilidad; c) las relaciones de los interesados entre sí; d) las demás circunstancias". Exigibifidad del cobro total. Constituye un efecto principal y necesario de la
Se establece, finalmente, que si por aplicación de estos criterios no es posible deter- solidaridad pasiva, que el acreedor tenga la facultad pa ra pretender la t otalidad de
minar las cuotas de contribución, se e ntiende que participan en partes iguales. la prestación debida a cualquiera de los codeudores, ya sea en fo rma conjunta o a
Es importante destacar que, como surge del texto del citado art. 847, e l princi- cada uno de ellos por sepa rado. Se desprende, pues, del art. 833 del CCCN que
pio establecido en esta norma no es solo aplicable al su puesto del pago, sino a cua l- cuando el acreedor dema nda a uno de los deud ores, agota su derecho de poder re-
quie r otro modo de satisfacción de l interés del acreedor (por ejemplo, novació n, querir el cobro al resto de los obligados, a no ser q ue el deudor accionado por él
compensación, etcétera) susceptible de hacersu rgi r la de uda interna entre los coa- resulte ser insolvente. Nuestra doctrina sostiene que la dema nda dirig ida contra la
creedores. Asimismo, las relaciones de los codeudoresy acreedores solidarios entre totalidad de los deudores posee la ventaja de q ue la sentencia a dictarse surtirá
sí q ue hubiesen pagado la deud¡:i por e ntero, o que la hubiesen recibido, se reg la- efecto contra todos ellos.
rán como está dispuesto en los arts. 820 y 821 del CCCN, que anal izaremos a l refe-
- Propagación del efecto extintivo. Consideramos que resulta evident e que,
rirnos a las obligaciones divisibles e indivisibles.
en forma análoga a lo que ocurre en los casos de solidaridad activa, si el acreedores
satisfecho en cuanto a su inte rés por cualquiera de los deudores, la obligación se
IV - Muerte de un acreedor
extingue con respecto al resto de los codeudores, aunque éstos nada hayan apor-
Dispone e l art. 849 del CCCN que si fallece uno de los acreedores solidarios, e l tado para ello. Es una consecuencia lógica del principio de propagación. Con res-
crédito se divide entre sus herederos en proporci ón a su participación e n la heren- pecto a los modos extintivos de la solidaridad pasiva, dispone expresamente el art.
cia. Y agrega la norma que después d~ la partición, cada heredero tiene derecho a 835 del CCCN: "Con sujeción a disposiciones especiales, los modos extintivos inci-
percibir según la cuota que le corresponde en el haber hereditario. den, según el caso, sobre la obligación, o sobre la cuota de algún deudor solidario,
328 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones
329
conforme a las siguientes reglas: a) la obligación se extingue en el todo cuando
efectúa el pago puede repetirlo de los demás codeudores segl[n la participación
uno de /os deudores solidarios paga la deuda; b) la obligación también se extingue
que cada uno tiene en la deuda. La acción d e regreso no procede en caso de haber-
en el todo si el acreedor renuncia a su crédito a favor de uno de los deudores soli- se remitido gratuitamente la deuda".
darios, o si se produce novación, dación en pago o compensación entre el acreedor
As imismo, no o bstante esta acción de regreso, se le confie re al codeudorque ha
y uno de los deudoressolidarios; c) la confusión entre el acreedory uno de los deu-
pagado e l tota l de la de uda, la posibilidad de subrogarse e n el luga r y rango que
dores solidarios solo extingue la cuota de la deuda que corresponde a este. La obli- ocupaba e l acreedor (cfr. art. 915, CCCN) .
gación subsistente conserva el carácter solidario; d) la transacción hecha con uno
de los codeudores solidarios, aprovecha a los otros, pero no puede serles opuesta".
IV - Insolvencia de uno de los deudores

11.2 - Efectos accidentales Una de las cuestio nes importantes que también resta ana lizar, es e l caso de la
- Interrupción de la prescripción. Cualquier acto interruptivo de la prescrip- insolvencia de a lg u no de los codeudores solida rios: es deci r, al momento de inten-
ción en favor de uno de los acreedores o en contra de uno de los deudores, apro- t ar ejecutar la obligación, uno de los codeudores resulta se r inso lvente. El Cód igo
vecha o perjudica al resto (dr. arts. 839 y ces., CCCN). Somos contestes, por nuestra Civil y Comerci al ha estableci do como solución pa ra dicha situación, que la insol-
parte, con la doctri na que-ante el vacío normativo-sostiene q ue no se propaga vencia de uno de los deudores no perjudica al a creedor sino al resto de los deudo-
los efectos en caso de suspensión de la prescripción. res, disponiendo expresamente en e l art. 842: "La cuota correspondiente a los
codeudores insolventes es cubi erta por todos los obligados".
- Intereses. El derogado Cód igo Civil de Vélez Sarsfield establecía en el art.
Ejemp lo:
714 que la demanda d e intereses e ntablada contra cualquiera de los deudo res soli-
darios, provoca que ellos corran respecto de todos los codeudores. Si bien el Códi- En caso que expusimos anteriormente, donde HD", "C" y "H" adeudan solidariamen-
go Civil y Comercial nada d ispone al respecto, estimamos que no hay ni ngún obs- te S 300.000 a uB", la insolvencia de cua lquiera de aquellos hará que los otros dos
tácu lo para que se siga aplica ndo e l mismo criterio en la actu_a lidad, a la luz de los codeudores deba n asumir a prorrata la parte del insolvente (S 100.000, si es que se
p rincipios generales que rigen en la materia. habían pactado porciones de la deuda igua les).

- Cosa juzgada. L.a cosa juzgada recaída en juicio es invocable por los coacree- V - Muerte de un deudor
dores, pero no resulta ser oponible a los codeudores que no fueron parte en el jui-
Dispone el a rt. 843 del CCCN que ante e l fallecimiento de uno de los de udores
cio ( art. 832, CCCN). Estos pueden desconocer la sentencia dictada en ese pleito,
solidarios, si e st e deja varios herederos, la deuda ingresa en la masa ind ivisa y cua l-
dado que para ellos resulta inoponible al no habe r participado en e l juicio.
quiera de los acreedores puede oponerse a q ue los bienes se e ntreg uen a los he re-
- Defensas oponibles por los codeudores. Los codeudores solidarios est án fa- deros o legatarios sin haber sido previamente pagado. Ag rega la norma que des-
cu ltados para oponer a l acreedor las defensas comunes y pe rsonales (dr. art. 832, a
pués de la partición, cada heredero está obligado pagar segú n la cuota q ue le
CCCN, párr. 2º). Son comunes todas aquellas defensas que pueden se r opuestas por corresponde en el haber he reditario.
cualquie ra de los deudores (v. gr., invoca r la nulidad de la obligación por ado lecer
de vicios), mientras que son personal es aquellas q ue resultan ser exclusivas d e uno
§ 22. Obligaciones divisibles e indivisibles
de los deudores y que solo pueden ser opuestas po r este·y no por los d emás (v. gr.,
si la nulidad se basa en un vicio" de dolo o violencia que d ice haber sufrid o e l deud or a) Nociones preliminares.
demandado). Concepto

111 - Relaciones internas de los codeudores entre sí Como lo hemos manifestado precedenteme nte, t ant o las obligaciones simple-
mente mancomunadas corno también las solidarias, pueden ser de objeto d ivisible
El codeudor solidario que ha log rado desinteresa r al acreedor, provocando en
o indivisi ble, según este pueda o no ser fraccio nado .
co nsecuencia la liberación del resto de los codeudores solidarios, tiene una acción
Nuestro Cód igo Civil y Comercia l, dispo ne al respect o, en el art. 805: " Obliga-
de re greso contra los otros ca-o bl igados, pero únicament e hasta el límite des u cuo-
ción d ivisible es la que tiene por objeto prestaciones susceptibles de cumplimiento
t a parte en la obligación, conforme surge del art. 840 del CCCN: "El deudor que
parcial".
330 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 331

En virtud de ello, estudiaremos por separado las obligaciones divisibles e indivi- En este caso, pues, queda demostrado cómo la divisibilidad del objeto (la entrega de
sibles y los principios que rigen en ambos supuestos. diez terneros) no determina la división de la obligación.

b) Obligaciones divisibles 2 - Antecedentes históricos

1- Introducción Los primeros antecedentes y principios respecto a este tema se encuentran en el


Derecho romano, ta l como lo refiere Vélez Sarsfield en la nota al Títu lo XII ("De las
A priori, debemos destacar que la definición brindada por el art. 805 de! CCCN obligaciones d ivisibles e indivisib les") del Li bro 11, Sección 1del Código Civil, en don -
está realizada en función de la aptitud que posee el objeto de la obligación para de expone que sigue sus lineamientos, apartándose en consecuencia de los cód igos
ser fraccionado. eu ropeos y americanos del siglo XIX {que siguieron a su vez al Code francés de
Ejemplo: Napoleó n), pues considera que contiene n erro res de importancia. Por ello, advier-
te el codificado r que" ... nuestros fundamentos serán únicamente las Leyes de Par-
En este sentido, ninguna duda cabe que una obligación que consista en la entrega de
tida, y el Derecho roma no , donde se hallan los verdaderos principios de esta mate-
un caballo la calificaremos como indivisible -puesto que el caballo no admite frac-
r ia".
cionamiento alguno-, mientras que una obligación de dar sumas de dinero, puede
ser catalogada como divisible, ya que el objeto de la obligación en este caso posibili- El sistema francés, descartado por Vélez Sa rsfield en este tema, se fun daba en el
ta que sea fraccionado. pensamiento de Dumoulin, qu ien hacia el si glo XVI sostuvo en su obra Extricatio
laberinthi dividui et individui que en materia de obligaciones, la regla general era
la divisibilidad, por lo cua l la indivisibil idad solo constituía una excepción a ella.
Ahora bien, esta clasificación adquiere trascendencia en caso de que exista plu-
Est a idea fue luego segu ida en el Derecho francés por Pothier-quien le introduce
ralidad subjetiva en el rol activo y/o pasivo de la obl igación, ya que si existen un úni-
modificaciones que luego son re cog idas por el art. 1217 del Codeque habla de d ivi-
co acreedor y un único deUdor en los extremos de la obligación, esta debe repu-
sión int electual-, Demolombe, Marcade, Aubry-Rau, entre otros.
tarse como indivisible. Así lo determina expresamente el art. 807 del CCCN; en
cuanto establece que: "Si solo hay un deudor y un acreedor, la prestación debe ser
cumplida por entero, aunque su objeto sea d ivisible". 3 - El sistema del derogado Código Civil de Vélez Sarsfield
Esta d isposición guarda íntima relación con la regla general que impera en y del actual Código Civil y Comercial
materia de pago - como lo veremos en el Capítulo V- que consagra el principio Vélez Sarsfield, siguiendo las enseñanzas de romanistas como Maynz y Savigny,
de integridad: "Integridad. El acreedor no está obligado a recibir pagos parciales, y especialmente inspirado en el pensamiento de Freitas, había dejado de lado el cri-
excepto disposición legal o convencional en contrario. Si la obligación es en parte terio francés que adm ite la división intelectual en razó n de las críticas de la doctri-
líquida yen parte ilfquida, el deudor puede pagar la parte líquida" (art. 869, CCCN). na de su época que había recibido la solución legal prevista por el Codeen est e
Solamente, entonces, puede tener trascendencia dicha clasificación en avsen- tema, refiriéndose únicamente ento nces a la división física o material. Por el con-
cia de pluralidad de sujetos, si el acreedor y el deudor pactan expresamente que la tra rio, el derogado Código Civil solo admitía en el art. 679 la posibi lidad de frac-
obligación sea cumplida mediante pagos parciales. cionami ento físico en cuanto al cumplimiento de la prestación debida, para cat a-
Además, consideramos -al igual que lo hace una calificada doctrina (Busso, logar a la obligación como d ivisible, descartando de plano cualquier posibilidad de
Alterini - Ameal - López Cabana; Pizarro - Vallespinos)- que no debe confundirse divisib ilidad intel ectual. Este m ismo criterio ha sido continuado por el Códig o Civil
divisibi lidad con división. Ello así puesto que la divisibilidad es una posibilidad que y Comercial, al establecer en el art. 814 que "Hay ind ivisibilidad: a) si la prestación
permite la división, pero que no la determina por sí misma. no puede ser materialmente d ividida( ... )".
Ejemplo: En definitiva, en materia de d ivisibi li dad e indivisibilidad, el Código Civil y Co-
"D" debe entregara "A" diez terneros el día 30de marzo de 2015. Si bien en este caso mercial arge ntino dispone:
la prestación es susceptible de ser fraccionada {divisibilidad), al no estar pactada entre a) La divisib ilidad de la obligaci ón depende exclusivamente de la naturaleza
las partes la posibilidad de que dicho pago se efectúe en forma fraccionada-v. gr., en de la prestación y de su -aptitud para ser fraccionada {cfr. art. 806, inc. a,
tres veces-, el pago debe realizarse en un acto único, convirtiéndolo en indivisible. CCCN) . No hay, pues, otra divisibilidad que la natural (si el objeto de la obli-
332 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones
333
gación no posee aptitud para ser fraccionado, no podremos nunca hablar
1 - Si bien las o bligaciones de hacer son generalmente ind ivis ibles, pueden
de una obligación divisible).
darse supuestos en los cuales se admita el fraccionamiento. Claro está que, a nues-
b) La indivisibilidad, en cambio, no dependerá únicamente de la natural eza de tro entender, se tratan solo de casos éxcepcionales. Para que ello ocurra, la presta-
la prestación y de su falta de aptitud para ser fraccionada, sino también de ción debe se r susceptible de descomposición en una serie de actuaciones fungibles,
la voluntad de las partes (cfr. arts. 814, inc. by 959, CCCN) que pueden pac- es decir, sustituibles unas por otras, al ser cualitativamente idénticas y conservar su
tar convertir a una obligación en indivisible aun cuando su objeto sea mate- valor e co nómico. Ello suele darse fre cuentemente en la locación de se rvicios, aun-
rialmente susceptible de fraccionamiento (v. gr., el acreedor y el deudor que resulta extraño que ocurra en la locación de obra (v. gr., la obligación de cons-
pueden acordar que la ob ligación se cumpla sin fraccionamiento aun cuan- truir una casa es indivisible; en cambio, puede considerarse divisible la obligación
do el objeto de la obligación físicamente lo permita). de fabricar cien tractores).

2 - En cuanto a las obligaciones de no hacer, y la posibilidad de fracciona-


4 - Requisitos de la divisibilidad o fraccionamiento
miento, no podemos soslayar que la cuestión ha dividido a la doctrina nacio na l.
Para que se admita la divisibilidad de una obligación de sujeto plural, deben Mientras que para algunos autores las obligaciones de no hacer son siempre indi-
observarse una serie de recaudos establecidos por el Código Civil argentino: visibles, ya que cualquier violación parcial al deber general de abstención implica
a) Que la prestación sea divisible, es decir, que sea susceptible de ser material- incumplimiento (Alterini - López Cabana - Mayo), para otros pueden ser divisibles
mente fraccionada (cfr. art. 806, inc. a, CCCN). , (Busso, Cazeaux, Lafaille), criterio -este último-que ~ambién sostenía Vélez Sars-
fie ld en el derogado ait. 671 y su nota del ce anterior,"en donde brinda (citando a
b) Que no quede afectado "significativamente el valor del objeto, ni ser antie- Marcadé) el siguiente ejemplo: "Si os habéis obligado a no cortar si no cincuenta
conómico su uso y goce, por efecto de la división" (art. 806, inc. b, CCCN). hectáreas del bosque de vuestro campo, para que yo pueda cazar en las restantes,
Con respecto al recaudo legal de que no se afecte el valor del objeto, debe- y cortáis cien hectáreas, vuestra obligación queda violada en parte. Ella es pues
mos decir que la exigencia es razonable y lógica: si nos encontramos con una divisible aunque consiste ' in non faciendo' ... ".Por nuestra parte, también estima-
estatuilla de oro de4 kg. de peso, seguramente que físicamente puede divi- mos que la obligación de no hacer puede ser divisible, como queda demostrado
dirse en dos partes de 2 kg. de oro cada uno, pero ello provocará una dismi- con las ejemplificaciones expuestas a continuación .
nución del valor económico de la cosa y además la estatuilla dejaría de ser
Ejemplos:
tal al ser partida por la mitad. Asimismo; resulta entendible también el
requisito en torno a que con la división no se transforme en antieconómico 7) Si uno de los copropietarios de un campo constituye en mi favor una servidumbre
el uso y aprovechamiento de la cosa: si tenemos una unidad económica de paso y otro de los condóminos me impide atravesar por él, se produce un supuesto
compuesta por dos lote~ de terreno que deben ser divididos entre dos per- de incumplimiento total de la obligación (en este caso es indivisible); en cambio,
sonas, en donde por el t erreno superior pasa un arroyo que sirve de rieg o 2) Si yo poseo un local comercial en donde exploto una librería y tres comerciantes se
para el terreno inferior en donde se hallan plantaciones, ninguna duda nos h.a n comprometido a no competir conmigo en una zona determinada, se debe dife-
asiste que la única manera de admitir el fraccionamiento sin convertir en rencia r si tal abstención la han violado solo uno de ellos, dos o los tres (en este supues-
to, entendemos, la obligación de hacer es divisible).
antiec;onómico su uso y aprovechamiento, es efectuarlo en form.a vertical,
de modo tal que al d ividi rse cada una de las personas posea una mitad del
terreno superior y una mitad del terreno inferior. Estimamos que las obligaciones alternativas que tienen por objeto prestaciones
de naturaleza opuesta, no pueden ser consideradas como divisibles o indivisibles
sino después de la opción del acreedor, o del deudor con conocimiento del acree-
5- Aplicaciones del principio de fracciona miento
dor. Un criterio sim ilar era el que establecía e l Código Civil de Vélez Sarsfield en e l .
en otras clases de obligaciones
derogado art. 672, aunque el Código Civil y Comercial guarda silencio al respecto .
Debemos analizar la implicancia que pueden llegar a tener los principios de las Ejemplo:
obligaciones divisibles, cuando nos encontramos ante supuestos de obligaci ones
de hacer y de no hacer, así como también ante casos de obligaciones alternativas y Si"Juan " y "Pedro " deben entregar a "Carlos" un automóvil PeugeotO km. o S 100.000,
facu ltativas. si optan por entregar el automóvil, la obliga ción será indivisible; si, en cambio, eligen
entregar e ldinero, entonces la obligación será de objeto divisible (aunque aclaramos.
334 Carlos A. Calvo Costa Derecho de.las obligaciones 335

ello no determinará automáticamente la d ivisión de la obligación, si es que las partes V - Pago


no han pactado la posibi lidad de rea liza r pagos parciales, dado que impera en mate-
ria de o bl igaciones-como hemos advertido anteriormente-el princip io de integri-
Si el único deudor de la obligadón paga m ás de su parte de la deuda, d ispone el
dad del pago del art. 869 del CCCN). art. 81 Odel CCCN que: "a) si lo hace sabiendo que en la demasía paga una deuda
ajena, se aplican las reglas de la subrogación p or ejecución de la prestación por un
En las obligaciones facultativas, la divisibilidad o indivisibilidad quedará deter- tercero; · b) si lo hace sin causa, porque cree ser deudor del todo, o porque el acre-
minada en función de la prestación principal (art. 786, CCCN), ya que esta es la úni- edor ya percibió la demasía, se aplican las reglas del pago indebido ".
ca debida in obligatione. -
VI - Limitaciones
6 - Efectos de la divisibilidad entre acreedores y deudores Dispone el Código Civil y Comercial la limitación al principio de la divisibilidad,
Es importante recorda r que para que los prin cipios de la divisibil idad sean apli- cuan en el art. 809 determina: " La divisibilidad de la obligación no puede invocar-
cabl es debemos estar frente a una obligación de pluralidad subjetiva, ya sea activa se por el codeudor a cuyo cargo se deja el pago de toda la deuda". De tal modo,
o pasiva. También resulta menester mani f~star que el sistema normativo aplicable concluimos, el deudor podrá ser demandado por el todo de la obligación, salvo sus
a las ob lig aciones divisibles es similar al establecido para las obligaciones simple- derechos respecto a los otros codeudores o coherederos.
mente mancomunadas, por lo cual correm os el riesgo de fatigar al lector con la rei-
teración de ciertas disposiciones normativas, aunque d e todos modos res ulta nece- VII - Otros modos extintivos
sario exponerlas.
Como consecuencia del fraccionamient o, al constitu irse tantas obligaciones
I - Principio general
autónomas e independientes como sujetos vinculados exista n, debe quedar claro
En primer lugar, debemos mencionar que el prjncipio_general en las obligaciones que lo que ocu rra con alguno de ellos no afecta a los otros (arg. art. 825, C(CN). En
divisibles, es que la obligación se divide en t antas partes como acreedores o deudo- razón de ello, las dist intas ob ligaciones q ue se han origi nado a causa de la división,
res haya, las que se consideran como si constituyesen otros t antos créditos o deudas pueden extinguirse por cualqu ier medio previsto por la ley, sin que los efectos
distintos los unos de los otros (art. 808, CCCN). extintivos respecto de un acreedor y de un deudor alca ncen a los demás.

11 - Exigibilidad
VI// - Efectos de la prescripción
Por lo tanto, cada acreedor tiene derecho a exigir la parte del crédito que le y dela mora
corresponde, y cada deudor el deber de pagar su cuot a parte (arts. 808 y 81 O, CCCN).
Los efectos de la suspensión o interrupción de la prescri pción son personales y
Ejemplo: no se propagan a los demás coacreedores y codeudores (arts. 2540 y 2549, CCCN).
"A" y " B" deben entregar a "C" y "D" $ 200.000. En tal caso, "C" y D" se verán libera- De igual manera, la mora de uno de los deudores no tiene efect o con respecto a los
dos de la obligación cumpliendo con el pago de su cuota parte ($ 100.000) si la obli- otros coobligados.
gación fuera d ivisible en partes ig uales; en idéntico sentido, "A" y "B" serán satisfe-
chos al recibir cada uno de ellos la parte d el crédito que les correspondiere ($ 100.000). IX - Cosa juzgada

'/// - Criterio de la división


La sentencia dictada en un proceso judicial solo perjudica o beneficia a los coa-
creedores o codeudores que intervin ieron en él, no revistiendo el carácter de cosa
Es de d estacar que en caso de no haber convenció n expresa al respecto, la divi- juzgada para quienes no hayan participado en el pleito.
sión del crédito y de la d euda se opera en partes iguales (art. 808, CCCN) .

IV - Pluralidad sobreviniente X - Supuesto de solidaridad

Si la pluralidad de sujetos essobreviniente, por muerte del acreedo r y/o del deu- Dispone expresamente el art. 8 12 del CCCN: "Si la obligación divisible es además
dor, la divisió n se ef ectúa en proporción a la parte por la cual cada uno de ellos es solidaria, se aplican las reglas de las obligaciones solidarias, y la solidaridad activa
llamado a heredar. o pasiva, según corresponda".
336 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones
337
7- Efectos de la divisibilidad entre coacreedores
e l art. 8 13 del CCCN, dispone: "Son indivisibles las obligaciones no susceptibles de
y codeudores
cumplimiento parcial".
la divisibilidad de la obliga ción tambi én produce determinados efectos en las
relaciones internas: Ejemplo:

a) Reintegro. En t oda obligación divisible, si bien cada deudor está obligado "A" y " B" deben entregar a "C" y "O" una mesa italiana de crista l.
al pago de la parte de la deuda que le corresponde, puede ocurrir que haya
pagado e n exceso o que e l acreedor haya percibido más de lo que le corres- Ahora bien, la indivisibil idad es p rimordialmente objetiva u ontológica , pues
ponde. En estos supuestos, e l deudor que pagó puede sol icit ar e l reinteg ro está basada en la natura leza no fraccionab le de la prestación. Sin embargo, tam-
de lo pagado en exceso a los demás codeudores que deben contribuir al pago bié n la indivisib ilidad puede ser intencional o convencional: ello se da cuando las
d e acuerdo co n sus cuotas-partes de la deuda; de igual modo, el acreedor partes acuerdan que e l cumpl imiento de la ob ligació n -a un cua ndo la presta-
que cobró en exceso debe distribuir lo que ha percibido de más entre los ción sea d ivisible-debe ser total para que resulte útil. Aquí ca rece de importan-
otros coacreedores, atendiendo a las cuotas-partes de cada uno de ellos. cia la natu raleza de la prestación adquiriendo relevancia la vol'Untad de los suje-
Claro está que también el acreedor que percibió de más queda obligado tos que son parte en la obligación: son el acreedor y el de udor, pues, quienes le
frente al deudor que le pag ó en exceso a re integrarle el excedente: en t al otorgarán e l carácter de indivisible a la obligació n cua ndo la prestación por natu-
caso, el deudo~ cuenta a su favor con una acción de repetición a tal fin. Res- raleza no lo es.
pecto al derecho de reintegro, dispone expresamente el art. 81Odel CCCN: Ejemplo:
" Der echo al reintegro. En los casos en que el deudor paga más de su parte
en la deuda: a) si lo hace sabiendo que en la demasía paga una deuda ajena, "Germán" y "María" deben e ntregar a • Jorge" cinco cachorros de la raza canina ove-
se aplican las reglas de la subrogación por ejecución de la prestación por un jero alemán. Si bien se trata d e una obligació n que posee una prest ación divisible
(dado que pued e cumplirse parcialmente, entregándose dos perros primero y los tres
tercero; b) si lo hace sin causa, porque cree ser deudor del todo, o porque el
restantes en otro moment o), las partes pueden pactar que para que haya cumpli-
acreedorya percibió la demasfa, se aplican las reg las del pago indebido". ' miento de la obligación se deben e ntregar los cinco cachorros en u n mismo acto. Las
b) Criterio legal de contribución o distri bución. la medida de la contribución partes' convenciona lmente son quienes han introducido el carácter de indivisibilida d
por parte de los codeudores y de la distribución por parte de los coacreedo- a una obligación que posee una prestación que ontológ icamente no lo es.
res, en la relación interna, se efectúa considerando la cuota parte que
corresponde a cada uno de ellos en la deuda o en el crédito divisible. A tal la ind ivis ibilidad co nvenciona l, que está prevista en e l art. 814, inc. b) del CCCN,
fin, para determinar cuál es la cuota parte que le pertenece a cada uno, dis- había sido ya a ceptada también por Vé lez Sarsfield en las notas a los arts. 670 y
pone el art. 811 del CCCN qu e deb~ se guirse el siguiente orden de prelación 3007 del derogado Código Civil.
establecido por el art. 841 del mismo cuerpo legal: lo que las partes hayan Sin perj uicio de lo que dispone el aft. 812 del CCCN, en cua nto dispone que "si
pactado sobre la cuota parte e ntre los acreedores y los deudores; la fuen te la obligación divisible es además solidaria, se aplican las reglas de las obligaciones
y finalidad de la obligación, o, en su caso, la causa de la responsabilidad; a solidaria" (lo cual provoca, en definitiva, la im posición de la indivisibilidad en ta l
las demás circunstancias; y, en el caso de no poder determinarse las cuotas- caso), estimamos .que - técnicamente- la obligación indivisible por convención
partes por ninguno de dichos conductos, las cuotas-partes serán consid~ra­ de partes no debe ría confundirse con la obligación solidaria, con !a que existe una
das iguales. notable diferencia: mientras que en esta última se atiende a la estructura del víncu-
lo, ello no o curre en la indivisibilidad convenciona l que halla su fundamento en la
e) Obligaciones indivisibles
fina lidad perseguida por las partes en torno al cumplimiento de la obligación. En
definitiva, el carácter convencional que coloca a la obligación en la categoría de
- Introducción. Indivisibilidad indivisible, no la convierte en obligación solidaria, y po r ende, no de be n aplicarse
objetiva y convencional a ella los principios que rigen la solidaridad de 1a obligación.
Son obligaciones indivisibles aquellas de sujeto plural que, de acue rdo a la natu- Ell o así puesto que en la ob ligación indivisible, como consecuencia de la natu-
raleza de la prestación, no pudiesen ser cumplidas sino por e nte ro. Textualme nte, raleza p ropia de la prestación, e l cumplimie nto debe ser exigido por entero: e l
interés del acreedor solo se verá satisfecho cuando la ob ligación es cumplida en su
338 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 339

totalidad. Obsérvese, sin embargo, que la exigibilidad del tota l de la prestación se internas que puedan existir entre los code udores y entre los coacreedores en
produce no porque el acreedor lo sea por el todo de la obligación o porque cada razón del pago y del cobro en exceso que ha existido.
codeudor esté obligado al todo, sino porque no puede demandar una parte al no
admitir fraccionamiento la prestación objeto de la obligación." Sin perjuicio de la claridad conceptual de este principio, debemos advertir que
no se propagan los efectos de los hechos independientes de la prestación ocurridos
2 - Aplicaciones legales del criterio entre uno de los coacreedores y uno de los codeudores, que solo t ienen virtualidad
de indivisibilidad entre ellos -v. gr., los efectos del pago se propagan, pero no los de la cosa juzga-
da- (Alterini -Ameal - López Cabana).
Es de destacar que también existen en nuestro sistema jurídico muchos supues-
tos de indivisibilidad legal, es decir en donde tal carácter viene impuesto por la pro-
pia ley. Ello se da, especialmente, en los supuestos previstos por el art. 815 del 11 - Principio de prevención

CCCN, que dispone: "Se consideran indivisibles las prestaciones correspondientes Tratándose de una obligación indivisible, este principio determina que el coa-
a las obligaciones: a) de dar una cosa cierta; b) de hacer, excepto si han sido conve- creedor que demanda el pago de la deuda a uno de los codeudores tiene derecho
nidas por unidad de medida y el deudor tiene derecho a la liberación parcial; c) de a cobrar con preferencia respecto de los otros coacreedores. Claro está que en
no hacer; d) accesorias, si la principal es indivisible". dkho caso, es el deudor demandado quien debe efectuar el pago al acreedor que
lo previno. Estimamos que el principio de prevención rige en esta cl~se de obliga-
" 3 - Efectos principales de la indivisibilidad e ntre acreedores ciones, a tenor de lo dispuesto en el art. 823 del CCCN, que establece que las nor-
y deudores. Los principios de propagación y prevención mas relativas a las obligaciones solidarias son subsidiariamente apl icables a las
.~ obligaciones indivisibles. En razón de ello, resu lta de aplicación lo dispuesto en el
La principal consecuencia de la indivisibilidad de la obligación es que cada uno
art. 845 del CCCN para las ob ligaciones solidarias, que alude a la prevención de un
de los coacreedores está facultado para pretender el cob ro de la totalidad del eré- · ~· acreedor, es deci r, al derecho de cobrar que t iene el acreedor de una obligación
dito y cada uno de los codeudo res está obligado al pago total de la deuda. En razón ~· solidaria que ha demandado judicialmente el cobro al deudor.
de ello, adquieren sideral importancia dos principios que resultan determinantes ~;t;--~
a la hora de analizar las obligaciones indivisible.s: Ejemplo:
--· ~

I - Principio de propagación Siguiendo con e l mismo caso que vimos precedentemente, en donde" A" y "B" deben
entregar a "C" y "D" un ca ballo de carrera, tanto" A" como "B" tienen la facultad de
Los hechos ocurridos entre uno de los coacreedores y uno de los codeudores en pagar a " C" ya "D". Pero si "C" demandara a "B" la entrega del caba llo (antes de que
torno al cum plimiento de la obligación, producen efectos entre ellos y se propagan lo hiciera "D " con el mismo "B" o con" A"), en razón de este principio de prevención,
respecto del resto de los otros coacreedores y codeudores. Ello emana como lógica so lamente " B" puede cancelar la obliga ción haciéndole entrega del caballo a "C".
consecuencia de lo dispuesto por el art. 817 del CCCN, en cuanto a que: " Cualquie-
ra de los codeudores tiene derecho a pagar la totalidad de la deuda a cualquiera de Ahora bien, de conformidad con lo dispuesto por.el citado art. 845 del CCCN,
los acreedores", por lo cual es indudable que el pago hecho por cualquiera de los para que se formalice la prevención se requiere la promoción de una demanda
codeudores a cualquiera de loscoacreedores, extingue la obligación y libera al res- judicial una vez que la deuda sea exigible, no siendo suficiente el reclamo extraju-
to de los codeudores a causa de Ia propagación del efecto extintivo. dicial que el acreedor efectúe por medio fehacie nt e a cualquier codeudor. Estima-
mos que si la demanda se iniciara antes de que se config ure la exigibilidad de la
Ejemplo: deuda, la prevención no se produce y el principio no se aplica. Pero, además, y aun
"A" y "B" deben entregar a " C" y "D" un caba llo de carrera . Si "A" hiciera cua ndo el art. 845 del CCCN no lo mencione, estimamos que la demanda debe ser
entrega de dicho caballo a " D", la obligación queda extinguida. Pero, claro notificada al codeudor, ya que de lo contrario este no estaría en condiciones de
está, dichoefectoextintivosepropagatambién respecto de " B"yde " C" que conoce r la pretensión del acreedor que intenta prevenirlo.
no participaron en el momento del pago, por lo cua l ni "C" podrá ya recla- Por ú ltimo, debemos destacar que si la demanda es iniciada en forma co njunta
marle a "B" la entreg.a del caballo ni este está obligado ya al pago respecto por dos o más acreedores, el pago, entonces, debe efectuarse también conjunta-
de sus originarios acreedores. Ello, cla ro est á, sin perjuicio de las acciones mente a t odos ellos.
340 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 341

4 - Otros efectos de la indivisibilidad entre acreedores y deudores la prestación sea de dar cosas inciertas no fu ngibles en la que el o los acreedores y
En virtud de la indivisibilidad de la obligación, se suscitan otros efectos que tam- el o los deudores te ngan, respectivamente, el derecho de elección {Cazeaux). Una
bién son de importancia y merecen destacarse: · vez efectuada la compensación entré un acreedor y un codeudor, entendemos que
la obligación queda exti nguida para todos, ya que los efectos de la compensación
también se propagan.
I - Exigibilidad

Ta l co mo lo determina el art. 816 del CCCN: "Cada uno de los acreedores tiene IV - Insolvencia
derecho de exigir la totalidad del pago a cualquiera de los codeudores, o ·a todos
Estimamos que, conforme emana del art. 816 del CCCN, la insolvencia de uno de
elfos, simultánea o sucesivamente ". La solución normat iva resulta lógica y razo-
los codeudores perjud ica a los demás pero nunca al acreedor, ya que este se
nable, ya que al no admitir fraccionam iento la prestación debida, cualquiera de
encuentra habilitado a reclamar el pago íntegro del crédito a cualq uiera de los
los coacreedores puede exigir a cualq uiera de los codeudores la t ot alidad del
ot ros codeudores. Esta tam bién resultaba ser la opinión de la.doctri na nacional
crédito.
mayoritar ia durante la vigencia del derogado Código Civil de Vélez Sarsf ield, aun-
11 - Pago que algunos autores como Llambfas y Colmo, entendían que la inso lvencia puede
ser soportada por el acreedor, pues si se pierde el objeto debido por cu lpa de todos
Con la única excepción del pri ncipio de prevención que acabamos de ver, la los deudores, éstos deben reparar al acreedor los daños causados, lo q ue genera
regla general que em ana del art. 816 del CCCN cit ado precedentemente, es que una obligación indivisible, hipótesis en la cual la insolvencia es soportada por el
cualquiera de los codeudores está llamado a pagar la totalidad de la deuda y cual- acreedor. Consideramos, por nuestra parte, que el supuesto esgrim ido por estos
quiera de los coacreedores está facultado para percibir la integridad del crédito, dos prestigiosos autores constituye una excepción a la regla general, ya que en el
propagándose los efectos del pago que cualquier codeudor efectúe a cualq uier
ejemplo que ellos brindan se arriba a la insolvencia por la imposibilidad absol uta
coacreedor. Quedarán expeditas, luego de ello; las relaciones internas de contri- de pago imputable a todos los deudores.
bución y de dist r ibución entre los codeudores y coacreedores, respectivamente .
En caso de tratarse de una obligación .de indivisibilidad impropia o irregular
prevista por el art. 824 del CCCN (aquella que exige para su cumplimiento la actua- V - Prescripción
ción conjunta de todos los codeudores -v. gr., la actuación de un grupo de rock La prescripción extint iva de una obligación indivisible ocurrida entre uno de los
compuesto por seis músicos, o bien la obligación de otorgar la escritura traslativa code udores y uno de los coacreedores propaga sus efectos beneficiando a los
de dominio que pesa sobre varios condóminos-), no resulta de aplicación lo dis- demás deudores y perjudica ndo a los demás acreedores. Ello emana cl aramente
puesto por el art. 816 del CCCN, debiendo cumplirse la obligación por la totalidad del art. 822 del CCCN, en cuanto dispone que: " La prescripción extintiva cumplida
de los codeudores. Si en eit e tipo de obligación a uno so lo de los .d eudores le fuera es invocable por cualquiera de los deudores contra cualquiera de los acr eedores".
demandado el cumplimiento, este puede optar por oponer la excepción de falt a de Con respecto a la interrupción y érla suspensión de la prescripción que favorecen a
legitimación activa contra el acreedor que lo demanda por ca recer este de idonei- uno de los coacreedores respecto de uno de los codeudores, propagan sus efectos
dad para deducir su acció n por separado, o bien exigi r la integración de la litis con beneficiando a la totalidad de los coacreedores y perjudicando al resto de los
las personas cuyo concurso es necesario para la adecuada tramitación del pleito codeudores {cfr. arts. 2540 y 2549, CCCN).
(Llambías).

111 - Modos extintivos VI - M ora y facto res d e atribución

Surge de la letra del art. 818del CCCN que se requiere la unanimidad de los acree- En las obligaciones indivisibles, los ef ectos de la mora y de los factores de atri-
dores para extinguir el créd ito por transacción, novación, dación en pago y remi- bución, son personales y no se propagan. Si uno de los codeudores incurre en algu-
sión, al igual que para la cesión del crédito. La única excepción a este principio de no de ellos, es responsable frente al acreedor y debe reparar el daño ocasionado.
la unanimidad exigida, la constituye la compensación. Ello emana de la letra del art. 819 del CCCN: " Responsabilidad de cada codeu dor.
En el caso particular de la compensación es importante mencionar que se t rata La mora de uno de los deudor es o de uno de los acreedores, y los factores de atri-
de un inst ituto extraño en las obligaciones indivisibles y solo puede darse cuando bución de responsabilidad de uno u otro, no perjudican a los demás".
342 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 343

VII - Cosa juzgada obligaciones que imperó en el Derecho romano y que fue aceptada posteriormen-
Nada menciona el Código Civil y Comercial respecto a los efectos de la cosa juz- te en el Derecho francés.
gada en materia de indivisibilidad. No obstante ello, estimamos que la cosa juzga- En sentido contrario a esta postura doctrinaria, compartimos la opinión de la
calificada doctrina naciona l (Llambías, Busso, Borda), que se incli na por el rechazo a
da no propaga sus efectos en materia de indivisibilida d: por ende, la cosa juzgada
que recae en un juicio no puede ser oponible contra los coacreedores o los codeu- esta denominación, puesto que existe en nuestro Derecho una única solidaridad, en
la que se dan plenamente los efectos principales y secund arios que la caracterizan.
dores que no intervinieron en el proceso judicial.
Resulta frecuente encontrar en los textos escritos sobre esta materia que se
designe a estas obligaciones concurrentes como in solidum, queriéndose de ta l
5- Efectos de la indivisibilidad entre coacreedores y codeudores modo distinguirlas de las obligaciones solidarias.
La relación interna entre los distintos coacreedores y. codeudores en una obli-
En el Derecho romano se utilizaba frecuentemente la expresión in solidum pa ra
gación indivisible está dada por los criterios de contribución y participación entre
d istinguir a ciertas obligaciones de las "correales". Si bien en ambas clases de obli-
ellos. Ello así, puesto que el deudor que paga toda la deuda lo hace en exceso a la
gaciones cada deudor está ll amado a responder por el t otal de lo adeudado, exis-
porción de ella que le correspondía, y el acreedor que cobra todo el crédito perci-
ten diferencias sustanciales entre ellas:
be en exceso a la cuota parte de este que le pertenecía.
Con respecto a la contribución, el Código Civil y Comercial determina en el art. a) La correalidad solo puede resultar de un contrato o de un acto jurídico (solo
820 que si uno de los deudores paga la totalidad de la deuda, o repara la totalidad se la puede encontrar entonces -en una estipulación, en el mutuum, en el
de los daños, o realiza gastos en interés común, tiene derecho a reclamar a los contrato litteris y en el testamento). Fuera de estas fuentes, y en todos los
demás la contribución del valo r de lo que ha invertido en interés de ellos, con los casos en que la acción es de buena fe o in factum, no puede haber más que
alcances que determina el art. 841 para los supuestos de solidaridad pasiva. una obligación in so/idum (Petit).
En cambio, para el supuesto de participación; dispone textualmente el art. 821 b) La obligación in so/idum, por el contrario, nace naturalmente de la falta
que: "Si uno de los acreedores recibe la totalidad del crédito o de la reparación de común o del delito común de los deudores·(v. gr., los arrendat arios o como-
los daños, o más que su cuota, los demás tienen derecho a que les pague el valor de datarios que dolosamente han destruido o deteriorado la cosa que les ha
lo que les corresponde conforme a la cuota de participación de cada uno de ellos, sido confiada).
con los alcances que determina el art. 841. Tienen igual derecho si el crédito se ex- Esta situación de personas ligadas in solidum so lo puede encontrarse nada
tingue total o parcialmente, por compensación legal". más que entre deudores y no entre acreedores, lo cual lo diferencia de la
Solamente resta mencionar que toda vez qu~en la obligación indivisible la pres- correalidad que puede existir por ambos lados (entre deudores y/o entre
tación no es susceptible de fraccionamiento, es imposible que la contribución o la acreedores).
participación se efectúe en especie. El deudor in solidum q ue ha pagado no tiene recurso contra los demás, si la
persecución de que ha sido objeto estaba fundada sobre su dolo persona l o
§ 23. Obligaciones concurrentes sob re un dolo común a todos; sufre, por ende, la pena de su propio delito.
Si, en cambio, se trata de una obligación in solidum que no implica dolo per-
a) Concepto
sonal, el deudor que ha pagado puede recurrir contra los demás.
Estas obligaciones, llamadas también obligacio nes conexas, indistintas o con-
vergentes, son aquellas que poseen identidad de acreedor y de objeto, aunque En razón de ello, estimamos que resulta impropio hablar de obligaciones inso/i-
diversidad de causa y de deudor. No estaban tratadas expresamente en el deroga- dum o de solidaridad imperfecta en el Derecho argentino, como si nóminos de obli-
do Código Civil de Vélez Sarsfield, pero sí han sido incorporadas como categoría gaciones concurrentes o indistintas.
autónoma por el Código Civil y Comercial, que en el art. 850 dispone: " ... obliga-
Ejemplo:
ciones concurrentes son aquellas en las que varios deudores deben el mismo obje-
to en razón de causas diferentes". "Juan" es propietario de un inmueble que es incendiado intencionalmente por "Pe-
dro"; pero" Juan", a su vez, posee un seguro contra incendio de su vivienda en la com-
Algunos autores equívocamente -a nuestro parecer- las denominan obliga-
pal'iía de seguros "X" que asum ió dicho riesgo. En razón de dicho acto ilícito, " Juan"
ciones in solidum o de solidaridad imperfecta, haciendo uso de una categoría de
344 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 345

puede reclamar la reparación del daño producido en su inmueble por el incendio, tan- b) Supuestos legales más comunes
to contra "Pedro" como contra la aseguradora "X". Existen, en consecuencia, dos
obligaciones conexas que poseen el mismo acreedor ("Juan") y el m ismo objeto Los casos más comunes de obligaciones concurrentes, son los sigu ientes:
(reparación del daño sufrido en la vivienda por el incendio); pero, sin embargo, tie-
nen causas y deudores distintos ("Pedro" debe responder por el hecho ilícito que ha 1. La responsabilidad del dueño y guardián de la cosa riesgosa productora de
cometido y la aseguradora "X" por el contrato de seguro que lo une a "Juan"). un daño con intervención activa (art. 1758; CCCN).
2. La responsabil idad del p rincipa l por el hecho del dependiente-con funda-
Los efectos más importantes que se producen las obligaciones concurrentes, mento en el factor o bjetivo garantía-y la del dependiente frente a la víc-
han sido expuestos por el legislador en el art. 851 del CCCN, en cuanto dispone: t ima -fundada en el hecho propio de aque l-(cfr. art. 1753, CCCN) .
"Excepto disposición especial en contrario, las obligaciones concurrentes se 3. La responsab ilidad civil de los titulares de establecimientos educativos y la
rigen por fas siguientes reglas: del docente o alumno autor del hecho directo del daño (art. 1767, CCC/\f).
4. La responsabilidad civil del autor del daño y la de la compañ ía de seguros
a) El acreedor tiene derecho a requerir el pago a uno, a varios o a todos los
que cubre ese riesgo, frente a la víctima del perjuicio (art. 118, ley 17.418).
codeudores, simultánea o sucesivamente.
5 La responsabi lidad del ente asistencia l, y en su caso la de la Obra Social, y la
b) El pago realizado por uno de los deudores extingue la obligación de los
del médico y/o auxilares desig nados por el primero para la atención de los
otros obligados concurrentes.
pacientes.
c) La dación en pago, la transacción, la novación y la compensación realizadas 6. Los supuestos de reparaciones de daños resultantes de un incumpl imiento
con uno de los deudores concurrentes, en tanto satisfagan íntegramente el contractual producido con intervención de un tercero cómplice.
interés del acreedor, extinguen la obligación de los otros obligados concu-
7. La responsabilidad de l ladrón que roba a un comodatario negligente y asi-
rrentes o, en su caso, la extinguen parcialmente en la medida de lo satisfecho.
mismo la de este último.
d) La confusión entre el acreedor y uno de los deudores concurrentes y la
renuncia al crédito a favor de uno de los deudores no extingue la deuda de
e) Diferencias con las obligaciones solidarias
los otros obligados concurrentes.
e) La prescripción cumplida y la interrupción y suspensión de su curso no pro- Sin perjuicio de reconocer que existen grandes s imi lit udes entre las o bligacio-
ducen efectos expansivos respecto de los otros obligados concurrentes. nes solidarias y las concurrentes, al punto tal de que las normas relativas a aque llas
f) La mora de uno de los deudores no produce efectos expansivos con respec- se aplican subsidi a riamente a estas últimas (cfr. art. 852, CCCN), debemos eviden-
to a los otros codeudores. ciar que existen d iferencias sustanciales entre las obligaciones concurrentes y las
obligaciones solidarias -además de las ya mencionadas en torno a la unidad o
g) La sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada dictada contra uno de los
diversi dad de causa y de deudo r-, por lo cual enumeraremos las principa les:
c9deudores no es oponible a los demás, pero éstos pueden invocarla cuan-
do no se funda en circunstancias personales del codeudor demandado." 1. La obligación solidaria es única, aunque está compuesta por varios vínculos
h) La acción de contribución del deudor que paga la deuda contra los otros coligados. Las obligaciones concurrentes, en cambio, siempre son dos o
obligados concurrentes se rige por las relaciones causales que originan la más, sin que exista conexión alguna entre los distintos deudores de ellas,
concurrencia". que se conectan por la circunstancia de tener idénti co objeto y existir a favo r
del mismo acreedor.
Como característica importa nte, entonces, es de destacar que en las obligacio- 2. En las obligaciones solidarias, al haber vinculación entre los deudores entre
nes concurrentes cuando alguno de los deudores paga a l acreedor, la o bl igación se sí, existen re laciones internas que deben goberna rse por el principio de con-
extingue, aunque dicho efecto extintivo no se propaga al resto de los deudores. Sin tribución. Ello no resulta de aplicación en las ob ligaciones concurrentes,
embargo, en razón de ello, el acreedor no podrá ya exigirle a éstos el pago, puesto atento a la inexistencia de conexión entre los deudores.
que una vez satisfecho el crédito qu edan sin causa las otras obligaciones concu- 3. En las obligaciones solida rias rigen los efectos de la propagación, lo cua l no
rrentes que estaban referidas a é l. ocurre en las obligaciones concurrentes. Ello se advierte con clarida d en
346 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 347

materia de prescripción, ya que mientras los efectos de ellas se propagan a En el Código Civil y Comercial, sancionado en el año 2014, tampoco ha sido
todos los coacreedores y a todos los codeudores, en las obligaciones concu- abordada explícitamente esta clasificación como categoría autónoma, aunque,
rrentes la prescripción actúa independientemente para cada deudor. como veremos posteriormente, ha sido receptada por normas aisladas de dicho
4. En las obligaciones solidarias, cua ndo un codeudor paga la totalidad de la cuerpo legal.
deuda, se subroga en los derechos del a creedor a fin de reclamar lo que ha Adelantamos nuestra opinión en cuanto a que el distingo entre las obligaciones
pagado en exceso a los otros codeudores (art. 918, CCCN), ya que entre ellos de medios y de resultado resulta de gran utilidad a la hora de determinar el ámbi-
existen relaciones internas de contribución, debido a que en definitiva, solo to de responsabilidad subjetiva y objetiva en materia obligacional (para una mayor
estaban -obligados a su parte y porción, por lo cual el so{vens solo puede comprensión de cuáles son factores subjetivos y objetivos de la responsabilidad,
recuperar luego el desembolso por él efectuado en exceso a su respectiva remitimos al Capítulo VII, en donde se encuentran tratados expresamente cada
cuota. Ello no ocurre en las obligaciones concu rrentes, en las que qu ien uno de ellos en extenso). Pero creemos f undamental remitirnos a los antecedentes
paga la deuda debe a veces soportarla íntegramente, si fue el verdadero y orígenes de esta distinción pa ra un mejor estudio de ellas.
responsable de su constitución, o si no lo fue, puede en otros casos procurar
el reintegro total de lo que ha abonado (v. gr., si el damnificado hubiera per- 1 - Antecedentes y concepto
cibido la indemnización de su compañ ía de seguros ante el incendio de su Si bien la creación de esta clas ificación es atribuida a René Demogue en el Dere-
propiedad intencionalmente provocado por un tercero, aquella pod rá lue- cho francés -ciado que ha sido el primero en exponer en forma organizada y sis-
go intentar perseguir el reintegro total de lo que le ha debido pagar a su temática este esquema hacia 1925- , existen rastros de ella en el Derecho romano
asegurado por el hecho ilícito cometido por quieh provocó el incendio). (tal como lo refleja Monier) y en los ordenamientos alemán e italiano con anterio-
5. Al resultar ser única la prestación deb ida en las obligaciones concurrentes, ridad a la exposición efectuada por el jurista francés.
resulta evidente que una vez satisfecha ella por cualquiera de los deudores, El planteo efectuado por Demogue -acérrimo defensor de la unidad de la cul-
el acreedo r queda totalmente desinteresado y cesa su derecho para pre- pa- hallaba su razón de ser en cuanto afirmaba que existen situaciones en las cua-
tender otro tanto de los restantes obligados (Llambías). les el deudor osolvens se compromete a obtener un result ado determinado (v. gr.,
el locatario que debe restituir la cosa arrendada en buen estado), cuya falta de
Sin embargo, debemos efectuar una aclaración importante. En las obliga-
ciones solidarias, la novación, compensación o remisión de la deuda hecha obtención generará su responsabilidad a no ser que se acredite la causa ajena
por cua lquiera de los acreedores y con cualquiera de los deudores, extingue (casus}, único medio viable para provocar -en tal caso- la ruptura del nexo cau-
la relación jurídica obligatoria (arts. 835 y 846, CCCN); ello no ocurre en las sal. Pero, afirmaba también, que en ci~rtos casos hay obligaciones que se conside-
ran cumplidas por el deudor aun cuando no se haya obtenido el resultado espera-
obligaciones concurrentes, en las cuales, verbigracia, si e l acreedor efectua-
ra una remisión de la deuda a uno de sus obligados conexos, en nada afecta do, siempre y cuando aquel haya actuado dil igentemente en pos de su concreción;
la situación del otro. en dicho caso, pues, estará a cargo del acreedor la acreditación de la culpa del sol~
vens si pretende endilgarle responsabilidad (obsérvese que aun tratándose de un
supuesto de responsabilidad contractual, pesa sobre el acreedor la carga de la
§ 24. Obligaciones de medios y de resultado prueba del factor de imputación: la culpa o el dolo del deudor, como ocurre, v. gr.,
a) Nociones previas. Cuestiones generales en la responsabilidad médica o del abogado). Con esto, advierte Demogue, el régi-
men de la carga de la prueba de la culpa es idéntico tanto en lá responsabilidad
También en el ámbito de la clasificación de las obligaciones según el objeto y de contractual como en la extracontractual, ya que en ambos casos hay que determi-
acuerdo a la índole delinterés comprometido, pueden estas agruparse en obliga- nar ex ante si el deber u obligación incumplidos-según se trate de responsabili-
ciones de medios y de resultado (o de fines). dad aquiliana o contractual, respectivamente-es de medios o de resultado. Para
Estimamos, como podrá apreciarlo más adelante el lector a lo largo de esta el jurista francés, en las obligaciones de medios es el acreedor quien debe demos-
obra, que estamos frente a una clasificación que no se encontraba expresada en e l trar la negligencia de l de.udor, quien para poder eximirse deberá acreditar su "no
derogado Código Civil argentino, pero que, sin emba rgo, ha sido recibida con culpa" (es decir, haber actuado diligentemente); mientras que en los deberes de
beneplácito por la gran mayoría de los autores y tribunales de varios países del resultado, la culpa se presume, pesando la carga de la eximente en cabeza del deu·
Derecho continental. dor (el incumplimiento, obsérvese, engendra la presunción de culpa del deudor).
348 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones 349

Lo concreto es que la obligación de med ios impone únicamente al deudor el y, sin embargo, no log ra un resultado favorable pa ra el paciente -:-es decir, su sa lud
deber de aptitud e idoneidad para adoptar y llevar a cabo aquellas diligencias o no mejora, o lo que es peor, se agrava-; en tal caso, empero, a l no exist ir culpa en el
medidas que habitualm ente conducirán a l resultado esperado, sin asegurar la accionar médico, no existe posibilidad de efectuar reproche alguno al galeno por la
obtención de este último. En cambio, en la obligación de resultado el deudor se conducta profesional desempeñada.
No obstante, creemos importante destacar que au n sin garantizar el resu ltado, el
compromete a la obtención de este, por lo cual, ante la frustración de su consecu-
médico debe siempre llevar a cabo un proceder calificado y acorde con los díeta dos de
ción, se presumirá su responsabilidad: este resultado entraña una realización final, la ciencia del arte (/ex artis). Debe actuar, en consecuencia, con conducta científ ica,
en la que se logra el fin económico buscado por el acreedor, fin que determinó el que debe ser la admitida en su momento por la Medicina y conducirse conforme a lo
nacimiento del vínculo obligacional. que se hace comúnmente, caso contrario se configurará su culpa, ya sea por impericia
La teoría de Demogue recibió gran adhesión en la doctrina europea, siendo (debido a la ausencia de conocimientos técnicos) o bien por neg ligencia (al actuar
también receptada de buen modo la clasificación de las obligaciones en de medios incorrectament e en un caso concreto, a pesar de poseer los conocimientos técnicos
o de resultado tanto en la doctrina y en la jurisprudencia argentinas (en esta últ i- necesarios para llevar a cabo el acto médico en forma correcta).
ma, actualmente, con bastante firmeza en tribunales de d iferentes jurisdicciones)
así como también en otros países latinoamerica nos (v. gr., en Uruguay). 2 - El debate en la doctrina argentina.
Las críticas hacia esta clasificación
Ejemplo:
Podemos ejemplificar la distinción entre una obligación_fle medios y una obligación Sin embargo, es en el Derecho nacional en donde mayor debate se ha entabla-
de resultado con lo que ocurre en la responsabilidad civil del médico. Es conteste la do en torno a esta clasificació n de obl igaciones en de medios y de resultado.
doctrina en afirmar que el médico no se obliga a sanar al enfermo (fin perseguido por Un gran sector doctrinario de las décadas del sesenta y del setenta del sig lo
el paciente pero que el médico no garantiza), sino a cuida rlo, a dedicarle toda la aten- pasado (Galli, Martínez Ruiz, Bustamante Alsina, Spota, Alsina Atienza, Llambías),
ción diligente y técnica que corresponde al grado, de evolución de la ciencia. En la hab ía receptado la clasificación atribuida a Demogue, tal como este la había
generalidad de los casos, al médico-en el ejercicio_de su profesión-:: le bastará haber expuesto, es decir, atribuyéndole va lor en cuanto a estab lecer la regla a segu ir en
desempeñé!dO una actividad prudente y diligente para dar cumplimiento con la obli- materia de carga probatoria. Sin embargo, con posterioridad, en sucesivos traba-
gación asumida, aun cuando el enfermo no termine sanando o, en el peor de los casos, jos ha sido el profesor Bueres quien ha puesto en evidencia el verdadero a lcance de
agrave su estado de salud o fallezca. Ello así, dado que no puede el profesional de la
esta clasificación, que es el de asignarle como función principal a e lla el de poder
Medicina prometer la curación; el éxito del acto médico, dependerá-en definitiva-
de numerosos imponderables que escapan al ámbito de control del galeno: la biolo-
determinar el factor de atribución aplicable en cada caso, ma rca ndo el se ndero
gía humana, la receptividad del paciente (con reacciones a veces incontrolables e que han seguido también nume rosos autores a rgentinos (Pizarro, Zavala de Gonzá-
imprevisibles), etcétera. lez, Picasso, Agoglia - Meza - Boragina, Vázquez Ferreyra, entre otros) y extranjeros
El médico-salvo contadas excepciones- no promete el resultado, pero 'sí asume el (Yzquierdo Tolsada, Gamarra, Cabanillas Sánchez, Larroumet).
compromiso de utilizar toda su pericia, ciencia y técnica para lograrlo. Es decir, como En esta linea de pensamiento, que también nosotros compartimos, se advierte
bien lo ha evidenciado el profesor uruguayo Gamarra, no solo es importante poner que siendo el objeto de la obligación el "plan o proyecto de una conducta fut ura
de manifiesto a qué se obliga el médico, sino también destacar a qué no se obliga: a del deudor co n miras a dar satisfacción a un interés de l acreedor" (ta l como lo defi-
sanar al enfermo (aunque sí a cuidarlo y a hacer todo lo posible por mejorar su estado ne Diez-Picazo), aun cuando los dos elementos (plan de conducta e interés del acci-
de salud). piens) se encuentran presentes en el objeto de toda relación obligatoria , ambos
Ello no impide reconocer que en determinados casos de excepción (como lo adverti- component es deben concretarse indefectible.m ente en una obligación.de fines: es
mos precedentemente) pueda asumir una obligación.de resultado cuando la presta~
decir, el interés final a l que aspi ra e l acreedor (resultado) d_e be cumplirse, ya que e l
ción a su cargo esté orientada a la consecución de un f in determ inado (v. gr., inter-
mismo se halla tanto in ob/igatione como in so/utione. En la ob ligación de medios,
venciones quirú rgicas de cirugía estética, deberes de anatomopatólogos y biólogos
en cambio, e l interés perseguido por e l accipiens se e ncuentra in obligatione (al
-análisis clínicos-, bioquímica, radiodiagnóstico, etcétera, entre otros). Pero, en lo
esencial. el médico asume tan solo una obligación de actividad, diligencia y pruden- igual que el comportamiento diligente del deudor)-dado que es lo que justifica
cia, conforme al estado actual de la ciencia, ya que existen una serie de factores endó- la celebración del contrato que le sirve de causa- pero no in so/utione, por reves-
genos y exógenos ajenos a su proceder que le impiden asegurar la obtención del tir dicho interés el carácter de aleatorio o contingente (v. gr., el caso del médico que
resultado buscado. Ello así, puesto q ue muchas veces ocurre que el médico actúa dili- no se compromete a sanar al enfermo-resultado esperado por e l paciente-dado
gentemente, echando mano a todos los elementos técnicos y científicos a su alcance que, como vimos anteriormente, va más allá de sus posibilidades).
350 Carlos A. Calvo Costa Derecho de las obligaciones

En consecuencia, en una obligación de medios, si el deudor demuestra que se no concurre a ella, ha asumido frente al paciente -respecto de su obligación de
comportó diligentemente, al mismo tiempo está demostrando que ha cumplido. concurrencia- un resu ltado determinado.
En cambio, en una obligación de resultado, la diligencia del deudor en el cumpli- Se puede concluir, entonces, que el fundamento utilizado por Demogue para
miento de la obligación (ausencia de culpa) queda fuera de cuestión, debiéndose real izar esta distinción entre obligaciones de medíos y de resultado, haciendo hin-
pues concluir que el solvenssolo cumplirá con el deberobligacional asumido, cuan- capié en la carga probatoria en uno y otro caso, tiene real relevancia-como lo sos-
do haya dado satisfacción al interés último o definitivo esperado por el acreedor tiene Vázquez Ferreyra-solo en las obligaciones de resultado, en donde probado
(v. gr., en el contrato de transporte, el transportista se compromete a una finalidad· el incumplimiento, el deudor debe acreditar el casus para poder liberarse. Pero, sin
determinada: llevar sano y salvo a destino al pasajero). Ello no ocurrirá en Lina obli- embargo, en las obligaciones de medios su alcance presenta limitaciones, ya que
gación de medios, en donde el deudor cumplirá con el deber asumido (pagará) existirán situaciones en las que la carga de la prueba de la culpa recaerá sobre el
solamente desplegando una conducta diligente tendiente a la concreción del fin acreedor, y otras en las cuales la culpa se presumirá, debiendo el deudor probar su
buscado. En síntesis: la responsabilidad será objetiva en las obligaciones de resul- "no culpa" o, en definitiva, el casus.
tado y subjetiva (como regla general) en las obligaciones de medios. Asimismo, la clasificación puede dar lugar a cuestionamientos a la hora de defi-
Por lo tanto, en las obligaciones de medios, el objeto de la obligación (que cons- nir a una obligación como de medios o de resultado, cuando la asunción del resul-
tituye un quid diverso del contenido de ella, aunque designo coincidente) está for- tado no aparezca impuesta por la ley o por la voluntad de las partes. No obstante
mado por una conducta del deudor dirigida a alcanzar un resultado que no es ello, estimamos que podrá considerarse a una obligación como de fines cuando la
afianzado. Pero resulta menester dejar en claro una cosa: si el deudor no satisfizo obtención de la finalidad esperada por-el acreedor se derive y dependa -casi
la prestación en absoluto, si lo hizo parcialmente o se encuentra incurso en mora, exclusivamente-de la conducta asumida por el deudor (así lo sostienen Jourdain,
tampoco incurrirá en responsabilidad si se demuestra el acaecimiento de una cau- Frossard y Planqueel, entre otros), y sea prácticamente inexistente el aleas del inte-
sa ajena o casus. En definitiva, se aplican los mismos principios que en las obliga- rés comprometido. Estimamos que el criterio de aleatoriedad es importante para
ciones de resultado, puesto que estas perturbaciones al plan de prestación no tie- establecer la distinción entre una obligación de medios y una de resultado, dado
nen un régimen diferente. que tal carácter proviene de circunstancias o fuerzas qu!! escapan al control del
¿Cómo se podrá liberar de responsabilidad, entonces, un deudor de una obli- hombre, y si bien el aleas existe siempre, aparece en mayor o menor proporción
gación de resultado incumplida? Pues únicamente acreditando una causa ajena o según cada caso: cuanto más alto sea el grado de aleatoriedad del resultado espe-
casus (culpa de la víctima, hecho de un tercero por quien no se deba responder o el · rado, mucho más probable se torna que esa obligación sea clasificada como "de
caso fortuito/fuerza mayor), dado que será el único modo viable de interrumpir el medios". ·
nexo causal, ya que el fin fue afianzado por el solvens al momento de concertarse Hemos advertido que se ha producido un arduo debate en nuestro país en tor-
el plan de prestación. A esta altura de nuestra exposición, creemos necesario insis- no a esta clasificación de las obligaciones.
tir en que el casus no se identifica con la ausencia de culpa, ya que esta última es En particular, son numerosas las críticas que se han dirigido contra ella (en espe-
pago solo en las obligaciones de medios, mientras aquel constituye el límite de res-. cial en cuanto a la importancia que tiene en torno al factor de atribución aplicable),
ponsabilidad tanto para las obligaciones de medios como para las de resultado. porÍo cual solo mencionaremos a continuación muy sucintamente yen forma sepa-
Queda claro entonces~ reiteramos, que en las obligaciones de resultado nos rada las más relevantes, según nuestro parecer:
encontramos ante un supuesto de responsabilidad objetiva (siendo el factor de
atribución una obligación de seguridad especial, la garantía, el riesgo, etcétera). 1 - Algunos autores (Alsina Atienza, Belluscio, Zannoni, Wayar), aunque con
En cambio, en lo que respecta a las obligaciones de medios, debemos efectuar.una variantes entre ellos, siguiendo la postura de los franceses Riperty Boulanger, han
distinción: el factor de atribución será subjetivo (esta es la regla general que impe- cuestionado la categorización en "obligaciones de medios y de resultado" dado
que no existe una diferencia ontológica entre ambas categorías, debido a que en
ra en esta categoría) cuando haya existido un cumplimiento inexacto de la misma,
pero en el resto de los incumplimientos de esta clase de deberes (por ejemplo, todas las obligaciones existen "medios" que tienden a la concreción de un "resul-
cuando el deudor no desarrolla ningún tipo de conducta) el factor de atribución tado" determinado.
también será objetivo (v. gr., el cirujano que no concurre al quirófano el día de la 2 - Otros (Mosset lturraspe, Lorenzetti, Alterini -Ameal - López Cabana), por su
operación), dado que la culpa queda también aquí fuera de cuestión. Queda claro, parte, siguiendo el derrotero que emprendieran primero Esmein y luego Viney en
pensamos, que si un médico concierta una cita para un día y hora determinados y el Derecho francés, han cuestionado a esta clasificación por resultar ser un esque-
352 Carlos A. Calvo Costa Derecho de·las obligaciones 353

ma demasiado rígido que deja fuera de consideración a los variados matices que Asimismo, y con respecto a las críticas que se le hace al distingo entre obligacio-
presenta la realidad a diario y que no son de fáci l encasillamiento en las categorías nes de medios y de resultado, reiteramos lo expuesto en un trabajo que publicára-
de medios o de resultado. Así, se establece ·q ue existen obligaciones "de resultado mos en coautoría con el profesor Bueres referido a la responsabilidad de los escri-
atenuadas" que le permitirían al deudor libera rse probando su falta de culpa (es banos, en donde hemos hecho referencia a ellas y afirmado que:
decir, cuyo incumplimiento generaría responsabilidad subjetiva}, obligaciones "de
resultado agravadas" en las que se exigiría la prueba de un caso fortuito calificado, 1 - Es verdad que la clasificación de las obligaciones de medios y resultado
y obligaciones "de medios reforzadas", en las que existiría una presunción iuris perdió parte de su supuesta -más que real- importancia para establecer de una
tantum de culpa. ma~era rígida el ré~imen de la.prueba de la culpa (repárese que el distingo fue pre-
sentado por la doctr~na bajo una·óptica filosófica puramente subjetivista). Pero es
3 - Finalmente, Wayar afirma que la teoría daría lugar a situaciones de injus-
que esa rigidez que se atribuyó f~lsamente a Demogue en realidad no ha existido,
ticia en los casos de responsabilidad profesional, debido a que, en tales supuestos, pues el autor admitió que en las obligaciones de medios junto a la directiva proba-
la superioridad técnica y científica del profesional respecto del cliente, coloca a · toria de que e l onusprobandiincumbe al actor, hay hipótesis en que la culpa se pre-
aquel en mejores condiciones de probar el cumplimiento de su obligación debien- sume iuris tantum (y esto no trastoca· el carácter de la obligación).
do cargar entonces con la acreditación de la prueba.
2 - Por lo que se refiere a las hipotéticas dificultades de emplazar un supues-
3 - Nuestra postura frente a esta clasificación y o las críticas
to de hecho en una u otra especie de d ebe~es, e ntendemos que la preocupación es
que se le han formulado por completo injustificada, pues es ta rea de los jueces la de realizar juicios axioló-
gicos para determinar cuándo hay culpa y cuándo existe un criterio de imputación
Por nuestra parte, sin intención de dar contestación puntual a estas posturas crí- objetivo. En la actualidad, se discute si las responsabilidades de los periodistas,, del
ticas, nos manifestamos como defensores de la s.umma divisio entre obligaciones encargado de un trasporte benévolo, etcétera, son subjetivas u objetivas.
de medios y de resultado, la cual va de la mano con la actual tendencia del Derecho
de daños, que define a la responsabilidad civil como la reacción frente al daño 3 - En cuanto a que ha perdido interés y a que deja fuera de análisis distintas
injusto, y que procura que toda víctima pueda ver resarcido el daño injustamente subclasificaciones (atenuadas, agravadas, etcétera), la doctrina francesa, como lo
sufrido. En pos de t al ideal, la clasificación en cuestión resulta relevante, como se hemos expuesto precedentemente, también subdividió las obligaciones de resul-
ha dicho, a la hora de establecer el correcto factor de atribución aplicable en cada tado en ordin arias, agravadas y atenuadas. Estimamos que hablar de obligación de
caso. resultado atenuada -como también lo hacen las fran cesas Viney y Jourdain- es
Somos conscientes que no se puede descalificar esta clasificación por el hecho impropio, pues apunta a un supuesto de responsabilidad subjetiva: en tal caso, la
de afirmar que en "todas las obligaciones existen medios q ue tienden a la concre- responsabilidad dejaría de ser objetiva, para pasar a at ender primordialmente a l
ción de un resultado determinado". Y valga reproducir para ello, las refutaciones comportamiento del deudor, lo cual es típico de una obligación de medios pero no
que se le han expresado a la postura de Belluscio y que nosotros hacemos nuestras de fines. No obstante, otros autpres franceses dividen las obligaciones de resulta-
por comparti rlas en su totalidad: en el ejemplo del abogado que él brinda, la do en ordinarias y agravadas y las obligaciones de medios en ordinarias y reforza-
obtención de una sentencia favorable no depende "solamente" de la actividad das (o agravadas)-estas últimas importan una presunción relativa de vencible por
qué desarrolle el profesional, pero sí depende en parte de ella; si bien es cierto que la no culpa-. De todos modos, estas discordancias no hacen niás que confirmar la
e~istencia de la división entre obligaciones de medios y de resultado.
un patrocinio impecable no aseguraría el resultado favo rable del pleito, también
lo es q ue un mal patrocinio suele finalizar con una sentencia desfavorable o notan 4 - Es cierto que la clasificación de obligaciones de medios y resultado no tie-
favorable como si el profesional hubiera desarrollado una conducta diligente. ne un alcance superlat ivo desde e l punto de vista del Derecho adjetivo, ya que la
Entonces no resulta indiferente la conducta desarrollada por e l abogado, aun esencia del distingo tiene auténticas ra íces en el Derecho de fondo. En las obliga-
cuando en ambos casos nos encontremos frente al mismo resu ltado: la victoria o no ciones de medios, la responsabilidad es subjetiva en tanto que e n las obligaciones
e n el pleito. Además, y como refutación a su crítica, la obtención de la sentencia de resultado la responsabilidad es objetiva. Tampoco desmerece la presencia de los
tam poco sería el "resultado" comprometido, dado que tampoco ella puede ser medios y los fines, la actit ud de la doctrina y jurisprudencia, en algunas materias
totalmente asegurada por el profesional, dado que un caso fortuito podría impe- sobre todo (por ejemplo, la responsabilidad de profesionales}, de revitalizar las
dirle prestar su conducta. presunciones judiciales simples o las presunciones calificadas, como la res ipsa
354 Carlos A. Calvo Costa Derecho de ./as obligacíones 355

loquitur y el favor probationes o cargas probatorias dinámicas, cuestiones que nuestro entender, que la garantía que debe prestar el transportista por la
abordaremos a lo largo de esta ob ra. indemnidad de la persona tra nsportada o por la avería o pérdida de sus
5 ·- Finalmente, no consideramos aplicable esta clasificación de obligaciones
cosas, es una obligació n de resultado.
de medios y de resultado al ámbito aquiliano o extracontractual, dado que ella es c) El art. 1723 de l CCCN, dispone que: "Cuando de las circunstancias de la obli-
propia de la esfera contractual, como lo viene pregonando también la moderna gación, o de lo convenido por las partes, surge que el deudor debe obtener
doctrina francesa e italiana (Le Tourneau, Viney, Jourdain, Castronovo). Si bien no un resultado determinado, su responsabilidad es objetiva". Queda claro
queremos abundar sobre esta· cuestión, por demás interesante, merecen mencio- que el incumplimiento de una obligación de fines por parte de l solvens,
narse algunos argumentos sobre los cuales edificamos nuestra postura: en la res- genera responsabil idad objetiva.
ponsabilidad extracontractual no existen obligaciones preexistentes, ya que el cf) Asimismo, el art. 1768 del CCCN, referido a los profesionales liberales, esta-
deberde responder tiene nacimiento en forma conjunta al acaecimiento del hecho blece: "La actividad del profesional liberal está sujeta a las reglas de las obli-
ilícito; y en el ámbito contractual, la obligación de medios está construida aten- gaciones de hacer. La responsabilidad es subjetiva, excep.t o que se haya
diendo a la aleatoriedad que reviste el resultado esperado, mientras que ello no comprometido un resultado concreto(... )". También es evidente que cuan-
puede darse en el ámbito aquiliano en donde el deber de no dañar es genérico, a do el profesiona l liberal ha asumido una obligación de resultado, e incurre
diferencia de la obligación. en un incumplimiento imputable, su responsabilidad es objetiva.

b) las obligaciones de medios y de resultado


en el Código Civil y Comercial e) Distintos supuestos en torno a esta clasificación

Como lo hemos expresado precedentemente, el Código Civil y Comercial no ha 1- Supuestos de obligaciones de resultado
dedicado en el Capítulo 3 del Libro Tercero, que está referido a las "Clases de Obli- Con carácter meramente enunciativo, podemos enumerar distintos casos que
gaciones", ningún parágrafo especial a las obligaciones de medios y de resultado. constituyen obligaciones de resultado:
Sin embargo, tal como lo hemos adelantado anteriormente, existen varias nor,. a) Las obligaciones de dar, dado que su cumplimiento solo puede obtenerse a
mas que se refieren a ellas, como las que tratamos a co ntinuación: través de la entrega de lo adeudado.
a) El art. 774 del CCCN, que se refiere a la prestación de un servicio en una obli- b) Las obligaciones de hacer una obra, ya sea material o intelectual: creemos
gación de hacer, dispone: "la prestación de un servicio puede consistir: a) que es evidente que si quien debe realizar una obra nocumple con ella o fra-
en realizar cierta actividad, con la diligencia apropiada, independientemen- casa en su realización, la obligación se considerará incumplida no pudiendo
te de su éxito. Las cláusulas que comprometen a los buenos oficios, o a apli- reclamar el deudor su contraprestación.
car los mejores esfuerzos están comprendidas en este inciso; b) en procurar c) Ciertas prestaciones médicas, tales como: realización de aná lisis de sangre
al acreedor cierto resultado concreto, con independencia de su eficacia; c) (ya que deben a rrojar resu ltados precisos, sin que haya ma rgen para la a le-
en procurar al acreedor el resultado eficaz prometido. La cláusula llave en atoriedad y el azar), la cirugía plástica estética (en donde el cirujano se com-
mano o producto en mano está comprendida en este inciso. Si el resultado promete frente a l paciente a un resu ltado determinado), estudios anato-
de la actividad del deudor consiste en una cosa, para su entrega se aplican mopatológicos, las elabo raciones de prótesis (brazo ortopédico, marca pa-
las reglas de las obligaciones de dar cosas ciertas para constituir derechos sos), etcétera.
reales". Podrá apreciar el lector que el inc. a) de la norma está referido a una cf) Las obligaciones de seguridad-salvo contadas excepciones..:.__, como ser: la
obligación de medios, mientras que los incs. b) y c) aluden a obligaciones de obligación del transportista de transportar sano y salvó al pasajero y a sus
resultado o de fines. pertenencias a destino; la obligación que asume el banco fre nte a l cliente
b) El art. 1291 del CCCN, referido a la obligación del transportista, determina: respecto de la integridad externa de una caja de seguridad, evitando el ries-
"Además de su responsabilidad por incumplimiento del contrato o retraso go de sustracción por parte de terceros; las obligaciones que asumen los
en su ejecución, el transportista responde por los siniestros que afecten a la establecimientos sanitarios y las clínicas por la conducta de los profesiona-
persona del pasajero y por la avería o pérdida de sus cosas''. Es indudable, a les médicos que pertenecen a su staffmédico; etcétera.
356 Carlos A. Calvo Costa

e) Las obligaciones de no hacer, ya que quien se compromete a una abstención


debe.cumplir con ello, careciendo de relevancia si ha puesto su debida dili- Capítulo IV
gencia o no para dar cumpl imiento·a la omisión prometida.
Transmisión de las obligaciones
2 - Supuestos de obligaciones de medios

También, como regla general, se pueden enumerar diferentes casos de obliga-


ciones de medios:
a) Las obligaciones de prestar servicios, co mo ser las emanadas de los contra-
tos de locaciones de servicio, de trabajo y de mandato, ya que en el las el deu-
dor se compromete a una prestación de servicio determinada con indepen-
dencia del resultado que el acreedor pueda esperar de ella. Cabe destacar
en ellas a la generalidad de las prestaciones de servicios profesionales, ta les
como la del médico, la del abogado o la del arquitecto que dirige una obra. § 25. Introducción
b) Las obligaciones de los a,dministradores de sociedades, ya que no garanti-
zan al ente colectivo que su gestión arrojará un resultado económico con- a) Concepto. Clases de transmisión
veniente a los intereses societarios.
Los derechos pueden ser transmitidos por causa de muerte o por actos entre
vivos. El Código Civil y Comercial se ha referido a ellos tanto en el Libro Quinto
("Transmisión de derechos por causa de muerte") como en el Libro Tercero (Cesión
de derechos y cesión de deudas).
La transmisión en una obligación se produce cuando existe alguna sustitución
en cualquiera de los sujetos de la re lación jurídica; en consecuencia, dicho cambio
supone una sucesión en el carácter de acreedor y deudor, aunque la relación j urí-
dica ob ligatoria permanece intacta y vigente.

La sucesión, o transmisión, puede ser clasificada de distintos modos, según ejem-


plificamos a continuación:
1. A título universa/ o a título particular(según la extensión del t ítulo). En ello
resulta determinante el art. 400 del CCCNque dispone: "Sucesores. Sucesor
universa/ es el que recibe todo o una parte indivisa del patrimonio de otro;
sucesor singular el que recibe un derecho en particular".
La sucesión a título universal se dará en el caso de fallecimiento de una per-
sona •. al transmitirse todos los derechos y activos que componen su patri-
monio a sus herederos; en cambio, la sucesión a título particular está referi-
da a la transmisión de un objeto o derecho en particular -V. gr., legado de
cosa cierta, cesión de créditos, etcétera- .
2. Legal o voluntaria (de acuerdo al origen). La primera ocurre en virtud de la
ocurrencia del supuesto fáctico dispuesto en la norma (v. g r., sucesión ab
intestato del causa nte), mientras que la segunda se origina en la voluntad
del individuo en cuyos derechos se sucede y que causa la tra nsmisión.

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